Está en la página 1de 23
oe Jopewy nung 2p uopaNpeny, *LSE-ErE dd ‘zoo ‘stogsign SMHApERY FBANISL SPUELDIINL IPANN'T MHS ayseuy ((ps) PINT “Ly 9 sIvowrUIRo opeoYaNE 5 2 souoIsnosip svsoraUINU OYSaY UBF “BAGO e] 2p ODNI9Is> © oonsnze Jopea [e epeU a> adnqEUOD ou o1s9 dnb 4 ‘Ip ooasutsnur so ou anb oxad ‘orm [e opedasde sopea un 395 apand peps2a By anb uruydo sounsyy “sopayut uopzo un ap ‘uH195 0] os#a OpOr ua ‘a1se asony 1s anb ‘ezafemNaeU vB] ap [PT] vidos vy ¥ ou 4 oanvuneunt 0 Onna: aut Je ‘orsondns 10d ‘SOWHI9}9I SON] “PUPIOA ¥[ WOO UOTDMAE OuAA OW wPseION aut ap vago ey anb uauansos sounspe “urepex viswooad wun usuonueu pepraa ep < emngwsony we] anb ueusstye nb soypnas Sep] “S]USWITESIBATUN EPHIUpE s9 OU UOISTA vIs> osad ‘sousiu09 exsIqap eIMEIANTT FT ANb sax0peA soy ap oun owod pepssA ey soumeraprsuo ‘orqpy Un OWOD Ise) “ouwsaiy] Aue [p aItiour oun SoufaresapIsuoD orpniss onsanu vied ‘iUBIsqo ou Sqersusé ua sue je auNIe UNsano wuusTUE wr] “oIUDTUIIOUOD oxopepi9A un sourazazj0 Ou o apand wimwexoNT ¥] 18 $9 ugnisono v7] ¢ep[A ensanu v ‘opunur onsanu & selquoyde A soqquotyisoa ‘so o1so ‘Sorapepran sopn{ vinaesai Bl UD soypay sorain{ soy uog? *wapepr9a ‘o]qeyfuoD woIseWIOFUE ‘ow 0 89 “emr29T ¥] ap PepTEgey ey ap spwpe ‘sowapuside anb of 1s ours ETP ap o8fe somapuasde ys $9 ot UoTIseND Py ‘anforu 0] uamb wseq anbune ‘eperdose syusuesuad so vapr visyy “BaNyeIONT B ap oYPNU Jopuarde opond 25 _vinqeso1y] v] UD pepz9s ap sordasuos soy ap wapre8uy uewoy ap sisqpuy Grxano Nvenss H. incluso violentas con respecto a este problema, sin un avance significativo para clarificarlo, Ingarden piensa que la falta de avances en este pro- blema es debido a que el uso de las palabras “verdad” y “veracidad” es ambiguo, algo vago ¢ inconsistente. Las palabras son empleadas usualmente, incluso en un mismo contexto, con distintas connotaciones, La enorme hetero- sgeneidad de las ideas representadas por estas palabras hace necesario que luchemos por discernir, distinguir y definir una gran variedad de conceptos sugeridos por estos tér- minos. Roman Ingarden se dio a esta tarea en un articulo publi- cado en 1949 en la “Reoue d Esthétique, Tome II.”" Sefiala que no es necesario documentar los variados usos de la(s) palabra(s), y propone lo que llama un procedi- miento “‘simplificado”, que consiste en clasificar los usos que ha observado en las discusiones filoséficas, delimitan- dolos y definiéndolos 1. En primer lugar, Ingarden establece que los términos “verdad” y “veracidad” son empleados en un sentido légi- co 0 epistemolégico, como parte de la teoria del conoci- miento. Los juicios y afirmaciones verdaderos son distin- guidos de los falsos. Un juicio verdadero es aquel que indica un “conjunto de circunstancias” que existe inde- pendientemente del juicio y de la esfera donde el juicio lo coloca. Un juicio es falso cuando un determinado “con- junto de circunstancias” no tiene correspondencia en la realidad. En este sentido hablamos de la verdad de un resultado cientifico cuando, por cualquier proceso cogni- tivo (la percepeién quizss), este resultado prueba, de una manera u otra, Ia existencia de tal objeto que realmente Presses Universitaries d France, 1949. Henaentory existe en una esfera éntica especifica, y que independiente de tal resultado, Si percibo la) portétil que estoy utilizando para escribir es to, con todas sus caracteristicas y como ex mundo real que encuentro en mi experiencia, percepcién es veraz, en el sentido general de en efecto esta computadora existe en rei mundo. La “verdad” aqui es la propiedad de un tun resultado del conocimiento de la real independiente del propio juicio. De tal mi juicio es verdadero y lamamos al result conocimiento “verdad”. La veracidad, er epistemoldgico del término, puede particips de arte tinicamente en tanto que contiene sentido ldgico de Ia palabra, u otros re conocimiento. Nosotros también hablamos de arte como veraz cuando es resultado del to. Pero entonces, si ese es el caso, habi forma de arte que pudiera llamarse veraz: a que describa en forma exacta aquello qu mos realidad. Sin embargo, Ingarden cue! éste realmente el caso. En la literatura exi variedad de tipos y clases y no todos ellos Ja realidad de una misma manera verificablt pueden ser veraces la poesia y la literatut Ingarden busca responder esta pregunta. TL, Ingarden afirma que podemos considerar ‘en relacién a los objetos representados’ que la obra de arte, especialmente en las llamac ‘arte “representacionales”. El arte representa Ver la deseripcién de Ingarden de los “objeto Fepet ro La obras de ate litera. a ‘munaoyy 200 2p nugo #7] 033 soprwssaidss soisgo, so, 3p uapreuy 2p U9EMHDSEp 6] 19), apand jeuorsequasasdar ae [g{*,sojeuoseiwasodes,, 2178 ap seigo sepewely se] ua aiuauepadsa ‘oue ap vIgo v] up usoarede anb sopeiuasasdar soalgo soy & ugIsepx us .Pepi9a,, e[ Jeraptsuo2 sowepod anb vumye uapresuy *]] viundaid ¥3s9 opuodsax vosng wapzesuy gvsorfyan vanaesay eT A vpsaod x] saovxeA 39s uapand ou osvay? “ajqvaryisaa wzoueul wuusfuX euN op PePHEDS FI uvquasazdaz sojjs sopor ou A sasvp> sodys ap peporren ues eun aisix vimpesanty Bf Ug “OseD f9 aIUUITOT 2157 59 Is ‘vuonsona usprefuy ‘oRiequia wig ‘pepy¥as sou -vurwousp onb offanbe wisexa wuts0j uo eqtsosap anb ex o19}9 ua 1s ‘peproezoa ap [esouad opruas [a ua ‘zexaA sa ugIodaaiad fu soouoqua “eIsuaysodxa rar ua onuansua anb yeas opunus Jp Ue atudistx owlos 4 seoxIspsaIIeIeD sns sepor OD ‘or ‘uawindop aiso siquoso exed opuezypfin 40289 anb [rap10d) exopemnduio vy ograsad 1g “opeynsaz yer op a1uatpuadapuy sa o1alqo ansa anb & ‘earyjoadso worup €39]s9 eu UD 2981X9, vaniyur A voungNMOHL “6h ‘aouesg p sauemsa aiuauyvas onb orsigo yea 2p ersuaxstxs wf | un ap ‘eqonud opraynsax 2359 ‘(srzmb ug -qu809 osaz0xd samnbpena 10d ‘opens ooig un 9p pepis ey ap sowjqey opnuas 216 ¥] Ud viouapuodsaxio> auan ou ,soIouRastt 1109,, Opeurwai9p un opuEnd ose so O19 ‘| 015m jp apuop wxo4s0 ¥] ap 4 ors Jap a1 apuy ais}x9 anb , sepsurasunoz1> ap oyunfy anb fanbe so orspepron ofinl up, -sosqey “UNSIp wos sorapepzon soucTeUTyE & SOHN -Pouod fap Bys091 v] ap axzd oMod ‘ontig| 480] oprauas un uo sopeajduto os. peproesa souruip: soy anb aoajqeiso uapavduy ‘ze8ay sojopus Upp ‘SeD1FOSO[Y souOrSNosIp so] UD Opt sosn So] Ae2qpIse|> Ua arsisuoD anb ‘oppor sspasoid un wuwyy anb of auodoxd x ‘(sea Sosn SopELIwA so] zeyuIKNDOP o1seS9D9K $9 II Woy, ‘anbyaqisy p onary, wy uo ¢ -iqnd ojnonze un uo vase wiso v orp 98 wa} 391 0159 10d soprzans soidsou0> ap pepa atuyep 4 nn8unsip ‘qussosip 10d sowaypny aony seaqejed seas 10d sepeauasaidas seapr s -o19194 auHIOUD vy] ‘souODeIOUUOD seIUNSIP. owisnu un ua osnjsut ‘snusuensn sepeadu Sv] “atuarstsuoour 3 ofea off ‘onfiquie s A ,pepzaa,, seaqeyed set ap osn jo anb v op) oid 2189 ua sooueae ap eayey vy anb esuatd ‘opeaytiey> eed oarteo un uls ‘eurajqoxd o1sa ev oxadsax uod sem HSI GeraLp Nyenuuis H. incluir las