es algo que te impulsa a ser mejor, es enternecerte al oír la risa del bebé, es doblegar la inconsistencia y amar siempre, amar hasta que duela la espalda, y saber que tienes que masajear ese dolor, no como imposición, sino porque deseas tener contacto, de esa persona que hace que todo se vea diferente, que te hierve la sangre de pasión, que te da su tiempo, su felicidad, su sonrisa que te devuelve; algo más que las ganas por seguir adelante, algo más que el matar tu cuerpo. Es como el aliento, para sentirme sediento de tus besos por siempre, y de tus caricias que se dan en primavera, tu sonrisa tras ver caer la hojas, abrazarnos resguardándonos de la lluvia, tu calor en temporada fría, y tu motivación en cada paso.
Esposa es una ayuda idónea, según la Biblia.
No superior, no inferior, sino la debida complementación de la obra hermosa que es la humanidad, y para lo que fuimos llamados.
Esposa gracias por complementarme,
gracias por ya no ser solo yo, sino algo mejor, por darme la oportunidad de generar bendición, porque tú eres una, gracias por sacar lo mejor de mí, gracias por que es tan bello despertar, y verte dormida a mi lado, y al imaginar la eternidad que tuve que esperar para encontrarte, gracias por tu vida en mí, por existir en mí, por respirar de mí, por entretejerte en mí, por beber de mí, por saborear de mí por imaginar de mí, por ver no lo que soy sino lo que puedo llegar a ser, por caminar a mi lado, gracias mi amor, y gracias por enseñarme a amar.