Lo que Vargas cocina
César
Hildebrandt
Periodista |
1 sébado pasado hu-
bo una cena benét
ca (todavia hay &
sas jornadas de cari-
dad donde las sefio-
ras lucen sus mejores gasas?)
en el Museo de Osma. La or
ganizé la Sociedad Peruana
de Gastronomia para recau-
dar fondos que permitan re-
parar la caleta de San Andrés,
en Pisco. ¥ la concibieron y a-
* derezaron los cocineros espa-
foles Juan Mari Arzak y An-
doni nis Adviriz y una doce
na de maestros peruanos de
la cocina, con el casi ubicuo
Gast6n Acurio a la cabeza de
la lista.
‘A200 délares per capi-
ta, se trataba de una de las
comidas mas caras de los tlti-
‘mos tiempos. Y, sin embargo,
ms de cincuenta personas se
quedaron afuera pugnando a
ver si les improvisaban algu-
nas mesas.
as 450 personas que si
pudieron entrar asistieron, a
demés, a una curiosa subasta
de prestaciones, servicios ¥ ca-
si performances de tan habiles
jefes de cocina. Por los boletos
de entrada y el martilleo se ob-
tuvo un redondeo de 120,000
dolares, cifra que les sabra glo-
ria a los chiringuitos de San
Andrés.
‘Cuando esas fantasias su
bastables se terminaron y ya no
habia de dénde seguir sacando
plata para el muelle que Acurio
quiere “poner en valor” (iy qué
hhabrd sido de las cuantiosas do-
naciones que llegaron de afue
1a), entonces todos vieron
‘mo el periodista Ratil Vargas,
«que compartia mesa con el pre-
sidente Alan Garcia y la prime-
radama Pilar Nores, empez6 a
‘cuchichear con el doctor Gar
ia mientras éste sonreia y a
sentia, asentia ¥ sonre
La escena se explicé por si
misma de inmediato: se subas-
taba, sefioras y seftores, a ver
quién da més, una cena para
seis personas en Palacio de Go-
bierno, una cena inolvidable
cocinada por el periodista
Ratil Vargas, de cuyo talento
culinario mucho se sabe gra-
ias al programa “La divina
comida”.
‘Alguien tlegé a pagar
4,500 délares por el evento.
que se realizara en coordina
cidn con la secretaria de Pala
cio y con Ia asistencia de sus,
inspiradores: Pilar Nores,
Raull Vargas y Alan Garcia (no
cen ese orden precisamente},
Bueno, el hecho de que
‘nuestro importante colega va-
ya a cocinar a Palacio es un
honor (para Palacio) y es tam-
bién, en cierto modo, una re-
dundancia. Se dirfa que casi a
diario la radio que él encarna
a viva vor (y Chema a vor. en
cuello) transmite desde las in-
timidades de la casa de go-
bierno. Y la verdad es que hay
veces en que RPP parece ha
berse instalado en el dormito-
rio principal de Palacio, en
las proximidades del velador
presidencial, cerca del baho.
cero si bien es cierto
que RPP es hoy co-
quetamente palacie
ga y perdidamente
alcobera, también
hay que decir que el amor de
su vida, el hombre por el que
st voz se emocionaba y que
braba -las voces de Dennis
Vargas 0 Lombardi, de Mar
nnez Morosini o Miguel Jestis
Calderén: una sola vor. para
todo el Pert, el hombre de
sus dolores, vamos, fue y seré
Alberto Fujimori (a) presiden:
te de la repiiblica,
éNXo recordamos acaso las
visitas de Manuel Delgado
Parker al SIN, donde se discu-
tian amablemente los incisos
de ese canje que consistia en
entregar adulacién disimula.
daa cambio de favores judi-
ciales? éPodemos olvidar, aca-
50, el fervor con el que RPP se
callé ante las peores felonias
de la dictadura? Si alguna vez
la mudez valid dinero, ese
fue el caso de RPP.Y sino fue
ra un dgrafo consciente, Via-
dimiro Montesinos pudo ha-
ber escrito el famoso “Mi Ma
nue!” que la viuda de Gonzé:
lez Prada le dedicé al ilustrisi
‘mo marido,
Eso es: Manuel Delgado
Parker es una de las peores
viudas de Fujimori, ¥ el ilus
tre colega Vargas como que lo
acompana en su dolor. Por &
so ambos estan dedicados a a
yudar a Fujimori en todo lo
‘que esté a su alcance, que es
mucho dado el prestigio y la
cobertura de RPP.
Por eso el sébado, por ci
tar s6lo el tiltimo y quizas
mas vomitivo ejemplo, “ar
maron” un panel de 2 versus
2, que en realidad era de 4a
0 por goleada en favor del je.