Está en la página 1de 139
BUDO Las ensefianzas del fundador del Aikidé “Movie! Ueshiba es conocido con toda justcia como uno de los mis grandes ats marcas del mundo por haber creado el kid de su nica sberiay desu pron penetracn espinal en a nati- ralera dl universo. lik cs mucho mds que un simple estilo de lucha; «una aproximacinholisica ala vide, que More! deseribié como cana sa dvi inspiada por los doses que conduce ala verdad aa bondad yaa bellza, Por degaca, Moi’ deé poosescritosexplicando su flsofa de ls aces marcas, pues preferiaensefar a sus discpulos mediante el ejemplo direc. Los estudiantes de aikido etn fuiiarizados con ls peliculas y ls foros de Mori, ya anciano,derotando sn esuero a sus muchos mis jovencsadversaros, peo se ha pubicado muy poco sobre su época de anes dela guera, cuando estaba perecionando el aik-udé, como se conoclaentoncs lak, En 1998 Morb exibié Budo (Via Marcia), como manual de asc yd expres del props del xpi de su lool de as artes maces. Budo, sin embargo, no fue nunca aces blealpblco en genera, incluso content f consgna de qu ets te- nica. no deen ser mosradas indisciminadamente al piblco. ‘Ahora, con I popularidad del aiken l mundo, que raza con lds ye ara ola Funda Alka ya failia eshiba han dec dido que «sel momento de que este histrico tratado de ares macia- essa traci del japonsa diferentes idiomas, o que permite aceder 4:4 alls lecroresen general y a os scudiantes de aikido de todo el mundo, Reproduce flmene del orignal esa obra primonial conti ne una dels pocas dearaiones personales del fundador respect asus princpios biscos,expresadas tanto en prosa como en posta mitica, El texto se acompata de fotografia de Morike usrando las ecicas de sikid desc. Este sco de artes marcas va preeddo por un ensayo introduc- toto bigrfico sobre Moi, realizado por su hijo Kisshmaru Ueshiba, actual presidente dela Fundacin Aikikai Este exlareedor trabajo narra los primero afios dl fundadot, su inspirado encuentro cn el misico religioso Onsaburb Deguchi ls revelaciones expirtuales quel condu- jeronadesarolar el arte del aiid El volumen concluye con una serie de fotografia del fundador en acién, mostrando tenicas de aikid6 tomadas en un di privado de ‘Tokyo en 1936, Esa secién también incluyefotograsescogidas de ‘Movihe en 1951. Las mis de 400 forografias istics que aque mucs- tran nos proporcionan una oportunidad ica de observa a dedicaciin de toda una vida al skid yl coberenia que caracteid el enfoque que Mori di a su ae. — BUDO BUDO Las Ensentanzas del Fundador del Aikids Morihei Ueshiba Introduccién de Kisshomaru Ueshiba Titulo original: Budé. Teachings of the Founder of Aikidé ‘Traduccién al castellano: Lucia Pan de Soraluce y José Ramén Blanco (Traduccién cedida por Editorial Eyras) Editado por acuerdo con Kodansha International, Ltd., Tokyo (Japén) © 1991, Morihei Ueshiba De la presente edicién: © DOJO Ediciones, 2006 Alquimia, 6 28933 Méstoles (Madrid) Tel: 91 614 53 46 - Fax: 91 618 40 12 e-mail: contactos@alfaomega.cs ‘www.alfaomega.es Primera edicién: junio de 2007 LS.BN.: 978-84-935400-1-2 Depésito Legal: M. 25.650-2007 Impreso en Espaiia por Artes Grificas COFAS, S.A. - Méstoles (Madrid) Queda prohibida, salvo excepcién prevista en la ley, cualquier forma de reproduccién, distribucién, comu- nicacion piiblica y transformacién de esta obra sin contar con autorizacién de los titulares de propiedad intelectual. La infraccién de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propie- dad intelectual (articulo 270 y siguientes. Codigo Penal). El Centro Espaiiol de Derechos Reprogrificos (wwwcedro.org) vela por el respeto de los citados derechos BI Maestro Ueshiba, en un belisimo documento, realizainvocacionesshinbistas cantando los sonidos de Koto-dama PROLOGO Nunca como hoy, el placer de ser editor ha encontrado mejor ocasién para manifestarse. Dos largas décadas han tenido que transcurrir hasta que este maravilloso documento haya visto la luz. Dos largas décadas han pasado desde que O Sensei Morihei Ueshiba dejara de existir ‘cuando la primavera despuntaba en su retiro de Ayabe. Hoy es un verdadero placer poder presentar de forma pricticamente simulténea la edici6n de este texto en nuestro idioma, asi como la edi- cién francesa, ambas pioneras en cuanto a las traducciones del original editado por Kodansha a mediados del 1991. No hace muchos afios encontrar los texto maestros de las artes mar~ ciales en nuestro idioma no era sino un suefio, Hoy dfa y gracias a la fi- delidad y pasién con que los lectores y practicantes de las artes disci- plinarias han acogido nuestro proyecto editorial, es posible contar con la posibilidad de acceder a una novedad de la categoria del presente li- bro de forma casi simulténea a la de su aparici6n en lengua original Las circunstancias que concurren en el presente texto son especial- ‘mente relevantes dado que O Sensei no lleg6 a organizar la aparicién de ningtin texto, pero sin embargo, y al contrario de lo que algunos pien- san, si dej6 material escrito y series técnicas correctamente elaboradas en Jo que a fotografia se refiere Observaré el lector que la gradiente cualitativa de las fotos es varia- ble. Es fécil comprobar que unas fueron realizadas a un pletérico y ma- duro Ueshiba, mientras que otras reflejan al venerable anciano que esta- ‘mos acostumbrados a encontrar en la mayorfa de los documentos grifi- cos que han sido publicados en diversos medios. De todos los amantes del Aikido es conocida la evolucién que este arte ha desarrollado en su corta existencia, pero pocos son conscientes del impacto que sus principios filoséficos esté ocasionando en el con- junto de los practicantes de artes marciales. El Aikido ha despertado la curiosidad en los més variados dmbitos: Practicantes de todo tipo de estilos leen y asimilan elementos del men saje que el maestro Morihei Ueshiba nos leg6. Hay algo en este mensaje que ha sido capaz. de conectar con los ar~ quetipos, con los lugares comunes y los espacios de inquietud conver- gentes en el espiritu de muchos practicantes y aficionados al estudio de este apasionante mundo del arte marcial. Algo de verdaderamente universal encontraré el lector en las si- guientes paginas, jes quiz un secreto a voces, o la simple reereacién del amor universal como LA ALTERNATIVA? Algo no necesariamente magico ni nungtin objeto de devocién o cul- to, algo tan humano como el propio fundador de este maravilloso arte marcial, el mas moderno y en consecuencia el més actual de los Budo, que puede, debe y corresponde sea considerado, como ya lo es, el tilti- mo de los clsicos. Es un verdadero privilegio el poder ofrecerles esta magnifica traduc: cin del libro de artes marciales cuya edicién posiblemente sea el ma- yor acontecimiento editorial de la década, reafirmando con ello nuestro ‘compromiso de acercar a los lectores de habla hispana «lo mejor» en artes marciales. Alfredo Tucci Madrid - INDICE INTRODUCCION... Kisshomaru Ueshiba BUDO.... Morihei Ueshiba TECNICAS DEL NOMA DOJO.... 75 .. 134 PARTEI INTRODUCCION de Kisshomaru Ueshiba 12 LA VIDA DE MORIHEI UESHIBA Morihei Ueshiba nacié el 14 de Diciembre de 1883 en Tanabe, Pre- fectura de Wakayama. Era el cuarto hijo y el tinico varén de Yoroku Ueshiba, un granjero acomodado duefio de dos hectéreas (cerca de cin- co acres) de la mejor tierra, Su padre era un miembro muy respetado de la comunidad local que habfa servido en el consejo municipal durante veinte afios, mientras que su madre, Yuki Itokawa, procedia de una fa- milia terrateniente de ascendencia noble. Cuando tenia unos siete afios, Morihei fue enviado a Jizodera, un templo Budista cercano, de la secta Shingon, para estudiar a los clisicos del Confucianismo y las escrituras Budistas. Se entusiasmé con las his- torias milagrosas que se contaban del santo Budista Kob0 Daishi, y co- ‘menz6 a tener suefios recurrentes, tendencia que preocups algo a su pa- dre. Yoroku, por lo tanto, le animé a realizar actividades mis fisicas y le enseiié sumo y natacién, Morihei se gradu en la Escuela Elemental Superior de Tanabe y fue admitido a la edad de trece afios en la recién establecida Escuela Media de la Prefectura de Tanabe. Sin embargo, abandon6 la escuela media an- tes de graduarse para cambiarse al Instituto Yoshida Abacus. Cuando obtuvo el correspondiente diploma comenz6 a trabajar en la Oficina de Impuestos de Tanabe, entre cuyas funciones se inclufa la tasacién de los valores de la tierra En 1902, Morihei dimitié de la oficina de impuestos tras unirse a un movimiento popular en contra de la nueva legislacisn de pesca, y se fue a Tokyo con la intencién de comenzar de nuevo, esta vez como empre- sario. Durante algtin tiempo trabajé como empleado interino en el dis- trito comercial de Nihombashi, antes de instalar su propia compaiiia de articulos de escritorio y material escolar, el Almacén Ueshiba. Es més, fue durante esta primera estancia en Tokyo cuando Morihei comenz6 su estudio de las artes marciales, aprendiendo jajutsu y kenjutsu tradicio- nales. Sin embargo, mas tarde, en ese mismo afio, enfermé de beri-beri y se vio forzado a abandonar Tokyo. Al poco de su vuelta a Tanabe se cas6 con Hatsu Ttokawa (nacida en 1881), a la que conocia desde su ni fez. En 1903, Morihei se alisté en el 37° regimiento de la Cuarta Di sién en Osaka, donde le pusieron el apodo de “Rey de los soldados” por su habilidad con la bayoneta y su cardcter honesto y trabajador. Al flo siguiente, cuando estallé 1a Guerra Ruso-Japonesa, fue enviado al frente como cabo y volvié ascendido al grado de sargento por su valor en el servicio. Durante la vida militar, en sus ratos libres, Morihei conti- nuaba con su interés en las artes marciales, asistiendo al dajo de Masa- Katsu Nakai en Sakai, donde aprendié las técnicas de la escuela Goto Yagyu-ryit jutsu. En 1907 Morihei se licencié del ejército y volvié a Tanabe, donde ‘rabajé en la granja familiar y participé de la politica del pueblo, convi tigndose en el I{der localde la Asociacién de Jévenes. Durante este perfodo su padre contraté al judoka Kiyoichi Takagi, ‘que estaba de visita en Tanabe, para enseftar a Morihei, y convirtié el ‘granero familiar en un dojo. Aqui fue donde Morihei aprendié el estilo de judo del Kodokan. También continué asistiendo al Nakai Dojo y re- cibié un certificado de la escuela Goto. Morihei permanecié en Tanabe los tres afios siguientes, teniendo que ver con numerosas actividades locales. En 1910 (aflo en que nacié su hija mayor, Matsuko), Morihei se interes6 en un plan gubernamental de colonizacién de la isla del norte, Hokkaido. Decidié formar un grupo de colonos y pidi6 voluntarios entre la Asociacién local de J6venes. Se convirtié en el lider del grupo Kishi, compuesto por cincuenta y cuatro familias (mas de ochenta personas), y en Marzo de 1912 abandonaron Tanabe en direccién a Hokkaido. Llegaron en Mayo y se establecieron en Shirataki, cerca del pueblo de Yobetsu, lugar que habfa elegido Mo- rihei en un viaje anterior. Esta zona, donde todavia hoy dfa existe el pueblo de Shirataki, era entonces un erial, y los colonizadores tuvieron que luchar contra el cli- ma inclemente y las pobres condiciones de la tierra para conseguir culti- var, Sin embargo, eventualmente, el grupo de Kish consiguié iniciar una serie de proyectos, inclufdo el cultivo de menta, la crfa de caballos Y una granja lechera, asf como el establecimiento de los inicios de una industria maderera. Morihei hizo todo lo que pudo para asegurar el éxi to de la aventura, inicié varios proyectos, entre ellos la construccién de una calle comercial en Shirataki, la mejora de las condiciones de alo- Jamiento, y la fundaci6n de una escuela primaria. Fue durante su perio- do en Hokkaido cuando Morihei, en una posada de Engaru, conocié a Sokaku Takeda, el famoso maestro de la Daito-ryia. Posteriormente, en- ‘ren6 intensivamente con Takeda y consiguié el cettificado de la Daito- yi jujutsu. Debido a la expansién de Ia industria maderera, Shirataki empez6 pronto a convertirse en un pueblo floreciente. Pero el 23 de Mayo de 1917, el pueblo se destruy6 por completo debido a un incendio. La