variedades de los tipos literarios as{ como la pintura, la escultura, la representacién musical y el teatro. La miisica presenta dificultades particulares. El concepto de verdad que usamos en estos casos tiene que ver con los objetos representados que encontramos en las obras de arte. La verdad consistiria entonces de ertas cualidades que son atributos de estos objetos que pueden ser propias de ellos, bajo ciertas condiciones Especialmente habria una relacién entre el objeto repre: objeto no-artist co, es decir, uno que se halla fuera de la obra de arte, en una realidad que es externa a la obra de arte. Esta real dad puede ser considerada de diversas maneras, de acuer do a los diferentes casos que pueden presentar ellos mis- mos. Abordaremos algunos. sentado en la obra de arte literaria y u a) La verdad como “fidelidad” La verdad puede ser considerada como fidelidad con la cual el objeto representado muestra un cierto (conocido) objeto no-artistico, Aqui podemos hablar de la reproduc: én de un objeto que es externo y/o trascendente a la obra de arte a través de un objeto representado. Esto ocu: re cuando este objeto representado, gracias a algunas de sus cualidades, simula ser un objeto externo, como si fuera ese objeto, o para decirlo de algtin modo, pretende ser ese objeto, Cuando esto ocurre, como una consecuen: cia, si el procedimiento es exitoso, atribuiremos al objeto externo aquello que es retratado en el objeto representa do. Esto sucede frecuentemente, gracias a la similitud entre dos objetos. No obstante, la sola similitud no es suficiente para que un objeto pueda representar a otro. El ejemplo que Ingarden utiliza para ilustrar esto es la similitud de la gran cantidad de pinos que forman un bosque, pero que sin 42 Hexsenume, embargo, ninguno representa a otro. Aunque ¢ apreciable, no existe un pino que deba sit a su relacién con los otros pinos. Asi que aune to puede ser una representaci6n, es necesario g to en el lugar de un objeto ausente, oto dift mismo. Existe una tendencia para que este ob ya el objeto ausente de tal suerte que el obj “aparezca” en el objeto que lo representa La verdad también se halla cuando la fick reptesentacién es tal que el objeto represent similar al objeto representado que, al percibitl damos que no se trata del objeto cuyo lugat qué consiste esta impresién de igualdad? Poe de la correspondencia de una gran cantidad de similares que presentan ambos objetos? Oes Ia sorprendente similaridad de caracteristicas que se impone sobre nuestra percepcién? O, , fidelidad se debe a algo més, algo que tiene « las cualidades “esenciales”, algo que no poden agui? Esta es una pregunta importante para | y para todas las artes represcntacionales, a la es para el “realismo” y todas sus variantes La funcién de representacién y, por supue! bilidad de hablar de la “verdad”, en el sentido mos de presentar, encuentra su lugar en las obt lasificadas como “histéricas”. Julio César, 60 Villa, en la novela Memorias de Pancho Villa, Luis Guzmén, representa al Pancho Villa real tiempo que, Arcadio Buendia, en Cien aiios de Gabriel Garcia Marquez, no representa direct giin personaje histérico definido. Por lo contea puede representar un cierto tipo de persona ‘América latina real. La creacién del autor rep personalidad producida por una realidad 1 Mientras la creacién, Arcadio Buendia, perms « owion aoouvwied ‘espuang ompeory ‘ugrearD vy sexuaTa vonsnae ou pepytos eun sod eprnposd pepreuosied eun eiuasaudar soine Jap ugresd wy "Tear UNL, LIpTPUI e| ap pupyeuosiad ap odp oxy un seiuasasdos apand mb ‘OLTPIUOD 0] Jog “OPHULJap oatsOIsHY afeuosiad UNE uu aquaumranp viuasoudar ou ‘zanbapyy HID PEGE 2p popapos ap soup war ud ‘vypuang orpeozy ‘onb odwon 2x UIA, Oyun Je vaUEsardor “upuIZND oust py ‘e ujmeyy 2p ‘MEA OGouEg ap smuOMay vIPAOU Yf Ud oypueg owoo “es97) oFnf ~,sea1oISTY,, oWOD sopEEISED sisson] se1qo svj Ua sen] ns exUANDUa “zeUaso1d ap sour seqeoe anb opniuas {> ud *,,pupraa,, Bl ap ZeIqey ap PEPIIG sod vy ‘ossondns 10d ‘K ugrseiuasaudar ap ugpuny ey aiueLvA sns sepor A ,ouIstBay,, [2 ered sd of anb 29a vy v ‘sapouorsertasarda sarm sj supo3 vised 4 emivsory ey pred s1uevodwr exunBasd wun sa wsg gmnbe sasqosaz sowapod ou anb o8fy §, sayetsuasa,, sapepipeno sey 09 9A anb auan anb ofp ‘spur oe e aqap 9s Peplopy, viso spain? ‘GQ Zuomdsored exysonu a1qos auodust as anb soxvjnonued svonstaisee9 ap pepuypuns aiuapuasdios vf anuswen sapeprjeno ap pepriues uv vun ap vauapuodsazio> vl ap sree vyspog? < pepren ap uorsosdurt vasa aystsuos anb ug? “ewor zen] ono o1slgo [pp tie as ou ab sourep nfo Isto “opmiqrosod ye ‘onb operuasozdox ora(qo ye reprus uv) so ajuejuasoidax oralgo fo anb fer sa uppeiuasazdas P[ 9p Peppy ep opuens vey 9s uPIquIEs pepzoA er] wquasaadas of anb o1a{go J9 us rup830 o1p{qo Jp anb ausons jer 2p a1uasne o1algo [> ve matisns o19{qo 9189 anb wred wpuapuay run aysrxg “owspur JS ap a1UD:O}Ip ayo ‘ayuasny oralgo tM 9p ein] [> UD OF sand tas anb orresasau so ‘upfaeqiasaadaz eum 395 apand or ‘a{go un anbune anb jsy “sould sono so] woD UOPDELAE ns Pepper, ns eqap anb ound un arsixo ou ‘2iqerpoxde so phiypuis ns anbuny ‘ono e viuasasdas oundury “oBreqt9 ps9 O esoraigo soquiy urqUuasaid anb sazepwys us anb ozad “anbsoq un uewtsoy anb sound ued vy op pays 8 so o1sa sexisnyy wae #2) anb ofduisla q “ono v sewussaidor epand @ vied auaroyns so ou priyuis eos ep ‘emu “s019 Phanguns ew sees? ‘onuowonsanoo apa equasoidas o1e{qo [a Ua opereziax s9 ath of oralgo je sowasmgie ‘osorrxo so onaqampa -uan99su0d wun oUi09 ‘2120 0189 opuENs) apusiozd ‘opow uniie ap ojz1ap ered 0 ‘ora JS owo> ‘ousaixd oialqo un 39s ems “9 2p swunii—e v seises3 ‘operuassadar oralgo 938 -100 o189f ‘opesuasaidar o12{qo un ap spent & 8] & aiapuaosen 0/8 ous2ix9 <9 anb otalge onpoxdal 8] 3p 381qvq sowapod mby -oa1ase (oprouos) os>4> un ensonus opeiuassidar 9 B] o> peprapy; owod vpezaprstioo 198 span .PepTePY,, W109 | une souran Siu soja zeiu9sa1d apand anb sosea soiwaR “range op ‘sesoueut sesi9aIp ap vpezapistod Je wor vis “ou ap vago vj w wurarxa 89 anb | Wo ‘oure ap vaqo vy ap vroNy wppeY. as anb oun “pspze-ou o1a{qo un 4 susan] ou 9p wigoe -exdar o12{go Jo anus uorsejar wun ejsqeq an sauojpuos seia1> ofeq ‘sola op seidaxd anb s0}2/q0 soiso ap soingume uos anb sapep 2p sauoIuD eFABsIsuOD pepIOA PT ‘oe ap ¢ Sourenuosu> onb sopeyuasaidas sora{qo soy 4 aui9n sose9 sors9 uo sowesn anb pepzoa ap ord soupjnonized sapeynorp wauasou ‘onvat [9 & jeorsnus uoromuasoaday vf ‘emyNos, ¥} owod Jse sorsezary[ sod soy ap sopeparet Genauw Nvennuis H, Hermenérie tuna personalidad insertada en una realidad artistica. Sin en nosotros, representando de cierta forma, embargo, en estos dos casos distintos —y en esto consiste ‘de un modo u otro. En relacién con esta im el arte literario— nuestra atencién esta concentrada en los ya de la realidad, ésta puede ser estrictamet objetos representados, cuya