Proceso
Por Homero Campa
23 febrero 2003
pag. 32 revista no, 1373
Voto ete
W
le acuerdo migratorio
El dilema de México en el Consejo de Seguridad de
la ONU, ante las presiones de Washington para que
vote a favor de la guerra contra Irak, tiene una salida,
en la vision de Enrique Krauze: hay que aprender a
negociar y cobrar lo justo por nuestro eventual apoyo.
Por ejemplo: un acuerdo migratorio. En esta entrevista,
el historiador duda, sin embargo, que el actual gobierno
entienda la responsabilidad historica que tiene en sus
manos.
Entrevistas con
Homero Campa
ame la decision de esino voraren el
México nodebe escudarse detris
de a doczina (de ls radivionales
principios de politica exterior) que respon
no puede actuar como si no tuviera inte
ses" afirma el historiador Enrique Kr
En ese sentido, pide no descartar w
alternativa: votar sf” con Estados Unidos
pero —-subraya— "a cambio de resolver
los problemas bisicos de la relacign bilate
ral un acuerdo migratorio completo y ut
n Proceso, el director
Ge larevista Letras Libres y autor de.
otras obras, Biografia
contado y La presidenc
co
pparadajas de Iain
Irak y analiza los
die México en e
INU
En esta decisin nos jugamos tare
cién con Estados Unidos. Budo qu
administracin ess preparads para ente:Tesponabilidad fissrica que tiene
en sus manos" firma
“Terrible dilema”
—Es comin decir que, después del 11 de
septiembre, la guerra en Afganistan y
al guerra en Irak, se esta configu
rando un nuevo orden internacional. ; Qué
Coincidencias y diferencias encuentra re-
peoto de la Segunda Guerra Mundial
ual es su lectura de la actual situacién:
—Yodiriaque mis bien se esté desfigu-
indo el orden del siglo XX, mienttas que el
perfil del nvevo orden (si lega ahhaberio) es
'un misteri. La situaci6n, sobra decislo, es
‘complejisims, Por un lado, estéel error
fundamentalista, cfncer global que a todos
enaza y para el que tardaremos muchas
‘décadas en haar una soluci6n, Temo que ta
guerra con Trak no haga sino ahondarlo ain
nfs. Elcentromoderado” en el mundo rm
inn, en panicular en los paises drabes
ordania. Egipto, Arabia misma), podria ser
sarasado pot laira fundamentalista. Un esce:
nario horroroso pero no imposible, Es el ar-
‘gumento més sélido contra la guerra.
Por otro lado, esta Hussein. La gente
habla con imesponsabilidad, ligereza y des
conocimiento sobre este dictador. Se dice
fil, pero hay que recordar que es el nico
bernanieen.el mundo actual que ha usado
‘amas de destruccién masiva y, para colmo,
lashausado contra su pueblo, illegaraa fa
bricar armas nucléares (y no hay duda de
que lo ha intentado), tendria una insupere
bie capacidad de destruccién —o cuando
menos de chantaje— sobre laregi6n, inci
das, por supuesto, las mayores reservas de
petrdleo del mundo, ‘Todo esto, repito, es
oco conocido 0 ignorado en la vision ma
niquea que prevalece. Creo que, en ese sen.
tido, el simil con Munich en 1938 es valid
Francia Inglaterra pudieron y debieron de
tener a Hitler a tiempo, actuando de manera
preventiva. La inocente polftica de apaci
_Buamiento no funciona con este tipo de dic-
aduras. Eso no quiere decir que no hays al
temnativa aesta guerra, al menos en los tiem
os y tonos que la plantea Bush
“Terrible dilema: la guerra a Hussein
avivaré probablemente el incendio funda
mentalista, pero dejar en paz a Hussein e
tanto como hipotecar el futuro, sentarnos a
esperar una guerra nuclear en el futuro
Ante este dilema, cree usted que la
contencién funcionaria?
El apaciguamiento, no; a disuasién
iplomatica, tampoco; la contencisn, qui
2isi. Al menos emporalmente. Por e300
justifico la prisa estadunidense. Hussein
‘esté cereado por aire y tierra, tiene sabre sf
los reflectores dei mundo. En estas cir-
instancias defensivas, se ve dificil que
vance en sus planes de volverse el nuevo
Nabucodonosor nuclear, Lo mejor seria
ipretar el cerco y ganar tiempo. P
son Sonera de sal. La eli 6 a
a Culles soe es ondencias det muc
Configurar el nuevo orden?
