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Pee ey «En un extrafio texto del libro de Numeros, Dios le hablé a un per- sonaje llamado Balan a través de su burra. En este libro Tyler nos recuerda que Dios le hablo a Balan a través de su burra, y que desde entonces, ha estado hablando a través de burros. Es una invitacion para que le permitas a Dios que te deje atonito, confunda tu logica, rompa tus esquemas y te deje maravillandote de lo pequetia que es nuestra imaginacion y lo grande que es nuestro Dios». —Shane Clairborne, escritor y activista «Tan rico en profundidad como lo es en ingenio, Cuando los burros hablan es un divertido retozo gravemente serio y empapado de Dios a través de algunos de los bosques teologicos mas enredados y encanta- dos de nuestra fe. | Una verdadera obra magistral!» —Phyllis Tickle, autora de Emergence Christianity «El libro de Tyler Blanski se propone retar a todo aquel cuyo Dios es demasiado seguro y demasiado pequeiio, y esto me incluye a mi. Nos reta a ser tan osados como para consentir en que se produzcan los milagros». —Jana Riess, autora de Flunking Sainthood: A Year of Breaking the Sabbath, Forgetting to Pray, and Still Loving My Neighbor «Profundo, a veces perturbador, siempre encantador, el recorndo de Blanski por el milagroso mundo de Dios lleva a un conmovedor en- cuentro con el milagro mas asombroso de todos: el Cristo. Este libro es un absorbente Progreso del Peregrino para hoy, en el cual se des- cubre la verdad divina de una manera que sera un desafio para los lec- tores modernos, pero también los invitara a contemplar un paisaje de poderosa belleza en el cual han estado anhelando habitar en secreto. Un libro para saborear y compartir». —Ephraim Radner, profesor de Teologia Historica Colegio Wycliffe de la Universidad de Toronto «La loca historia de Tyler Blanski sobre la fe antigua—futura hace un reconocimiento de los antiguos y espesos bosques de la cristiandad medieval y descubre que lo santo acecha en cada mncon. Divertido, 9780829764277 Cuando los burres hablan_INT.indd 1 9/24/2013 12:36:05 PM profundo y persuasivo, Cuando los burros hablan es wna fiel guia hacia un mundo de milagros, misterio y Eucaristia, para llevar a una nueva generacion hacia un santo renaciumiento de los santos de los tiempos antiguos». —Hans Boersma, profesor J. I. Packer de Teologia Regent College «Tyler Blanski nos atrae a un “renacimiento santo” en su libro Cuando los burros hablan. Teje un tapiz de muchos hilos que nos llama de vuelta a la “magia profunda” de una fe terrena, profundamente firme y viva en la cual los burros hablan, el universo esta leno de Dios, la estrellas proclaman el nacimiento de un Rey, y Jestis se nos entrega en la creacion por medio del agua, el pan y el vino. Nos llama a salir- nos del materialismo de “Atomolandia” y experimentar un universo sacramental llenado por Dios; un universo en el cual Dios habita en nosotros, y nosotros habitamos en él». —E] reverendo T. L. Holtzen, PhD, profesor de Teologia Historica y Sistematica, Nashotah House «Tyler Blanski ha escrito una apologia imaginativa y persuasiva para una cristiandad en la cual Dios no es una idea de ultimo momento, Cristo es la clave indispensable de la creacion y a las metaforas sin examinar del secularismo moderno nunca se les permite asfixiar el radical lenguaje del Evangelio». —David C. Steinmetz, profesor Emérito Distinguido Kearns, Escuela Duke de Divinidades «,Como sonarian las cosas si la burra de Balan utilizara a G. K. Chesterton para comunicarse con los cristianos sofisticados y los es- cépticos indiferentes? Su sonido se pareceria al de Tyler Blanski en Cuando los burros hablan. Si lo que te interesa es una filosofia solida con el estilo de una conversacion despreocupada, vas a querer beber profundamente de este libro». —Donald T. Williams, PhD, autor de Stars Through the Clouds, Reflections from Plato's Cave e Inklings of Reality 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 2 9/24/2013 12:36:05 PM «Aqui Tyler Blanski obra una profunda magia para traer a una vida llena de color las riquezas de la vision sacramental». —Rodney Clapp, autor de Tortured Wonders: Spirituality for People, not Angels «Estamos viviendo bajo un encantamiento, dice Tyler Blanski; un en- cantamiento lamado Atomolandia, la tierra de las apariencias, en la cual a la vida se la ha dejado sin ningun misterio, milagro m magia. En Cuando los burros hablan, Tyler nos presenta otro encantamiento, un encantamiento de una profunda magia que tiene el poder de desper- tarnos de nuestro suefio, libertandonos para que experimentemos una realidad mas profunda y cautivadora que todo cuanto hemos experi- mentado antes. Haz este encantado viaje con él; es posible que nunca vuelvas a ser el de antes». —Jim Belcher, autor de Deep Church «Hace falta ser un escritor bien dotado como Tyler Blanski, no solo para salirse con la suya, utilizando a un burro parlante como invitacion aun “renacimiento santo”, y ademas, hacer que parezca la mejor invi- tacion que te han hecho en afios». —Amy Lyles Wilson, Escuela Earlham de Religion «Cuando los burros hablan es un llamado a una nueva Reforma, por parte de una generacion que se esta enamorando de nuevo con el cris- tianismo clasico. Ingenioso, encantador, fiel sin dar disculpa alguna, Tyler Blanski ofrece un nuevo giro en la apologética cristiana». —E] reverendo Seven A. Peay, PhD, decano asociado para Asuntos Académicos, profesor asociado de Homileética e Historia de la Iglesia, Nashotah House «i Quién habria sabido que se podia presentar una poderosa apologéti- ca cristiana de una manera tan solidamente bromista? El libro de Tyler Blanski solo hace lo que San Agustin dice que nuestra retorica debe hacer: informa, persuade y deleita». —David Bartlett, profesor emérito Seminario Teolégico Columbia y Escuela de Divinidades de Yale 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 3 9/24/2013 12:36:05 PM «Sincero, extravagante, profundamente teologico, hasta comico en ocasiones y muy accesible. Tyler es un apologeta contemporaneo de una clase poco usual, en una era que alega que la apologética esta muerta. jNo hay tal! A la luz del Evangelio, nos ayuda a pensar en muchas cuestiones que estan en juego en la cultura de hoy, y llamarlas a contar, lanzando una vision para una manera de vivir diferente y llena de Dios». —E] reverendo Jack Gabig, PhD, profesor asociado de Teologia Practica, Seminario Teologico Nashotah House; catedratico de la Catechesis Task Force, La Iglesia Anglicana en Norteamerica «Igualmente encantador y travieso, Cuando los burros hablan nos in- vita a comprometernos con un mundo cristiano mas real que los con- ceptos que nosotros tenemos de él, y Tyler Blanski demuestra ser una encantadora voz que anhela con esperanza un renacimiento cristiano». —Garwood P. Anderson, profesor de Nuevo Testamento y de Gniego, Seminario Teologico Nashotah House «Los maestros se sienten especialmente orgullosos cuando sus alum- nos escriben buenos libros. Cuando los burros hablan es ahora la se- gunda vez que Tyler Blanski me ha hecho sentir especialmente orgu- lloso. Este ultimo libro suyo es claro, ingemioso, elocuente, profundo y memorable. Es la espiritualidad clasica vestida con ropajes modernos y hablada en un lenguaje accesible. En resumen, que es muy, muy bueno». —Dr. Michael Bauman, profesor de Teologia y Cultura, Hillsdale College, erudito residente, Semestre de Summit, Summit Ministries 9780829764277 Cuando los burros hablan INT.indd 4 9/24/2013 12:36:05 PM 9780829764277 Cuando los burros hablan_INT.indd 5 9/24/2013 12:36:06 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 6 9/24/2013 12:36:06 PM ThA LEC nee) pararedescubnimel misterioyyalamaravilla idelicristianismo IMerP lene Prologo pombernando Ortega 9780829764277 Cuando los burros hablan_INT.indd 7 9/24/2013 12:36:06 PM La mision de Editorial Vida es ser la compania lider en satisfacer las necesidades de las personas con recursos cuyo contenido glorifique al Sefor Jesucristo y promueva principios biblicos. CUANDO LOS BURROS HABLAN Edicion en esparfiol publicada por Editorial Vida — 2013 Miami, Florida © 2013 por Tyler Blanski Este titulo también esta disponible en formato electronico. Originally published in the USA under the title: When Donkeys Talk Copyright © 2013 by Tyler Blanski Published by permission of Zondervan, Grand Rapids, Michigan 49530 Editora en Jefe: Graciela Lelli Traduccion y edicidn: Ediciones Noufront / www.produccioneditorial.com Adaptacion del disefio al espanol: ThePixelStorm RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS. A MENOS QUE SE INDIQUE LO CONTRARIO, EL TEXTO BIBLICO SE TOMO DE LA SANTA BIBLIA NUEVA VERSION INTERNACIONAL. © 1999 POR BiBLICA INTERNACIONAL. Esta publicacién no podra ser reproducida, grabada o transmitida de manera completa o parcial, en ningun formato o a través de ninguna forma electronica, fotocopia u otro medio, excepto como citas breves, sin el consentimiento previo del publicador. ISBN: 978-0-8297-6427-7 CATEGORIA: Vida cristiana / Crecimiento espiritual IMPRESO EN ESTADOS UNIDOS DE AMERICA PRINTED IN THE UNITED STATES OF AMERICA 1314151617 #654321 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 8 9/24/2013 12:36:06 PM Para mi estimado amigo Michael Ward «Esta fue la razén misma por la que fuiste traido a Narnia: para que al conocerme aqui por un poco de tiempo, me puedas conocer mejor alli». 9780829764277 Cuando los burros hablan INT.indd 9 9/24/2013 12:36:06 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 10 9/24/2013 12:36:06 PM Cuanto mas felices serian; cuantos mas serian ustedes, si el martillo de un Dios mas alto pudiera hacer ailicos su pequefio cosmos. —G. K. Chesterton, Ortodoxia 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 11 9/24/2013 12:36:06 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 12 9/24/2013 12:36:06 PM Contenido Prologo por Fernando Ortega Reconocimientos Primera parte: Una teoria loca 1. Un peregrinaje santo 2. En busca de la magia 3. Una conversion cada vez mas profunda 4. Un proyecto de restauracion Segunda parte: Atomolandia 5. Llevando al burro al dentista . La cristiandad y Atomolandia . Salvar las apariencias . Nadie quiere escuchar . Desayuno en el Modern Oo oo ~-1 nN Tercera parte: La coherencia de la creacion 10. ~Se puede confiar en la razon? 11. Contrabandeando de los egipcios 12. Como saberlo todo 13. Un mundo de anhelos, no de leyes Cuarta parte: Servidores de los cielos 14, Nuestra acampada 15. Pero mucho menos parecido a una bola 16. Un mundo bajiado en Dios 17. El amor que mueve a las estrellas 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 13 15 19 23 31 37 43 49 55 59 65 69 72 83 oT 95 103 107 117 127 9/24/2013 12:36:06 PM Quinta parte: La santificacion del tiempo 18. Arde el tronco de Navidad 135 19. Una estrella en Belén 139 20. En el afio de nuestro Sefior 143 Sexta parte: Eres lo que comes 21. Magia profunda 155 22. Cena en casa de Winston 159 23. El encantamiento para romper el encantamiento 167 24. Volver a ser miembro 173 25. Morir con Cristo 179 Séptima parte: La participacion definitiva 26. Muerte por agua 185 27. La nueva comunidad 193 28. Reorientar nuestros amores 199 29. Vengan a desayunar 205 30. Un renacimiento santo 207 Epilogo 211 Notas 213 Bibliografia 233 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 14 9/24/2013 12:36:06 PM Prologo uisiera presentar Cuando los burros hablan, el maravilloso libro nuevo de Tyler Blanski, hablando primero un poco de mi propia familia. Te ruego que tengas paciencia con este prologo. Al final veras que tiene sentido. Mi abuelo, Juan Melquiades Ortega, murio en 1991, solo un par de meses antes de cumplir los 102 afios. Era un hombre cristiano cuya serena consagracion a Dios hallaba expresion en la improbable combinacion de dones que el Creador le habia otorgado: atender la granja, tejer, contar cuentos y cantar. La granja de mi abuelo lo ataba a la tierra: sus impredecibles estaciones, las necesidades de su familia, las fases de la luna. Sus magnificos tejidos (dos de los cuales pertenecen a la Smithsonian Institution) eran producto de procesos lentos y trabajosos: esquilar las ovejas, hilar la lana, usar tinas de colorantes. Las historias que nos contaba mi abuelo tenian que ver con parientes distantes que habian fallecido hacia ya mucho tiempo, que pastoreaban ovejas en Colorado, y también gitanos que acampaban en las afueras del pueblo en los afios treinta vendiendo su mercaderia: pociones y tiestos. M1 historia favorita hablaba de una vieja bruja que se podia convertir en coyote. Esta bruja trato de engafiar a unos primos mios que se dirigian a un baile. Uno de mis primos se llamaba Juan, un nombre que se consideraba que tenia poder espiritual sobre las fuerzas de las timieblas. Juan trazo un circulo en el suelo alrededor de la bruja e invoco tres nombres: «jJesus, Maria y José!», y la bruja quedo atrapada en el circulo, incapaz de hacerles dafio alguno a mis primos. Estos relatos nos llevaban a nuestra historia y al pasado, pero liberaban nuestra imaginacion para que pasearamos por nuestra cuenta a través de los llanos y los cauces de los rios en el norte de Nuevo México. Después de todos estos afios, alin siguen temendo esa misma magia. Por ultimo, el don del canto era el que conectaba a mi abuelo con el Dios trascendente que él adoraba a través de la obra de sus 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 15 9/24/2013 12:36:06 PM 16 Guando los burros hablan manos. En las calurosas noches de verano cantaba bajo el dosel de las estrellas mientras regaba surcos de chile, maiz, tabaco y melones, y el sonido de su voz era apagado por la suave tierra, el agua y el ritmo de un azadon. Un afio después de la muerte de mi abuelo, yo escribi un canto llamado «Mi abuelito», en el cual hago memoria de muchas de las cosas que acabo de describir. Hasta el dia de hoy, lo presento con frecuencia en los conciertos. Aunque es uno de los favoritos del publico, con demasiada frecuencia me han llamado la atencion por haber escrito una letra en la cual no hago mencion especifica de Dios. Ya he desistido de discutir acerca de esto. En mi mente, es uno de mis cantos que estan mas llenos de Dios. Aqui es donde se encuentra mi gran entusiasmo por Cuando los burros hablan, un libro estupendo escrito por un joven anglicano barbudo, y de Minneapolis nada menos. Tyler Blanski adora a Jesus y ama profundamente el cristia- mismo, el de la clase historica. Mantiene en alto su fe como una antorcha encendida frente al cientificismo y al secularismo. Su libro es un loco y gozoso recornido por cafeterias, campamentos, lotes de arboles de Navidad, historia medieval y la vasta expansion del universo lleno de estrellas. Todos estos lugares se juntan para hallar su sentido en la encarnacion de Cristo. De la misma y hermosa manera, la granja de mi padre, sus historias, sus cantos y sus mantas de lana encuentran su sentido en el pesebre de Belén donde Dios se hizo carne. Tyler y yo nos hemos enviado textos y mensajes por el correo electronico continuamente durante estos Uultimos meses, en espera de que este libro saliera a la venta. Es frecuente que comience sus textos diciendo: «Hola, Fernando. jCristo esta entre nosotros!» Cuando los burros hablan esta repleto de lugares donde hace esta misma proclamacion. Cristo esta entre nosotros cuando estamos en cama enfermos (como estoy yo ahora), o cuando vamos en auto al trabajo, o les contamos una historia a nuestros hijos por la noche. Aunque nosotros tal vez no estemos conscientes de ello, participamos en un canto eterno que es cantado por toda la creacion, y al que se unen todos los santos que han vivido antes que nosotros, 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 16 9/24/2013 12:36:06 PM Prologo 17 y todas las huestes celestiales que estan reunidas alrededor del trono de Dios. Juntos, estamos proclamando: «jCristo esta entre nosotros!». Juan Fernando Ortega 30 de octubre de 2012 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 17 9/24/2013 12:36:06 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 18 9/24/2013 12:36:06 PM Reconocimientos Mi gratitud a mi esposa Brittany. Mi gratitud tambien a Petersons, Michael Ward, Ivan, el Padre Peay y los profesores de Nashotah House. Mi gratitud a mis editores, Carolyn McCready, Andy Meisenheimer y Jim Ruark. Mi gratitud a Tom Dean y Jess Secord. Mi gratitud a ti, Fernando Ortega. Mama y papa, muchas gracias. 