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Citología de Moco Fecal: Dentro de las pruebas de laboratorio recomendadas para abordar la

enfermedad diarreica, se encuentra en primer lugar la citología del moco fecal, la cual nos permite
diferenciar la etiología de una infección en viral o bacteriana; esto es, el reporte de más de 10 leucocitos
por campo orienta a una etiología infecciosa; si estos son predominantemente mononucleares debe
pensarse en etiología viral, pero si el predominio es de polimorfonucleares, su etiología será
probablemente bacteriana. En caso de que la citología se reportara positiva con probable etiología
bacteriana, es recomendable realizar un coprocultivo para conocer el agente causal de la diarrea.

La observación microscópica del moco fecal en fresco con azul de metileno tiene utilidad para evaluar la
celularidad de la muestra y la posible presencia de parásitos. Aunque la positividad de la citología de
moco fecal es relativamente baja en la mayoría de las diarreas agudas que son de etiología viral, al igual
que el bajo porcentaje del aislamiento en coprocultivos.
MUESTRA: • Muestra de Heces recién emitidas
UTILIDAD CLINICA
• Prueba de utilidad en la Investigación de enterocolitis infecciosa
• Más de 10 leucocitos por campo en moco fecal orienta a una patología infecciosa.
• Si el predominio es de mononucleares, es más probable que la etiología sea viral.
• En cambio, si el predominio es de polimorfonucleares, se puede pensar en patología bacteriana.
• Cuando aparecen eosinófilos, entonces podemos pensar en infestación vérmica (gusanos).
• Si encontramos eritrocitos, habrá que pensar en complementar datos para síndrome disentérico, pues
con ello cambia radicalmente el abordaje terapéutico.
METODO:
• Microscopia y Tinción de wright.
TECNICA
1. Se toma una pequeña porción de moco presente en la muestra o materia fecal, se realiza un
extendido en un portaobjetos limpio y desengrasado.
2. Se deja secar , a continuación se tiñe con la tinción de wrigth : cubrir el frotis con colorante de wright
durante 8 minutos, sin volcar agregar una cantidad igual del amortiguador de wright soplando
ligeramente para mezclar ambos líquidos, dejar actuar de 6 a 10 minutos, se formara una superficie de
brillo metálico. Volcar y lavar con agua corriente y dejar secar.
3. Se observa al microscopio en objetivo de 100 X y se realiza un recuento de 100 células
mononucleares y polimorfonucleares.
INTERPRETACIÓN
En condiciones normales, las heces no suelen contener células epiteliales, ni leucocitos, ni eritrocitos.
Es fácil apreciar la presencia de leucocitos. En la deposición mucosa de los que sufren alergia intestinal
se observa un exceso de eosinófilos. La presencia de células epiteliales es un indicador de irritación
gastrointestinal. La presencia de células epiteliales, eritrocitos y bacterias se reporta en cruces de la
siguiente manera:
• ABUNDANTES (+++)
2 • MODERADAS (++)

• ESCASAS (+)
La presencia de leucocitos se encuentra asociada con moco y se observa en diferentes enfermedades
intestinales. Se observa un predominio dePMN en amibiasis aguda, shigelosis, colitis, también se
observan macrófagos yMN con gran predominio en fiebre tifoidea. LosPMN yMN se reportan contando en
total 100 células.
*Nota: la tinción puede variar de acuerdo al laboratorio no es una tinción estándar

CITOLOGÍA DEL MOCO NASAL

MOCO NASAL

El moco constituye una barrera permeable entre la mucosa y el aire inspirado y es el centro de todos sus
intercambios metabólicos. Es importantísimo en la fisiología nasal por sus propiedades físico-químicas y
biológica. La mucosa o membrana mucosa es un tipo de tejido que reviste la cavidad nasal. Las
membranas mucosas son generalmente tejidos húmedos, bañados por secreciones, tal como ocurre en
la nariz.

COMPONENTES DEL MOCO NASAL

El 95% es agua, 3% elementos orgánicos y 2% minerales. Contiene también numerosos aminoácidos


siendo su tasa entre 0´4 y 1’3 micromoles/ml. Se han encontrado unos 15: lisina, histidina, arginina,
ácido aspártico, treonina, serina, ácido glutámico, prolina, glicina, alanina, valina, isoleucina, leucina,
tirosina y fenilalanina. El moco nasal es más rico que el plasma en ácido aspártico y ácido glutámino, y
menos rico en alanina y valina. Contiene una cantidad de prolina más elevada que otros tipos de moco.

Toma de muestra:

Introducir una tórula humedecida en solución salina estéril y rotar en el vestíbulo de ambas fosas nasales
(tabique y cara interna de aletas nasales).

SIGNIFICADO CLINICO DEL ANALISIS DE CITOLOGIA NASAL


Se utiliza en la búsqueda del tipo y agrupación de las bacterias presentes en el moco nasal, así como
para descartar o afirmar la presencia de alergias (rinitis) con la presencia de eosinofilos por medio de la
tinción de Wright y en el caso de la tinción de gram, la presencia de bacterias, así como su agrupación.