funcién es la de representar. “inica para cierto sujeto psicolégico (un dete Ellos son, gracias a una peculiar ilusién (a veces lamada tor o el autor mismo), o pudiera ser més “uni “mistificacién”), los mismos objetos que representan. Un [gg 6® de una cierta sociedad, incluyendo todos) fenémeno semejante se presenta en la pintura y la escultu- de las personas que constituyen esta socieda ra hist6ricas. ‘para las mutuas y constantes relaciones, con Para que un trabajo pueda ser veraz en este sentido, es ‘reacciones generalmente similares en cuant importante determinar la manera en la cual concebimos que las genera, y para la similitud de las py cémo es la realidad no-artistica (0 “debe ser”, como algu- ‘aversiones que se adhieren a su status de vid, nos prefieren) representada por el objeto artistico. Existen ‘tos representados obtienen cierto grado de u varias posibilidades sobre cémo una y la misma obra "Asi se da una imagen de la realidad que es « puede, de cierta manera, pasar por una obra veraz y, en [jy dela clase media, o del estilo de vida romén otras maneras, no, En efecto, Ia realidad no-artistica Debido al hecho de que nosotros podema —esto es, el mundo exterior, el cual el sujeto, quien per- Ta realidad externa que esté representada € cibe la obra de arte, conoce por su experiencia cotidiana arte en una amplia variedad de formas difere previa a su percepcién de la obra— es considerada quizas dad”, tal como la acabamos de analizar, cam como la realidad “absoluta”, una y la misma para todos los cel significado de la obra se modifica. Asi, ¢ ‘hablamos de la “verdad” en certa obra de “mos que definir el concepto particular que ‘mente, de acuerdo a las distinciones que hen .. Esto es atin mas importante cuando la! a sentido, constituye un elemento de sujetos perceptivos, existente como una realidad auténo- ‘ma, totalmente independiente de la obra de arte. Por otro lado, pudiera ser considerado como aspecto objetivo parti- cular, el cual implica que una y la misma realidad pueda tener diversos aspectos que no necesariamente coexisten en la misma comprensién. Esto también puede significar ‘obra, incluso cuando, en otro sentido, la “ve que hallaremos varias realidades distintas (que dependen no constituirlo, o su relacién con el valor ¢ de los diferentes puntos de vista filoséficos) y que a veces pueda ser muy distinto, otra de ellas es la que es reptesentada en la obra de arte. En relacién con la realidad seleccionada por el objeto artis- ‘La “verdad” como una simple similitud tico, cuya funcién es la de representar, la obra puede ser fepresentado y la realidad no artistic © no veraz. Es necesario distinguir, como un caso particular, cudindo existe tal impronta similar entre el objeto representado en la obra de arte y, una realidad no “objetiva”, pero con una imagen “subjetiva” de la realidad que se ha constituido as veces, en una obra de arte literat de que la representacién del abjeto, tun objeto representado y a la vex sim ‘no-artistico, es considerada un tipo de repr 44 sr ap ugisequasaidas ap odn un epezaprsto9 so ‘oonsjzs0-o11 ojalgo je rwpuns zaa ve] v A operuasaadar 019/90 un vsqo ¥] ua so. anb ‘orsiqo Jap upTeuasazdas x] anb ap oy>oy ajduns jp ‘erway aime ap viqo wun wa ‘saz seunsTy vonsfuv ou peprear ¥] & opeiuasozdax oralgo |p autua prays ajduns wun owo> ,pepsa,, wy (q ‘ommsip Anut 39s epand exqo 8] 9p OoEISD JOREA [> LOD ugIDE[AZ Ns O ‘o[IMSUOD ou epand ,pepas,, e] ‘opruas oo wa ‘opens osnjrut “e3qo. Bj Ud JOPFA ap oTusMI;S uN aXmMsUOD ‘opnuas o1—1 uo ‘,pepiaa,, Pf opuens ayumodur spur une sa orsg “op pa{qerso souray anb sauoIsURsIp sey v opzonse ap ‘ou uo sowauar anb renonsed ordaouos ja stuyap anb sour -oxptian ‘91m ap wsgo III UD ,PePIAA,, v] ap souTBAety anb 20a epeo ‘Jsy “varFIpou as eIqO Bap OproyTUaS jo upiquiey & riquie> “wzipeur ap sourequae vj owo> [83 ‘PEP *PA,, P| ‘SaiUaIayIp seuts0y ap pepaysea eydure wun ua suze ap Bio e ua vpeiasasdas piso anb wusoixa pepreer vj sejdwo1u09 sourspod sonosou anb ap o4>ay fe opiqaq “oonURWOS EPIA op O[NS9 fap o ‘vIpau asey> vf ap vonspiaioeseo $9 aonb pepreor ¥] op ustieun eun ep as sy pepryeszoarun ap opesd oxr9{> uausAgo soperuasaicar soy -alqo soisa “eprA ap snieis ns v uozaRype as anb sauoyszaae A seiouarayaad sey ap pnuypuns wf ved < ‘ezoua8 soy anb opunur je owns ua sazepuNs siuowyeIsUIs souO|D>eIT aod sepeufesuos ‘sauorsejas saruesuos & sengnuu sv] eed ‘ane sepy “peparos wis9 uasnyfrstoD anb seuosiad suj ap vyoxeur Bf 0 sopor opuacnpsUr ‘pepoIsos w1za19 wun ap 03 1dp‘ Jesroatun,, spur aas vraypnd o “(owistw so3ne [> 0 301 29] opeurwaai9p un) ootigfoatsd o1ains oysax wxed vom qpuosiad auauneisinss 19s opond ¥isp “pepeeoy ¥[ ap ta a{qns wateUE B59 YOO UOPEPE Uy ‘ONO N Opow uN ap. opiqaauos 0 ‘vuis0} ¥1za19 ap opuvruasaidas ‘“soz10s0u uD venayaeanr 4 YoLagNaneWEL opmnazisuoa vy as anb pepyar e ap ,vanolqns, Yoo ord ‘,eanalqo,, ou pepror vun ‘A ayn uo opequasoadas oralqo Ja annua zepuns quod Opuyno “rejnonaed ose un owo> “sInunSIp om 488 apand viqo vy ‘seyuasaadar ap vy so uorput sae oralqo [9 od epeuorssajas pepypeas ef too “Ou ap eIgO e] Uo vprruasaidar so anb vf sa} sa09A.B anb & (sootyosopy vista op sorund soym uapuadap anb) seiunsip sopeprraz seuea sou awowFTUsis apand usiquiea o1sq “uotsuosdut09 4 W3stx909 aquDurELIeS290u ou anb sorsadse So) *pond pepyvar eussrar ve] A wun anb vordur ft stud onnalgo o1sadse owoo opesapisuos 196 & Ono 20g “auw ap ¥IgGO ¥| ap aquarpuadopuy ams -ougine peprear vun ows aiuaistxo ‘soanda, So] Sopor wed vwistas vf § nun *,eanjosqe, pepy syzinb wpezaprsuos so —exgo v1 ap ugrodaorad Buvrpnod vrouatiadxo ns 10d 220u09 ‘ayze 9p 4 sted uzinb ‘oreins [9 fono Jo “zouo:xo opunut vonspie-ou pepyear vf ‘o19}9 ug “om ‘ser up ‘4 zvson wiqo wun tod sesed “eZouCMT tHE Saqo tug ¥ & run ougo aiqor pep uaisreg ‘oorasy1ze o2alqo [a sod epriussoadas (a; -n8e oU09 “198 aqap,, 0 ) vonstze-ou puptteas Sourqeouod feno w| uD wiouew vy seuRIaIap $9 ‘opnuss aiso uo zesoa 138 epond ofegen un a 3 vamaurd ey ua eauasaid as auefauis pq “‘uemuasaxdax anb sora/qo sous sof {(,ti9} epeurey] soo9a e) uorsnp sermoad vun e setae szeruasoidaz ap v{ $9 uorouny vkn> ‘sopemuasait 80] U2 wpezuasu0D yaso uoTuaNe enIsonU OL, B4S}St09 0159 UD A— soTUNSIp soseo sop so1s9 ut ig “wonspze peprwar cun uD epexzasur papiqe =nyynoso vy 4 stan Gexavp News H Heaaesirt la “verdad”. Esto ocurre cuando no se toma en cuenta si el uno es verdaderamente una representacién del otro. Esto pasa frecuentemente en aquellas obras de arte litera- “apropiadas” a su naturaleza. Estas cualidad rias que, no siendo obras “histéricas”, son tan similares a zan al objeto como un todo y lo determinan determinadas situaciones histéricas que son tomadas mente. como presentaciones veraces de ellas. Ocurre especial- Si esta “concordancia interna” tiene Iugal mente cuando el lector tiene conocimiento de la “realidad fica que los objetos