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Volumen II Número 9 (15)

Septiembre de 2014

Ateneo
Paz y Socialismo
miruasocialismu@gmail.com

Ateneo para la recuperación de la memoria histórica de la editorial internacional Paz y Socialismo 1958-1990

1 de septiembre 1939-2014
75º Aniversario del comienzo “oficial” de la 2ª Guerra Mundial
Aunque la Segunda Guerra Mundial
tenga como fecha de su comienzo
oficial el 1 de septiembre de 1939,
cuando los nazis cruzaban la frontera
polaca, es bien cierto que el fascismo
y el imperialismo hacía años que ya
habían comenzado su guerra. Desde
que el 31 de octubre de 1922 el
fascismo italiano tomara las riendas
del poder se produjo en todo el mundo
una sucesión de acontecimientos en los
que la invasión nazi de Polonia sólo era
uno más.
Ateneo Paz y Socialismo

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LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL


¿COMENZÓ REALMENTE EL 1 DE SEPTIEMBRE DE 1939?
Los comunistas italianos (PCI), entre ellos Antonio Gramsci, muerto el 21 de abril de 1937 tras más de diez años preso, fueron de
los primeros en oponerse al nuevo orden fascista a través de los llamados “Ardite del Popolo”, creados en 1921.
El 18 de septiembre de 1931 el imperialismo japonés inicia su agresión a China con la ocupación de Manchuria, en la que creará,
el 18 de febrero de 1932 el estado marioneta de Manchukuo. Hay que recordar que tanto la península coreana como la isla de
Taiwán estaban ya bajo administración militar japonesa, a la que se opusieron, desde el inicio, sus respectivos partidos
comunistas: el Partido Comunista de Corea (ChKD) liderado en el interior por Pak Hon-yong, y el Partido Comunista de Taiwán
(KKT) liderado por Hsieh Hsüeh-hung, en estrecho contacto con sus camaradas chinos y japoneses.
El 30 de enero de 1933, los nazis de Adolfo Hitler, admirador de la obra de Mussolini, toman el poder en Alemania tras años de
enfrentamientos con los militantes del Partido Comunista (KPD), organizados en la Liga de Combatientes del Frente Rojo (RFB)
desde abril de 1924 y en la Liga de Luchadores Contra el Fascismo (KBgF) desde mayo de 1929.
En abril de 1933 los japoneses prosiguen su expansión en China ocupando la región de Jehol y la Mongolia interior.
El 11 de abril de 1933 entra en vigor la fascista Constitución llamada del “Estado Novo” en Portugal.
El 13 de enero de 1935 los nazis recuperan el control del Estado del Sarre.
El 2 de octubre de 1935 los fascistas italianos invaden Abisinia utilizando de forma masiva armas químicas.
El 7 de marzo de 1936 los nazis violan el tratado de Versalles al reocupar militarmente Renania ante la pasividad no sólo de la
Sociedad de Naciones sino, sobre todo, de los gobiernos burgueses de Londres y de París.
El 12 de mayo de 1936 los japoneses crean otro estado marioneta en Mongolia Interior conocido como Mengjiang.
El 18 de julio de 1936 los militares golpistas españoles se sublevan contra el gobierno republicano dando comienzo a la guerra en
España. Los fascistas italianos y alemanes envían sus tropas en apoyo de los golpistas mientras la Unión Soviética y la
Internacional Comunista organizan las Brigadas Internacionales como muestra de internacionalismo y solidaridad proletaria
antifascista (60.000 voluntarios de los que 15.000 murieron en España), mientras, las democracias burguesas miran hacia otro
lado.
El 25 de noviembre de 1936 se firma el pacto anti-Komintern, esto es anticomunista, entre los gobiernos de la Alemania nazi y
del Imperio Japonés, complementario del eje Roma-Berlín firmado el 25 de octubre de 1936, pactos a los que se unirán los
regímenes reaccionarios de Hungría, Rumania, Bulgaria y en cierto modo España, Tailandia, Finlandia, Irán, Irak y los gobiernos
títeres de territorios ocupados.
El 7 de julio de 1937 el imperialismo japonés desata una agresión generalizada contra China a la que se opondrán los
componentes del Frente Unido, incluido el Partido Comunista de China (KKCh) y su Ejército Rojo (hóngjūn). El Frente Unido se
formó el 24 de diciembre de 1936. La Unión Soviética responderá con el envío de 450 pilotos y técnicos con sus propios aviones
para ayudar al ejército chino, comandados por el general Asanov. Aun así los japoneses ocupan Pekín, Tianjín, Shanghai y
Nanking. En el Frente Unido se integra el Ejército Rojo el 25 de diciembre de 1937 creando con sus fuerzas el Nuevo 4º Ejército
activo en Cjang Jian al sur del río Yangtze, y el 8º Ejército de Ruta en Yunan.
El 12 de marzo de 1938 la Alemania nazi incorpora a Austria dentro de sus fronteras, a lo que muestra su oposición el ya
clandestino Partido Comunista de Austria (KPÖ).
El 30 de septiembre de 1938 Hitler y Mussolini firman con los primeros ministros británico, Neville Chamberlain, y francés,
Edouard Daladier, el Acuerdo de Munich por el que se sentencia la integridad territorial de Checoslovaquia.
El 5 de octubre de 1938, en virtud del Acuerdo alcanzado con Francia y Gran Bretaña, los nazis anexionan los Sudetes checos al
Reich Alemán.
El 15 de marzo de 1939 los nazis ocupan Bohemia y Moravia e instalan un gobierno títere en Eslovaquia por lo que
Checoslovaquia deja de existir.
El 23 de marzo de 1939 Alemania se anexiona el territorio lituano de Memel.
El 1 de abril de 1939 las fuerzas fascistas derrotan a los demócratas en España.
El 7 de abril de 1939 la Italia mussoliniana invade Albania.
El 1 de septiembre de 1939 los nazis invaden Polonia. Los gobiernos de Francia y Gran Bretaña declaran la guerra a Alemania y
deciden que ese es el momento que debe figurar en la historia como comienzo de la 2ª Guerra Mundial.
“Qué horrible, qué terrible, qué increíble sería que estuviéramos cavando trincheras y probándonos las máscaras de gas aquí
por una disputa en un país lejano entre gentes de las que nada sabemos…”
Neville Chamberlain, primer ministro del Reino Unido en un discurso radiado al pueblo británico, septiembre de 1938
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Así como para los antifascistas españoles la guerra comenzó el 18 de


