Tiempo: Domingo, cada la noche. (17 horas 30 minutos- medida horaria
terrestre) En el tercer nivel del lugar de arribo de la nave, se observa un escenario bastante particular, donde abundan lo que parecen ser puntos de atraccin y entretenimiento para infantes. La escena que primero capta mi atencin gira en torno a uno de los puntos de atraccin, donde se rene un grupo de 7 individuos de distinto gnero y pasando por diversos estadios de sus vidas: dos adultos maduros, carcter femenino y masculino, 3 jvenes en el inicio de la pubertad, todas de carcter femenino, y dos jvenes infantes de carcter masculino, que adems, a juzgar por el comportamiento afectivo y filial entre todos ellos, deben compartir algn vnculo personal o consanguneo. La situacin evidenciada es la siguiente: una de las jvenes pubescentes se prepara para accionar una de las atracciones, mientras las otras dos a su lado se susurran cercanamente al odo (palabras imperceptibles) con el fin de esconder el mensaje de los dems en el grupo, y los jvenes infantes corretean y sonren alrededor interactuando meramente entre ellos, como si los dems fueran solo parte de la escena. Los dos adultos se encuentran vigilantes tras los jvenes, sin decir nada, hasta que la mujer activa la atraccin para que pueda ser utilizada. Acompandose de una palmada en su espalda, el hombre adulto enuncia: Hgale, ya! como pauta para que la joven enfrente de l, accionara la mquina que ya haba sido activada. Esta le obedece de inmediato y ejerce su fuerza sobre una palanca mientras exclama Ya, ya, ya, ya!, para captar la atencin de todos los individuos, logrando as detener sus actividades actuales y generar expectativa e incertidumbre en sus rostros. La palanca busca hacer girar una gran rueda con un puntero, que por asuntos del azar, designa un valor de 0 a 100 que se traduce a una recompensa para quien accion la mquina. La joven obtiene 4, por lo cual, el grupo expresa decepcin mediante la exclamacin conjunta de la expresin Aaaaaayyyy! y el gesto corporal comn de dirigir las manos a la cabeza. Un poco pasada la conmocin del suceso, el hombre adulto acciona la palanca de nuevo mientras dice Nooo, yo me hubiera sacado un mil, sarcsticamente y sin haber activado la mquina, para expresar su decepcin mediante un chiste al que todos encuentran gracia, y tambin para insinuar de alguna manera que ya es la hora de ir a otra estacin. Finalmente, se marchan.