pri- mavera siguiente, Morihei, que habia sido elegido miembro del consejo del pueblo, se dedicé por completo a la reconstruccién de Shirataki. En Julio de ese mismo afio nacié su primer varén, Takemori. ‘A mediados de Noviembre de 1919, Morihei se asust6 al recibir la noticia de que su padre estaba seriamente enfermo. Abandoné Hokkai- do para dirigirse a Tanabe, cerrando el perfodo de ocho aftos en Shirata- ki. En su viaje de regreso, Morihei oy6 que el Ifder de la floreciente y nueva religién Omoto-kyo, Onisaburd Deguchi, famoso por sus técnicas de meditacién chinkon kishin (calma del espititu y retorno a lo divino), estaba viviendo en la cercana Ayabe. Morihei decidié visitarle, y per- manecié en Ayabe hasta el 28 de Diciembre. Pidié a Onisaburo que re- 13 zara por su padre, a lo que Onisabur® contest6: “Tu padre esté bien co- mo esti”. Estas palabras hicieron honda impresién en Morihei. Yoroku Ueshiba murié el 2 de Enero de 1920, a la edad de 76 afos. ‘Su muerte fue un duro golpe para Morihei, quien, tras un perfodo de inestabilidad emocional, decidié trasladarse a Ayabe en busca de una vi da mas espiritual bajo la direccién de Onisaburo Deguchi. Obtuvo una casa detras de la escuela primaria, dentro del recinto sagrado de la ‘Omoto-kyo, y alli vivi6 ocho affos hasta su traslado a Tokyo en 1928, Durante este perfodo goz6 de la absoluta confianza de la secta y to- m6 parte en diversas pricticas espirituales de la misma. También, ani- mado por Onisaburo, Morihei convirtié parte de su casa en un dojo de dieciocho tatami, y abrié la Academia Ueshiba, donde ensefiaba cursos introductorios en las artes marciales, principalmente a seguidores de la Omoto-kyo. Por desgracia, el primer afio de estancia de Morihei en ‘Ayabe se vio marcado por otras tragedias personales: perdi6 a sus dos hijos varones, victimas de una enfermedad; Takemori murié en Agosto con tres afios de edad, y en Septiembre murié su segundo hijo, Kuniha- 1u, con un afio, Al afio siguiente del traslado de Morihei a Ayabe, la instruccién que se ofrecia en la Academia Ueshiba empez6 gradualmente a aumentar en extensién y en profundidad, y comenz6 a correr la voz de que habja un maestro excepcional de artes marciales viviendo en Ayabe. El nimero de personas no seguidores de la Omoto-kyo que se apuntaba a la Acade- mia Ueshiba empez6 a crecer, e iban a entrenar allf muchos marinos de la cercana base naval de Maizuru, El II de Febrero de 1921, sin previo aviso, las autoridades cayeron Morihei, a 1a edad de treinta y ocho aos, delante de su primer dojo. En 1920, Morihei y su familia se trasladaron a la sede central de la Omoto-kyo, en Aya- be (cerca de Kyoto). Allf se establecié la Academia Ueshiba, donde Morihei censefiaba Daito-ryiraiki-jujuisu a los seguidores de la Omoto kyo. Morihei (en el centro) trabajando en la huerta orgdnica de la sede central de la Omoto-ky0, Durante toda su vida Morihei fue un apasionado de la agricultura. ‘Crefa que haba una afinidad especial entre el bdo y Ia agricultura, dos activi- ddades que nutrian la vida y estimulaban una forma de vivir limpia y pensa- mientos elevados. sobre la secta, 1o que més tarde fue conocido como el Primer Incidente Omot6, y varias personas, incluido Onisaburo, fueron arrestadas. Afor- tunadamente, el incidente no afect6 a la Academia Ueshiba. Mil nove- cientos veintiuno fue también el afio en el que nact lo largo de los dos afios siguientes Morihei intenté ayudar a Oni- sabur6, que habfa sido liberado bajo fianza, a reconstruir la Omoto-kyo. Se hizo cargo de la administracién de cerca de novecientas tsubo de tie- ra de Tennodaira, trabajéndola a la vez que continuaba ensefiando en la Academia Ueshiba. Asf podfa realizar en su vida diaria la creencia de que hay una unidad esencial entre las artes marciales y la agricultura, algo que estaba muy cerca de su coraz6n y que fue un tema recurrente a Jo largo de su vida. En torno a esta época la préctica de Morihei de las artes marciales comenz6 gradualmente a adquirir un cardcter espiritual, viéndose cada vez. més absorbido por el estudio del kotodama, lo que le condujo poco ‘a poco a romper con las formas de la Yagyt-rywy de la Daito-ryu jujut- su, y a desarrollar su propio enfoque original, utilizando unificadamente los principios aplicados y la técnica para romper las barreras entre la ‘mente, el espiritu y el cuerpo. Esta concepcién fue Hamada formalmente en 1922 “aiki-bujutsu”, pero se dio a conocer al piblico en general co- mo Ueshiba-ryu aiki-bujutsu. En 1924 Morihei se embarcé en una aventura que result6 ser crucial para su desarrollo espiritual. El 13 de Febrero se fue en secreto de Ayabe con Onisaburo en direccién a Man- churia y a Mongolia, en busca de una tierra sagrada donde poder esta- blecer un nuevo gobierno mundial basado en preceptos religiosos. El 15 16 dia 15 llegaron a Mukden, donde se encontraron con Lu Chang K’uei, tun famoso sefior de la guerra Manchur. Junto con Lu, condujeron al Fjército Auténomo del Noroeste (también conocido como el Ejército de la Independencia de Mongolia), al interior del pafs. Morihei recibié el nombre chino de Wang Shou Kao. Sin embargo, su expedicién fue de- safortunada; cayeron victimas de un complot organizado por otro seflor de ta guerra, Chang Tso Lin, y el 20 de Junio, cuando llegaron a Baian Dalai, se encontraron con tropas chinas esperdndoles para arrestarles. Morihei, Onisaburo y cuatro més fueron sentenciados a muerte. Afortu- nadamente, justo antes de que les fueran a ajusticiar, un miembro del personal consular japonés intervino y consiguié su liberacién y su retor- no a Japén. Morihei intent6 reanudar su vida anterior de unificacién de las artes marciales y de la agricultura, ensefiando en la Academia Ueshiba y en la granja Tennodaira. También se interes6 en sojutsu (técnica de la lan- za) y continué con la practica intensiva del arte del sable y del jijutsu. Sin embargo, las cosas ya no eran igual. Le habfa afectado profunda- mente la expedicién a Manchuria y Mongolia, en particular las expe- Fiencias de enfrentarse a la muerte ante los disparos, y haba descubierto ‘que podia ver fogonazos de luz que indicaban el camino de las balas. El descubrimiento de este sentido intuitivo fue una experiencia profunda para Morihei, y a su vuelta a Japén se encontré frecuentemente en situa- cciones en las que sentia manifestaciones de una fuerza espiritual. En a primavera de 1925, Morihei conocié a un oficial naval maestro de kendo. Acepté el reto del oficial y le vencié sin legar a luchar, por- En 1924, Morihei acompaiié a Onisaburo Deguchi en la Gran Aventura de Mongolia. Onisaburd y su grupo, con la intencién de crear en Mongolia un “cielo en la tierra”, consiguieron llegar hasta la frontera de ese remoto tertto- rio sélo para ser arrestados por un sefior de la guerra chino y estar a punto de set ejecutados. Esta fotograffa muestra al grupo con grilletes en los pies poco antes de sr Iiberados bajo lt eusodi del consul japones en a lead. Mo- rihei, tercero por la izquierda y de pie al lado de rentemente esposado. isaburo, estd también apa- EI fundador durante una peregrinaci6n a las eas- cadas sagradas Nachi, en Kumano. Morihei se vio profundamente afectado por la cantidad de encuentros que tuvo con la muerte durante la Gran Aventura de Mongolia, y a su vuelta a Ja- pén intensifies su buisqueda del verdadero signi: ficado del bude. Con frecuencia se reclufa en las montatias para dedicarse a disciplinas ascSticas, ‘como muestra esta foto, experimentando a Ia edad de cuarenta y dos afios una profunda ilum nacién que le hizo invencible como artista mar cial Morihei y Onisabur6 rodeados por un grupo de seguidores de la Omoto-kyo. Extraordinariamen te dotados y enormemente excéntricos, Morihei yy Onisaburo fueron dos de los mayores visiona- ios de todos los tiempos. que podia sentir la direccién en que irfan los ataques antes de que el sa~ ble de madera del oficial le pudiera golpear. Inmediatamente después de este encuentro se fue a lavar a un pozo, donde experiment6 una comple- ta serenidad de cuerpo y de espiritu. De repente se sintié bafiado de una luz dorada que descendia del cielo. Era una experiencia tinica para él, una revelacién, y se sintié renacer, como si su cuerpo y su espiritu se hubieran vuelto de oro. En ese momento supo que el universo y él mis- mo formaban una misma unidad, y Heg6 a entender, uno por uno, los principios filos6ficos en los que se basa el aikido. Fue también entonces 18 cuando comprendié que era més adecuado Hamar a su obra aiki-budo que aiki-bujutsu, (La sustituci6n del carécter jutsu por el carécter do cambia el significado de arte marcial del aiki a via marcial del aiki.) Cuando el Aiki-budo se hizo més conocido atrajo a un niimero de se- guidores distinguidos, entre ellos al Almirante Isamu Takeshita. En el otofio de 1925, Morihei fue invitado a visitar al almirante en Tokyo. Se alojé en la residencia de! antiguo Primer Ministro Gombei Yamamoto, donde realiz6 demostraciones de artes marciales ante un mimero de dig- natarios, que quedaron muy impresionados. Morihei también estuvo veintitin dfas ensefiando artes marciales en el Palacio del Principe de la Corona. En la primavera de 1926 volvi6 a ir a Tokyo tras la invitacién del Al- mirante Takeshita. Ensefié en la Corte Imperial y en el Ministerio de la Casa Imperial, asi como al personal del ejército y de la marina y a gente relacionada con el mundo de las finanzas. La estancia de Morihei en Tokyo fue algo prolongada, pero en verano cay6 enfermo con desérde- nes intestinales y se vio forzado a volver a Ayabe a descansar. En Febrero de 1927, habiendo recibido una nueva invitaci6n del Al- mirante Takeshita, Morihei sintié que no tenfa més remedio que dejar Ayabe por tercera vez. Con la bendicién de Onisaburo, decidié trasla- darse permanentemente y dedicar sus energfas tinicamente a establecer- se en Tokyo como maestro de artes marciales. Después de dos afios en alojamientos provisionales, Morihei se tras- lad6 a una casa cerca del templo Sengaku, en Kuruma-cho, donde con- virti6 dos habitaciones de ocho tatami en un dojo. Entre sus alumnos se encontraban Isamu Fujita, Shoyo Matsui, Kaizan Nakazato y el actor de kabuki Kikugoro Ennosuke VI. En 1930 Morihei consiguié una villa en Ushigome, Wakamatsu-cho, y comenzé la construccién de un nuevo dojo, Mientras se estaba reali- zando el trabajo dispuso de un djo temporal en Mejirodai, y fue alli, en Octubre de 1930, donde recibis Ia visita de Figord Kano, el fundador del judo'y cabeza del Kdokan. A Kano le impresioné mucho la técnica de Morihei y le alabé diciendo: “Este es mi buda ideal”. Posteriormente, Kano envi6 a dos de sus alumnos, Jiro Takeda y Minoru Mochikuzi, pa- ra que entrenaran con Morihei. Otra visita memorable en 1930 fue 1a del General de Division Mako- to Miura, que se mostraba escéptico ante el nuevo biido y visit6 el dojo con el tinico fin de vencer a Morihei. Sin embargo, el fundador resolvié tan claramente las dudas de Miura, que éste se apunt6 como alumno en el acto. Posteriormente, a peticién de este mismo general, Morihei se convirtié en instructor de la Academia Militar Toyama, En Abril de 1931 finaliz6 la construccién de un dojo de aiki-budo de un total de ochenta tatami, conocido como el Kobukan, en Wakamatsu- cho, en el mismo lugar donde esti hoy en dia el dojo central. Se apunta- ron muchos alumnos, entre ellos Hisao Kamata, Hajime Iwata, Kaoru Funabashi, Tsutomu Yugawa y Rinjiro Shirata, y durante los diez afios siguientes el aiki-budo experiments su primera época dorada. En esa €poca el Kobukan era conocido como el “dojo del infierno”, por el en- frenamiento tan extraordinariamente intenso que se practicaba allt Los afios siguientes fueron muy activos para Morihei, ya que no s6lo ensefiaba en el Kobukan, sino en muchos otros ddjo que se habfan esta- blecido en Tokyo y en Osaka. Los dojo principales eran el Otsuka Do- jo.en Koishikawa (patrocinado por Seiji Noma, el presidente de Ko- dansha), el Fujimi-cho Dojo, en Idabashi, y el Sonezaki Dojo, el Suida Dojo y el Chausuyama Dojo, en Osaka. Uchi-deshi (alumnos que vivian en el dojo) notables de esta época eran Shigemi Yonekawa, Zenzaburé Akazawa, Goz0 Shioda y Tetsumi Hoshi. Morihei también ensefiaba en cuarteles de policfa en el rea de Osa- Ks por recomendacién de uno de sus seguidores, Kenji Tomita, jefe de policfa de la prefectura de Osaka, y posteriormente gobernador de la Prefectura de Nagano y secretario del Gobierno. Ademés, se dedicaba cada vez mas a dar clases en el Periédico Asahi, en Osaka, y, a través del Club Industrial de Japén, tuvo ocasién de ensefiar a gente del mundo financiero. En 1932 se fundé la Sociedad Japonesa para la Promocién de las Artes Marciales, y en 1933 Morihei se convirtié en su presidente. En Mayo de 1933 se creé una sala de entrenamiento, llamada Take- da Dojo, en la Prefectura de Hyogo. Docenas de estudiantes fueron a vi- ‘ir alli, poniendo en préctica el ideal del fundador de unir las artes mar- ciales y la agricultura. Morihei con el primer grupo de discipulos internos del Kobukan, El Kobukan, abierto en 1931 en Tokyo, atrajo a valiosos j6venes practicantes de todo el pais. Aunque aqui no aparezcan, también hubo algunas chicas sobresalientes en Jos primeros tiempos del Kobukan. 