julio de 1936 y no el 1 de septiembre de 1939, tampoco finalizará el 1
de abril de 1939, final oficial de la guerra nacional revolucionaria en
España, sino mucho tiempo después, al menos hasta que en 1952 se
decretara la evacuación de las partidas guerrilleras que combatían en el
interior de España contra el régimen franquista.
Más de 35.000 antifascistas españoles combatieron en la Segunda
Guerra Mundial, en la resistencia de los países ocupados, sobre todo en
Francia, en la defensa de la Unión Soviética, en los campos de batalla
de África y Europa integrados en el ejército francés libre, y en los
campos de exterminio.
Unos 5.000, de los 7.300 españoles que pasaron por el campo de
exterminio nazi de Mauthausen-Gusen, murieron entre agosto de 1940
y mayo de 1945.
Fuerzas españolas bajo las dos banderas tricolores, la de la República
Española y la de la República Francesa, liberaron la ciudad tunecina de
Bizerta el 7 de mayo de 1943, cuando 2.000 de los 16.000
combatientes de la División Lecrec eran antifascistas españoles.
El 24 de agosto de 1944 las primeras tropas aliadas entraban en Paris,
en sus vehículos blindados podían leerse nombres como Ebro, Teruel,
Brunete, Guadalajara, Santander, Madrid, Guernica… era la 9ª
Compañía del Regimiento de Marcha del Chad, de cuyos 160
efectivos, 146 eran españoles.

Así recibieron los internos españoles en el campo de Mauthausen a las fuerzas de la 11ª División Acorazada de los EE.UU. el 6 de mayo de 1945 tras haber
liberado el campo por sus propios medios “Los españoles antifascistas saludan a las fuerzas liberadoras”. En Mauthausen existió un Comité del Partido
Comunista de España y un Aparato Militar Internacional formado por comunistas soviéticos, polacos, alemanes, italianos, austriacos, yugoslavos, húngaros,
checoslovacos, franceses, griegos y españoles.

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150 Aniversario de la Primera Internacional


(Asociación Internacional de Trabajadores - AIT)
El 28 de septiembre de 1864 se fundó en Londres la Primera Internacional proletaria a iniciativa de los fundadores del
pensamiento emancipador de la clase obrera: Carlos Marx y Federico Engels

En el número de febrero de 1964 de la Revista Internacional se conmemoraba el centenario de la fundación de la AIT con un
resumen sobre su historia.