representados que estdt histérica” (o de la realidad no-artistica). Entonces, toma parecen similares o bien, que aparecen come la obra literaria como veraz, aunque ésta persiga otros que se hallan en la naturaleza. Esto no sigt fines. El lector, de cualquier modo, juzga (0 reconoce) la arte, respetando su “verdad interna”, tenga ¢ obra como veraz. Una tensién marital, un escéndalo poli- sariamente naturalista. Los conjuntos de eui tico, 0 una crisis econémica serin consideradas represen: Jos objetos naturales reales poseen, o que se taciones veraces gracias a la similitud entre los objetos fen nuestro mundo de experiencia y en la-est “coherencia de los objetos”, esto es que, tepresentados poscen tinicamente cualidad presentados en la obra y la propia experiencia del lector, -colégica de los seres humanos, no represent que puede pertenecer a un contexto totalmente distinto parte de las posibilidades de coexistencia ¢ del de la obra. Alguien, con conocimiento de los padeci momentos cualitativos, lo que es similar, dic mientos digestivos, por ejemplo, puede percibir la “vera- al amplio espectro de diferencias entre los s “cos de distintas eras geolégicas. Asi, de la mi ‘existe una variedad de conjuntos de eualid ‘objetos representados en el arte que respeta cidad” de la representacién de la muerte de Augusto Pérez en la novela de Unamuno, Niebia. ©) “Verdad” como coherencia de los objetos. interior (Ia coherencia interna) y sobrepasan el dominio de nuestra experiencia cotidiana Existe otro concepto de “verdad” en el arte en el cual la al, Los objetos representados en la obra de cuestién se plantea como la apropiada representacién de tia pueden ser considerablemente “deformad los objetos. Esta “propiedad” no se refiere a la relacién J) ein a los objetos del mundo “real”, aungt entre objetos representados en la obra literaria y la fun. ina coherencia interna y sean “verdaderos” cién que estos objetos tienen de representar objetos que . se hallan fuera de la obra. Por el contrario, esto trata A veces, la coherencia interna es tomada’ sobre la propiedad de las relaciones que existen entre las en relacién con esos conjuntos de cualida cualidades varias del objeto presentado. Estas cualidades entra en su experiencia cotidiana del mt pueden presentar una apropiada relacién entre ellas mis- in este caso, el concepto de “verdad” en lat mas, 0 pueden carecer de ella: pueden ser mutuamente andlogo al caso anterior. No obstante, €s s contradictorias. Si estas cualidades sostienen una “apro- eoncordancia interna, y no en ésta o aquella piada” relacién, podemos hablar de la “verdad interna” eto representado en la obra con abjetos x de la obra. Entonces, también podemos hablar de la mos énfasis. 46 sisejup sourozpuod apuiop ‘saqeas so19{qo to> vaqo vy us operuasaidas o19{q0 [PP upyoepag eyjanbe 0 wisp ue ou 4 “eusowuy erouepz0s409 P| uo axdwiars $9 ‘a1ueisqo oN “sorZDIUE OseD fe O80} 9 ,PUPIAA,, ap ordasuad Ja ‘osea aysa uy yur sa ‘18 ap wago ey [Pau,, pun jap euviprod wisuariedxa ns ua exUaNsua oun anb sapeprens ap soqun{uos soso uo ug|DepDA UD 31 usumesfoord wpewor $9 eUsSIUT wDuaIDYOD Uy 39904 val uas 9189 UD ,Sorapeps9A,, UkAS A wULOIUT kIouAFaYyOO wun uansonu onbune *,jeax, opunut fap soralgo soy e wor 8/9 ud ,Sopeuiiojap,, aruatalqusapisuod sas uopond vis -¥iO1I] aLZe ap Bgo ¥] UD SopEUasaidas soralgo Soy “[P9 opunut ap euerpHos wousyiodxa wnsonu ap orurwop ja oypnar sod uesedaqos & (eussqur eouazaYOD vl) I01TaIu} pepiun vj uvtadsar anb aye ja ua sopequasasdar soiaigo So] Ua sapeprfens ap sorunfuos 2p pepoyea wun ans1K9 exOUEUL BLISILH Bf ap ‘JSV “seotHopoa8 Seia seIUNSIP ap so9 1uyi0 sazas so] anua serouaiayp ap onsedsa ond ‘uapreuy aorp “sejruns s9 anb of ‘soanenyens sora epiiqisod sey ap azied so] sopoi ap Biouarsixa0s ap sapeprriq 1p n onIsoMU uD xsd eamgonnsa w] ua 4 erouaysadxa ap opt urmuanous 9s anb o “usosod $3 anb sapepijens ap sorun{uoo soy ‘easyemaeu aqusuees uy pepzaa,, ns opurzodsas ‘suse 4 sayemIeH sor9h 200u 198 aonb viuar * wu: PP onb vomusis ou oisg “ezajeimeu vy uo ueTeY as aonb s019{q0 so] owoo uaoasede anb ‘uaiq o sozepuns uosased > soudax soraiqo so] anb vay vaqo BI U9 upIs2 anb sopey juss 0189 ‘svHn] auDH , eUIDN UEPIODUOD,, P19 Tg 29 vapwearend urutua19p o[ 4 opor un ows or9(qo [e UZ -Horems sopepyyen seasq ‘vzajemmieu ns v sepysdosde,, wos anb sopeprena s1usweorun uoasod sopeauasoadas soia{go soy ‘anb sa oisa ‘,sora{qo soy ap erouazayo9, Fy op age pod upiquies ‘ssouorug, PUIDIUT Pepsoa,, vf 2p 2e/qey sourspod ‘upE oude,, wun uaustisos sapepiyena se3s9 1g -seL aiuourenanus 498 uapand :ejj> ap z990e9 Dp Sq SUIS ANUP UpTDepOr upeidosde wun sua! Sopeprpens seasz ‘opeauasaid or2igo [ep seams Se] 28149 Uistxa anb ssuoype[as sv] ap pepo "EN O1s9 ‘oLENIUOD > Jog “vIgGO e 9p BIDt anb soralqo seiuasoxdaz ap uauan s019{90 so nj vy A wsvsanyy waqo ey ua soperuasozday sq UpIPe|aT wy & axayOr 2s ou, pupoidoxd, ws 9P woroeiuassudas wperdoade w] owoo rarumd ¥] [end [9 uo a1ze [> uD , pepzaa, ap oxdaauen, soralqo soy ap eisuazay09 owtes , G@IN ‘ounweUL ap vfaKoU | easniny ap ouonu vy ap uoreuasoidar gy *P1DA,, UL AIGIDI0d apand ‘ojdurafo sod ‘soansad “peped so] 9p omuayun20409 o> “uomnsfy “eIq O1UAsIp s1uawyeI1 orxaIU09 un ¥ saDatIaNIad “40109 [ep wpudtiadxa widord v] § wiqo pus s Soisiqo so] anua prayruns vy v sores sazex9 atasardo: sepezaprsuos upsas vapuiguioda sysHi9 1 fod ojepuyasa un ‘ferenwar uoisuo1 vu “zesaA | B (e20u09a4 0) wazn{ ‘opou samnbyens ap “30139 Sono eSisiod wis9 onbune “ze10n owo> waa Putod ‘soouorug “(eonsjze-o1 pepyreas vy ap 0) Pepte23,, ¥] 2p ouaru20u0> aun 10229] fa opus eds9 axN9Q “seijo ap soovs9A sauOIsesUDE Sepewion wos anb seopoisiy sauorpendis. sup) ® soreyruns ued uos “, seaqzorsty,, sezq0 opuars ou 81911] uv op seaqo seyfonby us squstaqUaRDaNy ONO [pp uopMuasazdar un artowesopupAN | JS Puan ua vuror as ou opuens 120 ons “|p Hse Grnauo Nvennuts H. d) La “verdad” como cardcter de autonomia existencial. Un caso muy particular de concebir Ja verdad en la obra de arte es aquella en la que es postulado que el objeto representado, gracias a una conveniente estructura 0 la manera en la cual es presentado en la obra e impuesto al perceptor, toma el cardcter de ser existencialmente auté- nomo. Aun no estando éste mas que representado en la obra, 0 no mas que un objeto intencional, y como tal no teniendo mas que una existencia heternoma (no auténo- ma), y por lo tanto, no existiendo en realidad, este objeto aparece exactamente de la misma manera que los objetos “reales”, Este carécter auténomo, de existencia esponté- nea, es @ veces tan potente y claro y se impone con tal fuerza que casi olvidamos que nosotros enfrentamos de {facto s6lo tin objeto representado, una ficcién, Aquello que ‘es representado en la obra de arte aparece como existente, verdadero en uno de los sentidos epistemolégicos de la “verdad”. No obstante, no es necesario