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Pesca Sustentable
y Soberanía Alimentaria
en Uruguay
Un modelo para armar

PROGRAMA
AMIGOS DE LA TIERRA URUGUAY URUGUAY SUSTENTABLE
REDES
AMIGOS DE LA TIERRA URUGUAY
PROGRAMA
URUGUAY SUSTENTABLE

Autor:
Oscar Galli
ogalli@adinet.com.uy

Redes Amigos de la Tierra Uruguay


Programa URUGUAY SUSTENTABLE
San José 1423, Montevideo
Tel.: (598 2) 908 2730
urusust@redes.org.uy

fotografía:
Ricardo Antúnez
Pescadores artesanales en el Uruguay

diagramación
Javier Cedrés
Presentación

La tradicional noción de progreso con- tal, equidad social y soberanía y seguridad


cebida como la expansión extractiva ilimita- alimentaria, en la producción de materia
da y los procesos de concentración econó- prima a partir de la pesca y la acuicultura
mica, transnacionalización e industrializa- intensiva. La Organización Mundial del Co-
ción, se enfrentan diariamente en los ámbi- mercio (OMC) refuerza estos mecanismos,
tos local y global con las evidentes restric- buscando aumentar el control de las multi-
ciones de carácter biológico y ambiental nacionales sobre los recursos naturales fa-
que presentan los recursos y los ecosiste- cilitando que las decisiones sobre el uso de
mas marinos. los recursos dependan de las demandas en
En términos globales se sostiene que la el corto plazo de los mercados financieros,
capacidad de regeneración de los ecosiste- intensificando la explotación pesquera de
mas ya fue sobrepasada y que actualmen- los caladeros tradicionales de los países en
te consumimos el stock de la naturaleza en desarrollo.
vez de vivir de los servicios que esta pro-
porciona, pero esta afirmación que resulta El presente documento tiene como ob-
clara a escala planetaria y considerando jetivo sentar las bases de discusión para
que el proceso de globalización tiene exis- lograr avanzar hacia la definición y el papel
tencia real, pierde su significado con el de la pesca nacional en lo que tiene que
cambio de escala en el análisis. ver con la soberanía alimentaria, los acuer-
Para las sociedades del Sur la realidad dos de libre comercio, la lucha contra la
es muy otra, no consumimos el stock de la pesca no regulada, ilegal y no reportada y
naturaleza ni los servicios de ésta, en reali- el ordenamiento de las operaciones de
dad se explotan los ecosistemas hasta so- pesca en alta mar.
brepasar el límite de recuperación para que
los consuman otras sociedades, entonces la La demanda en el ejercicio de un con-
evaluación del sobreconsumo, la seguridad trol democrático sobre los recursos natura-
y soberanía alimentaria en el sur adquiere les de la nación y el ecosistema marino,
un significado fundamental en el análisis será efectiva si se fortalece la participación
de los límites del planeta. Desde el Sur, la popular, no solo en el acceso a los recur-
redistribución es uno de los primeros te- sos, sino también en el proceso de toma
mas en las agendas de sustentabilidad. de decisiones, de manera que sea posible
En este contexto se plantea la contra- construir un modelo alternativo para el de-
dicción existente entre lo que establecen sarrollo pesquero basado en la sustentabi-
las políticas económicas de libre mercado lidad del ambiente, la equidad económica y
y los aspectos de sustentabilidad ambien- social.

Pescadores artesanales
en el Uruguay
I. Consideraciones generales

Desarrollo sustentable y soberanía alimentaria

En el contexto de la globalización y libe- agrarias, de empleo, pesqueras, alimenta-


ralización a escala planetaria, el desarrollo rias y de tierra de forma que sean ecológi-
ha sido reducido a un simple aumento de la cas, sociales, económicas y culturalmente
producción y el consumo de bienes mate- apropiadas para ellos y sus circunstancias
riales y servicios. Pero, el desarrollo no es únicas. Esto incluye el verdadero derecho a
un resultado que se alcance con el creci- la alimentación y a producir los alimentos,
miento económico. Por el contrario, se tra- lo que significa que todos los pueblos tie-
ta de un proceso que permite a todos los nen el derecho a una alimentación sana,
niveles de la sociedad –individual, colecti- nutritiva y culturalmente apropiada, y a la
vo, nacional- volverse más autodetermina- capacidad para mantenerse a sí mismos y a
dos y más independientes en la elección de sus sociedades3.
opciones relacionadas con su propio futu- En la actualidad, se ha estimado que
ro”. 1 existe un 18% más alimento por habitante
que hace 30 años, pero a su vez, una de
El concepto de sustentabilidad2 logra in- cada 5 personas en los países en desarro-
troducir en el ámbito internacional los de- llo no tiene alimento suficiente para cubrir
safíos ambientales del desarrollo, anterior- sus necesidades diarias4. Los países de
mente solo relacionado a dimensiones eco- América Latina y El Caribe, exportadores
nómicas y sociales. Conceptualmente, la netos de alimentos presentaban en 1990 el
sustentabilidad se considera como "la rela- 13% de su población desnutrida, con un
ción entre la explotación o aprovechamien- consumo promedio regional por habitante
to y la capacidad de renovación biológica de 2581 caloría diaria, cifra inferior al míni-
de los recursos, modulada por las condicio- mo de 2700 estimada por la Organización
nes del medio ambiente natural y social con Mundial de la Salud (OMS) para la existen-
una visión de largo plazo". cia de una vida sana y activa. Esta parado-
El desarrollo sustentable es definido co- ja ocurre en momentos en que la produc-
mo aquel que satisface las necesidades de ción mundial de alimentos permitiría cubrir
las generaciones presentes, sin comprome- las necesidades del doble de la actual po-
ter la satisfacción de las necesidades de las blación del planeta5.
generaciones futuras. Aspira a incorporar
en la agenda política tanto la concepción En Uruguay, la realidad actual está pau-
de interdependencia entre la especie hu- tada por la siguiente contradicción: por una
mana y la naturaleza, como la dimensión parte se cuenta con disponibilidad de tie-
de equidad entre generaciones. rras productivas (existen 2 hectáreas/habi-
El término “desarrollo sustentable” sur- tante disponibles de tierras con aptitud de
gió como una alternativa con nuevas estra- uso alta y muy alta para el uso agrícola o
tegias para el manejo de estos sistemas, pastoril, y aún suponiendo que el 50% de
que contemplen una perspectiva múltiple los suelos estén degradados corresponde
que incluya aspectos productivos, sociales, 1Há/hab), junto a una superficie de recur-
culturales y ecológicos. Desde luego que el sos hídricos de 177.520 km2, con más de
reto ha sido aplicar estos conceptos a ac- 100 especies factibles de comercialización
ciones prácticas. La sustentabilidad, como que de una u otra forma son capturadas
enfoque de administración de los recursos por la flota industrial y artesanal (marinas y
naturales, debería extenderse para contri- dulceacuícolas). Al mismo tiempo el 50%
buir a la preservación de los recursos reno- de los niños menores de 5 años vive por
vables y por lo tanto al bienestar de la po- debajo de la línea de pobreza, entre los
blación y la soberanía alimentaria. cuales 19% sufre desnutrición aguda y el
La soberanía alimentaria se puede defi- 31% desnutrición crónica sumado además
nir como el derecho de los países y los pue- a que 800.000 personas se encuentran de-
blos a determinar sus propias políticas socupadas o subocupadas.

