SANGUING!IT KATMOND, Wilfredo: “el : derecho del trabalo camo caiegotia 3) | histéico’; en: tus et Veritas N° 12 ~ I tima, PUCP, 1996, EI Derecho del Trabajo como categoria bistorica : Wilfredo Sanguineti Reymond ‘Abogado, Donerenbe aes dricos que se situ: isis cobra un zelieve jeracign de los actual, en la que éste vi intento de explicacin del Derecho an rescinda de la consi genteen Dbésicas de i puesta a sus contradicciones intrinsecas”, Por ello, para captar siz undisgnésticopuramen- ‘11. LA «F REHISTORIA» DEL DERECHODEL TRA nal de sus contenicios presentes. sino que es Bajo, 2 cabo una aproximacion hist cid de su pesado, Pese alcarécter emnicomprensive desu denc- minacién, lo que hoy conocemos.como Derecho del ajono constituye una respuestajuridiea global los conflictes derivacios de la ubilizacién productiva del trabajo del hombreen generelnidesdedl punto hristérico, nf desde bien, ésta sirve su aparicién en un momento dete nado e identificar el singular cond de alse pretende VETVVIG a SUEUUEUUEEEUUUETEU signa la respuesta Derecho al conc xplotacién de una mod: de trabajo, enel per de intaresee ad may 145 BAAMON! SAW. Mfomades Hispan odsiogs Derecho de Taba, “Tree y Segui 9 del Tiskao. Sann papal preponders pcondmico y eeclama una ordenadién juridica especia~ fieada Enconereto, el trabajo asalariado, cuyahegemo- wie sobre las dems formas de trabajo se produce recién on la consolidaci6n del capitalismo industrial, en Jos Stores del siglo XIX. Desde esta perspectiva, el Dese- the del Trabajo es «una categoria cultural fruto del Sistema capitalista industrial», cuyo cometido es el de ibuir a la canalizacién 9 juridificacién de los con cidade trabajo adquie: Hictos deintereses derivados dela prest asalariado™ « BI trabajador perdi6 C.Jel control del proceso productivo y su riqueza en conocimientos convertirse en una pieza intercambiable del sistema” Cierternente, trabajo asalariado (es deci, pres- tado en Jas que, con parsmetros actuales, pueden cali Hearse como condiciones de ajenidad y dependencia), faci como condlictos de intereses alrededor del apsove- Chamiento de sus rendimientos, han existido, de une forma u ofa, en casi tades las formaciones sociales precedentes al capitalism. Sin embargo, es s6lo con la Emergencia de éste que dicha forma de trabajo, y los Conflietos que la acompafian, adquieren centralidad, poniendo en marche condiciones que harén posible fp aparicidn det Derecho del Trabajo. En cambio, en estadios anteriores, eran otras formes de predominantes, tun rol marginal. Dos so abolsas historicas» de tal abajo Tas ‘desempefiando el trabajo asalariado in, en. concreto, las principales {bajo prestado en condiciones de ajenidad y dependencis que, coexdstiendo en claro desequilibrio con otras formas jo humano, pueden detectarse con cardcter Pr vio ala formacién dela sociedad cep Infento deservicios romano yeltrabajoal interior delo: gremios medievales. fe @) Nuevarente, PALOMERI aa deaprovechamientodel listarel arrenda- 6 OPEZ, MoC.y ALVAREZ DELA ROSA, M Op. ot. p55 S A. Elarrendamiento de servicios coma except régimen de esclavitud. 2 En la antgiiedad, la més importante formad ted. data se basaba en i existencia de una relacién dl dominio propiedad sobre trabajo, que concedia au titular los absolutes poderes| Inherentes a este derecho, incluido el de apropiarse de! Jos frutos de su labor. A estos efectos, el esclavo no! ent considerado jurfdicamente una persona, susceptiblede’ ser titular de derechos, sino una cosa, una especie de trercencia viva, de a cual podia el sfc servirse direc ements, cader ese derecho temporalmente a o1T05 9 teansferiela, asu Libre albedo, Naturalmente, pars fegulacisn deestasrelaciones, bastaba con el Derecha Beit en tanto estatato que regulaba Ia propiedad, Compraventa y arrendamiento de bienes en general ‘Ratddos Ios eclaves y demés semovientes ‘No batante ya enesta etopa pueden detect. in ientes de tabaio por cverta aera en_f ‘égimen de Uberind. En conereto,en os inicos de Fe ne sepublicana, el aumento dela poblacién sin que Eotiera el ndmeco de eselavos ye! gravamiento dela SGadicion Gelos hombres bres no propietacios, deter Raton que éstos,fundamentalmente miembros dels Biebey esclavos manumitides, acudieran al meseadoa Brreche sus servicios, porlo general pera la cealizacién ide tereas de cacdcter fsico 0 manual. Dado que estes jf lapowes acon semejontes a lar que rzlizaban los el sets juntas romanos optaron por aplicar a estaé qRtvasvelaciones las cegla ya conacidas del arrenda- tmienta de escinvos jens. | “Sinemnbarga, luegose presentéla necesided de distinguit de éste el arcendamiento de los hombres loves’ que posefan un situs personal y slo temporal nonaese ponfan a disposicién de otro. Surgié entonces Te neati conductio operarain, como un inicial esgajriento del acrendarsento de cosa, ue sievid fate designarel del hombre libre. & su ves, posterior Erfove ge dejo sentitambiénla necesidad deestablecer Tee nueva separacion, esta vee a interior dela propit ‘neatipcondacto operark, entre ossupuestosen tos que | Hor is aetvidad aisma det deur | Ge aqudlos en los que lo precsade | Gre la gjecudion de une obra, generaimente de tpe | Fesanal opus). De esta forma hize su apartcién lt locava conductio opers, pare Spificar esta ltima mode- | Uidad. se requeris aprove de trabajo (oper2e), 1S ET VERITAS20 1 fue elaborada pr ‘bad formas de artendae Ail retusa definicidn uni » dada la cversidad desiucones noe tale a servic cia de un complgo nado devine Shor, en virud del cual dpe elidady nabsjo,acambiode pomccinpaeeeee su parts foe cliceds poriaacuele hassunay Segue = Deeste modo,sibienslaisvooonns fondabecsiencia ora deundsterdecoediends Sate sen seencuenies tambien obliged, ellocador ob gue en la latia enducts tees quedabs el anendador dela obtain idades Naturalmente, cone co Yh La segunda, mnido & la cast total i6n, son elementos