Está en la página 1de 1

El Distraido

Autor: Victor Durand

Caminaba por la vereda de la plaza, al ver un banco vaco, me detuve a descansar.


Sentado all extend mis brazos sobre la madera del ancho respaldo; levant la vista, y
observ un cielo celeste atrapado entre las hojas y ramas de los rboles. Una densa
nube blanca se estiraba en lo alto, formando una angosta manga que se estiraba en la
cola del avin de pasajeros que iba rumbo al norte. De pronto desapareci entre las
hojas que cubran las ramas que se extendan en la copa del rbol. Baj la vista, y sent
algo raro. Palp la zona del bolsillo del pantaln, y asombrado not que faltaba mi
billetera, tambin mi reloj pulsera, mi anillo y el telfono celular. Rpidamente me
levant del asiento y observ a dos jvenes, que subieron a una moto y pude ver que el
rodado se perda a lo lejos dejando por detrs, una manga angosta de humo color
blanco y celeste, que se disipaba en el aire. Vi crecer la angustia y la bronca, porque
estuve distrado.

También podría gustarte