que esta caracte- ristica deba aparecer tinicamente donde haya wna impron- ta similar entre los objetos representados y la realidad no- artistica, o incluso donde la representacién es tan fiel en Jo que concierne a las cualidades de los objetos representa- dos. Por el contrario, esta similaridad puede aparecer donde la funcién representativa no exista o donde los objetos representados en la obra sean francamente defor- mes con relacién al mundo real que experimentamos en la vida cotidiana. La “verdad”, en este sentido, puede presentarse en una obra de arte que no sea en ningiin sentido navuralis- ta. Tal vez, debemos considerar a tal obra “realista”, y de buena factura. Efectivamente, este concepto de la “ver- dad” esté ligado al primer caso, en el sentido de que si fuese necesario comparar los objetos representados en la obra de arte (donde la existencia auténoma es impuesta) 48 Henwenéut con objetos “reales”, exista entre ellos unas cial. Esta similicud pudiera no ser una de’ que les han sido concedidas, pero en su luga recer uno de sus modos de existencia, Este tir, efectivo en los objetos reales, no ¢s mas ¥ ficticio en los objetos representados, aunt gan ante el lector como objetos que efecti ten, Si declaramos una obra “verdadera”, € del término, no ser sino hasta haber comps la realidad que es externa a la obra, que me ‘mos con Ja decepcién de Ja apariencia de auténoma, ya que al mismo tiempo, estamo dos a llamar “verdadero” a aquello que, mismo. ¢) La “verdad” como encarnacién perfecta, Cuando reconocemos la existencia de las (especialmente la obra de arte literaria) en l tos representados son privados de un eardet cia auténoma, y que, sin embargo, por un) tencial que se da como suplemento no son, menos “muertos vivos”, entonces de nuevo concepto de “verdad”, un coneepto aislar y describir, Este nuevo cardcter exi tuna cierta “irrealidad”, concebida no sélo negacién, en este sentido como un defeeto ‘sino como tn fenémeno positivo Estudiamos aqui no sélo lo “fantdstico” sino también la totalidad del dominio del mundo representado es infundido con el | “fabuloso”, con cierto aspecto imaginati Estudiamos el arte que no tiende a dejar uni tealidad, por el contrario, deja una impresi van toque de irrealidad, de un arte que se) ob tun wod vapor as anb aise un ap “pepit enor UoIsn ap ugrsasdut wun efep ‘ormsUOD [> x0d “pr are 9p upsoxdury nun swap e opuan ou anb aye J> sowerpnassy “Kmonzed oanwurgeur o12adse oy! uod ‘osoingey, © 9P 421389 [> VOD oprpunzut sa operuesssdas opunta P 2puop aie fap orunuop jap peprTeIor vy UpIquier ous ‘seraod soy ap oonsviuv},, of o[9s ou jnbe soueypnassy ‘oartisod ouaurouay un oWI0> ours ust ap anbor un “pepreaz “upies aduns vf sod ojos ou epiqasuod ‘pepreau, v2u919 wun 9p $9 [euarstxa 3929 9 0193}2p UN OUIOD OprIUDs 3189 td ‘uOIseBOU RD OAaNU OISY ~NIQHDSOp & aUysqe sowaqep anb oxdaou09 un ‘,pupras,, ap ordzou09 oaanut un soutrsqnasap ssouoiua souonur, souow ‘onue) of 10d “tos ou oquawiajdns owos ep 2s anb e1su3) SIx9 sa1OpIED uN sod ‘oBzequIO Wis ‘onb ‘wuOUgIne eID UBISINO 9p ZaIDyI"9 uN ap sopeatad uos sopeuasoidox sor 3iqo soy Jeno w] ua (vrsesaxg| a22e ap vqo vf aruauuTeIDOds0) 2UB ap seago sey *,SOAIA-0 2p vpuarstxa B] souasouo.ar opuen7y wisopiad uomeusaus ow10D , pepioa, ey (a J8 20d 21819 anb oysnbe © orpepios, wwe] & sop ~zagqumsso2e souaso ‘oduaty ouster fe anb v4 “eumouoae UUDISpED ¥f ap wraustsede 2p uprodaoap e, uoo vou areziueou9 Sou anb ‘iq wy wusonsa 30 ab pps 09 59 opemedoa sage ise ous por ou ‘outers fo SIX9 auaweANIID;D anb soia{qo owoD 10299] Jo a1uE wee uodury 9s anbune ‘sopeiuasaidaz soraiqo soy ua o1naHy & -ede e2ypnd avr ns us ord “sepypanucn oprs wy sy on sepepyn> vy 2p oun 328 ou ssaypnd pry vansvaaie 4 vounanaveespy (eisondur so euroupine wiouaispso ey apuop) I Uo Sopraussaidar so3aiGo soy rezedates on 55 onb 2p opriuas jp uo ‘ose satmad [8 ope 34, HL 9p ordaou09 aso ‘sruourearsayg-p 9P 4“ eistqeas,, v1g0 pea v rexapisuoa somaqy “S[emeu opnuas unduTu ua vos ou anb ape NP sereauessud apand ‘opruss 2169 ua + pe wt Bue soureiuoaizzadx3 anb year puna pe upi 2O}9P stuouroues; ueas e2q0 v] uo sopmuass $0] 2puop 0 visix9 ou earreruDsazdad of woomde opond peprrpuns rs “ormenuos i Prussaidar soialqo soy 2p sapepmeno sey & za 39 PY uta $9 uproeruasaxdaz e| puop osnout “04 PYPITE 0] & soperuasa:das soraiqo soy amy “worduy wun sey spuop aiuawesqun sasamde| rene ms0 onb opnssanou +9 ou ‘aaueisgo oN 1 2 sootigfowasid> sopnuas so; ap oun ua Siuaisrx9 owoo aoezede anv 9p viqo wy 9 opr enb offanby “uprsoyy eun ‘operuasaidar ‘o7afqo ui 4? soureiudsju9 sonosou anb sowepiayo ise 4 TP? woo suodun 9s 4 om & azuaiod wen 3904 ‘Pwuodso wousisixs ap ‘ouloupane ss199zH9 asy Sor0/qo soj anb trouews ewstu vy ap aruoweIoes o1PIqo 2189 ‘pepreox ua opuarisixa ou ‘ory or: Suoine ott) ewlougs2194 uorspe> wun anb sp Our TP ouio> 4 “euorouoyu ovolgo un anb spa ¢ B{ U? opnussoidar anb sy 2159 opuvaso ou ut sine a2uaw[eIoUDIsExa 498 ap J01D~I69 Jo wtHOy 4 J oWsonduy 9 ego vy uo opeauasoud 59 jono ef d Ble Gmuons> Siuomuaaue> un vse ‘apa S124q0 Jp anb opemmisod 9 anb vy ua vine 4 Tage ¥] U2 pepzoA vf niqzou0D ap zemonzed dou THPu>isH%9 wpwouome 9p s29828> outoD ,pepra Hr sian, Gena Nvennus H, atmésfera de fantasia, un mundo onitico donde los suefios son traspuestos dentro de la realidad. En este tipo d arte, tanto como en el arte que busca imputar una exis- tencia auténoma, es posible llegar al punto de impregnar los objetos representados con un aire de irrealidad, como el de una fébula. En ambos casos, cuando son exitosos, algunos se verén tentados a hablar de la “verdad” de la obra de arte (o en la obra de arte). La “verdad” toma entonces otra significacién, nueva o diferente, o quizés tinicamente més general, que en el caso siguiente. Esto es, el objeto representado en el arte es verdadero si éste encarna, gracias a una justa y apropiada presentacién, en una forma “perfecta”, un cierto caricter existencial y, al mismo tiempo, aquellas cualidades que son propias a é De esta “perfecta encarnacién” u independencia surge de los objetos representados en relacién con quien Jo percibe , y quien inspirado en él declara que esta obra es “verdadera”. IIL. La “verdad” de la obra, de acuerdo con Ingarden, también puede ser concebida como una conformidad entre los medios de expresién y el objeto representado. Cuando el objeto representado es expresado adecuada- mente, podemos ¢ En otro sentido, pero en relacién a lo mencionado anteriormente, podemos vislumbrar la “verdad” en una pintura, especialmente en un ejemplo de arte representa tivo, cuando percibimos el objeto representado en la obra de arte y tomamos en cuenta cémo este objeto es repre: sentado en dicha obra de arte y cules son los medios de expresarlo (de acuerdo con el arte dado) que son emplee- dos, que no sélo concuerdan armoniosamente con el obje- to representado sino que son