INTERPRETACION DE RESULTADOS

Los resultados serán:

* Eosinófilos en el moco nasal por encima de 20 por campo corroboran la alergia en la etiología.

* Neutrófilos elevados relacionado con la presencia de infecciones bacterianas agudas.

* Linfocitos: sugiere procesos infecciosos de tipo crónico.

* Células caliciformes: cuando predominan sugieren la presencia de alergia.

Es un examen que se utiliza para medir la cantidad de glóbulos rojos y blancos en el líquido
cefalorraquídeo, el cual es un líquido transparente que circula en el espacio que rodea la médula espinal
y el cerebro.
Forma en que se realiza el examen
Se necesita una muestra del LCR. Una punción lumbar punción lumbar (punción raquídea), es la forma
más común de recolectar esta muestra.
Una punción lumbar, comúnmente llamada punción raquídea, es el método más común. El examen
generalmente se realiza así:
•El paciente se acuesta de lado con las rodillas encogidas hacia el abdomen y la barbilla pegada al tórax.
Algunas veces, este procedimiento se realiza con la persona sentada, pero doblada hacia adelante.
•Después de limpiar la espalda, el médico inyecta anestésico local en la región lumbar.
•Se inserta una aguja espinal, generalmente en el área lumbar.
•Una vez que se ha insertado la aguja adecuadamente, se mide la presión del líquido cefalorraquídeo y
se recoge la muestra.
•Luego, se retira la aguja, se limpia el área y se aplica un vendaje sobre el sitio. Con frecuencia, se le
pide a la persona permanecer acostada por un corto período de tiempo después del examen.

Ocasionalmente, se utilizan rayos X especiales para ayudar a guiar la aguja hasta la posición apropiada,
lo cual se denomina fluoroscopia.
La punción lumbar con recolección de líquido puede ser también una parte de otros procedimientos,
particularmente de una mielografíamielografía (radiografía o tomografía computarizada después de que
se ha introducido el medio de contraste en el LCR).
Otros métodos para obtener la muestra del LCR pocas veces se utilizan, pero se pueden recomendar en
algunos casos. Ver también:
•La punción cisternal implica la inserción de una aguja debajo del hueso occipital (parte posterior del
cráneo). Esto puede ser peligroso porque la aguja se inserta cerca del tronco encefálico.
•La punción ventricular es aún menos común, pero se puede recomendar cuando es necesario obtener la
muestra de LCR en personas con posible hernia cerebral inminente. Se realiza generalmente en el
quirófano. Se perfora un orificio en el cráneo y se inserta una aguja directamente en el ventrículo lateral
del cerebro.
•Extracción de LCR de una sonda ya puesta, como una derivación o un drenaje ventricular
Después de tomar la muestra, se envía a un laboratorio para su evaluación.
Preparación para el examen
El paciente debe dar su aprobación por escrito y permanecer acostado en el hospital al menos durante
seis a ocho horas después del examen.
Lo que se siente durante el examen
La posición puede ser incómoda, pero es necesario que el paciente permanezca en posición fetal para
evitar mover la aguja y dañar posiblemente la médula espinal.
El anestésico puede arder o quemar al inicio de la inyección. Cuando se inserta la aguja, hay una
sensación de presión fuerte y generalmente un dolor breve cuando la aguja pasa a través de las
meninges. (Ver recolección de LCR.)

En términos generales, el malestar oscila de mínimo a moderado. El procedimiento completo toma casi
30 minutos y la recolección de líquido toma sólo unos pocos minutos
Razones por las que se realiza el examen
El conteo de células de LCR puede ayudar a diagnosticar meningitis e infección del cerebro o de la
médula espinal, un tumor, abscesos o muerte de tejido en un área (infarto) y ayuda a identificar
inflamación. El conteo de células también puede ayudar a identificar una hemorragia.
El propósito más común para recoger una muestra de líquido cefalorraquídeo mediante una punción
lumbar es confirmar o descartar la sospecha de meningitis, ya que no hay otra herramienta fiable con la
que la meningitis puede ser excluida y es a menudo una amenaza para la vida, pero una condición muy
tratable. Los niños pequeños comúnmente requieren punción lumbar como parte de la rutina para
diagnosticar la fiebre sin motivo, ya que tienen un riesgo mucho mayor de meningitis que las personas
de edad y no siempre muestran signos de irritación meníngea. En cualquier grupo de edad, una
hemorragia subaracnoidea, hidrocefalia, hipertensión intracraneal, esclerosis múltiple y muchos otros
diagnósticos pueden ser confirmados o descartados con esta prueba.
La meningitis es una emergencia médica caracterizada por dilatacion de las meninges.[1] La causa más
frecuente de este tipo de inflamación son las bacterias, es decir, cuando a las meninges y al líquido
cerebroespinal llegan estos agentes por medio de la nariz o la boca. La meningitis causada por
intoxicaciones, hongos, medicamentos y otras enfermedades es poco frecuente pero potencialmente
letal. Estos tienden a bloquear los nervios en el cerebro conllevando a inconciencia y lesión cerebral y de
otros órganos.[2] La meningitis progresa con mucha rapidez, por lo que el diagnóstico y tratamiento
precoz es importante para prevenir secuelas severas y la muerte.

