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INFLUENCIA DE LAS PROPIEDADES DE LAS ROCAS Y DE LOS MACIZOS RO- COSOS EN EL DISENO Y RESULTADO DE LAS VOLADURAS. Emilio Lépez Jimeno Ingeniero de Minas (LIMEISA) Resumen Se analiza la influencia de las propiedades de las ro- cas y del macizo rocoso en los resultados de las voladu ras, asi como de la elecci6n por parte del proyectista - de los pardmetros de disefio mAs adecuados en orden a ob tener resultados 6ptimos. INTRODUCCION Las dificultades surgidas al establecer modelos analiticos so- bre el comportamiento de las rocas frente a los-mecanismos de - fragmentaci6n por acci6n de cargas explosivas, han hecho que es. ta técnica se encuentre en una fase de desarrollo inferior al - de otras ramas de la ingenierfa. Las voladuras que hasta épocas recientes venfan considerAndose como un "arte" nacido de 1a experiencia y pericia de los arti-- lleros, ha ido transform&ndose paulatinamente en una técnica ba sada en los andlisis detallados y racionales del conjunto de pa rametros que intervienen en los procesos de rotura de la roca. Asi, podemos diferenciar tres grupos de variables: - Propiedades de la roca. - Propiedades del explosivo. - Geometria de la voladura y secuencia de iniciacién. El primero de estos grupos constituye el principal obstéculo en el camino hacia la voladura 6ptima. 47 Los materiales poseen ciertas caracterfsticas fisicas que son - funci6n de su origen y de los procesos geol6gicos posteriores - que sobre ellos han actuado. El conjunto de estos fen6menos con ducen a un determinado entorno a una Litologia particular con - unas heterogeneidades debidas a los agregados minerales poli cristalinos y a las discontinuidades de la matriz rocosa (poros y fisuras); y a una estructura geol6gica en un estado tensional caracteristico, con un gran némero de discontinuidades estructu rales (planos de estratificaci6n, fracturas, diaclasas, etc). Los intentos realizados hasta hoy han consistido en relacionar los resultados de las voladuras con alguna de las propiedades particulares de las rocas. Desgraciadamente, el éxito ha sido escaso y nunca se ha llegado a establecer una clasificacién - cuantitativa para evaluar la competencia de las rocas frente.al proceso de fragmentaci6n, A nuestro juicio, dos son las causas de tan limitado éxito, por un lado las ya apuntadas heterogeneidades y discontinuidades de los macizos rocosos, y por otro, 1a discrepancia entre las pro. piedades mecdnicas de una muestra inalterada ensayada en labora torio y las propiedades del entorno del que se ha extrafdo la muestra. Por todo ello, el presente articulo pretende ponderar la influen cia relativa de las propiedades mecdnicas de los materiales y discontinuidades geol6gicas existentes cuando el macizo rocoso se somete a una variaci6n brusca del estado de tensiones como es el provocado por 1a detonacién de una carga explosiva 418 Especial hincapié se haré en aquellas consideraciones geol6gi-- cas sobre las que el proyectista de voladuras puede actuar, co- mo son la orientaci6n del frente de voladura, elecci6n del tipo de explosivo, etc. En la figura adjunta se establece la interdependencia que exis- te entre las propiedades de las rocas, las variables controla-- bles y algunas de las operaciones basicas que constituyen el ci clo minero, WESISTENCIA DINAMICA FRAGMENTACION A UALROTURA a l VOUAOURA WoouLs OF YOUNG oe Oe FOREST ‘ mo conrrotasies I CONTROLABLES Fig. 1. Interacci6n de las propiedades de la roca y las varia bles controlables con las operaciones mineras. 419 2, MECANISMOS DE FRAGMENTACION EN UNA VOLADURA Las voladuras pueden considerarse como sistemas en los que el explosivo actGa y 1a roca reacciona. La actuacién del explosivo puede asociarse al efecto combinado de 1a onda de choque (Ener- gia de tensién - Et) y los gases de explosién (Energia de burbu ja - Eh). La fracturacién debida a cada una de estas energias depende de las propiedades resistentes de las rocas. Prescindiendo del anflisis de las teorfas sobre el mecanismo de rotura, se han identificado siete modos de fragmentacién de la roca. 1, Trituracién del material m&s pr6ximo al barreno, 2, Agrietamiento radial. 3, Rotura por reflexién, 4, Fracturaci6n por liberaci6n de carga, 5. Apertura de las grietas por acci6n de los gases. 6, Fracturacién por cizalladura, 7, Rotura por colisi6n del material proyectado. 