19 Re ara mediados de los afios treinta, Morihei se habfa hecho famoso en el mundo de las artes marciales. Incluso més que por su dominio de las diversas artes marciales tradicionales japonesas, Iamé la atencién del Piiblico por la naturaleza, que mareé una época, de su propia creacién original, “la uniGn del espfritu, de la mente y del cuerpo” en el aii, lla- mada formalmente aiki-budo. Durante este periodo Morihei practicaba kendd intensivamente en el Kobukan Dojo, y una serie de practicantes de kendo frecuentaban el dojo, como Kiyoshi Nakakura, que posterior- mente, en 1932, se convertiria en yerno de Morihei. En Septiembre de 1939, Morihei fue invitado a Manchuria para asis tir a una exibicién piblica de artes marciales. Alli luch6 con el ex lu- chador de sumo Tenryu y le inmoviliz6 con un sélo dedo. Morihei con- tinué con sus visitas a Manchuria incluso después de que estallara la Guerra del Pacifico, aceptando puestos de asesor en diversas institucio- nes, entre ellas la Universidad Kenkoku, con la que se comprometié de manera particular. Su tltima visita a Manchuria fue en 1942, cuando asisti6 a la celebracién del décimo aniversario de la fundacién del esta- do de Manchukuo, patrocinado por Japén, invitado por la Asociacién de las Grandes Artes Marciales, y donde realiz6 una demostracién ante el Emperador Pu'Yi E130 de Abril de 1940, el Ministerio de Salud y Bienestar concedi6 al Kobukan el estatus de Fundacién. El primer presidente de la funda- cidn fue el Almirante Isamu Takeshita. Ese mismo afio, la academia de policfa donde Morihei enseiiaba adopts el aiki-budo como asignatura obligatoria. Morihei cuando tenia poco més de cincuenta afios. Por esta época se le conocfa por todo el pais como el mayor artista marcial del Japén, Morihei con Kiyoshi Nakakura, hacia 1933. Nakakura, s@2e fue durante un breve periodo de tiempo yerno de Mo Shei, era fundamentalmente un practicante del sable. Des- fats de dejar el Kobukan, Nakakura se convirtié en el Hendoka més importante del Japén moderno. Ain hoy, Gon cerca de ochenta afios, todavia sigue compitiendo. Morihei en 1940, a la edad de cincuenta y siete afios, fotografiado durante una visita a Manchu- ria, Con el estallido de la Guerra del Pacifico, los alumnos del dojo de Tokyo fueron yéndose uno tras otro al frente. Yo era entonces alumno & segunda ensefianza de la Universidad de Waseda, y me dieron la res- ponsabilidad de mantener el dojo-junto a Kisaburo Ozawa y a otros j6- ‘yenes alumnos de Aikido. También en 1941, el aiki-budd fue incorporado al Butokukai (una Serporacién gubernamental que reunfa todas las artes marciales en una ‘Sela organizacién). Morihei nombré a Minoru Hirai como representante } director de la Seccién Aiki del Butokukai, Fue en torno a esta época zando se empez6 a utilizar por primera vez el nombre de aikido. ‘Como reaccién a la naturaleza provisional de las nuevas medidas, leva- ‘des a cabo en época de emergencia, por las que el aikido se vio reduci- ‘Go a una seccién del Butokukai, y con el fin de conservar para las gene- ‘aciones futuras el espfritu del budo que habia creado, Morihei restable- ‘S36 las bases organizativas del aikido en la Prefectura de Ibaragi. Dején- 22 dome al cargo del dojo’ en Wakamatsu-cho, Morihei se traslad6 con su mujer a Iwama, donde vivi6 frugalmente en una granja arreglada hasta después de finalizada la guerra. En Iwama, Morihei comenz6 la construcci6n de lo que lamaba el ubuya (habitacién de nacimiento), 0 santuario interior del aikido: un complejo que inclufa el Santuario Aiki y un dojo al aire libre. El interior del Santuario Aiki, con exquisitas tallas, se termind en 1944; el Dojo Aiki, ahora conocido como el Dojo Ibaragi Anexo del Santuario Aiki, se termin6 en 1945, justo antes de que terminara la guerra. En el Santuario Aiki estén entronizadas cuarenta y tres divinidades guardianas del aikido. El propio Morihei hizo los planos de los recintos del santuario segiin los principios del korodama. Por ejemplo, el edificio principal, la sala de oracién, el torii, y el trazado en sf siguen la ley de los tres principios universales, es decir, el triéngulo, el circulo y el cua- drado, que simbolizan ejercicios respiratorios en el estudio del kotoda- En los primeros momentos dela I Guerra Mundial, jefe militares y Primers ministos buscaban clconsejo de Moriel, pero pronto la matanza I hizo enfermarlisica ¥ emocionslmente. En 1942, ‘epentinamente, More! dimits de todos sus puesto aiciales y se relit6 cons mujer a una pe {uefa cabata en los bosques de Ivara en la Pefactora de Iba (aera). Al Se dedicaba a Tagricutura y lew a cabo Tos preparivios par la sonstucei del Santuaro Aiki (esha), En 1942, durante el mas oscuro perfodo dela historia humana, Marth sini a necesidad de dara su sistea el nombre de aikido, La Via de la Armonia y del Amor». ma. “Cuando el tridngulo, el efrculo y el cuadrado se unen en rotacién esférica, resulta un estado de claridad perfecta. Esta es la base del aiki- do”, explicaba Morihei, A lo largo de la guerra luché por conservar el Dojo Kobukan, a pesar de que la situacién empeoraba cada vez mas y a pesar de los bombar- deos masivos de Tokyo por parte de la Fuerza Aérea de los EE.UU. El doja'sali6 indemne, pero después de la guerra fue utilizado como refu- gio por més de treinta familias sin hogar, siendo imposible continuar Ja prictica. Por tanto se trasladé la sede central del aikido a donde Morihei continuaba viviendo plécidamente, trabajando la {F ensefiando a j6venes de los alrededores. és de la guerra, las artes marciales fueron en declive por un p. y el futuro del aikido también peligré. Morihei, sin embargo, te- en el nuevo aikido, y trabajamos muy duro juntos para establecer en el Japén de la postguerra. Cuando parecié que la confusién alecfa justo después de terminada la guerra habfa disminuido ‘se decidié trasladar la sede central del aikido otra vez. a Tokyo. El 10 de 1948, el Ministerio de Educacién concedié permiso pa- tablecer el Aikikai. Durante esa época el dajo principal de Tokyo establecerse el Aikikai, recay6 sobre mf la responsabilidad de ar la organizaciGn existente y planificar su desarrollo futuro. tanto, Morihei permanecfa en Iwama, dedicado a la contem- y ala practica de las artes marciales 1950 en adelante, Morihei comenz6 de nuevo a viajar por el respondiendo a invitaciones para ensefiar, dando conferencias y endo demostraciones. Cuando alcanz6 los setenta afios de edad, la ffica técnica de Morihei surgéa cada vez con més fluidez de ta dad de su espfritu, en contraste con la fiereza y la fuerza fisica eteristicas de sus primeros afios, poniendo un mayor énfasis en la Morihei rezando por la paz del mundo durante una ceremonia de celebracién el aio nuevo. Morihei era descrito a menudo como la persona mas religiosa el Japon. En sus iltimos afios dedicé gran parte de su tiempo al estudio, a la ‘oracion y a la meditacién, Morihei a la edad de sesenta y ocho atios, posando (izquier- da) para un retrato aleg6rico que le representa como tina Uivinidad Shinto (derecha). un musculoso espiritu guardian Shinto en posesin de los tres tesoros sagrados: la espada pacificadora, el es- pejo de la iluminacién y la joya de la perfeccién (el abultado vientre), 24 (derecha), Se le muestra como naturaleza amorosa del aikid®. (El primer cardcter de aikido, “ai”, que significa armonfa, se lee de la misma manera que el carsicter que signifi- ca amor. En sus iltimos afios, Morihei acentuaba la equivalencia de es- tos dos significados.) En 1954 se traslad6 la sede central del aikido a Tokyo, y el dojo de Tokyo adopts el titulo oficial de Fundacién Aikikai: El Hombu Dojo de Aikido. En Septiembre de 1956, el Aikikai celebré la primera demostra- cin ptblica de artes marciales desde que terminara la guerra, en el sti- co de los almacenes Takashimaya, en Nihombashi, Tokyo. La demostra- cién dur cinco dfas y caus6 gran impresién en los dignatarios extranje- ros presentes. Morihei se habfa opuesto inflexiblemente a este tipo de demostraciones, pero comprendié que Japén habia comenzado una nue- va era y consintié a fin de desarrollar el aikido. Cuando el aikido se fue estableciendo en la conciencia popular, au- ‘ment6 rpidamente el mtimero de alumnos de todas partes del mundo, En el propio Japén se abrieron nuevos doj0'a lo largo de todo el pais, y el aikido se extendié a las universidades, a las oficinas gubernamenta- les y a las empresas, anunciando una segunda época dorada. ‘A medida que Morihei se iba haciendo mayor, tomaba un papel menos activo en la direccién del Aikikai, dejéndome a mf al cargo de Ia ins- 6a en el Hombu Dajé. Sin embargo, continuaba haciendo demos- es, y, en Enero de 1960, la NTV emitié “El Maestro del Aikido”, sama que filmaba las técnicas del fundador. 14 de Mayo de 1960, el Aikikai patrociné una demostracién de en Shinjuku, Tokyo. En aquella ocasién Morihei caus6 honda esidn en la audiencia con una demostracién titulada “La Esencia sc fs tarde, ese mismo aifo, Morihei recibié de manos del Emperador ito, junto con Yosaburo Uno, décimo dan de kyudé, la Condecora- Shijuhosho. S6lo tres personas del mundo de las artes marciales n recibido esta condecoracién antes: el maestro de judd Kyizo Mi- ¥ los maestros de kendo Kinnosuke Ogawa y Seiji Mochida. 28 de Febrero de 1961 Morihei fue a tos Estados Unidos, invitado ta, el fundador hizo la siguien- venido a Hawaii para construir un‘puente de plata”. Hasta ahora permanecido en Japén construyendo un “puente de oro” para unir "2 Japén, pero de ahora en adelante deseo construir un puente para ‘enir a los diferentes paises del mundo a través de ta armonfa y del mor contenidos en el aikido, Pienso que el aiki, fruto de las artes ‘marciales, puede unir a las gentes del mundo en armonfa, en el ver- sdadero espiritu del budo, envolviendo al mundo en un amor inaltera- ble. E17 de Agosto de 1962 tuvo lugar un gran festival en el Santuario Morihei a los setenta affos, entrenando en una cascada con su hijo Kisshomaru. A To largo de su carrera Morihel estuvo constantemente per- feccionando y expandiendo su arte. “Este an ciano todavia tiene que entrenar y entrenar”, dijo poco antes de su muerte 25 ‘Aqui Morihei ejecuta una proyecciGn: “El Aikido es el principio de la no- resistencia”, practicante de artes marciales, y en 1964 recibi6 una condecoracién es- pecial del Emperador Hirohito en reconocimiento a su contribucién a las artes marciales. El 14 de Marzo de 1967 se Ilevé a cabo la ceremo- nia de iniciacién de los trabajos para la construcci6n del nuevo Hombu Dajo en Tokyo. Ese mismo dia, Morihei realiz6 en Iwama el primer ara- do ceremonial del Afio Nuevo. El 15 de diciembre de ese aio se termi- 1n6 el nuevo déjé, un moderno edificio de hormigén de tres pisos. Una de las habitaciones era utilizada por el fundador como estudio y dormi- torio, y ahora es conocida como Habitacién de Objetos del Fundador. El 12 de Enero de 1968 se llev6 a cabo una ceremonia conmemorati- va para celebrar la terminacién del nuevo Hombu Dojo, y Morihei ha- bI6 sobre Ia esencia de la técnica del aikido. Mis tarde, durante ese afio, Morihei realiz6 la que seria su gltima demostracién de aikido en el Ko- kaido, en Hibiya, para conmemorar la terminacién del nuevo edificio. E115 de Enero de 1969, Moritei asisti6 en el Hombu Dojo a las ce- lebraciones del Afio Nuevo. Aunque parecfa gozar de buena salud, su condicién fisica se deterior6 répidamente y murié plécidamente el 26 de Abril de 1969, a las 5 de la tarde, El 1 de Mayo, a partir de las 7:10 de la tarde, se celebr6 una vigilia en el Hombu Dojo, y ese mismo dia el Emperador Hirohito le concedié una condecoracién péstuma, Sus ceni- zas fueron enterradas en el templo de la familia Ueshiba en el cemente- rio de Tanabe, y se guardaron mechones del cabello del fundador en el | Aiki de Iwama para celebrar el sesenta aniversario de Morihei como 26 rio Aiki de Iwama, en el cementerio de la familia Ueshiba en y en el Gran Santuario Kumano, El 14 de Junio de 1970, Kisshomaru Ueshiba fue elegido para suce- Se su padre como Aiki Doshu por decisién undnime del Aikikai. Morihei demostrando ai-no-henka, cam- biando de posicién de manera dindmica s gin las circunstancias. El penetrante kiai de Morihei podfa ofrse a media milla de distancia Morihei, anciano: “El Aikido es la ma- nifestacién del amor.” Retrato de Morihei muerto. Fl fundador del aikido volvid a la Fuente el 26 de Abril de 1969, a los ochenta y seis afios de edad, a7 Morihei con el sable aiki, que “nos da poder para cortar y destruir todo mal y pacificar el mundo”. 