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 19 9/24/2013 12:36:06 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 20 9/24/2013 12:36:06 PM Primera parte Una teoria loca En la cual los burros pueden hablar y el cristianismo es un viejo bosque. Se presenta a Stephen el filisteo. También se presentan una teoria loca y la santa trinidad del desayuno. La encarnacion tiene unas consecuencias que lo comprenden todo, tanto para el universo como para nosotros. Si los burros pueden hablar, tam- bien pueden hablar las estrellas y nuestros calendarios, nuestra vida misma. No necesitamos un avivamiento; necesitamos un renacimiento santo. Pero la senda que atraviesa la cristiandad es vieja y peligrosa, y es necesario hacer primero un cuidadoso reconocimiento de ella. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 21 9/24/2013 12:36:06 PM 22 Guando los burros hablan ;Alégrate mucho, hija de Sion! ;Grita de alegria, hija de Jerusalén! Mira, tu rey viene hacia ti, justo, salvador y humuilde. Viene montado en un asno, en un pollino, cria de asna. —Yacarias 9:9 Y mas, que no tendré a deshonra la tal caballeria, porque me acuer- do haber leido que aquel buen viejo Sileno, ayo y pedagogo del alegre dios de la risa, cuando entro en la ciudad de las cien puertas iba, muy a su placer, caballero sobre un muy hermoso asno. —Cervantes, Don Quijote (I, cap. XV) 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 22 9/24/2013 12:36:06 PM Capitulo 1 < 1 yo te dijera que tengo un burro que habla, lo mas probable es que te rieras y te sirvieras otra copa. Si yo insistiera en que es- taba hablando totalmente en serio, es probable que te me fueras ale- jando lentamente y, sin enmascarar para nada tu alarma, buscaras la salida mas cercana. Nada echa a perder una buena fiesta como una historia acerca de un milagro. «Fue una jugada de tus nervios; una ilusion», me aconsejarian los que se atrevieran a quedarse, escudri- fiandome con unos ojos preocupados de cachorro. «Te has tomado tu medicamento?» Yo no tengo ningun burro, pero si lo tuviera, querria que fuera un burro parlante. Todo comenzo con huevos, una croqueta de papa y tocino: la santa trinidad del desayuno. Mientras estaba sentado en un bar del lugar por la mafiana, tragandome un cafe barato y tratando de escu- char los chismes que estaban diciendo acerca de un politico en una mesa cercana, oi que otro omnivoro exclamaba: «;Quién envio a esa burra loca al Congreso?». Aquella frase capto mi atencion, por- que cuando yo era mas joven era patinador, usaba largas cadenas que tintineaban y llevaba el pelo largo y grasiento, de manera que mis amigos me decian: «Ese pelo es loco, muchacho». Pelo loco se refiere a algo de gente cliflada, con un giro de comedia, divertido oinmaduro. En una ocasion, yo levante la vista desde mis humean- tes tiras de tocino y vi el asno que le sirve de emblema al partido 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 23 9/24/2013 12:36:06 PM 24 Guando los burros hablan democrata, estampado en la camiseta de un cliente, y entonces fue cuando me di cuenta. Loco. Asno. La burra. La Santa Trinidad. Recordeé la historia biblica de Balan y su burra loca, y en un raro momento de epifania, me di cuenta de que nunca me habia toma- do en serio aquella historia. De hecho, nunca me habia tomado la mayor parte de la Biblia con tanta seriedad. De alguna manera ha- bia convertido los relatos historicos sobre Dios—en—la-tierra como «lecciones para la vida», como si el cristianismo fuera una especie de terapia. Habia cerrado los ojos ante la posibilidad de que los re- latos de la Biblia fueran no solo capaces de sacudir la vida, sino que también fueran historica y ontologicamente ciertos: el cristianismo no como creencia personal, sino como realidad publica. En Numeros, el cuarto libro de la Tora, un libro escrito mucho antes del nacimiento de Cristo, hay un relato acerca de un pagano llamado Balan. En aquellos tiempos, el paganismo era la ciencia popular. No eran las fuerzas mi los principios, sino los dioses, los que hacian que cayeran las rocas, que cambiaran las mareas del océano y que crecieran los sembrados. Todo el mundo creia en los cioses, incluso los gentiles «seculares», y algunas veces hasta los mismos judios. Desde el punto de vista de los hebreos, se podia decir que ser «secular» significaba que no se era judio: aunque los gentiles creian en sus dioses, no creian en el unico Dios verdadero. De manera que es extrafio que este gentil llamado Balan fuera pro- feta. Aunque era pagano, Balan creia en el unico Dios verdadero.! Segun la leyenda, Balan tenia el don de conocer el momento exacto en que Dios estaba airado: era un superprofeta, un adivi- no, y Dios le hablaba en suefios y visiones. Las Escrituras dicen: «Entonces el Sexton puso su palabra en boca de Balan» (Numeros 23:5).° Sunombre mismo significa «tragar».’ Los israelitas acaba- ban de pasarse cuarenta afios deambulando por el desierto y esta- ban a punto de cruzar el rio Jordan para entrar a las verdes tierras de Canaan. Ya habian comenzado a vencer a sus habitantes, y el rey de Moab temia que él fuera el proximo en la lista de gente a eliminar por los israelitas. Entonces mando a buscar al profeta Balan, «el que traga gente», para que hiciera llover maldiciones sobre los 1s- raelitas.* De manera que Balan ensill6 su burra, la misma en la que 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 24 9/24/2013 12:36:06 PM Un peregrinaje santo 25 habia montado desde muchacho, y fue tambaleandose sobre ella hasta donde estaba el rey de Moab. Pero Dios no estuvo de acuerdo con los planes de Balan de mal- decir a su pueblo escogido. En medio de su viaje, aparecio un angel del Sefior ante Balan y su burra y desenvaino una espada para blo- quearles el paso. Al principio, Balan no pudo ver el angel, pero la burra si. Para gran diversion de sus acompafiantes, la aterrada bes- tia se lanzo a toda carrera hacia los campos que estaban junto al ca- mino, mientras Balan rebotaba encima de ella. Avergonzado, Balan golpeo ala burra para obligarla a regresar al camino. Entonces la burra se arrimo a una pared que habia en el camino, mientras el an- gel aparecia por segunda vez. Balan se lastimo un pie y, rojo de ira, volvio a golpear a la burra con un palo. Mientras iban adelantando muy despacio, el angel se les adelanto y se les aparecio por tercera vez, asustando a la burra de Balan hasta el punto de echarse al suelo sin querer moverse (los burros son muy tercos; a diferencia de los caballos, es imposible lograr que un burro haga algo que no sea lo mejor para él). Furioso, Balan golpeo de nuevo a su burra con el palo de nuevo (Numeros 22.27). Entonces, el Sefior hizo que la burra hablara. «;Se puede saber qué te he hecho, para que me hayas pegado tres veces?» Balan le respondio: «jTe has venido burlando de mi! Si hubiera tendo una espada en la mano, te habria matado de inmediato». Pero la burra le replico: «;Acaso no soy la burra sobre la que siempre has mon- tado, hasta el dia de hoy? ;Alguna vez te hice algo asi?» Y entonces el Sefior le abrio los ojos a Balan y este vio al angel de pie en el camino con la espada desenvainada. Aterrado, Balan cayo sobre su rostro y el angel le dijo que podia continuar su viaje para encontrar- se con el rey de Moab, pero que no debia maldecir a los israelitas; al contrario, los debia bendecir. Y a medida que se va desarrollando la historia, vemos que sus oraciones de bendicion cambiaron real- mente lo que les sucedio a los israelitas. Esta historia es la historia de una burra loca en mas de un sen- tido. Aqui vemos una burra, animal famoso por su torpeza y su ter- quedad, ilustrando una comprension espiritual mayor que el gran profeta pagano de Mesopotamia.’ «Su burra —una muda bestia de 9780829764277_Cuando los burrs hablan_INT.indd 25 9/24/2013 12:36:06 PM 26 Cuando los burros hablan carga— hablo con voz humana», se nos dice en 2 Pedro 2.16. Asi le salvo la vida a su amo, un oraculo que pronunciaba presagios y augurios de parte de Dios. Aunque este relato sea ironico y di- vertido, es sumamente serio. Al parecer, Dios puede usar a cual- quiera —desde un pagano hasta una burra— para que se cumpla su voluntad.° Lamentablemente, al igual que Balan, nosotros se- guimos adelante por nuestro camino, cometiendo errores, clegos a las advertencias de Dios, hasta que él tiene que usar «burras» para detenernos. Pero el amor de Dios es mas real que la ley de la grave- dad. Los angeles estan por todas partes. Cualqmer burro se podria convertir en un burro parlante. Todo lo que nosotros necesitamos es que Dios nos abra los ojos, como se los abrio a Balan. Y asi, como cristiano, y los cristianos creemos en una gran cantidad de cosas extrafias,’ esta historia se ha convertido en mi escudo de armas para una batalla que yo considero que es una de las mas importantes de hoy: nuestras suposiciones previas (mayormente silenciosas) sobre lo que podemos esperar de la cristiandad. La «cristiandad» es el reno de Dios que se va expandiendo a traves de esa inmensa y libre comunion de los santos, la Iglesia, a la cual llama Cipriano «el resplandeciente ejército de los soldados de Cristo». San Ambrosio la llama «el reino de Dios, que es la Iglesia».’ Hacerse cristiano es convertirse en parte de una agrupacion libre y so- lidaria de personas procedentes de diferentes estilos de vida y diferen- tes edades, pero que experimentan todos el mismo clima, las mismas dificultades, la misma topografia, el mismo excéntrico impulso de seguir a Jesus. En realidad es el culto a una personalidad. Este Jesus, este Cristo, este «luminoso nazareno», como lo llamaba Einstein, es una personalidad que hay que tener en cuenta. Estos seguidores de Cristo dicen que Jesus el Cristo (palabra griega que significa «ungi- do») es plenamente humano y plenamente Dios, y que hizo su entrada en nuestro mundo y nuestro tiempo. Dicen que es posible conocerlo y ser conocido por él, y ser amado por él, y que su amor puede transfor- mar muestra vida... este mismo dia, en este mismo momento. Es algo que han estado diciendo durante milenios. Una generacion tras otra de artistas creativos y tambien de lineales que funcionan con el cerebro izquierdo son atraidos con un poderoso rayo tractor a su sabiduria, su 9780829764277_Cuando los burres hablan_INT.indd 26 9/24/2013 12:36:06 PM Un peregrinaje santo 27 airojo y su insondable amor. Y todos sienten un reverente asombro ante él. Dicen que el Dios de la historia, el Dios de las edades, ha urumpido en sus vidas para comenzar una renovacion del corazon humano. Dicen que él lo cambia todo: relaciones, comida y bebida, historia, e incluso los misterios invisibles del espacio y del tiempo. No obstante, hay algunos de mis amigos cristianos (y yo solia ser uno de ellos) a quienes no les gusta la historia de la burra loca de Balan. Disfrutan con las otras historias de burros, como aquella en la que un burro le hace un guijio a Jesus recién nacido, o la otra en la que Abraham carga a su burro para salir a sacrificar a su hijo Isaac, o aquella en la que Jesus hace su entrada en Jerusalén montado en un burro para ser sacrificado por el mundo, mientras la multitud clama «;Hosanna!». Al menos en estas historias, este mamifero ungulado doméstico de la familia de los equinos, con sus largas orejas y su rebuzno tipico, solamente es un burro normal, de los de siempre. Pero yo siento una curiosidad: Si puedo creer en Jesus (ese ovulo inmaculadamente fertilizado), ;por qué no puedo creer en los burros parlantes? ;Acaso no estoy dando por sentado que el mundo es milagroso? «;Por qué les parece a ustedes increible que Dios resucite alos muertos?», pregunta Pablo, como si sucediera todo el tiempo (Hechos 26.8). Son pocos los que olvidan, aunque solo lo hayan leido una vez, la forma en que Dios le hablo a Moisés «entre las llamas de una zarza ardiente» (Exodo 3.2). Son menos toda- via los que pueden pasar por alto la forma en que Jesus utilizo en Mateo 26.75 a un gallo para comunicarse con su discipulo Pedro. iO qué decir de la poesia del caballo de batalla en Job 39.25, que «en cuanto suena la trompeta, resopla desafiante»? ;O del momen- to en que Moisés partid en dos el mar Rojo (Exodo 14.21-22), 0 cuando Josué le ordeno al sol que se detuviera en el cielo, y el sol se detuvo (Josué 10.12—13)? Si yo ya creo que Dios mismo fue tortu- rado hasta la muerte, y después resucito de entre los muertos, y que la sangre teal de Jesus tiene el poder de perdonar el pecado, jpor qué voy a dudar por un momento que Elias hizo caer fuego del cie- lo para consumur por completo un sacrificio (1 Reyes 18.36—39)? Yo me solia decir a mi mismo: «El cristianismo no es milagro- so; el cristiano es algo seguro». No queria un Dios que fuera mas 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 27 9/24/2013 12:36:06 PM 28 Cuando los burros hablan grande que yo, que hiciera estremecerse las cosas. La seguridad era lo que queria y, lamentablemente, fue seguridad lo que consegui. Pero ultimamente he estado anhelando algo mas que una cristian- dad que se parezca a los anuncios y los barrios residenciales del si- glo veinte. Quiero descubrir al Dios que vive y respira realmente; el Dios que lo cambia todo con respecto a lo que significa ser huma- no. El cristianismo no es algo seguro. Abre todo un mundo repleto de fuego del infierno y de jucio, de condenacion y de salvacion, de una maldad real y una bondad real, y sobre todo, de un amor real, la clase de amor que en todas las demas partes solo hemos conocido en débiles imitaciones y anticipos. La cristiandad (porque en reali- dad solo es eso, el mundo cristiano) esta llena de burros parlantes, zarzas ardiendo, diluvios, serpientes que hablan, gallos que cantan y desastrosas manzanas que, cuando se las muerden, le roban a uno la inmortalidad. Esta repleta de una profunda magia. En la historia de Don Quijote y Sancho Panza, este personaje comun y corriente decide vestirse con una vieja armadura y salir como caballero errante en busca de aventuras. A su amigo Sancho lo hace su escudero. Entonces los dos se embarcan en elaboradas busquedas a lomo de caballo que ellos creen reales, aunque no lo son. Atacan molinos de viento, pensando que son unos feroces gi- gantes. Te quiero invitar a unirte conmigo en lo que se podria conver- tir en una persecucion no tan alocada. Porque al fin y al cabo, los molinos de viento tienen algo de feroces y gigantescos, {no te pare- ce? Quiero ensillar un burro y salir cabalgando a través del « Viejo Mundo». Vamos en busca de reliquias de una era desaparecida; una era en la cual los burros hablaban y las estrellas bnillaban y los san- tos no eran gente negativa y pesimista. Vamos por el camino hacia la Iglesia y hacia los viejos libros. Como los cristianos de antafio, queremos vivir en la presencia de Dios. Queremos desempolvar lo que C. S. Lewis llamaba «la imagen descartada», y Owen Barfield llamaba «esas vestiduras descartadas».!? Queremos despertar a la posibilidad de que Jesus se pueda comunicar con nosotros por me- dio de un burro... 