utilizados con suficiente des- treza y flexibilidad de tal suerte que la unidad de la obra no sélo sea verdadera, en el sentido que debiera, sino ficar este objeto como veraz. eae verdaderamente convincente. Esto trata, po la eficacia particular de los medios y las fort sentacién y de sus relaciones con los objetos representar. wun soo v OpIpE ap optaowas z9s vpond epeu anb eiouew jer ap sopearyiqe> sojuswoW! sns ap JemMyNAsS up|sayo vu BILAsoxd BAGO eis opuend ,wiapepi9a,, ‘eigo vUn ¥ eULET] oun s99n YY 1qO ¥ upon v apuaTIxa 2s ordaou09 2189 ‘ sap anb Ja ua ‘opauss a1s9 wy “wINRIONT vIqO FI ap 501 enis9 SOLWA B OUIS ‘OUN F AUIATIUOD O[9S OU ,PEPIDA,, 9p sw 0 “vaqo ey 20] 8] sere sou ordaouop [a anb viuans ua soumeruod “[]] UOHIONS EL UD eA Ue ap wIqO ¥[ UD soA;IENTEND sor UauioW ap sorEN{uOD so[ 9p UOISPYO OWOD PePIDA eq (° ‘ago v] ap soustOM saiuas9y{p So] Wo prouasayoo © UgISayoD OWOD ¥pEIapIsUOD tos apand ‘sojnuy somunsip apsap vista ,pepad,, eT “AT awuoruau ap souegnor anb , peproa,, ap ordsouoo ja araur ua Bua oun anb e] ua eprpaut vf U2 UeTEDe 98 OJOS sapeNd soy ‘Sar -oysaaqn seara{gord soungje soureasosqo jnby zsozpeproa a1 ap sopequasaidas sas uvqap 19s uepand sors anb anb soraigo soy ap uorsuny ua uEIquIES oWgD 4 ‘vsIO v BIgO tun ap wena oWOD? ZOHO # O[7ISa UN ap X ‘ox v aL UN ap WELEWA OWN? ZSoIpauU Sors9 os safpND? “seIUASAIdas uviuiaiut anb so2{qo soy o> ssuor>epa4 -oudoa ap sewoy $e] 4 sorpaut soy ap axjnayzed vEDe=> B ap ‘omer of sod ‘v1en1 o1sq] “d1usoUTAUOD a1uaUTEZapEpIOA ng ap & ugIoe IUDs veouvaeiir A VowogNawu ours “e191q2p aonb opnuas jo us ‘wispeps ago | 9p peprun ey anb axsans je ap pep “Sop s1ua}oqns uoD sopezyyfin os anb OMS -2(go Jo o> aruauEsoruOMTe ueprONIHOD ¢ vjdui> uos anb (opep ue fp woo opzanoe 2P SoIpaut so] Wos sapen> a32e 9p wago BE -axdar eauian3 ua sou ¥1go vl U2 opsiuasasdas oralqo [a soungrss; -iussarday aize ap ojdula un ua aquaune wun u> ,pepioa, e] smiquinysts. sowppod opruorsuau oj & uoIelar ua ord “opine ZEx9A OWOD OFA/GO 9189 THEFT st ~epenoape opesaidxa sa opeiuasoadar o1a saudax oralqo |> & uorsaudxa ap so Pepmusoyuos run owo> vprqasuos 39s 4 $2 O19/go 2189 01 ‘opraua apmwTu]_UOI opzone ap ‘ezgGo ef ap yp Bago #359 anb vivsep [2 ua opendsur want uoinb wos uorsujas ua soperuosoxdax sorale vpuapuedapur r1z319 FUN, uorseueoUD BID, Bp ¥ seidoad uos anb sopeprena seyanbe ¢ JP ‘6 yerouanstxo san9"e> o119 uN f eIDapS ad wperdorde & wisn{ wun e st 3189 |S Ou9pepIA so a1 [> ua opertass 50 01 ua “uppeauos: aqu9qHss ose9 Jo ua anb ‘persua8 sy Aan ‘UorDeOyTUBIS PUI ,PEpIOA, FT “(Ue ap IqGO UD o} 8] 2p ,Pepzaa, ef ap seAQeY ve soperuay up, ‘sosoirxa os opuend ‘sose> soquie Us “ef ‘ouwiod ‘pepleaiiy ap ame un vod soperuasan swufoidwy 9p o1und je se801] a1qusod so Seu -six9 wun zeindunt vosng anb aume fp ud om ap odii oso ug “pepyvas vy ap omuap s¢ Sousns so] apuop oay2;U0 opuriur un “eyseIUE spzmb 0 ‘auazayp 0 us GrRALD Nvenuius Jo hacen en forma ordinaria, en el vago sentido de que las unidades cualitativas de la obra de arte estan determina- das por cualidades ideales que existen independientemen- te del mundo real y del grado en que éstas son reconoci- das (esta idea de lo “trasliicido” en la obra de arte, una propiedad en la cual Hegel pens6 encontrar Ia belleza). Ellos estén tentados, al mismo tiempo, a pensar que la actividad creativa del artista consiste en descubrir estas cualidades ideales por sus relaciones esenciales. Conse- cuentemente un artista nunca es més creativo que cuando crea las condiciones concretas por las cuales estas cualida- des pueden exhibirse y encarnarse. Las cualidades y las unidades cualitativas que deben ser tomadas en cuenta ordinariamente son aquellas cuali- dades que son vilidamente activas en relacién con el lec- tor (el espectador) y que provocan una sensacién estética, especialmente imponiendo en el lector wna cierta clase de encantamiento bajo el hechizo en el cual él percibe la obra. Mencionaremas este aspecto mis adelante en este trabajo. Las unidades cualitativas de las que hablamos en es- te estudio pueden siempre manifestarse en el arte, sea éste representativo 0 no (pueden hallarse ejemplos en la miisica y la arquitectura), Estas unidades contienen habi- tualmente a la obra de arte completa y no sélo a algunos de sus estratos. Este concepto de “verdad” tiene un uso mucho més amplio que los otros conceptos que hemos revisado, b) La “verdad” como cohesién de las unidades cualitati- vas que son particularmente importantes: “Verdad gra- dual” ” Ein el atticulo al que hago referencia previamente, Ingarden menciona {que estaba a punto de publicar un aticulo sobre el tema de “la validez esté tica de las cuaidades”. No he tenido oportunidad de acceder a este ariculo, Htenwenue Una variacién especial del concepto que aca cxibir es aquella de la cohesién de las unidad con las que ciertas cualidades particulares mente importantes y vilidas en el marco ¢ dad” (como cuando estas unidades crean el tuna gran tragedia, o algunas otras la profut cia que las revela, por ejemplo, en una purat ca). Entre mas importantes son estas unids vas, mas “verdadera” aparece la obra ante posible, en este caso, construir una “vere ‘pero esto es completamente inadecuado det diversidad de significados posibles en este-n V. En ocasiones, la “verdad” en una obra < ria es entendida en términos del autor, com cidad y veracidad. Entonces, la “verdad? depende de las cualidades en el artista. a) La “verdad” como sinceridad y veracidad El concepto de “verdad” de la obra de arte ‘obra de arte) toma una direccién diferente comienza a echar un vistazo a la obra de an relacién a ella misma, sino en relacién a su t ‘convierte en un documento psicol6gico, un t si6n, o en el efecto de su actividad intenciot sus designios artisticos Como consecuencia, en el primer caso, se a veces, de la “verdad” de la obra (especialme de un trabajo literario), cuando es “sincera! ‘ejemplo, cuando describe bien y con fidelids ‘en los cuales el autor tomé parte personalme da testimonio de Ins experiencias que ha ‘manera de ver la literatura parece justificad ‘encontramos con una obra titulada “Memot « un Uoo © SPHOWIAWY,, BPENIN exqO FUN OD soureNUOIID sou opens epeoynsn! aoared vimieso1 ¥[ Joa op exUeUT visq ‘opmsy wy anb sviouariadxa se] ap ouownso: vp opuens o ‘aquaweuosied axed guior somne JP sapEN> soy > NS SO] PEPIPPY] wo 4 var aquosap opuvns ‘ojdwwola eI2ouIs,, s9 opuens “(o1seI8N] ofequsa_un op By ap ‘sa0an & $08: sod ‘59 0189 ¢ even 2s ts aiuawuesadsa) eago vy ap, peps9A ‘awjqey apond as ‘osva saumtad fo ua “wr>uaNs2sU09 OWO- soonspue sorufisap sns sez1[v91 ap [euO!UDTU! PEpLAN® ns ap 0109}9 [9 UD 0 “oIS -ayti09 ap adn umn ‘oorSojooisd onusum0p un ta a1s9TAU0s 38 aisq “JOE Nsw UOTDEPEE wo OUTS “eLUSTUI BTID UOTE uo 0198 ou ‘sym ap wIgO Yy ¥ OZEISIA UN JeUDD v BZUOTUIOD oun opuens a]UDI9JIP UOIaNP UN wUIOL (a1 ap vIqGo vj uo ou A) ame 9p