adiciona- cterizar a la serviduumbre como tuna forma de trabajo foraaso basado en un dominacién personal, aunquedaunaintensivied ratode trabajo, no al dela esclavitud, eatravésdeellase No obstants, ta 2 servicio s SeEcimiente de formas de prestacisn Gs tabajo libce por cuentaajena, asociadasal lesan tada dal modo ssloen ézminos materiales, dado qu vetifica un supuesto de presta 2 TE GrsinO incluso en térmainos téenicos, po. sae cphasementos bisicos que presidenau configu de una embrineei ees sercado, Estas se tbo cen alo gene comoedel primero. Es Iocalisan en ng utes ee nee halen produce Wanton gs Sr etd del cal se Ueradan el dominio ease ES espacio produce la transferencia de los ruts del abajo aun ‘al de desenvolvimiento enlos gremios En efceno Hens Ricca ae Nassar Glsperee F uit, daeatancocperecion een telaciones de trabajo se ar creas cones distintes, es substancialmente el Gularon, mde alle ge es moldes compulsivos de la servidumbre, sobrelabase de lacesin valunters Frutos del propio trabajo a cambio de une en, al ségimen juria iprestacidn, Asi entce los masstros titulares de tividad, queen elcaso taller y los oficiales carentes de medios de produccién miento aborative. Loque varias, mis eo bajo el que se presta dicha de ino egy Probie se diouna elaciGn deintercambia desersicing Jocador. Es claro que el _porsalario semejantea la ioeainnny ioopereruim, que coche encanta lesicvi formalmente de bers, yahnceent © Pot Ia esciavitud, es el que detrabajo, Es mas, incluso exist una regulaci txplica por qué 5 ulacon no se distinguié chen ue la emg sees tate de to bstanclmed felaciones, semejanteen muchos de suscontenides.s he normas laborales (jomadas y tiempos de dex, ts, et.) a través gremiales, emanadas de la corpor isn aunque necesitadas de la aprobacisn de lasactori, souk fcavitud, Inso- - dadest, ¢ intentos de organiiacén lee los Sobre ol abajo en régi- oficiales (compagnonnages) ren at finde atrontar conjun- Sve dela gleba. Aun tarnente su situaciSn, sobve todo cases he gremios 5. Eltrabajo en los gremios en un contexto dom do por la servidumbre, Operada la decedenci Sedad feudal sent6 sus bs a Para un mayor descel Derecho dal Trtja, Gul 5) Como ubserve ALONSO 61 roduedén a Derecho del Trabsjo, Quin 5) wantin vanveroe. a Osla Revoiucin Lt 2 wae ee Us Et verrrasvee oor pwuvuvuw arneecc vuvuvuVVUVU VN VV VU VV UV YUKU LUO ROG Ec 7 aoumieron un mareado carscter monopolisticoy repre gentativo de los intereses de los maestros-empresatios Tieulares de los talleres (sighas XIV a XVIIT). Estas seme go,sustentarlaexistencia elsentido modemo dela janzas no pesmiten sinemba aun Derecho del Trabajo, expresin enesta etapa. Ellose abs antes que nada, at eee fater relativamente marginal desta formadetraba- jo, frente ala preponderancia de ls laboresagricolas ue stontadas por el zégimen de servidumbre. A ello hay que ala las propias limitaciones de las ordenaraas SHemiales, que se vinculan, tanto con sus estringidos Srtances (para una determinada profesién u oficio, Jentvo de una concreta locelidad © comarca), como Son gu falta d2 autonomia respecto de la oxdenacion general de ia economia gremlal y a posicion de Tos maestros”, Tit, BL SUBSTRATO SOCIOECONOMICO QUE EXPLICA EL NACIMIENTO DEL DERECHO TRABAJO. Frente a las etapas precedentes, Is gran trans: fecmacién que puso en marcha las condiciones para lt apiniién del Derecho del Trabrjo vino daa por la Generatizacin dela presincidn de tabejonsslriado en Erfnmacién de las distintas formes de trabajo for22s0 seanpeantes con anterioridad. Esta se produjpen vitud Ser insite del régimen feudal al sistema capitalists, que fue e primezo que sent sus bases s0br= 18 207° Sremnlente del teabajo por cuenta ajena del hombre {ibve Este hecho no ocasion6, sinembacgo,Ininmediate aputieign de un eégimen juidico diferenciedo 1 espe oenente adaptedo a las peculiaidades deste ipo de teabajo, Por el contario, el punto de partida vino dado borat inestencs. Seré la constatacion dela ineapec see de este solucién para canalizer los conflicos de fateceses que subyacen a Ia explotacién del tabejo fede a que activard los resortes historicos que a ale eparicién de la disciplina auiénoms Tha ba formaciGn del sistema capitalls- alada aseleci darn lug propiamente dic! fa ya insuficiencia dela cespuestajurtéica art iniGiaimente por #l mismo proporcionan. #si la base bjetiva que permitiré el desencadanamiento de los ccontecimiantos histéricos quetendran como resultado ie emergencia del Derecho de! Trabajo. a () ALONSO OLEA: Op. pig. 28. @ OECAMILLAGL LEY! 6 PALOMEQUE LOPEZ, MC. Inuoduesén 2 asalariads, e 4 ‘La emergencia del sistema capitalists eq 3 resultado de una serie de fenémenos histéricas, cua Gtapa mas iniensa se concentra entre fines del sig, | SEI y comienzos del XIX los cuales determinan ef colapso del régimen feudal y su sustitucién por ots, pasado en a libertad de los sujetos econdmicos, I concentracién de la propiedad de los medios de pro; Guesiéa y le existenda de un amplio sector de la poblacién que, careciendode elles, necesita vender su Fuerza de trabajo para asegurarse los medios de sub, sistencia, «Ia legislacién obrera fue dictada (.. debilitar el impulso asociativo y reivindicativo de los trabajadores” En los oxfgenes dal sistema capitalista conc: res de diverga indole, que acom- pofan a la disoluciin del orden feudal. Entre éstos Eostacan el progresivo desarrollo del mercado en las ‘cin ce una burguesiamercant ciudades ya conforma tirbana, la peesencia de innovaciones que favorecen el Gesarvollo de las téenicas industrales y los grandet Srovesus de acumulaciéa primitive de capital propicis. os por la usura, la expropiacién agraria y el saqute, Solorial®. Nocbstente, lahegemonia del capitalismost producied como resultado de dos proceses histéricos ceneomitantes: la revolucién industeiel, que determina inmaduce ¥ primitive del al ténsito de una etapa Sapitalismo 