ANTE EL CENTENARIO DE LA I INTERNACIONAL


DATOS HISTÓRICOS
El movimiento comunista y obrero mundial celebra en 1964 una fecha memorable: el centenario de la fundación por Carlos Marx y Federico Engels de la I
Internacional (Asociación Internacional de Trabajadores). La formación de la I Internacional reflejó el crecimiento de la conciencia política y la actividad de los
obreros avanzados de una serie de países de Europa y la necesidad imperiosa de la unión internacional del proletariado. La I Internacional sentó los cimientos del
movimiento comunista mundial contemporáneo.
La I Internacional se funda el 28 de septiembre de 1864 en el mitin de trabajadores de varios países celebrado en el Saint Martin’s Hall de Londres. Marx fue el
alma de esta organización, el autor del Manifiesto inaugural de la Asociación Internacional de los Trabajadores, de sus Estatutos, de múltiples resoluciones y de
otros documentos. El Manifiesto inaugural y los Estatutos establecían con rasgos generales los objetivos del movimiento proletario y proclamaban que “la
emancipación de la clase obrera debe ser obra de los obreros mismos…”
La I Internacional se apoyó en las organizaciones obreras ya existentes en diversos países, que se constituyeron en secciones de la Internacional y se unificaron en
federaciones nacionales.
El Primer Congreso de la Internacional se celebró en Ginebra del 3 al 8 de septiembre de 1866. Participaron 60 delegados en representación de 25 secciones de
Inglaterra, Francia, Suiza y Alemania.
Las decisiones del Congreso en consonancia con las ideas del socialismo científico, constituyeron un potente golpe contra los proudhonianos. El Congreso
reconoció la importancia del movimiento huelguístico, destacó el gran significado de la lucha por la jornada de ocho horas y adoptó una resolución sobre la
sustitución del ejército permanente por el pueblo en armas.
La resolución aprobada por el Congreso sobre los sindicatos asestó un golpe a los proudhonianos, que negaban la necesidad de la organización de la clase obrera,
a los lassalleanos, que menospreciaban los sindicatos, y a la estrechez del tradeunionismo inglés.
El Segundo Congreso de la I Internacional tuvo lugar en Lausana del 3 al 8 de septiembre de 1867. En él participaron 63 delegados. Estuvieron representadas las
organizaciones obreras de Suiza, Francia, Alemania, Inglaterra, Italia y Bélgica. El Congreso formuló una importante tesis proclamando que la emancipación
social de los obreros es inseparable de su emancipación política. El Congreso se pronunció por la propiedad estatal de los medios de transporte y comunicaciones,
lo que significó una victoria de la idea marxista de la propiedad colectiva sobre los medios de producción.
El Tercer Congreso de la I Internacional transcurrió en Bruselas del 6 al 13 de septiembre de 1868. En sus labores intervinieron 99 delegados de 7 países. En este
Congreso el marxismo obtuvo una nueva victoria sobre el proudhonismo. El Congreso revisó la resolución impuesta por los proudhonianos en Lausana y
reconoció la huelga como un arma legítima y necesaria de la clase obrera. El Congreso aprobó una resolución antimilitarista, en la que llamaba a todas las
secciones y asociaciones obreras a utilizar contra la guerra el arma de la huelga general.
El Cuarto Congreso de la I Internacional se reunió en Basilea del 9 al 11 de septiembre de 1869. Participaron en sus labores 78 delegados de 8 países.
En el Congreso se produjo un fuerte choque con el nuevo y peligroso enemigo del movimiento revolucionario: los anarquistas, encabezados por Bakunin.
En marzo de 1870 un grupo de socialistas rusos emigrados en Suiza fundó la sección rusa de la I Internacional y propuso a Marx ser su representante en el
Consejo General. “Acepto con satisfacción la honrosa misión que me ofrecéis de ser vuestro representante en el Consejo General”, contestó Marx a los miembros
de la sección rusa.
Durante el periodo de la Comuna de París, Marx y Engels desplegaron en el Consejo General una enorme labor en apoyo de los comuneros. Llamaron a la
solidaridad con ellos y a prestarles ayuda moral y material.
Después de la derrota de la Comuna de París, la reacción internacional emprendió la ofensiva contra la I Internacional. En algunos países el hecho de pertenecer a
la I Internacional se consideraba delito de lesa patria. Sus secciones se vieron precisadas a pasar a la clandestinidad.
En vista de la labor de zapa de los bakunistas, el 5 de marzo de 1872 el Consejo General aprobó una circular redactada por Marx y Engels, bajo el título de “Las
supuestas discrepancias en la Internacional”, en la que se desenmascaraban los puntos de vista pequeño-burgueses y reaccionarios de Bakunin y su actividad
hipócrita y escisionista.
El Quinto Congreso de la I Internacional se celebro en La Haya del 2 al 7 de septiembre de 1872. Estuvieron presentes 65 delegados de 11 países. En las labores
del Congreso participaron Marx y Engels.
El Congreso confirmó el acuerdo de la Conferencia de Londres de crear en cada país un partido proletario independiente e introdujo el correspondiente punto en
los Estatutos de la Internacional. Bakunin y su cercano colaborador Guilleume fueron expulsados de la Internacional por decisión del Congreso. Se acordó
trasladar la sede del Consejo General a Estados Unidos. Este último Congreso de la I Internacional significó en el terreno de la ideología y de la organización una
victoria del marxismo sobre el socialismo sectario y pequeño-burgués.
La I Internacional fue disuelta en 1876 por decisión de la Conferencia de Filadelfia. La I Internacional cumplió su tarea histórica de llevar las ideas del socialismo
científico a la conciencia de los obreros avanzados de los países capitalistas más importantes. “La I Internacional es inolvidable –dijo Lenin–, ha quedado inscrita
en la historia de la lucha de los obreros por su liberación. Sentó los cimientos del edificio de la república socialista internacional que hoy tenemos la dicha de
construir”.

