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Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura, 2009, Vol. XV, No. 2 (jul-dic), pp.

Nn-nn
recibido: 10-11-09 / arbitrado: 10-11-09

VERDADES Y CERTEZAS EN TORNO A LOS MITOS Y


ENREDOS EN EL DISCURSO ECONÓMICO DE LA
COYUNTURA.

Oscar Viloria Hernández1


ESCUELA DE ECONOMÍA, UCV
La fortaleza y la estabilidad de toda estructura están sujetas a la solidez
de las bases donde descansa y jamás al vacío que la rodea.

Resumen: Prácticamente, verdades y certezas viene a ser la continuación del artículo


“Macroeconomía y modelos de simulación. El corto plazo”, publicado en 2007 (n.1), por esta
misma revista. En el presente, se estudia el problema y las consecuencias que devienen de los
escenarios macroeconómicos en donde los horizontes del corto plazo y la crisis a largo plazo
coinciden y, por lo tanto, los reparos de los desequilibrios de corto plazo son una condición
necesaria para el tránsito hacia el estado estacionario y el crecimiento sostenido de largo plazo,
y este último, el requisito para el equilibrio estable en los mercados de corto plazo. En otras
palabras, los correctivos de corto plazo deberán irse constituyendo, casi al mismo tiempo, en las
fortalezas económicas que exige el crecimiento a largo plazo, que no es más, que el aumento
progresivo y oportuno de las productividades factoriales. En tal sentido, los desarrollos y
formulaciones teóricas, y las simulaciones, han sido expuestos en razón de las siguientes
aseveraciones: (1) A corto plazo no existe programa económico alguno que repare la pérdida de
valor acumulada por el signo monetario; (2) Entretanto, una brecha entre los valores reales
nacional e internacional de la moneda solo puede corregirse a mediano plazo mediante el reparo
a las pérdidas de productividad; (3) Reparar las pérdidas de productividad exige minimizar las
filtraciones al gasto interno, y para ello, tener control sobre las fuentes de perturbación y de
distorsión, nominales; (4) Pero además de la corrección monetaria, el control sobre las fuentes
de perturbación y de distorsión nominal también exige la estabilidad de las fuentes de base
monetaria; (5) Finalmente, el reparo a la pérdida de productividad también exigirá cambios en la
estructura de la producción interna.

Palabras claves: Coyuntura económica, corto plazo, largo plazo, “entropía” monetaria,
“entalpía” productiva, corrección monetaria, estructura de la producción.

Básicamente, de las acepciones que la real academia española reserva para


los vocablos verdades, certezas, mitos y enredos, las siguientes son las que dan
un sentido único al título del artículo:
- Verdades: Propiedad que tiene una cosa de mantenerse siempre la misma
sin mutación alguna. Juicio o proposición que no se puede negar
racionalmente.

1
oscarviloriah@yahoo.es
2 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

- Certezas: Conocimiento seguro y claro de algo. Firme adhesión de la mente


a algo conocible, sin temor de errar.

- Mitos: Persona o cosa rodeada de extraordinaria estima. Persona o cosa a


las que se atribuyen cualidades o excelencias que no tienen, o bien una
realidad de la que carecen.

- Enredos: Engaño, mentira que ocasiona disturbios, disensiones y pleitos.


Confusión de ideas, falta de claridad en ellas.

En tal sentido, “verdades y certezas…” ensaya un conjunto de ideas de difícil


cuestionamiento racional que, sin temor a errar en sus deducciones y
exposición, con una firme y rigurosa adhesión a los principios de la teoría
económica y de los métodos cuantitativos en que se apoya…

Ahora bien, si buscamos una referencia sobre la visión clásica del equilibrio
macroeconómico y su alcance dentro de las políticas y la planificación
macroeconómica, en la teoría general… de Keynes encontramos lo siguiente:

“Sostendré que los postulados de la teoría clásica sólo son aplicables a un


caso especial, y no en general, porque las condiciones que suponen son un
caso extremo de todas las posiciones posibles de equilibrio. Más aún, las
características del caso especial supuesto por la teoría clásica no son las de
la sociedad económica en que hoy vivimos, razón por la que sus
enseñanzas engañan y son desastrosas si intentamos aplicarlas a los
hechos reales.”

(Keynes, 1936)

Si quisiéramos disponer de argumentos que apoyen la hipótesis de que la


menor calidad de vida observada por los países con menor ingreso por
habitante, viene determinada por los fallos de mercado y probablemente, con
una mayor influencia, por los fallos de gobierno2 en términos de la administración
y la planificación: , encontraríamos en la misma obra, la exigencia de:

“huir de la tiranía de las formas de expresión y de pensamiento habituales.


Las ideas aquí desarrolladas tan laboriosamente son en extremo sencillas y

2
En el caso de la economía venezolana, la hipótesis de que en la misma la
productividad media de las actividades no petroleras en el sector de los transables
se ha hundido y puede permanecer así, como la consecuencia desproporcionada
de la conjugación de ambos “fallos”, en relación con la ausencia de políticas de
largo plazo y la inefectividad de las políticas públicas de corto plazo y su
instrumentación convencional.
Verdades y certezas... 3

deberían ser obvias. La dificultad reside no en las ideas nuevas, sino en


rehuir las viejas que entran rondando hasta el último pliegue del
entendimiento de quienes se han educado en ellas, como la mayoría de
nosotros.”
(Keynes, 1936)

Y al mismo tiempo, haríamos referencia a lo siguiente:3

“… debates que se dicen científicos sobre la política económica están


deformados con frecuencia –algunas veces deliberada e intencionalmente- por la
participación de los mismos economistas en el proceso político. La proclamación de
verdades políticas desagradables se convierte en invitación al asesinato de carácter
pseudo-científico, mientras que la invención de teorías denominadas
descaradamente <<heterodoxas>> (boldly unorthodox) que pretenden derogar las
leyes económicas porque entorpecen el camino a los deseos de los políticos de
maximizar la utilidad de su función política, sin referirse a la recta de balance
económica, se convierte en una avenida de progreso profesional. De todos modos,
son cosas de la vida con las que los economistas estrictamente científicos deben
aprender a convivir, con la esperanza de que algún día o, a la larga, la verdad
prevalecerá de un modo u otro.”
Harry G. Jonson, 1978 Inflación, revolución y contrarrevolución
keynesiana y monetarista

Si buscamos una explicación al crecimiento del desempleo y del empleo


improductivo cuando la produción interna crece, encontraremos:

“Del mismo modo, la ocupación puede bajar sin que haya ocurrido ningún
cambio en la demanda total, si la dirección en el lado de la demanda se
modifica en favor de los productos que tienen una elasticidad relativamente
baja de ocupación.” (Keynes,
1936)

Si nos viésemos forzados a fundamentar las ideas expuestas en el presente


ensayo, primero apelaríamos a los principios y fundamentos del pensamiento
económico originario de las escuelas clásica, neo-clásica, keynesiana y
monetarista; y al mismo tiempo, advertiríamos tal como en 1962 expresaba
Harry G. Johnson:

“… debo empezar con la advertencia de que lo que voy a presentar aquí no


constituye un punto de vista unánime de un grupo representativo de
economistas, sino que se trata mas bien de mis propias opiniones. Aunque
he obtenido estas opiniones en la literatura existente sobre el desarrollo y
teoría económica, no puedo decir que el resultado obtenido constituya una

3
<<boldly unorthodox>>: “audazmente poco ortodoxo”
4 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

exposición autorizada de la posición presente de la economía en esta


materia. Las causas fundamentales del crecimiento económico no son un
aspecto del que los economistas se hayan preocupado mucho en el pasado,
ni constituyen hoy materia respecto a la cual sean los economistas los más
idóneos para ocuparse de su elaboración y de su técnica. Sin embargo, lo
elegido aquí no los las causas del desarrollo económico, sino la planificación
y el mercado en el desarrollo económico.” Harry G.
Jonson, 1978

Si quisiéramos encontrar un argumento que apoye a la tesis neoclásica de


que dada la homogeneidad y sustituibilidad factorial, la productividad del factor
trabajo dependerá mayormente de la mejor o peor asignación de los recursos
humanos, que del propio proceso de formación de los capitales físico y humano:

“…cualquier aumento de la cantidad de dinero no tendrá el menor efecto


sobre los precios mientras haya alguna desocupación, y que la ocupación
subirá exacta-mente en proporción a cualquier aumento de la demanda
efectiva producida por la elevación de la cantidad de dinero;…”
(Keynes, 1951)

Y en el caso contrario, cuando los recursos no son homogéneos y no son


sustituibles, por ejemplo, un significativo el empleo informal, representativo del
desempleo estructural:

“los cambios en la cantidad de dinero sobre la magnitud de la demanda


efec-tiva; y el crecimiento de ésta irá, en términos generales, a aumentar la
cantidad de ocupación y a elevar el nivel de precios.”
(Keynes, 1951)

Y esta viene a ser la reflexión más clara y directa que pone de manifiesto las
debilidades presentes en los desarrollos teóricos sobre las causas de la inflación
reducidas a un problema presupuestario, cuando el escenario interno de
desajustes monetarios persistentes coexistiendo y acentuando las asimetrías en
las productividades sectoriales de la economía real.