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Contribución de la Pesca a la seguridad alimentaria

La pesca a escala mundial debería de América del Norte, de la Unión Europea, y


contribuir de manera importante a la nutri- Japón teniendo 1/6 de la población mun-
ción humana y al progreso social y econó- dial, consumen alrededor del 50% del total
mico. En los últimos cuarenta años, la pro- de la producción pesquera. En Japón el con-
ducción se ha quintuplicado, pasando de sumo es de 70 kilos por habitante al año, en
unos 20 millones de toneladas a 98 millones los países de la Comunidad Europea es de
toneladas. Hacia la primer década del 2000 23,5 kilos, y en Africa del Norte y América
se piensa que superará los 100 millones de Latina es de 8 y 8,5 kilos respectivamente.
toneladas, siendo los países en desarrollo Si bien la acuicultura a escala planetaria
los que aportarán más del 50 % de la cap- es el sector de producción de alimentos que
tura mundial. tiene la tasa mas alta de crecimiento, pa-
La pesca y la acuicultura aportan el 6% sando del 3,9% de la producción total pes-
de las proteínas totales y el 16% de las pro- quera en peso en 1970 al 27,3% en el 2000,
teínas de origen animal que anualmente la misma no ha logrado solucionar el déficit
consume la humanidad. A escala global se alimentario.
genera trabajo para 200 millones de pesca- Este hecho se fundamenta en el enten-
dores e indirectamente para 150 millones dido de que el 82% de la acuicultura total
de personas en labores de servicios, proce- se produce en Países de Bajos Ingresos y
samiento, transporte y comercialización. con déficit alimentario. Por lo tanto, queda
En la mayoría de los países en desarro- demostrado que la tendencia actual de la
llo, el pescado constituye una importante acuicultura no es precisamente cubrir las
fuente primaria de proteínas, vitaminas, mi- necesidades alimentarias de los más po-
nerales y ácidos grasos esenciales, aportan- bres, si no, cubrir las necesidades del mer-
do el 30% de las proteínas totales en las cado, principalmente de los países indus-
dietas de Asia, el 20% en África, el 10% en trializados.
América Latina y El Caribe, el 7% en Amé- En este contexto, es donde cada vez se
rica del Norte y el 10% en Europa Oriental. expresan con mayor claridad las contradic-
A pesar de que los países en desarrollo ciones existentes entre la implementación
aportan más del 80% de la producción pes- de políticas de economía de libre mercado
quera a escala mundial –siendo Tailandia y entre las cuales se desarrolla la actividad
China los mayores exportadores de produc- pesquera y los aspectos de sustentabilidad
tos pesqueros- la distribución del pescado ambiental, equidad social y soberanía ali-
producido no es equitativa. Los países de mentaria.

II. La Organización Mundial del Comercio (OMC):


Amenazas sobre el acceso a los mercados
para los productos no agrícolas.

Las políticas económicas, agrícolas, acceso a una nutrición sana y suficiente


pesqueras y comerciales impuestas por el para la mayoría de los pueblos, incluso en
Banco Mundial, el Fondo Monetario Inter- los llamados países desarrollados. Las po-
nacional y la Organización Mundial del líticas de subvenciones a la producción y
Comercio, auspiciadas por las corporacio- subsidios a las exportaciones de los países
nes transnacionales, han profundizado la desarrollados permiten que las trasnacio-
brecha entre los países ricos y pobres y nales adquieran productos a muy bajos
dentro de ellos. A su vez, la desigual dis- precios para venderlos a precios mucho
tribución del ingreso ha agravado las con- más altos a los consumidores tanto del sur
diciones de producción de alimentos y el como del norte.