28 PARTE II BUDO por Morihei Ueshiba 30 Prélogo del Traductor Budo fue publicado y distribuido privadamente en 1938, cuando Mo- rihei tenia cincuenta y cinco afos y estaba en plenitud fisica y mental. Este es el tinico manual de instruccién en el que el propio Morihei pos6 para las fotos que ilustran las técnicas, y contiene una de las pocas ex- plicaciones inteligibles de su filosofia. ‘A pesar de haber sido confeccionado hace més de cincuenta ais, en una época muy diferente, Budd, como todos los eldsicos autémticos, posee una cualidad intemporal. Aparte de algunas referencias usuales al viejo orden imperial y de cierto arcatsmo lingiitstico, se puede decir que el texto no estd sujeto a fecha. El mensaje de Morihei de que el bu- do es una via espiritual que conduce a la iluminacién, a la paz, a la ar- monta, a la verdad, a la bondad y a la belleza, se ha mantenido cons- tante a lo largo de los afos. La formulacién en 1942 del sistema madu- ro del aikido estaba basada en los principios y en las téenicas enuncia- das en Budd. El texto en sf mismo es conciso y criptico, como es costumbre en este tipo de manuales, y da también por hecho que las enseftanzas que pre- senta serdn aumentadas por medio de explicaciones orales por parte de instructores cualificados. La traduccién es todo Io literal que ha sido posible, siguiendo el mismo orden original del libro, que estaba hecho un poco al azar. Las ilustraciones que no estaban en su sitio han sido colocadas en el orden correcto, y también se han corregido los errores en los pies de fo- to de las ilustraciones. John Stevens ‘es una via divina, establecida por los dioses, que conduce a la Ja bondad y a la belleza; es un camino espiritual que refleja la ee ilimitada y absoluta del universo y el gran designio final de | mental. bei poss ite la virtud adquirida a través de una prictica entregada, po- Pes llegar a percibir los principios del cielo y Ia tierra. Las técnicas é de la sutil interaccién entre el agua y el fuego, revelando el ca- Bee del cielo y de la tierra y el espiritu de la via imperial; estas técni- Ee plicadas también muestran el maravilloso funcionamiento del koto- pasuales * el principio que dirige y armoniza todas las cosas en el mundo y fe decir ‘consecuencia es la unificacién del cielo, la tierra, Dios y la huma- ES Tal virtud genera luz y calor y da forma a la espada divina de la ‘i6n espiritual entre el cielo, la tierra y la humanidad; cuando i6n lo requiera, armados con la espada de la armonizacién y ac- segtin los principios del cielo y de la tierra, podremos atravesar impidamente el mal y la falsedad y preparar un camino que con- hacia un mundo bello y pristino. Asf, totalmente despiertos, po- utilizar libremente todos los elementos contenidos en el cielo y tierra, en primavera, en verano, en otofio y en invierno. Cambiad percepcién actual y yuestra manera de ver cémo acttia el univer- ‘transformad las técnicas marciales en un vehfculo de pureza, de bon- ¥ de belleza, y legad a ser maestros en esto. Cuando la espada de la izacién que enlaza el cielo y la tierra con la humanidad se mani- uno se libera y puede purificar y forjar el propio yo. cons- pmadu- puncia- leneste tue pre- tarte de ha sido i hecho bs en el de fo- Stevens METODOS riais dedicaros y dedicar todo lo que poseéis a la causa imperial; guerreros de la via marcial, es nuestro deber seguir el deseo de los s externa ¢ internamente y servir ala nacién, En el budo guiamos ‘al enemigo a donde queremos. El verdadero propésito de los métodos ‘equi descritos es ensefiar al guerrero a adquirir un espftitu valeroso y a ‘impregnar con este espfritu su mente y su cuerpo: tenemos que pulir ‘nuestro propio ki y forjar el espfritu en el reino de la vida y de la muer- fe. Practicad estos métodos asiduamente con toda vuestra mente y vues- ‘tro cuerpo, forjaros a vosotros mismos incesantemente y avanzad sin ‘tregua; uniros al cielo y a la tierra e integrad la préctica y el esclareci- miento. Comprended que vuestra mente y vuestro cuerpo deben estar impregnados por el alma de un guerrero, ilenos de iluminada sabiduria yy de profunda calma, POEMAS DE LA VIA‘ Confiad en la grandeza del sefior que gobierna ‘nuestro mundo y avanzad con valentfa. Oh, dioses del cielo y de la tierra! (Os suplicamos que nos guiéis hacia las preciadas técnicas del ki que sosiegan el alma ¥ purifican todas las cosas. Ei" Cortad de arriba a abajo al enemigo que se oculta dentro de uno mismo Y guiad todas las cosas con gritos de “j¥aa!" e * ci El verdadero budo no puede describirse de palabra ni por escrito; Jos dioses no te permitiran dar tales explicaciones. Las técnicas del Sable” no pueden ser contenidas en palabras ni en escritos, No configis en tales cosas: jSeguid caminando hacia la iluminacién! Profundo y misterioso es el gran designio de la Via del Sable: poned su calor y su luz ‘en yuestro coraz6n. Cuidad y pulid el espiritu del guerrero mientras estéis en el mund iluminad la Via segtin el deseo divino. * El gran designio de la Via, ‘que nos ha sido ensefiado por los dioses, sigue el camino divino. Es la Via del aiki, revelada por el Angel de la Purificacién. Forjad el espiritu de acuerdo con el deseo divino; buscad el calor y Ia luz del Sable Universal y alcanzad la iluminacién, Permitid que nuestra forja fructifique en la sociedad aiki GA quién hemos de agradecérselo? A nuestro gufa imperial El deseo de los dioses que impregna el cuerpo y el alma es aiki: pulid esa espada y haced que su brillo sea conocido en todo el mundo. Pulid incesantemente el Sable Sagrado y haced surgir su divinidad; tun guerrero sagrado sirve a los doses. Forjad el espiritu de acuerdo con el deseo divino; el Sable Divino debe brillar claro y resplandeciente, manifestando la gracia de los dioses. El penetrante resplandor de un sable esgrimido por un hombre de la Via golpea al malvado enemigo que se esconde en lo més profundo de nuestro propio cuerpo y nuestra propia alma, Claro como el cristal, afilado y resplandeciente, el Sagrado Sable no deja aperturas para que el mal se aloje. No hay debilidad en ninguna parte: iluminad al mundo y haced que la Via del Sable se manifieste en los cuerpos y en las almas de toda la gente. La Via del Sable, ilimitada e insondable, debe abrirse al mundo y hacerse manifiesta en los cuerpos y en las almas de toda la gente. iGuerreros! Agrupaos y blandid el Sable Universal. Brillad fulgurantemente y reveladio al mundo. Guardad esto en vuestro corazén: las técnicas del sable no son materiales. Seguid el camino divino: el alma no habla, pero su divinidad brilla No puede oirse ninguna voz, no puede verse ningin coraz6n; seguid el camino divino ¥y no necesitaréis, pedir nada a los dioses. Se dice que la Sinceridad " se manifiesta en aquéllos que siguen la Via del Sable; podéis pedirsela a los dioses, pero no hay garantias de que ellos os contesten. Ninguna voz que ver, ningGn corazén que escuchar: técnicas del sable, De donde primero aprende el mundo ¢s, directamente, de los dioses, Firme y seguro, dando vida al cosmos: el Sable Sagrado. El aprendizaje profundo y el budo son las dos hojas del gran designio de los dioses. Desde Jos tiempos antiguos el aprendizaje profundo y el budo han sido las dos ruedas de la Vi mediante la virtud de la practica iluminad el cuerpo y el alma. Enel instante en que un guerrero encara a un enemigo todo le ayuda a concentrar mejor las ensefianzas. Cuando el aprendizaje se vuelva superficial, dejaros guiar por el sable en cuerpo y alma, LA ESENCIA DE LA TECNICA 1. Et PRINCIPIO DE UNIFICACION DELA MENTE Y EL CUERPO La aparici6n de un “enemigo” se debe considerar como una oportunidad para probar la sinceridad de nuestro entrenamiento fisico y mental, y ver si uno responde en realidad segtin el deseo divino, Cuando uno esté en situaci6n de vida o muerte ante el sable de un enemigo, debe mante- nerse firme fisica y mentalmente y en absoluto intimidado; sin conceder a vuestro adversario la més minima apertura, controlad su mente en un instante y movéos a donde querdis: de frente, diagonalmente, o en cual- quier otra direccién apropiada. Entrad en profundidad, tanto mental co- mo fisicamente, transformad vuestro cuerpo entero en una auténtica es pada y venced a vuestro enemigo. Esto es yamato-damashii, * el princi- pio que subyace en el sable divino que manifiesta el alma de nuestra na- cin, En esencia, el sable es el alma del guerrero, y también es una mani- festacién de la verdadera naturaleza del universo; por tanto, cuando lo sacdis, estéis sosteniendo en las manos vuestra propia alma. Sabed que cuando dos guerreros se enfrentan con sables, el cuerpo y el alma de ca- da uno de ellos se iluminan al congregarse en un mundo que necesita deshacerse de la falsedad y del mal. Un enemigo que aparece a lo largo de la Gran Via del arte del sable inspirado por los dioses, permite al guerrero activar principios universales y servir de ayuda a la armoniza- 35 36 ci6n de todos los elementos del cielo y de la tierra, del cuerpo y del al- ‘ma: glorias que perduran para siempre. Nuestros iluminados antepasados desarrollaron el verdadero bu- do basdndose en 1a benevolencia, en el amor y en la sinceridad; su esen- cia radica en el valor sincero, en la sabidurfa sincera, en el amor sincero y en la empatfa sincera. Estas cuatro virtudes espirituales deberfan in- Ccorporarse al sable honesto del entrenamiento diligente; forjad constan- temente el espiritu y el cuerpo y permitid que el brillo del sable que transforma impregne todo vuestro ser. Hoy en dia se practica mucho deporte, y es bueno para ejercitar el cuerpo. También los guerreros entrenan el cuerpo, pero lo utilizan ade- més como vehiculo para entrenar la mente, calmar el espiritu y hallar la bondad y la belleza, dimensiones de las que carece el deporte. El entre- namiento en el budd cuida el valor, la sinceridad, la fidelidad, la bondad y la belleza, y da salud y vigor al cuerpo. La Via es extraordinariamente amplia. Desde los tiempos antiguos hasta ahora, ni siquiera los mas grandes sabios han sido capaces de per- cibir ni de comprender por completo la verdad; las explicaciones y en- seflanzas de los maestros y de los santos s6lo expresan una parte del to- do. No es posible para nadie hablar de estas cosas en su totalidad: lo ‘inieo que podemos hacer es dirigirnos hacia la luz y el calor y aprender de los dioses, y convertirnos en una sola cosa con la divinidad mediante Ja préctica entregada. Buscad la iluminacién a lo