Aunque cualquier persona puede contraer meningitis, es una enfermedad especialmente frecuente en
niños y personas inmunosuprimidas. Los síntomas más frecuentes son dolor de cabeza y rigidez de la
nuca que tiende a asociarse con fiebre, intolerancia anormal a la luz o a los sonidos y trastornos de la
consciencia. A menudo, especialmente en niños pequeños, sólo se presentan síntomas inespecíficos,
tales como irritabilidad y somnolencia. Si se presentan erupciones en la piel, puede indicar una forma
particular de meningitis, como la meningococcemia.

La meningitis se diagnostica con un procedimiento médico llamado punción lumbar,[3] en la que se


inserta una aguja especial dentro de la columna vertebral para extraer una muestra de líquido
cefalorraquídeo, que rodea al cerebro y la médula espinal. El tratamiento tiene que ser inmediato, con el
uso de antibióticos en el caso de infecciones bacterianas o antivirales en el caso de meningitis virales. En
algunos casos se indica la administración de corticoesteroides como la dexametasona para prevenir las
secuelas de la inflamación, pues tienden a producir una mejor evolución neurológica.[4]

La meningitis puede potencialmente causar consecuencias serias de larga duración, como sordera,
epilepsias, hidrocefalia o déficit cognitivo, en especial en pacientes en quienes el tratamiento se ha
demorado.[5] Ciertas vacunas pueden prevenir algunas infecciones bacterianas que causan meningitis.
[1]
Valores Normales
•Conteo de células: menos de 0 a 5 glóbulos blancos (GB) y 0 glóbulos rojos (GR)
•Cultivo y sensibilidad: ausencia de crecimiento de organismos
•Proteína: 15 a 45 mg/dl
•Glucosa: 50 a 80 mg/100 ml
•Serología para sífilis: ausencia de anticuerpos
•Hongos: ausencia de hongos
•Inmunofijación: un bandeo o menos
•Glutamina: 6 a 15 mg/dl
•Lactato deshidrogenasa: menos de 2,0 a 7,2 U/ml
•Cloruro: 700 a 750 mg/dl
•Citología: ausencia de células malignas
Nota: los rangos de los valores normales pueden variar ligeramente entre diferentes laboratorios. Hable
con el médico acerca del significado de los resultados específicos de su examen.
Significado de los resultados anormales
Los resultados de glutamina anormales pueden indicar encefalopatía hepática o síndrome de Reye y los
niveles de lactato deshidrogenasa pueden indicar inflamación o infección. La disminución de glucosa
puede indicar meningitis debido a bacterias, hongo o tuberculosis y el aumento de los glóbulos blancos
puede indicar una infección u otro proceso inflamatorio.
Para mayor información sobre valores anormales, por favor remitirse al examen específico
Un aumento en el conteo de leucocitos indica infección, inflamación o sangrado dentro del líquido
cefalorraquídeo. Algunas de las causas son:
•Absceso
•Infección aguda
•Encefalitis
•Hemorragia
•Meningitis
•Esclerosis múltipleEsclerosis múltiple
•Accidente cerebrovascular
•Tumor
El hallazgo de glóbulos rojos puede ser un signo de sangrado. Sin embargo, la presencia de glóbulos
rojos en el líquido cefalorraquídeo también puede deberse a que la aguja utilizada en la punción raquídea
golpea un vaso sanguíneo mientras penetra la piel o la duramadre.
Es importante observar si el conteo de glóbulos rojos retorna a la normalidad en muestras tomadas
posteriormente en el procedimiento, comparado con las que se toman inicialmente. También se calcula
la proporción de glóbulos rojos comparada con los glóbulos blancos para ayudar con el diagnóstico.
Las afecciones adicionales que este examen puede ayudar a diagnosticar abarcan:
•Malformación arteriovenosa (cerebral)
•Aneurisma cerebral
•Delirio
•Demencia
•Epilepsia
•Síndrome de Guillain-Barré
•Accidente cerebrovascular hemorrágico
•Neurosífilis
•Linfoma cerebral primario
•Tumor espinal
•Accidente cerebrovascular secundario a la sífilis
•Meningitis aséptica sifilítica
•Mielopatía sifilítica
Riesgos
Los riesgos de la punción lumbar son:
•Reacción alérgica a la anestesia
•Molestia durante el examen
•Dolor de cabeza después del examen
•Sangrado en el conducto raquídeo
•Infección
Se puede presentar una hernia cerebral si se realiza en una persona con una masa en el cerebro como
un tumor o un absceso, lo cual puede ocasionar daño cerebral o muerte. Por esta razón, una punción
lumbar no se hace si otros exámenes muestran signos de tumor o absceso.
Se puede presentar una molestia temporal en las piernas si la aguja irrita la raíz de un nervio, pero esto
desaparece cuando se retira la aguja.
La punción cisternal o la punción ventricular conlleva un riesgo adicional de daño al tejido cerebral o al
tronco encefálico y riesgo de hemorragia cerebral que puede producir incapacitación o muerte.
•Hernia cerebral (si se realiza en una persona con aumento de la presión intracraneal) que redunda en
daño cerebral y/o muerte
•Daño a la médula espinal (particularmente si la persona se mueve durante el examen
Conocido como LCR
Es un líquido de color transparente, que baña el encéfalo y la médula espinal.
Circula por el espacio subaracnoideo, los ventrículos cerebrales y el canal medular central sumando un
volumen entre 100 y 150 ml en condiciones normales
El LCR (líquido cefalorraquídeo) es un líquido transparente que circula en el espacio que rodea a la
médula espinal y al encéfalo. El LCR protege al encéfalo y a la médula espinal de una lesión al actuar
como un cojín de líquido. Por lo general, el LCR se obtiene a través de una punción lumbar (punción
espinal). Durante el procedimiento, se inserta una aguja entre la tercera y cuarta vértebra lumbar y se
extrae LCR para ser evaluado.
UT 17. ESTUDIO DE OTROS LÍQUIDOS CORPORALES
LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO
El LCR es un líquido producido en los ventrículos, que son los espacios que hay dentro del SNC. En los
ventrículos hay una estructura especializada que son los “Plexos Coroideos” donde se produce el LCR. Se
produce y se reabsorbe continuamente e a una velocidad de 500 mL / día. Su volumen permanece
constante en situaciones fisiológicas.
Las Funciones del LCR son fundamentalmente tres:
◦Actuar como soporte mecánico del cerebro para que éste flote.
◦Eliminación de productos de desecho del metabolismo cerebral.
◦Transportar sustancias biológicamente activas que se comportan como mensajeros químicos.
Localización: el cerebro y la médula espinal se encuentran recubiertos por unas membranas
denominadas “meninges” que son la Piamadre (íntimamente unida al cerebro), la Aracnoides (localizada
inmediatamente por fuera de la anterior) y la Duramadre (La más externa). Entre la Piamadre y la
Aracnoides hay un espacio llamado “espacio subaracnoideo” que se comunica con los ventrículos.
Volumen: en un adulto es un total de 150 mL que se distribuyen 120 mL en el espacio subaracnoideo y
30 mL en los ventrículos.
Composición:
•Glucosa
•Proteínas: el LCR es un ultrafiltrado del plasma y, por lo tanto, predominan las proteínas de bajo peso
molecular (Ej. Prealbúmina, transferrina y albúmina).
•Agua
•Ácido láctico
REACCIONES FEBRILES