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Los Acuerdos de Libre Comercio, im- acuerdos internos para el manejo de los
pulsados por la Unión Europea, Estados recursos quedan subordinados a las reglas
Unidos, el Grupo APEC y otros, tantos generales que impulsa la OMC, en donde
multinacionales como bilaterales, en el Ca- las barreras arancelarias, los subsidios y
pítulo de Pesca, siempre exigen que las las protecciones son aplicados a los países
condiciones de privatización ya estén da- productores de materia prima y no nece-
das y ratificadas por los Parlamentos Na- sariamente a la Unión Europea, Estados
cionales, de este modo la inversión ex- Unidos y las economías emergentes de
tranjera puede realizarse sobre una base Asia.
financiera sólida. Bajo esta esperanza de
inversión extranjera, el Fondo Monetario Dentro de las negociaciones de la OMC
Internacional, el Banco Mundial y recien- se presenta un nuevo escenario, el NAMA
temente la OMC, ejercen presiones sobre (sigla en inglés), o el llamado Acceso a los
las naciones amenazando la supervivencia Mercados para los Productos No Agrícolas.
de las pequeñas y medianas comunidades Estas negociaciones intentan la libera-
de pescadores. El aumento del valor co- lización parcial o completa de los recursos
mercial y social de los recursos pesqueros, naturales, con interés particular sobre los
y la competencia para controlar los merca- recursos pesqueros, y minerales. En estas
dos y el acceso a la alimentación justifican negociaciones también corren riesgo las
el gran interés de las Corporaciones Inter- medidas diseñadas para proteger el am-
nacionales por los mismos, y a su vez con- biente y fomentar el bienestar social. Las
vierte a los recursos en mercancías comer- negociaciones sobre el NAMA tienen tres
cializables a los más altos precios. diferentes elementos de relevancia: la li-
Las corporaciones internacionales bus- beralización generalizada en una amplia
can a través de la privatización de los re- gama de sectores, la liberalización de los
cursos pesqueros asegurarse que el ne- bienes ambientales y la eliminación de ba-
gocio de la pesca sea altamente rentable. rreras no arancelarias. En este contexto,
Por esta vía, los Estados traspasan la pro- Estados Unidos impulsa una liberalización
piedad de su patrimonio pesquero a estas en todos los sectores para el año 2015. Al-
compañías, generalmente de forma gratui- gunos países miembros de la OMC han re-
ta y a perpetuidad. En este contexto, la conocido en forma explícita el hecho que
OMC juega un rol preponderante como una mayor liberalización de las materias
instrumento de presión y amenaza; si el primas probablemente reduzca las posibi-
proceso de privatización encuentra impe- lidades de conservación de los recursos
dimentos, el tribunal internacional actúa naturales. En este sentido, una liberaliza-
para abrir las economías o para proteger ción total para el sector pesquero genera-
las inversiones y la expansión de las mis- ría una presión adicional sobre los recur-
mas. sos al inducir a un aumento del esfuerzo
De esta forma, queda claro que todos pesquero, llevando a la sobre - explota-
los acuerdos multilaterales bilaterales o ción de los mismos.

III. El modelo pesquero exportador uruguayo

El sector pesquero aporta aproximada- los mercados, llegando a ser 60 países los
mente el 0,01% del Producto Bruto Inter- destinatarios, siendo los cinco principales
no (PBI), representando el 5% del total de China, Italia, Estados Unidos, Brasil y Nige-
las exportaciones totales en el 2004. Des- ria. Los precios promedio por tonelada lo-
de una perspectiva histórica, podemos se- grados en el año 2004 fueron los más altos
ñalar que ya en el año 1981 se exportaron del quinquenio, exceptuando el año 2000 .
80.000 toneladas de productos pesqueros De las más de 100 especies factibles de
por un valor de alrededor de 60.000.000 comercialización que de una u otra forma
U$S6. En el año 2004, se exportaron son extraídas de los ecosistemas marinos y
100.000 toneladas, por un valor de dulceacuícolas por buques industriales y
140.000.000 U$S, lo que representa un barcas artesanales, sólo 4: merluza (Mer-
gran incremento con relación a los últimos luccius hubbsi), corvina (Micropogonias
cinco años. A su vez se han diversificado furnieri), pescadilla (Cynoscion guatucupa)

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y calamar (Illex argentinus) representan el 70% de las mismas; y el segundo período
70 % del total de las capturas que se de- a partir de 1994 al 2003 con un pronuncia-
sembarcan en un año, y han llegado a re- do descenso que la ubica por debajo del
presentar el 90% del total de las exporta- 50%, llegando al mínimo en el año 2000
ciones anuales del sector. La intensidad de con un 24% (figura 1). La corvina, de una
pesca sobre merluza, corvina y pescadilla participación histórica entre el 20 y 30 %
ha llegado a su límite máximo, por el cual pasó a un 14% en 1999 y 24% en el 2003.
ya es imposible obtener mayores rendi- El resto de las especies desembarcadas,
mientos aumentando el esfuerzo de pesca. han presentado una tendencia diferente al
de las 2 principales especies, cuando dis-
La evolución temporal de las capturas minuyeron los desembarques de estas últi-
de merluza marca claramente dos perío- mas, aumentó el de las demás especies,
dos: el primero entre los años 1978 a 1993 llegando a representar en el 2003 casi el
en donde llega a representar entre el 50 y 50% del total.
% total de las capturas

Figura 1.
Evolución temporal de las 4 principales especies desembarcadas por la flota industrial uruguaya.
Fuente: Elaboración propia sobre la base de compendios estadísticos pesqueros de DINARA.

Sobre el resto de la comunidad ictícola más ingresos de barcos en las categorías A


se desconoce cual es el impacto que pre- (especie objetivo merluza) y en la B (espe-
sentan estos recursos, debido a la explota- cies objetivo: corvina y pescadilla), se da
ción que vienen sufriendo en las pesque- el hecho de que en las pesquerías de espe-
rías tradicionales y en la cual son captura- cies no tradicionales (Categorías C y D) se
das como fauna acompañante y a su vez permite la captura hasta un 10% de las es-
en las nuevas pesquerías recientemente pecies declaradas plenamente explotadas
desarrolladas sobre los mismos. Corvina y pescadilla), lo que significa una
Estos antecedentes, sumados a los di- mayor mortalidad por pesca que no está
versos estudios en comunidades marinas cuantificada. Como ejemplo, se puede citar
en el Atlántico Sudoccidental7, que de- un análisis realizado a buques categoría C
muestran la presencia de grupos de espe- que operaron con redes de arrastre de fon-
cies que poseen una distribución local o do de baja apertura vertical, cuyas espe-
transitoria en el área de operación de la cies objetivo eran el lenguado y el caracol,
flota pesquera uruguaya, permiten inferir los que realizaron capturas importantes de
que las pesquerías uruguayas explotan en- corvina y pescadilla8. Por si fuera poco, en
tre un 35% y 40% de los totales factibles los últimos años se ha dado el proceso de
de comercialización. conversión de buques fresqueros categoría
A lo anterior, le podemos agregar que A en congeladores, lo que aumentó la ca-
si bien hoy en día no se pueden producir pacidad de bodega y a su vez el esfuerzo