3, PROPIEDADES DE LAS ROCAS 3.1. DENSIDAD Las rocas densas requieren una mayor cantidad de energia para lograr una fragmentaci6n satisfactoria, as{ como un buen despla zamiento y esponjamiento del escombro. La expresi6n del impulso impartido a la roca por acci6n de los gases es: 420 =M.v 0 donde: Pp = Presi6n de los gases en el instante "t". a = Area sobre la que actfian los gases en el instante "t" M = Masa que corresponde desplazar al barreno, ve Velocidad de proyeccién, Tiempo en que los gases actGan hasta que escapan a la atm6s, fera. De su an&lisis se deduce que en rocas con una gran densidad, de beran tomarse las siguientes medida - Aumentar el didmetro de perforacién (La presién de barreno - p= Kip. vy gunos explosivos como el ANFO, con el didmetro del barreno) = velocidad de detonacién” aumenta en al - Reducir el esquema (a = Espaciamiento efectivo x Altura de banco) y modificar la secuencia de encendido. - Controlar 1a efectividad del retacado con el fin de aumentar "ty" y hacer que los gases escapen por el frente libre y no por el retacado. - Utilizar explosivos con una alta energia de burbuja Cuando 1a proyecci6n y el esponjamiento son de vital importan-- cia (como es el caso de minerales fisurados 0 friables de alta densidad) es m&s ortodoxo expresar los consumos energéticos en Kg/t y MJ/t que en unidades de Kg/m> 6 NJ/m>, 424 3.2, RESISTENCIAS DINAMICAS DE LA ROCA Las resistencias estdticas a compresi6n y a tracci6n se utiliza ron en un principio como parémetros definitorios de la aptitud de la roca a la voladura, Asi se estableci6 el indice de volabi lidad (Hino, 1959)° como 1a relaci6n 8& , de modo que a un mayor ratio resultarfa m&s ffcil fragnentar® el material, El tratamiento ortodoxo de los problemas reales obliga a consi- derar las resistencias dindmicas, ya que 6stas aumentan con el indice de carga (Rinehart, 1958; Persson et al, 1970) pudiendo llegar a alcanzar valores entre 5 y 13 veces mayores que las es taticas. Desafortunadamente, los par4metros dinfmicos de la roca determi nados en laboratorio no son representativos por la heterogenei- dad y anisotropfa de los macizos rocosos y por la imposibilidad de reproducir los ensayos en condiciones similares a los perio- dos de carga de una voladura,que son inferiores a 0,1 ms. En - ocasiones, los valores de laboratorio han superado a los obteni. dos "in situ" en proporciones de 5 a 8, siendo las macrofisuras y las tensiones residuales de 1a roca las responsables de tales discrepancias, Cuando 1a intensidad de la onda de choque supera a la resisten- cia dindmica a la compresién (R'c) se produce una trituracién de la roca circundante a las paredes del barreno por colapso de la estructura intercristalina. Pero esta trituraci6n contribuye muy poco a la fragmentacién ( ¢ 1%, Hagan 1978) y provoca una fuerte disminuci6n de la energia de tensién, llegando en rocas 422 porosas a suponer el 30% (Cook, 1958). Por ello se recomienda: = Seleccionar explosivos que desarrollen en las paredes del ba- rreno tensiones inferiores o iguales a R'c. - Para un explosivo dado, provocar una variacién de la curva presién-tiempo (P-t), por desacoplamiento de la carga dentro del barreno, Estos puntos tienen su maxima expresi6n en el disefio de voladu- tas perimetrales o de contorno. Durante 1a propagaci6n de la onda de choque, la roca se ve some tida a una intensa compresi6n radial desarrollandose tensiones tangenciales de tracci6n, Si estas tensiones superan la resis-- tencia dindmica a tracci6n (R't) se inicia la formaci6n de grie tas radiales alrededor de la zona triturada que rodea al barre- no, El n@mero y longitud de las grietas radiales aumenta con 1 La intensidad de la onda de choque en la pared del barreno o en el limite exterior del anillo de roca triturada. La disminuci6n de R't y el factor de atenuaci6én de la cner-- gia de tensi6n. 423, JUNTA ABIERTA ELENA DE JUNTA, LLENA — De, AGUA GRIETAS —_—~ INTERRUMPIOAS -eS PREMATURAMENTE = FRENTE LIBRE Figura 2. Trituraci6n y agrietamiento radial alrededor de un ba rreno y descostramiento interior por reflexién de la onda de choque. Las grietas radiales se distribuyen sistemfticamente alrededor del barreno propagindose en todas las direcciones, La presencia de grietas o juntas naturales puede facilitar segGn su orienta- ci6n la extensi6n de algunas grietas radiales o 1a reflexi6n de la onda de choque produciéndose una rotura por reflexi6n inte-- rior o spalling. De 1o expuesto se deduce 1a importancia relativa de la resisten cia dindmica a traccién, que para fines practicos puede suponer de un 5 a un 108 de la resistencia a compresi6n dinfmica simple. 424 3.3. PROPIEDADES ELASTICAS DE LAS ROCAS Antes de analizar las propiedades eldsticas de las rocas, es pre ciso poner de manifiesto algunos hechos relevantes. Las presio- nes generadas por los explosivos, especialmente en la proximidad de los barrenos pueden llegar a ser superiores a 10 PGa. Los m6- dulos de Young estan pr6ximos a 50 PGa y la resistencia a la com presi6n de 1a mayoria de las rocas varfa entre 0,1 y 0,4 PGa. Ba jo estas condiciones, la aplicaci6n estricta de la‘teorfa de la elasticidad no daria resultados muy positivos (Hagan et al, - 1979). A, Limite elastico de Hugoniot En la préctica, las rocas presentan un alto limite eldstico de Hugoniot. Para esfuerzos por debajo de este limite las rocas ac- tdan eldsticamente y no experimentan ningGn tipo de deformacién permanente, Como los limites de Hugoniot para la mayorfa de las rocas varfan entre 4 y 11 PGa (Harries, 1979), se supondré un comportamiento elAstico de éstas. B. M6dulo