Resumen
La reacción de Widal es un test basado en el principio de aglutinación antígeno-anticuerpo, donde se
determina la presencia de anticuerpos contra el antígeno O y H de la Salmonella typhi para el
serodiagnóstico de fiebre tifoidea, sin embargo debido a su falta de especificidad, debe ser interpretado
en el contexto clínico del paciente. Importando su nivel socioeconomico, edad y sexo.

Abstract
The Widal test is based in principle of agglutination antigen– antibody to determine antibodies against
antigen-O and antigen-H for the serodiagnostic of infection with Salmonella typhi, nevertheless due to
lacking of specificity, its interpretation must to be based in the clinical context.

INTRODUCCIÓN

UN POCO DE HISTORIA
La reacción de Widal, test basado en el principio de aglutinación antígeno-anticuerpo, fue desarrollada
por Georges Fernand Isadore Widal prestigioso médico francés, en Junio de 1896, para el diagnóstico
serológico de la fiebre tifoidea.

La mejor forma para establecer la etiología de una enfermedad infecciosa es el aislamiento e


identificación del agente causal de la misma. Sin embargo, estos medios de diagnóstico no son siempre
de fácil aplicación y es ahí donde radica la importancia del uso de las suspensiones bacterianas en la
detección de los anticuerpos presentes en el suero del paciente (método indirecto de diagnóstico).
En las reacciones febriles se detectan anticuerpos en el suero del paciente contra: Salmonella, Brucella y
Rickettsia.

Con el término SALMONELOSIS se engloban cuadros clínicos distintos como la "Fiebre tifoidea" y las
"Salmonelosis no tifoideas". El nivel normal de aglutininas varía en diferentes poblaciones y
circunstancias, también puede aumentar en cualquier periodo febril, por lo que el diagnóstico de
Salmonelosis se debe basar en la historia clínica, en cultivos de heces y en cultivos de sangre.

La BRUCELOSIS también llamada "Fiebre de malta" o "Fiebre ondulante" se manifiesta inicialmente por
fiebre, cefalea, dolor vertebral e inflamación en los ganglios y se diagnostica generalmente con la
detección de anticuerpos específicos contra Brucella.

Debido a la dificultad existente para el aislamiento de las Rickettsia sp, el antígeno empleado para la
determinación de anticuerpos es el de proteus OX-19. Las RICKETTSIOSIS (tifus) engloban una amplia
gama de padecimientos transmitidos por vectores como piojos, pulgas o garrapatas, y cuyo cuadro
clínico se caracteriza por fiebre elevada, exantema y vasculitis.
La prueba de aglutinación con proteus OX-19 solo tiene utilidad como prueba de tamisaje por ser
inespecífica.

MÉTODO DE PRUEBA RÁPIDA EN PLACA.