I.- A CORTO PLAZO, NO EXISTE PROGRAMA ECONÓMICO QUE REPARE LA PÉRDIDA DE


VALOR REAL ACUMULADA POR EL SIGNO MONETARIO

Básicamente, las monedas nacionales reservan dos valores simultáneos en


términos de su capacidad para ser intercambiada por bienes y servicios.

El primero es su valor interno, referido a su poder de compra de la


producción nacional. Mientras que el segundo, su valor internacional, se refiere a
Verdades y certezas... 5

la tasa en que esta puede ser intercambiada por moneda extrajera, es decir, por
divisas. En el primer caso, su valor está determinado por el nivel medio de
precios y su variación, por los cambios de este último; siendo la medida de su
valor igual al inverso del nivel medio de precios, 1/P.

Un cambio aislado en el valor del dinero, genera cambios en su capacidad


de compra, mas en unos vienes que otros.

No obstante, si esos cambios son recurrentes, entonces en fenómeno se


traduce en una fuente de perturbación e inestabilidad económica generalizada.

De ahí entonces, la importancia que cobra el estudio de los determinantes


del valor del dinero, y para algunos, su teoría cuantitativa moderna: M.V = P.Q;
la cual señala, en su acepción mas básica, que el valor global (interno e
internacional) de los medios de pago en poder del público depende del importe
efectivo de los sectores de la produción interna para satisfacer oportunamente
las necesidades locales y las del resto del mundo:
mSt + Mt = DAIt + Xt;
mSt: Capacidad real de gasto interno [(MSt . Vt) / Pt]

De donde se desprende que mientras mayor sea la demanda de


exportaciones para un nivel de produción determinado, el déficit de oferta en los
mercados internos exigirá una mayor demanda de importaciones.

Pero, de existir restricciones cambiarias, no será posible “llenar el vacío” que


dejan en el mercado interno las capacidades de producción dirigidas a satisfacer
las necesidades del resto del mundo, y este déficit global4 interno será la
contribución definitiva y forzosa para la determinación de un nivel medio de
precios cada vez mayor, la perdida de valor interno del signo monetario en
proporción al cambio de los precios y la apreciación5 recíproca del valor del
dinero en los mercados externos.

Luego, siguiendo dentro de este orden, las fortalezas del Banco Central de
Venezuela, del sistema financiero nacional y la moneda nacional, no descansan
sobre el nivel de reservas internacionales netas que el primero acumula,
administra y custodia.

4
Producción interna e importaciones, indeficientes para la satisfacción
oportuna de las necesidades finales internas.

5
Se obvia el régimen y esquema cambiarios, ya que en presencia de
restricciones cambiarias a las importaciones, ambas vienen implícitas.
6 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

En el caso de la autoridad monetaria su fortaleza la determina el desempeño


de los sectores de la economía real que son fuente fundamental de divisas, y de
sus recíprocos cuya producción deficitaria de bienes transables los convierte en
el germen de los desequilibrios cambiarios.

En otras palabras, la fortaleza inter-temporal del BCV depende, en igualdad


de importancia:
• Del desempeño relativo entre los sectores Petrolero y Transable No-
Petrolero, de la producción interna.
• De las restricciones al desempeño de los sectores Transable No-
Petrolero que imponen las productividades asimétricas de los sectores
Transable y No-Transable, que favorecen a este último;
• De las asimetrías medidas en término de la razón entre las elasticidades
de los sectores Transable y No-Transable con respecto a los desajustes
nominales de la economía interna; y,
• De los desajustes nominales crecientes, sobredeterminados por los
márgenes de elasticidad que, al ser cada vez mayor, favorece al sector
de los No-Transables (Gráficos 1 y 2).

Gráfico 1 Gráfico 2

NO_TRANS
12,000

10,000

8,000

6,000

4,000

2,000

0.0

0.2
Por su parte, la fortaleza de nuestro signo monetario depende remotamente
de un mayor o menor respaldo en la cantidad de reservas internacionales que
Verdades y certezas... 7

acumula el BCV.6 De hecho, bajo régimen de tipo de cambio fijo es todo lo


contrario:

La cantidad de reservas acumuladas será una función de la menor o mayor


brecha entre las fortalezas de la moneda en los mercados internacionales y
el mercado interno, y la relación entre esta brecha y la productividad media
interior en las actividades de los transables.

Cuando la brecha en su trayectoria diverge, mayor continuaran siendo los


desajustes nominales monetario-cambiario, menor el respaldo en reservas de la
liquidez monetaria, menor la productividad media de los sectores Transable No-
Petrolero y mayor la productividad en el sector de los No-Transable.

En tal sentido, un menor respaldo en reservas de la liquidez monetaria no es


la causa del debilitamiento interno del signo monetario, sino todo lo contrario, la
consecuencia.

Si no fuese así, el reparo al debilitamiento interno de la moneda sería


simple: la devaluación a un tipo de cambio, tal que, las reservas internacionales
netas den respaldo absoluto a la liquidez monetaria M2.

Esto último queda “reducido al absurdo” cuando:


• Se niega la premisa de que “un menor respaldo en reservas no
es la causa del debilitamiento interno del signo monetario, sino todo lo
contrario, es la consecuencia”;
• Y del análisis se alcanza la contradicción entre la convergencia
de la razón de respaldo en reservas [(e.RIN)/M2] con el tipo de cambio real
(tcr), y la pérdida adicional presente del valor real del bolívar. Tal
contradicción puede ser alcanzada por cuatro vías:
I. Como resultado de la devaluación cuando induce una mayor
razón de respaldo [(e.RIN)/M2] y una menor apreciación del tipo de
cambio real (tcr), ambas, acompañadas de la pérdida adicional de la
capacidad de compra presente del signo monetario;

6
Debido a que una unidad de Reserva Internacional puede intercambiarse por
monedas y billetes en circulación (pasivos de BCV), y por depósitos contables
generados por la banca comercial, los escenarios de desequilibrio monetario-
cambiario extremo exigen que el respaldo en reservas determinado por el tipo de
cambio nominal debe ajustarse a la cantidad de dinero M2, y no solo al efectivo y el
circulante.
8 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

II. Mediante la instrumentación de una política monetaria


contractiva cuando al reducir la liquidez monetaria determinará una
mayor razón de respaldo [(e.RIN)/M2], sin afección del tipo de cambio
real, ni reintegro real alguno de la pérdida por inflación:
III. Mediante una base de cálculo mayor para el “nivel de reservas
adecuadas” (si se quiere, inmovilizadas), tal que, una mayor razón de
respaldo [(e.RIN)/M2] sea determinada.
No obstante, las exigencias que derivan de esta vía (restricciones
cambiarias adicionales acordes con un coeficiente de importaciones
menor), distintas de una menor transferencia de reservas al FONDEN,
determinaría la profundización de la dualidad cambiaria y pérdidas
adicionales en el valor real del bolívar.
IV. Finalmente, la convencional que conjugaría la devaluación
“parcial”, la absorción monetaria, desmantelación del FONDEN y
menores restricciones cambiarias.
No obstante, este programa tampoco reintegraría las pérdidas
acumuladas, o una parte de ellas, por ingreso real.