vag ¥] 9p ,peprad,, ep ordasu0> [3] ZMK [9p PEPIeIDA A pEpLIZ.UIS OWOD ,,PEepIe4,, PT (er ‘pISHue JP Ud sapeprEnd sey ap apuadap JO BI] UD .pepsad,, vf ‘saou0IUy “peppeza 4 pepp -]uagne ns oWod “FoINe Jap SOUTUID UA epIpUAIUD sa wT “BION au 9p vo eUN UD ,pepraa, By ‘saUorsea0 Us “A, ‘opunts 2189 Ud sojqsod sopeoryrusis ap pepiszaa1p ued vf v opiqap opensopeur aioureiapduios so 0359 o10d enpex® pepsaa, wun smnsuos ‘ose> a1so ua ‘2yqrsod sq “sonosou aie eiqo wy aoauvde ,eiapepsoa,, spur ‘sea HeyeNd sapeprun swisa wos saiueisodwy spur aug “(> Hy] ugisaadxo vmnd wun wo ‘ojduals 10d ‘epaaar sey anb 1 -uatiadxo epunyoid ey sexo seunsye o ‘eipagen ued eun ap ouatu9ay [> UvaID sapeprtm seis opuvN> owOd) Pep vor, bun ap ooxeat fo UD sepTPA & soruewodwy uous jeradsa wos saremonmed sopeprens seizap anb sey woo Svaneaypeno sapeprun se] ap ugIsayoo ¥] ap wIfanbe $9 sAqHD -sop ap sourmqeae anb oxdaouoo Jap [epadsa ugrereA eUp) venayweiur « Vong a 21 ps, 2p wo Dos pope om oN Soh uoouau opi ‘uoueAoid rDuaysr Oey nb fee 138 pepio,,, ‘someuodu ayuswzemonmed eUTEND sapeprun se] ap uorssyo9 oweD Ff sowiay anb soxde2uo9 sono sot anb oydian sn un auan ,pepioa,, ap ordaou0a ais “st Soungpe ¥ o[9s ou & wiojdwo> axe ap wigo # 1qey uous Uos sapeprun seas -(vsmysaqHnbs Y ud sojdwala aszeyjey uopond) ow o ones vos ‘ou [a us asrersoyTueur aiduoqs wapar -$9 Uo soumeqey anb se] ap searreuena sopy 2189 ua aTURpapr spur 1 adsv 9189 sowaneue ¥ aqiuad [9 Jeno Jo us ozmpoy Jp ofeq of Bp arp mip om soa oo oa "oqo upgosuoeeun uobonoid a Gop 29] [9 Woo torsejas UD seatioe aauaWEPAPA th PND suyonbe uos arttaweLzeUIpz0 witan9 ta aqap anb searveneno sapeprun se] & sopep wus & asaigiys “*pyjena se1s9 S9]en9 sv] sod sv1a12U09 s9uOR “2800 “SofeDUDs souOIDN|DE sms 40d saptap Se1s9 JHIqnosop uD arsIsU09 eIsTZe [ap BAND ty onb aesuad v ‘odwan owsiw je ‘sopenuay “(e29][9q vy senUODUD gsuad j9%5]] joRD YL wun ‘Suv ap ¥3Go vy UD oprnyses, of ap wa -PoUNDa: LOS SeIS9 aNb UD OpEzE fp A JeaN Of Aiauinuarpuodapur uansixo anb sojeapr sapepy Seurunop ups aun 2p mo v1-p one sm anb 9p opus: of sus ratapee pay 1H stan Ganacp Nyennus H volumen de “Cartas”. No obstante, esta manera de ver la literatura es también utilizada en otras formas literatias Es empleada particularmente, con la literatura lirica refle- xiva y con la tragedia, En tal caso, ¢s empleada tinicamen- te en forma indirecta y bajo la luz de una interpretacién particular; la sinceridad o la “veracidad” de la obra de arte se convierte en un problema, y solo eso. Normal: mente, nos aproximamos a la obra con cierta informacién seleccionada, por ejemplo, informacién hist6rica, opinio: nes de colegas 0 amigos, ete, y de acuerdo con estos repor: tes y su conformidad con los resultados de nuestra inter- pretacién de la misma obra, concedemos que sea verdade- ra, excepto, por supuesto, cuando le otorgamos un j negativo. b) La “verdad” como “madurez” de la obra de arte. En otro sentido, Ia obra de arte que puede ser considera- da como “verdadera” es una que, cuando ha sido aprehen- dida, manifiesta los propésitos artisticos del autor. Si se da una aprehensién tangible y precisa de estos propésitos, la obra sera considerada “verdadera”, esto es, fiel a su concepeién primaria, Tal obra debe ser llamada “madura” © “acabada” mejor que “verdadera”; el fruto de la con: cepeién madura es una obra exitosa. La obra puede, sin embargo, estar madura, en este sentido, y atestiguar la inmadurez del autor como persona o como artista, presen- tando imperfecciones artisticas las cuales pueden hacer parecer inmadura a la obra, No obstante, Ingarden afir- ma que esto es otra cuestién. Aqui tenemos que distingnir dos cosas: los propésitos uw objetivos del autor nos son revelados por la obra misma, por las peculiaridades de su construccién y estructura, 0 bien, estos propésitos y objetivos se nos dan a conocer por las declaraciones del autor mismo, por reportes dados 54 Hersey por sus amigos y socios, y demés. La *m obra, en el sentido de una adecuada apret propésitos y objetivos, es especialmente pa estos son descifrados por la obra misma. ©) La “verdad” como fidelidad con la que) presa a si mismo en la obra. Es posible, a veces, deducir a partir de obra misma si es “sincera”, o si ofrece inf fiable a cerca del autor, sus emociones, st particular y su humanidad. Esto ocurte de cial cuando Ia obra es la “expresién” dest cuando la obra tiene el propésito espeetfi “expresin”, cuando ésta es la funeién $ obra. Esto, sin embargo, no es la funeién ¢ arte en general, o de ninguna forma de lit ticular, Esta funcidn de ser una expresiéne te singular y no puede darse sino en la-exe Ja obra tenga unas cualidades especiales, qu ‘easo en un poema Ifrico de intenso acabad ‘otro lado, la obra esta totalmente privada dades, las cuales varian de acuerdo aligént si no se pretende que funcione de este mo¢ deficientemente esta funcién, entonces, presenta la mentalidad, o las emociones de manera errénea, deformada, parcial o abre ‘puede ser llamado una obra “verdadera”, ser una expresién adecuada No deberiamos requerir, o esperar, que de arte cumplan con las demandas de est particular esta funcién no tiene por qué ‘cabo. Asi, mientras la situacién cambia, s) acerca de si la obra se presta a “expresar” del autor, uno desea obligar a la obra ae ou & ‘opresazdxa e vigo ¥] & xe8y{go easap oun “sOINE [ap peprreruour 7] zesosdx asimdnooasd uls “wquies ugioenas ef semuar ‘Jsy ‘oqu3 © upeaay] Jas gnb sod auan ou ugiouny vise remoped iq ugroun seaqo se] sepor anb ‘aesadsa 0 “srranbax soweysaqop ON, pe ugisasdxo wun x08 9p opnuas [2 ua * ,ezapepsaa,, ezqo kun op! ou o1sq “‘wprrssiqe © jerored ‘epeuzoyop ‘eauguie vroubL p souo1soUD sey o ‘pepreataut vy eruosozd ‘oysandns od ‘ssouoiwa ‘uprouny ¥is> s1uSWOIUaTyap ajdumna Js 0 ‘opour a1sa ap auorsuny anb apusrasd as ou jena sey ‘sopep Jeno se1sa ap upeand aruauipei1 vise wsgo v] ‘opDy O10 v eisoud a8 vigo By Is ap eaIa28 visa ap sepuvuiap se[ oD uefduins 218 2p pena pure] 12s apand vun ap zine © ‘ouessi] oxu98 Je opsenoe ap uepIKA s: rod ‘Is og “opequoe osuaiut ap ost4s] vuIaod UN UO OseD p98 epapod anb ‘soyersadsa sapepypeno stun e8uay eaqo vy anb ap uorsdaoxa e] Us ous asiep apand ou A amjndus 2 -uouuteynood so upisardxa wun Jas ap uoIsUNy KIsy “se sud ua wanqusaqy] ap euLZOY vUNBUTU op o “JexDUaT UD 2170 ap Suny vj Sa ou ‘oRequIa WIS forse “esqO e] 9p euBUNZ ugDUNy YL so wisp Opu wun 398 9p oay{sadso ousodord a auat BAgo By] opuENa § pepreauaur ns ap ,ugisardxa,, vy s@ vago vr] opuens jet -odso erourtm ap axmoo ors “peprueumy ns & semnored pepyeuosiod ns ‘souoows sns ‘soine fap #9490 v 2Iqely {uo9 UpIDeULIOFUT dDaxJO IS O | LTOOUIS,, $O Is CUISTEA LIGO BL ap eanada] v] ap shed v s1onpap ‘sas v ‘aIqisod sy svgo Se] ap u no ‘ugisardxa,, esq vj ua owistur ys v sad x9 98 goINe [9 aNb P] OD PePIEpHY oWOD ,PUPIDA,, wT (2 ewsfur P1qO vf 10d sopEy]>s9p OS so1s9 opueno