MES muy Hlesgose jugar profeta en
Si hay guerra —oomo puree amen
probable, std con uba accion “unl
feral apoyada por Gran Bretata: Expats
ios pases det Europa del Ee cmtard
conel uval més ample del Cons de Se
uidu,y sobre ilo de Rusia Fanci
Alemania, China? Enel primer caso se
atondaré el abismo dentro de Ocldene
se agudicard crisis dea Union Europes
it Alianza Ana y aun en ls Nacome
Unidas, En el seguui, el resgo de exe
auictra insticional sia mucho me
Pefoel orden muna depends del
fado dea petra Seva prolongta an
mola de Afganistan, sera exits ene at
rake Yo dudo mucho que as cosas spa
como el gobiemo esttunidens las ples
tne! plea Los “hleones cn
$idn a bak serd como una nueva GranadaProceso
Por Homero Campa
23 febrero 2003
pdg. 32 revista no. 1373
‘Son unos Tasos Lo mids probable es ue el
fundamenalismo adguiera un impulso atin
yor dentro y fuera de ak. El ganador, a
ial de cuentis, seria Bin Laden. El preca-
rio orden intemnacional se perderia
“Por otro lado, no podemos descartar
‘que las cosas les salgan relativamente
bien: una guerra répida, un gobiemo de
transici6n en manos de iraquies,respeto a
la soberania petrolera de esa nacién. Esta
Victoria daria Estados Unidos une posi-
Cid de fuerza y autoridad suficiente como
para resolver de aizel problema mayor de
Oriente Medio, e! conflicto entre israelfes
Y palestinos. Ese serfa et mejor de los
‘mutidos posibles. Peto soy realista y ne
parece muy remoto que ocurre as
“Sime fuerza usted a predecir, le dirta
con o sin apoyo multilateral habré guerra
nara Estacos Unidos, nadie llorard a
saddam Hussein, incluso algunos gobier
‘nos drabes sentirinalivio, pero el proceso
de reconstraccion en Lrak sera arduo y 10s
dios teokégicos entre Occidente y Orien
te se volver atin mas vivos. Cof la agu-
dizacién del terrorismo, el mundo podria
volverse un lugar ain mds peligroso de lo
que yaes. Espero equivocarme.”
—;En_ qué lugar pueden quedar i
‘ONU, su Consejo de Seguridad y los orga-
nisfios y reglas intemacionales que el pro-
pio Estados Unidos contribuy6 a crear?
Si Estados Unidos marcha solo a la
guerra, aunque trunfe,el dafio esas insti-
!uciones sera incalculable y quizisirever-
sible. Nisiquiera descano la posibilidad de
ue (ensaherbecidoo dotido) Estados Uni-
slos délaespalda la ONU, comoha hecho
con varios tratados internacionales,
Los costos de votar
suanculo “Los Estados Unidos: un
balance” (Reforina, febrero 16), usted se~
iiala que el desemperio de Estados Unidos
Entrevistas con
éo/Amnérica Latina tiene un “balance nega-
tivo”. Sin embargo, apunta que México ha
descubierio que su vecindad con Estados
Unidos no es, ni remotamente, la mds con
flictiva del planeta y que en tos mexicanos
existe un sentimiento ambivalente hacia
Estados Unidos.
—Quise introducir una perspectivahis-
t6rica. Sostuve que el balance de Estados
Unidos en et siglo XX es mixto: pésimo en
‘América Latina, bueno en Europa (1a salvé
fen las dos guerras, la reconsiruy6 con el
Plan Marshall, a protegié con la OTAN. et-
cétera.) y regular en el resto del mundo.
‘Creo que en general han sido arrogantes,
ciegos, racistas, codiciosos, a veces bruta-
Jes, pero es injusto regatearies sus méritos.
Cuando vi la foto de unos manifestantes
quemando una bandera estadunidense con
las estrellas convertidas en swésticas, me
indigne y enristect. Es preocupante la con-
fusidn mental que implica esa identifica
‘i6n, Hitler provocs la muerte de decenas
de millones, Estados Unidos no tiene un
historial ni remotamente comparable.
“En cuanto a México, lo que prevalece,
cen efecto, es la ambivalencia: viejos ynue-
vos agravios acompatian un proceso silen
cioso de convergencia demogrifica, eco-
rnémica y cultural. Estados Unicos ha sido
una pesidilla para nosotros, pero en otros
‘momentos ha sido una vAivula de escape
(aliviando e} desempleo de
‘xicanos), ura tabla de sa
seelpréstamo puente de Clinton en 1995) y
‘un sccio comercial iremplazable.””
