Comienza comentando un dato muy curioso y recurrentemente mencionado pro
diversos sabios des de la antigüedad Griega, hablo de la pedantería surgida en los
grande sabios, muchos de los cuales resultan tener los espíritus mas vulgares y crueles sobre toda la tierra, me constato de ello a´n hoy día dónde vemos que los intelectuales son los más sanguinarios y crueles entre todos los hombres, aún en circunstancias meramente discursivas, acaban con su oponente y con contentos con ellos, todavía lo utilizan como medio de mofa. Éstos espíritus indeseables, según Montaine surgen al parecer también por el exceso de acumulación de conocimientos en una mente que ha recogido los "cerebros" de sus predecesores paráis, algo que claramente no se refleja en la claridad y benevolencia de su espíritu, tal y como lo menciono más arriba. Tal vez por ello el mismo Sócrates se definía a si mismo como un ignorante, sin embargo, el mismo, paradójicamente resulta ser un claro ejemplo de que la gran sabiduría también puede producir seres del todo ilustrados y de espíritu mas noble que los del vulgo corriente. A continuación se hace un especial énfasis en un punto ya tomado con anterioridad, la importancia de comprender y de aprender en realidad lo que se le es enseñado y no de sólo guardar, como en un museo, reliquias qu eestan tras de vitrinas que presumen los mas preciosos y bellos objetos, pero que no se utilizan, ni interactuan con el que entra ahí, no son usados ni comprendidos, la importancia del conocimiento del prudente es destacada por esto, por el verdadero uso de dicho conocimiento para construir para moldear, para crear, no solo para memorizar datos, en la actualidad ésta labor la puede realizar muy bien una computadora , sin el mayor reparo en ello y con mucha mayor exactitud que el más habilidoso humano. P. 167