de Young e Indice de Poisson Para determinar las deformaciones el4sticas provocadas en el me canismo de la voladura, es preciso definir los médulos eldsti-- cos del material mediante m6todos dindmicos (sismicos) mejor que estaticos (mecdnicos). Antes de continuar, recordaremos que - El médulo de Young (E) se define como la relaci6n entre el es 425 fuerzo unitario de compresién o tracci6én y la deformaci6n lon gitudinal unitaria gp = SF/A (Esfuerzo unitario) 4 L/L (Deformaci6n unitaria) - Indice de Poisson (V), 6 la relaci6n entre el cambio unita-- rio del frea de la secci6n con 1a deformaci6n longitudinal u- nitaria, vy = AS/s_ (Cambio unitario del frea) AL/L (Deformaci6n longitudinal unitaria) Como las velocidades de propagaci6n de las ondas s{smicas son funcién de las caracteristicas eldsticas de los materiales a - través de las cuales se propagan, es posible servirse de ellas para, previa determinaci6n de la densidad en laboratorio, calcu lar los médulos elfsticos con las siguientes ecuaciones: Donde: vp Velocidad de propagaci6n de las ondas longitudinales. Vs = Velocidad de propagacién de las ondas transversales, P Densidad. 426 En la préctica para un indice de Poisson medio de 0,25 puede su ponerse que V, = 1,73 V,. Por otro lado, las propiedades elfsticas de las rocas fgneas y metam6rficas pueden correlacionarse bien con la densidad. Asi - del tratamiento estad{stico de los valores aportados por Clark (1966) para rocas con una densidad entre 2,6 y 3,4 t/m>, resul- ta: Vélocidad de propagacién | Desviacién standard | Coef. de correlacién (a/s) (ws) += Vp = 3450. - 3920 570 0,85 Vs = 1900. - 2010 380 L 0,83 Cuando e1 médulo de Young es alto, los gases del explosivo en-- contrarén resistencia para comprimir y dilatar la roca, La in-- fluencia del indice de Poisson es menos evidente pero puede re- lacionarse con la fragmentaci6n. El {indice de Poisson indica co mo el material almacena y libera energia. As{ una roca con un valor alto almacenar4 energia m&s facilmente que otra con un va lor inferior, Por ello, para un nivel de energia dado, se espe- rara una mejor fragmentaci6n de 1a roca cuando el {indice de -- Poisson sea bajo (Sassa e Ito, 1970). C, Médulo de Bulk o de incompresibilidad Es Ia relaci6n entre la presi6n y el cambio unitario de voldmen 427 x « -&P Cincremento de presién) AV/V (Variaci6n volumétrica) Puede calcularse a partir de la ecuaci6n: x= Wp? Pe 31 -)) Y sirve para estimar 1a proyecci6n de 1a roca, pues la presién de los gases que dentro de las grietas empujan a la roca hacia el frente libre es funci6n del médulo de Bulk. 3.3.1. DETERMINACION IN SITU DE LAS CONSTANTES ELASTICAS DE LAS ROCAS La determinaci6n de las constantes eldsticas de las rocas por métodos directos, resulta extremadamente dificil ya que las pro betas chequeadas en laboratorio, no incluyen las discontinuida- des estructurales y cambios litolégicos del macizo rocoso del que proceden, Para obtener una muestra representativa seria ne- cesario que tuviera al menos unas dimensiones 10 veces mayores que la distancia media entre discontinuidades o planos de frac- tura. Las tendencias se han dirigido hacia 1a determinaci6n "in situ" de las constantes eldsticas de las rocas, para tener en cuenta todas las discontinuidades, tensiones residuales, etc. Para ello y con el empleo de técnicas geofisicas, se medirén las ve- locidades de las ondas longitudinales y transversales (sismica de refracci6n, estudios up-holes y cross-hole, etc) y las densi dades de los distintos materiales, bien en laboratorio o por - 428 testificacién Gamma-Gamma, Estas técnicas se caracterizan por su bajo coste y relativa sim plicidad de interpretacién, pudi€ndose aplicar al disefio de las voladuras con la medici6n de las siguientes propiedades: M6dulo de Young e indice de Poisson (Ver epigrafe 3.3.). 2, Caracteristicas de las juntas o fracturas, incluyendo fre--- cuencia, volGmen y orientaci6n dentro del macizo. 3. Resistencia a 1a compresi6n. Algunas de las aplicaciones m&s directas al campo de las voladu Tas son las desarrolladas por Broadbent (1974), Heinen y Dimock (1976), en las que se relaciona con &xito los resultados de las voladuras con las velocidades sismicas de propagaci6n, en otras palabras, el consumo especifico de explosivo o m&s concretamen. te el factor de energia y la velocidad sismica. 0 ANFOr.) MALA FRAGMENTACION on VELOCIDAD SISWICA m/s (Yad Fig, 3. Correlacién entre velocidad sismica y consumo especifico 429 Como puede observarse, conforme aumenta la velocidad sismica se requiere una mayor cantidad de energia para una fragmentaci6n satisfactoria, Es ampliamente conocido el criterio de acopla-- miento de impedancias (Velocidad de propagaci6n en la roca x densidad de la roca = Velocidad de detonaci6n x densidad del ex plosivo) en el intento de maximizar 1a transferencia de energia del explosivo a la roca. Este m&todo ha tenido gran &xito en una explotacién americana de cobre donde se han llegado a reducir los costes de perfora-- cién y voladura hasta un 17%, Algunas de las precauciones a tener en cuenta cuando se adopta esta técnica son: 1, Cuando el material se encuentra saturado de agua, la veloci- dad sfsmica puede ser unos 300 m/s mayor que la que corres-- ponde al material seco, pero el posible aumento en el consu- mo especifico queda compensado por 1a mayor dificultad de ro tura de ese material. 