2 su fase industial, y las revoluciones 4 rrenuna serie de factyicgoves mer narcen a eit det aggre alps pl 1 del capitalismo, cxyo paradigma se sinfa en a cle fines del siglo XVII vino determinado runconjuntode factores de diversa indole aociles, ficos, Anancieros e intelecruales), ents los posiblemente el mds relevante esté constituice al desarrollo de innoveciones técnicas (especial. x elamaquina de vapor), cuya eplicacién revolucio- alos métodos de organizacién dal trebajoimperantes, gorisiitando tn notable incremento de le producti, Gad y una considerable ceduccién de los costes de preducciGn.Sthastaentoncesles unidades productivas an manufactures, que se diferenciaban delostlleres rerriales solo porla concentraciSn de a mana de obra, is mecanizscion intradyjo en los procesos de jin ea neavo component sewsano dasa lidad del proceso Gucci, al sistema de fica, dantco del cual cada tabejador realize sdloaspectos parciales del misme, baja direc de otzo Eltabajador perdi, conell, atontral el proceso productive y su nquera en con. ientos profesiorales, pasando a convertiecn ona intercambiabledel sistema en tanto que los due. se os medios de produccién asumileron tambien ¥ directors de los procesos de pacte, las revoluciones busgueses, cuyo peradigrna se siti en Ia Francia del siglo XVII d sdnaron el ascenso de este nueva clase de burgueses- Propieterios al poder politico, Ello les pecmitiéelied- tar el conjunto de trabas que Se oponian al libre cambio de mercanciasy ala contrataciGndela fuerza de ‘abajo (establecimiento de las Hoertades de comercio, industry tabajo),y procederalasanciéndeunnuevo srdea acorde con les exigencies del capitalismo en expansion El soporte ideol6gica de ete auevo orden fue troporcionado por at ibecalisme, comiente flosSfics ue ofrecia una concepeién integral dal mundo basada Je libertad de los individuos y el predominio de la ‘sz6n sobre todo tipo de privilegio, Los postulados del Uberalismo de la época se expreseban, tanto 2 nivel Politico, dmbita ste en el que, no obstante el marcado tulacidn inicial (aegecicn individualismo de su f Se ©) Pars un detenitay completa anise doo (Gm Paton £7, MC y ALVAREZ TUS ET VeRrrAs vid, ALONSO OLEA, Op ‘A ROSA, M.Op. cit, pigs. 58.59, todo tipo de wauerpos intermedioss entre el ciudadano y el Estado), fueron introducidos una serie de valorey que asinhoy conservan vigencia (comoel sufzagio, bien ue inicialmente masculino y censitario,el primado el canstinucionalismo ¥ el esq x85 la igualded justdica entre les ciudadanos y ls nece sidad de asegurar a éstoz un sistema de libertades formalesfrenteal poder estatal) comoenelplano de las ideas econdmicss y juridicas, En el terreno econémico, el liberalismo init postulaba que al desenvolvimiente incondicionado ae las udeyesnatucalese d do, pencipalmenteladel libre juego de la oferta y la demanda, era capaz de mantene: Ia economia en crecimiento y bienestarde la sociedad, Porello,e debia bas y cireunseribis su acciGn ala defensa del orden puiblico, A nival juridico, las concepciones liberales delinearon tanto el Derecho Puiblice como el Derecho Privaio, Como toda intervencisn estatal en la vida econdmica era considerada una distorsiGn dela libre competencia, elprimera limits cus alcances alas normas reguladoras ela estructura del Estadoy a aquallas que delimitaban su accién como guardidn de las ibertades, Dado, por otra parte, que la accidn individual era considerade el motor dal bienestas, el Derecho Privado sélo contuvo siciones destinadas a facil nvolvimiento, tees principios bésicos: la igualda personas, le autonomia de la voluntad de éstas en cuanto ala regulacién de sus relaciones yl respetoala propiedad privada sultado deestos procesos fuela consolide- cign de la Regemonia de un sistema de produccién basado, por vez primeca, en la explotacién del trabajo asalariado en grandes unidades productivas controls. as porlos duerios del capital. La prestacidn de trabajo aselariado se convirdé, asi, como ge ha expresado con singular dlaridad, en wel soporte del nueve modo de Produecién», legando a expresar, «como supuests s0- ial generalizado, la difezencia especifica del sistema capitalista que, sin perjuicio de las profundas transfor- fentadas a lo largo de su desarrollo io hasta el presen: |Laubicacién del trabajo aselatiadoen el centro del sisterna ecandmico generd la division de a estr fara socialen dosestratos bésicos: el delos trabajadores Eeclariados, que precisan vender su fuerza de trabajo para subsist y el delosempresarioscapialstas, pro pictarios delosmedios de production, quesesicven det Eibeja delos primeros, y determind que el conflicto de ios queepone ambos enelSmbite de asrelacio- nes de produccidn pesase a convertizee en el coniicto quclaar de la sociedad. En este sentido, el elemento de se vedad no viene dado tanto por Ia existencis de inte- Feces contrapuestos enre quienes prestan su trabsjo 2 Tembio de un salario y guienes lo pagan con el in de apropiarse de sus frutos (ello es inherente = esta rela qoncen la medida en que la satisfaccién de la preten~ Sién’de cada una de las partes requiere el corzelativo secrificio de las de la otra: mayor salario por menor CSntidad de trabajo versus menor salario por sayor 'qde trabsjo), sino por la instelacion de este ‘conflicto en el Seno ce) NtEreE é Score e! que descansa el mievo modo de production, pasando s convertcse en el «condicto arquetipo 0 mas eee de la sociedad capitalistan, el eauténtica motor de todas sus contradicciones»"™. 