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Trazar Bien la

palabra.

Tener una Buena idea de lo que


estamos hablando.
Estar seguros de lo que estamos
diciendo.
Usa bien la palabra de verdad
El que ara no puede trazar un surco
recto si mira para atrás

2. La Biblia en la preparación
del pastor y del líder cristiano
Cuando las Sagradas Escrituras definen el ministerio del sacerdote Esdras como
maestro de la Palabra, mencionan tres características de él, y cada una de ellas tiene a la
Palabra de Dios como su móvil: «Esdras tenía el firme propósito de estudiar y de poner
en práctica la ley del Señor, y de enseñar a los israelitas sus leyes y decretos» (Esd 7.10;
DHH3).
Todos los pasos de la formación del líder—su estudio, su conducta y su enseñanza—están
impregnados de la Palabra de Dios. Por eso los seminarios, los institutos bíblicos y las
escuelas teológicas necesitan revisar constantemente su programa de clases y darle al
estudio de la Biblia un lugar fundamental. Desde su tiempo de estudiante, el futuro líder o
pastor necesita empaparse de recursos y de conocimientos que le permitan, en su
pastorado y ministerio, trazar bien la Palabra de verdad (2 Ti 2.15).
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Y Esdras tenía el firme propósito de estudiar y de poner en práctica la ley del Señor, y
de enseñar a los israelitas sus leyes y decretos.

Ejemplo del camello: Mat. 19:24 Otra


vez os digo, que es más fácil pasar un
camello por el ojo de una aguja, que
entrar un rico en el reino de Dios. esto
viene de las copias de los manuscritos
griegos donde hubo esta confusión, pues
en hebreo y arameo esta la palabra
cuerda.

yo le he puesto al pensamiento; El
propósito del Estudiante.

1.Estudiar, escudriñar, las


Escrituras.
El estudiante debe de ser capaz de
sacar sus propios estudios, respetando
siempre el marco doctrinal.

2. Debe practicar lo que estudia; en otras


palabras debe creer el mismo lo que
va a predicar, y vivir de acuerdo a lo
que estudia.

3.Debe enseñar las escrituras.debe ser


apto para enseñar.
De acuerdo con lo que aprendió

Todo lo antes mencionado lo debe hacer


con pasión.
ay de mi dijo el apóstol, si no anunciare
el evangelio.
La pasión viene de la práctica de lo que
estudiamos y creemos. Por eso si
queremos ser predicadores apasionados
tenemos que estar constantemente
estudiando en especial las escrituras

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