2, Los registros sismicos se realizarfn cuando las unidades de operaci6n estén paradas con el fin de evitar posibles inter- ferencia. 3. En 6poca invernal con grandes heladas, pueden medirse veloci dades sismicas 600 m/s superiores a las registradas en condi. ciones normales, Esto es debfdo a que las ondas secundarias alcanzan los ge6fonos antes que las primarias, Esta discre- Rancia puede corregirse contrastando los datos recogfdos con los pertenecientes al banco superior en la zona de estudio 430 . Utilizar un espaciamiento correcto entre ge6fonos a fin de - evitar anomalfas producidas por niveles profundos o minados y hacer las medidas en dos sentidos segGn una misma direc- cién, 431 $62 692'0 erg £6 1st TL RoseuUTy eiyUODeL, shiz €£e'O ose 's ts €1t Us ‘s'n eupuadrag 992 Lgt'o OLS 6s'9 ose 6E'9 ‘sn ‘eLiez id PO'e 9820 omL9 9'Or Ist 2st ‘sn jouw 06 aa 009° €'8 Se ster ‘ypeueD wneusey oe oreo 0019 Vs oz za OTTe1UQ ‘wiyzowpouespH O12 LzE'0 ose"F ee 98T 6 ‘sn omer 08'z LIZ‘O ols i's ee Ler ‘so syouD 92'0 0920 ooL's £9 oz Ve ‘epeued steuD s8'z €0Z'0 o8t's Bot sot LT'6 ‘so oysmbsg 89'2 0sz‘0 S20°% 8'2 Les ese ‘s‘n eywotoq: e8'2 al 099°€ oL'e 61z ass ‘e101 89'2 osz‘o 000°S z's ast as errata “M ezheD Is'z cal ore 6s ‘0 gor Lz'0 ‘so vosTuery 1st 60e ‘0 seer’ 69'0 ver eer eruyBatA “mM eos juery e8'z SLz'0 of2's a9 ort Lor ‘so oqesed ae - 00L's cae zp 7 ‘erpuy eTodsTy = ara} : z avirenza | 48054 |avmantionotlavaiaicsy1a| otsavanoo| woovan v | avarivoot | YO%, Gvarovan | aa onan | vvioNastoay | VONGESISSY YOO" Ad SOATL SOSWAATO FT SVOINVOENOTD SHAVOaTAONd 432 3.4, POROSIDAD Podemos dintinguir dos tipos de porosidad: Porosidad intergrany lar o de formaci6n y porosidad de disoluci6n o post-formaci6n. La primera cuya distribucién en el macizo puede considerarse uniforme provoca dos efectos - Atenuacién de la energia de 1a onda de choque. ~ Reduccién de la resistencia dindmica a la compresi6n y, conse cuentemente, incremento de la trituracién y porcentaje de fi nos, Los CAlculos indican que las longitudes de las grietas origina- das por la onda de tensi6n en una roca muy porosa son aproxima- damente el 25% de las inducidas en rocas no porosas con la mis- ma composici6n mineral6gica (Hagan, 1979), El trabajo de frag- mentaci6n de rocas muy porosas, se realiza casi en su totalidad por la energia de burbuja, por lo que deberdn observarse las si guientes recomendacione: + Utilizar explosivos con una relacién Eburbuja eieyada, co- E tensién mo por ejemplo ANFO. mediante el ~ Incrementar 1@ Eyurpuja 2 Sta de 18 Exons ign desacoplamiento de las cargas (L. Jimeno, 1980). - Retener los gases de voladuras a alta presién con un dimensio namiento adecuado de 1a longitud y tipo de retacado. - Con varios frentes libres, mantener dimensiones iguales de la piedra en cada barreno. 433 La porosidad de post-formacién es la causada por los huecos y - cavidades que resultan de la disoluci6n del material rocoso por las aguas subterrdneas (Karstificaci6n). Los espacios vacios - son mucho mayores y su distribucién es menos uniforme que la de la porosidad intergranular. Las cavidades intersectadas por los barrenos no solo dificultan la perforaci6n con la pérdida de varillaje y atranques, siné in cluso la eficiencia de la voladura. Algunos de los problemas - que originan se exponen a continuacién y son especialmente gra- ves con los explosivos a granel y bombeables: 1, Cuando cada barreno se carga con una cantidad de explosivo dada, se produce una excesiva concentraci6n de cargas en las cavidades y, por consiguiente, una reduccién del explosivo en la parte superior de los barrenos, —RETACADO ESPACIADOR PROYECCIONES 3 RETACADO INTERMEDIO Fig. 4, Ejecucién correcta de la carga de un explosivo a gra nel en un terreno con coqueras. 434 Estos problemas pueden solventarse cuando es posible situar un retacado o espaciador intermedio a la altura de la coque- ra o cavidad que corta al barreno, en caso contrario, deberé intentarse aumentar la energfa de explosivo en la parte alta de los barrenos contiguos con el fin de obtener una fragmen- taci6n adecuada de la roca afectada por el retacado. Si los barrenos se cargan con explosivo hasta alcanzar una dimensién del retacado, las coqueras conectadas con los ba-- rrenos originarén grandes concentraciones de explosivo con el consiguiente riesgo de cortes, proyecciones y sobreexcava ciones, Si los barrenos no intersectan a las cavidades, el rendimiento de la voladura disminuye por: La prematura terminaci6n de las grietas radiales al ser in-- tersectadas, en su propagaci6n, por los huecos existentes FRENTE GRIETAS Figura S$, Terminaci6n prematura de las grietas radiales al intersectar una cavidad. 