1B. Lainsuficiencia del modelo liberal-individualista de regulacign de las zelaciones laborales y ss consecuencias sociales. En consonancia com Is ideologi dominants, l= primera respuesta juridica que mereceron las nuevas Bllociones de produccin estavo marcada por le fransposiciGn de ls principios dal iberalismo juridico: peered e igualdad formales, abstencionismo legisiat- vvo, sacralizaciOn de la contratacién individual e impe- weede le autonomia dela voluntad. Loquedzesta forme be peetendia era, obviaments, hacer posible [a libre conteataci6n de la fuerza de trabajo que requeria el capitalism en expansi6n. ‘La aplieadién de los postulados lberales a las relaciones de trabajo supuso: a) la supresion del ségh- fnen conporativo, que por st rigico sistema de control de In prosuceiéa y la foerza de trabajo resultaba un obstdqulo paralacreaciénde avevasempresesy lalibre Contratacion de los trabajadores que éstas requerian, Sentdndose en su sustitucién el principio de libertad de trabajo (Edicto Turgot de 1776en Francis, Decreto de Ge diciembre de 1836 en Espafia);b) la prohibicién de _ (a) Nugvamente, PALME! 18 23 tas agrapaciones profesionales y coaliciones,cuya fo i npedie, no sélo una eventea] reconstitucion de a qpooradiones gremiales sino también cuits ints SP eaconcolecva dela dase uabapdors pueda distorsionarcllibrejuegodelaoferaylademad Been Ia contratacién de la fuerza de trebajo (Ley ft Chapelier do1791en Francia, Combinations Acs ingle gas de 1799 7 1800, articulo 416 del Codigo Penal espe $e Ge 1622); y ¢) le inclusin de la zelaci6n obrere Datrono dentro del marco de la legislaisn evil, me Eiante gu tpificacidn como un contrato de artenda? spiento de servicios, cayss condiciones podian ser fa} jas Lbremente por las partes quelo concertasen (actieus Jes 1780 y 1781 del Codigo Civil francés de 1804, articu} los 1583-2 1587 del Cédigo Civil espanol de'1889). Sobre esto iltimo, es importante anotar que lt cecuperacién de la vieja lacatio conducto operersm™ ol los cédigos civiles del siglo XIX se debe, tanto a 3} aptined pata tipifcar el vinoulo en virtud del cual lleva a cabo la prestacisa de trabajo asalariado, comer; Ja fancionalidad de su consideracién como una fosmt de acrendamiento, en la medida en que ésta permit justificar -bafo wn aparente tecriciome- el desenvolw, Mento del trabajo humano como una mercancia mis quyo precio podia sr estipulado en funcidn de a ofet? la demands. Naturalmente, parano entrar en contre YieeiGn con les ideales dal Uberalismo, fue necesark mercanca errendada no era en ss ree igual a sus semejantes, sino sil | estebleciéndose asi us puntuelizar quela ceasola persona, ib gu energia o esfuerzo persor JqUt LOPEZ. MC. y ALVAREZ DE LA ROSA, Mp tpg S182 97 TUSET VEREeresada separacion enteé Ie ac! aborativa y la persona que la dasarrolla, Es mis, es posible afizmar que esta funcién siderecion del 108 por los c& ss del sigle XIX, por cuanto éstos no contue isposicisn adicional de in ‘rato (salvo Ia relative a indalos contrates de por vida, motivade poreltemor sl nacimiento de formas convencionales de servidum- bre). Ee deci, de lo que se trataba era, inicamente, de crear las condiciones para que sean el empresario y el trabsjador quienesestablezcan, al margen de cualquier “cin externa, las condiciones sequin las cuales Prastarse el trabajo, ner ue partian este nunca existieron, empero, en la lado de los trabajedores para negocia las condiciones 2 tabsjo. For el contrario, la inicial superiorided sondmica de los empreserios y elestado de necesidad de los trabajadores, debicio al exceso de la oferta de Eabajo sobre su demenda (provocado por la aresién demogeéiica, la rigracis dal campo ala ciudad y le sustitucign esfuerzo humano por la méquina) perm Seron que fueran aguéllos quienes impusieran las con disiones de contcalacién. Ello convicts al arzeads. siento de servicios en un auténtico contrato por adhe- sidn,cuya eelebeeciSe no hacia sino expreserlaforzaia acaptacisn por el trabajador de las condiciones Sjadas usilateralmente por'a volunted empresacial Uap dominio, ansuma, ela ley de la paste mas fue se tadujo, como es amplismente conocido, on cee ica situacién de explotacisn generalized de las loses trabjadoras, que estuvo a punto de poner en Peligee su propia subsistencta como grupo social Las jornadas de trabajo extenuantes, las sala- vos de subsistencia, a insalubrided d de trabajo, le abusiva ajo de Ins sy los nifos, la imposicién del sistema del ruck, no fueron, pues sino las consecuencies deunsisteme de cegulacién de las relacione (03) ALONSO OLEA. Op ci, pg 207 (3) Coms consata GAL Ceeecho del Tabac ey AV (0) palabras de PALOMEQUE LOPE: CCS ET VERITAS ofa. Naturalments, una lorabie estado de las clases traba. ‘cusntra wel germen de su propia ante en este d jadoras donde se superaciénat, IV. EL «DOBLE ORIGEN» DEL DERECHO DEL TRABAJO. ig combinadiin industrializacién capt liberal creé las condiciones para el naci- misntodal Derecho del Trabajo, no dio lugac a lcan su sola presencia. A esios elementos de cardcter estruchs. ral hay que afiadir el desarrollo de dos fenémenos que bre ella, permitien. plotacién en la que se encontraba #9 obrero):y la intecvencisn del Estade en las ralactones Jaborales, encaminads @ limitac los excesos a los que habia dado lugar Ia aplicacién de los principios libera les (legislacién obser). El Derecho del Trabajo, tal y como e3 concebido actualments, serd el resultado de la conjuncidn de ambas procesos en una etapa posterior A. Laautotutels colectiva como punto de partids Consecuencis insmediata del deploreble estado enelquie se vio sumidala claseobrers iuelaexacerbecién del conflicio capital-trabajo asalariado. La expansion del proletariado y su concentracién en as fabricas pro piciacon el surgimient iad actuar colectivamente con el fin de remediar su sicaacign. Surgieron, asi, las prime- ras acciones reivindicativas, iniclalmente acticuladas alrededor de las coaliciones ubceras y mds tarde de sindicatos, a través de las cualas los abreros buscaron ‘poner al poder dei empresario y la inhibicién del Estado la defensa conjunta de sus interes, Si bien, ante a prohibicisn de las asociaciones ¥ soaliciones, estas organizaciones actuacon inicial- mente bajo fa cobertura de las sociedades de socorros