De lo anterior, se extraen las siguientes implicaciones:


• Un mayor respaldo en reservas inducido por una devaluación se
traducirá en precios presentes mas altos;
• Por el contrario, el mayor respaldo en reservas que determinan
las operaciones de absorción monetaria, en condiciones normales, sustituye
parcialmente las presiones inflacionarias de demanda en el presente por
presiones potenciales sobre los precios futuros.
• En caso que los desequilibrios de balanza de pagos7
desemboquen en la trampa de la liquidez, las magnitudes de los agregados
monetarios harán del todo despreciable la capacidad de absorción monetaria
del BCV y la efectividad de la política monetaria.
• No resaltan elementos que permitan suponer algún vínculo entre
las correcciones monetario-cambiarias y la recuperación del ingreso real, al
menos en ausencia de fuerzas o variables exógenas al análisis monetario
extremo y de los mecanismos de ajuste de la balanza de pagos.
• En tal sentido, el vacío que presentan los mecanismos de ajuste
del respaldo en reservas con respecto al reparo de las pérdidas de ingreso
real, los reduce como extremos de la relación de intercambio entre la

7
Originados por rigideces y restricciones cambiarias.
Verdades y certezas... 9

inflación presente y presiones inflacionarias potenciales futuras, dado un


nivel medio de productividad de la economía.
• En los casos de una devaluación (I) o de la fijación de un nivel
de reservas internacionales adecuadas mayor que las presente (III), ambos
determinan el extremo de la función correspondiente a la “absorción cero” y
“máxima inflación presente”.
• El caso (II) corresponde al extremo de “absorción máxima” y
“menor presión inflacionaria presente” que resulta de la sustitución
intertemporal entre presiones inflacionarias de demanda presente (t) y una
inestabilidad potencial de precios futuros (t+i); i representa el plazo medio de
vencimiento de los instrumentos emitidos para la absorción monetaria.
• El caso (IV) sistematiza las infinitas combinaciones entre
inflación de demanda presente y las potenciales futuras, para un nivel dado
de productividad o, si se quiere, de capacidad de la economía real para la
transformación oportuna de la liquidez en mas bienes de consumo y de
capital.
Así, las magnitudes de respaldo en reservas estarán determinadas por la
resultante entre la absorción monetaria, la devaluación, el mayor nivel de
reservas internacionales adecuadas.
• Finalmente, la pendiente de la función medirá la relación
marginal de sustitución o intercambio entre las presiones inflacionarias de
demanda presentes y las potenciales futuras (Gráfico 3).
Por su parte, la pendiente de los vectores que unen el extremo de una
inflación máxima presente y cualquier otra combinación, las variaciones de
la inflación presente mide el cambio entre la inflación presente dado el nivel
de dinero absorbido.

Básicamente, del Gráfico 3 se desprende que en los escenarios con altas


presiones inflacionarias de demanda, por ejemplo la trampa de la liquidez, la
política monetaria resulta poco efectiva en términos de la magnitud de dinero
que debe retirarse de circulación y su bajo impacto sobre la inflación presente.

Mientras que en condiciones normales (presiones de demanda manejable)


las operaciones de mercado abierto alcanzan su mayor efectividad cuando el
intercambio entre una mayor y menor capacidad de gasto presente y futura,
dentro de plazos cortos, resulta en un mecanismo que reduce el impacto de las
perturbaciones que origina la estacionalidad de la oferta agregada interna.

Gráfico #3
10 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

Inflación
presente
πmax ?A
B
?

C
?

?D

E Inflación potencial
?
0
πmin futura

En el Grafico 4, la curva roja mide el nivel de respaldo en reservas, sin


devaluación, que se origina de la contracción monetaria necesaria para alcanzar
una inflación de 2% en 2013.

Al mismo tiempo, la curva verde es la misma medida de respaldo pero en


este caso el tipo de cambio nominal ha sido ajustado por la inflación.

Gráfico 4
(rin.e*)/m2 (rin.e)/m2 (rin.e*)/m2~ 4.3
4.5

4.0

3.5
3.0
3.0

2.0 2.5

2.0
1.4
1.2 1.5
1.8
1.0 1.7
1.6
1.4 1.0
1.2 1.2 0.9
0.7 0.5
0.4 0.5
0.3
0.3 0.0
2008 2009 2010 2011 2012 2013

En el primer caso, [(rin.e)/M2], el reparo al nivel de respaldo en reservas


para la liquidez monetaria, sustituye las presiones inflacionarias de demanda
para un nivel medio de productividad presente, por inestabilidad potencial a
futuro, sin aumento de la capacidad de compra presente.
Verdades y certezas... 11

No obstante, en el caso de [(rin.e*)/M2]el margen de respaldo creciente que


induce las devaluaciones sujetas a la inflación, sustituyen presiones de demanda
presente por su correspondiente a futuro, a partir de un nivel medio de precios
presente mayor, dentro de un escenario de presiones inflacionarias de costos
crecientes inducidos por la devaluación.

Finalmente, el mayor nivel de respaldo en reservas para M2 (curva negra),


inducido por devaluaciones sujetas a la inflación sin absorción monetaria,
[(rin.e*)/M2~], no habrá sustitución intertemporal de presiones inflacionaria de
demanda.

En este caso, toda menor presión de demanda sobre el sistema de precios


será el resultado del aumento de los precios presentes, determinados por la
presión de los costos de producción y mayor precio de los bienes importados
que inducen los ajustes por inflación sobre tipo de cambio nominal.

El Gráfico 5 registra como la relación M2/RIN converge hacia el tipo de


cambio nominal oficial (2150 Bs/US$) cuando la absorción monetaria para una
meta de 2% de inflación en 2013, se persigue a partir de un crecimiento del
producto de 5.5%.

Gráfico 5
TCN M2/RIN T.C.N. AJUST. (PPA)
12,000

9,663 9,858
9,472
9,013 10,000
8,110
8,000
6,432 7,779 6,450

5,347 6,000
4,666

3,279 4,000
2,305

2,000
2,150 2,150 2,150 2,150 2,150 2,150

0
2008 2009 2010 2011 2012 2013
12 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

En congruencia con el grafico de respaldo en reservas sin devaluación, el


coeficiente de respaldo de 0.93 para 2013 se corresponde con la razón M2/RIN
de 2,305.00 del gráfico anterior, para el mismo año, siendo el TCN oficial de
2,150 Bs/US$ para ese último año, igual a [0.93x(2,305.00)].

Ahora bien, si definimos como equilibrio monetario-cambiario el escenario en


donde las RIN respaldan todo M2, al tipo de cambio oficial, tal como se aproxima
el escenario planteado, aparece la interrogante de cuanto deberá ser el tipo de
cambio nominal que equilibre el tipo de cambio real.

Según el criterio de la PPA, la inflación acumulada de marzo de 2003 al


cierre de 2009 determina que los desajustes absorbidos como apreciación del
TCR tienden a (7,779 – 2,150) Bs/$, con o sin absorción monetaria.

No obstante, aunque ya se ha advertido sobre las consecuencias reales y


nominales de la devaluación, sobre los precios presentes y los potenciales
futuros, el mayor respaldo en reservas para una menor o igual cantidad de
dinero en poder del público no resuelve el problema del mayor poder de compra
en los mercados externos en relación a su correspondiente en el mercado
interno.

En teoría, el problema dejará de persistir cuando la contracción de M2 y las


menores presiones inflacionarias de demanda presente determinen que las
tasas de interés sean positivas, en cuyo caso, se vería estimulado el ahorro
interno en contraposición a la propensión media a importar registrada hasta
antes de instrumentar la contracción monetaria.

En síntesis, no existe vínculo alguno entre las políticas dirigidas a mejorar la


relación RIN/M2 y la recuperación del valor real de la moneda en los mercados
interno.

No obstante, el deterioro de la relación entre los medios de pago


internacional y los medios de pago interno determinaría pérdidas adicionales a la
capacidad de compra del bolívar en el mercado interno, por la vía de una mayor
presión de demanda cambiaria, la acentuación de las dualidades del tipo de
cambio nominal y, en consecuencia, la mayor inestabilidad de los precios
marcadores de largo plazo que dirigen las decisiones y el comportamiento de los
precios de corto plazo (IPC).

De hecho, existen solo tres mecanismos para inducir una recuperación de


las pérdidas acumuladas por ingreso real:
Verdades y certezas... 13

1. El aumento del ingreso nominal. No obstante, en condiciones extremas


como lo es la trampa de la liquidez, este aumento no determinara la
convergencia hacia los equilibrios.
2. La determinación de un proceso deflacionario en los mercados de
bienes consumo final. No obstante, esto puede ocurrir por dos vías: la
recesión prolongada o una expansión de la oferta que supere la
demanda presente, en cuyo caso, el aumento no planeado de los
inventarios en t determinaran un menor nivel de producción en t+i.
3. Finalmente, el sostenimiento de una tasa de crecimiento del PIB mayor
que la tasa de inflación: siendo esto posible una vez corregidos los
desajustes nominales y las productividades asimétricas presentes en la
estructura de la producción interna.

Siendo (3) el mecanismo mas lógico, la corrección de los desajustes


nominales demandará la actuación sobre M2, mientras que las asimetrías
sectoriales, el cambio en la estructura de la produción.

Las rigideces actuales son tan profundas que el circulante de 135,847 MM


de Bs. con un encaje legal de 17% podria respaldar hasta 5.05 veces su
magnitud como liquidez monetaria (M2).