435, 2, La r&pida caida de la presi6n de los gases al intercomunicar, se el barreno con las cavidades. Y por ello, el frenado de la apertura de grietas radiales al escapar los gases hacia los espacios vacios. PRES. BARRENO INSTANTE_EN QUE ESCAPAN LOS GASES HACIA LA COQUERA BET OE HR? BARRENO PROXIMO A JCOUERA TIEMPO Figura 6, Cafda de presién por el escape de los gases hacia un espacio vacio 3.5. FRICCION INTERNA Como las rocas no constituyen un medio eldstico perfecto, parte de la energia de 1a onda de tensi6n que se propaga a través de 61, se convierte en calor por diversos mecanismos, Estos meca-- nismos son conocidos por "fricci6én interna" 6 “capacidad de - amortiguacién especffica-SDC" que miden la disponibilidad de - las rocas para atenuar la onda de tensi6n generada por 1a deto- nacién del explosivo, La SDC varfa considerablemente con el ti- po de roca: desde valores de 0,02-0,06 para los granitos (Win- 436 des, 1950; Blair, 1956) hasta los de 0,07-0,33 para areniscas, La SDC aumenta con la porosidad, la permeabilidad, las juntas y el contenido en agua de la roca, También aumenta considerable-- mente con los niveles meteorizados en funci6n de su espesor y alteraci6n, La intensidad de la fracturacién debida a la onda de tensi6n au menta conforme disminuye SDC, As{ por ejemplo, los explosivos - tipo slurry son més efectivos en formaciones duras y cristali- nas que en los materiales blandos y descompuestos (Cook, 1961; Lang, 1966), Por el contrario, en estos Gltimos, el ANFO es mas adecuado a pesar de su menor energia de tensién, 4, PROPIEDADES DEL MACIZ0_ ROCOSO 4.1, PLANOS DE DISCONTINUIDAD PRE-EXISTENTES Todas las rocas de la naturaleza presentan algGn tipo de discon tinuidad -microfisuras y macrofisuras- que influyen de manera decisiva en las propiedades fisicas y mecdnicas de las rocas y consecuentemente en los resultados de las voladuras, En efecto, en el caso de voladuras de produccién, un porcentaje de 1a pila de escombro se presentar4 en tamafios superiores al admitido por el equipo de carga y 1a machacadora, por lo que se requeriré - una fragmentaci6n adicional con el consiguiente aumento de los costes de producci6n. Por otro lado, en 1a construccién de ins- talaciones portuarias y presas de escollera se hacen encesarias determinadas dimensiones y porcentajes de roca que raramente - son conseguidos en voladuras de produccién. 437 De las consideraciones anteriores se desprende 1a importancia del estudio de las regularidades estructurales cuantitativa y cualitativamente, El estudio detallado deberd4 basarse en el an4lisis de los resul tados de los sondeos y su correlacién con los datos recogidos - de la observaci6én directa definiendo localizaci6n, orientacién (direccién y buzamiento), espaciado, espesor, tipo de relleno y coeficiente de rugosidad de dichos pianos. Las discontinuidades pueden ser cerradas, abiertas o rellenas, y por ello con diferentes grados de transmisi6n de 1a energia del explosivo, Las paredes de estas discontinuidades son super- ficies planas sobre las cuales se reflejan las ondas de choque atenuando y dispersando 1a energia desarrollada, En discontinuidades cerradas o bien cementadas, las grietas ra- diales inducidas por 1a detonacién las cruzaran permitiendo su propagaci6n a través del macizo. Cuando las discontinuidades es tan abiertas y sin material de relleno, 1a reflexi6n de 1a onda de choque puede originar la fracturaci6én por descostramiento in terno (Figura 2), Las grietas radiales seran en este caso inte- rrumpidas prematuramente al no transmitir esfuerzos de tracci6n se mejoraré 1a fragmentaci6n entre el barreno y la discontinui- dad, pero se reduciré al otro lado de ésta. Un efecto similar puede suceder si el material que rellena las discontinuidades tiene una impedancia actstica inferior a la de la roca, la energia de la onda refractada aumentar4 conforme la impedancia del relleno se aproxime a la de 1a roca 438 Otro efecto de las juntas abiertas cuando intersectan a los ba- rrenos, es el prematuro escape de los gases producidos y 1a cai, da drastica de la presién de barreno. Consecuentemente, la frag mentaci6n y el desplazamiento debido a la energia de burbuja - disminuiré y especialmente cuando esas juntas abiertas conectan el barreno con el frente libre, Otros efectos negativos son los constituidos por las frecuentes proyecciones, mayor nivel de on da aérea y las sobreexcavaciones. A, CARACTERIZACION DEL MACIZO ROCOSO Una de las clasificaciones mis extendidas es 1a establecida a partir del R.Q.D. (Deere, 1968) que se define como el’ porcenta- je de la longitud de testigo recuperado en trozos mayores de 10 cm, respecto a la longitud del sondeo R.Q.D. Calidad de la roca o- 25 Muy mala 25- 50 Mala sO - 75 Media 75 - 90 Buena 90 - 100 Excelente Por otro lado cuando no se dispone de sondeos, puede determinar se el "Volumetric Joint Count - Jv" como el nGmero total de jun tas por metro cGbico, obtenido al sumar las juntas que hay por metro para cada familia de juntas. 