largo de esta orilla. Meropos DE ENTRENAMIENTO La mejor estrategia cuenta con ilimitadas respuestas. Proseguid la Via Gloriosa, utilizad el uno para golpear al todo, y luego el uno abriré el camino a los diez mil principios vitales. Forjad diez mil sables, asumid la situacién y llegad hasta el fin, Mantened siempre la mente tan clara y tan brillante como el vasto cielo, como el gran océano y como la més alta montafia, vaefa de todo pensamiento. Trimi® Si estas de pie, con el pie izquierdo adelantado, cuando el sable del ad- versario golpee, recurrid al principio del ritmo correcto del kokyit ™ para entrar suavemente hacia su costado; estad preparados para golpear a vuesiro adversario por detras con la mano derecha. Instanténeamente, avanzad en profundidad hacia su espalda con el pie izquierdo, mante- niendo firmemente apoyado el pie derecho, y cortad simulténeamente con vuestra mano izquierda por detrds de él. Dad un paso con vuestro pie derecho detras de é! sin romper vuestro equilibrio y derribadle con ambas manos. Si estdis con el pie derecho adelantado, el procedimiento fa el a y is se realiza a la inversa, y deberéis entrar hacia el costado izquierdo de vyuestro adversario, Tai-no-henka ® a la icquierda y a la derecha Si necesitis reajustar vuestros movimientos, entrad hacia el costado de Se manera explicada anteriormente, y, entonces, répidos como un relim- azo, pivotad sobre el pie adelantado. En el caso de que el pie adelanta- do sea el izquierdo, girad hacia atrés y hacia Ia derecha con la pierna ‘srrasada. Salid hacia la izquierda y derribad a cualquier adversario que ‘peeda atacaros de frente, por la espalda, por la izquierda o por la dere- ‘cha. En cualquier direccién que os movdis, mantened vuestro equilibrio 4 girar. El movimiento debe comprender un giro natural de 360 grados ‘alrededor de un centro estable. i-tenkan * frente al adversario y entrad como se describié anteriormente; vez que hayéis entrado hasta la parte de atras del adversario, apli: el principio del movimiento flexible, pivotad sobre el pie adelanta- girando libremente en la direccién adecuada y derribad a los adver- Serios circundantes. La via imperial implica continuas batallas. Entrenad para reunir una ‘corriente poderosa de valeroso ki y practicad con la intencién de move- ‘ms como un rayo de luz. En cuanto a la técnica, desde los tiempos anti ‘200s se ha dicho que los movimientos deben ser répidos como el relém- pazo y los ataques deben ser contundentes como el trueno. Estos princi- ios se pueden ver a simple vista, pero debéis entrenar diligentemente, Buscando lo divino, y dominar también aquellos otros principios que no Se pueden ver con los ojos humanos: la funcién del agua y la funcién ‘1 fuego en el universo. 3_ ENTRENAMIENTO DE SHOMEN” Golpear con la mano derecha 0 con ta izquierda Utilizacién de la re-gatana (mano-espada) 0 del pufio; para lanzar un golpe devastador a un enemigo, debemos estar iluminados en los princi- pios del cielo y de la tierra; nuestra mente y nuestro cuerpo deben estar conectados con lo divino y debe existir un equilibrio perfecto entre lo manifiesto y lo oculto, entre el agua y el fuego. El cielo, la tierra y el hombre deben mezclarse como una nica fuerza unificada, en este caso una fe-gatana, y es preciso que nos movamos en armonia con el cos- ‘mos, impulsados por lo divino; todo vuestro cuerpo debe irradiar calor y luz. Sin ofrecer a vuestro adversario la més minima apertura, o sin per- 38 mitir un slo corte en el fluir del kokyw y del ki, debéis captar esclareci- damente la esencia de lo que significa “gotpear”. A la inversa, cuando golpee el enemigo, permaneced siempre positivos, tranquilos, firmes y llenos de fuerza, centrados en el gran espiritu del universo y armoniza- dos con el deseo de los dioses. De esta manera, incluso cuando estéis rodeados por un monién de enemigos, 0 ante otro tipo de pruebas, po- dréis anticiparos a cualquier ataque y cambiar de direccién a izquierda 0 a derecha para escapar. También debéis aprender 1a manera de entrar en la mente de vuestro adversario y guiarle por el camino que el cielo y la tierra os indiquen. Por ejemplo, cuando estéis rodeados por enemigos, habréis de ser capa- ces de sugerirles su ataque en la direccién que mas os convenga, girar hacia donde debais y luego derribarles desde atrés. Debemos iluminar el espacio limitrofe entre la vida y la muerte. Sin preocupamos por lo que pueda suceder, debemos estar preparados para recibir el noventa y nue- ve por ciento del ataque de un enemigo y encarar la muerte para escla- recer la via. Golpead como el trueno y volad mas rapido que el rayo: ast es como debéis actuar. Pensad en todo esto cuando entrenéis y discernid e6mo evitar por completo la presiGn del ataque de un enemigo. Desde antaffo, la estrategia siempre ha sido algo ensefiado natural- ‘mente como expresién del deseo imperial. El combate segufa los dic- tados del cielo y de Ia tierra, y la gente se entrenaba para reaccionar a los contrastes en el fluir del kokya En el entrenamiento que aqui se expone debemos tener en cuenta la distancia. Dicha distancia deberé asumirse de acuerdo con los principios universales de lo manifiesto y de lo oculto, del agua y del fuego. Tenemos que aprender a calibrar fi- sica y espiritualmente, y sin perder el centro, Ja distancia entre uno mismo y el otro. Mantenéos en conjuncién con el universo y entrenad para aprovechar y unificar los maravillosos poderes del agua y del fue- go: la verdadera estrategia del auténtico guerrero es ilimitada. Abrid el reino de la verdad, purificad y unificad a toda la gente en el mundo, y manifestad por todas partes la gloria del deseo imperial. El entrena- miento en budd construye un verdadero camino espiritual, dirigido a la accién iluminada, Més atin, aquéllos que entrenan sinceramente en otras formas de bud manifiestan también ensefianzas que reflejan el gran designio del cielo y de la tierra y que conducen a la iluminacién, Por tanto, virtudes como la valentia, la sabidurfa, el amor y la solidari- dad se unen en el cuerpo y en la mente, creando una bella y valerosa espada que nos permite conseguir logros cada vez mayores. La ley de a Gran Via ya est establecida. La tierra esta protegida, y cada perso- na forma parte de este proceso. Asf es como entrenan los guerreros del Japén; se trata del acto de apertura de la puerta de piedra ™, Si apren- déis a controlar los elementos universales dentro del corazén humano, podréis responder al ataque de un enemigo segtin los principios del agua y del fuego, del yin y del yang. Si viene con ki, golpead con ki; si viene con agua, golpead con agua; si viene con fuego, golpead con fuego. Cuando entrengis, pensad en estas cosas y en su relacién con la guerra cientifica moderna. 4, ENTRENAMIENTO DE YOKOMEN Se trata de un golpe lateral a la cabeza del adversario, o diagonalmente y hacia abajo, a través de su hombro, con vuestra fe-gatana. Tan pronto como sintdis que os Hega un ataque en yokomen, alargad vuestra te-ga- tana; retrocediendo ligeramente el pie izquierdo, neutralizad el golpe tomando la iniciativa y aplicando yin y yang (agua y fuego). Agarrad la muifeca derecha de vuestro adversario con la mano izquierda, cogedla Juego también con vuestra mano derecha, dad un gran paso hacia dentro con el pie izquierdo, girad a la derecha, aplicad los principios del yin y el yang y lanzadle de frente. El uso preciso, de forma ventajosa, de la fuerza del adversario, depende de la perfeccién del ritmo y de un agudo sentido del maravilloso principio de las cualidades manifiestas y ocultas del agua y del fuego; la aplicacién de la técnica se puede hacer directa u oblicuamente para derribar a adversarios que nos ataquen por cualquie- ra de los dos lados, y debe ser estudiada como parte esencial de la es- trategia. Con la préctica diaria en el tatami de los movimientos de yoko- ‘men se refuerza la estrategia. En cuanto a la técnica, es necesario desarrollar una estrategia que utilice todas las condiciones fisicas y todos los elementos que estén a nuestra disposicién. El sable césmico tiene muchas aplicaciones que s6- Jo pueden ser impartidas oralmente y demostradas en la préctica real. 5. TECNICAS DE MANO Las manos, los pies y las caderas deben estar equilibrados y moverse de forma coordinada; para que poddis proteger vuestra mente y vuestro cuerpo, es esencial que toméis la iniciativa guiando y dirigiendo a los otros con yuestras manos, Debéis aprender minuciosamente la manera de guiar a vuestro adversario en una direccién y el modo de derribarle en esa misma direccién. Cuando la intencién del adversario sea tirar de ‘vosotros, habréis de aprender a anticiparos y a dirigir ese tirén. El mé- ximo logro en el entrenamiento bujursu ” es llegar a sentir qué es lo que le falta al adversario y completarlo; es decir, legar a percibir las apertu- ras que vuestro adversario manifiesta en su posici6n, aquéllo de lo que carece, y aplicar alli una técnica. Percibir de esta manera la debilidad de un adversario es budo. Sin embargo, el propésito del verdadero budo-no es destruir al adversario; es mucho mejor derrotar a un adversario espi- ritualmente (haciéndole comprender la insensatez de su acto); asf aban- donard de buen grado su ataque. El propésito del verdadero budd es es- 40 tablecer la armonfa, La mente y el cuerpo son manifestaciones concre- tas del agua y del fuego; unificados en espiritu, debemos entrenar ince- santemente en las técnicas de armonizacién. Si el adversario os agarra de la mufieca, retroceded con la pierna izquierda, conducidlo en esa di- reccidn, sostened su brazo mientras le golpedis en la cara, y derribadle. ‘Todo el bujutsu del Japén manifiesta las ensefianzas del cielo y de la tierra, Por ejemplo, si nos encontramos rodeados de enemigos que nos atacan con lanzas, deberemos considerarlos como a un s6lo adversario y pasar a través de la multitud con serenidad. Los antiguos utilizaban como escudos columnas y arboles, pero eso es una equivocacién. Tampoco debemos depender de otros para prote- ‘gemnos. El verdadero escudo es nuestro propio espiritu. Cuando os en- frentéis a numerosos adversarios, provocad su ataque, entrad directa- mente y girad para poneros detrds de sus lanzas; aplicando este principio podemos romper el cfrculo y escapar a lugar seguro. Cuando estéis ro- deados, aplicad este mismo principio; entrad y girad, teniendo cuidado de no desequilibrar vuestra postura, y bloquead a vuestros adversarios. Aprended las dimensiones correctas (de la verdad), no entrenéis en Jos caminos del engafio y no violéis la sagrada confianza que habéis re- cibido de los dioses: cada persona es un pequefio universo. La prictica del bujutsu exige vencer al adversario de esta manera; debemos entrenar de la manera adecuada para que estos principios im- pregnen nuestro cuerpo. Cuando estéis rodeados por un ejército de ene- migos, pensad en ellos como en uno solo; cuando os enfrentéis a un s6- lo enemigo, pensad en 61 como si fueran muchos. Esta es la mejor estra- tegia. Aprended a usar el uno para golpear a los diez mil sin ofrecer al adversario la menor apertura, Construid asf yamato-damashii, libre de toda indolencia fisica y mental. Unificad lo superior, lo medio y lo infe- rior: entrad de verdad, girad y mezclaros con los adversarios, de frente y de espalda, a izquierda y a derecha, Es necesario cuidar continuamente esta presencia de énimo durante el entrenamiento ordinario. En situaciones extremas todo el mundo puede ser nuestro enemigo; en momentos asf de criticos es fundamental que la mente y Ia técnica estén unificadas: {no dejéis que vuestro coraz6n titubee! El cuerpo humano es una creacién del espititu divino. De la misma ‘manera que un sélo rayo de luz es capaz de dispersar Ia obscuridad, asf debemos entrenar nosotros, con la intencién de adquirir esta misma cua- lad. En un manual de entrenamiento secreto, escrito por un antiguo maes- ‘ro, aparece la siguiente frase: “El bujutsu debe aplicarse igual que un ra- ‘yo de sol, que inunda de luz la habitacién con s6lo abrir un resquicio la puerta”. Mas atin, la luz de nuestra practica debe ser capaz de atravesar tabiques, muros, rocas y cualquier otra cosa. En nuestra via, nuestras al- mas, nuestros cuerpos, todo, pertenece a la divinidad. El propdsito de un guerrero es dominar, segtin el deseo imperial, técnicas marciales que vi- vifiquen el mundo manifiesto y el mundo oculto. Entrenad reiteradamente en el mundo manifiesto y en el reino de lo oculto hasta llegar a ser capaces de residir libre e ininterrumpidamente en ambas esferas. Este es el espiritu que se precisa para desvelar las virtudes ocultas de la sinceridad y de la fidelidad y darlas a conocer al mundo. La Via es sumamente amplia, pues refleja el gran designio de los rei- ros de lo oculto y de lo manifiesto. Un guerrero es un santuario viviente de la divinidad, cuya finalidad es servir a ese gran propésito. Imaginaros siempre en el campo de batalla suftiendo el mas duro de los ataques; nun- ca olvidéis este elemento crucial del entrenamiento. No perddis nunca vuestra identidad; purificaros para crear un mundo pristino y sin macula. 