No obstante, para la fecha, con una M2 que asciende a 220,635 MM de Bs.


(1.62 veces el circulante), la economía venezolana se encuentra sumergida
dentro de la trampa de la liquidez.

Este indicador sugiere que el tamaño de la economía interna, en su


capacidad de producción Primaria y Secundaria No-Petrolera, no se adecuo al
crecimiento nominal observado por el sector petrolero durante 2006-2008,
fenómeno que comienza a observarse, nuevamente, en el segundo semestre de
2009, sin que la economía real haya crecido.

II.- UNA BRECHA ENTRE LOS VALORES REALES NACIONAL E INTERNACIONAL DE LA


MONEDA, SOLO PUEDE CORREGIRSE A MEDIANO PLAZO MEDIANTE EL REPARO A LAS
PÉRDIDAS DE PRODUCTIVIDAD.

Solamente cuando la productividad factorial excede la tasa de inflación,


estaremos en presencia de un proceso capaz de recuperar la capacidad de
compra del signo monetario en el mercado interno.

Resulta del todo ilógico, contradictorio, la idea que la devaluación es la


medida que equilibra el valor real de la moneda, cuando se trata solamente de
inducir la perdida del valor internacional del signo monetario.
14 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

Luego, como fue señalado, las políticas dirigidas a corregir prolongados y


profundos desequilibrios monetario-cambiarios carecen de efectividad para
reparar simultáneamente las pérdidas de productividad acumuladas por los dos
primeros sectores de la producción interna y sus colaterales sobre el signo
monetario e ingreso real.

Entretanto, será solo a partir del crecimiento sostenido de la producción


transable no-petrolera, a una tasa mayor que la inflación, que sea posible el
reintegro progresivo de las perdidas acumuladas por el valor real de la moneda
en términos de sus capacidades de compra y de concentración de valor.

En el Gráfico 6 se aprecia el crecimiento de la brecha entre la producción


que agrega sector terciario y construcción, y la producción primaria no petrolera;
a medida que se aprecia el tipo de cambio real; fenómeno que también es
observado por la producción del sector secundario, deducida la construcción.

Por su parte, en el Gráfico 7 se verifica el margen creciente entre la


producción interna no-transable (terciario + construcción) y la producción
transable (secundario menos construcción), a medida que se acentúan los
desajustes nominales, medidos en términos de crecimiento de los saldos reales.

Gráfico 6 Gráfico 7

Tipo de Cambio Real vs. Sector No-Petrolero M2 Real vs. Sectores No-Petrolero
TERC + CONST SEC - CONST PRIMARIO TERC + CONST SEC - CONST PRIMARIO
10,000 10,000

9,000 9,000

8,000 8,000

7,000 7,000

6,000 6,000

5,000 5,000

4,000 4,000

3,000 3,000

2,000 2,000

1,000 1,000
SALDOS REALES
TCR (DESAJUSTE) 0
0
0

5,000

10,000

15,000

20,000

25,000

30,000
0.00

0.10

0.20

0.30

0.40

0.50

0.60

0.70

0.80

0.90

1.00

Básicamente, el impacto que sobre los precios tiene la expansión monetaria,


sin ajuste cambiario, determina las relaciones inversas que registra el GRAFICO
#6 y las relaciones positivas que se aprecian en el GRAFICO #7.
Verdades y certezas... 15

Los hechos, básicamente apuntan hacia la necesidad de identificar y romper


las rigideces que hacen inelásticos a una expansión de demanda, los sectores
primario y secundario de la producción interna, toda vez que las actividades del
sector de los servicios agregado a la actividad de la construcción parecen
“nutrirse” de los desajustes nominales que experimente la economía interna, al
tiempo que genera cantidades adicionales de de ese tipo de "nutriente".

En tal sentido, se establece como primera hipótesis que la recuperación


progresiva de las pérdidas acumuladas por el signo monetario e ingreso real
exige la aplicación deliberada de un programa de políticas públicas que impacte
sobre las estructuras económicas reales y financieras, tal que, desde el mismo
corto plazo se comiencen a observas cambios en las proporciones relativas
Inter. e Intra-sectorial, de la producción interna, en términos de la distribución
productiva de los excedentes.

Luego, fundamentar la hipótesis anterior exige de su universalidad en


términos tanto de corto, mediano y de largo plazo, macroeconómicos.
Yt = f(Kt, Nt, Lt, St, Ut); (1)

▲Y/▲t = yk, t.kt + yn, t.nt + yl, t.lt + ys, t.st + yu, t.ut

En donde,

yk, t.kt = ▲Y/▲K . ▲K/▲t (1.1)

. (1.2)
. (1.3)
. (1.4)

yk, t.ut = ▲Y/▲U . ▲U/▲t (1.5)

Al mismo tiempo, la dotación de factores económicos y no-económicos de la


producción se acoplan en una estructura sobredeterminada en (Y) y en (t),
constituyéndose en uno de los fundamentos de la desproporción probable entre
la producción y los insumos:
Kt = fK(Y, K, N, L, S, U, t); (2)

▲K/▲t = kY, t.yt + kK, t.kt + kN, t.n + kL, t.lt + kS, t.st+ kU, t.ut;
t

. (3)
16 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

. (4)
. (5)
Ut = fU(Y, K, N, L, S, U, t); (6)

▲U/▲t = uY, t.yt + uK, t.kt + uN, t.nt + uL, t.lt + uS, t.st + uU, t.ut;

La naturaleza heterogénea de cada uno de los grupos factoriales, y la


heterogeneidad dentro de cada grupo se puede resumir mediante la
siguiente estructura:
Kt = (K1, t K2, t, …, Kj, t); (2.1)

. (3.1)
. (4.1)
. (5.1)
Ut = (U1, t U2, t, …, Uj, t); (6.1)

Luego, la estructura que contribuye a identificar las virtudes y dificultades


presentes dentro del proceso de crecimiento económico, finito,
sobredeterminados por la multiplicación y aceleración, también finita, del
consumo de capital fijo, del capital humano, de los recursos naturales, del
cumplimiento de las normas y la eficiencia institucional, se resume a
continuación:

▲Y/▲t = Σ j (yk, j, t.kj, t) + Σ j(yn, j, t.nj, t) + Σ j(yl, j, t.lj, t) + Σ j(ys, j, t.sj, t) + Σ j(yu, j, t.uj,
t
); (7)

La expresión (7) establece que las variaciones experimentadas por el


ingreso, durante un período t, será igual a la suma de los aportes a la produción
total que hacen los grupos factoriales y, para cada grupo, las productividades
marginales de los factores heterogéneos multiplicadas por la dotación de cada
factor.

Ahora bien, además de la importancia que tiene dentro del análisis, las
productividad diferencial que resulta de la heterogeneidad y la especialización de
los factores económicos y no-económicos de producción en la determinación de
la productividad media de la economía en su conjunto, también resaltan las
Verdades y certezas... 17

diferencias entre la naturaleza de los sectores de la producción interna8,


primario, secundario y terciario.

Luego, este viene a ser el elemento fundamental que da sentido técnico a la


clasificación o diferenciación factorial en los grupos y subgrupos ya señalados, y
sentido económico, en términos de disponibilidad, calidad, proporcionalidad y
sustituibilidad, como los determinantes objetivos de los costos, la capacidad de
producción sectorial y la produción oportuna; y estos últimos, como la
materialización de las fuentes y los límites del crecimiento económico.
Finalmente,
Yt = (Y1, t + Y2, t + Y3, t) ≡ (Q1, t + Q2, t + Q3, t) = Qt (8)

Y rescribiendo (7) a partir de (8),

▲Y/▲t = Σ [Σ j (yK, i, j, t.kj, t) +Σ


i = 1..3 j
(yN, i, j, t.nj, t) +Σ j(yL, i, j, t.lj, t) + Σ j
(yS, i, j,
.s ) + Σ j(yU, i, j, t.uj, t)];
t j, t
(9)

Siendo i el i-ésimo sector de la producción interna, la expresión (9) se lee


igual que (7), agregando para los tres sectores de la producción interna.

En resumen, se tiene un modelo que sujeta el crecimiento de la producción y


del ingreso al desempeño conjunto de los tres sectores de la producción interna,
sobredeterminado por las variaciones intersectoriales de la productividad
factorial, la disponibilidad relativa de factores y su dotación oportuna.

Al mismo tiempo, el crecimiento queda sujeto a la capacidad y efectividad de


los factores no económicos de producción para incidir sobre los económicos, en
términos de dotación (corto y mediano plazo) y de productividad (largo plazo).

