La obra fundamental de Tomas de Aquino es la Suma teológica, que, como su
nombre indica (suma = compendio o resumen), es un tratado de las cuestiones filosófico-teológicas más importantes. La escribió en la segunda mitad del siglo XIII y su estructura es la siguiente: Cuestiones, en las que trata un tema; por ejemplo: ¿existe Dios? Cada cuestión se divide en artículos; por ejemplo, artículo 1: ¿es evidente que Dios existe? Cada artículo se divide en o objeciones, normalmente tres, en las que Tomás de Aquino ofrece los argumentos a favor de una respuesta a la pregunta del artículo; por ejemplo: sí es evidente que Dios existe. Hay que anotar que esta respuesta no es la de Santo Tomás, quien, siguiendo el ejemplo, sostiene que la existencia de Dios no nos es evidente. A continuación hay un apartado que comienza con: en cambio, donde Tomás de Aquino fundamenta desde un punto de vista teológico su pensamiento. Por ejemplo: “Leemos en el Salmista: `Dijo el necio en su corazón: no hay Dios´. Luego la existencia de Dios no es verdad evidente”. A continuación, en solución, expone el fundamento filosófico de su pensamiento; por ejemplo, las dos maneras de entender el concepto de “evidente”. Finalmente, en respuesta a las objeciones, Santo Tomás expone su pensamiento respecto a la pregunta planteada en el artículo; por ejemplo, que Dios existe es evidente por sí mismo, pero no para nosotros. En otro orden de cosas, el resumen del pensamiento de Tomás de Aquino que sigue a continuación se ha dividido en dos partes, la referente a Dios y al hombre, para facilitar su exposición.