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  • Tema 1 Atienza Derecho y Moral

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    Manuel Atienza, Derecho y Moral, 1er tema

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    86 x seNTIp0 DEL DeRECHO tuna de las peculiaridades de tal repla es que ella no es yt juridice, sino meajuridica. No petenece al Derecho y, Por ele juridie. Stido deci que sea Vida o invélida, como tampoce ro ee etido proguntarse (la analogies del propio Hart) si el rendratron de Parfs mide realmente un metro. Una Formal rae Pate dela regla de reconocimiento del Derecho espano! clon Penta estar “son normas vilidas del Derecho espaol, ¥ seta acerse, las contenidas en Ia Consttucién de 1978, deber elias de acuerdo con la Constitacion y ls establecidas tas diatfordiad y que no contradicen la Constitucién”, Como con ane la tiene una doble faz. Por un lado, es una especie un cn lt ee arr con i Deel a dee a mY cada, cate prac est gee a anda pei de Sere i tn eae tenor de emer Se Gt Rr, doar nas ee algo ew Peso Ue nosotros labore), ve noes fi eu ls a ade ane gel agnosie Sas ar i dd ert gaara norms ies ao Ut Pao, de mamas Tae Ee ter oa pe res ope, nae de cue qe orc el cn Sie ony ei ne eae ee on ia tel dro some Tres moran sos roa ce ener et cain a cance @ cae ae) ity hoc eae cor ms ome a a par pee Se i sc Bebe pr oem J cana Jeb hei lo oh 2 nice come opin marta it =f Hes pts. ee Cncara pes a de ve et defen acon de io ian ent! rach sn inca hale de Sl amend PE cera y oa cosa in sei rm de ta moral 2s Jen ps ero 250? ect ma oa ata ees awa» oc aoe nla ene a sa dem npc 5 Po do contribs 2 mina sega spent ae 0 Bia nora ue ar io cn ec Hao com Pa ren. n c olan 1 som mee mossade una er Sls pa rn apelin de ses Son sara fore Sp arn meson og se zens mores St ean, ars Pas ei de ea ia ene cem de Bad go pra toon aa DeRecio ¥ MORAL o naturalmente, de ellos se desprendan reglas espectficas para Tada profenen pare cada esora de actividad. Pro a lon abo tznos se les aplica sin dua la norma (moral) de que o todo lo fue es téenicamente posible (aqut posible utlzando habilmen- ff el Derecho positive) ev moralmente correcta. De hecho, la Practica de la sbopaciaestd tradicionalmente reeida por e6d Jos deontologicos, esto es, por normas que tienen un estatso @ Fritad de camino entre el Derecho In oral ‘Los chudadanos que viven bajo un sistema jurdico no par ten tampoco de que el Derecho y la moral sean mundos com- pletamente eparados. Si en general, se considera que el Dere ho de un Estado democratico es leitimo y, en corsceueneta, fue deben obedecerse sus normas, es porque se entiende que Se Derecho asepura (aunque sa imperfectament) valores mo Tales una elerta Hbertad, una ciertaigualdad, una cera jst Ga. La ley no se cumple, o no se cumple siempre, simplemente porque sea la ley, sino porque se entiende que es justa-¥ de ah ue cuando se percibe su eardcterinjusto (0 particularmente {hjusto)surjan mnovimientos sotales para acabar con esa situa Gn. A vooes eso fine lugar mediante vias paciicas de opos én al Derecho, como ocurre con la llamada desobediencla ck Milvel movimiento de los aos 0 en los Estados Unidos para re Thamar derechos ciiles y oponerse ala discriminacign racial es tin ejemplo de elo, al igual que el de los objtoreso los insu Sosen Expana en los dltimos afos. Y otras veces sume formas ‘olentas, como curve con las revoluciones. Pero la moral, n= Turalmente, noes tampaco ajena alos cambios revolucionatios Con Independencia de que cl uso de la violencia ext6o no mo falmentejostifica (de hecho, a veces Io esta ya veces no), €& Giffel que alguien considere lestimo acudla esos medios tno pars lograr fines ims, esto es, fines a los que aribuye un eavicter moral ‘las consideraciones anteriores se podria objetar quizés ‘que, a pesar de las conexiones sefaladas, la tendencia a la se- paracién entre el Derecho y la moral es un rasgo caracterstico fel mundo moderno y que, en particular, sustraer del campo {del Derecho las cuestiones que afectan a la vida privada de los Individuos y dejar, por tanto, que cada cual las decida de acuer 2 1 SEXTO BEL DARECHO do con sus propias opiniones morales es toda una conquista ch Ullizatoria, Pues bien, no cabe duda de que esto es asi, pero ello ho afeeta a la tesis que se viene sosteniendo, porque se sitia en tin plano distinto, Es clerto que un sistema juridico no deberta Uisarse como un instrumento mediante el cual un sector social tata de imponer al resto un particular c6digo moral, una de- terminada forma de vida, pero no lo es menos que seria incom Cxbible—y, desde luego, injustificable— un Derecho que no Ssegurara To que suele denominarse un “mfnimo ético”. En ucts sociedades, el Derecho es una condicion para la mo- Tulidad, y buena prueba de ello es que se necesita también det Derecho para asepurar y cuidar de que cada cual pueda vivir Ii ‘bremente de acuerdo con sus opeiones morales. usnaturalismo y positiviemo juridico Ahora bien, si las cosas son ast, lo que fenufta un tanto inexplicable es que se Taya concedido —y se conceda— tanta Importaneia a la coniraposcion entre el tusoatualismo y el postsm jrico que muchas ocr = Teethtan ome las des grandes concepeiones. dl. Derecho Gono haba que entender, en particular la tess positivist de fs coparacon entre el Derecho y la moral? La mayor parte de 1h SBtares postitas no tendian la menor dificaltad en reeo- focer que son ideas morales o de justila las que determinan MRichad veces la aparcion dela norms juricas ols ue le- Tuma un jee a tomar una ora deisién, Tampoco parece te- ver Incoaveniente en aceptar que si el Derecho no respet un "Mine etico, si sus normas se apariandrasticamente de cet tlulpricipios y normas morales de cardcter muy bésico acep- inde soctalmente, entonces resulta sumamente improbable ave Ee soma juraice pueda perdu. Y al menos algunos de Silo poriansuscibi todo la dicho en el anterior apartado sin Ctasierar que tuvieran por ello que moadficar en nada su con ‘SEpcion del Derecho. rth een no eee fs dence contnon mis i rencias que ls de cardcer cuantitativo, Agustin opane la nece- dad de conor amin su jusica's initia: Poss ch ‘ro caso; “sl de os gobierno guitars la justi, gen que se onvierten sino en bandas de ladroncs a gran escala. © sea, yéndose a ejemplos mas actuales, si prescindimos completa- tente de toda referencia ala justica,¢habria que decir que el, mpucsto revolicionrio" de un grap feroristasupone una blgncion (de pagaro) de to juridical igual que él canon Se proteceion” de clrtas organizactoncs mafioesy y debemes considera tambicn como jurideas las normas racists del Sionalsocalismo en Alemania o las medidas represias de St liconta weniger La respuesta que un positivist jurdico dara estos argu- smenton le levara st conciir en parc con el prata dl cemple hay gobleros que efectivamente no se diferencian mucho de Indrones —o cosas peores~a gran escala: , dicho de oa ma ner, el Derecho puede ser injutor “la exstoncin del Derecho escibi6 a comienros del xix Austin— una cosa, st usticla © injuticia, otra’. Pero ex0 no leva necesariamente a admit cue en todos los cemplos anteriores pueda Rablarse de Deve 4 FL SENTNO DEL BERECHO cho. En concreto, un positvista (del siglo xx) podria echar cho. modamente de la nocién de regla de reconocimiento Tuc yamnos es conocida (0 de alguna ofra equivalent) para con- Mique la acci6n del pirata, del grupo terrorista o de la mafia savclan ejemplos de Derecho, sino precisamente de acciones MRnjuridicas,contrarias al Derecho; y ello, no porque nos pe aor disveliosas 0 inmorales, sino porque ninguna de elas uc