El corto plazo

8
A partir de este punto, el desarrollo presentado en este capítulo se separa de
la formulación de la estructura de análisis para los problemas del desarrollo
económico de Irma Adelman, quien prosigue dentro de un contexto alineado con el
análisis de I-O, mientras que el presente, se concentra en el comportamiento y la
evolución de las productividades de los sectores primario, secundario y terciario, de
la economía interna, cuyos desempeños individuales pueden ser fuentes de
estabilidad y crecimiento, o de distorsión y desequilibrio, global y sectorial.
18 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

A corto plazo, en ausencia de las restricciones del pleno empleo, el nivel de


producción física puede crecer mediante una dotación mayor de factores e
insumos. No obstante, a medida que la dotación de al menos uno de los factores
económicos de produción o de un insumo fundamental, se acercan a su pleno
empleo, será necesario la introducción de técnicas mejoradas para el mayor
aprovechamiento de los recursos disponibles, tal que, afecte la proporcionalidad
factorial dentro de un proceso de reasignación o mejora progresiva de la
asignación de los medios y recursos para la producción, para un nivel
tecnológico determinado.
Yt = f(Kt, Nt, Lt; αK, αN, αL); αK + αN + αL < 1 (10)

El largo plazo.

Paradójicamente, la solución de las fricciones que frenan el crecimiento


económico a corto plazo, viene a ser el primer paso para la determinación de las
condiciones y restricciones que han de complicar el proceso de crecimiento
sostenido de la producción física, poniendo en riesgo el mantenimiento de su
nivel por habitante, para una población cada vez mayor.

En contraste con la expresión (10), un escenario de pleno empleo con


eficiencia técnica, en donde la sustituibilidad perfecta de factores permita el
crecimiento de un sector a partir del retroceso de otro, puede modelarse como
sigue:
Yt = f(Kt, Nt, Lt; αK, αN, αL); αK + αN + αL = 1 (11)

αL = 1 – (αK + αN) = 1 – αK + N

Yt = f(K*t, Lt; αK + N, 1–αK + N); K*T = KT + NT (11*)

En consecuencia, cuando se está próximo al estado estacionario, la


disponibilidad de tecnologías con mayor output por trabajador será la respuesta
objetiva ante la necesidad de mantener el ritmo del crecimiento económico.

Se desprende entonces que a largo plazo, las restricciones al crecimiento


que imponen los rendimientos constantes a escala de una sustituibilidad perfecta
de los factores económicos de producción, que se expresa en las
productividades factoriales del capital y el trabajo, [αK + N] y [1-αK + N],
respectivamente, exigen la presencia de fuerzas exógenas a (11) y (11*)
capaces de determinar un nivel de producción física [Y+ t > Yt], en donde la
diferencia [Y+ t - Yt > 0] es la producción excedente a la misma dotación factorial
combinados bajo condiciones de rendimientos constantes a escala.
Verdades y certezas... 19

Y+ t = f(K*t, Lt; αK + N, 1–αK + N) + (Y+ t - Yt ); (Y+ t - Yt ) > 0 (12)

(Y+ t - Yt ) > 0 → Y+ t > Yt → Y+ t = Yt + λ.Yt; λ>0 (13)

Luego, de (12) y (13) se tiene,


Y+ t = f(K*t, Lt; αK + N, 1–αK + N) + λ.f(K*t, Lt; αK + N, 1–αK + N);(14)

Y+ t = (1 + λ).f(K*t, Lt; αK + N, 1–αK + N) (14*)

La expresión (12) y (13) señalan que si el nivel de produción física de una


determinada dotación de factores, es mayor que la esperada bajo rendimiento
constantes a escala, entonces la diferencia entre ambos niveles [(Y+ t - Yt ) > 0]
estará condicionada por factores ajenos a los de (11*).

Entretanto, (1 + λ) viene a ser el factor de crecimiento económico que


agrega a la producción física de pleno empleo y eficiencia técnica (rendimientos
constantes a escala), una cantidad adicional de producto determinadas por
factores exógenos a las productividades marginales y la dotación factorial;
reproduciendo en proporción mayor que uno a estos últimos, el ritmo de
crecimiento necesario para “evadir” los riesgos del estado estacionario:
(1 + λ) = [((αK + N) + (1–αK + N)) + λ]; λ>0

De donde se desprende que a largo plazo, el objetivo fundamental de la


política económica esta en mantener el pleno empleo, pudiendo ser λ el “escudo
contra la inflación”, en ese plazo.

Ahora bien, la efectividad de la política económica a largo plazo para


mantener la producción en el nivel de pleno empleo depende de la capacidad
que tenga la economía para determinar una productividad marginal media igual
a (1 + λ), siendo este el factor que mide los cambios mas que proporcionales en
la produción física cuando varía la dotación factorial.

El origen de los problemas que enfrentan las economías para crecer en el


corto plazo y una vez alcanzado el pleno empleo, va más allá del estado de los
factores económicos de produción.

Los límites y las fuentes del crecimiento económico dependen a su vez de


las condiciones materiales y no-materiales presentes dentro y alrededor de los
procesos económicos.

Estos condicionantes pueden ser un factor de impulso para un mayor


crecimiento (λ > 0) o lo contrario (λ < 0), pero jamás podrán ser neutral (λ = 0),
dado que este último corresponde solo a un instante, el del estado estacionario y
20 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

las restricciones que le son propias, determinando casi de inmediato el curso


que ha de seguir la economía, es base a un λ ≠ 0.

La expresión (14*) vale para los rendimiento constantes, crecientes y


decrecientes, a escala, y λ vendrá a ser una función variable cuyos
determinantes escapan de las dotaciones factoriales, ya que estos últimos se
encuentran en su plena utilización.

En tal sentido, siendo (1 + λ) el factor de crecimiento económico, mas o


menos que proporcional a la dotación de factores, y λ, la productividad que
estará determinada fundamentalmente por los factores no-económicos de
crecimiento, la función (1 + λ) vendrá expresada como,

(1 + λ) = f(St, Ut); (15)

Y (14*) puede rescribirse a partir de (15) como,


Y+ t = fS,U(St, Ut) . fK*,L(K*t, Lt, (αK*), (1–αK*)); (16)

St : Estado de la tecnología;9

Ut : Orden jurídico institucional;

La expresión (16) señala que a largo plazo los cambios en la productividad


media de la economía, ya sea para unos rendimientos crecientes o decrecientes,
a escala, están determinados por las actualizaciones tecnológicas adecuadas y
oportunas (St), además de las regulaciones de la economía y el desempeño de
las instituciones (Ut).

Finalmente, siendo St y Ut los factores no-económicos de influencia


económica capaces de inducir variaciones en la dotación factorial a corto plazo y
cambios en las productividades a largo plazo, estos actúan mediante la
determinación de las condiciones materiales fundamentales que vienen a ser,
finalmente, las fuentes y los límites al crecimiento económico:
• Distribución del ingreso
• Redistribución del ingreso
• Tipo de cambio real
• Libertad de comercio
• Tamaño, crecimiento y perfil poblacional (Transición demográfica)

9
Stock del conocimiento aplicado acumulado en la estructura de análisis de
Adelman.
Verdades y certezas... 21

• Políticas de cambio estructural


• Etc.

III.- REPARAR LAS PÉRDIDAS DE PRODUCTIVIDAD EXIGE MINIMIZAR LAS FILTRACIONES


AL GASTO INTERNO, Y PARA ELLO, ES NECESARIO EL CONTROL SOBRE LAS FUENTES DE
PERTURBACIÓN Y DE DISTORSIÓN, NOMINALES.

Básicamente, el efecto agregado del crecimiento potencial sectorial


asimétrico e “inter-desvinculado” que se observa en los Gráficos 1, 2, 6 y 7,
tienen entre su origen, la inelasticidad de la oferta agregada de los sectores
primario y secundario de la producción interna ante la expansión recurrente de la
capacidad de gasto interno, en contraste con el sector de los servicios y su
mayor capacidad para absorber excedentes.

S. PRIMARIO S. SECUNDARIO S. TERCIARIO


40%

30%

20%

10%

0%

-10%

-20%

SALDOS REALES (VAR)


-30%
-30%

-20%

-10%

0%

10%

20%

30%

40%

Luego, cuando la expansión nominal impide el crecimiento equilibrado de los


sectores Transables y No-Transables de la economía interna, será una demanda
de importaciones cada vez mayor el mecanismo de ajuste para los niveles de
Oferta y Demanda, globales.