AAW. Enredine de 980 ig 3, CA ROSA, M. Op. ct, fg 19VUVUU VITUS VIVTTIFVPT FHF THF HAH TTP E See TTeT eT ToT CT OW e : contcatos de derecho comin}, cazentes del zespaldo d: Sedenamiento juridico, cuyo contenisio era respetado y Cumplido, si aceso, dabido al wmutuo respeto y temor que entre s{ sienten sindicatos y empresarioss™ Enesta etapa, pues, existid un primado dbsolu- Touma estatel sobre cualquier otra fuente de regulacién de las zelaciones laborales, apareciendo eb Eatado como tinico pode: normative, que relegé 2 le cofera de la ilegalidad (0 alegalidad)a las demas mani festaciones normativas autéaomas provenientes de la potividad de los grupos profesionales, to dele ©. H Derecho del Trabajo coma sintesis de ambos procesos. ‘Tampoco esta respuesta excluyente dels fend: menos colectivos consiguid resistir el paso del Hempe. Nuevamente, su rebazamiento por las organizaciones cbeeras, que continuaron recumiendo a sus medios de cos nese a las limitaciones impuestas, Pipociones colectivas seria capaz de proporcionar a] sistema laboral un mayor grado de legitimacién a los Gjos de sus destinataros, Etannecesidad de asegurer a} cedenamiento estatal «le aceptacién que legitime sus hormas y que en tiltima instanca asegure su super Vencian determiné un camblode actitud de los Pode- ree Puiblicos hacia el fenémerosindical. Esasi como, los afios siguientes a la Primera Guerra Mundial, y coincidiendo cone! inicio delos procesos deconstinucion Salisacidn e internacionalizacion de 1os derechos labo- tales, se asistio en In mayor‘a de ordenamientos euro- pes al reconocimiento, no ya de la existencis de los Pidicatos, sino de la efectividad de sus medios de acaién colectiva. Este reconocimiento s@ manifests & través de tres aspectos normatives intimamente vineu- Tados entre sf: a) el otozgemiento de eficacia juridica # losconvenios colectivos;b) la atribucionalos sindicatos de una funcién en la fijacién de las condiciones de trabejo y la defensa ce los intereses delos trabejedores: yo) la unorrnalizaciénm de los conflicts colecives de trabajo y del recurso a medidas de presiéa™ (G0) Por daciso coe palbras de ALONSO OLEA. Op. Qu) GALIANA MORENO. Op. st pig S85 (22) En ese sentido, MARTIN VALVERDE, A, RODRIGUE: Flenos Macs, 198, pi. (23) ALONSO OLEA. Op. ct pig 3 (2s) CALIANA MORENO. Op. 32 Lasdos respusstas quehabia merecidohisis® camente a contatecon individualizada de las cone Clones de trabajo impuests por el Mberaliemae termingd re mods, por integrasse en un sistema unite Ty disgio a compens mais uit 5, ? enc medianae fades combinadadt lanormativaestatalprotctonnyid Mies cn. convancional-ebectiva, Bry consecteaca} qos poderes sociales y los tipos correlativos de norma de los que ha de emaner la egulaciGn des relaconey laborales pasaron ser dos: el Estado, ensjescicio poder normative, através de los mediostradicionals Ee exteriosizacién de éste (la ley y el reglamento),y las organizaciones ree y empeesarios, en Usa desu autonomia coleciva,conlos conveniosce ecomo nueva tipica no a Jonocimiento de la autonomia coletiva, ademds de traer consigo una iransformacién na de fuentes del Derecho imperante, supusolsinto- Guccida de un elemento quehs resultado decksivo aloe ilidad de los sistemas Ge coordinacién en una telacién bastcamente subordi nadan, sino que lo hace, precisemente, mediante ls Famisisn de ula participacisn delas clases teabajadorss fen el proceso de creacidn del Derecho del Trabajon Peicucionalizada sus asp zaciones de justicia social (su. orden de valores) frente al capital y frente al propio dom, La autonomia colectiva desempefe, desde cesta 6ptica, un doble comatida de singular trascenden Gia eenial: de un lado, actiia «como manémetro que mide {a peesisn social, los diversos grados de adecte. Glan del sistema de legelidad al orden de valores y aspitaciones expresados por los grupos socisles «7 lisigion, mientras que, de! oto, cumple una funeisn de espiteo valvula de segurided que, mediante larenove ‘Gan progresiva y constante del ordenamiento, imple ue un exceso de ebullicidn incontrolada provoque lt Gxplosién incontenible que ocasionacie Is destruct del sisteman™ 5 De forma paralela, se registra también en 2stos US ET VERIEAS26 v0 del ordenamiento labora), que pe covjunte de trabsjadaresasalaciados(con a sola ances- Ende los servidaces pllicos) como ene desarrollo pertecclonamiento delos contenidos dela leg loan {iboral, que empead configurarse como ua cous sormativa unitaio, dotedo de una cierta complejicad ysistematicidad propias, cuya ordenaciOn conceptual hue puesta de manifesto progresivamente por la doc tna clentficn Surgidaaila conviccidnde quee abajo seslaciado enconteaba regido por un estat de pert peopias,ajeno los spicos dela contratacin ci. al gue conveate mejor Ia denominaciSn de Derecho del El elemento unificador de Ia construccifn de sts mueva discipline vinodado porlafigura del conten to de trabajo, denominacidn ue fue empleada por prizeca vez por la Ley Belge de 10 de marzo de 1500, pica terminae generalizdndose come expresiva del Teendamlento de services, Convlene 10 verder de vista, sin embargo, que arvendamiento de servicios y conireto de trabajo no sony sii 08 tipo contracrusles distints, sino diferentes denomination 85 que sirven paca pone: de relieve la radical evolu din del régimen juridico da una misma, cuya funcién tarighasido~y es-lade viablizardlinteccambiode sabsjo depenchente por un salar Desde ecta vita perspectiva, las ideas cue informan el modemo Derecho del Trabajo. pued ‘esumirseen tres, «cada una delascuales pugna conn dogma fundementaldeliberlismoiniciai. Ast wzen teal dogma liberal dela igualdad de los contcetantesw, sl Derecho el Teabsjoe apoya wen aiden deacimest’s del conirato de servicios a causa de la desigualded de poder ecandmico de petronos y obrerose, Del mismo iodo, wfeente al dogma libecel del abstencionisire Tonmativa del