Ejemplo de técnica

a) Al paciente se le realiza una venopunción, extrayendo la sangre en un tubo sin anticoagulante


(Tapón rojo), y es centrifugada por 10 minutos a 3000 revoluciones por minuto. Se separa el suero el
cual se utiliza para la determinación de los anticuerpos (puede extraerse con pipetas semiautomáticas).
b) Marcar en una placa de vidrio correctamente indicando el antígeno que se esté usando:
(En este caso serian los antígenos):
Tífico “O” - Salmonella typhi; Antígeno somático, pH: 6.5 ± 1.0
Tífico “H” - Salmonella typhi; Antígeno flagelar, pH: 6.5 ± 1.0
NOTA: El reactivo así como los sueros, deben alcanzar la temperatura ambiente para comenzar la
prueba.
PROCEDIMIENTO
1. Anotar el antígeno correspondiente en la placa de vidrio.
2. Depositar en cada cuadro 0.04ml de suero del paciente para cada uno de los antígenos que se vayan
a utiliza.
3. A cada gota de suero añadir una gota de cada antígeno.
4. Mezclar con un aplicador limpio (utilizar un aplicador para cada antígeno.
5. Agitar suavemente la placa por rotación (120 r.p.m) durante 2 ó 3 minutos.
6. Observar la aglutinación con ayuda de una lámpara.
Cuando hay reacción positiva se repite la técnica con diluciones las cuales se obtienen con el uso de las
siguientes cantidades del suero en la siguiente forma.

Mililitros de suero | Dilución |


0.08 | 1:20 |
0.04 | 1:40 |
0.02 | 1:80 |
0.01 | 1:160 |
0.005 | 1:320 |

¿Como debe hacerse la interpretación clínica de los resultados de la prueba de las reacciones febriles?

El informe del resultado de la prueba se hace tomando en consideración la dilución más alta que se
observe en la reacción positiva. En tifoideas los anticuerpos llegan a tener títulos diagnósticos hasta los 8
días después de la fiebre.

CRITERIOS DE INTERPRETACION DE RESULTADOS EN REACCIONES FEBRILES, PARA REALIZAR UN


DIAGNOSTICO SON:
* FIEBRE TIFOIDEA : Títulos de Ac. Mayores de 1:320 para Ag.Tífico “O” y mas de 1:80 para Ag.Tífico
“H”, mas los signos y síntomas clínicos sugestivos de esta enfermedad.
* SALMONELOSIS: Títulos de Ac. mayores de 1:320 para Ag. “O” y mas de 1:80 en Ag. paratífico A ó B.,
mas los signos y síntomas clínicos sugestivos de esta enfermedad.
* RICKETSIOSIS: Títulos mayores de 1:320 para proteusox19, en este caso se sugiere solicitar los Ac.
Anti Ricketsia.
* BRUCELOSIS: Cualquier Título Huddleson, con Rosa de Bengala positivo y los síntomas sugestivos.

¿Encontrar un método factible de realizarse en el CBTis para obtener el antígeno O y el antígeno H de


salmonella?

ANTIGENO “O”
Es un lopopolisacarido termoestable, localizado en la pared celular. La fracción interna se encuentra
asociada con la endotoxina (lípido A) y la fracción externa o terminal responsable de la especificidad
serológica. Por tratamiento de suspensiones vivas por el calor se destruye el antígeno H y Vi, y se
obtienen suspensiones O puras, que en presencia del anticuerpo especifico producen una aglutinación
lenta y granular, que no se deshace por agitación (aglutinación somática). Por lo general, el antígeno O
no es único, sino que esta constituido por diversos factores antigénicos, algunos de los cuales pueden
ser comunes con otros serotipos y permiten dividir la Salmonella en grupos O.

PREPARACION DEL ANTIGENO “O”


Se selecciona una cepa de salmonella que se quisiera obtener. Debe ser una colonia lisa, muy movible;
el cultivo seleccionado es sembrado en gelosa; se pone en cajas de Roux; se incubara a 37° C durante
24 horas; el cultivo se emulsionara con 2c.c. de solución salina; el liquido se recoge en un tubo con
perlas de vidrio y se le agrega 8 c.c. de alcohol de 96°; se tapa y se deja en la obscuridad, agitándolo
tres o cuatro veces durante 24 horas. Después se centrifuga y se lava con suero fisiológico de 4 a 5
veces y el sedimento se pone en una solución buffer.

ANTIGENO “H”
Es un antígeno termolábil, de naturaleza proteica, contenido en los flagelos. Se inactiva por el calor,
alcohol y ácidos; por el contrario, el tratamiento con formol fija los flagelos y se obtienen suspensiones
de bacterias flageladas que, aunque también contienen el antígeno O, por producirse la aglutinación con
el antígeno H mas rápidamente y a titulo mas elevado, se comportan como suspensiones flageladas
puras. La aglutinación flagelar es rápida, en forma de grumos grandes, blandos y algodonosos, que
rápidamente se deshacen por agitación.
Atendiendo al antígeno flagelar, las salmonellas pueden ser monofásicas, cuando contienen siempre el
mismo antígeno flagelar, generalmente especifico (S. Typhi, S. Paratyphi), o difásicas, cuando el
antígeno flagelar puede presentarse alternativamente en fase especifica (fase 1), característica del
serotipo, o en fase menos especifica (fase 2), que puede ser común con otras salmonella. Cuando se
aísla una Salmonella en fase 2, generalmente es necesario proceder a un inversión de fase ( Método de
Sven Gard) para reconocer el antígeno flagelar especifico y llegar a la identificación del serotipo.