Pesca Sustentable y Soberanía Alimentaria en Uruguay, un modelo para armar 7


pesquero. Este proceso trajo como conse- desembarcan por la flota industrial se ex-
cuencia una disminución de puestos de portan entre un 60 y 84%, y que a su vez
trabajo tanto a bordo como plantas y a la estas exportaciones están sustentadas en
exportación de productos con menor grado sólo 4 especies de por lo menos 100 que
de procesamiento y menor valor agregado. son capturadas y factibles de comercializar,
queda claro que no es el consumo de la
El actual modelo de desarrollo pesque- población uruguaya (6,3 kilos por habitan-
ro deja muy clara la contradicción entre el te y por año) el que ha generado una ten-
tipo de operación de la flota pesquera uru- dencia a la sobreexplotación de los princi-
guaya, zafral y dirigida a la exportación de pales recursos pesqueros.
muy pocas especies, y la alta diversidad y
abundancia de recursos multiespecíficos En el actual modelo, se destaca la pes-
factibles de poder ser comercializadas en ca artesanal como una pesquería en la cual
el mercado interno, para el consumo de los artes utilizados son selectivos para las
una gran mayoría de personas que necesi- diferentes especies a la cual se dirigen, sus
tan de este alimento. capturas casi no sufren descartes. A pesar
de poseer características de sustentabili-
El problema de los descartes en las dad ecológica, los pescadores sufren un
pesquerías industriales pone de manifiesto serio atraso socio - económico, producto
el hecho de que la actividad pesquera no de la falta de orientación del estado para
está afectando solamente a las especies de este sector. El sector de la pesca artesanal
interés comercial sino al ecosistema mari- no tiene el reconocimiento social y produc-
no en su conjunto. El impacto sobre el há- tivo que merece, siendo marginado o ex-
bitat marino de determinadas artes de pes- cluido por los organismos del Estado res-
ca (por ej.: redes de arrastre) y la presión ponsables de planificar políticas de desa-
ejercida sobre especies distintas de aque- rrollo. Además, la actividad artesanal se
llas objetivo de la industria, tiene implican- enfrenta a la progresiva disminución de los
cias que van más allá de las poblaciones recursos pesqueros, producto de la activi-
individuales y que afectan al funciona- dad industrial pesquera que compite por
miento del ecosistema marino en su con- los mismos espacios, recursos y mercados,
junto. en una evidente desigualdad de condicio-
nes.
La excesiva explotación pesquera con
fines netamente comerciales ha provocado Las 2 principales comunidades de pes-
ya cambios significativos en la estructura cadores artesanales se localizan en los bal-
de los ecosistemas dulceacuícolas y mari- nearios de Pajas Blancas (Montevideo) y
nos. Tendencias como el descenso en el ni- San Luis (Canelones). Estas pesquerías
vel trófico, se producen al pasar de la ex- comparten los recursos con la flota indus-
plotación de especies de alto valor, ciclo de trial costera, por lo que deben competir en
vida largo y baja fecundidad a la explota- inferioridad de condiciones, y llegar a cala-
ción de especies de bajo valor y mayor fe- deros cada vez más alejados de la costa,
cundidad, como sucede en el caso de las debido a la disminución en la abundancia
pesquerías para “reducción” destinadas a de las principales especies: corvina y pes-
la fabricación de harinas de pescado y que cadilla.
mantienen la producción acuícola indus- La competencia y conflictividad entre
trial. ambas sectores se ha visto acrecentado
En nuestro país, la instalación de una por la crisis pesquera que afecta al sector
planta de reducción en La Paloma (depar- industrial y la disminución que evidencian
tamento de Rocha) en la cual la materia los recursos, hecho que determina que la
prima es la anchoíta (Engraulis anchoíta) flota industrial arras-tre en zonas cercanas
especie clave y sustento de la cadena tró- a la costa con el perjuicio que provoca en
fica marina, posiblemente traerá aparejado los recur-sos litorales y deja en inferiori-
procesos que tendrán repercusiones a lar- dad de condiciones a la pesca artesanal
go plazo muy difíciles de evaluar. para explotar dichos recur-sos con el con-
siguiente perjuicio económico que ocasio-
Teniendo en cuenta que en Uruguay na la pérdida de los artes de los pesca-do-
del total de las capturas anuales que se res artesa-nales.

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IV. Pesca Ilegal, no documentada y no reglamentada.

