Quin es el mejor cientfico para m?

Romero Portillo Josu Uziel Durante mucho tiempo hemos sabido de muchos cientficos que han influido en la vida de cada uno de nosotros y de nuevos cientficos, Pero como han hecho estos ltimos para hacer esto? Pues es algo muy sencillo, a travs de sus descubrimientos. Que han sido de inspiracin para muchos otros en la actualidad. Y estos a su vez han revolucionado con la forma de vivir la vida, y que me refiero a esto, a la forma en que nos movemos, y comunicamos. Como demostracin de esto simplemente No podramos comunicarnos si no hubiera existido la pila (creacin de Alejandro volta) para que funcionaran los telfonos celulares. Y no slo en eso sino muchos ms aparatos electrnicos que se usan el da de hoy. Tenemos cientficos, todos muy importantes, como podra ser Newton, Einstein, Volta, Keppler, Galileo, Descartes y para representar esto puedo decir que No me imagino una geometra analtica sin los teoremas y descubrimientos que Descartes descubri un curso de Fsica sin los descubrimientos de Newton y Einstein (ambos unos genios). Todos ellos tuvieron caractersticas muy en comn que pudieron inspirarlos para lograr hacer todo y me refiero a la sed de conocimiento y ganas de descubrir lo que para algunos era prohibido o imposible de pensar. Pero entonces eligiendo a uno, yo me quedara con Albert Einstein, solo justo despus de Newton. Tome esta decisin, por su trayectoria, obstculos y asombrosos descubrimientos y aportes que hizo al mundo de la ciencia. Y que desde entonces ha influido tanto en el mundo de la ciencia que muchos hemos estandarizado su imagen como el clsico cientfico loco, y raro que todo mundo piensa que debera de ser. Pero que no, al contrario, no debera ser asi. Fuentes Ricardo Heinz,Los Mejores Cientficos de la Historia Fueron y Son Teistas, editorial Nueva vida, 1994, pp31

Henrandez sampieri, Roberto, Vida y obra de los grandes, colombia, editorial, McGraw-Hill, 1997, p 20. Asimov, Isaac, 100 preguntas bsicas sobre la ciencia Ed. cast.: Alianza Editorial, S. A., Madrid, 1977, pp. 9-12