PREPARACION DEL ANTIGENO “H”


Se seleccionan cepas lisas y móviles, que no sean aglutinadas por sueros anti “O”; se siembran en
gelosa simple; se incuban a 37° C durante 24 horas; después se le agregan al matraz 2c.c. de formalina
(40%); se deja tres días a temperatura del laboratorio y en la obscuridad; después se diluye con solución
salina formolada al 0.2% y se estandariza con sueros patrones.

¿Cual es la estructura química del antígeno O y el antígeno H de salmonella?

ESTRUCTURA QUIMICA AG. O

Se desconocen varios componentes de la estructura química del antígeno H de la salmonella Tiphy

¿Cual es la frecuencia de las reacciones positivas en el estado de Michoacán?

Información obtenida de la secretaria de salud de Michoacán

Acumulado | AÑO | GENERAL |


529 | 2007 | Fiebre tifoidea |
3718 | 2007 | Paratifoidea y otras enfermedades |

EDAD
FIEBRE TIFOIDEA
acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44
| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
529 |4 | 17 | 34 | 50 | 68 | 36 | 173 | 48 | 57 |6 | 36
|

PARATIFOIDEA Y OTRAS SALMONELOSIS

acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44


| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
3718 | 29 | 103 | 184 | 295 | 277 | 325 | 1366 | 295 | 434 | 143 | 267
|

SEXO (MASCULINO)

FIEBRE TIFOIDEA

acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44


| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
174 |1 | 11 | 16 | 21 | 26 | 13 | 44 | 12 | 11 |1 | 18
|

FIEBRE PARATIFOIDEA Y OTRAS SALMONELOSIS

acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44


| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
1315 | 12 | 47 | 90 | 125 | 93 | 122 | 442 | 99 | 144 | 51 | 88
|
SEXO (FEMENINO)

FIEBRE TIFOIDEA

acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44


| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
335 |3 |6 | 18 | 29 | 42 | 23 | 129 | 36 | 46 |5 | 18
|

FIEBRE PARATIFOIDEA Y OTRAS SALMONELOSIS

acumulado | -1 |1a4 |5a9 | 10 a 14 | 15 a 19 | 20 a 24 | 25 a 44


| 45 a 49 | 50 a 59 | 60 a 64 | 65+ |
2403 | 17 | 56 | 94 | 170 | 184 | 203 | 924 | 194 | 290 | 92 | 179
|

Con estas tablas hemos constatado que la edad promedio para enfermarse de la fiebre tifoidea y
paratifoidea es la de 25 a 44 y que el sexo femenino cuenta con un mayor número de casos que el sexo
masculino ocurriendo esto en el año pasado (2007).

Para complementar este trabajo agregaremos un estudio comparativo de resultados entre poblaciones
con y sin manifestaciones clínicas de enfermedades infecciosas febriles realizado en Morelia, Michoacán
por los laboratorios clínicos SERVI- MED.

INTRODUCCION
Los análisis estadísticos mostraron que, la frecuencia e intensidad de respuesta en la mayoría de las
reacciones febriles no difiere significativamente entre pacientes sanos y los remitidos por presentar
síntomas compatibles con estas enfermedades. Por lo que se sugiere utilizar con cautela este recurso,
con conocimiento del comportamiento de los anticuerpos investigados mediante estos estudios de
aglutinación. Finalmente se resumen algunas recomendaciones para evitar falsas interpretaciones de las
reacciones febriles.