El concepto de pesca ilegal, no docu- de buques que llevan a cabo pesca ilegal, no
mentada y no reglamentada, suele utilizarse declarada y no reglamentada (INDNR) de
para designar una gran variedad de activida- merluza negra. En este sentido, las autorida-
des pesqueras que violan las normas y los des uruguayas estarían aceptando en forma
reglamentos. rutinaria el desembarque y trasbordo de
Estudios recientes de la FAO revelan que merluza negra declarada como capturada en
está aumentando el alcance y la intensidad alta mar sin la verificación de la información
del problema de la pesca ilegal, no declara- entregada.
da y no reglamentada, conocida también
por la sigla INDNR. La pesca INDNR abarca Además de las inspecciones realizadas
una gran variedad de actividades ilícitas, en- por los Estados de pabellón, es decir aque-
tre las cuales se destacan: pescar sin licen- llos que mantienen flotas pesqueras en el
cia, pescar especies prohibidas, utilizar apa- extranjero, y los países ribereños donde se
rejos de pesca proscritos, no respetar las realiza la pesca, otro importante eslabón en
cuotas de pesca, no declarar las especies la cadena de la lucha contra la pesca
capturadas y el volumen de la captura, o de- INDNR, son las medidas que dificultan a los
clarar una captura inferior a la realizada. barcos la descarga o el trasbordo de la cap-
tura obtenida en forma ilegal.
En todo él mundo la pesca ilegal, no de- Estas medidas de control se denominan
clarada y no reglamentada está socavando "medidas del Estado portuario", y básica-
seriamente el esfuerzo de conservación y mente suponen por lo general la inspección
gestión sostenible de las poblaciones de pe- de los barcos pesqueros que llegan a los
ces, por lo tanto los países responsables de- puertos a abastecerse de combustible, com-
ben colaborar para ponerle fin a este tipo de prar provisiones, hacer reparaciones o des-
pesca. cargar la pesca.
En algunos lugares la captura de espe- A menudo, la revisión de los documen-
cies de valor comercial puede ser superior al tos de las embarcaciones, la inspección de
300 por ciento de los niveles permitidos de- los aparejos y de la captura puede revelar si
bido a la pesca INDNR, según informes pre- un barco ha incurrido en pesca INDNR du-
sentados a la FAO por los órganos pesque- rante su travesía.
ros regionales.
Un número cada vez mayor de estos ór- En el contexto actual, se han planteado
ganos, que corresponden a organizaciones diversas posibilidades de colaboración entre
intergubernamentales establecidas por gru- los países, con el objeto de fortalecer el con-
pos de países de una misma región para su- trol ejercido por los Estados portuarios y to-
pervisar conjuntamente la gestión de las mar enérgicas medidas contra la pesca
pesquerías comunes, está adoptando una INDNR.
amplia variedad de medidas para combatir La meta es la elaboración de un plan
la pesca INDNR. modelo que puede ser aplicado con flexibili-
dad por los países, los órganos regionales
Uruguay ha tenido una historia no muy pesqueros y otras entidades en la ejecución
lejana de incidentes de pesca ilegal, no do- de las disposiciones de control portuario. Es-
cumentada y no reglamentada, lo cual ha te modelo persigue principios básicos que
desacreditado al país ante organismos inter- consisten en una lista de 'mejores prácticas'
nacionales que controlan la pesca ilegal de en materia de disposiciones de control por-
merluza negra (Dissostichus eleginoides), tuario contra la pesca ilegal, no declarada y
debido a la falta de control de los organis- no reglamentada, capaces de ayudar a me-
mos del Estado sobre las empresas extran- jorar los sistemas de inspección nacionales e
jeras que pescan con bandera uruguaya en internacionales destinados a desalentar este
aguas internacionales, principalmente en el tipo de pesca.
Océano Indico. Como ejemplo de arrestos
de barcos uruguayos involucrados en pesca Estas mejores prácticas permitirían a las
ilegal podemos citar los buques Viarsa y Ma- autoridades sencillamente rechazar a todas
ya V como los de mayor notoriedad. las embarcaciones de las que se tenga noti-
A su vez, en el puerto de Montevideo cia de haber incurrido en pesca INDNR, sal-
que actúa como puerto libre, se realizan vo si el barco tuviera problemas y necesita-
operaciones (desembarques y transbordos) ra llegar a puerto por motivos de seguridad.

Pesca Sustentable y Soberanía Alimentaria en Uruguay, un modelo para armar 9


Este sistema no representaría un proble- vegar con su bandera a otros países de cual-
ma para las embarcaciones que pesquen quier parte del mundo, sin imponer el respe-
con responsabilidad, cuyos países de aban- to a las reglas nacionales e internacionales
deramiento vigilen las actividades de sus flo- que rigen la pesca.
tas pesqueras de conformidad con las leyes
y las normas internacionales. La lucha contra la pesca ilegal e irres-
La proliferación de países que tienen re- ponsable recibiría un gran impulso si todos
gistros abiertos de abanderamiento también los países de una región determinada se pu-
agrava el problema, ya que en algunos ca- sieran de acuerdo en los requisitos comunes
sos las llamadas “banderas o pabellones de que deberían cumplir los barcos antes de in-
conveniencia” facilitan la pesca INDNR. La gresar en los puertos, y en difundir la infor-
bandera de conveniencia se le llama a la au- mación recopilada sobre las embarcaciones
torización que dan algunos países para na- que pescan en la región.

V. Un alerta: La pesca de arrastre de fondo fuera


de las Zonas Económicas Exclusivas (ZEEs).

Las operaciones de pesca de arrastre querías internacionales dedicadas a la pes-


de fondo en aguas profundas que se efec- ca de arrastre de fondo no contribuyen en
túan actualmente fuera de las Zonas Eco- absoluto a la seguridad alimentaria mun-
nómicas Exclusivas (ZEEs) son inconsisten- dial. Del mismo modo, la pesca de arrastre
tes con el Código de Conducta de la FAO de fondo en alta mar tampoco representa
para la Pesca Responsable, la Convención una gran fuerza económica en el mercado
de Biodiversidad (CBD) y otros instrumen- mundial de las pesquerías. El valor total
tos internacionales relevantes, ya que una anual de esta clase de pesquerías se calcu-
gran parte del alta mar no se encuentra la en aproximadamente 300/400 millones
protegida por Organizaciones Regionales de dólares estadounidenses. Esto es equi-
de Administración Pesquera (ORPs) con valente al 0,5% del valor total de las cap-
competencia jurídica y/o técnica para re- turas en el contexto mundial para el año
gular las poblaciones de peces de aguas 2001, estimado en 75.000 millones de dó-
profundas en alta mar. lares. Este porcentaje se reduce al 0,3% si
A pesar de que la pesca de arrastre de lo comparamos con los aproximadamente
fondo en alta mar ya ha causado un impac- 135.000 millones de dólares correspon-
to devastador, el uso de este método toda- dientes a la producción total de las pes-
vía se encuentra en sus etapas iniciales. En querías agregadas (marinas, de agua dul-
la actualidad, se calcula que de 3,1 millo- ce y acuicultura) ese mismo año.
nes de embarcaciones que se encuentran Queda claro, que la pesca de arrastre
pescando en el mundo, solamente entre de fondo en alta mar genera impactos eco-
100 y 200 como máximo están desarrollan- lógicos negativos a pesar de tener una li-
do esta técnica de pesca en alta mar a mitada contribución a la economía y a la
tiempo completo. Si se añaden las embar- solución de los problemas de alimentación
caciones que realizan la pesca de arrastre mundial.
de fondo en alta mar de manera disconti- Pero aún más, las cosas pueden em-
nua, es probable que no más de algunos peorar por diversos motivos:
cientos de embarcaciones lleven a cabo es- - Es de esperar que al desarrollarse
ta actividad anualmente. En el año 2014, una gestión más racional de las pesquerías
la flota de pesca de arrastre de fondo en dentro de las Zonas Económicas Exclusi-
alta mar capturó entre 170.000 y 215.000 vas, entren en vigor reglamentaciones más
toneladas métricas de pescado en todo el restrictivas que harán que disminuyan el
mundo. Esto representa una fracción irre- esfuerzo pesquero en las poblaciones que
levante – apenas el 0,2 / 0,25 por ciento – presenten síntomas de sobre-explotación.
de los 84 millones de toneladas de peces - La demanda de productos derivados
capturados en el mundo ese mismo año. del pescado se está incrementando y con-
La mayor parte de lo que se pesca en alta tinuará haciéndolo.
mar se vende en los mercados de la Unión - Algunas naciones con tradición pes-
Europea, de los Estados Unidos y de Ja- quera subsidian la construcción y/o los
pón, lo que permite afirmar que las pes- costos de explotación de sus flotas para