6, ENTRENAMIENTO EN LAS TECNICAS POR LA EsPALDA 1. Mediante la prictica de las técnicas por la espalda aprendemos a pre- parar nuestra mente y nuestro cuerpo contra ataques en todas las direc- cciones, comenzando con los ataques por detrés, y a manejar libremente a los adversarios. Cuando un adversario aparece inesperadamente por detrés, todos vuestros sentidos deben estar alertas, permitiéndoos dis- ‘cernir sus movimientos: éste es un aspecto importante de la prictica del bujutsu. La clave para las técnicas por la espalda estriba en la percep- ccidn instanténea de la presencia de la otra persona detrés de vosotros; tan pronto como el adversario intente agarraros por detrés, deberéis abrir los ojos de vuestro coraz6n y la ventana de vuestra mente, dejaros evar por vuestra intuicién y moveros velozmente y con seguridad ha- cia la posicién adecuada para contrarrestar el ataque. Los ataques por la espalda son extraordinariamente peligrosos y dificiles de resolver. Sino estés en guardia ni atento a un enemigo oculto, te cogerd desprevenido; es esencial, pues, cuidar mucho este aspecto. Incluso aunque, incial- ‘mente, el adversario esté frente a ti, si tiene un agudo sentido del bujut- ‘su seri capaz de Hegar a situarse detras de ti a pesar de tus movimientos evitarlo, y te pondré en situacién precaria. Es esencial entrenarse contra agarres por la espalda, y hemos de ha- ‘cerlo diligentemente a fin de desarrollar la habilidad iluminada de adap- mos y giramos libremente hacia la izquierda, hacia la derecha, de nte o hacia atrés, para anular al adversario y derribarle, Las técnicas 1 Ia espalda sirven para desarrollar nuestro sexto sentido. En este tipo bujutsu aprendemos a actuar intuitivamente. Debemos ejercitarnos ls los dias con el objetivo de desarrollar la intuiciGn y Ia respuesta pida. Si llegamos a dominar esto podremos manejar al adversario des- el instante en que intente agarramos por detrés, moviéndonos hacia jclamte y proyectindole. El agarre al cuello de la chaqueta por detrés est4 regulado por el mis- 10 principio que si se tratara de un corte recto dado desde atrés por el iversario. Por tanto, en el momento en que os agarren por el cuello, beréis actuar répidamente y quitarle la iniciativa al adversario, gol- Andole en la cara o en el plexo solar, o en ambos puntos a la vez. Esto sce que se cierre la ventana de su mente. En el combate real, tan pronto como el adversario se mueva para ata- at 42 car por detrés, girad en un instante y adquirid una posicién que os per- mita atacar su costado derecho (0 izquierdo), o bien rotad interiormente y proyectarle desde un lado. En las técnicas por detrés es vital mantener Ja estabilidad de las caderas, por lo que es preciso fortalecerlas median- te el entrenamiento cotidiano. En las técnicas de espalda en las que el adversario os agarra la mano al golpearle en la cara, entrad rpidamente con el pic izquierdo hacia la parte de atrds de su costado derecho, tirad de é1 hacia abajo y proyectad- le a continuacién, o bien avanzad hacia su izquierda con vuestro pie de- recho, rotad y proyectadle. Las explicaciones anteriores son el resultado de Ia destilacién de diez mil técnicas, pues todas las técnicas se derivan de los mismos prin- cipios profundos. No es posible expresar en los libros todos los detalles de la estrategia y de la técnica. Ponedios en préctica y obtened instruc- ‘i6n de primera mano. ILUSTRACION Y EXPLICACION DE TECNICAS SELECCIONADAS 1, PRECAUCIONES EN EL ENTRENAMIENTO 1. La intencién original del bujuisu era matar al enemigo de un golpe; puesto que todas las técnicas pueden ser letales, seguid las directrices del instructor y no os enredéis en concursos de fuerza. 2. El bujutsu es un arte en el que se utiliza lo uno para golpear a lo nu- meroso, Por tanto, entrenaros siempre para estar atentos y en alerta ante Jos adversarios en las cuatro y en las ocho direcciones. 3, Entrenad siempre de manera vibrante y goz0sa. 4, El instructor slo puede impartir una pequefia porci6n de la ensefian- za; s6lo a través del entrenamiento incesante podéis obtener la experien- cia necesaria que os permitiré desvelar estos misterios, Por consiguien- te, no persigais muchas técnicas; haced yuestras las técnicas una a una, 5, Iniciad la prictica diaria con movimientos bisicos para fortalecer el ‘cuerpo sin esforzarse en demasia, Emplead los primeros diez minutos calentando, y no habra riesgos de lesiones ni siquiera para las personas mayores, Divertiros en el entrenamiento y procurad comprender su ver- dadero propésito 6. El fin del entrenamiento en bujutsu es desarrollar yamato-damashii y forjar nuestro cardcter. Las técnicas se transmiten, sobre una base indi- vidual, de persona a persona, y no deberian ser desveladas indiscrimina- damente al piblico *. Dichas técnicas sectetas no deberian ser malem- pleadas con fines perversos. 2. Movimientos Basicos 1. Posicion Llenaos de ki, asumid una posicién hanmi*, con los pies separados y abiertos en un ‘ingulo de sesenta grados *, y encarad al adversario con una postura aiki flexible (1), La posicién exacta depende del momento, del lugar y del terreno; es mis, debe surgir en concordancia con los principios divinos. Una buena posicién refleja una actitud mental correcta. La raz6n de que el pie adelantado y el pie atrasado deban formar un Angulo de sesenta grados se aclararé con la préctica. Nota: Durante la préctica, sed siempre cons- cientes de la posicion de vuestro adversario y de su distancia relativa; asumid, de acuerdo con es- to, una posicién izquierda o derecha. Cuando termine el movimiento, es esencial que vuestros pies queden siempre abiertos en un dngulo de sensenta grados. Si os enfrentiis al adversario Ilenos de aperturas, estaréis en gran desventaja. 2. Irimi Uke: * Agarra la mufieca izquierda de tu compafiero con la mano dere- cha (2), 44 Tori: * Proyecta energia a las yemas de los dedos de tu mano izquier- da, gira hacia arriba la palma de tu mano, deslizate hacia delante en diagonal y entra en profundidad hacia el costado derecho de tu compa- fiero (3). Permanece, a la vez, atento a posibles ataques por detr Agarra por debajo la mufieca derecha de tu compafiero con tu mano de- recha, libérate de su agarre y golpéale en la cara (4). Deslfzate un poco més hacia dentro, agarra su cuello (0 controla sus caderas contra tu cuerpo), # avanza hacia delante con el pie derecho trayendo consigo el brazo de tu compafiero hacia su cuello y derribale (5, 6). Durante esta Giltima parte de la técnica, es vital proyectar energfa a través de las pun- tas de los dedos de tu mano derecha y que tu brazo vaya girando hacia dentro mientras lo bajas. 6 3. Tai- 1o-henka hacia la izquierda y hacia la derecha Uke: El mismo ataque que en el N° 2. Tori: Concentra tu espiritu en las puntas de los dedos de tu mano izquier- da, pivota sobre el pie adelantado haciendo un amplio semi-giro y sitdate ala derecha de tu adversario, permaneciendo alerta ante posibles ataques por la espalda (7, 8). Cuando ejecutes giros corporales, mantén los pies abiertos en un dngulo de sesenta grados, que es la postura mds estable, Uke: Debe adelantarse ligeramente cuando ‘ori complete su giro, facil tando asf su movimiento. Nota: Practicad siempre los giros corporales por un lado y por otro. 4. Irimi-tenkan Entrad con un pie y ejecutad inmediatamente un giro corporal. (Sin ilus- tar). Mano Vacia Contra MANO VACIA SHOMEN 5 ‘Las mismas posiciones que en el N° 1 Tori: Avanza con el pie derecho, golpea directamente a tu adversario en Ja cara con tu fe-gatana derecha y dale un pufietazo en tas costillas con tu puiio izquierdo (9). (No se muestra el pufietazo.) * Uke: Recibe con el brazo derecho el ataque de tu adversario. Tori: Proyecta energia a través de tu brazo derecho y corta con determi- nacién hacia abajo, sujetando la mufieca de tu compafiero y controlando su codo derecho (10). Avanza hacia su derecha con tu pic izquierdo, manteniendo su brazo derecho contra tu cuerpo, y hazle bajar por delan- te de ti (11). Avanza e inmovilizale contra el suelo. (Esto se llama In- movilizacién Ntimero Uno). Ahora puedes inmovilizar el brazo derecho de tu compafiero con tus pienas y golpearle en el cuello con tu re-gata- na derecha (12). 45 46 Nota: Es esencial avanzar enérgica-mente (usando las manos y los pies coordi- nnadamente) ¢ inmovilizar el brazo de tu adversario en un éngulo correct. 6. Cuando es el adversario quien ataca en primer lugar en shomen, gira al- rededor del ataque con irimi-tenkan, utiliza tu mano derecha para reci bir el golpe, y luego controla a tu adversario como se ha descrito en el N° 5. (Sin ilustrar.) 7. Tori: Lignate de ki y provoca a tu adversario a que golpee en shomen. Uke: Levanta bien alta tu te-gatana derecha, avanza con el pie izquier- do y lanza un golpe en shomen. Tori: Entra hacia la derecha de tu adversario, golpéale en las costillas con tu puiio izquierdo, y usa tu te-gatana derecha para dirigir hacia aba- Jo su ataque (13). Gira en profundidad por detras de tu adversario y pro- yéctale (como se sefialé en el N° 2) afiadiendo un fuerte empujén a su barbilla (14, 15, 16). Nota: En el combate real, golpea con fuerza la cara de tu adversario, 8 Tori: Liénate de ki y provoca a tu adversario a golpear en shomen. Uke: Lanza un golpe en shomen con tu te-gatana derecha (17) a7 48 Tori: Avanza con el pie izquierdo y ejecuta irimi-tenkan (o, segtin el ca- 50, tai-no-henka), a la vez. que utilizas tu te-gatana izquierda para gol- pear en la mufieca derecha de tu adversario (18). Agarra su mano dere- cha por el dorso, presionado con tu pulgar a la altura de Ia base de sus dedos anular y meftique, retrocede con el pie izquierdo mientras tuerce: con determinacién su puilo con ambas manos y hazle bajar (19). Aplica la Have que aparece ilustrada en (20), que te permitira inmovilizar sus manos y sus pies. 9. Tori: Ataca a la cara y a las costillas de tu adversario como se describe enel N°5, Uke: Recibe el ataque con tu mano derecha. Tori: Da un gran giro y utiliza tu mano derecha para anular su ataque y dirigir la muiieca derecha de tu adversario. Destizate hacia el interior coge por el dorso su 10. Tori: Igual que en el N° 9. Uke: Igual que en el N°9. Tori: Después de dar un gran giro (25), agarra a tu adversario por los dedos de la mano derecha y gira hacia la derecha levando su mano li- geramente hacia arriba y hacia atras, y tuércesela con tu mano izquierda a la vez que le golpeas en el rostro con el purio derecho (26). Retrocede con el pie izquierdo, controla su codo derecho torciéndoselo con tu ma- no derecha y tira de é1 hacia abajo y hacia la derecha (27). (Esta es la denominada Inmovilizaci6n Niimero Tres.) Siéntate a continuacién jun- 10 al costado derecho de tu adversario y contrélale formando una cruz con tus manos (28), 49 50 YOKOMEN. IL. Tori: Liénate de ki y haz. que tu adversario te lance un golpe en yoko- men. Uke: Avanza con el pie derecho y descarga un golpe en yokomen con tu te-gatana derecha a la parte lateral izquierda de tu adversario, Tori: Avanza ligeramente con el pie izquierdo y neutraliza con tu te- ‘gatana izquierda el ataque de tu adversario a la vez que golpeas su cara con tu mano derecha (29). Entra entonces en profundidad hacia su cos- tado y corta hacia abajo su te-gatana derecha con tu fe-gatana derecha mientras golpeas sus costillas con tu pufio izquierdo (30). Luego, usa tu brazo derecho para derribarle (31). 