0 un perro, o un gato, o un patito de goma. Nuestra 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 28 9/24/2013 12:36:06 PM Un peregrinaje santo 29 mision sera despertar, dejar que nos domine un encanto. Te dejo a ti el decidir si algo de lo que descubramos habra valido la pena, y también puedes decidir ti mismo quién de nosotros es el gallardo caballero, y quién es el rechoncho escudero. Asi que el libro que tienes en la mano es una invitacion a salir en una santa peregrinacion. Es el mapa de un tesoro. Y te ira guian- do a través de algunos de los terrenos mas bellos y peligrosos del cristianismo; tierras largo tiempo olvidadas o descuidadas, tierras que necesitaras un santo renacimiento para poderlas redescubrir. Si yo tuviera que capturar en una sola palabra lo que estoy buscando, lo llamaria creer, esa forma de creer que me invita a vivir esa fe de nifios de la cual Jesus dice que es la puerta de entrada a su casa, el reino de los cielos (Marcos 10.15). 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 29 9/24/2013 12:36:07 PM 9780829764277_Cuando los burrs hablan_INT.indd 30 9/24/2013 12:36:07 PM Capitulo 2 En busca de la magia ara comenzar mi peregrinaje, atravesé la calle para ver a mi vecino, Stephen el filisteo, un viejo amigo mio del Colegio Biblico. Su altura, su bigote asombrosamente poblado y sus bni- llantes ojos azules le dan un encanto esplendido, aunque algo feroz. Lo Hamamos Stephen el filisteo porque, a pesar de que sabe mas acerca del cristianismo que la mayoria de los cristianos, sencilla- mente, no cree. No soporta la hipocresia. Ademas, le encantan las mujeres, las aventuras y la ginebra Bombay Sapphire. Yo le he di- cho que el cristianismo tiene todo esto... solo que no de la forma en que él lo quiere. En fin, que atravesé la calle pisando fuerte para anunciarle a Stephen el filisteo que estaba escribiendo un libro cris- tiano acerca de mi teoria de burro loco. «Me encanta que la gente diga cosas ndiculas», me dijo, mi- randome como si yo hubiera acabado de salir de la guarderia de la iglesia. «ji Ah, si?», le dije, sintiéndome moderadamente alentado. «Claro», me dijo moviendo una mano. «Pero a los cristianos no les gusta. Tu absurdo libro te va a destrumm. Yo tragué en seco. «Bueno, al menos las ejecuciones por deca- pitacion, por ahogamiento o en una hoguera ya no se practican en la Iglesia». 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 31 9/24/2013 12:36:07 PM 32 Cuando los burros hablan «Correcto», me dijo Stephen para consolarme. Sus ojos pare- clan mas azules. «Y ademas, la Constitucion de Estados Umidos y la Declaracion de Derechos estan de tu parte tambiém». «i Te importaria que yo tomara un poco de tu ginebra?», le pre- gunte. «De ninguna manera», me contesto Stephen, y me preparo un fuerte trago cristiano. A pesar de las consoladoras palabras de un viejo amigo, volvi a cruzar la calle de vuelta a mi apartamento, y me inundo la preo- cupacion como si me hubiera envuelto una nube. Llamé a Stephen desde mi teléfono movil. «}S1?», dijo Stephen con tono cortante. «iY sila gente piensa que soy un hereje?» «Tyler, los cristianos siempre se enojan cuando alguien desafia sus estereotipos sobre Dios, la magia y la ciencia. No te preocupes. Aunque vivieramos realmente en los tiempos medievales y aun nos estuvieramos gritando mutuamente nombres como el de “hereje’’, lo cierto es que no te podrian llamar hereje a ti, y también es cierto que tu no los podrias llamar herejes a ellos tampoco por no estar de acuerdo contigo». «ji Por qué?», le pregunteé. «Porque, que yo sepa, no hay parte alguna de tu teoria de burro loco que ponga en tela de juicio o contradiga la ortodoxia del Credo Niceno... o el Credo de los Apostoles, o el Credo de san Atanasio. Tu eres el tedlogo. Deberias saberlo». Yo asenti con la cabeza, pero Stephen, por supuesto, no puede oir cuando uno asiente con la cabeza. Entonces siguio hablando en medio de mi silencio: «Tanto si estan de acuerdo contigo, como si no lo estan, limitate a estar agradecido de tenerlos como compatie- ros de viaje. Ami me encantaria inscribir a esas personas negativas en una justa; ya sabes, esa clase de competencias en las cuales los caballeros nobles cabalgan uno frente a otro para ver quién vence con su lanza. O bien, podriamos sentarnos todos a conversar mien- tras tomamos una cerveza roja hecha por los frailes». Yo rei con pocas ganas. Grandemente ammado con las palabras de Stephen el filisteo, 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 32 9/24/2013 12:36:07 PM En busca dela magia 33 tiré mi teléfono en el sofa y escribi unas cuantas preguntas: ;qué significa vivir en un mundo donde los burros pueden hablar? ;Que significa ser un hombre o una mujer que Dios ha creado? ;Cual es nuestro lugar en el universo? {Qué significa que Dios no solo se revela a si mismo por medio de palabras, sino que también se volvio realmente humano, encarnado? ;Qué es exactamente lo que estan haciendo los cristianos cuando son bautizados o reciben la Cena del Sefior? ;Hay en el universo un significado que incluso los paganos y la gente secular puedan descubrir, y como lo integramos con nuestra fe? ;Como pensaban los cristianos acerca de la Iglesia antes de la era de los televisores, los autos y las corporaciones? En la busqueda de respuestas a cuestiones como estas, voy ca- balgando sobre un burro, sosteniendo las riendas de una era que ya paso, tal vez de otra que esta por llegar. Quiero descubrir la historia de Dios en la realidad y en senderos donde ha crecido la hierba y han sido descuidados. En mis primeros intentos por hacer un reconocimiento, me pre- cipité y continue haciendo publicas mis intenciones. Con mucho agrado, les anuncié a mi familia y mis amigos, e incluso a mi casa editora que viajaria por la cristiandad en busca de la magia. Casi todo el mundo me dedico alguna seria admonicion o reprimenda. El viejo bosque de la cristiandad esta repleto de peligros: osos, gatos salvajes y jabalies; rusticos chiflados de los lugares mas remotos, viejas herejias y fabulas mortales que van abriendo un surco para penetrar en el cerebro de malhadados caminantes para enviarlos a la apostasia y las blasfemias. Unas sombras espeluznantes acechan desde una neblina mas espesa que el humo de los bosques. Basta con que leas acerca de las visiones de santa Hildegarda de Bingen o los impulsos de Francisco de Asis, y comenzaras a entender la idea. Alli nos podrian suceder cosas inconcebibles. Y entonces esta también el controvertido asunto de san Dionisio de Paris, quien recibio la encomienda de convertir al pueblo galo e hizo una labor tan buena, que los paganos del lugar se enojaron y lo decapitaron. Después de algo parecido a una especie de caza a ciegas de hue- vos de Pascua, Dionisio encontro su cabeza, la recogio y sigmo predicando. Asi se convirtio en el patrono de los que sufren de do- 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 33 9/24/2013 12:36:07 PM 34 Cuando los burros hablan lores de cabeza. Y también esta san Fiacre, quien estaba tratando de edificar un nuevo monasterio. El obispo le ofrecio tanta tierra como pudiera arar en un dia. El viro al revés el suelo con la pun- ta de su vara, derrumbando arboles y pulverizando grandes rocas. Una mujer desconfiada le dijo al obispo que Fiacre estaba usando de hechiceria. Pero el obispo reconocio que aquello era obra del Sefior, y Fiacre edifico su monasterio, en el cual, dicho sea de paso, prohibio la entrada de mujeres. Es el santo patrono de los jardineros y... bueno, de los taxistas. Y esa es la parte buena. Antes de entrar en ninguna investi- gacion real, tuve que sufmr historias que me causaban aprension (compartidas siempre con una ahogada risa intencional y una son- risa) sobre desconsolados viajeros que se aventuraban a salir en una santa peregrinacion, solo para hallarse al despertar en la compariia de astrologos paganos, o compartiendo la misma tienda de campa- fla con una tradicion germana durante unos pocos y coloridos ins- tantes. Otros han salido a recorrer los viejos senderos por los que caminaban nuestros ancestros, solo para tropezarse con orates, bru- jas 0 lectores de horoscopos. 01 historias de pobres peregrinos que desaparecian de repente en una herética neblina. Otros han deam- bulado hasta las neblinas que esconden las que ha sido llamado las luminosas timeblas de Dios, y nunca han vuelto a ser los mismos de antes. Solo me hicieron falta un poco de lectura ligera y casi ningu- na imaginacion para 1maginarme que lo mismo me sucederia a mi. Por ejemplo, descubri recientemente la unica novela completa que sobrevivio del latin, Las metamorfosis de Lucio Apuleyo. Este libro influyo tanto en el estilo de la prosa de Agustin, que él le puso a este picaresco relato el apodo de «El asno de oro». Relata la historia de un hombre pobre que quiere aprender magia. Trata de convertirse en ave, pero se horroriza al descubrir que en lugar de convertirse en ave, se ha convertido en un burro: «Por fin, exami- nando desesperado todo mi cuerpo, me vi obligado a enfrentarme a la mortificante realidad de que no habia sido transformado en un ave, sino en un simple burro».! Después sigue toda una serie de aventuras excesivamente obscenas y un poco mas ostentosas de la cuenta para relatarlas aqui. «Sabete, amigo Sancho», advertia Don 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 34 9/24/2013 12:36:07 PM En busca de lamagia 35 Quijote en este asunto, «que la vida de los caballeros andantes esta sujeta a mil peligros y desventuras».’ Sin embargo, ninguna de las historias que lei superaba a los re- latos de la Biblia, unos relatos en los cuales Dios literalmente hace que la tierra deje de girar, se convierte en un ser humano, camina sobre el agua, levanta a Lazaro de entre los muertos, vence él mis- mo a la muerte y promete vida eterna. Mientras mas leia, mas de- cidido estaba a explorar los escritos de tipo sobrenatural y popular, y el evangelio. A pesar de todo, decidi internarme de manera irre- versible en el viejo bosque, en aquellos dias anteriores a la llegada de los lamados trituradores de madera de la Ilustracion. Aunque yo no soy ningun san Jorge cuando de pelear con dragones se trata, me eché encima toda una mochila repleta de libros de biblioteca, apreté con fuerza las mendas de mi burro y entré portentosamente en el viejo camino, junto al borde de los oscuros pinos. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 35 9/24/2013 12:36:07 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 36 9/24/2013 12:36:07 PM Capitulo 3 ~ Una conversion — \ cada vez }} mas profunda C omo veremos en nuestra exploracion de la Eucaristia en parti- cular, el reino de Dios se halla sumamente cercano. Tengo la esperanza de que esta santa peregrinacion nos guile a una conver- sion cada vez mas profunda. El viejo bosque de la cnstiandad es una invitacion a la adoracion; mas concretamente a la participacion en la Eucaristia, a reafirmar una vez mas que el Hombre que nacio en Belén era realmente de una misma sustancia con el Padre; que todas las cosas fueron hechas por él, y que el misterio de la Palabra hecha carne es puesto a nuestra disposicion en la Cena del Sefior. Andar con dificultad por todo un mundo de burros parlantes es algo que siembra dentro de una persona una nueva hambre por el cuerpo y una nueva sed por la sangre de la Palabra encarnada. El cristianismo encantado es un fuerte golpe medieval para nues- tra 1maginacion. Hasta nos podria inspirar de nuevo a Ilamarle «Hermano Asno» a nuestro cuerpo, como Francisco de Asis, aquel delgado santo que se precipito desnudo por los bosques para adorar al Sefior y amar a los necesitados. Para él, el mundo estaba vivo con la actividad de Dios. Para él, los milagros, como los electrones, podian saltar en cualquier lugar, y no todos los burros eran burros tontos. Mi gran meta para nosotros es que creamos eso mismo: que creamos mejor. Creer no es facil, pero le da forma a toda nuestra vida. A muchos de nosotros nos puede parecer francamente im- 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 37 9/24/2013 12:36:07 PM 38 Cuando los burros hablan posible, y no nos ayuda el que haya hoy tantas iglesias que estén haciendo del cristiamismo algo demasiado complicado. En mi mifiez se me decia que cuando vamos a la iglesia, que- remos que nos presenten un buen espectaculo. Esto no es cierto. Cuando somos bautizados en los viejos bosques del reino de Dios, morimos a nuestro viejo yo y resucitamos en el cuerpo de Cristo, su Iglesia. Es decir, que la Iglesia no esta hecha para presentarnos un espectaculo, sino para que participemos en una vida compartida de servicio activo en el reino de Dios. También se me decia que mi atencion duraba poco y que, en pocas palabras, no me interesaba lo intelectual. Sin embargo, en la cristiandad encantada del pacto, somos hechos a imagen de Dios y dotados no solo de una vida emocional, sino también de cerebro. Somos llamados a ser disci- pulos, estudiantes de Jesus. Pablo nos exhorta a superar la dieta de «leche espiritual» para que nos podamos convertir en adultos en Cristo. Deberiamos tener el deseo de aprender mas acerca de las Escrituras, la teologia, las disciplinas espirituales y la historia de la Iglesia de Dios. Deberiamos tener el deseo de amar al Sefior nues- tro Dios con todo nuestro corazon, alma, cuerpo y mente. Otro inmenso obstaculo a la hora de viajar por el cristianismo historico es el mito de que no queremos religion. El siglo veinte pensaba que la tradicion y la historia estaban pasadas de moda, asi que hizo que la iglesia tomara el aspecto de una escuela de nego- cios o de una tienda de mercaderias. Cuando yo iba a una iglesia como esta, se me persuadia de que no queria ser religioso, sino que queria ser «espiritual», «relevante», o incluso «genial». Ahora bien, ;qué esperamos recibir de un Dios al que se puede empaque- tar para presentarnoslo a través de un negocio dedicado al espec- taculo que mercadea con todo cuidado su producto entre los deistas terapéuticos y moralistas de los barrios residenciales?! Por supues- to, no esperamos un encuentro de la vida real con el Dios uno y trino de los tiempos, el Creador de los cielos y la tierra, el Juez de toda la humanidad y el Redentor del mundo. Ese Dios es aterrador. Asi resulta que los santos del ayer eran unos tipos formidables, excelentes. Entendian que el cristiamismo es una religion; esto es, una fe comunal encarnada y en accion. 