10 PROGRAMA URUGUAY SUSTENTABLE


que lleven a cabo la pesca de arrastre de ción de los stocks de peces de valor co-
fondo en alta mar. mercial en su jurisdicción, establecer lími-
- Algunas de estas naciones, al haber tes sobre las cantidades capturadas y so-
caído en la ‘trampa’ de permitir prácticas bre el número de barcos autorizados a
de pesca insostenibles en sus aguas, tien- pescar, realizar inspecciones y/o regular
den a considerar que la expansión de las los tipos de artes que se pueden utilizar.
pesquerías en alta mar mitigará el exceso Sin embargo, la mayor parte de los RFMOs
de presión pesquera dentro de sus Zonas sólo regulan la pesca de algunas especies
Económicas Exclusivas y creará nuevas concretas, como el atún, el salmón y el fle-
oportunidades para sus flotas. tán. La ordenación pesquera en alta mar
La combinación de algunos de estos por parte de las RFMOs está muy fragmen-
mecanismos proporcionará incentivos para tada y es muy desigual. Por ejemplo, los
que se expanda la flota de arrastreros en océanos Pacífico, Índico y el Atlántico Cen-
alta mar, implicando una importante movi- tral y Sudoccidental, son zonas que no es-
lización de capital, extendiendo el alcance tán cubiertas por RFMOs que tengan auto-
destructivo de la pesca de arrastre de fon- ridad para la ordenación de la pesca. Pode-
do. Con todo, las flotas de algunas de las mos afirmar con propiedad, entonces, que
naciones más desarrolladas del mundo – cualquier actividad de arrastre de fondo en
como por ejemplo, España, Rusia y Nueva alta mar, en estas regiones, constituye un
Zelanda – están ya activamente involucra- caso flagrante de pesca no reglamentada.
das en la pesca exploratoria en alta mar en Una amplia mayoría de RFMOs carece de la
zonas del Atlántico Norte y Sur, del Pacífi- competencia legal necesaria para imponer
co Sur, y del Océano Índico Sur. Paradóji- restricciones a la pesca de arrastre de fon-
camente, a medida que las actividades de do en alta mar, como tampoco tienen la
pesca de arrastre de fondo en alta mar competencia para proteger los ecosiste-
continuen expandiéndose, la captura total mas como un todo dentro de sus jurisdic-
de especies abisales quizás nunca lleguen ciones. Incluso las RFMOs que tienen la
a crecer cuantitativamente de modo signi- autoridad necesaria, sólo pueden controlar
ficativo. Si no se regula la actividad de los las prácticas de buques bajo pabellón de
arrastreros, una vez que agoten una pobla- sus estados miembros. Además, en las es-
ción buscarán nuevas zonas y stocks de casas zonas de alta mar en las que existen
pesca que, al ser igualmente sensibles a la tales RFMOs, es decir, los océanos Austral,
sobrepesca, también serán diezmadas. Por el Atlántico Norte y Suroriental y el mar
lo tanto, se puede asegurar que lo único Mediterráneo, la Comisión para la Conser-
que vendrá de la mano de la pesca de vación de los Recursos Vivos Marinos An-
arrastre de fondo en alta mar será una cre- tárticos (CCRVMA) ha sido la única que ha
ciente destrucción de los ecosistemas abi- tomado medidas para regular la pesca de
sales y de la biodiversidad en alta mar. arrastre de fondo debido al impacto que
ésta tiene en las especies de los fondos
En el mundo hay actualmente alrede- marinos de alta mar. De hecho, el fracaso
dor de 30 Organismos Regionales para la en el Atlántico Norte tanto de la Organiza-
Pesca (Regional ción de Pesquerías del Atlántico Noroeste
Fisheries Management Organizations – (NAFO) como de la Comisión de Pesquerías
RFMOs) La autoridad de muchos de ellos del Atlántico Nordeste (CPANE) en la regu-
es sumamente limitada y el ejercicio de su lación del impacto de la pesca de arrastre
actividad se limita, básicamente, a aconse- de fondo en ecosistemas de los fondos ma-
jar a los estados miembros. Algunos RF- rinos es un problema crónico, que se arras-
MOs tienen la autoridad y la capacidad téc- tra desde antes de los años 60.
nica necesaria para valorar cuál es la situa-