Estadon el Derecho del Trabajo postula sla intervencién ele éte pace la protecign del con tante débil en la relaciGn individual de trabajo», For fimo, wfrente al dogima liberal del entendlmiento recto entre individuos en el mescado de empl2on, Derecho del Trabejo acepta wa dimension elective d las relaciones laborsles, aémutiando con mds © menos 05) che sancut FRAYMOND.Op. st, is. 76 (6) MARTIN VALVERDE. Op. ct, fg. 1. © as, noplcuezeuieR pag. a. Mi. oNegadiacién colectva Ts ET verrras lvidueliencicn de las rlaciones lnbocals. Bs Reacones jones de trabajows, Derecho del Trabajo conlle va, asi, una clara miptura de los principios lis rectores de la contratacién civil, y en particular de le fancién decisorta que ésta concede 2 la autonomfa individual. El Derecho dal Trabajo pase de la autono- mia la heteronoméa, en la medida en que introduce en la relacién leboral regias estatales uprotectordy, que 52 imponen a las partes al margen de su voluntad.y de lo individual a lo colectivo, en cuanto crea instrusnentos IdGneos para articular del lado de los trabajadores un, scontrapoder» social, que permita un resurgimiento de lgautonomie, pero transformada en autonomia colect va, Naturaimente, intervencicn estaial y autonomia colective, estos dos componentes bésicos del Derecho del Tretoajo, se articulan de diversas maneras y propo: ciones en cada sistema de selaciones laborales. En este sentido, ya desde los inicios del proceso de formacidn de Ia disciplina, fueron distinguiéndose dos modelos fe nlervencion uno reac a la mediacon estatal mds alld de una legislacion protectora basic, y partidario mas bien del lo de Is autonomés solectiva, que corcespondis & los paises anglosajones: y aba tun papel més velevante ala media~ cidn del Estado, propio de fos latinos, Ambas modelos evolucionarian posteriorments, entrandoen contacto @ influyéndose recipracamente, pero sin perder del todo sus rasgos diferenciales, IV. LAFUNCION HISTORICADEL DERECHODEL TRABAJO. Sialgopermiteponerenclarola contemplacia del devenir histérico del Derecho del Trabajo, es la progresiva adaptacin desu configuracéninsittucional al cumplimiento de una determinada fincién soci cuyos camponentes basicos se encuentran esborados desdesus origanes. La puastadecelievedeeste elemen- to cualitativo, determinante de su nacimiento rmador desu posterior evolucida, resulta esencial a los efectos de lograr una aproximacén coherente su peculiar contexturs ynaturaleze. Asimisme, constitu un referente indispenseble parael examen de las lineas de transformacign por las que atraviasa actuelmenteA. La integracidn dal conflicto capital-trabajo asala- Hlado como finalidad altima de las normas de Derecho del Trabajo. Del acezcamiento alos procesos de formacién y deserollo del Derecho del Trabajo emerge sin dificul- tades una condusidn, ya apuntada por quienes han asumido antes lz tarea de desentrafiar a través del andlisis histérico su fundamento o razén de ser: le emergencia de esta disciplina jurfdica responde a la necesided del Estado liberal de canalizarel conflicto de interesas ene trabajo asalsriado y capital, apart del mmomentoen que éste pase a situarse en el centro delas contradieciones sociales, imponténdole un cauce de desenvolvimiento compatible con la permanencia del sistema de produccién capitalista y el tipo de sociedad, a dl vinculade™, Es decir, comprobada la imposibill- dad de suprimiz la contraposicion de intereses entre trabsjadores y empresarios y sus manifestaciones con- Aiceivas, el Derecho del Trabajo emerge como instru- tando quese manifieste de forma incontrolada oponge en peligro ia estabilidad del sistema social™ Desdeestaperspectiva, rentealaunilateralidad de los sistemas precedentes, el Derecho del Trabajo representa «una respueste bipolar» a las contradiccio~ nes de la sociadaid capitalista, en le medida en que, si bien busca asegurar su pervivencia como ocden econs- rico y social, lo hace por primera vez partiendo de la nnecesidad de encauzarel conflicto, conal finde fomen- tar la formacién de una amplia base de aceptacisn 0 consenso respecto del sistema de legalidad imnperante, que lo legitime ante los antazonistas sociales Estaconstatacién permitedescartar tod apro macién unilateral al Derecho del Trabajo, que vea endl, bien un wderecho de clase», conquistado por los traba- jadores para la defensa exclusiva de sus inteveses frente 3 los del capital, o bien un «derecho burgués», que atiende sdlo a la satisfaccién de la aspiracién de los grupos dominantes de conservar intactas las estructu- (28) En exe sentido, PALOMEQUE LOPEZ, MC. Deracho del Fs co EMPERE NAVARRO, AV, Sobre l concepto del Ds big 20. (00) CALIANA MORENO, Opt pis. 5 (81) CALIANA MORENO. Op a 5% (G2) PALOMEQUE LOPEZ Op. ct. pig. 16 (23) SUPIOT. A. wPocqué ua 138 raade dominacin. Antesbien Indes quemejor exp tala foncien socal quecumpledsteesis delabusnedd de equilbrlo estructural ente los intereaes entered dose los protagonists del confit socat-En deed ta au eaneter etranacclonae,sunatualegs ae Galmente ambivalote 0 contadiciors, de desea conguistedon,queimpore limits ola xplotacin del fuera de taba, 9a a'vex derecho condedido garante de la subsistencia de las relaciones de produc! Sen captalistag®, B. La introduccidn de mecanismos equilibradores comoinstmumento indispensable para ls consece: cin de los fines institucionales del Derecho del Trabajo. De tocies formas, lacontemplacidndel Derecho el Trabajo como instrurento de composicicn del cans Hiieto laboral, incluso sie le afadela ideade la buisqus da del equilibrio de intereses, no permite desvelar en rnuado, vistaslas casassélo desde esta perspactiva, ceria posible sostener incluso que we] Derecho Civil y el Derecho del Trabajo tienen finelmente la misma azn desere,en la medida en que ambos persiguen «civilizar Ins relaciones sociales», «sustituicen ellas las relaciones Ge fuerza por telaciones