(Por primera vez en un Foro Humanista, los niños participan con su trabajo y como los

demás, exponen sus conclusiones al plenario)

Primera exposición en las ponencias de todas las mesas en la clausura del Foro
Humanista Europeo de Lisboa el 5 nov 2006: mesa de trabajo de los niños

Son 14 niños (de 6 años a 12) en el escenario frente a 1000 personas, y con claridad,
unión y fuerza, ajustan sus micrófonos, y toman la palabra:

NEREA (España):

¡Hola a todos!

Unos niños de España, Francia, Argentina, Portugal, y Centroamérica, también hemos

estado trabajando estos dos días en el foro, y nos hemos hecho 3 preguntas:

1. ¿Qué necesitamos verdaderamente?

RAQUEL (España):

-Comida y agua
-Que no duela nada
-Que las guerras acaben para siempre
-Que los niños no sean maltratados
-No robos
-Que para jugar no haya que pagar
-Que para curarse no haya que pagar
-Menos hostilidad
-Más alegría
-Que los que no tienen amistad, la tengan

NEREA:
2. ¿Qué es lo que tiene que cambiar, ya?

BLANCA:
Lo que tiene que cambiar ya:

-La violencia por la felicidad

-África tiene que tener dinero, comida y salud, ¡esto tiene que cambiar ya!
-Que no haya pobreza, médicos para todos.
-Todos los niños en el colegio.
-Que el racismo se convierta en amistad

LAURA (Francia, en francés):

-No más contaminación

-Que la gente que está en el poder deje de buscar su interés y se muevan para la gente
-Mejor ambiente en la calle, en el trabajo y en la escuela
¡El mundo tiene que cambiar!
NEREA:
3. ¿Cómo es el futuro que nos llama? ¿Qué futuro es el que queremos, el que nosotros
vamos a construir con vuestra ayuda?

Esto lo vamos a responder con un pequeño juego, os invitamos a que nos acompañéis,
nos gustaría mucho.

(Álvaro muestra un cartel con el esquema. Nerea explica, repite la explicación:)

Slogan, armónicas, latas, 3 patadas, 3 palmadas, se repite el slogan

Slogan, armónicas, latas, 3 patadas, 3 palmadas, se repite el slogan

Uno a uno van saliendo 8 niños de distintos países, cada uno habla en un idioma, lleva
un slogan escrito grande en una hoja, y lo lanza. Los demás, apoyados por atentos
David y Álvaro, hacen coordinadamente el juego: Tras las armónicas, Lucía, la más
pequeña, (6 años), agita unas latas ruidosas cuando toca, hay risas, algún ligero fallo, y
todos se ayudan y recitan sus esloganes, interrumpidos por repetidos aplausos de un
atentísimo foro.

Eslogans que dice cada niño:

-Queremos el futuro sin guerras, sin armas.

Juego rítmico
-El futuro sin drogas
Juego rítmico
-Money out!, we´ll invent something better (=¡Fuera el dinero!, inventaremos algo
mejor)
Un mundo sin armas y sin violencia (portugués)
Juego r
-Amistad entre las personas (portugués)
Juego r
-El mundo con libertad, armonía, comunicación (en portugués)
Juego r
-Habrá que ir a otros planetas (portugués)
Juego r
-El mundo divertido y alegre
Juego r.
-Que el trabajo de máquina lo hagan las máquinas y el de persona lo hagan las personas
amorosas.
Juego r

(Yo, Maite Chamón, y unos 6 voluntarios de la universidad y 2 humanistas que han

estado involucradas también, Cecilia, y Maria Jose, sentados en un lateral del escenario,
y los niños Gabriel y Marco, que ayudaron a preparar pero no se atrevieron a salir,
estamos todos mirando muy emocionados. La gente en las gradas, que ya venía
enlenteciendo a los niños con fuertes y repetidos aplausos, emocionándose a cada tanto,
sigue con ánimo cada slogan y tanto aplauden que es asombroso que los niños, aunque
esperan que acaben, no pierden su ritmo en el juego. En un momento, el foro al
completo agarra un ritmo de palmas -un dos un dos un dos un dos-, totalmente
espontáneo que sorprende y divierte a los niños. Los niños expresan mucha alegría y
bienestar, y el foro sorpresa, atención, alegría y mucha emoción. Se producen momentos
de mágica sincronía entre los niños y el foro, entre el escenario y las gradas, entre el
futuro que se dibuja y que será, y el presente del que partimos y que va a ser pasado.
Con alegría, y lucidez, se produce una alianza de fe mutua.
Esta es mi impresión subjetiva. Apoyada por 3 humanistas y por estos jóvenes
universitarios voluntarios portugueses, ha sido un placer dedicarme a ayudar a los niños
estos dos días a sacar lo que llevan dentro ordenadamente y a atreverse a exponerlo
lúdicamente para todos los que queremos construir el humanismo)

NEREA cierra:
¡Para todos paz, fuerza y alegría!

(Los niños arrojan a la gente flores de papel que algunos han estado haciendo en un
taller allá en su sala infantil con Cecilia)