ajqedjed aauauersodso so ‘soania{qo & sousodosd sns ap ugisuoyaide wpensope eun ap opAuas > ud “exqo vi ap ,zampew,, wy “syui9p 4 ‘So190s 4 soBrure sns 10d sao Sopep saizodax sod ‘ouistu some op souoR g20u09 v uLp sou as soanalqo & soms9do © ‘eamannsa { uprsonz3suo ns ap sopepiat “wurst waqo ¥] xod sopey>aas wos sou same | sonsodosd soy :seso9 sop mnSunistp anb sou ugnisano eno $ uy ‘D3ueISGO ON! “wago YL ¥ BAN zoey Uapand sajens sey seonistue sguoras uasoid “nistu oto 0 tuosiad O09 JOIN} ¥ genase 4 ‘opruas 9189 uD “empeur us ‘opand waqo wy “esorrxa vago eun son sapepia,, anb soleus Pano, eeu] 19s aqap exgo [ey “wETwUNE 1st [py ‘S9 0189 ‘,ezopupraa,, epesapisuog ‘sousodoad soxso ap wsjoaud & 2qq1uvy worst 98 Ig “YoIne Jap soorastase sousodoxd sop v1s -uaypude opis ey opuens ‘anb wun s>_,exapep exapstiod 428 apand anb suze ap nago By ‘op aye uapie’ uod Bf ap oImuy | §, ‘9ue 9p vigo v] ap ,zaanpe,, ouoD Jf opin un sowreio10 a] opuens ‘orsondns sod -2pepi94 vas anb sowapaoues ‘ego wus ef ITU] ENsonu ap soperfnsar so, uoo pepo -4od9z $0189 uo opsanae ap & ‘919 ‘soBmw os -onundo ‘eata9ist uorsewsoyuy ‘ofduiala aod tprovULIO;UT IFA! OD ego P| ¥ sowUNEKONd “PPWHON "059 oI9S 4 “mua]qord un uD aud 2P "AGO yap .pepIowDA,, v| © pepEaoUs 1 uopeioadioiur wun ap zny vj ofeq 4 vioampur suowieorun epeajduia so ‘ose ea usy “eypaeny -o]jex voy] vinvezaNT] e] vOD ‘stusuiaeopued SELIv9}1] SewI0} ses Ud epeztN pique 2B] J9A ap vraueW visa ‘s1UFaSqo ON +, SUID), Hs Gera Nventurs H. estando en posibilidad de hacer esto (porque la funcién “expresiva” est ausente), intenta “deducir” las cualida- des psiquicas del autor por ciertas cualidades “objetivas” en la obra. Esto no trata sobre la “verdad” en la obra, aun cuando nuestra informacién acerca del autor pueda ser correcta, porque esta “verdad” no se manifiesta ex- cepto donde la funcién expresiva actiia con precisién y claramente impone al lector el cardcter psiquico particu- Jar o las emociones particulares del autor. No debemos olvidar que la palabra “autor” también es equivoca. Es empleada en por lo menos tres sentidos: 1. Elautor es concebido como un hombre/mujer verdade- ro. Ei/ella es anterior y trascendente a la obra de la que es autor/a. Podemos conocerle personalmente, © conocer gente que lo conozca 0 que lo haya conocido. Un ejemplo de esto es Octavio Paz. 2. El autor es uno de varios sujetos que la obra de arte representa. Esto es especialmente cierto en las obras de arte literarias. Podemos hablar de él o relatar sus expe- riencias 0 aventuras con otras personalidades, Fl/ella puede hacer esto a través del “sujeto lirico” cuya presen- cia aparece en la obra, en el estrato de los objetos repre- sentados, gracias a la funcién expresiva la cual en ciertas obras es la funcién de su lenguaje. El autor, en este sentido de la palabra, es uno de los constituyentes de la obra, que no es necesariamente una obra lirica. Pudiera tratarse de una obra dramatica, donde el autor es uno de los personajes. En una pintura también el artista puede pintar un retrato de s{ mismo dentro de una obra mas grande. Sin embargo, en el arte no lirico no es “expresado” por algunos de los elementos en una obra dada, sino que es representado como un objeto mediante aquellos medios de expresién propios de cada género 36 Henaens 3. El autor es concebido como un “sujeto teneciente a una obra dada. En su existe) g0, sus cualidades, sus aptitudes creativa psiquica, sus preferencias, su actitud ha emo lo concibe, esté determinado por Sélo por la obra conocemos al autor en es al hecho de que él/ella existe Gnicamente iente a la obra, la obra es también trasce; Byella pertenece a la obra precisamente f objeto existente de existencia auténoma, existente derivado, y el producto expreso sf ¢s un objeto auténomo, que lleva dent signos de la actividad y la personalidad de Jo tanto, es necesario descubrir el autoren fundirlo con la particular personalidad q por nosotros y, sin documentarnos aceteay cerniente a su vida privada de la persona es el autor, en el sentido mencionado pre} sonosou uainh e opnuas un prep ‘exqo B] ap zompvur vj o ‘ugisazdxa wy ap wOUAISD B] ‘peprsaD LUIS 9p OPNUDS [9 UD vas ‘DIT ap VIGO B] UA , PePIDA,, vf ap uonson9 ef ‘ugzes vIs9 Jog “salUapIAe souOPo—pEIUOD ap a198 tun eIDeY 2onpUOD UOFSEDIFTIUApr v] ‘SosED soyDnU u9 ‘oueNUOD Jo Jog ‘So]]> ap OuN ¥peD ap UOLDe>ITUDP! tun sod ojraafosox ap sein Jor un eFTas f ‘onan EMIT; oad un sa a18y gopHuss o1uLisIp un uo opesoprsto> oun upeo ‘sare SoIs9 aN1UD SaUOIDeL>T se] UOS saTyND? quouyAaId opeuoIsusU OpHUas fo Ua “IOTNE [> $9 anb sourages anb wuosiod vy op epeatid wpra nsw ayuaruzas 109 of ud ‘[p 9p ¥o199% soUEAUSTMDOP UIS ‘K soxOsoU 0d epfouos so anb pepyeuosiad zemozized vy o> oprpuny 09 UTS Bago Pf 9 4oyMD Jp ALIqasap OFTeS9IaU $9 ‘ONTE? Of Jog “sopvar9 ns ap peprreuosiad ey & pepranoe ey ap soudts so ¥ija/i9 2p ONUaP wAay| and ‘owoUOIE o12/G0 UN s> Js anb uatng[e ap osaudxa o1nposd |9 4 ‘opearsap 21098 ovalqo un outs ‘omoupIe wiouaysixa ap aiuarsixa o19iqo tan $9 ou anbiod aquauestoozd waqo vy w squared eyp>/fa eypp/[p ¥ amuapuasseN upIqUIM; so viqO BI “BIGO VI ¥ ANAL -suaired ows aiusureorun a1stxa e]fa/f9 anb ap o4ray Je opiqacy “ost ars9 ua some Je sowa0U09 ¥IgO vy Zod OFS ‘MUSH BIqo BI Jod OpeUTUZDIp yas ‘OqIUOD of OWKOD & opunw jo wey paanse ns ‘serouarsyasd sns “eomnbysd vungonso ns ‘searjeax> spnanide sns ‘Sapepypens sns ‘08 8 amuarpauat requia us 3d «a uaqSTxa NS UG “EpEP BIGO v 2 orains,, ti OWO> oprqazua sa soINw Tg °€ ‘orougé epea op sordoud uprsaxdxa ap so} sruvrpaur or9{qo un owoa opeiuasardas 9 ot Bio vUN uD soIusUIo{9 so] ap sounsfe a0d ,¢ Ou ooLT] ou Sure Jp Ua ‘ORmqwa uIg ‘oped s 9p onuap owsn js ap owzas un zertNd opt upiqurea vamuid eun ug “safeuosrod soy ap oy apuop ‘eanyuresp viqo vun ap asmeN BIaIpN, vun aquoureres209u $9 ou anb ‘ego vy ap Soj ap oun so ‘eigeyed ef ap opnuas 189 ua afensuaj ns ap uorsun Se1s9}9 UD Jend v] vasaxdxo uorouny wy & seIDR ‘s1doz s019(go soy ap omnso Ja uD “ego ep -uasaid Bind 02137] o1aIns,, [ap sgaen o1s9, "IPA ‘sopepyeuosiad seo uo semawont adxo sns Imejai 0 [9 ap sH}qy souapog ‘st aP seaqo st[ ua o1919 azUsMEIDOdsD $9 arsg due ap wigo Bf anb soins sores ap oun sa ‘20 Osea oydwafa up, “oppouoo wey of anb 0 azoua9 JooUeD © ‘a1uaWPeHOSIAd 9p:990UI09 sowapog anb vy 9p ¥qo ev amapusosen & roRoIUE s -opepi2a safnus/asquroy un owes oprqaauos s¢ ‘Sopniuas sax} soudur of sod uo wpeaydure s so upiqwer ,zomne,, exqejed ey anb zeprsjo sous JoIne [op sarvjnoxzed ssuoO -nonied osmbysd z912~39 Jp 20199] [e auodutt 4 ugisioord wo enioe vaysardxa uoroung wp 9 +x9 visoHTuEUt as ou ,peproa,, vis anbaod 4 pond so1e jap vs1a7e HorseuOyUE exsanu | eaqo ¥] UD ,PepIaA,, eT 21qos wiex) ou OISy ._Seanralgo,, Sopepryeno se1za19 sod some Jap se epyyens sep .z1onpep,, wauoqUT “(auosMe $s9 | ug}ouny e] anbiod) oiso s990y ap pepmgrsod Hsia

También podría gustarte