oficinas en nuestro pas en diciembre de 2012 de la mano del abogado Juan Cristbal Recart Salas, sus vnculos con Chile son de larga data y abundantes. Hasta ahora CIPER ha identificado que desde fines de los 70 a la fecha, la firma panamea ha sido vehculo para la creacin de cerca de 200 entidadesoffshore vinculadas a chilenos o a extranjeros con inversiones en Chile, en jurisdicciones como Panam, Islas Vrgenes Britnicas, Bahamas, Seychelles y Nevada (USA).
En Chile no se sabe con certeza el total de capitales invertidos en parasos fiscales. La
nica aproximacin posible es a partir de las declaraciones realizadas por contribuyentes chilenos con dineros alojados en esas jurisdicciones. En 2015, segn informacin entregada por el Servicio de Impuestos Internos (SII) a CIPER, existan US$11.200 millones, declarados por 408 contribuyentes con inversiones en Panam, Islas Caimn e Islas Vrgenes Britnicas. La cifra equivale al total de los prstamos que hizo en el mismo ao el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en toda Amrica Latina y el Caribe. Pese al secreto y al amplio pliego de resquicios que hacen de un paraso fiscal un poderoso imn de capitales, abrir y mantener sociedades en esas jurisdicciones no es ilegal. Pero los hechos y los mismos registros de Mossack Fonseca demuestran que los parasos fiscales han sido suelo frtil para albergar dinero proveniente de actividades ilcitas y para burlar o disminuir la carga tributaria va elusin o evasin que deben pagar los capitales en los pases donde stos fueron generados. La informacin disponible en los archivos de Mossack Fonseca vinculada a Chile no arroja evidencias de ilegalidades. Para romper ese cerco, se necesitara contar con la informacin bancaria completa de esas sociedades y cruzar esos registros con bases de datos del SII y del Banco Central, pero esa informacin por ley se encuentra bajo secreto. De las cerca de 200 entidades offshore vinculadas a Chile y que han sido creadas por Mossack Fonseca entre 1977 y 2015, alrededor de 70 estn an activas segn los registros a los que tuvo acceso CIPER. A la mayora de sus beneficiarios CIPER les envi una carta explicndoles de qu trataba la investigacin y preguntndoles si sus sociedades offshore siguen activas; si stas son poseedoras de cuentas corrientes; y si los dineros vinculados a esas cuentas se haban acogido o no a la repatriacin de capitales durante 2015.