verse como la aplicacidn o el seguimiento de una norma Fittnda de acuerdo con lo establecido en una regla de reconoci ate (que, recuérdese, existe en la medida en que existe una Desctica social en tal sentido). Por el contrario, en los ejemplos Ae Alemania nazi, o de la dictadura stalinista (0 de tantos ects repsmenesinicuos como ha conocido este siglo y los ante: cae toe posltivstas verian catos de produccién de normas © sees jurdicos, porque abt sf que exiti6 un sistema juridico ‘on au correspondiente regla de reconocimiento Ta teas del cardcter prctico se refiere ala actitud que cabe adopiar frente al Derecho, a si se debe 0 no obedecer el Dere- dhe En el cavo de los autores iusnaturalistas, dado que pars {los hablar de Derecho implica hablar de algo que esté justi cdo (Derecho injusto” vendria a ser,en mayor 0 en menor me~ Gide, una contrediccion), fo que parece seguirse, al menos en ‘rincipio, es el deber de obedeceral Derecho. , vistas las cosas cide otro lado, para justificar la desobediencia a fos manda- tae del poder se necesita mostrar que esos mandatos no consti ayen Derecho 0 verdadero Derecho; que tna cosa es el Dere: TRY postive el establecido —"puesto’— por el poder y otra el Dereho natural, al cual debe acomodarse aquél. Una de la pr paras manifestaciones que conocernos del Derecho natural es Irae aperece en la Antigona de Séfocles (en els. ¥ &.C.), pre sdimente para justificar un acto de desobediencia. ‘El angumento de la tragedia es el siguiente, Creonte, el berano de Tebas, habia prohibido, bajo amenaza de muerte, dar peralturs al cadaver de Polinices,el cual habia muerto stacan. Sar ciudad. Antigona, hermana de Polinices, desobedece et ‘Gdicto, Cuando es descubjerta su accién y levada ante Creonte aaoersia de defenderse negando los hechos de que es acusada © TRegando desconocer la ley. Por el contraro, lo que hace es po- DDERECHO Y MORAL 9 ner encuctn su gma “Bs qu no fe Ze por so mmo dice drialindone'g Create tin do a ‘orden, nl tampoco la Justicia aquélla que es convecina de los dioses del tudo sate. Nom rn clos en hombres tarlyteTunpece spent pe os a procanas mete toca qur tun mpl moval peas baa con ea as Se ain ds anaes toe nig nabs tee vn no etn sige, po lo mls rem le Scie hoy dose jer sno parmaneniemente yen tala cr Sloncyno hay glen Sepa en ut fecha aparece” 1h prs Concapeahateel Deseo Sy ral sau toes hopes ene ue plantar problema dela be tical Decco de ora ner’ melt Echo de ors ma tera Migros sinpements no o lo panean (© a de no planers), pues conderan imposter raconamene tude js eben econ Deco Gm ocho qo abe conta, pero no hay naa Que pda de clive nada Con sentido en felacion a i tenemos o no la Obl tpn (atlenns Hen, clinton moral, no a blacn Sica) ected cae ncrt on Crormalmen est Ccetumbien en mate de moral creen qu lo nies eters jib cae apron bs tS conanen end prenlo Derecho pos: el Derecho debe obec portoe ct Berth, Dado nia eres pa fy chit ofurnus ua pean ea entfeandod Fecho con fr morales post se cacao de poco olive! ods ponte cage ers @ fe pare {Sia mid econ copie ta en coven que es pecesin scr sigura tora stn par resoler un determinado Derecho posit, algun aspect dl tins as noe yen corsecunla, de ono Gabe ser be EME Sartre pn or. on de Sac pode eer caicr anata pce cake pasat {quel esto es lo conforme con la natralera, con los principio Ee theses natural” gu shors wo confermaran Derecho pout, sine lw credos con que ogni fatal {mn concpcn del Derecho (ome tay sobre concep de Bra) tomo concep daha son cas iit 96 1 seNTDO DEL. DERECHO egados a este punto, no estark de més recordar que antes se ena Siena aus las tests postive (y tambien le rab iets) bre las relaciones entre el Derecho y la moral seat caracler conceptual y quias también préctico. Lo tet ica el “quis ex que no parece haber wa necesaria