Recibida la contestación de nota referida 19/05/08 nos complace
enormemente el reconocimiento pleno de todas las irregularidades y desviaciones por nosotros planteadas, y las acciones tomadas o por tomar para corregirlas. El desconocimiento del estado de situación que la Dra. Del Pozo menciona, descrito por nosotros en nota posterior en forma mas detallada, seguramente se sustenta en la no documentación de las mismas, debido a que los técnicos actuando de buena fe pensamos que no era necesario, y fueron vertidas en forma “oral”, cosa que seguramente no volverá a ocurrir esa omisión. En referencia a lo que la misma Dra., “cree...” que debería estar obligado algún técnico a realizar, deberá consultarlo con su pastor. Alguien dijo: “Es mas fácil creer que pensar, por eso existen mas creyentes que pensadores”. Esperando respuesta a la problemática planteada resumida en 2 temas: 1) Sobrecarga laboral: Ésta trae aparejada un peligro mayor, tanto para el paciente como para el técnico, al estar trabajando al límite psicofísico. Esperamos no lamentar ninguna tragedia que de ocurrir recordaremos los alertas expuestos en reiteradas oportunidades ante uds., esta vez debidamente documentadas. 2) Violencia laboral: Se sigue produciendo y se ha vuelto a manifestar nuevamente en una de sus formas: Se intentó presionar a los técnicos que manifestaron irregularidades y/o procedimientos inadecuados, convocándolos en forma individual al despacho de la jefatura o en los pasillos en otros casos para que les explicara su “Falta de Lealtad”?? Es oportuno recordarle a la Dra. Del Pozo Ana, que la Lealtad Soberana se la debemos al paciente. Reafirmamos nuestro compromiso con el proyecto hospitalario, que en su crecimiento puede requerir ajustes para adecuar la metodología en pos de los objetivos propuestos, pero nunca es aceptable que los mismos deban ser alcanzados poniendo en peligro la salud del paciente o la de los miembros del equipo de salud.
Respetuosamente, Técnicos del Servicio de Hemoterapia