81 he nacido de nuevo, ya 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 38 9/24/2013 12:36:07 PM Una conversion cada vez mas profunda 39 no puedo seguir siendo un deista individualista, terapéutico ni ma- terialista. No querria inventarme una fe personal de devociones pri- vadas realizadas en mi lugar privado de oracion, a expensas de una vida activa en el cuerpo colectivo de Cristo que su Iglesia. Dentro de mi, el Espiritu Santo me grita que viva mi fe en la comunidad de los creyentes. Esta «fe vivida» es la religion. Todas las iglesias tienen su liturgia, pero no todas las iglesias tienen una liturgia cristiana. Algunas han favorecido la liturgia del concierto de rock, o la liturgia del megacentro comercial, o la li- turgia de la corporacion. Pero como cristiano, somos llamados a la liturgia de la Iglesia que no esta atada al tiempo; la liturgia reconoci- ble para la comunion mundial y atemporal de los santos. La palabra de vieja escuela para esta universalidad, esta comunidad intergene- racional e internacional, es «catolica» (del gnego Kka8odKoc, kazoli- kos). Esta es la creencia segun la cual la Iglesia del mundo entero es la novia de Cristo, la amada de Dios. Cuando somos los amados de Jesus, la Palabra que se hizo carne y habito entre nosotros (lee Juan 1.14), crece cada vez mas en nosotros el hambre por la liturgia. Esto se debe a que Dios, quien trajo a la existencia a este mundo con su palabra, quien ha escogido las palabras para que sean su medio de revelacion en las Escrituras, y quien nos exige que profesemos nues- tra fe, es un Dios de palabras. La «liturgia» es el papel de un creyen- te dentro de la comunidad cristiana. Los domingos por la mafiana, este papel se convierte mayormente en un papel de decir y escuchar palabras. Esta lectura de las Escrituras, repeticion de los Credos, confesion de pecados, oracion con las palabras del Padrenuestro, celebracion de la Eucaristia y canto —ademias de lo que se dice y se canta colectivamente— es lo que se llama «liturgia». A muchos de nosotros, la belleza de la liturgia y la santa magia de la cristiandad nos podran parecer alarmantes al principio, por- que fiumos criados pensando que el mundo es como un horno-tos- tadora de mostrador, o que Dios es una especie de bemigno primer impulsor. Este «desencantamiento», por usar la expresion de Max Weber, lo presenciamos de la manera mas obvia en nuestra actitud acerca de la Cena del Senor. Muchos hemos aceptado la idea de que la Cena del Sefior solo es una estéril costumbre de comer pan y 9780829764277_Cuando los burrs hablan_INT.indd 39 9/24/2013 12:36:07 PM 40 Cuando los burros hablan beber vino mientras «pensamos en Dios». Y es mucho mas que una gimnasia mental. Si el cristianismo fuera lo mismo que el dualismo gnostico, la Santa Eucaristia solo seria una manera de recordar a Jesus. Pero el cristianismo tiene que ver con la encarnacion y el milagro... al menos cuando uno anda montado sobre un burro. En mis primeros afios de vida pude conocer diferentes ideas sobre lo que es el cristianismo. Durante toda mi nifiez, mi familia asistia a la Iglesia Bautista Belén, de Minneapolis, que pastorea John Piper. Alli fue donde fue alimentada por vez primera la hu- mildad que aun siento ante las Escrituras. Estudié en una escuela primaria fundamentalista llamada Calvin Christian School. Pero en mi penultimo afio de secundaria no asisti a ella, sino a la escuela publica local. A lo largo de toda mi adolescencia, asisti a la igle- sia Wooddale, una megaiglesia situada en un barrio residencial. Yo vivia y respiraba todo lo que tenia que ver con Wooddale, y hasta ayudeé a comenzar el equipo de adoracion del grupo de jovenes. Mis primeras novias y mis amigos mas cercanos estaban en aquella in- mensa iglesia. Termine haciéndome rizos al estilo de los rastafaris y trabajando en una cooperativa de alimentos organicos, y alos die- cisiete aflos, era un «participante en el pacto» en Solomon’s Porch, de Doug Pagitt, una bondadosa y colorida comunidad emergente posmoderna. Alrededor de ese tiempo, comenceé a asistir al Centro Perpich para la Educacion en las Artes, una escuela secundaria uni- ca, dedicada a las bellas artes, donde estudié guitarra en mis dos ultimos afios de secundaria. Aquella escuela estaba repleta de les- bianas y liberales, actores dramaticos Ilenos de tatuajes y jovenes raperos, y fue alli donde comencé mi modesta carrera de musico. En realidad, es mas bien un entretenimiento, pero me encanta com- poner cantos folcloricos, producir discos y también pisar fuerte al mismo tiempo que soplo mi filarmonica en los bares de Uptown los viernes por la noche. Aunque contemplé tras bambalinas muchas de las maravillas del arte escémico moderno, no aprendi gran cosa en la secundaria especializada en las artes, y lo sabia. Asi que terminé yendo nada menos que al Hillsdale College, en el sur de Michigan, una insti- tucion situada en el extremo opuesto del espectro politico, moral 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 40 9/24/2013 12:36:07 PM Una conversion cada vez mas profunda 41 y educativo. Solamente habia (que se supiera) dos lesbianas en el recinto, y a nadie le parecian interesar las modas 0 los espectaculos. En Hillsdale todo el mundo hablaba de libros e ideas. Nunca habia oido hablar de las artes liberales, y me sorprendio descubrir en mi primer semestre de estudios clasicos que nuestra cultura occidental no es algo que nosotros nos inventamos recientemente. Nos guste o no, hemos recibido las tradiciones grecorromana y judeocristia- na. En Hillsdale me tropecé con la iglesia mas fea, pequefia y co- rriente que jamas habia visto: Chnist’s Church, una pequefia iglesia anglicana. Fue alli donde encontre las hermosamente avejentadas oraciones de la cristiandad, la liturgia historica y los credos. Alli conocia un pequefio pufado de cristianos que vivian juntos en amor en una vida diaria que tenia sus raices en la Palabra y los sacra- mentos. Descubri que mi fe no consistia solamente en mi persona, mi Biblia y mi iglesia a la moda, flotando en el espacio exterior. Aquella humilde y sencilla iglesia anglicana me invito a una fe que era evangélica y catolica, siempre vieja y siempre nueva; a la moda, pero también historica y ortodoxa. Desde que me volvi a mudar a Minneapolis para pintar casas y escribir libros, he sido membro de Church of the Cross, otra iglesia anglicana repleta de parejas jovenes, gente anciana, personas de todos los colores y las razas, adolescentes y gente de edad madura, todos enamorados de Jesus. No soy uno de esos cristianos que con toda tranquilidad Ieva- rian en el parachoques de su auto un letrero que dijera: «Nosotros hacemos las cosas a nuestra manera, y los demas son unos idiotas». No me siento amargado con ninguna de las iglesias que he conoci- do, mi ando huyendo de mnguna de ellas. Entre todas, les han dado forma ami amor y entrega a Jesucristo como Sefior de una manera a veces averiada y a veces hermosa. Y asi, este peregrinar no tiene que ver con salirme de ninguna tradicion o particular denomina- clon, mi con aferrarme a ninguna. La meta de nuestro viaje no es ni siquiera recuperar una edad de oro, o hacer que nos convirtamos en mejores bautistas, evangélicos o anglicanos. Lo que estamos bus- cando es amar mas a Dios y conocerlo mejor. La exploracion de la fe antigua—futura del cristianismo llena de vida nueva nuestro discipulado con respecto a Jesus. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 41 9/24/2013 12:36:07 PM 9780829764277 Cuando los burros hablan INT.indd 42 9/24/2013 12:36:07 PM 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 43 Capitulo 4 Un proyectode \ restauracion N ecesitamos un renacimiento santo. Un avivamiento sin renaci- miento solo hace gente convertida; sin embargo, hoy en dia ser «cristiano» no siempre significa ser semejante a Cristo. En cambio un renacimiento nos invita a convertirnos en discipulos de Jesus; a convertirnos en estudiantes suyos para toda la vida. Yo solo soy un pintor de casas de Minneapolis, pero creo que el Espiritu Santo esta despertando en los cristianos de hoy el hambre por espacios en los cuales puedan convertirse en estudiantes —discipulos— de Jesucristo. La actividad de Dios en la tierra, siempre antigua y siem- pre nueva, es una corriente continua de salvacion tras salvacion, y estamos invitados a participar en estas historias de una manera in- tima. Es real que Hay una gran nube de testigos (Hebreos 12.1). Es real que hay «una Iglesia universal y apostolica».' Y cuando fiumos bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo, nacimos de nuevo en esta compajiia de los santos. La palabra renacimiento nos suele hacer pensar en e/ Rena- cimiento, ese avivamiento de la literatura y las artes que se produjo desde el siglo catorce hasta el dieciséis, impulsado por un interés renovado en los modelos clasicos de la antigiiedad. Nos vienen a la mente nombres como los de Petrarca, Dante, Boccaccio y el pintor Giotto, por no mencionar a Rafael, Leonardo da Vinci, y Miguel Angel. La musica florecid. El arte estallé. La literatura alcanzo 9/24/2013 12:36:07 PM 44 Guando los burros hablan nuevas alturas. Es un periodo que resplandece en la historia. La gente buscaba lo bueno y cierto del pasado, y lo vivia en el tiempo presente. Nosotros nos hallamos en el umbral de otro renacimiento —un renacimiento segun Dios; un renacimiento santo—, porque renaci- miento es lo que sucede cuando una vision y una vitalidad nuevas entran a toda prisa en las viejas verdades y tradiciones. Las per- sonas sé ven a si mismas como parte de algo mayor y hermoso. Despiertan. Las mentes y los corazones cobran vida. La historia es transformada. No necesitamos obsesionarnos acerca de lo que es nuevo, mi de como «adquirir cultura». Los renacimientos no se producen de esa manera. Los renacimientos se producen cuando las personas miran alo que es bueno, verdadero y realmente hermoso en el pasado, y después lo viven en tiempo presente; lo viven a su propia manera exclusiva. Si uno no revuelve lo que hay en el caldero, la sopa se quema. Los renacimientos incomodan a todo el mundo, porque revuelven las cosas. Y asi la gente, o bien va a perseguir de nuevo a los cris- tlanos, o se va a hacer cristiana, pero no va a tener manera de bos- tezar y ser indiferente ante la Iglesia, porque tiene exactamente el mismo aspecto que el resto de la cultura contemporanea. La Iglesia en renacimiento se esfuerza por ser lo que ha sido llamada a ser: la luz de Cristo. Jesus es un ariete para lo que significa ser humano. Dos mil afios y algunos mas no han sido tiempo suficientemente largo para captar a plemitud las consecuencias de la encarnacion y las repercusiones de la resurreccion. Las ramificaciones de lo que Dios puso en movimiento en la cruz lo cambian todo en cuanto a nuestro mundo y a lo que significa ser humano. Hasta Balan, y su burra de nerviosas orejas se hallan dentro de la urdimbre de la tela con la que estaban hechos los pafiales que envolvieron a Jesus. Las palabras de Cristo «tienen en si mismas algo de temible majes- tad».* Cambian lo que significa ser humano. Son nuestro juicio y esperanza. Nuestra galaxia canta acerca del Sefior con una elegancia ma- tematica, una sutileza y una poesia extraordinarias. Esto me hace caer de rodillas. Algunas veces, hasta me ha llevado a ejecutar 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 44 9/24/2013 12:36:07 PM Un proyecto de restauracion 45 pequefias danzas en mi cocina, derramando café por aqui y por alla. Me siento como un nifio en el zoologico, apuntando sin que me cause vergtienza, contemplando como un tonto, llamandoles la atencion a los burros. Afiadamos a esto un poco de sintaxis al estilo del siglo dieciséis, imitemos el fuerte acento castellano de la época, y pongamos incluso un muslo de pavo asado, y tendremos mi teoria del burro loco; la teoria de que el mundo es una resonancia de Dios, y que no nos podemos escapar de él. De hecho, vivimos en un «rei- no» en el cual el Sefior esta reinando. Moisés se acerco a la zarza ardiente, la zarza que ardia con la presencia de Dios, y se quito reverentemente las sandalias. Para san Francisco, el mundo entero era una zarza ardiente, en cuyas llamas estaba Dios, y asi, por reverencia, nunca uso sandalias. Nosotros también nos deberiamos quitar nuestro calzado. 9780829764277 Cuando los burros hablan_INT.indd 45 9/24/2013 12:36:07 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 46 9/24/2013 12:36:07 PM Segunda parte Atomolandia En la cual se sugiere que yo no soy una maquina. Se presenta a Britta, y también a Oliver. Se lleva al dentista ala burra de Balan. Exploramos Atomolandia, la llamada Ilustracion, y la idea de «salvar las apariencias». Con el fin de saber algo, las personas tienen sus puntos de partida; cosas que consideran como eviden- tes en si mismas. Para los cristianos, Jesus es el punto de partida. El lo cambia todo en cuanto a lo que significa ser humano. Britta y Tyler toman el desayuno en el Modern Cafe. 9780829764277 Cuando los burros hablan INT.indd 47 9/24/2013 12:36:07 PM 48 Cuando los burros hablan «Asi que las va a descuartizar», observo Pavel Petrovich; «no tie- ne fe en los principios, pero si tiene fe en las ranas». —TIvan Turgenev, Padres e hijos Tratamos a las personas, los lugares y las cosas de acuerdo a la forma en que los percibimos. —Wendell Berry, Life Is a Miracle 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 48 9/24/2013 12:36:07 PM Capitulo 5 Llevando al burro al dentista na fresca noche de otofio, invité a mi buen amigo Oliver a ve- nit a mi casa para comernos una pizza congelada. Nos encanta sentarnos en mi cocina para escuchar viejos discos de blues y beber cerveza barata. Oliver tiene los ojos de color verde marino y un ca- bello tieso de color fresa con nzos que van rebotando. Es ingemiero de computadoras. Fue criado en una familia judia ortodoxa, pero ahora es agnostico, asi que siempre terminamos hablando acerca de cosas de informatica realmente complicadas, y nos encanta dis- cutir. Como él sabe tanto acerca de la cultura hebrea, yo le hablé de Balan y de mi teoria del burro loco. No manifesto entusiasmo alguno. «jHablas en serio?», me pregunto con recelo, mientras abria una lata de cerveza. «La ciencia ha demostrado que los burros no pueden hablar. El universo esta gobernado por unas leyes fijas, Tyler. «No existen tales “leyes fijas’», le contesté. Oliver me miro como si yo hubiera perdido el juicio. «{Y si eso que nosotros lla- mamos “ley” no es mas que la metafora de un modernista para describir lo indescriptible?», le pregunté. «La razon por la cual los huevos se convierten en pollitos y las manzanas caen de los man- zanos es tan misteriosa como la razon por la cual hablo la burra de Balan, o la razon por la cual Jesus nacio de una mujer virgem». 