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Capítulo II

Forjando un Nuevo Destino


Al día siguiente Duner se preparaba para el entrenamiento para usar la espada,
a diferencia de cientos de años en el pasado, este seria sumamente corto ya
que Doki se mostraba imparable en su afan de destruir todo a su paso, Pyro y
Lian entraron a la cueva con unas bayas que encontraron y se disponían a
desayunar cuando Lian dijo:
-Es cierto, ¿Como es que no pensé en eso?-
Duner la miro y preguntó:
-¿Que sucede, algo que le haga falta al desayuno?-
Lian se puso de pie con una expresión de felicidad que a Duner se le hizo
inexplicable, lo tomo de las manos empezando a girar. Duner no entendía el
porque de tanta felicidad en Lian y no dejaba de preguntarla:

-¿Que sucede? ¿Porque tanta alegría?

Pyro estaba sobre una roca observándolo todo y en el también se reflejaba


cierta incertidumbre sobre lo que ocurría.
Lian se detuvo y empezó a llorar, Duner la vio y le dijo:
¿Porque lloras así? Ya te dije que pasara lo que pasara no moriré en esta
batalla, Pyro y yo saldremos vivos. ¿Recuerdas?-
En el rostro de Lian se reflejaba que lloraba de felicidad. La hechicera le
contestó a Duner:
-Por eso mismo lloro, es de felicidad, Pyro y tu saldrán vivos de esta batalla.-
-¿Y porque hasta ahora reaccionaste así? ¿Acaso antes no me creíste lo que
te dije? - Preguntó Duner.
-No es verdad, si te creí - Contestó Lian
¿Y que es entonces Lian? - Preguntó Duner.
Lian cerró sus ojos y le dio a Duner la impresión de que intentaba recordar algo
importante.
-¿Que te sucede? - le preguntó
El lugar permaneció en silencio por un rato y al cabo de este Lian abrió sus
ojos diciéndole a Duner:
- Haré que seas mas fuerte para que puedas vencer a Doki y también serás
capaz de manipular la Espada de las Rosas y esta no acabe con tu vida.-
El rostro de Duner se ilumino y luego preguntó:
-¿Como harás eso posible?, ¿Que tienes en mente?
Lian sonrió diciendo:
-Ya regreso- acto seguido se teletransporto antes de que Duner pudiera decir:
-Espera-

Duner y Pyro se vieron el uno al otro con la expresión de toda la incertidumbre


del mundo en sus rostros.

Duner giro la vista hacia la Espada de las Rosas, y se dijo a si mismo:


-No las has tomado aun, Lian no te lo ha permitido, luego de romper la barrera,
he sido libre de tomarla, sin embargo me dijo que no lo hiciera hasta no haber
entrenado. - Se acercó poco a poco a la espada y en ese momento Pyro dejó la
roca en donde se encontraba y empezó a volar alrededor de Duner
obstaculizando su camino hacia la espada.
-¿Que te sucede Pyro?- Grito Duner
Pyro comenzó a hacerlo caminar hacia atrás alejándolo de la espada.

-Ya basta Pyro, ¡Tranquilízate! - Gritó Duner.

Pyro se acomodo en el hombro de Duner y acerco su cabeza a modo de


acariciar sui rostro mientras este se alejaba de la espada. Con un aire vencido
dijo:
-Esta bien amigo, tu ganas, Lian me advirtió que no tomara la espada hasta
que fuera el momento de enfrentar a Doki, no desacatare lo que me ha dicho.-
Duner se dirigió hacia la salida de la cueva con Pyro aun en su hombro
derecho, en el camino decía:
-Es realmente hermosa, le jure que sobreviviríamos a la batalla con Doki, pero
la verdad es que no estoy seguro del resultado de todo esto, Pyro debemos
luchar con todas nuestras fuerzas.- El ave asintió con la cabeza.

Duner recordó en ese momento como Pyro y el se conocieron.


Era una tarde de verano, Duner aun era un niño, vio en una pradera un ave de
colores rojo y amarillo vivos, tal como si fuese fuego. El ave estaba gravemente
herida. Duner se acercó con cierto temor y el ave lucho por alejarse, con temor
de resultar con mas daños de los que ya tenia. Duner le dijo titubeante:
-¿Te... Te encuentras bien...? Te ves muy lastimado... déjame ayudarte.