de deresho»™, Para profundit zat en la eprehensin del fundamento del Derecho det Trabajo es preciso, por ello, prestar atencién tambigna Ja singular manera como éste busca conseguie dicho equilibrio, en funcidn delas caracteristicas del conflicto, cuya integracién busea aleanzar. Z Desde esta perspectiva, lo peculiar del confi to capital-trabajo asalariado es que enfrente a sujetos que no sélo paseen intereses opuesios, sino que 5 Vinewlan entee si a través de una relacién estructuralmente desigual. A estos efectos, ha de parti! sede una constatacion, queno porelermental deja de set indispensable: {a diferencia que existe entre las posicio- nesde trabajadores y emp resariosenel sistema produc fnt Eicign. Teenon Madi, 199,915. so dei Tesbajow. En: Revita Expatala ga Deecho del Tenby, 1986, No.26 cho del Teabojon Eni Documentos Labora, 1995, No.3, pg. 7. TUS ET veRrisl 2728 lamadida en queelcontrato de trabgjo, arabledela perso- cual el primero ha de ias instucciones del segundo sobre el modo, tiempo lugar de ejecucidn desu prestacidn. Elcontra- de este modo, una 5 0 de la cual la voluntad del tabajador no sdlo se campromete, sino que use somater al poderde decisiSn, Lempresario™, De alli que se haya afimado que el re un emipresario y un trabajador iaciGn entre un detentador de po: quien no datenia poder alguno. Se origina coma un acto de sumisidn que en su dindmica produce una situacién subordinada, por més que la sumisién y subordinaciéa puedan ser disimuladas por esa indis- pensable ficcidn juridica conocida por acontrato de * Que la ordenacion laboral haya ido transformandose con el fin de bacerse mas flexible (...) no significa que haya terminado por asumir una postura de total neutralidad frente ala desigualdad de poderes que caracteriza a las relaciones laborales Dado su cardcter ambivelente, el Derecho dal trabajo contempla la singularidad de esta relacién des: de una doble perspective. De un lado, poriendo a (84) Come afirma grifiamente SUPIOT. Op. ci, pig. 1, 15) : IND, 0. Tisha y Derttho,Teaduccin Ministerio de Trabajo y Sepuriead Socal bas (35) a cipal wbotin de muses vine dado id desberda los exquemas Gules 3 7) PaLoMaque Lopez y ALVAREZ DE LA ROSA. Op. at pf. S7 Us ET VERITAS ‘oite haenva MARTIN VALVERDE Op Sn del personal, algunos inex echo comtin d2 los contratos™ kb otro, eceando mecantsmos especificos dieigitos + dom pensar la posicion de debilidad contractual del trabaj dor, Estos mecanismos no son otros que | sjosamnente creadospporla experiencia histdvica ‘curnplir ese papel: la inter Esta do, dicigida s establecer udesde fueras del contrat condiciones minimas de trabajo y regias de tutela dela persona del trabajador,y el reconocimiento de los chos de auto-organizacidn,negociacicncolectvay huel 8 de los rabajedores, por medio del cual se abre paso al juego de la autonomia colectiva como fuente adicie, nal deregulacténdelasrelscioneslaborales.& travésde sstas dos vies paralelas, el Derecho del Trabajo buses establecer en cada momento un delicaco equilibrie entre a bertad de empresa y el poder del empresarioy la proteccién del trabajo asalatiadio™™. cue ain fe composicicn dal condlicto social Lo singular de la resouesta proporcionada « dicho conflicea pore! Derecho del Tabajono ee encuene tra, sin embargo, en el reconocimiento de los poderes empresariales, en la medida en que éstos emanen del pacto en virtud del cual una persona se compromete a trabajar alserviciode otra, por loquees posiblasostensr que ya existian en su configuraciin bisica ~y sin some terse a ningiin tipo de contral- antes incluso de su formacién como Derecho auténomo, sino en su rsionalizacién, en la imposicign a éstos de Itmites, tanto por a via de la intervanciéa normativa como a través de Ia autonomfa calactiva, con el fin de posicidn de debilidad estrucr a composicidn del conflicts capital-tcabajo asalariado, lo que le permite cumpliz establement explica portanto supe ia .omo respuesta his Hea_al mismo, son [as singulares medidas compensatorias de le desigualdad originasia entre las artes a través de los cuales promueve dicha composi- Gdn. Lo integracién dal convlicto laboral como Bin elt Mo y le introduccién de mecanismos equilibradores para su consecucién edici inglosa (123) a cargo def, GALIANA MORENO. soa, scuyacontenidadefeestadeso eg LEonde este modo, los éos elementos cuyainescindible _ndmico conduce, de este modo, a una triple mutacgg vaclenpennivedarpienacueniadelafuncoralidad enelseno delordenamient laboral que se taduce (el Derecho dal Trabajo como disciplina juridica, 2) la dedieacién de una mayor atencisn en el bosguels - de las insttuciones 2 la presencia de elementos qu JLELDERECHODELTRABAJODELACRISIS, _favorezcan una adaptacidn exible de les condicion’ ‘ Srpafrt) el read mbent, con we miss Ba gd t ta crisis iartalada en las economfas de los uncolends ampli ycoasistente als autonomta colens, = vaises inductealizades © pasts de la década de los vay) Nasignacicn de mayores mngenes de decisgg (Renta ha tenido la virtualidad de desencadenar un le contrataciéin individual, t. Caplio proceso de revisién critica de Jas pautas tradi- ‘Logue se persiguea wavésde ectaredefiniign sae Peereuuniento del Dececho del Trabajo, elislo deloscontenidosdelasnormaslegelesylossolesdeles CTT co sdlo seha venidodemandando aintroduc- fuentes del sistema laboral es stisfacerla coda vez més Goaén de cambios en sus estructuras normativas, sino intensa demanda de Los sectores empresariales de con. 360 Gham dutieado cuestonamentos au funciSny ter con nsrumentos de gestin ll fuera dtp G lus sefias bésicas de identidad. Més alld del debate diictiles y fexibles, con los que hacer frentea la nueva Cee aes ees Sho delastransformaciones deman- _ situacidn econémica y producti generadaa pertirde (y Indan dnrdsdsieualsesitienmuchasveeesargomee- 1a cri. Es en func de ello qué el temano de lat 0 Gy inoufldentemente