Pesca Sustentable y Soberanía Alimentaria en Uruguay, un modelo para armar 11


VI. El desafío de un modelo alternativo

Debido a que actualmente las pesque- tanto desde el punto de vista alimentario
rías tradicionales de nuestro país están (algo fundamental), como de los benefi-
plenamente explotadas o sobreexplota- cios económicos y empleos que genera
das, las regulaciones pesqueras se debe- esta actividad. Por lo anterior, el objetivo
rían orientar a mantener un equilibrio en- básico del ordenamiento, debería contem-
tre disponibilidad de recursos pesqueros, plar el máximo beneficio social como pre-
soberanía alimentaria y bienestar social, misa básica, buscando mecanismos para
equidad de acceso a los recursos, capaci- que dichos beneficios se mantengan en el
dad pesquera y empleo, lo cual frecuente- largo plazo. Los derechos de acceso a las
mente no es fácil, e induce al estableci- pesquerías deben ser consistentes con las
miento de regulaciones regionales. La prácticas culturales y las necesidades
gestión sustentable de los recursos pes- económicas de las comunidades que han
queros implica abordar en este contexto, dependido históricamente de su existen-
la sustentabilidad en el mediano y largo cia. A su vez, se hace imprescindible la in-
plazo, por lo cual se deberá contemplar tegración de formas de conocimiento
necesariamente cuatro dimensiones que científico relativas a los ecosistemas mari-
interactúan entre sí: nos con los sistemas de conocimiento tra-
dicionales adquiridos localmente.
Dimensión ecológica: Que tenga en
cuenta y respetar los ciclos naturales, la Dimensión económica: Buscará incluir
productividad propia de los ecosistemas, el conjunto de actividades humanas rela-
la disponibilidad y finitud de los recursos cionadas con la producción, distribución y
naturales y la diversidad biológica. La dis- consumo de bienes y servicios. Se deberá
tribución y la abundancia de los stocks de considerar a los recursos ictícolas no co-
peces se supeditan en primer lugar a la mo generadores de divisas en el comercio
dinámica del medio ambiente marino y, internacional sino como una fuente de ali-
en concreto, a las condiciones atmosféri- mentación y bienestar humano, y no pro-
cas y a la oceanografía física y química; y mover el destino de la producción pes-
en segundo lugar, a las interacciones en- quera para alimento de animales sino a la
tre especies de depredadores y especies alimentación humana. A su vez no se de-
presa. En un contexto multiespecífico re- be permitir bajo ninguna forma la privati-
sulta casi imposible apartar de la explota- zación de los recursos pesqueros, de ma-
ción a un grupo específico de especies. nera que sigan siendo patrimonios de los
Las redes de arrastre, las agalleras y las pueblos para el beneficio de la humani-
de cerco no suelen diferenciarlas. Diver- dad.
sos factores medioambientales y oceano-
gráficos hacen que los organismos mari- Dimensión política: Que supone for-
nos no se distribuyan de forma uniforme: mas de gestión participativas, incluyendo
la abundancia de los caladeros varía con- el control y el protagonismo real de las
siderablemente según los lugares. Esta comunidades en la gestión de los recur-
variación está directamente relacionada sos, en la toma de decisiones y en la for-
con la capacidad de carga del ecosistema. mulación de políticas. Es al gobierno al
(Llamamos ’capacidad de carga’ al volu- que le compete el proceso de gestión pes-
men de biomasa que un ecosistema pue- quera. Ésta incluye la fijación de ciertas
de soportar). Un ecosistema más diverso políticas o lineamientos de base, la deter-
implica una mayor estabilidad y un menor minación de planes y programas, la expe-
riesgo de colapso de los stocks. dición y vigilancia del cumplimiento de
ciertas normas, el estudio o la investiga-
Dimensión social: Deberá considerar ción necesarios para sustentar las accio-
el acceso equitativo a los bienes de la na- nes, la determinación de las acciones
turaleza, tanto en términos intergenera- prioritarias y su puesta en marcha, la in-
cionales como intrageneracionales, entre corporación de las comunidades involu-
géneros y entre culturas, entre grupos y cradas y el establecimiento de una capa-
clases sociales. El beneficio social deberá cidad de ejecución y administración, in-
ser la premisa básica. En tanto que es un cluyendo la consecución y manejo de re-
recurso de la nación, la pesca debería be- cursos económicos requeridos. El marco
neficiar al máximo posible de ciudadanos, legal que regula la actividad pesquera na-

12 PROGRAMA URUGUAY SUSTENTABLE


cional debe tener como objetivo estable- ción o administración de la pesca, las re-
cer las reglas y condiciones bajo las cua- gulaciones pesqueras (leyes, reglamentos
les deben realizarse las actividades de la y normas) necesitan establecer, con base
vida social o individual que tengan un im- en criterios de pesca responsable y uso
pacto directo o indirecto en la sociedad. de los recursos en el largo plazo, las con-
En función de los objetivos de la ordena- diciones de su aprovechamiento.

Pesca Sustentable y Soberanía Alimentaria en Uruguay, un modelo para armar 13


El principio de precaución como herramienta de gestión

Para compensar la falta de conoci- de la Declaración de Río de la Conferen-


miento en lo que se refiere a los proce- cia de las Naciones Unidas sobre el Me-
sos ecológicos marinos y fluviales, la dio Ambiente y el Desarrollo9 establece
gestión pesquera debe tender a ser pre- que " Para proteger el medio ambiente, el
cautoria, poniendo el acento en la pre- principio de precaución debe ser amplia-
vención del daño, en contraposición a los mente aplicado por los estados de acuer-
intentos de reparar los errores con medi- do con sus posibilidades. En caso de
das de recuperación o de mitigación una amenaza de daños serios o irreversibles,
vez que estos se han producido. la ausencia de completa certeza científi-
El principio de precaución se funda- ca no se utilizará cómo una razón para
menta en la "inversión de la carga de la posponer la adopción de medidas efecti-
prueba", es decir, la asunción del carác- vas pero costosas para impedir la degra-
ter perjudicial de las acciones humanas dación ambiental "
sobre el medio mientras no se demuestre El nivel de precaución debería au-
lo contrario. Esto implica la considera- mentar conforme decrece la información
ción de las necesidades de las futuras científica disponible. La precaución tam-
generaciones, evitando las acciones que bién implica evaluar los posibles impac-
puedan generar cambios irreversibles. tos de la pesca sobre el ecosistema en su
Esta idea ya ha sido recogida en las con- conjunto, y no sólo sobre las especies
clusiones y declaraciones de numerosos objetivo de pesca. A esto es lo que se
foros internacionales. Así, el Principio 15 denomina enfoque ecosistémico.