Pyro pudo sentir la pureza en el corazón de aquel pequeño niño y permitió que
lo llevara a ser atendido.
-Confía en mí, te pondrás bien- Dijo Duner con el ave en sus brazos.
Duner se encargo del cuidado de Pyro durante varios días, hasta que este se
mejoró.
-¿Estas solo verdad amigo?, quédate conmigo, mi abuelita y yo cuidaremos de
ti, Yo soy Duner - Dijo con orgullo el pequeño. - ¿Como te llamas tu? - pregunto
al ave.
Pyro lo miro fijamente y Duner asumió que no tenia nombre.
-Tus colores son como el fuego, busquemos un nombre de acuerdo a tus bellos
colores, ¿Que te parece chispitas? - El ave de inmediato hizo un gesto de
disgusto con su cabeza
-Mmmm ¿Y que te parece Pyro?- El ave quedo inmóvil un momento y luego
con su cabeza aprobó el nombre.
-Esta arreglado entonces, te llamaras Pyro.
Ambos crecieron juntos y se volvieron inseparables amigos, sin embargo Duner
no se daba cuenta de que Pyro era un Fénix.

En el rostro de Duner se dibujo una gran sonrisa y le dijo a su fiel amigo:


-¿Recuerdas Pyro? hemos pasado por mucho juntos y juntos acabaremos con
Doki.-
Continuaron su camino hacia la salida de la cueva y al llegar a esta vieron por
primera vez que estaban en una montaña sumamente alta, lo cual causó una
gran sorpresa en Duner.
-Mira hasta donde nos trajo Lian, ¿Crees que si nos quedamos aquí... Doki nos
encuentre algún día?-
Pyro lo miró fijamente, le lanzó una mirada que Duner entendió en el instante,
esa no era la mejor opción.
-Tienes razón amigo- dijo Duner.
-Debemos enfrentar nuestro destino, aunque eso nos cause la muerte, pero
eso no sucederá. Estoy seguro que no será así- Dijo con una sonrisa en el
rostro.
-Le prometimos a Lian que no moriríamos - Con seguridad en su voz.
Pyro voló hacia una roca y extendió sus alas, al ver esto Duner se apantalló, tal
y como había sucedido en otras ocasiones al observar a Pyro hacer eso.
-Amigo, no dejas de sorprenderme con eso, es simplemente maravilloso.- Dijo
Duner.

Repentinamente… Lian apareció con un libro muy desgastado en sus manos.


-Hola chicos- Dijo Lian muy alegremente.
Duner se acerco a ella y le preguntó:
-¿A Donde fuiste con tanta prisa?, ¿Que es ese libro que traes en tus manos?
Me parece que esta un poco maltratado- dijo al final con algo de sarcasmo.
-Fui a casa, o lo que quedaba de ella - Respondió Lian. - Este libro es la llave
para que seas capaz de vencer a Doki sin perder tu vida.-

Duner sonrió y le preguntó:


-¿Es verdad?, ¿Ese libro es capaz de eso?
-Si- respondió Lian, -Pero no tenemos mucho tiempo, en este libro hay muchos
conjuros poderosos que nos pueden servir en esta batalla, pero primero debes
volverte mas fuerte y para eso no tenemos mucho tiempo.-
-¿Y como puedo volverme mas fuerte en poco tiempo- Pregunto Duner.
-En este libro hay un conjuro capaz de hacernos viajar a donde nos
imaginemos, incluso el pasado. - Respondió Lian.
Duner tomó el libro y lo empezó a hojear
-No podrás leerlo, esta en el lenguaje de los hechiceros.-Dijo Lian a un
emocionado Duner.
Duner dejo caer el libro y la tomo fuertemente de las manos diciendo:
-Haré lo que sea necesario te jure que no moriría y por ti lo cumpliré-
Mientras esto sucedía en el interior de la cueva la Espada de las Rosas brillaba
en todo su esplendor.

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