Sed ene sar tamataraisia 0 spots y anne rerio en cera posta respeco ala cuesion desi un de- Pe Gnedo Derecho posi debe ono ser obec, Para mot rare pongo a ecor el sgulenteexperimento mental, qu€ ese ree para repararen las diversas formas en que se oS ser tusnatraista 0 Tuspostvita! Imaginese que es ute ol primer pre one consttuclonal de un pls Que 8e- ove pasar por un experiencia deve esiSheede dctadra itr sumamen- te erunta, durante los cules pobacion vi bao un te crue go tro: Bandas ares yparaitares ash Irene denaparecer miles de ciodadanos, Durante aaron sen lees de anteior perio consttcional cn oe hos res (og dai, no fueron frmalmente ders) Simsaron Bers scan en vigor los articles ds cdigo peal ¥en parilt Fhomlidioy el acinat. Muchos de ex a, ue ate as po fara de ls victimes, pero el SSMS seme esto, Aon deo wes en sao i uc compar I dcloga de a dicta, Fer evel de arias cosas archiaban sin més as open or cen principioparelan dopueston var eran os ach, ean oligos de diversas maneris 2 seEndrse de low con en sgwon pcos suuenos de deen larmente negro, pasarn clos mimos a inte Jeers Pein de os aesinador desaparecids. ce unos meses sar es las eos caeron que es tba a resulta tcl pe "st usted fuera president” 1. Le au sg, con eves moifcactonese eto de aren pe had 2 Se need de Alaa om 03.9 10 ld a re rt on el apenic lo de Lo Fall, mo ralad de Bch Denso ¥ woRAL 7 rmanecer mucho més tiempo en el poder, deidiron convocar Slecciones, pero no sn antes promulgar una ley mediante la tual se amnlstiaban a ellos mismasrespecto alos “exesos” que Posie haben comet en I aha contr To "seen Tn ol primer consejo de minitrs del gobierno de colicin «que une preside, el primer punto del orden del da es: "Desa- Tatecidos y ley de amnista” Como ers de exper la opinion pillica ext ansona por conocer qué medidas adoptaré el nue- Yo gobierno constuciona” al respecto, Durante batantes ho- Tas, los miembros de su gabinete van exponiendo sis varados puntos de vista. En un certo momento, 1 agudeza anal le permite comprobar que, grosso modo, exsten cinco corentes de opin. Antes de tomar una decison, pide que un repesen- tante de cada tna de las cinco posturs resuma brevemente Si punto de vista, El minintro de Hacienda —que encabera el primer sctor— le dice lo siguiente: "A mi me han enschado que l Derecho son las normas que dicta el poder extablecido, con independencia de que el poder se hays! squirdo y se detente por proce tmientos demnoersticos © no. En este sentido Ia ley de amnitia forma ya parte del Deracho de este pal nosotTos no podemnos hacer mds qe actra por repute aue nos rete, Por ‘a parte, ceo que polieamente lo mejor que se puede hacer 3 trata de olvidar Io anes posible esiow aos pasos, Desen- terra el asunto no conduira a nada, como no‘sea a desta lzar nuestra joven y frit democracia” Los ministros democristianos dl gobierno —a través des portavod, el inistro de Educacion— se expresan asl “Conside- aque el Derecho no ex mas que los ditados del poder es on {gave error y una idea profundamente antersiana que nos0- tror no podemos aceplat La docirina eristiana ¥ calles, al menos desde San Agustin, ha demostradofehacientemente que slo son Derecho los mandatos en conformidad con la ey natu ral: en oto caso, no hay més que corrupeiin de la ley, como Vien dijo Santo Tomés. Disiento por tanto de mi colega el mi isto de Hactenday considera que ila ley de aristia es una ley vids ni puede Tncluso hablarse de que ayn existido Dere- 98 seim0 DEL DERECHO cho durante estos timos aos. Sin embargo, estoy de acuerdo che Glargue lo mefor es trata de olvidar cuanto anes fo qe PeeasShdS'cn nusstro qurigo passe inciar una nueva anda- Kenning in era el aad a Santo Toms ee Sagarmente que uns ley ijusta debe sin embargo ser Pere SEF eon ese eta an mal mayor: 2 aus hay de mis Refi