En un pueblo de Centroamrica existe una vieja leyenda que cuenta que hace muchsimos
aos, los perros se sentan muy tristes. Segn esta historia, los cachorritos, desde que nacan,
se comportaban de manera bondadosa con los humanos, les ofrecan su compaa sin pedir
nada a cambio y siempre trataban de ayudar en las tareas del campo hasta que la vejez se lo
impeda.
Desde luego, los hombres y mujeres de las aldeas no podan quejarse, pues no haba en el
mundo amigos ms fieles y generosos que ellos.
La razn de su desconsuelo era que, a pesar de todo eso, algunas personas los trataban mal y
no les daban ni un poco de cario. Con toda la razn, consideraban que merecan un trato ms
digno y respetuoso por parte de la raza humana.
Un buen da, varias decenas de perros se reunieron en un descampado para poner fin a esa
situacin tan injusta. Hicieron un gran corro y debatieron largo y tendido con el fin de
encontrar una solucin. Despus de deliberar y estudiar los pros y los contras, llegaron a una
conclusin: lo mejor era pedir ayuda al bueno y poderoso dios Tlloc. l sabra qu hacer y
tomara medidas inmediatamente.
Redactaron una carta para entregrsela al dios y el perro ms anciano la firm en nombre de
todos. Despus, se hizo una votacin. Sali elegido un perro negro de cuerpo musculoso y
famoso por tener muy buen olfato para llevar a cabo la importante misin: recorrer cientos,
quiz miles de kilmetros, hasta encontrar al dios Tlloc y entregarle el mensaje.
En las patas era imposible porque necesitaba las cuatro para caminar da y noche; tampoco
poda ser en el hocico, ya que el papel llegara hmedo y adems tendra que soltarlo cada vez
que quisiera comer o beber El riesgo de perderlo o de que se lo llevara el viento era muy alto!
Al final, todos se convencieron de que lo mejor sera que guardara la carta bajo la cola, sin
duda el lugar ms seguro. El perro acept y se despidi de sus amigos con tres ladridos y una
sonrisa.
Despus de tanto tiempo, sucede que los dems perros ya no se acuerdan muy bien de su
cara ni del aspecto que tena; por eso, cuando un perro se cruza con otro al que no conoce, le
huele la cola para comprobar si esconde la vieja carta y se trata del valeroso perro negro de
cuerpo musculoso y buen olfato que un buen da parti en busca del dios Tlloc para pedirle
ayuda.