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“…La clase obrera posee ya un elemento de triunfo: el


número. Pero el número no pesa en la balanza si no está
unido por la asociación y guiado por el saber. La experiencia
del pasado nos enseña cómo el olvido de los lazos fraternales
que deben existir entre los trabajadores de los diferentes
países y que deben incitarles a sostenerse unos a otros en
todas sus luchas por la emancipación, es castigado con la
derrota común de sus esfuerzos aislados…
¡Proletarios de todos los países, uníos!”

Carlos Marx
Manifiesto inaugural de la
Asociación Internacional de los Trabajadores
1864

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23 de septiembre de 1934
Fundación del Partido Comunista Puertorriqueño
En septiembre de 1974 la Revista Internacional publicó un breve resumen de la situación en la que en esos momentos se
encontraba el Partido Comunista Puertorriqueño. Coincidiendo con el 40 aniversario de su fundación se incluyó su reseña
dentro de la serie titulada “Breves datos sobre los Partidos Comunistas y Obreros” que se venía publicando por entonces en
la revista, con menciones a todos los partidos con los que la revista, en mayor o menor medida, estaba relacionada. El
mismo artículo se incluyó en el libro “De primera fuente” que la Editorial Internacional Paz y Socialismo publicó en 1988.

PARTIDO COMUNISTA PUERTORRIQUEÑO


Fue fundado el 23 de septiembre de 1934.

El Programa aprobado en el I Congreso (1934), proclamó al partido como dirigente y organizador del movimiento obrero
revolucionario y antiimperialista de Puerto Rico. En 1946, un congreso extraordinario adoptó los Estatutos y, en 1954, el IV
Congreso aprobó un nuevo Programa del partido.

En medio de la represión y las persecuciones en que se desenvuelve, el partido lucha consecuentemente por que se cumplan las
demandas políticas y económicas del pueblo puertorriqueño, por la independencia nacional de Puerto Rico y por que se ponga fin
a su cacareada condición de “Estado Libre Asociado” a los EE.UU.

El PCP se estructura según el principio territorial y de empresa. Las organizaciones de base -las células- se agrupan en
organizaciones territoriales dirigidas por los comités municipales. El congreso se convoca cada cinco años. Elige al Comité
Central que forma, a su vez, a la Comisión Política.

El partido publica el periódico mensual “El Pueblo” con una tirada de 3.000 ejemplares.

En las organizaciones del partido se organizan periódicamente clases de estudio para elevar el nivel ideológico y teórico de los
comunistas.

Lo que en realidad se produjo en la ciudad de Ponce en 1934 fue la unidad de 14 grupos marxistas puertorriqueños que se
habían organizado en diversas localidades de la isla, algunos eran producto de desgajamientos del Partido Socialista,
mientras otros reunían a militantes obreros y campesinos. Entre los que participaron en la asamblea constitutiva del PCP se
encontraban entre otros: Alberto Sánchez, organizador de los trabajadores desempleados y primer secretario general del
partido. Juan Santos Rivera del Grupo de Aguas Buenas, José Lanause Rolón y Miguel Bahamonte, miembros del grupo
“La Tribuna” de Ponce que tomaba su nombre por el periódico comunista fundado en 1925. Julio Camacho, dirigente
sindical minero, Justo Berenguer, Martiniano Ayala y Manuel Cofresí Ramírez (futuro voluntario de las Brigadas
Internacionales en España), miembros del grupo de Cabo Rojo. Estanislao Soler, de Cataño, Juan Sáez Corrales, Ramira
Mangual, Ventura Mijón, Ovidio Rivera, Eugenio Font Rivera y Luis Vergne Ortiz, estos dos últimos procedentes de la
corriente nacionalista. La prensa comunista heredera de periódicos como el nombrado “La Tribuna”, o de la “Gaceta
Comunista” fundada en Ponce en 1933, tomó como cabecera el nombre de “Lucha Obrera”, sustituido ya a principios de los
años 40 por “Verdad”.

