La iglesia est encargada de tesoros, sueos y dones preciosos, sin embargo
muchos se estn yendo a la tumba con regalos que no se han abierto, y sueos que no han sido liberados. Muchos estn muriendo siendo ricos! Estos sueos deben de ser liberados. Cada uno de nosotros tiene sueos en su corazn que slo aguardan ser liberados. Si estos dones son movilizados, y utilizados bajo un propsito en comn, que glorifiquen a Dios, entonces pueden transformar a cualquier iglesia en un poderoso ejrcito para el Seor. Cada persona tiene en su corazn sueos, con respecto a lo que podran llegar a ser para el Seor. Sueos que los llevan a verse a s mismos, siendo agentes de cambio en el mundo, en sus familias, y en sus iglesias. Dios llama a cada lder a ser un libertador de sueos. No hay nada ms espectacular que ver a las personas realizando sus sueos, y ser utilizados para la gloria de Dios! No hay gozo ms grande que este! Dios va a proveer a cada iglesia, todo lo que necesita para alcanzar lo que l ha llamado a cada iglesia a hacer. Pero primero debemos de creer que los lderes estn ah! Por qu? Por qu ah estn! Bscalos; obsrvalos; tal vez estn bajo nuestra nariz, pero si no los estas buscando, nunca los vas a ver.