transporte de axón neuronal retrógrado; se fija a los gangliósidos, y aumenta la excitabilidad refleja de las neuronas en la médula espinal; afecta la transmisión sináptica en la placa neuromuscular mediante la acumulación de acetilcolina. Modo de transmisión: Contaminación de heridas con esporas del Clostridium tetani.
Pueden ser heridas menores, quirúrgicas,
quemaduras, e incluso a través del cordón umbilical. Cuadro Clínico:
El primer síntoma puede ser un dolor leve en el
sitio de inoculación, seguido de hipertonicidad y espasmos de los músculos de la región.
En las primeras 48 hs aparece el trismus (dificultad
para la masticación) que progresa hacia una mayor rigidez mandibular, risa sardónica (contorsión de los músculos faciales), rigidez del cuello, disfagia progresiva, irritabilidad e hiperreflexia con rigidez extrema y espasmos de todos los músculos. El paciente se encuentra consciente y lúcido durante toda la enfermedad.
Se tiene disfagia y convulsiones con el menor
estímulo.
Se observan opistótonos (arqueamientos de la
espalda), cierre extremo de los puños y dolor, crisis de 10 a 20 segs. La fiebre elevada o la hipotermia son signos de mal pronóstico.
Del segundo al cuarto día puede presentarse
hipertensión arterial y arritmias cardiacas que aumentan la mortalidad.
Complicaciones: Desnutrición, neumonitis,
obstrucción respiratoria. Prevención:
Toxoide tetánico, solo o combinado (DPT).
Antitoxina de origen equino o humano.
Manejo adecuado de las heridas. Asepsia y antisepsia en los
materiales y procesos quirúrgicos.
Pronóstico: El tétanos neonatal puede tener una mortalidad del