12, El entrenamiento ante ataques en yokomen contiene la esencia de todas las técnicas. Tori: Lignate de ki y provoca a tu adversario para que te lance un golpe en yokomen. Uke: Asesta un golpe en yokomen, como en el N° 11 Tori: Abrete ligeramente hacia la izquierda y neutraliza el ataque de tu adversario con tu te-gatana izquierda, a la vez. que golpeas su cara con ‘tu mano derecha. Agarra su mufieca derecha con tu mano izquierda y Juego con ambas manos a la vez, y levanta su brazo por encima de tu cabeza mientras avanzas con el pie izquierdo (32, 33). Da después un giro de 180 grados y proyéctale (como si atravesaras a un adversario que te atacara por la espalda) (34). Nota: El brazo del adversario debe ser considerado como un sable que golpea. Nuestro pulgar derecho se debe situar en su mufieca en el lugar donde se toma el pulso. 51 52 a Tori: Tu adversario te ataca en yokomen (como en el N° 11). Entra de- rds de él, agarra su mufieca por debajo con tu mano derecha, retrocede y Ilévale al suelo con la Inmovilizacién Nuimero Uno (35, 36.) 14, Tori: En este caso, aplica la técnica descrita en el N° 10, es decir, la In- movilizaci6n Namero Tres (37). 15, Tori: Como se describe en el N° 11, ejecuta irimi-tenkan utilizando tu te- ‘gatana derecha para controlar el ataque del adversario, corta un poco ha- abajo y sostén luego su brazo con ambas manos (38). Avanza y corta otra vez hacia abajo como si Ilevaras un sable y contrélale (39, 40). Nota: La colocacisn de tu mano izquierda en esta técnica es como sigue: sujeta firmemente la muiieca del adversario con los dedos meftique y anular, y utiliza, el nudillo de Ia base del dedo indice para ejercer una fuerte presién en su mu- fieca a la altura del pulso. (Esto se conoce como Inmovilizacién Numero Cua- tro.) PROYECCIONES 16. Uke: Avanza medio paso con el pie derecho y agarra las manos de tu adversario. Tori: Gira hacia fuera y hacia la derecha, avanza medio paso con el pie derecho y da luego un gran paso hacia dentro con el pie izquierdo. Usa tu mano derecha para sujetar la mufieca de tu adversario (pon energfa en los dedos de tu mano izquierda y eleva su mano con tu hombro; sujeta 53 54 su brazo firmemente con tu mano derecha, manteniendo tu pulgar a la altura de su pulso, y atréele hacia ti (41). Sube su brazo hacia arriba por encima de tu cabeza (42, 43), gira 180 grados aproximadamente pivo- tando sobre el pie izquierdo (44) y proyéctale para que caiga de espal- das (como si atravesaras a alguien que te atacara por la espalda) (45). Después de completar la proyecci6n controla el brazo derecho de tu ad- versario con tu mano derecha, retorciéndoselo (46). 17. Uke: Igual que antes. Tori: Pivota sobre tu pie izquierdo girando répidamente hacia la dere- cha y proyéctale como se describié en la técnica anterior. (Sin ilustrar) ENTRENAMIENTO AIKI La comprensién del aiki se alcanza de forma natural en virtud del entre- namiento, Las instrucciones concretas deben ser impartidas oralmente. 18, Cuando el adversario agarre tu mufieca (47, 48), 20. Cuando el adlversario arremeta contra ti (52, . 54). 21. Entrenamiento en yokomen Uke: Descarga un golpe en yokomen con tu mano derecha. Tori: Avanza con el pie izquierdo y utiliza tu te-gatana izquierda para neutralizar el ataque de tu adversatio, golpeando simulténeamente en su rostro (y hazle caer) (55), ENTRENAMIENTO EN TECNICAS POR LA ESPALDA 22. Uke: Agarra el cuello de la chaqueta de tu oponente y tira de él (56). Tori: En el momento en que tu adversario tira, avanza con el pie dere- 56 cho, gira después por dentro hacia su costado derecho con el pie iz- quierdo y golpéale en la cara con tu fe-gatana izquierda, y en el plexo solar con tu mano derecha (57). 23. Uke: El mismo ataque que antes. Tori: Tira de 61 avanzando con el pie derecho y golpéale en la cara con tu te-gatana, dejando libre tu mano derecha para encarar a otros adver- sarios (58). Uke: Bloquea el golpe de tu adversario con tu mano izquierda, Tori: Da un gran paso hacia atrés con tu pie izquierdo haciendo que tu adversario se doble hacia delante, controla su brazo con tu mano dere- cha, golpea su costado con tu mano izquierda y empijale hacia abajo (59). 87 24. Uke: Agarra el cuello de la chaqueta de tu adversario por detras y em- puja hacia delante (60). Tori: Tan pronto como tu adversario empuje, avanza un paso con el pie derecho, pivota hacia la izquierda, golpéale en la cara con tu te-gatana inquierda y proyéctale (61) 25. Uke: El mismo ataque que antes. ‘Tori: Cuando el adversario te agarre por el cuello de la chaqueta, pivota hacia el exterior sobre tu pie derecho y usa tu fe-gatana derecha para golpear en su brazo cortando hacia abajo (62). Luego, desplizate hacia la parte de atrés de tu adversario con el pie derecho, golpéale en la cara con tu mano derecha y derribale (63). 26. Uke: Agarra las dos mufiecas de tu adversario por detrés. Tori: Absérbele avanzando el pie izquierdo y levantando las dos manos (65). Retrocede enseguida el pie derecho, cortando simulténeamente ha- cia abajo con ambas manos, y proyéctale de frente (66). 4. MANO VACIA CONTRA SABLE. SHOMEN 27. Tori: Liénate de kie invita a tu adversario a atacar (67). Uke: Descarga un golpe en shomen. 59 60 Tori: En el momento en que tu adversario corte, muévete con la veloci- dad de los dioses y entra en profundidad hacia su derecha con irimi-ten- kan. Golpea la muiieca derecha de tu adversario con tu te-gatana is quierda, permaneciendo atento ante posibles atacantes por la espalda, y golpéale en la cara con tu pufio derecho (68). Aplica la técnica descrita en el N°8 (i.e, kote-gaeshi) y derriba a tu adversario (69, 70). (En este caso es necesario controlar su. mano y su sable con los dedos meiiique y anular de tu mano derecha). Luego, haz girar a tu oponente hacia la iz~ quierda, contrétale boca abajo, coge su sable y mantenlo contra su cue- lo (71). 28. Tori: Igual que antes. Uke: Descarga un golpe en shomen. Tori: Entra y golpea la cara y las costillas de tu adversario (72). Des- pués, aplica la técnica descrita en el N° 7 (i. €., irimi-nage) y derrfbale (73, 74) 29. Tori: Liénate de ki y sitiate con el pie derecho adelantado, e invita a tu adversario a golpear (75). Uke: Lanza un golpe en shomen. Tori: Entra al costado izquierdo de tu adversario y golpea su plexo solar con tu pufio derecho (76). Agarra luego la empuftadura de su sable con tu mano izquierda y golpéale en la cara con tu fe-gatana derecha (77). 30, Para sentir la direcci6n del ki del sable es necesario desarrollar una agu- da percepcién, 61 62 Tori: Lignate de ki y provoca el ataque de tu adversario. Uke: Descarga un golpe en shomen desde jodan. * Tori: En cuanto te ataque tu adversario, girate a la izquierda o a la dere- cha segiin el caso. Debes practicar hasta conseguir moverte de forma natural y suave, incluso ante el ataque directo de un sable real. (Sin ilus- tar.) Explicacién; En el momento en que un enemigo corta, se produce una apertura cen su defensa; con el entrenamiento aqui descrito aprenderis a llenarte de ki, a percibir la debilidad y a discernir claramente la trayectoria de la hoja cuando Ia ssondeas con tu mente. El hierro esti Ileno de impurezas que lo debilitan; a tra- vés de la forja se convierte en acero y se transforma en un afilado sable. Las ini- gualables hojas Masamune ® son el resultado de continuas forjas; también los seres humanos se desarrollan asf. Entrenad hasta que desaparezca toda debili dad; entonces, vuestra técnica sera perfecta ante cualquier estocada 0 ante cual- (quier arremetida, Fomentad este tipo de ki para crear un ser humano sincero. ATAQUES EN YOKOMEN Y ATAQUES AL PECHO 5k, Se debe impartir instruccién oral ATAQUES CON CUCHILLO 32. Ante una arremetida con cuchillo (0 un ataque con pistola), aplicad la técnica N° 7 (i. e., irimi-nage) (78). 33, Aplicad la técnica N° 8 (i. e., kore-gaeshi) (79). 34, Uke: Lanza un ataque en shomen con cuchillo. Tori: Cuando ataque tu adversario, entra, agarra su antebrazo derecho con tu mano derecha y aplica la Inmovilizacién Ntimero Uno (80, 81.) | 5. SABLE CONTRA SABLE CORTES EN LA MUNECA 35. Tori: Lignate de ki e invita a tu adversario a golpear tu mufieca (82). Uke: Asesta un golpe a tu adversario en la mufieca. Tori: Abrete ampliamente hacia la izquierda y corta la mufieca de tu ad- versario (83). ATAQUES A LA CABEZA 36. Tori: Lignate de ki ¢ induce el movimiento de la mano derecha de tu ad- versario, Uke: Descarga un corte en shdmen (84), : Bjecuta irimi-tenkan hacia la derecha y golpea sobre su cabeza (85). 37, Tori: Liénate de ki y provoca el ataque del adversario. Uke: Corta en shomen. Tori: Entra y golpea su cabeza, (Sin ilustrar.) Nota: El principio de golpear al adversario sin ser golpeado debe ser ensefiado oralmente, 65 ARREMETIDAS. 38. Tori: Igual que antes (86). Uke: Corta en shomen. Tori: Entra, gira hacia arriba la hoja y arremete contra el pecho de tu adversario (87). Golpea luego su cabeza (88) y vuelve a arremeter (89). 6. ATAQUES CON BAYONETA 39. Tort Asume nna posicia aiki derecha e invita a tu adversario a atacar ¢ Uke: Arremete de frente. Tori: Entra y corta hacia abajo el antebrazo izquierdo de tu oponente con tu e-gaiana derecha (91). Agarra después el cuello de su chaqueta por detras y golpéale en la cara con tu te-gatana izquierda (92). 66 40. Uke. Igual que antes. Tori: Como en la técnica anterior, provoca el ataque de tu adversario, pero en esta ocasiGn coge su bayoneta con ambas manos, avanza con el pie derecho y proyéctale (93, 94). : 93 4L Uke: Igual que antes. Tori: Entra como en el N° 39, pero esta vez agarra su bayoneta por de- bajo con tu mano izquierda, atrasa el pie izquierdo y aplica una torsion en el codo izquierdo del adversario con tu antebrazo derecho (95, 96). 67 68 42. Tori: Adopta una posici6n aiki izquierda y encara a tu adversario (97). Uke: Igual que antes. Tori: Entra y golpea en el rostro de tu oponente con tu te-gatana iz- quierda y en su antebrazo con tu derecha (98). Sujeta la bayoneta con ambas manos, avanza y derribale (99). 43. Bayoneta contra bayoneta Tori: Liénate de ki y provoca el ataque de tu adversario. Uke: Igual que antes. Tori: En cuanto arremeta tu adversario, entra en irimi-tenkan hacia la izquierda y atraviésale (100), 100 Los movimientos ante un ataque con lanza son basicamente los mismos contra bayoneta (101, 102, 103, 104). 70 7. EJERCICIOS FINAL! TAI-NO-HENKA 44, Aplicacién de ejercicios de proyecciones Uke: Agarra las muiiecas de tu compafiero. Tori: Cuando practiques una proyeccién debes poner energfa en las puntas de los dedos. Avanza con el pie izquierdo, levanta las dos manos por encima de tu cabeza, pivota sobre el pie izquierdo y corta hacia aba~ jo manteniendo a tu compafiero suspendido en tus caderas (105), Des- pués, recupera tu posicién, gira hacia el costado derecho de tu pareja y aplica la misma técnica (106). Repite este ejercicio por la espalda. DESARROLLO DEL PODER DEL KI 45. Situaros frente a frente en seiza (107). Uke: Agarra atu compafiero por las muiiecas, Tori: Gira las palmas de las manos hacia dentro, manda energia a las puntas de los dedos, concentra tu espiritu, eleva las manos como si fue- ran sables y empuja hacia atrés a tu compafiero con los dos antebrazos (108, 109). Avanza con la rodilla derecha, elévate y proyecta a tu.com- pafiero hacia la izquierda (110, 111). Nota: Cuando proyectes, abre ligeramente las manos, dirige tu mano derecha hacia el hombro izquierdo de tu compatiero y empuja hacia abajo y hacia tu iz- quierda. Si tiras con las manos hacia ti, la técnica no serd efectiva. 46. Uke: Igual que antes. Tori: Como en el N° 45. Pero esta vez. gira las palmas hacia fuera, ex- tiende tus brazos hacia la izquierda y proyecta al compafiero (112, 113). 