que el pen yl caridad? Nucl consejo eps Ste: perdonemony lvidemos” Eira cn cxponer su opin fuse mins de Justicia que uted habia gio para al cargo porque tenfa faa dejo See a pondered (pore el partido de ento habia con {lone allo su apoy al gobiemo). “El que a partir de pre feePSpuestas —eomiena sirmando— se pueda Hegar a la re eicion muciayen mi opinin, qc mis dos queidos marcos que me han preceddo cn el uso de fa palabrs no ‘emia suientrente s juilo. Yo compare las pre- rat. 2tMfon Joaquin referencia al inst de Paucaion— ee act seule en cuanto la conclusions, S€ que oh {Sao re acl bona Homi de en fo que le SE STRRAE Gl poraan ye ido pare los autores de las desapa ee Jaton hee jt, perdona soniidis yc asesinao siempre han sido yserancrimenesexe- vrplet aed eben scr permis en caller pas chviizado se Sedu ley poede anlar, Naturalmente eb eecicio de Ia $5. ge tarbign prudencia, Miter, portant, es que se Ted insmacetone al fiscal general par ques revise tod as case. Geos desaparecdos'y se muvan a alrarcuidadon SURE clas las creunstanla. Se puede, quiz, prdonary ob Tale de qienes ctuaron aalando dene de sus superiors, Yiavcsonulumos no pueden no deben-~ queda sn costo. ’,SGzinancton ncrviene el minis de Trabalo, represen- tanie dela tguleda moderada i tra se ha quedado era del oben) “Lt can props pore miso deol se som janantea la gue yo soy a proponcr aut, per Ende de odo con ella El defect fundamental de a misma, seat pint, es que, por un lado, deja demasiado al abitrio. ‘Elta eens To que provocaré que casos semejanes vayan ate er tuliiones dita y, por ato Todo, puede dar una impr DERECHO Y Monat. * sion de excesiva debilidad de cara ala opinign publica. Yo estoy 4e acuerdo con el ministro de Hacienda en que Derecho son las, ‘norinas respaldadas por el poder del Estado y que tan Derecho fs el de una dictadura como el de una democracia; lo otro, lo del Derecho natural, noes més que puro idealisio. Ahora bien, luna cosa es deci que algo es Derecho y otra muy distinta que, por ello, deba obedecerse. Por otro lado, si los militares tenfan, 1 poder para dictar la ley de amnistia, nosotros —o, mejor, la ‘Asamblea legislativa— tenemos ahora el poder democratico para anularla y dictar otra nueva en su lugar. Mi opinin, por tanto, es que se encargue al ministero de Justicia la redaccion de un proyecto de ley que derogue la ley de autoarnnistiay tip fique expresamente como delitos Ias desapariciones ocurridas durante la dictadura. Por otro lado, no me opongo a que se con sideren como atenuantes el haber actuado ohedeciendo Grdenes de un superior y otras cirounstancias en que quepa pensal, Pero tuna ley, en mi opinién, serviria para elarificar las cosas y para dar credibilidad al nuevo gobierno.” El ltimo crterio en ser expuesto fue el del ministro del in- terior que ers, por otro lado, el tnico en sostener esa opinign Habis as: "Yo no sé mucho de Derecho —4l era, en efecto, uno de los pocos miembros éel ejecutive que no habja frecuentado luna Facultad de Derecho— pero tengo entendido que las leyes =y especialmente las leyes penales~ no deben ser nunca re- troactivas, como alguien ha aclarado en la anterior discusion, La opinion expuesta en ultimo lugar me parece, por tanto, tan susceptible de critica como las otras. Asi es que, si nuestros doctos juristas no han encontrado ninguna soldcién satistacto- tia debe ser, simplemente, porque el caso no tiene solucion por la via legal Lo que propongo, en consecuencia, es que-dejemos, ‘que las cosas se arreglen por la via de hecho. Ya han empezado 'a conocerse casos de “ajustes de cuentas” y es de suponer que rho han de ser los tnicos. Nosotros podemos limitarnos a hacer sencillamente que la policia no entre en estos casos, Se consi- ‘gue as, por un lado, que se haga justicia y, por otro lado, que ef gobierno