El PCP sufría un constante acoso por parte del aparato represivo del imperialismo yanqui, por su doble condición de partido
comunista y de partidario de la independencia total de Puerto Rico. El PCP participó en la revuelta nacionalista de octubre
de 1950 conocida como el Grito de Jayuya, postura que le acarreó la prisión a, entre otros, su presidente César Andreu
Iglesias.

En el Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros celebrado en Moscú en junio de 1969, el PCP estuvo
representado por el Secretario de su Comité Central, Félix Ojeda. Acudió a la Conferencia de los Partidos Comunistas y
Obreros de los países de América Latina y del Caribe celebrada en La Habana en junio de 1975. El PCP también participó
en las Conferencias de examen de la labor de la Revista Internacional celebradas en Praga en 1974 y 1977.
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12 de septiembre de 1974
La Revolución en Etiopía derroca la monarquía feudal
En el número de noviembre de 1984 de la Revista Internacional se publicaba un artículo firmado por Shimelis Mazengia,
miembro del Buró Político y Secretario del CC del Partido Obrero de Etiopía, titulado “El camino de la creación del partido de
vanguardia” que conmemoraba, por un lado, el 10 aniversario de la revolución etíope y, por otro, la fundación del POE el 6 de
septiembre de 1984. De este artículo hemos entresacado algunos fragmentos para recordar que este mes de septiembre de 2014 se
cumplen 40 años del derrocamiento del emperador feudal de Etiopía.

La explosión revolucionaria
…La Etiopía prerrevolucionaria, que conservaba los rasgos de sociedad feudal con un sector capitalista en estado embrionario, era
un país atrasado. Las masas estaban cruelmente oprimidas y explotadas por una aristocracia que había perdido todo sentido del
honor, por terratenientes feudales, usureros burócratas, altas jerarquías eclesiásticas y monopolios extranjeros. El pueblo etíope
defendió heroicamente durante siglos su independencia frente a invasores, agresores y colonizadores, como lo evidencia la
resonante victoria de Adwa frente al
imperialismo italiano. Pero las arcaicas y
opresivas relaciones socio-económicas
que imperaban en el país mantenían al
pueblo sojuzgado y en la más profunda
miseria. El sostenimiento de
esas relaciones sólo beneficiaba a unos
pocos. Nominalmente independiente, el
país permanecía agarrotado por el
control imperialista y su orgullo estaba
hipotecado en aras de la supervivencia de
las clases explotadoras feudal
y burguesa. En esas circunstancias tuvo
lugar la revolución popular de 1974,
que desbrozó el camino de la
transición al socialismo.
…En 1974, el descontento y la
indignación de las explotadas masas
etíopes –obreros, campesinos y otras
fuerzas democráticas- llegaron a su punto
culminante. Se hicieron aún más
agudos los irreconciliables
conflictos y contradicciones de
clase. Las condiciones de miseria y
privaciones en que vivían las grandes
masas populares se Manifestación del 1º de Mayo de 1977 en Addis Abeba vieron agravadas
por la profunda crisis económica. En
algunas zonas del norte del país, 200.000 personas habían muerto de hambre, en tanto que los medios feudales y burgueses
permanecían indiferentes ante la suerte de aquellos desventurados y trataban únicamente de ocultar la verdad a la opinión etíope y
mundial.
Para aquel entonces el mito del antigua régimen había comenzado a desmoronarse irreparablemente. Las masas veían claramente
la crueldad, la insensibilidad, la hipocresía y el egoísmo de los que estaban en el poder. Era un sistema totalmente corrompido.
Las masas ya no podían soportar las múltiples cargas que pesaban sobre ellas desde hacía siglos. En todos los rincones estallaron
huelgas de los obreros y de la mayoría de los empleados, insurrecciones campesinas, multitudinarias manifestaciones. La
agitación se extendió también al ejército…
…El 12 de septiembre de 1974 pasó a ser un gran hito y el más notable acontecimiento en la historia de la lucha de las masas
populares etíopes. Con el derrocamiento del emperador Haile Selasie, el país se vio libre aquel día para siempre del gobierno
despótico de una monarquía feudal putrefacta que durante siglos había oprimido a las masas, condenándolas al atraso y a la
miseria. En el curso de las transformaciones quedó resuelto el problema central de cualquier lucha revolucionaria: el poder pasó
de manos de los opresores a las de las fuerzas democrático-revolucionarias; ahora había que ejercerlo en bien del pueblo…