439 Jy Caracterfsticas del _macizo 1 Bloque masivos 1- 3 Bloques grandes 3-10 Bloques tamafio medio 10 - 30 Bloques pequefios 30 Bloques muy pequefios Palsmtrom (1974) relacion6 el indice Jy con el RQD establecien- do la expresi6n: R.Q.D. = 115-3,3Jy (para Jy< 4,5; R.Q.D. = 100) 400: ¥ N \ 90 5 4 aul \ RQD=115-3.3. Jv 50 c h 3 ie « \ \ 8 \ \ ° 1 2 3 6 0 2 90 60 VOLUMETRIC JOINT COUNT (Jv) joints pys Bloques | Bloques | Bloques | Bloques |Bloques masives | grandes | medios | pequefios| muy pequefios Figura 7, Relaci6n entre R.Q.D. y Jy, 440 Merrit (1968) también ha establecido una correlaci6n entre el R.Q.D. y el indice de velocidad del macizo, que se define como el cuadrado de la relacién entre 1a velocidad sismica en el son- deo y en el laboratorio, que son en esencia equivalentes a las velocidades en el macizo rocoso y en la matriz rocosa. y ve Vv INDICE DE VELOCIDAD ( Fem steqoo 100 ¥=0,0070x + Loo 21 7 Rao-% A NEI ‘4 NEIS Y ESQUISTOS * CALIZA 5 RIOLITA Y DACITA = CALIZA ‘AREMSCAS, Xx ARENISCA ¥ LIMONITA ¥ EIS Y ESQUISTO v NEIS © NEIS Y ARENISCA + NEIS Y ESQUISTO Figura 8, Correlacién entre R.Q.D, e indice de velocidad 441 Helfrich et al (1970) mediante sismica de refracci6n, relaciona las velocidades de propagaci6n de las ondas longitudinales en - material de fracturado "Vp1" e intensamente fracturado "Vpo" con el nfmero de fracturas por metro y la velocidad s{smica en un frente dado "Vpe" siendo "K" una constante, Otra investigaci6n mas reciente es 1a debida a Sjogren et al (1979) que relaciona 1a velocidad de propagaci6n longitudinal y e1 R.Q.D. con distintos parémetros geomecdnicos. 442 muy waa] ata wen — | ovens fexcer rao a0 ee 100m/s Vp VELOCIDAD LONGITUDINAL -20 4 _ 192 oa ae FRACTURAS POR METRO “s a ee pF toncituo me nia 0 restig0 (em) 5 10 20 Ltd es ppcinc0 oe rracTURAS (em) 227308 su as Pe Edin MODULO ONAMICO DE DEFORMACION Figura 9, Correlacién entre distintos parametros geomecdnicos del macizo con el R.Q.D. y velocidad de transmisi6n longitudinal Un indice importante en la caracterizaci6n del macizo rocoso y a partir del cual se evidencian los cambios litol6gicos asf co- mo las direcciones preferentes de las discontinuidades y esfuer zos tect6nicos, es el de anisotropia. Una de las expresiones 443, més empleadas cuando se realiza prospeccién sismica es la defi- nida por Bur: Vmax - Vmin (Vmax/2 - Vmin/2) B, DISENO DE LAS VOLADURAS ATENDIENDO AL CONTROL ESTRUCTURAL La tendencia actual en el campo de las voladuras se dirige ha- cia el empleo de grandes didmetros de perforaci6n 12-15", Esto obliga a plantear esquemas muy abiertos en los que el efecto de las discontinuidades geol6gicas es cada vez més acusado al ser mayor e1 nGmero de planos de debilidad entre barrenos contiguos, maxime si los sitemas de juntas han dado lugar a 1a conforma-- ci6n de bloques. BLOQUE DISCONTINUIDADES CONFORMADO (a) ESQUEMA CERRADO (bd) ESQUEMA ABIERTO Figura 10, Efecto de las discontinuidades en dos esquemas de vo ladura con didmetros de barreno pequefios (a) y gran- des (b). Obviamente una de las formas para reducir la influencia de las discontinuidades estructurales consiste en aumentar la perfora- cién especffica (ml/m>) con lo que 1a probabilidad de atravesar un bloque dado aumenta a expensas de incrementar el coste de - perforaci6n, Existen otras herramientas basadas en la orienta-- cién de los frentes que pueden ayudar a mejorar los resultados de las voladuras. La mejor fragmentaci6n se obtiene cuando 1a direcci6n de abati- miento forma 90° con la direcci6n predominante de las disconti- nuidades (Belland, 1966). Con esta configuracién, e1 nuevo fren te suele coincidir con un plano de discontinuidad posibilitando 1 empleo de espacimientos mucho mayores que la piedra. Cuando las juntas son subverticales, esta disposicién minimiza los pro blemas de repiés pero, sin embargo, es necesaria la perforacién inclinada para mantener una dimensi6n de la piedra constante en la primera fila de barrenos. ULTIMA FILA DE PLANOS DE BARRENOS DE_LA ESTRATIFICACION VOLADURA’ ANTERIOR NUEVO FRENTE Figura 11, Excesiva piedra en el repié provocada por la estruc- tura del macizo. 