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 49 9/24/2013 12:36:08 PM 50 Cuando los burros hablan «Hum...» Oliver fingio estarlo pensando por un instante, mien- tras se rascaba su rostro urbano mal rasurado. «No». «Piénsalo», le diye. «Aunque en la practica contemos con que las manzanas caigan de los manzanos, en realidad no podemos afirmar que siempre deban caer. En realidad, ni siquiera podemos depender de que lo hagan. Apostamos a que lo hacen. Y aposta- mos porque lo hemos observado repetidas veces. Pero no es una “ley”». Oliver puso su cerveza en el mostrador con autoridad. «Pero la ley de la gravedad es una realidad evidente, Tyler. Es la que mantie- ne al mundo unido. Hay leyes fijas por todas partes. Y demuestran que los milagros son imposibles». «iY eso como es?», le pregunte. «Bueno, puesto que tu lo sacaste a relucir», me dijo, «toma el mito cristiano del nacimiento virginal de Jess. Gracias a la ciencia moderna, sabemos que es imposible que suceda una cosa asi. Tiene que haber un espermatozoide». No todos los dias oye uno a un viejo amigo decir con convic- cion la palabra espermatozoide. Yo pensé por un instante en lo que él me estaba diciendo. «Pero cuando José, su prometido, descubrio que ella estaba en- cinta, quiso suspender la boda», yo le dije. «La mayoria de los hombres lo habrian hecho», me dijo Oliver, asintiendo vigorosamente con la cabeza, mientras sus 11Z0s se sacu- dian como un tazon lleno de uvas rojas. «Esto es, mientras supo que por lo general, una mujer no puede tener un bebé, a menos que haya dormido con un hombre», le dijo. «Por eso al principio José quiso suspender la boda. El no era nin- gun ingenuo inocente». «Pero José si era un ingenuo inocente», me replico Oliver, le- vantando los brazos con exageracion. «A/ final, creyo en el naci- miento virginal de Jesus». «Sl, pero no porque no tuviera idea sobre la procedencia de los bebés. José sabia que a los nifios no los trae la cigiiefia. Sencillamente, no vivia en un mundo de “leyes” fijas e inquebranta- bles. Para él, la posibilidad de que una manzana cayera hacia arriba 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 50 9/24/2013 12:36:08 PM Llevando al burro al denticta 51 era una posibilidad real. Creyo que el embarazo de su prometida era algo hecho por Dios, un milagro, un giro en el transcurso esperado de los acontecimientos». «Es probable que tambien creyera en los duendes, los orcs y los hobbits», dijo Oliver con un suspiro, tal vez molesto porque un par de hombres entonces solteros ambos, estuvieran sentados un vier- nes por la noche, hablando de espermatozoides. El olor de la pizza estaba comenzando a llenar el lugar. «No se trata de que seamos un monton de seres humanos ignorantes, desconocedores de la magia que nos rodea por completo. La ciencia moderna ha demostrado que lo sobrenatural no existe», dijo rechazando mis palabras. «i Cuales ciencias?», le pregunte. «A menos que tu seas un Hufflepuff o un Slytherin», me con- testo con la mirada perdida, «todas ellas». «Pero la ciencia no ha demostrado que no existe lo sobrenatu- tal», yo dije, casi gritando. «i Por qué no?», me pregunto Oliver. «Ningun hechizo de cha- man m ayuno alguno sobre un monte sagrado podria convocar al espectro electromagnetico. Los profetas de las grandes religiones no estaban conscientes de su existencia, no porque hubiera un dios que se guardara los secretos, sino porque les faltaban los conoci- mientos que la fisica ha adquirido con tanto esfuerzo. A los pies de un guru no se puede aprender neurobiologia. La ciencia es la unica forma viable para llegar a conocer algo». «;Ahora me vas a decir que los misticos orarian mejor usando una calculadora de bolsillo!», le grité. El reloj automatico del horno sono dando un golpe. «Los cientificos son los supersticiosos. Son ellos los que creen en “leyes” inventadas que nunca han visto. Se imaginan una especie de tierna e imaginativa conexion entre los huevos y los pollos, entre las manzanas que dejan el manzano y las manzanas que llegan al suelo. Pero hace falta dar un salto de fe para creer que esa conexion constituye una “ley”. Que nosotros sepamos, se trata de magia»). «Pero la clencia demuestra que no hay poder capaz de romper las leyes fijas del universo. La magia no puede hacer que uno y dos sean tres», me contesto Oliver. Estaba comenzando a levantar la voz. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 51 9/24/2013 12:36:08 PM 52 Cuando los burros hablan «Claro que no», le dije, mientras traia la pizza a la mesa. «Pero creer que Elias pudo subir corporalmente al cielo no es algo que ponga en duda que uno y dos son tres. Los cientificos hablan del nacimiento, la muerte y los rios que corren hacia abajo como si estas cosas fueran tan obvias y necesarias como que uno y dos son tres. Pero no lo som». «Sencillamente, no es racional», me interrumpio Oliver. «Pero si es racional», insisti. «Cierto, los “hechos” se suelen repetir. Sin embargo, la forma en que nosotros explicamos estas repeticiones esta en manos de la razon. Y la razon no excluye la posibilidad de que una manzana pudiera caer hacia arriba, 0 que una mujer virgen pudiera dar a luz a un hijo. Imaginarse una co- nexion entre un espermatozoide y un nifio, y Ilamarle a esto “ley de la naturaleza” no lo hace necesario. Los cristianos creen en los milagros, pero no viven en un mundo de axiomas sin demostrar. Viven en la historia, una historia de creacion, caida, redencion y consumacioMm». Oliver me miro por encima de la pizza que ya se estaba en- friando como si lo que estaba diciendo no tuviera sentido alguno. Entonces se lo traté de explicar desde otro angulo. «Si tienes cinco dolares en tu comoda, te garantiza la aritmética que mafiana tendras alli cinco dolares?», le pregunteé. «Por supuesto», me dijo Oliver imperiosamente. «A menos que mi compafiero de cuarto me los robe». «Entonces,» le dije, pomendo pedazos de pizza en nuestros pla- tos, «{las leyes de la aritmeética nos dicen cuanto dinero va a haber en tu comoda mientras no haya una interferencia externa; mientras ningun comparfiero de cuarto ladron quebrante las leyes de la de- cencia?» «Por supuesto,» me contesto Oliver ya exasperado, mientras abria una servilleta. «Y entonces también, es imposible fertilizar un Ovulo con un espermatozoide... a menos que haya una interferencia externa, un “compafiero de cuarto divino que sea ladron’”, por asi decirlo. La razon permitiria esta posibilidad, a pesar de que apelemos a la sim- ple repeticion de las realidades fisicas». 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 52 9/24/2013 12:36:08 PM Llevando al burro al denticta 53 Oliver hizo una pausa. «Sencillamente, todo esto me hace sen- tir incomodo», dijo resoplando. «No me habia dado cuenta de que tu estuvieras cubierto de pelaje». Nos reimos y comimos una gran cantidad de pizza. Decidimos no volver a hablar de milagros —o lo que es mas, de espermatozoi- des— durante el resto de aquella noche. En su lugar, nos limitamos alos discos y la cerveza.' Mucho después de haberse marchado Oliver, yo permaneci junto al fregadero, lavando la vayjilla de toda la semana y pensando. El cristianismo presenta una historia muy distinta a la que presenta el secularismo. «A Jesucristo —el cual resulta que nacio de una mujer virgen, le hizo una trampa a la muerte y ascendio corporal- mente a los cielos— ahora se lo puede comer bajo la forma de una galleta», escribe el cientifico popular Sam Harris, desconcertado ante lo milagroso.’ Los escépticos aceptan de buena fe que unas “leyes” imaginarias lo sostienen todo, y que no hay nada que las pueda quebrantar. Pero siguiendo su manera de razonar, muy bien podrian creer que la magia es la clave del universo. No pude menos que preguntarme: un burro parlante, jes un portento divino o un problema dental? Todos nuestros supuestos previos modernos se enfrentan a la posibilidad de los milagros. 81 Balan fuera un cientifico moderno y oyera hablar a su burra, es probable que le estudiara las cuerdas vocales al animal. Especularia sobre si esas cuerdas vocales estan fisicamente capacitadas para producir sonidos humanos, y si lo son, como los pliegues de tejido membranoso que se proyectan hacia adentro desde los lados de la laringe para formar una hendidura a través de la glotis en la gar- ganta, se alinean con la columna de aire de la burra de tal manera que sus bordes vibran para producir el fenomeno que nosotros lla- mamos «Voz. Pero si Balan habria sido poeta, al escuchar que su burra estaba hablando, todo lo que habria hecho seria escuchar. Habria sopesa- do el significado de las palabras de la burra. Habria meditado en la accion que esas palabras estarian pidiendo de él. Tanto Balan el cientifico, como Balan el poeta, habrian experimentado el mis- mo milagro. Ambos habrian estado en lo correcto en cuanto a sus 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 53 9/24/2013 12:36:08 PM 54 Cuando los burros hablan observaciones. Pero habrian recibido dos tipos de informacion to- talmente diferentes. Habrian vivido unas histonas que se habrian contradicho entre si de una manera extrema. Uno habria bendecido a los israelitas, mientras que el otro habria Nevado a la burra al dentista. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 54 9/24/2013 12:36:08 PM Capitulo 6 L a gente de la cristiandad vive una historia diferente ala de los que viven en «Atomolandia», un mundo habitado por materialistas que solo creen que todo lo que existe son los atomos, las leyes de la fisica y el simple mundo fisico. Ni la ciencia m el método cientifico tienen nada de malo, pero hay algo de malo en creer que todo el um- verso solo consiste en un conjunto de ladrillos plasticos de colores que se enganchan entre si, y al que acompafia una variedad de engra- najes, minicalculos y artefactos diversos, como si el mundo estuviera hecho de piezas de Legos. Estos ladrillos que se enganchan entre si, dicen algunos, son los bloques a partir de los cuales se ha construi- do todo, incluyendo el amor, e incluyendo también la idea de Dios. Richard Dawkins hace notar que, estadisticamente, la gente creyente hereda la fe de sus padres, y llega a la conclusion de que aunque «las imponentes catedrales, la conmovedora musica, las estumulantes historias y parabolas ayudan en algo... su religion es un accidente de nacimiento». Asi llega a la conclusion de que la religion se debe basar en realidad en «la epidemiologia, y no en las evidencias».! Tu no eres mas que un producto secundario fortuito del tiempo y el azar. A veces me pregunto si no habran lanzado un encantamiento so- bre la silueta empirica moderna. Son tantas las personas que confian en las estadisticas, o en lo que esta de moda, o incluso en el pragma- tismo de papel mascado. Algunos de mis amigos han ido tan lejos 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 55 9/24/2013 12:36:08 PM 56 Cuando los burros hablan como para afirmar que el amor es una adaptacion para la superviven- cia de la especie. Yo creo que ese encantamiento fue lanzado por vez primera en el siglo doce, cuando Averroes insistio en que la razon se oponia de alguna manera a la revelacion, y finalmente llego a pro- ducir sus frutos cuando filosofos como Descartes, Locke, Newton y Bacon agitaron sus varitas magicas de hadas madrinas y dijeron en estas u otras palabras similares: «Desde ahora, el mundo es una maquinaria». Poco a poco, nos comenzamos a ver a nosotros mismos como objetos capaces de salirnos de nuestro ambiente para poderlo pinchar, manmipular y controlar. Puesto que ya no éramos criaturas (en latin, creaturce) creadas por un Creador, éramos libres para con- vertimos en seres autonomos capaces de falsificar todo lo que nos rodeaba, convirtiéndolo en una extension de nuestra propia voluntad. Por fin el hombre podia arrastrarse fuera del lodo del que fue hecho para hacerse semejante a un dios. Hizo falta que transcurrieran cuatrocientos afios, pero el encanta- miento ya esta haciendo ahora todo su efecto. ;Alguna vez has tem- do ese sentimiento de enojo cuando se te paraliza la computadora, o el desagtie de la casa se te atasca, o el Wi-Fi gratuito de la cafeteria local no esta funcionando? Es mas que un sentimiento de enojo. Yo me he sentido genunamente encolerizado, furioso, cuando mi te- léfono movil no funciona bien. Cualquiera pensaria que me pongo furioso cuando veo injusticias o persecuciones, pero en lugar de ser asi, donde pierdo los estribos es cuando la conexion con la Internet se pone lenta. Mi computadora portatil ya no existe para mantener mi vida transcurriendo tranquilamente; lo que hace es ofender mi autoabsorcion. Mi ilusion de dominio sobre el mundo, mis delirios de ommpotencia, quedan hechos afiucos. Cuando vayamos despren- ciendo una tras otra las capas para dejar al descubierto el crudo latido de lo que esta pasando realmente en esos momentos de ira —cuando el refrigerador se rompe o el fregadero se queda inexplicablemente atascado— tal vez descubramos que el cambio de perspectiva que comenzo con lo que la jerga historica llama «la Ilustracion» no ha tenido nada que envidiarle a la fundicion del becerro de oro. La era moderna dijo: «Yo decido lo que es realidad», y la era postmoderna elevo este individualismo a la enésima potencia. El 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 56 9/24/2013 12:36:08 PM La crigtiandad y Atomolandia 57 relativismo que se asocia con tanta frecuencia al postmodernismo, en realidad es una especie de hipermodernismo. Es la ideologia de Atomolandia: «La naturaleza ha muerto. Por tanto, el significado de algo es lo que yo lea en ello, y la verdad es lo que yo quiero que sea». Hagamos esto por un tiempo suficiente, y comenzaremos a sentimnos como dioses. Queremos trofeos, simplemente por presentarnos en shorts de futbol. La era moderna busco este dominio por medio del control, y ce- lebro abiertamente a las maquinas por habernos levantado del lodo. Hoy hemos dado un paso mas: hemos vivido con maquinas por tanto tiempo, que creemos realmente que hemos trascendido por encima de nuestra condicion de criaturas. ;Has notado como todo, desde un hornillo—tostadora hasta un iPod, es disefiado ahora para que no pa- rezca una maquina? Todos los mecanismos internos, las «entrafias», han sido escondidos de la vista. Aunque quisieras desmontar un mi- croondas, no podrias hacerlo. El encantammento ha tomado toda su fuerza: tenemos el dominio sin tener que reconocer como lo tene- mos. ,Acaso es de sorprenderse que nos quedemos lividos cuando se nos va la electricidad, o cuando necesitamos llamar al fontanero? Nuestro sentido de autonomia y de sefioria es puesto en peligro, de- jando al descubierto a una criatura social y moral asustada, llena de lodo, dependiente. Bajo la sombra de Atomolandia no hay milagros, porque nadie los busca. Aunque un burro te hablara con el espafiol de Cervantes, tu no creerias lo que te ha sucedido. ;Qué haremos a la medianoche, cuando desaparezcan nuestras zapatillas de vidrio y nuestras carro- zas se vuelvan a convertir en calabazas? Las maquinas y la tecno- logia no tienen nada de malo. Pero hay algo que no anda bien en Atomolandia, el mundo de fantasia en el cual la creacion es una gran acumulacion de aparatos mecanicos en la cual no hay un Dios. Se mofa de la religion, a pesar de que es en si mismo una religion: el cientificismo, la fe radical en el poder del conocimiento cientifico y de la técnica para salvar a la humamnidad. Muchos pensadores contemporaneos olvidan que, aunque algu- nas veces es util, describir al universo como una maquinaria no es en realidad proclamar una profunda verdad, sino emplear una inservible 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 57 9/24/2013 12:36:08 PM 58 Cuando los burros hablan metafora tecleada en las imperfectas y tercas maquinas de escribir de la era moderna.’ La paradoja de la bioquimica, la quimica de la vida, es que no puede definir la vida. Apenas la puede estudiar. Antes de poder abrir una célula para poderla analizar, tenemos que empezar por matarla. «Es tipico de los modernos mecanistas», decia G. K. Chesterton, «que, aun en los momentos en que se tratan de imaginar una cosa vida, solo pueden pensar en una metafora mecanica a partir de una cosa muerta».? Como yo solamente estoy sobre un burro, es muy posible que no me siente lo suficientemente alto como para convencerme de que no somos mas que una nube de atomos. Pero, al menos que yo sepa, las personas hacen maquinas, pero ellas mismas no son maquinas. El cuerpo humano no es una computadora, mi un juguete de cuerda. Es mas que una compleja composicion de atomos, o de bloques engar- zados unos con otros. Desde una perspectiva, «el cerebro humano, que solo pesa 1,4 kilos»,’ podra funcionar como una maquina, pero esto no significa que sea una maquina. Al encontrarnos con la ética, con las obras grandiosas de arte o con el sufrimiento humano, sefialar que los humanos tenemos atomos es algo trivial. Es como decir que la musica es un violin en un atril, al mismo tiempo que se ignora al violinista y al compositor. «;Quén podria comprender la musi- ca solo a partir del analisis de la composicion de los instrumentos que tiene una orquesta?», pregunta Erwin Chargaff. «La noticia de que todos los trombones estan hechos de bronce es trivial, cuando se mide contra la inmensidad del universo de la musica. Tal vez santa Cecilia tocara con dulzura una trompeta hecha de vidrio».? {Que es mas verdadero: la musica 0 los instrumentos? ;O estan ambas cosas inseparablemente conectadas entre si? O bien, usemos una metafora diferente: cuando la gente de Atomolandia ve a los nifios jugando con Legos, la unica realidad que reconocen es el plastico acrilomtrilo butadieno estireno del que estan hechos los Legos, y la forma en que estas plezas se engranan entre si con un grado de precision total. Pasan por alto a los mifios, y el hecho de que estan construyendo un castillo con nobles caballeros y her- mosas damas, y entrando en batalla contra unos peligrosos dragones. iCuales son mas reales: los nifios y la historia, o los Legos? 9780829764277_Cuando los burres hablan_INT.indd 58 9/24/2013 12:36:08 PM 9780829764277 Cuando los burras hablan_ INT.indd 59 Capitulo 7 fz NG SS f a Uf IK) | Salvar \\ \\ las apariencias Vy 1} yl i if WA f// Bee ge fc nun mundo de fantasia hecho solo de Legos, la gente comienza a pensar junto con el cientifico popular Sam Harris que la religion es una enfermedad mental y que la teologia solamente es una rama de la ignorancia humana.! Segun el fisico teorico Stephen Hawking, la creencia de que el cerebro es una computadora es la que curara a la gente de la religion. En una entrevista, Hawking proclamaba esta nueva mitologia: «Yo considero al cerebro como una computadora que dejara de trabajar cuando fallen sus componentes. No hay cielo mi mas alla para las computadoras averiadas; esas cosas solo son un cuento de hadas para gente que le tiene miedo a la oscuridad».’ El etologo Richard Dawkins esta de acuerdo con él, y escribe: «No hay ninguna fuerza vital guiada por un espiritu; no hay tampoco ninguna jalea mistica protoplasmica, pululante, jadeante y palpitante. La vida no es mas que bytes, bytes y bytes de informacion digital».? De hecho, el ampliamente aclamado y famoso autor y bidlo- go Edward Wilson dice que los bebés son unos «maravillosos ro- bots».* Sugiere en su libro On Human Nature [Sobre la naturaleza humana] (un titulo que es extrafio que salga de un laboratorio) que el cerebro es una maquina puramente bilogica formada por diez mil millones de células nerviosas; un artefacto para la superviven- cia y la reproduccion. Las personas no son mas que unas «maqui- nas extremadamente complicadas» y «el cerebro es una maquina»? 9/24/2013 12:36:08 PM 60 Guando los burros hablan Lo que nosotros llamamos pensar, en realidad solo es un conyunto de reacciones quimicas y eléctricas. Somos el producto de nues- tra propia arquitectura molecular, que dirige de manera automa- tica nuestra ética, la cual resulta ser lo unico que nos distingue de las computadoras electronicas. El azar y la necesidad ambiental crearon la especie. Dios es nuestra idea original producida por la evolucion genética de los tejidos nerviosos y sensoriales; una idea que encuentra en ultima instancia su origen en quarks y cascaras de electrones. Asi, «las creencias estan capacitando realmente los mecanismos necesarlos para la supervivencia».® La palabra que hace todo el trabajo pesado para los pensadores de Atomolandia es realmente. Cuando alguien dice que a es real- mente b, ese «realmente» es una abreviacion de esto: «Aunque mi lo puedo probar ni refutar, me deberias escuchar, porque yo tengo un conocimiento secreto (yv@otc, gnosis)». Es como decir: «Si el em- perador anda desnudo, realmente lo que sucede es que esta usando ropajes invisibles. E] emperador esta desnudo. Por tanto, sus ropajes son invisibles». Tal vez no seamos capaces de refutar de una manera logica la creencia en los ropajes invisibles, pero si podemos conocer muchas cosas acerca de la clase de personas que los usan. El meéto- do de los cientificos populares tiende a resolver por medio de dicta- menes unas ideas que siguen estando abiertas a enjuiciamiento y a variacion, aun desde dentro de la comunidad cientifica. Las pruebas empiricas no han demostrado en lo mas minimo que realmente no hay Dios, que realmente la ética solo es una adaptacion para la super- vivencia de la especie, y que nosotros somos realmente unas maqui- nas. Estas cosas son explicaciones nacidas de las conjeturas de una filosofia cuyo punto de partida es dar por sentado que no hay Dios. Aunque he leido muchas veces las palabras de Wilson, no las puedo ver como otra cosa que no sea un oximoron: «La mente hu- mana evoluciono para creer en los dioses. No evoluciono para creer en la biologia».’ Después explica que la creencia en que existe Dios evoluciono porque ofrece una ventaja adaptativa, pero que la creen- cia en la biologia vo evoluciono porque es «un producto de la era mo- derna».® Conjetura con el celo de todo un misionero que la libertad es un autoengatio,’ pero también dice que es una ilusion util, porque le 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 60 9/24/2013 12:36:08 PM Salvar las apariencias 61 da a nuestra especie una ventaja en la adaptacion.'” «Como especie, nos podemos sentir orgullosos, porque despues de haber descubierto que estamos solos, les debemos muy poco a los dioses».!! El agnicul- tor—poeta Wendell Berry observa valientemente con respecto a esta afirmacion soberbia y totalmente ajena a la ciencia: «Esto seria una noble blasfemia, como la de la mujer de Job, si el empurista o el Sr. Wilson creyeran en los dioses, pero mnguno de ellos lo hace. Solo se trata de una gastada frasecita hecha procedente de una iconoclasia “cientifica” familiar: un orgullo desmedido sin provecho alguno».! Desde Wilson hasta Hawking; desde Harris hasta Dawkins y el ya fallecido Christopher Hitchens, los profetas de Atomolandia cu- bren sus filosofias con las vestimentas invisibles de la ciencia. Sus manidos topicos en los cuales «el emperador no lleva ropa puesta» se repiten en las aulas, la propaganda y el periodismo contemporaneos. Ante las soperas plateadas del esnobismo intelectual de estos escri- tores, las personas comunes y corrientes con dudas legitimas y pre- guntas sinceras caen como urogallos ante las escopetas. El publico amistoso y no erudito los soporta de buena gana. Sus libros nos dan una buena instantanea sobre las clases de supuestos no cientificos que los cientificos esperan de nosotros que aceptemos en buena fe. En realidad, es imposible caminar por la calle sin tropezarse con alguien de la misma ralea de Wildon, o un fanatico suyo. No estoy bromeando. Después de caminar las cuatro calles que separan mi apartamento en Uptown de mi libreria de libros usados favori- ta en Minneapolis para comprar Sobre la naturaleza humana, de Wilson, entré en una cafeteria cercana. Al cabo de unos minutos, una atractiva joven de rizos muy largos y lujosos se sento junto a mi y exclamo: «Me encanta ese libro. Wilson es mi héroe. ;Qué piensa usted de él?» Yo le dije que pensaba que era un buen escritor que tenia mucho que decir, pero que no estaba demasiado seguro de sus presuposiciones. «j;Oh!», dijo, echandole una mirada privadamente amable ami barba casi medieval, y de repente estaba mas interesada en su café expreso que en mi. No nos dijimos mi una palabra mas. Era como si alguien hubiera corrido una cortina. Yo me senti triste, pero un poco aliviado, por no haberme librado de la posibilidad de invitar a salir a una joven tan hermosa, solo para desenterrar mas 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 61 9/24/2013 12:36:08 PM 62 Cuando los burros hablan tarde aquella noticia, tal vez en medio de una cena iluminada con velas: «Eh... {y usted en quién cree?», me habria preguntado con una sincera sorpresa mientras se le salian los nzos del pariuelo. «En Jesus», yo le habria repetido, mirandola a sus azules ojos. El restaurante se habria quedado repentinamente silencioso. «Pero... Bueno, ino ha oido hablar usted de la biologia?» «Claro que si». Ella habria asentido remilgadamente y cruzado sus brazos de ala- bastro. Entonces, con una oleada de compasion, se inclinaria hacia mi: «En realidad, ;sabia usted que el cerebro no es mas que un aparato?», me habria susurrado, invitandome a compartir su asombro. «Hasta es alimentado por sustancias bioquimicas y capaz de producir en masa ideas tan grandes como Dios, jsabe?». Cuando los burros estan felices, paran las orejas; cuando estan asustados o nerviosos, las dejan gachas, como Eeyore, en Winnie+the—Pooh. Si tt. nos estuvieras echando unas muradas furtivas a mi y ami bella compafiera de cena, y yo tuviera ore- jas de burro, no sé en qué posicion estarian. Tengo la esperanza de que las hallarias erguidas y curiosas, mientras yo preguntaba, parpadeando sofioliento: «Eso es todo lo que es el cerebro? ». Este es el asunto. Antes de la era moderna, las personas estaban conscientes de que sus teorias acerca de la forma en que funciona el mundo solo eran eso: teorias. A sus datos los llamaban «fenomenos», lo cual para ellos significaba algo parecido a lo que nosotros quere- mos decir con la palabra apariencias. La expresion que dominaba la astronomia durante la Edad Media era «salvar las apariencias».!° Un modelo cientifico era valorado por conveniente o practico, no porque fuera lo que nosotros hoy llamariamos una realidad. La idea era trabajar con los modelos o paradigmas explicativos mas capaces de «salvar los fenomenos» (owZelv Ta palvopievn, sodzein ta fainome- ne). Una hipotesis de un astronomo era un arreglo, un apoyo, para salvar las apariencias. «Las cosas parecen ser de esta forma», diria. «Parecen ser asi y asi; dan la impresion de ser asi». Los cientificos del siglo dieciséis, quienes también solian ser obispos, no estaban en desacuerdo por el hecho de que él usara el telescopio, m porque hubiera divisado las lunas de Jupiter. Estaban en desacuerdo con su 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 62 9/24/2013 12:36:08 PM Salvar las apariencias 63 teoria sobre lo que es una feoria. Galileo creia que una teorla no es una teoria, sino una realidad. Sus hipotesis no «salvaban las aparien- clas»), sino que afirmaban estar declarando la verdad." El concepto de que los modelos y los relatos que escribimos para explicar los fenomenos sean en realidad verdades profundas, fue codi- ficado en la lamada Ilustracion del siglo diecisiete, y desde entonces se ha convertido en algo que no se pone en duda. Observar a alguien cuando trata de comprender que la «ley de la gravedad» es una meta- fora hecha por el hombre para descnbir lo inexplicable, es como obser- var a alguien luchar con un demonio para quitarselo de los hombros. La gente piensa realmente que la «ciencia» existe independientemente de la narrativa humana, o fuera de ella; esa era la forma en que un pen- sador medieval pensaba acerca de Dios. Por eso los cientificos pueden decir cosas acerca de evolucionar para creer en Dios, no en la biolo- gia.’° Los cristianos creen que los seres humanos creados carecen de metas si estan alejados de Cristo. Por tanto, la Trinidad es la clave de la naturaleza humana. Pero los cientificos que se hallan bajo el encan- tamiento de Atomolandia creen que la clave de la naturaleza humana es la biologia.'° Los fenomenos ya no son reconocidos como modelos de hechura humana, sino como realidades establecidas. «Cuando se olvidan la naturaleza y las limitaciones de las imagenes artificiales», escribe Barfield, «estas se convierten en idolos».’ ientras mas tiempo exploramos las diferencias entre Atomo- landia y la cristiandad, mas descubrimos que estas maneras de concebir la realidad se hallan en directa oposicion entre si. La primera es la Ciudad del Hombre, y la segunda es la Ciudad de Dios.'* Cada una de estas ciudades hace preguntas diferentes. El fisico Paul Dirac da esta respuesta a la pregunta sobre si la luz es una particula o una onda: ambas, y de manera simultanea. La luz aparece como una onda si le haces una «pregunta de onda», y aparece como particula cuando se le hace una «pregunta de particula». Esto nos recuerda que nuestras observaciones siempre seran las observaciones de unos observadores. La clencia siempre sera una clencia humana; un salvar las aparien- cias. No hay tal cosa como una «clencia pura», porque nuestras hi- potesis dependen de la clase de preguntas que les hagamos a nuestros 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 63 9/24/2013 12:36:08 PM 64 Cuando los burros hablan burros. Balan el cientifico y Balan el poeta habran podido vivir histo- rias muy diferentes, pero al final, todo cientifico que friamente se de- cida a ser «objetivo» nunca conocera realmente la profunda totalidad de una mujer, o un arbol, o un burro. Solamente el afecto y la intimi- dad nos revelan las cualidades mas profundas de la creacion. Vemos oscuramente, a través de un velo, y como exploraremos mas adelante, nuestra manera de saber es moldeada por nuestra manera de amar.” Dios caminaba en el huerto, porque nosotros somos de/ huer- to. El espacio entre la especie y el espécimen no es tan grande. En Atomolandia estamos aislados de lo que nos rodea; «observamos objetivamente» un «ambiente» en busca de «datos». Pero en la cris- tiandad se nos invita a participar amorosamente en la creacion, y por eso siempre tenemos sucios los dedos. A diferencia de Dios, nosotros no somos capaces de salirnos fuera. Nuestros cinco sentidos falibles, nuestros instrumentos que hemos inventado, nuestro lenguaje, nos invitan a participar en la creacion como criaturas. Hay un techo para el conocimiento humano, y solo la revelacion divina puede instalar en él claraboyas. La mayoria de nosotros no leemos libros de filosofia sobre el materialismo. Entonces, ;como fue que nos volvimos materialistas? El modelo creado por los académicos se filtra en los tribunales de justicia, en las aulas y finalmente, en la cultura popular, donde es absorbido por adolescentes y nifios, y adultos comunes y corrientes que nunca leeran un libro de filosofia. Asi se vuelve un habito pre- juiciado e irreflexivo. Tal vez pensemos que vivimos en un mundo de libros inmaculados y sueteres J. Crew; un mundo tan avanzado, que no necesita molestarse con una poesia desgastada y una religion hecha jirones. Pero esta ideologia nace de una religion, aunque sea la religion del elitismo de Nueva York, de las exageraciones de los presentadores de noticieros, la neolengua, Microsoft, McDonald’s y MTV. Detras de cada publicacion de investigacion cientifica, calen- dario, modelo de negocio, libro para nifios o canto popular hay una constelacion de suposiciones sobre la clase de criaturas que somos. Aun. si estas ideologias afirman no ser religiosas, son las que tejen nuestra narrativa religiosa, porque los seres humanos somos inheren- temente religiosos por naturaleza. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 64 9/24/2013 12:36:08 PM Capitulo 8 Nadie quiere escuchar 1 becerro de oro de Atomolandia se encuentra en la formacion de la consiliencia, la cual es supuestamente la «unidad de todo conocimiento» para el cientificismo. Sin embargo, la coherencia de la creacion en la cristiandad no se parece en nada a la consilien- cla; su poesia no se parece para nada a lo que algunos cientificos llaman «la presencia de la poesia».'! Para aquellos que creen en el Cristo crucificado y resucitado, la unidad de todo conocimiento se encuentra en Cristo, pero bajo el encantamiento del cientificismo, la unidad se encuentra en las leyes de la fisica.’ De hecho, en Atomolandia lo desconocido es ahora una manera de hablar de lo que va a ser conocido. Segun dicen ellos, la ciencia terminara teniendo todas las respuestas. Si no conoce algo, es que no lo conoce todavia. Dentro de esta rubrica, la busqueda del co- nocimiento nos lleva a matar para hacer la diseccion, buscar a toda costa la respuesta con poco espacio para el respeto, el asombro o la reverencia.’ Pero la edificacion de la torre de Babel no culmino en una consiliencia, sino en una confusion. ;Y si hay algunas cosas que sencillamente nos es imposible llegar a conocer, y fingir lo contrario es jugar a ser Dios; comer del arbol del Conocimiento del Bien y del Mal? ;Como nos vamos a deshacer de esas enormes cantidades de desechos nucleares? Azin no lo sabemos. {De donde procede el universo fisico? Azin no lo sabemos. {Por qué existe el 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 65 9/24/2013 12:36:09 PM 66 Cuando los burros hablan suffimiento humano? Azin no lo sabemos.* Frente al sufrimiento humano, la ideologia, el dogmatismo y el desesperado optimismo del cientificismo estan muy cerca de la bancarrota. iY si laidolatria de Atomolandia es culpable de algo decidida- mente inmoral y malevolente? «[{Los fildsofos| formularan estos cargos», escribe Wilson; «falacias por ambigtiedad, simplismos, reduccionismo ontoldégico, cientificismo, y otros pecados hechos oficiales por un siseante abucheo. Ante todos los cuales me declaro culpable, culpable, culpable».°? Ciertamente. El] reduccionismo, el optimismo ciego y la maquina se hallan en el corazon mismo de la ideologia moderna, una ideologia que produce sus frutos no solo en las pruebas con animales, el abuso de drogas, los pesticidas, la industria agraria y los horrores de los pabellones psiquiatricos del siglo veintiuno, sino también en Mauthausen, Dresden, Hiroshima y Da Nang. Y en proyectos como Body Worlds, de Gunther von Hagens, en el cual él plastifica el cuerpo humano y lo exhibe al publico, como si la objetificacion y la explotacion estuvieran jus- tificadas en nombre de la educacion y el espectaculo; como si los seres humanos no hubiéramos sido fabricados de una manera admi- rable y maravillosa, y no llevaramos en nosotros mismos el aliento mismo y la semejanza de Dios. Hasta hace solo unos pocos afios, los cristianos de todos los tiempos y todos los lugares han tendo un cuidado apasionado con el cuerpo humano, en especial cuando ha «caido en el suefio» (nuestra palabra cadaver procede del verbo latino cddere, de donde viene nuestro verbo «caer»). En la cristian- dad, un cadaver no es una simple masa de atomos carente de sen- tido. Es una criatura durmiente, un don de Dios que no es posible profanar, denigrar m convertir en mercancia. Es verdaderamente extrafio que pensemos que estamos tan avan- zados gracias ala ciencia y la tecnologia. El Codigo de Nuremberg sobre la ética médica no esta fundado en un nuevo descubrimien- to de la bioquimica, sino en una antigua y poética conviccion. El doctor Eduard Wirths, en el campo de concentracion de Auschwitz, era una clase de doctor muy distinta a la clase de doctora que era Hildegarda de Bingen en el monasterio de Rupertsberg, y la dife- rencia no es que Wirths estuviera mas adelantado o evolucionado. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 66 9/24/2013 12:36:09 PM Nadie quiere escuchar 67 La ciencia no es mas que una herramienta en manos de villanos y de santos; ahora bien, ;puede la ciencia discermr quien es qguién? Por si misma, la biologia no puede alegar nada contra el aborto y la eutanasia, como tampoco puede defender la digmidad humana y el amor. Se tiene que limitar a construr su caso a favor del valor de la vida humana, acudiendo a alguna otra disciplina. El cientificismo no es solamente una metodologia; es una cos- movision, una «estructura de plausibilidad», por usar la frase del sociologo Peter Berger. La investigacion cientifica y la tecnologia no tienen en si nada de malo, pero no debemos dar por sentado que estas busquedas se puedan realizar fuera del sefiorio de Cristo, el Logos (Aoyoc, Jogos), el Creador y Sustentador de toda materia. «Puesto que toda ciencia... esta interesada por la Trinidad antes que todas las demas cosas», escribia san Buenaventura, «por necesidad, toda ciencia debe presentar algun rastro de esta misma Trinidad».° Nuestro fallo ha estado en separar en un compartimento distinto la encarnacion y la resurreccion de Jesus, para segregar la actividad de Dios en la tierra de nuestras investigaciones cientificas en esa misma tierra. Escucha como cantan los angeles, pero los pastores estan ocupados dividiendo atomos y los magos estan en la escuela de administracion de empresas, y nadie quiere escuchar. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 67 9/24/2013 12:36:09 PM 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 68 9/24/2013 12:36:09 PM Capitulo 9 Desayuno en el Modern si que llevé a mi amiga Britta al Modern Café, el bar donde yo habia tenido mi epifania del burro loco, segun la cual los mila- gros son posibles porque Cristo es la clave de la creacion. En parti- cular, este local de Minneapolis tiene una atmosfera clasica y aco- gedora. Un inmenso pez espada cuelga de una pared, y los muebles barnizados de color madera de cerezo hacen un fuerte contraste con las losas de color verde como la espuma del mar y con el tapizado. El encargado del bar recuerda tu nombre (y tu veneno favorito) después que lo has visitado unas pocas veces. Lo mas importante de todo es que los estratos de buen tocino con huevos fritos tienen mucho mas sabor que las comidas rapidas corrientes en otras ma- drigueras peores. Nosotros pedimos un par de desayunos al estilo de santas trinidades y nos sentamos, calentandonos las manos sobre las tazas de café. Estaba nevando afuera. El bar estaba repleto. Yo tomé un buen trago de café y me recosté en mu silla del bar. «Necesito que me des tu opinion sobre algo», le dije, levantando la mirada hacia el pez espada. «Adelante», me dijo Britta. «No sé donde voy a parar con esto. Tal vez a ninguna parte». Guarde silencio durante un minuto, tratando de poner en orden mis pensamientos. Queria escuchar realmente lo que Britta pensaba de todo aquello, porque es muy sabia. Esta en una escuela, estudiando 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 69 9/24/2013 12:36:09 PM 70 Guando los burros hablan italiano, francés, espafiol y un poco de portugués. Viaja por toda Europa con una camara y un diario, bebiendo el vino, aprendiendo los idiomas de las diferentes naciones, y consiguendo de alguna manera un titulo universitario al mismo tiempo. También sucede que se halla maravillosamente enamorada de Jesus, y nunca se siente satisfecha cuando de él se trata. Es una de esas jovenes que llevan consigo su Biblia dondequiera que van, y siempre la esta leyendo. No puede parar de hablar de Jesus y de la Biblia. Por eso la llamo cuando estoy pensando mas de la cuenta. Asi que le comencé a explicar que me habia estado preguntan- do si el cristianismo popular, de manera implicita y a veces también explicita, no estaria funcionando a partir de las suposiciones pre- vias del cientificismo de «Atomolandia». Con frecuencia tenemos teorias sobre «el Dios de los intervalos», como si el conocimiento comenzara por nuestros experimentos, y no con la revelacion de Dios. Le hablé acerca de mi teoria del burro loco y de que estoy orando por un santo renacimiento. Britta me escucho pacientemente, mientras esperabamos que nos sirvieran el desayuno. «Bueno, no sé», dijo cavilando, mientras tomaba unos cuantos sobres de azucar. «Cuando los cristianos nacen de nuevo, es po- sible que no despierten hablando francés y danzando como Buzz Lightyear. Por lo menos, los cristianos que yo conozco. La mayoria de ellos ni siquiera saben bailar. Pero si despiertan para ver el mun- do entero de una manera diferente, en especial nuestras ideas sobre el amor, el tiempo y la gente». «Por supuesto, tienes razon», le dije. «Pero aun asi, me pre- gunto si la cultura cristiana de hoy en general no habra aceptado la idea de que Dios vive en las margenes del mundo, donde el co- nocimiento cientifico disminuye. Es como si fuéramos secularistas en estado de negacion que nos estuviéramos recuperando. Todo lo que hacemos es afiadirle un tono sonrosado a nuestro secularismo secreto». «Eso me lo vas a tener que explicar un poco mas». El] encargado del bar nos volvio a llenar las tazas de café y yo volvi a poner en orden mis pensamientos. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 70 9/24/2013 12:36:09 PM Desayuno en el Modern 71 «Muy bien. Sigueme en esto, y mira a ver si lo que digo tiene algun sentido», comence. «Si Cristo no es nuestro punto de parti- da, lo tiene que ser algo que no sea Cristo. Por ejemplo, el Suefio Americano. Me parece que cuando nos olvidamos de que Jesus tiene aplicaciones practicas para todos los rincones de la vida hu- mana, (muchas veces de manera inconsciente) metemos a Jesus en una caja y seguimos adelante con “la vida real”, y con eso nos re- ferimos a nuestros autos, a Walmart, a los negocios que se acaban de fusionar, y cosas asi. Comenzamos a admuinistrar las iglesias como si fueran negocios, y no iglesias. Nuestros cultos de adora- c1on imitan la liturgia del megacentro comercial, o del espectaculo de medio tiempo del Super Bowl, no porque estemos tratando de alcanzar a la cultura, sino porque en realidad, nosotros somos la cultura. ;Tiene algun sentido lo que digo?» «Sigue hablando», me dijo. «Me pregunto si acaso algunos cristianos no pensaran que nuestras iglesias deberian ser pensadas como centros comerciales, porque ellos mismos en realidad piensan que Jesus es un produc- to que se puede mercadear, comprar y consumur. Me pregunto si algunos cristianos no admuinistraran nuestras iglesias como nego- clos, no porque el modelo moderno de administracion de empresas pueda ser util, sino porque creen que es un paradigma mejor para la iglesia, que el modelo eclesial de los apostoles y de la iglesia catolica historica». «En ese caso, {te estas preguntando por qué somos secularistas disfrazados de cristianos?», me pregunto Britta. «Exactamente», le respondi. «Carecemos de una vision santa», sigmo ella presionando so- bre el tema. «No tenemos imaginacion. No hay transformacion es- piritual. No...» «;No tenemos ninguna idea terrenal del cielo!» Britta penso por un minuto, revolviendo con lentitud su cafe, con las piernas cruzadas y un aspecto muy cosmopolita. «Bueno, si las cosmovisiones fueran /e café», dijo pensativa, «yo diria que una gran cantidad de personas entre nosotros los cristianos se han conformado definitivamente con lo barato. Por lo menos, el sabor 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 71 9/24/2013 12:36:09 PM 72 Guando los burros