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Corroboramos las afirmaciones con datos
En la más que recurrente presentación que el Ateneo Paz y Socialismo elaboró con motivo del 55 aniversario de la publicación del primer
número de la Revista Internacional-Problemas de la Paz y del Socialismo, y de la que hubo que sacar hasta 4 actualizaciones consecutivas, para
dar cabida a las diferentes observaciones hechas de forma oportuna por quienes la leíais, se hacía una afirmación que no estaría de más
acompañar con datos que la sustenten, y así dar respuesta a una de las interrogantes planteadas en las presentaciones públicas realizadas en
septiembre de 2013.
La afirmación, que aparece en la página 64 de dicha presentación (http://es.scribd.com/doc/153566735/La-Revista-Internacional-Primera-Parte)
dice lo siguiente: “El grueso de las ediciones y del número de ejemplares impresos correspondían a las revistas de los países socialistas.”
Recordemos que de las 22 ediciones que en principio tuvo la revista, 12 correspondían a países socialistas: RP de Albania, RD Alemana, RP de
Bulgaria, Checoslovaquia, RP de China, RDP de Corea, RP de Hungría, RP de Mongolia, RP de Polonia, RP de Rumania, RD de Vietnam y la
Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.
Y en cuanto al número de ejemplares distribuidos, dejaremos que sea el propio director de la revista quien conteste:
Publicado en la separata del nº 2 de febrero de 1977 de la edición portuguesa de la Revista Internacional
“Entre las delegaciones extranjeras que participaron en los trabajos del VIII Congreso de nuestro Partido, se encontraba una delegación de la
Revista Internacional, encabezada por el camarada Konstantín Zaródov, director. Durante su permanencia en Lisboa el camarada Zaródov
tuvo una entrevista con representantes de Ediciones “Avante!”, en su sede.
Publicamos a continuación el texto de esa entrevista.
Camarada Zaródov, nos gustaría que nos hablase, aunque sea de forma resumida, de la historia y del papel de la Revista Internacional, como
publicación teórica e informativa de los partidos comunistas y obreros.
La Revista Internacional es una publicación única en su género. Es una revista colectiva de los partidos hermanos, resultado del trabajo de los
comunistas de numerosos países del mundo. Su primer número fue publicado en 19 lenguas y difundido en 80 países. Fue en 1958. Actualmente,
la revista es editada en 30 idiomas y difundida en 145 países, es decir, prácticamente en el mundo entero. En los años 60, la mayor parte de su
tirada se destinaba a los estados socialistas, destinando a los otros países apenas un 15% del total, hoy la difusión de la Revista en los países
no socialistas representa casi la mitad de la tirada. A propósito, la tirada mensual de nuestra Revista supera el medio millón de ejemplares.”
Es decir, según el propio responsable de la revista, al menos el 85% de los ejemplares impresos en las diferentes lenguas y
ediciones en los años 60 eran destinados a los militantes comunistas de los países socialistas.

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Como ya hemos anotado en más de una ocasión, el ámbito de difusión de la Revista Internacional-Problemas de la
Paz y del Socialismo eran l@s militantes de los Partidos Comunistas y Obreros y l@s cuadros y dirigentes de
organizaciones próximas ya fueran estas sindicales, juveniles, antibelicistas o de mujeres. Por ello las ediciones de la
revista estaban en directa relación al tamaño del Partido Comunista al que era dirigida. Ni que decir tiene que, salvo
excepciones, los partidos gobernantes eran mucho más numerosos que los partidos de los países no socialistas, y que
por tanto las ediciones destinadas a los países socialistas tenían una tirada cuantitativamente superior.

Los datos de militancia aproximada, aportados por los diferentes partidos a la Conferencia Internacional de Partidos
Comunistas y Obreros celebrada en Moscú en noviembre de 1957, reflejan para los partidos gobernantes las
siguientes cifras:

Partido del Trabajo de Albania (PPSH) 58.000 militantes


Partido Socialista Unificado de Alemania (SED) 1.500.000 militantes
Partido Comunista Búlgaro (BKP) 550.000 militantes
Partido Comunista de Checoslovaquia (KSC) 1.490.000 militantes
Partido Comunista de China (KKCh) 11.000.000 militantes
Partido del Trabajo de Corea (ChND) 1.400.000 militantes
Partido Obrero Socialista Húngaro (MSzMP) 450.000 militantes
Partido Revolucionario Popular Mongol (MAKN) 42.000 militantes
Partido Obrero Unificado Polaco (PZPR) 1.300.000 militantes
Partido Obrero Rumano (PMR) 1.500.000 militantes
Partido Comunista de la Unión Soviética (KPSS) 7.500.000 militantes
Partido de los Trabajadores de Vietnam (DLDV) 600.000 militantes

Por razones obvias no se incluye la Liga de los Comunistas de Yugoslavia (SKJ).