Este análisis se realiza prácticamente en todo laboratorio de análisis clínicos, por su sencillez y bajo
costo, quedando la interpretación de la aglutinación, según la experiencia del analista, mientras que la
interpretación del resultado queda sujeta a la interpretación y valoración del médico que la solicitó. Es
frecuente que este estudio sea utilizado por los médicos como una prueba única de diagnóstico
contundente y sea solicitada además durante varios meses como “seguimiento” del padecimiento del
padecimiento para prescribir o suspender el antibiótico según disminuya o no el título de anticuerpos.
Por otra parte, quienes a diario realizamos estas pruebas o estamos en contacto con reportes de estos
resultados, nos damos cuenta de la frecuencia de positividad de estos resultados en la gran mayoría de
los pacientes a los que se les practica esta prueba, quedando la incertidumbre de la correlación real con
la enfermedad.
Como una forma indirecta de valorar la utilidad de este estudio, fueron sometidos a análisis 360
resultados de reacciones febriles practicados a pacientes remitidos al laboratorio por sus médicos
quienes consideraron que sus pacientes presentaron manifestaciones clínicas que hicieron sospechar
infección por cualquiera de los agentes infecciosos que investigan estos estudios, que van desde fiebre
persistente, ataque al estado general, dolor de cabeza, artralgia, sudoración, diarrea y trastornos
gastrointestinales. A estos pacientes se les consideró con presión de selección, ya que debieron reunir
condiciones clínicas compatibles con infección gastrointestinal en el momento de su inclusión.
Posteriormente estos resultados fueron comparados con 182 casos de análisis practicados a personas a
las que en su lugar de trabajo les fueron solicitados estos estudios como un trámite para su ingreso,
pasando por una revisión médica que excluía a personas con cualquier manifestación clínica compatible
con infección gastrointestinal. A estos pacientes se les consideró sin presión de selección, ya que no
debían presentar manifestaciones clínicas de enfermedad gastrointestinal al momento de admisión. No
fueron consideradas las variables de edad (ambos grupos fueron mayores de 17 años de edad) y sexo de
los pacientes, incluyéndose en el estudio a quienes reunieran los requisitos de inclusión en su respectivo
grupo. El periodo de muestreo para ambos grupos de estudio fue de noviembre de 1994 a enero de
1995. Todos los análisis fueron realizados por el mismo laboratorista el mismo día de obtenidas las
muestras y procesadas bajo el mismo sistema y lote de reactivos, para evitar sesgos por apreciación de
la intensidad de aglutinación.
RESULTADOS
Sin considerar ningún antígeno en particular, las reacciones febriles fueron positivas para uno o más
antígenos, en el 68.7 % de los pacientes que no presentaron manifestaciones clínicas de enfermedad (sin
presión de selección), mientras que el grupo que sí presento tales manifestaciones tuvo una positividad
en al menos un antígeno en el 73.0 % de los casos. No existe diferencia significativa entre la positividad
para ambos grupos (p = 0.286). Esto significa que si se considera exclusivamente el dato del resultado
positivo o negativo (sin hacer cuantificación en tubo), se hace cuestionable la utilidad de este estudio
para confirmar o descartar infección activa en los pacientes estudiados. Esto solo puede servir para
conocer quienes han estado expuestos a estos patógenos.
La persistencia de estos anticuerpos dejan la interrogante de si es que los anticuerpos reactivos son
poco específicos, de tal forma que su persistencia se debe a que se encuentran en mas de un germen y
existe un estado continuo de estimulación antigénica y producción permanente de estos anticuerpos.
Otra alternativa sería que continuamente estamos siendo expuestos a estos patógenos en
concentraciones que no alcanzan una colonización efectiva y estemos siendo protegidos, hasta que esta
capacidad es rebasada y sobreviene el estado infeccioso con la consecuente elevación de los niveles de
anticuerpos.
Considerando solo el resultado de positivo o negativo de cada antígeno (aun sin considerar cuantificación
en tubo), de acuerdo con los resultados obtenidos, la utilidad clínica de los antígenos febriles tífico “O” y
Brucella son totalmente cuestionables para descartar o confirmar diagnósticos de infección por sus
respectivos patógenos, ya que un paciente con manifestaciones clínicas de infección gastrointestinal
tiene las mismas probabilidades de resultar positivo para estos antígenos, con respecto un sujeto sano (p
> 0.05). Los antígenos que mostraron tener una mayor correlación clínica son los antígenos tífico “H” y
los paratíficos “A” y “B” (tabla No. 1), ya que fueron mas frecuentemente positivas en sujetos con
presión de selección que los asintomáticos.
Un fenómeno observado frecuentemente en este análisis es la presencia de varios antígenos positivos
simultáneamente. Al respecto, existe una tendencia a presentar un mayor número de antígenos positivos
en los pacientes con manifestaciones clínicas de enfermedad con respecto su contraparte, cuya mayoría
solo tiene positivo un antígeno. Esta reactividad contra varios antígenos simultáneamente puede ser
debida a una reactivación policlonal durante el proceso infeccioso, a una reacción cruzada o a presencia
de antígenos compartidos, mientras que la prevalencia post infecciosa de alguno de estos antígenos
puede deberse a reactividad contra fracciones más antigénicas o más representativas (abundantes) del
agente etiológico.

La importancia clínica de la presencia de varios antígenos positivos es cuestionable, aunque en el


contexto de la definición de un diagnóstico, este fenómeno puede sesgar o enmascarar el diagnóstico
final, como en el caso de algunos pacientes que tuvieron todos los antígenos positivos. Esto debe ser
evaluado siempre en correlación con la clínica del paciente para aumentar su capacidad diagnóstica.