En el Gráfico 9 se verifica la divergencia entre la elasticidad saldos reales de


la producción de Bienes Transables y la de los No-Transables.
22 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

Al mismo tiempo, se registra la mayor elasticidad de la demanda de


importaciones en cuanto a la producción interna de Bienes Transables.

TRANSABLES NO_TRANSABLES IMPORTACIONES


40%

30%

20%

10%

0%

-10%

-20%

SALDOS REALES (VAR)


-30%
-30%

-20%

-10%

0%

10%

20%

30%

40%

La formación y profundización de las asimetrías de oferta sectorial al tiempo


que los saldos reales se expanden, encuentra sus fundamentos en la teoría
cuantitativa moderna del dinero y en su extensión al modelo de absorción;
permitiendo afirmar que una demanda efectiva menor que la capacidad de gasto
interno tiende a resolverse con una desmejora de la cuenta corriente, en
términos reales.

Esto es,
MSt . Vt = Pt . Qt; (15)
Qt = Ct + It + Gt + (X-M)t; (16)

Luego, igualando la produción interna (Qt), a la demanda agregada interna


(Ct + It + Gt) mas las exportaciones netas (X-M)t, se deduce que todo exceso de
demanda global sobre la produción interna se resuelve con un volumen de
importaciones mayor por unidad de saldo real o capacidad de gasto interno
(MSt/Pt = mSt); relaciones macroeconómicas expresadas en:
Verdades y certezas... 23

MSt . Vt = Pt .[Ct + It + Gt + (X-M)t];


mSt.V = [Ct + It + Gt + (X-M)t]; mSt = (MSt/Pt)
V = [Ct + It + Gt + Xt - Mt] / mSt; (17)

En otras palabras, si la capacidad real de gasto mSt es “estructuralmente”


mayor que el gasto real efectivo [Ct + It + Gt + Xt - Mt], la situación conducirá, en
el breve y corto plazo:
1. Hacia una mayor demanda de importaciones y la desmejora de la cuenta
corriente;
2. Un mayor nivel medio de precios tal que la cantidad real de dinero
disminuya.
3. Nuevamente a (1) y (2), de repetirse las condiciones durante t+1.

En cualquier caso, el crecimiento de los precios internos dependerá de la


capacidad para reducir la brecha entre la producción interna y la capacidad real
de gasto con un volumen mayor importaciones, y este último, de las mayores o
menores restricciones presentes en el mercado cambiario.

Entretanto, un nivel medio de precios más alto en (t), determinará una menor
capacidad real de gasto, una demanda y produción, efectivas, potencialmente
menores durante (t+1) y, muy probablemente, la repetición de [Ct+1 + It+1 + Gt+1 +
Xt+1 - Mt+1] < mSt.

Ahora bien, la persistencia de un crecimiento monetario que supera el gasto


efectivo, solo puede determinar un resultado: la continua inestabilidad en todo
el sistema de precios.

Finalmente, v, la variable que mide la variación porcentual del margen entre


la produción efectiva (q) y los saldos reales (mSt), [v = q - mSt] será un estimador
de las filtraciones al gasto interno, interpretado como la razón entre el producto
nominal (P.Q)t y la oferta monetaria (MSt), o, la brecha porcentual entre la tasa de
crecimiento real de la economía (qt) y la oferta de saldos reales (mSt).

En tal sentido, para todo vt positivo, por ejemplo este permitirá estimar
cuanto del crecimiento monetario en t fue absorbido productiva (qt) y
nominalmente (pt).
24 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

A su vez, en caso que vt sea menor que cero, cuanto de la liquidez


monetaria adicional en t fue de uso ajeno a motivos transaccionales y, por lo
tanto, no se constituyó en presiones de demanda presente, adicionales.10

Cuando vt en negativa, los excedentes monetarios estimados en t, tenderán


a comportarse como perturbaciones monetarias continuas sobre los precios
presente; y de (17) se tendrá,

MSt + (vt .MSt) = Pt .Qt; (vt < 0)

MSt .(1 – vt) = (P.Q)t; (18)

De la expresión (18) se desprende que de existir persistir los desajustes


monetario-cambiarios, las filtraciones al gasto y a la producción interna que se
derivan de los primeros, encuentra una solución en la destrucción monetaria a
una tasa igual a vt la cual, recordamos, mide la brecha porcentual entre la
produción interna (qt) y la capacidad real de gasto (mSt).

Una simulación de lo anterior

Ahora bien, en el Gráfico 10 se observa una simulación del comportamiento


la estructura porcentual de la producción interna, no-petrolera, cuando se
establecen como escenarios meta y restricciones, para el período 2010-2013:

• Tasas de crecimiento del PIB real igual a 2.5%, 4.5%, 5.0% y 5.5%;

• Tasa de Inflación igual a 15%, 5%, 2% y 2%;

• Variación de las Reservas Internacionales Netas sujetas a la tasa de


crecimiento del PIB real;

• TCN oficial igual a 2.15 Bs/US$;

• Disciplina fiscal de 23.6% del PIB, distribuido entre gasto ordinario y de


inversión en la proporción observado en 2008 y estimado para 2009;

70%

65.7% 64.8% 64.9% 65.0% 65.1% 60%


63.6%
10
No obstante, esa sub-cantidad de dinero se traducirá en presiones inflacionarias
50% en
t+i, ya sea por la presencia de restricciones cambiarias y/o su consecuente presión sobre
otros mercados, de activos y bienes de uso durable. 40%
27.3% 29.0% 28.0% 27.9% 27.8% 27.8%
30%

20%
7.3% 7.5% 7.3% 7.2% 7.2% 7.2%
10%

0%
2008 2009 2010 2011 2012 2013

PIB (Q1) PIB (Q2) PIB (Q3)


Verdades y certezas... 25

Técnicamente, a la estabilidad y proporcionalidad intersectorial que se


esperaría para 2010-2013, se origina de la presencia de metas globales para la
producción real no petrolera.

No obstante, económicamente, la ausencia de metas sectoriales de mediano


y largo plazo, para el período de interés, cuya coherencia11 con las necesidades
para revertir la situación inicial, y su congruencia12 con las metas globales
contribuya con la determinación de los cambios estructurales necesarios, reales
y monetarios, para un crecimiento sectorial equilibrado; impidiendo que se
determinen nuevamente los desequilibrios y las distorsiones de la coyuntura
actual.

En correspondencia con lo anterior, el Gráfico 11 muestra el comportamiento


de la razón que mide la producción sectorial (Q1, Q2, Q3) por unidad de saldos
reales [M2/(1+ipc)].

Básicamente, el comportamiento de las tres medidas de desempeño


sectorial advierten sobre la posible presencia de rigideces dentro de la estructura
de la producción interna tal que el sector de los servicios es más sensible a la
expansión de la cantidad de dinero, convirtiéndolo en el sector más dinámico de
la producción.

En este caso, el escenario de contracción monetaria que inducen las metas


globales de producción e inflación, las restricciones al gasto fiscal y la no
devaluación, señaladas anteriormente, determinan el crecimiento continuo de de

11
Actitud lógica y consecuente con una posición anterior.

12
De conformidad con las metas globales fijadas y los equilibrios de corto plazo.
26 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

la razón V que mide la producción física interna por unidad real de gasto interno:
la velocidad sectorial de circulación monetaria.

2.5

1.91
2.0

1.27 1.5

0.82 0.82 1.0


0.54 0.54
0.41 0.40 0.35
0.5
0.24 0.21
0.17 0.17 0.14
0.06 0.09
0.04 0.05 0.0
2008 2009 2010 2011 2012 2013
V(Q1) V(Q2) V(Q3)

Por su parte, en el Gráfico 12 se observa el comportamiento del inverso13 de


la velocidad sectorial de circulación monetaria , para (Q1 + Q2) y (Q3).

5.0
4.5
4.71 4.59 4.0
3.5
3.38 3.0
2.5
2.44 2.50 2.0
2.26
1.84 1.5
1.47 0.97 1.0
1.22
0.5
0.79 0.52
0.0
2008 2009 2010 2011 2012 2013

[V (Q1+Q2)]-1 [V (Q3)]-1

Básicamente, la simulación para los escenarios meta establecidos señala


que la contracción monetaria exigida, traduce niveles de eficiencia cada vez
mayores en términos de una cantidad real de dinero cada vez menor, necesaria
para producir una unidad real de bienes (primarios + secundarios) Y de
servicios.

13
En este caso, las variables [V(Q1+Q2)]-1 y [V (Q3)]-1 miden la razón de la
capacidad real de gasto por unidad de producto físico, para el agregado de los
sectores primario y secundario de la producción interna, y el sector de los servicios.
Verdades y certezas... 27

En este caso, siendo la meta inflacionaria de 2% igual para 2013 y 2012, el


escenario que se determina para 2013, incorpora factores deflacionarios.

