- p ee LACORRUPCION E IMPUNIDAD Y POR LA SOBERANIA NACIONAL ‘Como parte de los pueblos, comunidades y organizaciones del pueblo de Guatemala, que de forma ordenada, pacifica y de buena fe, nos hemos manifestado expresando nuestra indignacion y rechazo ante la ruptura democratica, la violacion a la ‘Constitucién y el rompimiento del Estado de Derechos por los inaceptables hachos de corrupcién cometidos por parte de las més altas autoridades del organismo ejecutivo, empresarios corruptores y los politicos. corruptos que han violentado las mas ¢elementales normas éticas, en particular al violar el juramento de cumplir y hacer cumplir la Constitucién de la Replica y las leyes de Guatemala. Con la misma indignacién con las que nos hemos manifestado, ahora también queremos expresar nuestro rechazo, condena @ indignacién ante las supuestas “soluciones" que se estén impulsando por parte del Ejecutivo y el Legislativo: 1.Rechazamos las medidas intervencionistas y de violaoién a la soberania nacional aoeptadas por el Sr. Pérez Molina ¢ im- pulsadas por el embajador norteamericano en relacién a que el Departamento de Estado y el Departamento del Tesoro “co- laboraran’ con la SAT. Recordamos que histéricamente en América Latina, el control de las aduanas y los érganos encarga- dos de la recaudacién de impuestos fue el primer paso para mayores medidas de intervenoi6n. La vinculaci6n de la actual Ministra de Gobernacién con la DEA, el despliegue de efectivos militares norteamericanos en Guatemala y la dotacién, equi- pamiento y entrenamiento de las Fuerzas de Tarea Conjunta Maya-Chorti en la frontera Guatemala-Honduras y la Fuerza de Tarea Tecin Uman en la frontera Guatemala-México es parte de este crecients intervencionismo. Traemos a la memoria que la llegal intervencién de Estados Unidos en el derrocamiento del Presidente Jacobo Arbenz en 1954, maroé la historia de nuestro pais y nos hizo entrar en una oscura noche de dolor y represion de la que no terminamos de salir. Por este condenable papel fue que 1999, el entonces presidente de Estados Unidos, Bill Clinton se disculpo por el rol de su pais en las mas de tres décadas de represién en Guatemala, expresando que “los Estados Unidos jamés deberian de repetir ‘88¢ error, y en cambio continuarian brindando apoyo al proceso de paz y reconeiliacion en Guatemala." Sin embargo, e! apoyo que el embajador estadounidense Todd Robinson brinda al gobierno corrupto de Otto Pérez Molina, no puede ser interpretado como algo més que una nueva injerencia en los asuntos politicos del pais y como un paso en contra de la paz y reconeciliacién que tanto se busca. En Guatemala, no puede existr paz sin usticia, y no puede haber democracia, sin la voz del pueblo, y el pueblo de Guatemala pide la renuncia de Otto Pérez Molina. Si los Estados Unidos en realidad tienen la intencién de ayudar a los procesos de cambio y de democratizacion, deben apartarse, no intervenir y dejar que el clamor popular sea escuchado. La intervencién de Estados Unidos no busoa el bien de la poblacién de Guatemala, sino es por la defensa de sus propios in- tereses que ahora tratan de imponer a través del Plan Alianza para la Prosperidad que fue elaborado en forma excluyente, im- positiva y Gnicamente consensuado con el sector empresarial que vela por sus individuales iv intereses.le) yl 75) ei SQCIALY ’ PY 2.Reiteramos la legitima demanda del pueblo de Guatemala, por la renuncia y enjt miento del militar Otto Perez Molina y ‘su anacrénico vicepresidente, instalandose en su lugar un gobierno de transicién como Gnica salida para resolver la crisis actual ya que son las autoridades en los tres poderes del Estado los que crearon y generaron la situacién por la que actualmente atravesamos. Por ello demandamos que se convoque ala conformacién de una asamblea nacional constituyente plurinacional y popular que dicte los contenidos de una nueva Constitucién que permita la reforma integral del Estado por el cuales estamos luchado que a través de las diferentes movlizaciones sociales los guatemaltecos y guatemaltecas hemos demandado. 3.Hacemos un llamado a todas las fuerzas sociales, insttuciones de educacién superior, iglesias de todos los cultos y a la sociedad en general a profundizar las medidas de movilizacién hasta lograr la democratizacion de las estructuras politicas, sociales y econémicas de nuestro pais. 4.Condenamos la criminalizacién de la protesta social que en los titimos dias se ha expresado en la intimidacién y represién La Puya, la movilizacion de mas de 50 patrullas, buses y camiones de la fuerzas gubernamentales contra las comunidades de la Laguna del Tigre, las agresiones en contra de las comunidades de San Juan Sacatepéquez, la captura anémala del lider de Barillas Bernardo Ermitafio Lopez y los demas hechos que se han producido en estos dias. La maquinaria de represion impune para garantizar los negocios corruptos funciona contra los lideres, comunidades y pusblos que defienden sus derechos colectivos. 5.Rechazamos la instalacién de las mesas técnicas de analisis y estudio de las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Politicos, Ley de Contrataciones del Estado, Sector Justicia y Ley del Servicio Civil, en primer lugar porque los congresistas no tienen legitimiad dado que ellos son corresponsables de las violaciones y estancamientos en las reformas a las mencion- ‘adas leyes y porque han sido coparticipes, por accién u omisién, de los graves hechos de corrupcién que nos han indignado. ‘Ademas no existe en la legislacién la figura de “mesas*, sino ‘nicamente de audiencias que por experiencias anteriores sabemos que no son vinculantes ya que los diputados terminan haciendo lo que les viene en gana y resulta mejor para sus intereses. Esa instalacion es un intento de darle aire a un Congreso altamente cuestionado y Gnicamente buscan desviar y ‘evadir la solucién que la poblacién esta demandando: la renuncia del presidente y vicepresidente, asi como la depuracién del Congreso y el Organismo Judicial. Por lo mismo llamamos a no legitimar al Congreso de corruptos y violadores de la ley. ASAMBLEA SOCIAL Y POPULAR 03 de junio de 2015.