445 Otro inconveniente suele ser la sobreexcavaci6n detras de la GL tima fila de barrenos, En estos casos, se obtienen majores re-- sultados cuando el frente forma con la direccién de las discon- tinuidades dominantes un 4ngulo de hasta 45° 6 135°, Pero cuan- do dicho Gngulo oscila entre 30° y 60° se desarrollaran grandes grietas detraés de la Gltima fila dejando una cara de banco irre gular y escalonada, Estas grietas son juntas que han sido abier tas por la invasién de los gases y por 1a acci6n del movimiento relativo de la roca, Para minimizar estos problemas se recomien da un esquema similar al de la figura adjunta. SECUENCIA DE INicucion £5° FRENTE PLANOS DE ESTRATIFICACION Figura 12, Esquemas de voladura al tresbolillo "VI" 446 Las voladuras en las que el frente es normal a la direcci6n de las discontinuidades suele dar también buenos resultados, Cuando la estratificaci6n o las sistemas de juntas presentan una pequefia inclinaci6n <30° se recomienda que los barrenos sean normales a dichos planos con el fin de aumentar el rendi- miento de la voladura, NSION ONDA DE CHOQUE PLANOS DE PISCONTINUIDAD - ES Figura 13, Mejora de 1a fragmentaci6n con la perforaci6n incli- nada. Si los estratos son semihorizontales y presentan un buen despe- gue a la cota del piso puede prescindirse de la sobreperfora-- cién que normalmente tiene una longitud de 8 veces el dismetro de perforacién. Otro intento por considerar las discontinuidades estructurales en el disefio de voladuras es aquel en que se relaciona la fre- 447 cuencia de fracturas y la resistencia a cizallamiento de las - mismas con el consumo especffico de explosivo (Ashby, 1977). CONSUMO ESPECIFICO # ANFO | soma SpNsuMagspeGrico 0,56 ¥ Tan (6 +i) xs- [42-9 St Frecuencia de fracturacién \ “ donde ¥ = densidad de la roca in situ 034 98 # =4ngulo bésico de friccién 07 i =dngulo de rugosidad os. os. 0s4 024 4 dngulo de friccidn (pei) os v oa 03 aif 02 o24 on a #225 ym FRECUENCIA DE FRACTURACION — (Fracturas /metro} Fig. 14. Relaci6n empfrica entre el consumo especffico, frecuen cia de fracturaci6n y resistencia al corte de las mis- mas desarrollado en la mina de Bouganville. 4,2, CAMBIOS LITOLOGICOS Las voladuras en zonas donde se produce un cambio litolégico brusco, por ejemplo estéril y mineral, y consecuentemente una 448 variacién de las propiedades resistentes de las rocas obliga a la reconsideraci6n del planteamiento del disefio basado en: a- Esquemas iguales para los dos tipos de roca y variacién de las cargas unitarias. b- Distintos esquemas con igual carga por barreno. Esta disposi ci6n suele adoptarse manteniendo 1a dimensién de la piedra igual (Figura 15), ya que 1a introducci6n de un esquema -- E x V distinto en cada zona entrafiaria una mayor complejidad de perforaci6n y un escalonamiento del nuevo frente creado. SECUENCIA DE INICIACION RELE DE RETARDO CORDON DETONANTE ROCA BLANDA ‘ROCA DURA Figura 15. Cambio de esquema recomendado V = V1 ; E # EL Los yacimientos estratiformes semihorizontales que presenten al gGn horizonte muy resistente pueden aconsejar un tipo de voladu ras particular en las que las cargas se alojen en los barrenos perfectamente confinadas a la altura de tales horizontes, tam- bién suele aconsejarse que 1a localizaci6n de los multiplicado- res en las columnas de explosivo coincida con los niveles més 449 duros a fin de aprovechar al mfximo la energia de tensi6n desa rrollada. RELE DE RETARDO SECUENCIA DE INICIACION ROCA DURA ROCA BLANDA Figura 16, Esquema no recomendado. Cuando se encuentran en contacto dos materiales de caracteristi cas resistentes muy diferentes como por ejemplo, una caliza com petente en contacto con arcillas muy pl&sticas (terreno Karsti- co) y si los barrenos atraviesan estas formaciones, se produci- ra una gran pérdida de energia asociada con la cafda de presi6n de los gases al producir deformaciones pldsticas en dichas arci llas, y por consiguiente se obtendr4 una mala fragmentaci6n. ARCILLA. PLASTICA RETACADO ESCARE. De, “ALTA PRESION CALIZA CARGA .DOR MULTIPLICA\ Figura 17, Casos tipicos de cambios litolégicos con contacto entre rocas comperentes y materiales pl4sticos. 450 Para aumentar el rendimiento de las voladuras se pueden. adoptar las siguientes medidas: 1, Retacar con material adecuado (de tamafio 1/17 de didmetro de perforaci6n) aquellas zonas del barreno que estén en contac- to con material plastico o préximo a ellas, Para realizar és to es necesario un cuidadoso control de la perforacién obser vando el detritus y midiendo longitudes perforadas. 2, Emplear cargas de explosivo totalmente acopladas a la roca - competente con una gran velocidad de detonaci6n y una rela-- ci6n de Energia de tensi6n/Energia de burbuja alta.. 3. Localizar los multiplicadores o primers en el punto medio de la roca competente para incrementar la resultante de la onda de tensién que actGa a ambos lados. 4. Evitar el prematuro escape de los gases a la atmésfera asegu rando que tanto la longitud de retacado (al menos 20 d) y la dimensién de la piedra son correctas en la parte superior de los barrenos. 4.3. CONTENIDO EN AGUA Las rocas porosas y los macizos intensamente fracturados cuando se encuentran saturados de agua presentan habitualmente ciertos problemas: - Necesidad de seleccionar explosivos no alterables por el agua - Pérdida de barrenos por hundimientos internos y consecuentemen tet 451 - Dificultades en la perforaci6én inclinada. Por otro lado, el agua afecta a las rocas y a los macizos roco sos en los siguientes aspectos: a- Aumenta la velocidad de propagacién de las ondas eldsticas. b- Reduce 1a resistencia de las rocas a compresi6n y a traccién (Obert y Duval, 1967) al ser menor la friccién entre particu las. c- Reduce la atenuaci6n de la onda de tensi6n y por ello, se in tensifican los efectos de rotura por Ey (Ash, 1968). d- Las juntas 1lenas de agua permiten el paso de las ondas de tensi6n sin que se produzca un descostramiento interno. Pero cuando el macizo entra en tensién, ese agua se moviliza ejer ciendo un efecto de cufia que puede llegar a producir una - gran sobreexcavacién. 