Los antígenos que más frecuentemente se asocian (reacción cruzada?) son los antígenos “O” y “H”, con
un porcentaje de casos del 22.8 % y 13.2 % para pacientes con y sin presión respectivamente.
Una asociación de antígenos febriles positivos de relativa frecuencia para ambos grupos y con
tendencias similares fue la asociación entre los antígenos “O” y Brucella (7.8 % y 8.8 % para pacientes
con y sin presión de selección respectivamente así como los antígenos “H” y Brucella (4.7 % y 3.3 %
para pacientes con y sin presión de selección respectivamente).
La positividad simultánea para los antígenos “A” y “B” se presentó exclusivamente en pacientes con
presión de selección, con una frecuencia del 2.8 % de los casos, y no tuvieron reacción cruzada con
Brucella en sujetos sin presión de selección. lo que parece indicar que son antígenos más específicos o
de baja reacción cruzada.
Los pacientes con manifestaciones clínicas de enfermedad tuvieron reacción cruzada entre estos
antígenos y Brucella en 8.9 % y 1.1 % para las asociaciones "A”/Brucella y “B”/Brucella respectivamente.
Análisis de intensidad de reacción por antígeno
Un recurso que podría ayudar a aumentar la capacidad diagnóstica de esta prueba es la titulación de
anticuerpos mediante la técnica de dilución en tubo. Sin embargo, el análisis de las gráficas de los títulos
de reactividad de ambas poblaciones de pacientes estudiados, mostró que no hubo asociación entre el
título de anticuerpos y la enfermedad en las reacciones tíficas “O” y “H”, así como la reacción de
Brucella (gráficas anexas), llegando inclusive a presentarse mayores títulos de anticuerpos en pacientes
asintomáticos que los sintomáticos en el caso de los antígenos “O” y Brucella.

Las reacciones paratíficas “A” y “B” presentaron mayor correlación clínica, sobre todo si se aumenta el
título significativo de anticuerpos, de 1:40 en vez de 1:20 (gráficas anexas). Esto significa que los
mayores títulos de anticuerpos se presentaron en pacientes enfermos, quienes a su vez fueron positivos
en mayor proporción con respecto a pacientes asintomáticos.

Una característica observada en las reacciones paratíficas “A” es que siempre fueron de muy baja
intensidad en ambos grupos de pacientes, ya que nunca excedieron títulos de 1:40. Las reacciones
paratíficas “B” fueron de mayor intensidad con respecto las “A”, alcanzando títulos de anticuerpos de
hasta 1:320 solo en pacientes con presión de selección, mientras que en asintomáticos nunca excedieron
de títulos de 1:20, lo que parecería indicar una mayor utilidad clínica para detectar pacientes con S.
Paratyphi, incluyendo su proporción con respecto la frecuencia de S. Typhi y la baja prevalencia de
positividad simultanea con otros antígenos febriles.
En cuanto a las reacciones de Brucella, en el periodo de estudios no se encontraron pacientes en
ninguno de los grupos de trabajo con títulos mayores a 1:640. Los títulos de anticuerpos de 1:80 hasta
1:640 fueron más frecuentes en pacientes asintomáticos (gráfica 5). Solo el título 1:20 fue mas frecuente
en sintomáticos que en su contraparte, contrario a lo que se esperaría, es decir, mayores títulos de
anticuerpos en pacientes con sospecha clínica de esta enfermedad. Este dato resulta especialmente
importante, ya que este antígeno es la principal causa de investigación o solicitud de este estudio de
reacciones febriles. Los pacientes remitidos por manifestaciones clínicas compatibles con enfermedad
gastrointestinal fueron positivos para esta prueba en el 10.0 % de los casos, mientras que los remitidos
por sospecha clínica fueron positivos en el 11.5 % (p = 0.581), además de haber una mayor intensidad
de respuesta en pacientes asintomáticos, en quienes se esperaba una mayor reactividad con respecto a
pacientes con sospecha clínica de esta enfermedad.
CONCLUSIONES Y SUGERENCIAS
Debido al elevado número de casos positivos en sujetos sin manifestaciones clínicas de la enfermedad,
es importante considerar siempre algunos estudios de laboratorio adicionales que aporten elementos de
juicio con los cuales elaborar un diagnóstico más sólido. De entre estos estudios, el que mayor peso
tendrá siempre es el cultivo (coprocultivo, hemocultivo e inclusive el mielocultivo), ya que el aislamiento
del agente etiológico elimina cualquier duda.
En la salmonelosis, los anticuerpos suelen aparecer en el suero después de una semana y persisten
aumentando hasta por tres a seis semanas. Las aglutininas “O” sueles descender a niveles
insignificantes en 6 a 12 meses, en tanto que las aglutininas “H” pueden persistir a niveles elevados
hasta por años (3). Esto hace notar la necesidad de interpretar con precaución estos resultados.
El sistema urinario
El objetivo del aparato urinario es conducir la orina lejos de tus riñones y hacia el exterior de tu cuerpo.
Este sistema se divide normalmente en vías urinarias altas y bajas.
Las vías urinarias altas están formadas por los riñones, la pelvis renal y dos uréteres, y las vías urinarias
bajas están formadas por la vejiga y la uretra.
¿Qué es la orina?

1. Riñones 2. Uréter
3. Vejiga urinaria 4. Uretra
La orina es un tipo de producto de desecho que procede de los riñones. La orina es conducida a través
de la pelvis renal hacia los uréteres, que la presionan a intervalos regulares hacia abajo, hacia la vejiga.
Una vez que llega a la vejiga, la orina se queda ahí acumulada. Cuando la vejiga contiene unos 200 ml
de orina, normalmente avisa al cerebro con una indicación de que la vejiga está empezando a llenarse.
La vejiga puede contener unos 400-600 ml de orina, pero en ese momento la mayoría de nosotros tiene
que ir al baño y vaciar vejiga. Normalmente, la gente orina entre 5 y 7 veces cada día. La cantidad total
de orina es de unos 2 litros.

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