IV.- PERO ADEMAS DE LA CORRECCIÓN MONETARIA, EL CONTROL SOBRE LAS FUENTES


DE PERTURBACIÓN Y DE DISTORSIÓN NOMINAL EXIGE LA ESTABILIDAD DE LA BASE
MONETARIA.

Retomando la expresión (18), que sujeta la reducción de las filtraciones al


gasto interno a la destrucción monetaria a la tasa (vt < 0) que mide la variación
porcentual de la brecha deficitaria entre la produción interna (qt) y la capacidad
real de gasto (mSt):

MSt .(1 – vt) = (P.Q)t; (vt < 0) (18)

Esta viene a ser una solución de corto plazo a los desajustes monetario-real-
cambiario y a las profundas distorsiones que determinan la prolongación en el
tiempo, de los primeros. En ella, la inestabilidad de las fuentes del dinero base,
en su reproducción secundaria, también es corregida por el factor (1 – vt).

No obstante, una vez corregidos los desajustes monetarios, entendido como


la convergencia real-monetaria y monetaria-cambiaria en términos del respaldo
en reservas para M2, a un tipo de cambio oficial de 2.15 Bs/US$, todo
desequilibrio en la cuenta corriente, particularmente el superávit comercial,
continuará traduciéndose en inestabilidad de las fuentes de la base monetaria,
siempre que los excedentes sean monetizados.

En consecuencia, (18) deberá aplicarse continuamente en contraposición a


la alternativa monetarista de la aplicación de una regla que controle el
crecimiento monetaria sin discrecionalidad, la cual es ideal una vez corregidos
los desajustes.

Cuando el mecanismo monetario:


1. Se inicia con la monetización del superávit comercial y su inyección
dentro de la corriente nominal del circuito económico;
2. Seguido por el crecimiento de los depósitos a la vista y así, del dinero
base;
3. Continuando con la capacidad del sistema bancario nacional para
generar depósitos contables susceptibles para filtrase en busca de
otras fuentes de beneficio y rentabilidad en los mercados externos;
28 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

4. Y culmina determinando un nivel de liquidez de monetaria que


sobrepasa la capacidad de la economía real par su absorción
productiva;

Entonces las políticas públicas monetaria y cambiaria deben apuntar,


además, hacia el objetivo, prácticamente único, de estabilizar las fuentes de la
base monetaria.

Cuando en el sistema financiero nacional emergen condiciones de adversión


al ahorro y la inversión real, esta será una situación inducida por, y causante de,
un alto volumen de medios de pago en poder del público en torno a las
restricciones para su reproducción real oportuna en mas bienes de consumo
inmediato, de capital y de uso durable.

En consecuencia, mayor serán las filtraciones en el tejido productivo interno,


materializadas en una mayo demanda de importaciones, y de rentabilidad
externa.

Finalmente, los excedentes monetarios que originan las restricciones


cambiarias a las importaciones serán el resultado de las inyecciones adicionales
de dinero base y de los depósitos contables en el mercado bancario nacional,
que termina superando las importaciones efectivas del período t.

V.- PERO AL MISMO TIEMPO, EL REPARO A LA PÉRDIDA DE PRODUCTIVIDAD TAMBIEN


EXIGIRA CAMBIOS EN LA ESTRUCTURA DE LA PRODUCCIÓN INTERNA.

Finalmente, la determinación de una estructura de la producción, apoyada


en la producción significativa de excedentes primarios a su consumo final, tal
que, la demanda quebrada estimule su transformación en la economía interior, y
por tanto, la evolución del sector de los servicios encuentre sus fundamentos en
el desempeño de los sectores que lo preceden, es la garantía única para
transitar hacia el largo plazo.

Ahora bien, retomando de (8) la importancia que añaden al modelo de largo


plazo las diferencias entre la naturaleza y las productividades que entre sí
conservan los sectores primario, secundario y terciario, de la producción interna,
se establece entonces que la tasa de crecimiento de la producción interna viene
dada por la variación porcentual de la suma de los desempeños sectoriales:

▲Q t/Q t-1 = ▲(Q1 + Q2 + Q3)t / (Q1 + Q2 + Q3) t-1 (19)


Verdades y certezas... 29

No obstante, a largo plazo, de la competencia inter-sectorial e intra-sectorial


que induce el ajuste de los precios y la reasignación de los recursos y factores
plenamente empleados se desprende:

▲Q t/Q t-1 = (▲Q1 t/Q1 t-1 + ▲Q2 t/Q2 t-1 + ▲Q3 t/Q3 t-1); (20)

En donde, el desempeño de cada uno de los tres sectores de la produción


interna viene condicionado intra-sectorialmente por la h-actividades que
envuelve y por el desempeño del otro par de sectores.

▲Q1 t/Q1 t-1 = f (Σ h(▲Q1h,t/Q1h,t-1), ▲Q2 t/Q2 t-1, ▲Q3 t/Q3 t-1); (20.1)

▲Q2 t/Q2 t-1 = f (▲Q1 t/Q1 t-1, Σ h(▲Q2h,t/Q2h,t-1), ▲Q3 t/Q3 t-1); (20.2)

▲Q3 t/Q3 t-1 = f (▲Q1 t/Q1 t-1, ▲Q2 t/Q2 t-1, Σ h(▲Q3h,t/Q3h,t-1)); (20.3)

Ahora bien, si retomamos la expresión (15) del Capítulo III y la combinamos


con la expresión (8) del Capítulo II, se obtiene,
MSt . Vt = Pt . (Q1t + Q2t + Q3t); (21)

▲MSt/MS t-1 + ▲Vt/V t-1 = ▲Pt/P t-1 + (▲Q1t/Q1t-1 + ▲Q2t/Q2 t-1 + ▲Q3t/Q3 t-1)
(22)

Al mismo tiempo, si se combinan (15) y (16) se tendrá:


MSt . Vt = Pt . (Ct + It + Gt + (X-M)t); (23)

Finalmente, de (21) y (23) se extrae la hipótesis de que:

La liquidez monetaria, M2, está determinada exógenamente por la posición


comercial y financiera neta del país con el resto del mundo, mientras que,
endógenamente, por el desempeño financiero de los sectores de la
demanda agregada interna (hogares, empresas y gobierno) cuya actuación
y presupuestos impacta directamente sobre la relación entre el ahorro y la
inversión, planeadas, y la distribución de los excedentes entre los sectores
de la economía real y el sector financiero afectan, al mismo tiempo, la
estructura de la producción interna en razón de las productividades y
crecimiento sectoriales.

La hipótesis de que M2 esta determinada exógenamente por el resultado de


las exportaciones y los flujos financieros, netos, esta soportada en las relaciones
30 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

de respaldo entre los agregados monetarios, las reservas internacionales netas


como fuente de base monetaria, el movimiento cambiario de los resultados de la
balanza de pagos y, por último, en el caso de la economía venezolana, por los
precios del petróleo.

→ Mov. cambiario → RIN (Fuentes de Base Mon.)


Balanza de pagos


Cuasidinero ← Capacidad crediticia ← Dep. a la vista ← Efectivo

Entretanto, la hipótesis de que M2 está determinada endógenamente por las


actuaciones y los resultados financieros de los sectores de la demanda
agregada interna, siendo probablemente un poco más compleja, se apoya en la
relación entre el nivel de los saldos que las personas prefieren mantener bajo la
forma de dinero (para usos ajenos a los transaccionales) y el gasto efectivo.

Luego, sin dramatizar sobre la complejidad de los modelos de demanda de


dinero, para los fines aquí expuestos, esta relación se mide como la razón entre
demanda efectiva (C + I + G) y la oferta de saldos reales (M2/P); advirtiendo que
mientras mas pequeña sea la demanda efectiva con respecto a la oferta de
saldos reales, mayor será el grado de monetización que presenta la economía,
además de las consecuencias que de ello se derivan.

Por su parte, la hipótesis que relaciona la distribución sectorial de los


excedentes monetarios con la evolución de las productividades factoriales y de
la estructura de la producción interna, es precisamente el fenómeno que se
busca descifrar en este trabajo.

Las trayectorias que describan los mecanismos de ajuste de coto plazo,


condicionaran convergencia hacia el equilibrio, y, en consecuencia, el
crecimiento a corto y largo, plazos.

Luego, la convergencia estable en los mercados de corto plazo exige,


necesariamente, el transito progresivo hacia el pleno empleo; además de la
revisión y actualización oportuna de los determinantes fundamentales de la
productividad, tal que, el pleno empleo sea sostenible.