no se vea directamente implicado en ello.” Cuando el ministro de Interior call, todos miraron hacia el presidente (es decir, hacia usted) esperando sv opinign, 100 ‘a SeNTIDO DEL DERECHO Garectertsticas » tipes de quien se enfrenta con este caso (rela- de fusnaturalismo y de sivamente) imaginario os que las actitu- positivism jurdien 406’ précticas, las propuestas sobre qué {eae lo que ocure ene ejemplo con los que sostenen la tr Songants meeiboreerear Sa ceca hseaien og wpbaw Sema igansram cit er Free tannic tn Seeds matte eet naan Teens ste emcees oe Bit Baa oti thir poe ee ete’ sale coe oars Eyeaopetueman a Sn on cca eT irandes concepciones, para tata de ganar alguna claridad en mice Sod ictus tiseeatanslt ee sired sh ttuege asco Se eencig ident sont i chon rates cae DDERFCHO Y MORAL 101 echo positivo, entendiendo portal los ordenamientos vigentes, en cuanto fenémenos sociales que Varian histéricamente; 2) la talificacion de algo como Derecho es independiente de su jus- {ciao injustiea. ‘Ahora bien, de una y otra concepeién existen versiones francamente distintas. No es lo mismo defender un Derecho na- tural Basado en la religion y que, en tiltimo término, apela a la raz6n ylo ala voluntad de Dios, que uno de tipo secularizado, descubierto exclusivamente por ia razin humana y que —como escribia ya Grocio en el s, XvI— “existirfa aun en Ia hipétesis, (que €l no juzgaba posible) de que Dios no existiese". Bjemplo de lo primero es el iusnaturalismo medieval, el de autores como [Agustin de Hipona o Tomas de Aquino, que lo usan para defen- der el orden feudal, el cual aparece, en definitiva, como una femanacién de Dios: la ley humana deriva de la ley natural, [a cual vendria a ser —en la formulacion de este ultimo "la par- ticipacién de la ley eterna —o sea, el orden de la creacién— en In eriatura racional”. Y de lo segundo, el Derecho natural racio- nalista de la época moderna que defiende la idea de que hay ciertos derechos de los hombres inalienables e imprescripibles, {ue se imponen al legsiador ~al poder politico— porque deri- van de In misma naturaleza humana; Ia valider de las normas juridicas queda condicionada al respeto de esos derechos y, con ello, también la obligacién de obedecer al Derecho positive. ‘Esta contraposicién esta todavia presente en el siglo XX. En su mayor, los jusnaturalistas han tratado de fundamentar el Derecho en la religin (precisamente a través de In idea de un Derecho natural universal e inmutable), pera no han faltedo tampoco autores que, como Fuller, han defendido una idea del Derecho natural que no tiene que ver con la religién y ni si- Aquicra presupone la existencia de un Derecho “superior” al De- echo positiv. El Derecho natural tiene para él un cardcter esencialmente procedimental y viene a identifiearse con lo que llama la “moralidad interna del Derecho". La idea es que para ue exista un ordenamiento juridieo, y no un régimen de mera arbitrariedad, se necesita que se cumplan, al menos hasta cer YW punto, diversos requisites de caricter procedimental: por ejemplo, las normas que integran tn Derecho han de tener ea 02 fx SENMIDO DEL DERECHIO hcter general, deben haber sido promulgadas, no deben ser re, cae ae (deben referirse fundamentalmente al futuro, no a weude), deben resultar elarase iicligbles, no deben ser con- ease gen exigit lo imposible, deben mantener cirta esta~ Eildlad alo largo del tiempo, y deben también ser aplicadas de Fors congruente con su formulacion. Si no se cumplen rink rermmente esas exigencias (como, en su opinién, habrta oeurrido Rants cl mazismo), entonces no puede decirse que hays un durante hl iampaco que exista tina obligacion de obedecerlo ‘Por Io que se refiere alas versiones del positivismo jurtdi «co, Ins don formas principales son quizés el postivismo ideol6- coy