112 113 47. Uke: Igual que antes. Tori: Levanta tu mano derecha en direccién al hombro izquierdo de tu compaiiero, extiende tu mano izquierda bajo su brazo y empiijale hacia abajo y hacia la izquierda (114, 115). 14 72 48. Uk, Tor der ul 48. Uke: Igual que antes. Tori: “Rebaiia” con las dos manos y proyecta a tu adversario hacia la derecha o hacia la izquierda (116, 117), hic 17 DESARROLLO DEL PODER DEL BRAZO. 9, Debe ser impartido oralmente. Tori: Agarra las muftecas de tu compafiero (118). ike: Gira el pie derecho hacia la izquierda, avanza y tiende a tu compa- r0 sobre tu espalda (119). Tori: Después del estiramiento, suelta tu agarre y deslizate hacia el sue- 74 LOS SECRETOS DEL BUDO (POEMAS ESPIRITUALES) jSinceridad! Cultivad esta virtud y comprended Ja profunda verdad de ta unidad de lo manifiesto y lo oculto. Dominad las divinas técnicas del aiki y ningain enemigo se atreverd a desafiaros. Viéndome delante de él, el enemigo ataca, pero para entonces yo ya estoy detris de él. Yo permito al confundido enemigo atacar mi forma, pero instantneamente estoy detras de él y le derribo. A izquierda y a derecha eludid todos los cortes y paradas; apresad las mentes de vuestros adversarios ¥ dispersadlos a todos. Rodeados por un bosque de lanzas enemigas: entrad profundamente y aprended a usar vuestra mente ‘como un escudo, Un ejército de enemigos se precipita a atacar: pensad en ellos como en un sélo enemigo y tratad con ellos como corresponde. Incluso cuando sedis desafiados por un s6lo enemigo, permaneced en guardia, porque siempre estis rodeados por un ejército de enemigos. PARTE III TECNICAS DEL NOMA DOJO 76 Técnicas del Noma Dojo” Las técnicas del Noma Dojo-fueron fotografiadas en el dajo privado de Seiji Noma, entonces presidente de Kodansha, Ltd, en 1936, cuando Morihei tenta cincuenta y tres aftos. Hizo de uke Shigemi Yonekawa, y las técnicas fueron fotografiadas en varias sesiones. Morihei se tomé a echo sus propias directrices de entrenar de “manera vibrante y gozo- sa”, se le puede ver sonriendo en varias de las fotografias. Las fotos fueron guardadas en cinco dlbumes, pero las sacaron si- guiendo un orden arbitrario para volver a reproducirlas recientemente (los negativos originales habfan desaparecido hacfa tiempo). Por con- Siguiente, ha habido que volver a ordenar todas las fotografias para su publicacién. Como no habia descripciones técnicas ni directrices anexas a las fo- tografias originales, las ahora publicadas se han agrupado siguiendo la técnica y se han denominado segtin la terminologfa moderna del ai- kido'para facilitar su comprensién. A la hora de estudiar las fotos es importante seRalar que fueron he- cchas con una técnica fotogréfica relativamente primitiva, consistente en “parada” y “accién”. Morihei posaba en cada movimiento de la técni- ca, y luego, por regla general, la cdmara se desplazaba hasta otra posi- cidn para volver a enfocar o para captar un movimiento posterior des- de otro dngulo, dando como resultado una perspectiva diferente en ca- da foto. Parece ser que hubo también varias tomas para algunas técni- cas, que luego se combinaban en una secuencia. En algunos casos fal- tan segmentos, por lo que han de ser imaginados. En resumen, las fo- tos, en muchos de los casos, no son auténticamente secuenciales. Para su comparacién, se han incluido en esta seccién algunas se- cuencias de fotografias tomadas en Wakayama en 1951, cuando Mo- rihei tenfa sesenta y ocho aftos. A menudo se sefala la manera diferente de ejecutar Morihei las técnicas en el periodo de antes de la guerra y en el de después, pero como podemos ver si comparamos las Técnicas del Noma Dojo (1936) y las de Wakayama (1951), la esencia de su arte siguié siendo la misma Las fotografias de esta seccién permiten al estudiante la valiosa oportunidad de ver cémo practicaba el propio Morihei las técnicas aiki, las cuales nos pueden ayudar a aleanzar la armonta con la naturaleza y unirnos a los més altos principios de la vida, John Stevens Shiho-nage hanmi-hantachi 1 Irimi-nage Suwari-waza (Wakayama) 79 Yokomen-uchi Hanmi-hantachi Irimi-osae 81 Tachi-waza shomen uchi sankaku no irimi Kata-dori chokusen no irimi Yokomen-uchi irimi-nage 83 Sokumen Irimi-nage Suwari-waza 1 Tachi-waza 87 Kote-gaeshi Suwari-waza Tenchi-nage Kokyii-nage 1 Suwari-waza 2 Tachi-waza ou (0 se muestra Ja posici6n inicial, en pie) 5 (de frente) (Wakayama) 95 Variaciones. 98 Hamni-Hantachi 1 2 (sode-dori) Yokomen-uchi kokyli-nage 1 (suwari) 2 (tachi) Tachi-waza Ikkyo osae técnica basica Tachi-waza (visto por el otro lado) Variacién (entrada lateral) Suwa 104 Suwari-waza técnica bésica 105 Ura-waza (visto desde otro dngulo) Suwari-waza Kata-dori ikkyo (Wakayama) 107 Ryokata-dori Tkyo Variaciones Variacién de inmovilizacién Ikkyo-nage 14 Tachi-waza kata-dori ikkyo Kaeshi-waza (ikkyo kara irimi-nage e, omote) 1 Kaeshi-waza (ikkyo kara irimi-nage e, omote) su 2 I Ude-osae Suwari-waza agarre en sentido contrario Variaciones de Inmovilizaciones Tachi-waza 118 Ni su Téen Nikkyo osae Suwari-waza Técnica baisica (visto de frente) (agarre de nikkyo) Muna-dori nikkyo Kati 1 > 1 Hi Tachi-waza nikkyo Variacién Suw Hiji-jime osae Suwari-waza 123 Juji-nage k Suwari-waza Si 124 Kubi-nage Suwari-waza - 2 (Wakayama) 126 Koshi-nage Suwari-waza Tachi-waza tac. 1 2 1 128 Ushiro-waza 2 1 Ashi-waza (variaci6n) 134 NOTAS DEL TRADUCTOR 1. budo: la Via del Valor Marcial, la Via del Guerrero. Esta es una forma de vida de cada a la paz y ala accién iluminada. Aqué bud es uilizado tanto en el sentido general de las tradiciones marciales japonesas como en la manifestaciGn més especifica del aiki- budo"de Moribei, que condujo eventualmente a la formulacién del aikido. A. veces se utiliza en el texto original la abreviatura bu, pero para mayor facilidad de comprensién se ha utilizado en la traducci6n el término més formal de Budo. 2, Enel sistema de Morihei, el cosmos se activa y se sostiene mediante la interaccién del agua (mizu) y del fuego (ka). El agua es la materia; el fuego, el espititu. Combina- dos, forman iki, la vida, la respiraciGn, y kami, lo divino, 3. kotodama: la ciencia esotérica del “sonide-espiritu”. Kotodama son los sonidos puros {que cristalizan como vibraciones de diversas concentraciones que llegan a percibirse co- ‘mo sonido, color y forma. Todo principio y toda técnica posee un kotodama, una vibra- ign sagrada que contiene su esentcia; si se Hega a comprender el significado del kotoda- ‘ma, se puede captat su funcionamiento (es decir, agua) y fundirse con su espiritu (es de- cir, fuego). 4, ki: Ia energfa sutil que Mena y propulsa el universo; la fuerza vital que mantiene unida lacreacién, '. doka: poemas didécticos que siguen el modelo silibico 5-7-5-7-7, compuestos por Jos maestros para inspira e instruir asus diseipulos. 6. Este doka describe el kiai, grto de enengfa concentrada, perfectamente controlada, ‘que puede destrozar las defensas de vuestros adversaries. 7. Este es el sable de doble filo (isurugi) de la sabiduria y de la purificacién, el sable es- piritual de nuestra mente que ha de aplicarse a toda técnica, ya sea de forma literal 0 simbélica 8. kannagara: este término aparece con frecuencia en el texto original. Se refiere a un estado en el que uno esté perfectamente armonizado con el funcionamiento de lo divino fen todos los aspectos de la vida. En dicho estado ideal, uno actia de forma natural, es- pontinea y sincera, libre de artificios y de segundas intenciones. Lo “divino" se refiere no a algo sobrenatural, sino a cualquier cosa que inspire reverencia y manifieste bon- dad, pureza y belleza, 9. aiki: armonizacién espiritual, la unificacién perfecta de todos los elementos. 10, Ieu-no-me-no-kami: divinidad Shinto que limpia el mundo de suciedad y corrupei6n, 11, makoto: unidad de palabra y de obra; seguir sinceramente el ‘orden del universo, 12, yamato-damashii: el espiritu del antiguo Japén. Hoy en dia, interpretado més co- rrectamente como manifestacién de todo To que es bueno y verdadero en Ia naturaleza humana, 13. irimi: desde el punto de vista fisico significa entrar hacia un lado para evitar el ata- {que de un adversatio; desde el punto de vista espiritual significa penetrar y disolver una fuerza agresiva 14, koku: el prana, la respiraci6n vital, la corriente universal de energia vibratoria ‘Téenicamente, kakyu se refiere al ritmo correcto y al flujo libre y continuo de energi 15. tai-no-henka: giro corporal pivotando sobre un pie, que generalmente comprende ‘una rotacién de 180 grados. 16. irimi-tenkan: entrat y girar, una combinacién de irimi y de rai-no-henka que se apli- ca segin las circunstancias. En el texto original se utiliza el término irimi-tenka, “girar y transformar”, pero para faclitar Ia comprensién se ha utilizado en la traduecién el hombre moderno de la técnica, 17. shomien: golpe lanzado directamente a la coronilla de la cabeza del adversario. 18. Esta frase se refiere al conocido pasaje de la mitologfa Shinto. La ausencia de la Diosa del Sol, que se hallaba malhumorada en una cueva sellada por una puerta de pie. dra, privaba a la tierra de luz y de calor, pero los demas dioses, mediante una treta, con siguieron persuadirla para que abriera la puerta de piedra. Morihei sugiere que los seres hhumanos de esta época nos unamos con el fin de conseguir que nuestro impuro mundo «de muerte y destrucci6n sea baflado una vez més por la luz de la verdad y de la belleza. 19. bujiasu: arte marcia, aplicaciGn y ejecucién de t6enicas marciales 20. EI texto dice literalmente: “..ctear japoneses sinceros... no mostis estas téenicas otros". 21. hanmi: una posicién de “medio lado" un pie adelantado, cs decir, en éngulo frente a tu adversatio, con 22. Inicialmente, el éngulo formado por los pies parece estar mas cerca de los noventa ‘grados, pero durante la ejecucién de Tas técnicas los dos pies sefialan hacia fuera en tn Angulo de sesenta grados. Por ejemplo, en las ilustraciones 21, 32, 33 y 34. 23, uke: al que se le aptica ta técnica, 24. tori el que ejecta la técnica. En el texto original se utiliza el término shi 25, Como en sokumen ivimi-nage (ver pgina 8). 26, Como ilustracién del putetazo, ver pégina 101 27. En el texto original, las ilustraciones 35, 36 y 37 estaban en otro orden, La técnica descrita en esta nota se llama en el aikido moderno Inmovilizacién Némero Cinco, 28. jodan: posicién con el sable mantenido por encima de la cabeza po 29. Los sables fabricados por el forjador medieval Masamune son considerados como los mejores que se han hecho nunca en Japsn 30. Esta técnica se conoce ahora como Inmovilizacién Nimero Cinco (ver nota 27). 31. En esta ocasién Morihei acta de uke, 135 Morihei Ueshibe nacié en el oeste de Japén en 1883. Tras dominar el judd, el kends y el jujutsu, creé el aikido, un arte marcial totalmente original, basado en las censefianzas espirituales de la religién Omoto-Kyé. Después de la Segunda Guerra Mundial, Morihei establecié en ‘Tokyo la Fundacién Aikikai para promover la divulgacién del aikids en Japén y en el mundo. Kisshdmaru Ueshiba es el presidente de la Fundacién Aikikai, la mayor organizacién mundial de aikidd. Ha escrito varios libros de aikidé en japonés y en inglés, incluido el clésico El esptritu del aikido. John Stevens, el traductor, es profesor de estudios budistas ¢ instructor de aikido de la universidad Tohoku Fukushi, en Sendai (Japén). Es un prolifico escritor sobre aikids y budismo, y ha escrito una biografia de Morihei Ueshiba titulada Paz abundante. En esta nigim@ editorial Karate-dé. Mi camino GIcHIN. FUNAKOsHI Por primera vez en castellano, un texto del padre del Karate-d6 moderno. Morihei Ueshiba EL LIBRO MAS ESPERADO POR LOS AMANTES DE ESTE ARTE MARCIAL * Un libro indispensable para todos los estudiantes de artes marciales del siglo XX ee ei ee te Gremetae tt * Las series técnicas y forografias inéditas del maestro creador del aikid. Los textos inéditos del maestro introducidos por el Doshu. cos, filosofia y técnica en un libro histérico, El espiritu renovador de los Budd y su actualizacién a nuestros dias. EDICIONES

También podría gustarte