4.4, TEMPERATURA DEL MACIZO ROCOSO Los yacimientos que contienen piritas pueden presentar proble- mas de altas temperaturas de la roca por efecto de 1a oxidacién lenta de ese mineral, haciendo que los agentes explosivos del tipo ANFO reaccionen exotérmicamente con la pirita excitfndose a partir de una temperatura de 120°C * 10°C. Las Gltimas investigaciones del U.S.B.M. apuntan a una primera reacci6n entre el ANFO y el sulfato ferroso hidratado, y més es. pecialmente entre el nitrato aménico y el sulfato ferroso hidra 452 tado, inicidndose una reacci6n exotérmica que se automantiene a partir de los 80°C, Este sulfato ferroso es uno de los productos de descomposicién de las piritas, adem&s del sulfato férrico y el 4cido sulfGrico. Fe S) + 7/2 0) + 1,0 — Fe *? + 250," + 2H* (Meteorizacién). Fet? + 1/4 0, + HY — Fe*3 + 1/2 H,0 (Oxidaci6én ferroso a £6 rrico) Fe S, + 14 Fe*3 + su,0 — Fe*? + 280°? + 16H" (reaccién con la pirita) Estas reacciones se ven favorecidas por la presencia de cier-- tas bacterias oxidantes como la "thiobacillus ferro oxidans" y “thiobacillus tiooxidans" que mantienen indefinidamente las reacciones, Cuando el ANFO se carga en los barrenos, &ste se pone en contac to con la pirita, pero también con el sulfato ferroso y £6rrico desencadenandose mfltiples reacciones complejas. Para obviar este inconveniente que, en varias ocasiones ha de- sembocado en graves accidentes, se han afiadido diversas sustan- cias inhibidoras al ANFO , tales como urea, oxalato pot&sico, etc., 1legando a la conclusi6n de que con el aporte al ANFO de un 5% en peso de urea, se evita la reacci6n exotérmica de la mezcla ternaria hasta una temperatura de 180°C (Miron et al, 1979), 453 350 ; ; LEYENDA Ensayo Inhibidor “een peso Nota ° 300;- 018 Urea 1 Reaxcicn, ~ 135°C 7 o19 Urea 5 No reaccién a 180°C "21 Potassium onolate: 2 Reaccidn, ~ 150 °C aso 423 Alwar 2 Reacidn, ~ 140°C. » 4 2 < o . 5 200 S = a g 150 a S 109) 2 agcke ge 8 gacce 50) o. ga Fo ° 50 100, 150 200 250 TIEMPO, min, Figura 18. Perfiles tiempo-temperatura para mezclas de ANFO-mi- neral-sulfato ferroso e inhibidor, La sensibilidad de los explosivos tipo slurry depende también de 1a temperatura de la roca con la que esté en contacto, por ello es necesario prestar la mayor atenci6n a este fen6meno Una recomendacién general cuando se presentan estos problemas es 1a de limitar el nGmero de barrenos por voladura a fin de disminuir el tiempo que transcurre entre la carga y el disparo. 5. CONCLUSIONES Los resultados de las voladuras dependen b4sicamente de las pro 454 piedades del explosivo y del macizo rocoso, Los intentos por co rrelacionar esos dos grupos de pardmetros no han tenido el éxi to esperado ante Ia dificultad de seleccionar muestras represen tativas que integren las discontinuidades y heterogeneirades - del macizo rocoso, Una vez caracterizado éste, la primera etapa en el disefio de una voladura consiste en elegir el tipo de explosivo que mejor se adapte a las propiedades geomec4nicas de la roca y condicio- nes de trabajo, En la segunda etapa, se procede a estudiar la cantidad y distribuci6én de las cargas, Para esta fase se han de sarrollado mGltiples métodos y expresiones empiricas, pero a - nuestro juicio, una de las que aportarfa mayor fiabilidad seria aquella que contemplase 1a velocidad sismica de propagaci6n de las ondas eldsticas en el medio a fragmentar, En esta linea es- tan trabajando algunos centros de investigaci6n internacional y nuestra aportaci6n a este campo la expusimos en las VI Jornadas Minero-Metalfrgicas de Huelva (1980). La tercera etapa corresponde a 1a adecuaci6n del disefio geomé- trico con las variables del control geoestructural, asf como el cAlculo de tiempos Sptimos de retardo, 455 BIBLIOGRAFIA ASH, R.L. 1968, The design of Blasting Rounds, Ch.7.3. Surface Mining, Ed. E.P. Pfleider, AIME (1968). ASH, R.L. 1973, The influence of Geological Discontinuities on Rock Blasting, Ph.D, Thesis, University of Minnesota - (1974). ATCHISON, T.C. 1968, Fragmentation Principles, Ch.7.2. Surface Mining, Ed.E.P, Pfleider, AIME (1968) BELLAND, J.M., 1966, Structure as a control in Rock Fragmenta: tion, Carol Lake Iron Ore Deposits, CIM Bulletin, V.59, N.647 (Marzo, 1966), BHANDARI, S., 1974, Blasting in Non-homogeneous Rocks, Austra- lian Mining, v.66, N.5. (Mayo 1974). BLAIR, B.E., 1956, Physical Properties of Mine Rock, Part III. USBM RI No. 5130 (1955); Part IV USBM-RI, N2 5244 (1956) BROADBENT, CD., 1974, Predictable lasting with in-situ seismic surveys, Mining Engineering, V.26. N.4 (Abril, 1974). 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