En ese sentido, :cémo deberia votar
México enel Consejo de Seguridad en ca~
80 de que Estados Unidos y Gran Bretaiia
introduzcan una resolucién que autorice el
uso de la fuerza? Cuidles pueden ser los
‘costos de votar en contra de una resolu-
cidn de Estados Unidos? ,Vislumbraria
represalias? :De qué tipo? O por el contra-
fio: Qué costos endria tomar distancia de
laposicién frenco-alemana y votar a favor
‘de Estados Unidos? ;Habria costos inter-
nos dado que las encuestas sefslan un re-
chazo mayoritario de los mexicanos ¢ una
guerra en Irak? {Cree que un eventual vo-
toa favor de Estados Unidos en el Conse-
jo de Seguridad tenga efectos et as eTee=
Ciones mexicanas dl julio préximo?
—Hasta hace unos dias, yo confiaba en
otra posibilidad: un acuerdo mayoritarioen
el Consejo de Seguridad que cvente con el
I clave oal menos el “no veto” de Fran-
cia (con cuya postura nos hemos alineaso).
‘Ahora creo que esa salida es improbable.
‘México tendré que vota. Para colmo,nues-
tro voto podria ser el decisivo, el noveno
(Guponiendo que Estados Unidos logre el
apoyo de los paises afticanos, pero noel de
Chile). La disyuntiva es muy compleja
<{Debemos dejar que Chile sea el fiel de la
Bela? Enelarieuloque wed encions
iné que sila propuesta de resolucién no
hia cone apoyo malt, debe
‘mos abstenemos. Con toda honestidad, ya
‘noesioy tan seguro de que ésa seal aliema
tiva menos mala (no hay alterativa buena),
pero es el camino que, al parecer, tomari cl
‘obiemo de Fox. En ese caso, nuestra abs-
{encién o muestra negativa deberia se lara-
mente razonadia, Explicar que lacontencién
es aan posible, invocar el considerable re
chaz mundial a la guerra y, sobre todo, ia
reprobacién no menos general de los mexi-
ceanos. Pero esa abstencton (0 negaliva) nos
costard carsimo, qué dudacabe.
“Si el gobierno opta por no apoyar a
Estados Unidos, requeriremos una diplo-
macia sutil, imaginativa, informada, sa-
bia, activisima, que cabildee en totos los
foros posibles para explicar nuestra posi-
cién y justificarla, Por desgracia, dudo
mucho que la tengamos.”
“La prueba de fuego”
—Se dice que Alemania y Francia se opo-
nen al alaque estadunidense porque tienen
intereses en Irak (sus empresas petroleras,
por ejemplo). México, en cambio, parece
ho tenerlos y su postura se apoya en los
principios de su politica exterior. En esta
‘coyunturs, ;México debe atender a sus it
Tereses 0 a Sus principios? ;Ambos (inte-
reses y principios) se contradicen? {Como
salvar esa aparente contradiccién’?
—El principio de la “no intervencisn”
jparadigma indiscotible de otras €pocas,
havueltomenosaxiomitico. Aplicario, por
ejemplo, a Ruanda 0 Yugoslavia hubiera
significado avalarel genocidio,talimpieza
inica, la barbarie. Qué bueno que se inter:
vino para detener la masacre. Los derechos
hhumanos deben estar por encima de la so-
berania de las naciones, sobre todo cuando
las naciones en conjunto advierten un pl
sgrocomoel que he mencionado, Enel caso
Ge Irak, el problema de esa violacién mas
va y flagrante se reconoce. pero hay pro-
fundas diferencias de enfoque en cuanto a
su tratamiento, No esté claro que Hussein
represent un peligro presente e inmediato,
menos ain en su estado actuEl centro de la cuestin es éste: Méxi
conodebe escudarse detris de una doctrina
que respondié a su tiempo y circunstancia
México no puede actuar com si no tuviera
intereses. Lostiene, son inaplazables.ysta-
jien a la vide concreta de ios mexicanos
dentro y fuera de nuestra fronteras. Y pre
‘isamente en este sentido hay una alterna
vva que no deberfamos descarar. Consist
cen volar si”, pero a cambio de resolver los
problemas basicos de la relacién bilateral:
tn acuerdo migratorio completo y un trato
justo en el Ambito agropecuiario (los subsi
dios en Estados Unidos son inequitativos
con espectoa nosotros). En otras palabras:
aprender a negociar cobrar lo justo y obte
rer a cambio justo. Nohay nadade extra:
fo en proceder de ese mado: es una priti-
ca tan vieja como la diplomacia. Aht esté
‘Turguia para probarlo. Las naciones ven
;orsu propio provecho. Es natural
“Brel caso remoto de que Fox opte por
esta via. tendrfa que desplegar una intens-
sima labor diplomdtica. Puertas afuera,
para nostra 1s costos que el voto afirma
Tivo supone en un afo electoral. Puertas
dentro, para convencer al ciudadano de
jue esa decision es la mas sensats, la me-
los riesgose, Pero por razones electoales
Gado que se atreve a tomarla. Serfa la
prueba de fuego de su liderazgo: hacer al-
{20 impopular por el bien de México.
