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Cielo de Octubre

Relatora 2
Freddy Alberto Lpez Acosta

La pelcula est ambientada en los 50, con un adolescente llamado Homer. Homer es el hijo menor de una familia de Coalwood, West Virginia, pueblito enteramente dependiente de la mina carbonfera del mismo nombre que all se encuentra. La mitad de los habitantes, prcticamente todos los que nacieron varones, trabajan all, con altas probabilidades de que un derrumbe o una especie de tumor pulmonar los mate prematuramente. Homer naci varn. Y pap Hickam, que adems de ser capataz es bastante cavernario y rebosa de orgullo por su trabajo, tiene todo calculado: Homer ser un buen minero, como l, ya que su otro hijo, apenas un poco mayor, tiene asegurada una beca universitaria gracias a su destreza para el ftbol americano. Claro que Homer tiene otros planes. En 1957 los rusos pusieron en rbita al primer satlite de la historia. Cielo de octubre no ahorra metraje para hacernos entender que el Sputnik signific una aplastante derrota para el pueblo norteamericano. El caso es que Homer, en lugar de amargarse por los rusos, se entusiasma con los cohetes. Contar con el apoyo de su maestra y de tres compaeros de aula, con los que conformar el ms maravilloso equipo terico-prctico. Los chicos estudiarn los principios de la combustin, gravedad y aceleracin, aprendern a soldar y construirn sus propios cohetes. El gran objetivo es la Feria Nacional de Ciencias, algo as como nuestras modestas Olimpadas Matemticas, pero elevadas a la ensima potencia. No mucho despus de iniciada la proyeccin, las expectativas quedan acotadas a dos preguntas: Llegarn a la Feria los chicos? Lograr Homer el apoyo de su padre? El problema es que desafos escolares como ste ya nutrieron a cientos de pelculas, mientras que la conflictividad paterno-filial debe estar en la raz de una cuarta parte de las pelculas hollywoodenses. Poco importa que el punto de partida de Cielo de octubre sea original, que historias como la de Homer Hickam no se escuchen todos los das, pero al final siempre nos demuestran una sola cosa, que no debemos rendirnos para lograr nuestros sueos.

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