hablan mecanico de nuestro café esta cubierto por el del azucar y la crema. Por lo menos, nuestra cosmovision secular esta endulzada con un suplemento cristiano. Nosotros solo nos atrevemos a llamarlo el “Dios” sacarina». Precisamente en ese momento el encargado del bar nos trajo nuestros platos. «jLa sacarina es mi Dios!», dijo estallando teatralmente, mien- tras le hacia un guifio a Britta. Ella puso los ojos en blanco, y co- menzamos a comer. «Me parece que es una forma excelente de expresarlo», conti- nué diciendo yo, mientras abria mi servilleta. «Piénsalo. ;Cuantos sermones has oido acerca de “salvarse”, como quien esta compran- do un Seguro para el Alma?» «No han sido pocos», me dijo. «jHas notado alguna vez que suelen comenzar por la supo- siclon previa no expresada de que todo, desde las colinas de la Toscana hasta el cinturon de la constelacion de Onion, existe por su propia cuenta, sin Cristo? De no haber sido por el pecado, todo lo que hay en el mundo material seria estupendo. Pero a causa del pecado, Jesus viene volando, como un extraterrestre venido del es- pacio exterior, para salvarnos del pecado y de la “simple materia”. Se presenta el evangelio como si hubiera una separacion entre el cielo y la tierra, y Jesus fuera el puente». «Damos por supuesto que existe una separacion entre lo natu- ral y lo sobrenatural», aclaro ella, «como ti me estabas diciendo antes)». Yo asenti. «Pero ahora que lo pienso, cuando leo la Biblia recuerdo que nunca estan separados. Jesus no solo es mi Salvador, sino tambien mi Creador. Desde el comienzo mismo del Genesis, esta involucrado y activo en el mundo. Es como...» e hizo una pausa, en busca de la palabra correcta, mientras jugaba con el salero y el pimentero; «es como si lo santo estuviera acechando en todos los rincones; como s1 cualquier cosa pudiera ser una revelacion de la presencia de Dios». Britta saco su Biblia como si fuera sagrada. Su cubierta ba- rata de cartoné estaba ya destrozada. Entre Job y los Salmos se 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 72 9/24/2013 12:36:09 PM Desayuno en el Modern 73 veia sobresalir un plano del Metro de Paris. Abrio en Colosenses y leyo en voz alta: «Porque por medio de él fueron creadas todas las cosas en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, poderes, principados o autoridades: todo ha sido creado por medio de él y para él. El es anterior a todas las cosas, que por medio de él forman un todo coherente» (1.16—17). Yo parpadee. «En realidad, nunca lo habia pensado demasiado, pero para los cristianos todo lleva en si una dimension mas», fue su conclusion, mientras se la veia radiante. «Todo ha sido formado por Cristo. Jesus no es una especie de ocurrencia tardia. Es mucho mas que una sopa de pollo para el alma. Es el arquitecto de todo lo que existe, y el que lo ama todo. ;Sabes una cosa, Ty? Mientras mas leo la Biblia, mas comienza el mundo entero a parecerse a una mi- nibiblia; un capitulo dentro de la gran historia de Dios. Me miro fijamente a los ojos. «Bueno, {qué quieres?» «Quiero que los cristianos conozcan realmente el amor de Cristo y permitan que ese amor transforme por completo su manera de ver toda la realidad. Quiero que el evangelio se encarne en sus vidas diarias». «Yo también quiero lo mismo que tw». «{ Querrias orar conmigo para pedir un santo renacimiento?» «Lo voy a hacer». Y oramos alli mismo en el bar; oramos para pedir que no me- tiéramos nuestra fe en un compartimento separado, mi la convirtié- ramos en algo abstracto; para que Dios no se cansara de nosotros porque nos es dificil creer. Llano y simple. Directo y concreto. Me parece que Britta estaba en lo cierto al hablar de «una di- mension mas». Cuando no la reconocemos, nos perdemos la ver- dad sobre quién es Cristo, y como podemos ser metidos dentro de él; la historia de la entheosis, la divimzacion y la entrada de la humanidad en Dios. Olvidamos que nos podemos unir a la gran histona de la salvacion lograda por el Cristo crucificado y resucita- do. El es el Centro y la Circunferencia, el Principio y el Fin, nuestro Todo en Todo.! ;Es esto algo que nos debamos limitar a escribir en un letrero para el parachoques del auto y pegarlo en la parte trasera 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 73 9/24/2013 12:36:09 PM 74 Guando los burros hablan de nuestra furgoneta? Por supuesto que no; eso seria vulgar. Sin embargo, es algo con lo que si debemos sellar nuestro corazon de manera indeleble. Pablo dice: « Vuelvan a su sano juicio, como con- viene, y dejen de pecar. En efecto, hay algunos de ustedes que no tienen conocimiento de Dios; para vergtienza de ustedes lo digo» (1 Corintios 15.34). Con demasiada frecuencia, los cristianos creemos en Jesus, como si él fuera un lujoso adorno en un edificio forjado en otra cantera que no es la cristiandad. La piedra que rechazaron los constructores no se ha convertido en la piedra del angulo. Pero «si la esperanza que tenemos en Cristo fuera solo para esta vida, seriamos los mas desdi- chados de todos los mortales» (1 Corintios 15.19). Somos llamados a creer que Jesus es el Dios del universo, y no solamente un amable maestro de moral. Y somos Ilamados a convertirnos en tontos santos por Cristo. No nos debe importar lo absurda que le pueda parecer la fe en Jesucristo ala gente que vive en Atomolandia.? En una carta escrita en 1912, Albert Einstein escribia: «Mientras mas éxitos tiene la teoria de los quanta, mas infantil parece». A veces, mientras mejor sea la teoria, mas infantil parece. Al fin y al cabo, la palabra infantil solia significar «bendecida». A la sombra de la cruz, toda teoria se puede convertir en una theoria (de theds 0 zeds, Dios; n. del t.), el proceso de encontrarse con Dios, de contemplar la creacion a la luz del Creador, no solo a base de observarla atentamente en el labo- ratorio, sino por medio de la oracion contemplativa en el corazon. Las teorias pueden ser caminos hacia la ¢heosis, la union definitiva con Cristo. La theoria es posible porque Dios esta presente en to- das partes, aun en el mundo material, porque vivimos en un mundo en el cual los burros han hablado, y por donde una vez camino Jesus. «Podremos no hacer caso de la presencia de Dios, pero no la podemos evadir en ninguna parte», escribio C. 8. Lewis. «E] mun- do esta repleto de él. Dios camina de incognito por todas partes».’ Como mi amiga Britta, necesitamos buscar las palabras de Dios en el libro de texto que es la creacion. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 74 9/24/2013 12:36:09 PM Desayuno en el Modern 75 «Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los mios —afirma el Seiior—. Mis caminos y mis pensamientos son mas altos que los de ustedes; jmas altos que los cielos sobre la tierra! Asi como la Iluvia y la nieve descienden del cielo, yno vuelven alla sin regar antes la tierra y hacerla fecundar y germinar para que dé semilla al que siembra y pan al que come, asi es también la palabra que sale de mi boca: No volvera a mi vacia, sino que hara lo que yo deseo y cumplira con mis propositos». (Isaias 55.S—11) 9780829764277 Cuando los burros hablan_INT.indd 75 9/24/9013 12:36:09 PM 9780829764277_Cuando los burres hablan_INT.indd 76 9/24/2013 12:36:09 PM Tercera parte La coherencia de la creacion En la cual Stephen el filisteo y Tyler se preparan para la Navidad, y es posible conocerlo todo. Se puede confiar en la razon y la gente no tiene que andar «buscando» la verdad. La clencia moderna es tan antropomorfica y poética como la cien- cia medieval. La postura medieval no es especializada, sino que es integrada y holistica. Algunas veces el cristianismo toma un aspecto muy pagano, porque el paganismo es un cristianismo confundido. Comenzamos a contrabandear de los egipcios. 9780829764277 Cuando los burres hablan INT.indd 77 9/24/2013 12:36:09 PM 78 Guando los burros hablan El] maravilloso e inconcebiblemente intrincado tapiz es deshecho hilo tras hilo; cada uno de sus hilos es sacado, roto y analizado; y al final, hasta el recuerdo del disefio se ha perdido, y ya no es posible recordarlo. —Erwin Chargaff, Heraclitean Fire Los historiadores serios estan abandonando la absurda idea de que la iglesia medieval perseguia a todos los cientificos como brujos. Esta muy cerca de ser exactamente lo opuesto a la verdad. —G. K. Chesterton, Saint Thomas Aquinas 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 78 9/24/2013 12:36:09 PM Capitulo 10 éSe puede confiar © en la razon? _K. Chesterton dijo en una ocasion que es imposible disfrutar de nada sin humildad... pero que hoy en dia tenemos una mane- ra equivocada de ser humildes. «Se suponia que el hombre dudara de si mismo, pero no dudara de la verdad; esto ha terminado siendo exactamente lo contrario. Hoy en dia, la parte del hombre que el hombre no reafirma es precisamente la parte que no deberia rea- firmar: él mismo. La parte de la que duda es exactamente la parte de la cual no deberia dudar: la Razon Divina».! Mi generacion de adultos jovenes tiende a pensar que la verdad va y viene a su an- tojo, Y por eso creemos en nosotros mismos. No sabemos qué es cierto, ym siquiera sabemos de qué manera averiguar qué es cler- to. En realidad no sabemos lo que es verdaderamente valioso. No sentimos que nada sea realmente digno de confiar mas alla de noso- tros mismos, lo cual significa que no nos queda otra cosa mas que nuestra propia persona. Por eso pensamos que es tan importante triunfar, o no tener nada de qué lamentarnos, o estarnos moviendo siempre «en una direccion positiva». Esto se manifiesta en nuestra vida diaria de las maneras mas extrafias.” Por ejemplo, hoy en dia, los adultos jovenes nos imaginamos que en algim momento futuro superaremos la Primera Fase de la vida adulta —una fase salpicada de viajes, fiestas, encuentros y adquisicion de dinero— y por fin nos asentaremos en la Segunda 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 79 9/24/2013 12:36:09 PM 80 Guando los burros hablan Fase, en la cual nos casaremos, tendremos hijos, nos dedicaremos a una profesion seria, compraremos una casa o un condominio y co- menzaremos un estilo de vida de consumidor masivo al estilo de la clase media, con todos los acompafiamientos adecuados de perros y amigos y autos y televisores. Casi no se habla del cuidado de los nifios o de los ancianos, o de un cuidado general de nuestras comu- nidades, y ciertamente, m se menciona la idea de servir a Dios, o de descubrir la verdad y servirla. No pensamos en funcion de una madurez o responsabilidad o deber, sino en funcion del éxito y de nuestra propia realizacion. La idea es que si yo me establezco, yo sere capaz de hacer lo que vo quiero hacer en la Segunda Fase. Y asi, estamos obsesionados con nosotros mismos, y nuestras actitudes individualistas y consumistas les dan forma a nuestra fi- losofia y a nuestra manera de verlo todo en la vida. No hay hecho, verdad elevada, realidad objetiva m ley que sea independiente de nuestra experiencia personal subjetiva. Nuestra imaginacion esta enturbiada por una profunda confusion e incertidumbre acerca de lo que es objetivamente correcto e incorrecto, o bueno y malo. iComo es posible que exista una verdad identificable y objetiva, Sl somos incapaces de conocer nada que se halle fuera de nosotros mismos? Al fin y al cabo, ;no es la verdad otra cosa mas que una convencion social que recogemos de nuestros padres? {Qué tal si otros hijos de otras culturas creen en otra verdad distinta? La idea es que todo lo que es verdadero, lo es para la gente, porque la gente lo hace verdadero a base de creer en ello. Pero me imagino que G. K. Chesterton responderia que lo verdadero es verdadero porque es objetivamente verdadero, tanto si nosotros creemos que lo es, como sino lo creemos. Cuando de creencias se trata, mi generacion es lo que siempre hemos sido: clientes. Pero somos tan indecisos y tan veleidosos, que en realidad nunca hacemos nuestro nada: nin- gun bien mas alto, ninguna religion; m siquiera nosotros mismos. Si no hay Dios, toda la moral es subjetiva y arbitraria e interna. No estoy tratando de demostrar la existencia de Dios, pero si estoy tratando de ser razonable y coherente. No quiero fingir que vivimos en un mundo que es caotico y carece de sentido, cuando todos los dias vivimos como si tuviera sentido y estuviera en orden. 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 80 9/24/2013 12:36:09 PM éSe puede confiar enlarazon? 81 Bertrand Russell hizo famosa su afirmacion de que una persona es «producto de causas... Su origen, su crecimiento, sus esperanzas y temores, sus amores y sus creencias, solo son el resultado de unas colocaciones accidentales de atomos».? En otras palabras, los seres humanos son algo asi como catastrofes, colisiones, casualidades fortuitas. Las sinfonias de Beethoven y los dramas de Shakespeare; todo abrazo de amor y toda muerte de un martir solo son felices choques de atomos, leves accidentes en un universo de leves acci- dentes. Aunque no hay un atomo de prueba de que Dios hiciera el universo, tampoco hay manera de probar que no lo nzo. Sin em- bargo, dondequiera que miramos, hallamos sugerencias, pistas en cuanto a cual de las dos cosas es la mas probable. Por ejemplo, no es poca cosa el hecho de que vivamos en un mundo, y no en un caos. Mientras mas aprendemos, mas vemos que nuestro universo no es caotico, sino que es ordenado, tiene patrones y disefios, tiene sentido y cumple un proposito. Por eso nos sentimos bien fabricando puentes y pescando en el hielo. Si el mundo no fuera un mundo, sino un caos, no nos atreveriamos a cru- zar un puente, porque los ingenieros no podrian confiar en la fisica, mi tampoco a estar en pie sobre un lago congelado, porque se podria derretir de forma instantanea hasta alcanzar los —10° centigrados. Todo razonamiento cientifico inductivo sugiere que el hielo de ma- fiana se derretira a temperaturas superiores a los 0° centigrados bajo las condiciones reinantes hoy. El razonamiento inductivo no pue- de demostrar que esta regularidad de la naturaleza va a continuar; solamente lo puede aceptar en buena fe, porque es algo razonable. S1 la «razon» es simplemente un choque accidental de atomos y de sinapsis retorcidas, clertamente, no se puede confiar en ella. Para que nosotros podamos evaluar la razon, incluso para evaluar el ra- zonamiento inductivo que se produce en el laboratorio cientifico, la razon misma debe estar por encima de la naturaleza. Debe proceder de otra fuente que no sea un estallido, por grande que sea. Al igual que los argumentos a favor de Dios, la interpretacion segun la cual la ética, el amor, el bien y el mal son todos una adap- tacion para la supervivencia de la especie tampoco se puede de- mostrar m rechazar. Sin embargo, a diferencia de los argumentos 9780829764277_Cuando los burros hablan_INT.indd 81 9/24/2013 12:36:09 PM

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