¿Porque la Maldad del Hombre Radica en su Corazón?

Primeramente para explicar la pregunta anterior primero debemos saber, ¿Qué es Maldad?
Sinónimo de pecado cuyo sentido más se asemeja al concepto de un mal radical, demoniaco
e insensato arraigado en el corazón del hombre.

Ahora bien encentrándonos en la pregunta en controversia partimos de la causa de tal

maldad, la cual es proveniente de personas que han sido marcadas en sus años de infancia,
por falta de amor, atención, educación, valores, en la mayoría de los casos; Esto causa en la
persona el desprecio a la vida y a su vez transmitiendo hacia los demás envidia, egoísmo,
odio entre otras. Cuando la maldad radica en el corazón del hombre esta sujeto a cambios
en todo momento tanto físicos como emocionales, lo cual hace de la persona en la mayoría
de los casos un peligro a la sociedad o para si mismo, ya que ha habido casos que la
persona se odia así mismo, tomando decisiones autodestructivas en donde mutilan su
cuerpo o simplemente se quitan la vida; Pero esa no es la decisión correcta ante los
problemas.

En el aspecto religioso, en muchos de los casos se tratan de justificar acciones negativas,

adjudicando la culpa a Dios, pero el problema no es Dios somos nosotros, porque Dios nos
permite tener libre albedrio, ósea que el nos permite que camino escoger en la vida. Las
posturas sociales, culturales o religiosas (algunas) dan lugar a la maldad, pero el poder del
hombre de hacer el bien o el mal radica en su corazón. El hombre no nace con maldad, sino
que la va adquiriendo al dejarse vencer por la concupiscencia, que es el apetito
desordenado de placeres deshonestos, es una inclinación hacia lo malo.

La maldad crece en nuestros corazones cuando nos alejamos de Dios cuando, no utilizamos
la inteligencia emocional para combatir los problemas o para perseverar ante situaciones
difíciles, ósea esto es la vitamina que te mantiene con vida. A parte a esto también se
pueden experimentar cambios sentimentales, los cuales se pueden componer de, Tristeza,
Depresión, egoísmo, afectando a su vez la salud.

La tentación hacia sus deseos, a veces no pueden ser reprimidos y realizan sus actos de
forma desenfrenada y sin control. En fin la maldad del hombre radica a causa de que
dejamos a Dios a un lado y nos olvidamos de el. A causa de que no perdonamos, o
simplemente no damos el primer paso.