En tal sentido, las incongruencias14 entre la gestión monetaria y los objetivos


de largo plazo pueden impedir, forzosamente, se generen las condiciones

14
Bien vale la pena observar nuevamente los gráficos 1-2-8-9.
Verdades y certezas... 31

materiales necesarias para inducir y mantener el proceso de crecimiento


económico estable.15

Volviendo con la expresión (15), ésta puede adoptar las siguientes formas
funcionales:

• Vt = (Pt . Qt)/ MSt;

• Vt = Pt . (Qt/ MSt );

• Vt = Qt / (MSt/Pt); (24)

Siendo la tercera, la producción física por unidad de saldo real, la expresión


que subyace en el comportamiento de las variables de los Gráficos 7 (Capítulo
II) y 8 (Capítulo III). En el primero, como las razón (24) para los tres sectores de
la producción interna, primario, secundario y terciario:

Vt = Q1t / (MSt/Pt) + Q2t / (MSt/Pt) + Q3t / (MSt/Pt); (25)

Mientras que en el segundo, como la elasticidad saldos reales de las


producciones sectoriales:

ε t = q t / mS t ;
εt = q1t /mSt + q2t/mSt + q3t/mSt; (26)
qi t = ▲Qi, t/ Qi, t-1;
mSt = ▲MS t/ MSt-1;
15
“Resumiendo, el análisis <<real>> subraya las oportunidades –
continuamente puestas de manifiesto por el mundo de la realidad- de inversión
rentable para los ahorros, mientras que el análisis monetario asume como un hecho
empírico que el sistema tiende hacia el pleno empleo racional de los recursos
siempre que la gestión del dinero sea correcta, y solo puede ser desviado de su
curso por graves errores monetarios.

Esta última suposición es, desde luego, en cierto modo el nudo de la discusión
que se mantiene entre keynesianos y monetaristas: la posición keynesiana es que
la economía real es altamente inestable y que la gestión monetaria tiene poca
importancia y poco control sobre ella; la posición monetarista, por el contrario, es
que la economía real es intrínsecamente bastante estable, pero puede perder
estabilidad por las evoluciones monetarias, por lo que esta debe ser controlada,
tanto como sea posible, mediante una política monetaria inteligente.” (Jonson,
1978)
32 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

De (26), conjuntamente con el Gráfico 8, se extrae que el sector de los


servicios es mas sensible a las variaciones de los saldos reales, mientras que la
producción real de los sectores I y II, tiende a ser inelástica a medida que los
saldos reales crecen más rápido que la economía en su conjunto, y se hace
cada vez mayor que la producción interna y la demanda efectiva.

En el caso de la economía venezolana, los gráficos 7 y 8 verifican, para un


escenario de expansión nominal persistente, las condiciones,
1. Q1t/(MSt/Pt) < Q2t/(MSt/Pt) < (Q1t + Q2t)/(MSt/Pt) < Q3t/(MSt/Pt);
2. q1t /mSt < q2t/mSt < q3t/mSt;
Por su parte, la simulación del Gráfico 11 muestra que las condiciones 1 y 2
pueden continuar observándose en un escenario en donde las metas de corto y
largo plazo del capítulo III se persigan mediante la corrección monetaria.

Y es en ese sentido, que se establece la hipótesis de que:

Los cambios estructurales que demanda la economía real en su tránsito


hacia el largo plazo exigen, además de los correctivos para la convergencia
de corto plazo, la acción deliberada sobre los sectores de la produción
interna en las actividades económicas que cada uno agrega, tal que, la tasa
de la actividad económica interna se apoye en un mayor dinamismo en la
produción de bienes transables en relación al desempeño del sector de los
servicios y de la construcción.

En efecto, las condiciones 1 y 2, señalan, o si se quiere, suponen:

1. Productividades en Q1 y Q2 menores que la demostrada por el sector


terciario (Q3);

2. En consecuencia, los salarios, beneficios y las utilidades tienden a ser


mayores en Q3; lo que aduce, que en el corto plazo, la distribución de la
renta y particularmente de los excedentes, crean un cuadro de
condiciones materiales asimétricas que se sobredeterminan inter e intra-
sectorialmente, impidiendo toda posibilidad para alcanzar el largo plazo
macroeconómico.

3. La diferencia entre un ingreso agregado mayor que el gasto agregado


(en el mejor de los casos, descontando la depreciación) busca
reproducirse nominalmente dentro del sistema financiero y otros
mercados de largo plazo, lejos de toda reabsorción en la corriente real
del circuito económico;
Verdades y certezas... 33

4. Cuando se profundizan los desequilibrios real-monetario-cambiarios, los


excedentes monetarios de las actividades primarias y secundarias, no-
petroleras, terminan desviándose hacia el sector de los servicios, que es
el más productivo;

5. El mayor crecimiento del ingreso en Q3, presiona los mercados de Q2 y


Q1, y así, el sistema de precios;

6. La presión inflacionaria, contraerá la capacidad real de gasto y la


demanda efectiva, procurando un mayor desempleo y su contrapartida
en la economía informal.

Básicamente, estas son las premisas que obligan a plantear que el


crecimiento a corto y largo plazo tienen, como condición necesaria y suficiente,
la simultaneidad entre la instrumentación de los correctivos monetario-
cambiarios de corto plazo y la correspondiente a cambiar la estructura de la
producción interna, mediante la alteración de sus condiciones asimétricas.

Ahora bien, la simulación del Gráfico 13 muestra el cambio en la estructura


de la producción interna, cuando a las metas macroeconómicas establecidas en
el Capítulo III son condicionadas por una agrícola para 2010-2013, en razón de
10%, 15%, 20% y 25%, del PIB No-Petrolero.

Contrario a las rigideces que presenta la estructura de la producción interna


cuando los objetivos de estabilidad y crecimiento de corto plazo no incluyen
metas sectoriales, los cambios estructurales que se aprecian en el gráfico
anterior, a partir de la fijación de una meta agrícola, además de la
instrumentación que supone esa meta, señalan que de repetirse las condiciones
34 Revista Venezolana de Análisis de Coyuntura

que determinaron los desequilibrios actuales, el desenlace difícilmente sea el


mismo.

0.09 0.10
0.09
0.08
0.07
0.06 0.06
0.05 0.06
0.05
0.04 0.05 0.05
0.04
0.04 0.05 0.04
0.02 0.02 0.03
0.02
0.03 0.02
0.01 0.00 0.01 0.01
0.01
0.00
2008 2009 2010 2011 2012 2013
V(Q1) V(Q2) V(Q3)

50.0
45.0
46.36
40.0
33.16 35.0
37.57
26.53 30.0
23.57
19.59 21.05 25.0
18.78 17.83
20.0
19.79 15.0
10.0
11.73
5.0
7.09
0.0
2008 2009 2010 2011 2012 2013
[V (Q1+Q2)]-1 [V (Q3)]-1

La arte y la ciencia estarán, exclusivamente, en el diseño de instrumentos


capaces de atacar simultáneamente16 ambos objetivos, tal que, la corrección de
los desajustes monetario-real-cambiarios (entropía monetaria) y el reparo de las

16
En términos ínter-temporales.
Verdades y certezas... 35

productividades de los sectores primario y secundario (entalpía productiva),


converjan.

Solo así, la cantidad de energía (inútil) que se libere y de esta, la cantidad


que se absorba y transforme en capacidad productiva adicional (útil), será la
necesaria para el impulso de la produción interna y su arribe al estado
estacionario.

Pero es precisamente ese, el contenido de la segunda parte.

VI.- REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Alvin H., Hansen (1986), Guía de Keynes, Primera Edición, Fondo de Cultura Económica,
México, D. F.

Furio Blasco, E. (2005), Los lenguajes de la economía, Edición digital a texto completo
accesible en www.eumed.net/libros/2005/efb/

Friedman, Milton (1992), La economía monetarista, Primera Edición, Gedisa, España.

Johnson, Harry G. (1965), Dinero, Comercio Internacional y Crecimiento Económico,


Primera Edición, Ediciones Rialp, Madrid-España.

Keynes, John M. (1951), Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero, Tercera


Edición, Fondo de Cultura Económica, México.

Kurihara, kenneth k. (1961), Teoría monetaria y política pública, Primera Edición en


español, Fondo de Cultura Económica, México.

Robinson, Joan (1984), Ensayos Críticos, Orbis, Barcelona, España.

Spencer, M. H. (1993), Economía Contemporánea, Tercera Edición, Reverte, Barcelona,

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