Los datos pueden llevar a pensar que no sólo los países socialistas acaparaban el 85% de los ejemplares impresos de la
revista, sino que de ese 85%, las dos terceras partes iban destinadas a las ediciones en ruso y en chino, algo de lo que
no tenemos constancia, pero, aún así, puede constituir una hipótesis válida sobre la que trabajar.

A continuación incluimos los informes que en 1974, año de difusión de la Revista Internacional-Problemas de la Paz
y del Socialismo, presentaron las ediciones de la República Popular de Hungría y de la República Democrática
Alemana.
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La edición húngara de la Revista “Problemas de la Paz y del Socialismo” comenzó su andadura en
septiembre de 1958, siendo una de las ediciones primigenias y completas de la publicación internacional de
los Partidos Comunistas y Obreros. Por entonces su denominación en húngaro era “A Béke és a
Szocializmus Kérdései”, es decir, la traducción literal del nombre oficial de la revista. El húngaro es uno de
los idiomas en que la palabra “Problemas” tiene una connotación básicamente negativa, por lo que ya en
1960 la revista pasó a denominarse simplemente “Béke és Szocializmus”, esto es, “Paz y Socialismo”,
nombre bajo el que continuó publicándose sin interrupción hasta la desaparición de la revista en 1990.

La revista fue siempre publicada por la editorial “Kossuth” (Kossuth Kiadó, Vórösmartyka 4, Budapest V,
Árpád-U.B. Hungary) y distribuida desde las instituciones culturales de la República Popular de Hungría
(Kultura Konyv és Hirlap Kulkereskedelmi, Vallalat, Budapest 1, Fo. U 32, Hungary).

Los primeros representantes del Partido Obrero Socialista Húngaro en el Consejo de Redacción de la
Revista fueron Lakos Sándor, entre 1958 y 1962, y András Gedö, de 1962 a 1971. En 1974 el informe fue
presentado por Sandor Meth, director adjunto de la editorial encargada de publicar la revista, siendo por
entonces el representante húngaro: Laszlo Nagy. El primer director de la edición húngara fue Orosz Nándor.

Hungría: Aumenta el número de subscripciones


El CC del POSH presta particular atención a ampliar la difusión de la Revista Internacional, al aprovechamiento eficaz de sus
materiales y a que esa actividad se efectúe en relación con el trabajo de propaganda y educación del Partido en el seno de las
masas.

Es por eso que la propaganda de la Revista está confiada a los militantes que se ocupan de difundir la literatura del Partido. Son
ayudados por los Comités regionales, de barrio y de distrito del Partido, así como por los dirigentes de los organismos de poder
local y las organizaciones sociales. La edición y difusión de la Revista Internacional en Hungría es una tarea del Partido.

En estos últimos tiempos, nos hemos esforzado por constituir un círculo permanente de lectores de la Revista, principalmente
gracias a los subscriptores. Nuestros esfuerzos y dieron sus frutos: la Revista Internacional tiene una tirada de 11.500 ejemplares,
de los cuales 7.000 son distribuidos por subscripción.

Son subscriptores de la revista los dirigentes del Partido, los profesores de los centros de enseñanza del Partido y del Estado, los
militantes encargados de la propaganda y de la educación, los periodistas, etc.

Todos los meses la prensa periódica inserta una información sobre el contenido de la Revista Internacional; se publican gran
número de carteles y folletos. Cada vez más se recomienda, como lectura básica en los centros de enseñanza superior y en las
escuelas del Partido, la lectura de los artículos de la Revista. En el futuro, continuaremos afianzando la Revista Internacional entre
los lectores. Hoy, que el país prepara el XI Congreso del POSH, Las condiciones son particularmente favorables para ese trabajo.

Sandor Meth
Director adjunto de Ediciones “Kossuth”

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Nº15 (9) Septiembre de 2014
Desde un principio existieron dos ediciones de la revista en idioma alemán, la primera publicada en Praga y la
segunda en Berlín Oriental. Ambas tenían por título la traducción alemana de “Problemas de la Paz y del Socialismo”,
esto es, “Probleme des Friedens und des Sozialismus”. La edición para la República Democrática Alemana era editada
por la editorial Dietz (Dietz Verlag GmbH, Wallstrasse 76-79, Berlin C2, DDR) y distribuida desde Leipzig
(Deutscher Buch-Export und –Import GmbH, Leipzig C1, Leninstrasse 16, DDR). Las dos ediciones en alemán
aparecieron de forma completa y continuada desde septiembre de 1958 hasta junio de 1990.