wet historiador, Lorenzo Mever, se
fala en un articulo (Reforma, 13 de febre
0) que “la experiencia historica aconseja
ro abrazarel principio de ‘ataque preven
tivo’ al mengs sin el pleno consentimien:
toe Naciones Unidas”. Sin embargo, pi-
decalcularel costo de larepresalia estadu-
nidense. Y recomienda hacer lo que hizo
México con el caso Cuba en 10s aos se
gata y luego en Centroamérica en los
ahos ochenta, Es deci, una formula que Te
permita deci: “sf pero no” 0 “no aunque
si". ¢Comparte esa tesis?
Enel contexto actual, no es posi
sostneresaambigledad Enel caso de Cu
era mAs Sencillo, porque encierta forma
ambos (Estados Unidos y Cuba) les conve
nis nuestro papel de pute, Ahora me temo
que no existe ese margen, Es sf 0 es no.
—En coyunturas especificas —como
Ja invasi6n de Playa Girén en los aos se
seata, 0 los conflicts en Centroamérica
2 los aos ochenta, oe! golpe de Bstado a
Chile en 1973—, ceémo resolvieron los
obiemos priistas ese dilema de estar ono
on Estados Unidos sin, en aparienci
ayores efectos para la relacion bilateral
Ese método puede seraplicable ahora por
€l gobierno de Fox?
—En ninguno de esos casos estaba en
entredicho —al menos en la percepeisn
estadunidense— la seguridad global ni su
segurided nacional. Eran actos injutifica:
bies pero limitados, stropellos sobre aro-
pelos. Actuando en el marco de la Guerra
Fria, Estados Unidos sabta que sus accio
nes eran impopulares y pagaba el cost.
‘Ahora es distinto, No éstd dispuesto a pa
‘gar nada, sinoacobrar todo y muy caro. Es
decir, acobrar la disidencia
iste oa tesis: México puede dat
se el lujode disentir de Estados Unidos en
el tema de Irak debido a la fuerte relacién
tecondmica que existe entce ambos puises
Es decir, las eventuales “represalias” de
Washington no pueden ser excesivay
riesgo de que el propio Estados Unid
Sslgsperucao, (Qué oping del
sis) La existencia de los “hispanos” —I
‘mayorfa de origen mexicano— como pri
mera minoria en Estados Unidos frenaria
esas eventuales represalias?
No poderios taparel sol con un ded,
Siseplantea una dvergencia con losestad
nidenses, no bastard que Bush nos oto
tn simbélico “perdn® por nuestra supu
infidencia. El problema serd muy serto y 10
tendremos con el Congreso, con los gobier-
nos ¥ legislarurasestatales, con la prensa y
Tos medios,yconlaopinidn plbica de Es.
ds Unidos. En lo econémico, podria haber
boicois contra nuestros productos, eli de
inversiones,irabas al comercio. Desde los
pequefios municipios productores de toma
Frasta las grandes empreses exportadoras po
drian padecer la reacci6n, En lo social, pue
den desatarse cosas ain més graves, situs
‘iones que podrian pagar nuestros comps
totas que viven “del otro lado” y de cuyss
remesas dependen tantas familias: discrimi
nacién, persecucions, etcétera.. No creo
‘uagerat si digo que en esta decsi¢n nos ju
anos la relacion con Estados Unidos. Du-
do que esta administraci6n esté preparada
para entender Ia responsabilidad hist6rice
‘que tiene en sus manos, a