Muchos lo acusan falsamente y dicen que un tal Sócrates, un sabio que se
interesa por los meteoros, que investiga cuanto hay debajo de la tierra y que convierte un argumento débil en uno fuerte. Quienes lo escuchan piensan que el que investiga esas cosas no cree en los dioses y lo han condenado ya desde hace mucho atrás. No puede decir nombres por que los desconoce a excepción de el que escribe comedias (Aristófanes). Tiene dos clases de acusadores: los que lo acaban de acusar y los que han venido haciéndolo desde hace mucho tiempo. Empieza reconociendo la acusación de Meleto. “Sócrates comete delito y hace lo que no debe al escrudiñar las cosas celestes y subterráneas, al convertir el argumento más débil en el más fuerte y al enseñar esto a los otros”. Pide a los que lo han visto dialogar que informen a los que no lo conocen, si alguien escuchó hablar de eso. Se dice que se dedica a enseñar y que cobra dinero por ello pero tampoco es cierto.