el positivism conceptual o metodoléico. La primera es sico J Sidepeiom del Derecho 2 Ia que parecen estar especial: wae nclnados los juristas practicosy los cultivadores de I Trane dogmética juridiea y que, al menos en Ia prctica, Puc seas diedngble de una concepei6n de carécter fusnatura- {ee gue entienda que el Derecho positivo incorpora ls princ: ERS el Derecho natural, Ast, en la Espana franquist la ma Pia de fon profesores de Derecho se consideraban fusnatura- Yota. Reto eco no les llevaba a negar cardeter juridico (por caste al Derecho natural) a ninguna de Tas normas 0 inst PRElones de aquel Derecho: ni al Tribunal de Orden Pablico saemgamos por caso— encargado de elercer [a represién so- Par auisidencia politica, nia las leyes Fundamentales del réxi- area due establesian como bases del mismo principios de waeter hutoritario que supontan la negacion de los derechos hu- Tacos mds elementales. En la época constitucional, sin em Teage som muy pocos los que parecen creer en el Derecho na- RATE? pero, muchos Tos que identifican sin més el Derecho (hora democraticamente establecido) con In justici, incu triendo ast en claro positivism ideol6gico. "El modelo mis influyente de postivismo juridico metodo~ Jogico o eonceptual del siglo 2% se encuentra probablemente en eRe ede Hart A diferencia de Kelsen (el otro gran autor posl- ieee al siglo), Hart no piensa que las normas de un sistema Jvalico puedan tener cualquier contenido, y considera que $e iuteden eatablecer racionalmente unos minimos contenidos de Risticn que toda organizacion social debe incorporar para sr DERECHO Y MORAL, 103 del mundo y de los hombres como ia vlncrabiidad mana, I see iieaea crn neces sion emuncan's dng a aie, soi Dee Shee Secon Lmaecamnee centieas cetacean ridico (0, si se prefiere, su regla i re Qué es lo que queda eat tne dl pra nin, pu eine ae lon bas mse que pera casera ea Se tnd rade copefions del bh, pode ara tatardeaclra ls copa se puede empear por deseatat rer it sneer ens to paren sar ftada, pura ver qué elo ucda aes que queda algo— de cada una de ellas, “ i. ora cron podeinos rescind del El postivisme positivimo ideoldgico y del iusnaturalis- {pela} eo creo (que ambien e eon). El positivista ideol6gico viene a decir como ya sabemos— que el Derecho dee sc bedi simplemente praue es Dre, con oul reduce la justicia al Derecho positivo, al Derecho vigente y, de 108 FL SENDO DEL DERECHO signa forma, detifca el Derecho con la moral: de ahi que se ae rr sae en contradiction y de ser un pseudopost- dee maturataca deolgico parte aparentemente de 18 vita. tet Derecho postivo et Derecho natural pero aistincn ems ern wcrc interesda: para decir 080+ laut Derecho posto ence con el Derecho nai Ser a poco cbedecio. Una prusba de que ess con- ea tee ralidad, teicamente indefendibes ave SEP oom adi) ins sustenta dea manera aierta y deca ra as an araig entre ls jurists (entre os l= rade Sere azones que pueden calfcarse de espuris y B20 Sdn ligadas al eco de due expresiones como "Derecho" See Srila’, atral” legal = pestan es mort ide vehicula un uso persuasivo del lengua ar oe ve anteror hemor vst que Derecho" es una ep Sabina y vasa, Ademas puede afadirse ahora Soe vara de emotividad favorable. En el lenge, eet cnn expesiones neutrals Como, cv eee: 2 to Toncepuoscientficns) y expresiones que sci ue desionan orn de nuevo sitsados en el plano pragmstio erin sea de carder negative o positive, Tene del Nene nogativa terminos como “fast, “dicta”, mega aunque siempre dependiendo del medio “arbtrarilradost no es de descartar que ‘al politico Soa mon.— de ser arbitra desde Ine, a enue a tmbre de honor ser un fascist. Y poseen ofl aun posta otras expresiones como “democrat” on ert Moca" Bn realidad sta carga emotva fv

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