damoszados o necesitados de solucones s= desplaza aia scene mas proclves 2 GeRoleSles tatancones, eo necserio enalizar cules diveraidad el dinamismo y la wansaccin, Desde ena te baguperdonessebalaconfguracninsttuco: perspertin, os cambiestroducidossonexprsiénde ferminar si__un claro destizamiento del equilibrio de intereses entre To Jon portedoras de una mutacin de los que hasta ahora Tos sujstos untervia ge han venido considecando sus rasgos esenciales. que encuentra en la reordenacién de los espacios nor- Er indudable que. €e su conirontacién con la muativos atribuidos a os distintos podeses reguladores crisis ecandmiea, el Derecho del Trabajo ha ecibico ya _presertesenlasmismaseu principal via de concrecién, (jena presente etapa infivencias rotorias, que introdi~ De todas formas, pese a alterar vatios de los Sa errenentge inédifos en su configuracisn components més caracteristios del Derecho del Tt eect objeto de hocerla mds senate a una bajode lasetapas precedentes y hacerloademfs enim aan neds ves menos uniforme y estable, y 2 un sentido favorable a las aspiraciones empresarales, ta reiyor protagonisme de laauionoméa clecivae indi- les crrbiosno pacecen pesturbar el dseRo de au fun eee ree como se asiste en Ia mayor parte de cin istfrica como instrumento dirigide aencatzar el care incios ansdloaldisefiodesoluciones norma- conflctoenire capital y abajo asalaraco mediante la (Guns abiertas ala divesidad ye cambio, sino al itreduccidnde mecanismos equilradores Nose re weauioelanegocacén cslecive eincluzo,aunqueen fe olamentede que, como resulta porlo dems eviden eee aiid ala contrataciSn individual, como ins- _te,en a inmensa mayoriade orcenamientos sige estan~ Tancredo sdaptacigndle ins condiciones de trabajo io presente [a dimension colactiva de ls relaciones aaeerreeaatandes en las que las empresas han de laborales, reforzada incluso en su selevanca init 2 eee TeMNndaromentosuactivided.Comoresul- ional través dela asignacisn a los convenioscolect- igh tada de ello se produce, como se ha obvervado, una vos de nuevos y més amplios cometidos cepuledores UF tmouifccisnenel fuego dels fuentes eguladores del Es que tsmpocp pusde sostenrss 0s invervencia Derecho del Tembajost, quealtera su tradicional aton- _eststal protectora haya desaparecdo de los misroes (5: Beuraclon dindmiens#®, al dar lugar a un distintore- "como consecuencia de las innovaciones intsoducidss porto de competencias entre la ley y los convenios Que la ordenacién labora haya ido tansfomménccse cae vce rae clang fortalecimiento de lz autonomia con el fin de hacerse mis flexble, y que en diche seer te reivindicacién deunanayorcapacidad proceso parte de los cometidos tutelares asumidos por REESE its condiconciientos eel entorno eco- esta se hayan desplazado al tezeno dela actividad de © Gy Comacheeva DEL REY GUANTER S.Desopulein rd y Eenibidad en ef Osrcha dl Than Er lant ator oe, OP BENe to ose. ©) RODRIGUEZ PITERO, MDs detevoaemesston Ere Giorale dD ode! Lavoro edi Relezionitodussal 1998. No.1 ig. 46 “S (40) PALOMEQUE LOPEZ. Op. cit, pig, 22. 198 10S ET VERITAS 29significa quehaya total newtralidad & 2 que ceracteriza aunque qui labor no con el énfasis de que el ordenamiento 1a in de las variables politicas, eco en la actualidad reequilibrar tal situacién. coductivas que ent s entren en, bien exdsten dress, como las vinculadas con a juego'™. Desde esta perspectiva, si bien es cierto que 2 wendrele funciSa objetivay durade: en pro d2unafexibilizacién, hay _radel Derecho del rab, ligada de modo pemmanen. al conflicto social de base (y éste al sistema de produccién} sma etapa en el terreno de la tutela de la persona dal trabajador: proteccidn contra los actos de nacién, reconocimiento de le eficacie de los a 3 fundamentales dentro de Ia empresa, tutela -ssente que la presencia de mecanismos decontrape- salud y Ia seguridad an el trabajo, etc. 50 es instrumantalments indispensable pars Ia conse- Esta persistencia de los cometidos institucio- _cucién de dicho equiliario, Por ello, su presencia, d= ales del Derecho del Trabajo no tiene por qué causar una forma u otra, resulta esencial mientrasla subocdi- las contingancias histéricas y ado ast variablemente el equili- To sustentan't!, conviene tener der demostrar es que las tra contexto sobre el formaciones operadas en el fhe de desenvolverse hayan os presupues- ‘culen las relacionas entreleshombre trabajo. [Lo que la arsis econsmica pone en cuestién no 3, deeste modo, Is necesided estructuzal de un Derecho 10 sélo la pretensisn de llevar a eabo una sin «autosuficienten del mismo, basads ex ective, la nueva situaciéa im- parte a los laboralistas, como se ha cheervada, «un: leccién de husmildadm, en la medida en que pone de manifiesto wla imposibilidad de dasconocet las exigen- cias de un sisters econémico basado en la ldgica del el mundo tos de! : cidn: que el trabajo asalatiado haya dejado ci situade en el coraze a capitalista de jon, cquela relacisnateavésdela cualse viabiliza plotacién econémica haya dejado de s 0 del Teabaj sobre factoras econmicos, externes a la celacion de don; pero, ala vez,supone para éstos un ceto: el 42 susceptibles por tanto de sufrir altera- hacer posible que ules valores y principios que hicieroi Gonesen furcidndelascircunstancias,sinosientesus acer #l Derecho del Trabajo permanezcan y nue: roicessobrela estructura mi esta discial cledsta, permiteaven- suexcepcional capadidad deadap- na no sélo subsistiré mientras el tars a los cambios y mantener intacta su funcion G2 actuando como s0po: instrumento al servicio de la justicia socialn™”. OPEZy ALVAREZ DELA ROSA. Op tpg. 96. JND.Op. ct, pg. 52, inca que wl propésito Sindamertl del Der rathu ue contapeso que ois la deaipuad det Trbaj siempre sida, ynos negociadar que neesaceenens® (3) Naevamente, PALOMEQUE LOPEZ y ALVAREZ DE LA ROSA. Lee. it (4) RODRIGUEZ PINERO. Ce, pig 50 ET VERITAS 17