14 PROGRAMA URUGUAY SUSTENTABLE


VII. Propuestas para un modelo alternativo sustentable

Exhortamos a la más amplia revaloriza- sobre las que es más factible ejercer un
ción de los recursos pesqueros como fuen- control real.
te de alimento, trabajo, salud, conocimien-
tos y desarrollo sustentable a escala local y - Se buscará dar preferencia a la orde-
regional. Destacamos la importancia del nación y gestión de las pesquerías artesa-
manejo de los recursos pesqueros desde nales, así como asegurar a los pescadores
una perspectiva ecosistémica, que no deje artesanales el derecho de acceso a los re-
de lado los diversos factores ecológicos que cursos. Al mismo tiempo, se deberán llevar
los afectan, el alcance de las escalas tem- a cabo cursos de capacitación para la utili-
porales y espaciales de los distintos proce- zación de nuevas tecnologías de pesca,
sos que afectan la dinámica y evolución de procesamiento de la materia prima y de
los recursos pesqueros así como los intere- gestión empresarial, lo que permitirá cerrar
ses de los diversos actores que se benefi- el ciclo de la captura hasta la venta del pro-
cian de manera directa e indirecta. ducto por el propio pescador.
En este sentido, proponemos:
- Reforzar la capacidad de investigación
- Avanzar hacia un manejo de los recur- de las instituciones públicas vinculadas al
sos y ecosistemas costeros y oceánico del sector productivo pesquero, de tal manera
país, impulsando el uso menos intensivo, la que las medidas de manejo se basen en
diversificación y orientación de las produc- datos científicos.
ciones que incorporen mayor valor agrega-
do y que sean volcados al mercado interno, - Fortalecer las comisiones técnicas re-
privilegiando el consumo humano directo. gionales sobre la base de un mayor conoci-
miento científico en donde se discuten los
- Promover la participación ciudadana cupos de captura anuales para cada país
(organizaciones sindicales vinculadas al te- (Comisión Técnica Mixta del Frente Maríti-
ma pesquero, organizaciones de pescado- mo, Comisión Administradora del Río de la
res artesanales, consumidores, empresa- Plata, Comisión Administradora del Río Uru-
rios, ONG’), con el fin de que definan sus guay, Comisión Internacional para la Con-
necesidades y participen en la toma de de- servación del Atún Atlántico, Comisión para
cisiones de asuntos que afectarán sus con- la Conservación de los Recursos Marinos Vi-
diciones de vida presentes y futuras. vos de la Antártida).

- Desarrollar un marco jurídico y admi- - Proponer en el ámbito nacional y re-


nistrativo que fortalezca los mecanismos gional hacia la Asamblea General de las Na-
de representación en igualdad de condicio- ciones Unidas una moratoria inmediata de
nes de los diferentes sectores, que posibili- las operaciones de pesca de arrastre de
ten la integración de la pesca artesanal, la fondo en aguas internacionales en la áreas
pequeña y mediana industria, ONG’s y con- donde no existen ORPs, y para el 2006 en
sumidores en los procesos de discusión, aquellas áreas donde, a pesar de existir
planificación y toma de decisiones relativas ORPs, no se hayan tomado medidas efecti-
a los recursos y ecosistemas costeros y vas de protección de la diversidad biológica
oceánicos nacionales. y de las pesquerías de aguas profundas en
alta mar.
- Poner en marcha inmediatamente pla-
nes de recuperación para las poblaciones - Rechazar cualquier Acuerdo Comercial
explotadas que se hallan fuera de los lími- y/o Tratado de Inversiones sobre pesca in-
tes biológicos de seguridad. dustrial, cesión de derechos pesqueros a
terceros Estados y operación de banderas
- Aplicar el principio de precaución en la de conveniencia pesquera en la zona eco-
gestión pesquera, incluyendo aquellas po- nómica exclusiva. A su vez, alertar al go-
blaciones sobre las que no hay un conoci- bierno sobre las futuras negociaciones en el
miento científico preciso, como por ejemplo NAMA que puedan afectar los recursos pes-
los peces cartilaginosos (tiburones y rayas). queros nacionales y de la región.

- Generar y adaptar sistemas de control - Rechazar cualquier forma de privatiza-


eficaces, dándole prioridad a las medidas ción de los recursos pesqueros y el estable-

Pesca Sustentable y Soberanía Alimentaria en Uruguay, un modelo para armar 15


cimiento de patentes comerciales privadas
sobre los mismos, de manera que sigan
siendo patrimonio de los pueblos para be-
neficio de la humanidad.

- El Estado deberá promover la comer-


cialización de los productos pesqueros en el
mercado interno, desde una perspectiva de
soberanía alimentaria, para lo cual se debe-
rá coordinar a través del Ministerio de Ga-
nadería Agricultura y Pesca junto con el Mi-
nisterio de Salud Pública y los 19 munici- Autor:
Oscar Galli
pios departamentales, la construcción, dis-
tribución y supervisión del funcionamiento
Redes Amigos de la Tierra Uruguay
de redes de comercialización de los produc- Programa URUGUAY SUSTENTABLE
tos y subproductos de origen pesquero. 2005

Notas

1 En "Inde, le défi de l'environnement, CSE, éd l'Harmattan, 1988, pág. 186.

2 Naciones Unidas, Comisión Bründtland, “Nuestro Futuro Común”, Nueva York, 1987.

3 Declaración política del Foro de las ONG/OSC para la Soberanía Alimentaria. Soberanía alimentaria: un derecho
para todos. Forum de ONG/OSC para la Soberanía Alimentaria, Junio – 2002.

4 Cárdenas, J.C. 2004. Pesca y salmonicultura. Acuerdos de libre comercio, transnacionales y soberanía alimenta-
ria en Chile.

5 FAO 1996. Agricultura y seguridad alimentaria. Cumbre mundial sobre la alimentación. Roma 13-17 noviembre.

6 Infopesca Internacional Nº22 – Abril/Junio 2005.

7 Arena, G; W. Ubal; P. Grunwaldt y A. Fernández. 1986. Distribución latitudinal y batimétrica de la merluza


(Merluccius hubbsi) y otros organismos demersales de su fauna acompañante dentro de la Zona Común de Pesca
Argentino - Uruguaya. Publ. Com. Téc. Mix. Fr. Mar. 1(2) 253 - 280. Norbis, W. 1999. Estudios de las asociaciones
de lances y especies en base a datos colectados en las campañas de evaluación realizadas dentro de la Zona Común
de Pesca. Otoño y primavera de 1994. Informe Técnico Plan de Investigación Pesquera URU 92/003. Montevideo,
Uruguay: 16 – 25.

8. Rey, M. 2001. Flota arrastrera uruguaya: análisis de las pesquerías dirigidas. Informe Técnico. DINARA.

9. Cumbre de Río de Janeiro, 1992

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