Indice INTRODUCCION 7 UNO Dias de independencia_15 La esencia de América 19 Vision de la puesta de sol al atardecer tipo lata de la costa oeste 22 Los happenings de Nueva York 33 DOS Consumidores y espectadores_ 39 Europa: los anti-consumidores 47 Pintura situada 56 La modernidad a prueba 59 TRES Vivir con el pop 69 Lo sacro y lo profano 69 Dada Hollywood 76 Muerte en Ia cadena de montaje 84 El mundo de un marchante 8 Realismos capitalistas 94 CUATRO Visién y performance 105 El ojo del espectador 105 Monocromos 111 Azules 120 Direcciones de escena 123 Uno entre muchos 126 In Flux (In Flujos) 128 CINCO Antistas y trabajadores 135 El artista espectacular 136 Artefactos primarios 139 Guerrillas en la galeria 144 Juegos de palabras 150 SEIS 1969 161 Formas verbales 161 Anatomias 169 Fuera del mapa 175 CUADRO CRONOLOGICO 182 “ain sn TICE ANALITICN.9 tet Aetint Patel » GS Brtatrtatad > Oo OO. Wal 5 Ont On Sat Os 1 oo. 8. OO! KKKKKKKK 2. JASPER JOHNS, Bandera, 1954-1955. Encéustica, dleo y collage sobre tela montada en panel de madera, 107 x 154 om. Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) 8 Introduccién piiblico carece de un discurso explicativo eficaz. Y su biisqueda de una estructura que las haga comprensibles ha estado especialmen- te obstaculizada por el hecho de que el legado de los sesenta haya estado siempre rodeado de violentos ataques de exceso y falsedad. Podria decirse que este es el tipo de dificultades que terminan resolviéndose con el paso del tiempo. El arte experimental de los comienzos del siglo Xx, que antafo fue igualmente combatido, ha conseguido una holgada aprobacién entre una vasta concurrencia: el piiblico deambula extasiado por las retrospectivas de Picasso, dis- puesto a aceptar con benevolencia su inagotable juego con los medios visuales de representacién. Pero esta realidad no hace mis que subrayar el problema de los discursos existentes. Los historia- dores mas escépticos han seftalado que la fascinacién popular por Picasso procede en gran parte de la mitologia biogrifica que, reba- sando los limites de su propia vida, rodea al artista, Las biografias heroicas satisfacen la legitima necesidad del espectador de situar las decisiones del artista y sus arriesgadas conquistas estéticas en el transcurso de la vida que las hizo necesarias. Y este affin ha estado respaldado, por lo menos en parte, por la aficién de los artistas, desde Picasso a Jackson Pollock, seguidos por sus mas fervientes admiradores, a expresar sus pretensiones en unos términos suma- mente individualistas, a hablar profusamente de las motivaciones internas que yacen tras su obra. Sin embargo, el arte que aparecié