Está en la página 1de 1

No soy dueño de tus ganas de besar, ni de los motivos

que tendrás para ignorarme. No soy dueño del pasado


que quemó ideas locas en tu disco duro. No soy dueño
de la posibilidad de acercarme un poco a tus anhelos.
Si pudiera ser el dueño de un mensaje en clave Morse
cuando vas a parpadear. Si me abrieras una puerta del
presente, le darías un motivo a mi futuro. Dueño de
todo cuando sueño, y de nada cuando tengo.
Paupérrima miseria la de enamorarme así, de ti que no
lo estás de mi. Dueño de todo cuando sueño, y de nada
cuando tengo. Es vivir entre acertijos haciendole
cosquillas a estas ganas de llorar. No soy dueño de un
"sí" en tu parlamento, ni de un "no" que asesine la
esperanza. No soy dueño de lo que me quieras dar, ni
de lo que me has quitado sin saberlo. Si pudiera ser
oxígeno y colarme sigiloso hasta tu circulación, me
daría sin chistar a la tarea de caerle bien a tus sentidos.
Dueño de todo cuando sueño, y de nada cuando tengo.
Paupérrima miseria la de enamorarme así, de ti que no
lo estas de mi. Dueño de todo cuando sueño, y de nada
cuando tengo. Es vivir entre acertijos haciéndole
cosquillas a estas ganas de llorar...

También podría gustarte