caminaba mi madre transparente y difana como tarde de abril. Al rasgarse una nube la vi cual una diosa, mas bella que la aurora mas bella que la flor. Sus ojos al mirarme irradiaban dulzura, y me tendi sus brazos con infinita ternura. No pude contenerme, la llame suplicante: Madre, madre, -le dije! Mi madrecita amante...! Los sollozos me ahogaban, de mis ojos las lgrimas por mi cara corran y la tierra reseca, humedecan. "No llores, hija ma - o que me decaNo llores, hija ma, turbas mi corazn" Vi por un instante nublarse su semblante y tuve mucho miedo verla desaparecer.
! Oh, madre, madre santa !
no quiero verte triste, lo nico que quiero es irme all con vos. Pues, s que son las madres, amor de los amores, los ngeles custodios y el corazn de Dios.