Los representantes del Partido Socialista Unificado de Alemania (SED) en el Consejo de Redacción de la Revista
Internacional fueron: Helene Berg, entre 1958 y 1971, Erick Glückauf, de 1971 a 1973, Rudolf Wettengel, entre 1973
y 1978 y Roland Bauer, de 1978 a 1989. El SED contribuyó con destacados periodistas destinados a la redacción de la
publicación en Praga, entre ellos estaban: Alfred Franz Zahn, redactor entre 1958 y 1959, y Walter Hedeler, redactor
de 1961 a 1975.

Profundizar en la concepción comunista del mundo


El interés creciente de los comunistas y de los trabajadores de la República Democrática Alemana por los conocimientos
políticos, su profundo internacionalismo, su ardiente deseo de ver desarrollarse el movimiento comunista, su aspiración de estar al
corriente de los problemas de la actualidad, todo esto se expresa en la difusión, cada vez mayor, de la literatura marxista-leninista
y, entre otras publicaciones, de la Revista Internacional. Concurren también en ello los grandes esfuerzos del Partido Socialista
Unificado de Alemania, para desarrollar constantemente la actividad creativa en sus filas y en todos los sectores de la vida social,
considerando el trabajo ideológico como una parte vital de la actividad del Partido.

A consecuencia de las medidas tomadas por nuestro Partido para aumentar la difusión de la Revista, su tirada, de diciembre de
1973 a agosto de 1974, aumentó en más de 1.100 ejemplares y está en proyecto continuar aumentando su tirada.

Las comisiones de prensa y propaganda, adjuntas a los Comités Regionales del PSUA, procuran atraer para la Revista nuevos
subscriptores permanentes, en primer lugar, entre los propagandistas, los colaboradores de los institutos de investigación
científica, de las escuelas superiores y especializadas, así como de las instituciones científicas y educativas del Partido. Los
mejores resultados fueron obtenidos por las comisiones de los distritos de Postdam, Halle, Dresde, Karl Marx Stadt, Leipzig y
Berlín; en el mes de agosto habían cumplido ya, sino sobrepasado, en algunos sitios, las previsiones para 1974.

La revista teórica del Partido, “Einheit”, así como el periódico “Neues Deutschland”, órgano central del CC del PSUA, insertan
artículos detallados sobre el contenido de cada número de la Revista Internacional. La editorial “Dietz Verlag” hace publicidad de
la Revista y de sus ediciones nacionales en los boletines de información trimestral “Neu bei Dietz” y “Mitteilugsblatt für den
Literaturobmann”. Insertada en el boletín “Rezensiosdienst”, de la editorial “Dietz Verlag”, fue distribuida en 1974, por primera
vez, en 600 grandes empresas de la RDA una información pormenorizada sobre el contenido de la Revista. La Agencia de
Difusión de Prensa de la RDA hace también publicidad de la Revista por medio de carteles y postales. La Revista es ampliamente
difundida en la fiesta anual de “Neues Deutschland” en Berlín.

Recientemente los estudios cinematográficos estatales DEFA comenzaron a rodar un documental sobre la participación de la
Revista en la lucha mundial por la paz, por la democracia, por la independencia nacional y el socialismo, contra el imperialismo,
el neocolonialismo y la reacción. Este film relatará, a los espectadores de distintos países, la enérgica actividad del colectivo
internacional de comunistas venidos del mundo entero a Praga. Su trabajo está orientado en el sentido de la propaganda y el
desarrollo creativo de la teoría marxista-leninista, en el sentido de la defensa de la pureza de sus ideas que ejercen una influencia
cada vez mayor en el desarrollo de la humanidad.

Rudolf Wettengel
Representante del PSUA en el Consejo de Redacción de RI

A la izquierda vemos dos portadas de la edición alemana oriental. La


primera corresponde al modelo inicial (1958-1962)*, periodo en el que
mientras la edición alemana desde Praga tenía las portadas en blanco con
letras rojas, la berlinesa las tenía en rojo con letras amarillas, constando
además la editorial que lo publicaba. La diferenciación por el color de la
portada continuó hasta 1973 en que dio inicio el último modelo de
portada, a partir de entonces la edición praguense tenía las portadas
anaranjadas, mientras las berlinesas adoptaban el blanco. Una forma
sencilla de diferenciarlas es que mientras la impresa en la RDA llevaba
visible el precio en Marcos alemanes, la praguense no.
*Existieron 4 modelos para cada edición alemana

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