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Molinux en una máquina virtual

¿Qué es una máquina virtual?


¿Te imaginas poder instalar un ordenador completo en tu equipo como si
fuese un programa?, los programas de virtualización nos permiten crear
(virtualizar) ordenadores completos dentro del nuestro, sobre los que
podemos instalar el sistema operativo que queramos. Esto nos permite
probar y practicar con sistemas operativos nuevos antes de decidirnos a
usarlos como el sistema operativo principal en nuestro ordenador.

Una máquina física (pc u ordenador) esta formada por diferentes recursos hardware, cada
uno de ellos destinado a realizar una labor específica y establecida, por ejemplo, el
procesador, se encarga de realizar la gran mayoría de los cálculos necesarios para
ejecutar los procesos (aplicaciones) y su gestión; la memoria ram, que es donde se
almacenan los datos que el procesador necesita para ejecutar esos procesos, es muy
rápida pero volátil; el disco duro, es una memoria al igual que la ram, aunque mas lenta y
persistente, o lo que es lo mismo, que cuando se queda sin alimentación eléctrica los
datos siguen estando en vez de perderse, etc…, pues una virtualización no es otra cosa
que reservar fracciones de estos componentes y que sean accesibles desde el programa
de máquinas virtuales, para que este pueda repartir estos recursos entre las diferentes
máquinas que estén funcionando.
Por esto, veremos que cuando creamos una máquina virtual es necesario especificar que
fracción de estos recursos vamos a dejar que gestione cada una de las máquinas. Con
una máquina virtual lo que conseguimos es tener un sistema operativo (SO) (invitado)
dentro de otro (local). Ese SO invitado tiene un espacio de nuestro disco duro asignado
que lo usará como un disco duro normal y que es donde estará instalado. En este SO
invitado podemos hacer de todo, probar cualquier programa, experimentar, modificar,
etc..., puesto que cualquier acción que realicemos dentro de él, no afectará a nuestro SO
local.
Si por cualquier razón “rompemos” el SO invitado, basta con echar mano de una backup y
sustituirla por la imagen averiada.
Nota
En resumen, tenemos uno o varios “PCs completos” dentro de nuestro SO local con
los que podemos experimentar todo lo que queramos sin temor a romper nada de
nuestro ordenador.

Descargar la máquina virtual


Para empezar hay que dejar varias cosas claras:
1. Para llevar a cabo este tema necesitamos un PC potente, tanto en
procesador (no tan necesario) como en RAM (MUY necesario), ya
que se almacenará en memoria varios Sistemas Operativos a la
vez.
2. Para llevar a cabo la creación de la máquina virtual disponemos
de muchas opciones, algunas de las mas conocidas son VMWare y
VirtualBox.Nosotros usaremos el programa VirtualBox, el cual es software libre,
mucho más ligero (consume menos recursos del ordenador), es más sencillo y
existe tanto para Windows, MacOs, como para GNU/Linux.
Para la demostración instalaremos la aplicación de máquinas virtuales en un sistema
operativo Windows XP SP2, y crearemos una máquina virtual con Molinux. Además de
eso instalaremos las herramientas necesarias para aprovechar todas las funcionalidades
que nos proporciona VirtualBox.
Antes de hacer cualquier cosa con máquinas virtuales, es aconsejable, en Windows, crear
un punto de restauración del sistema (Incio→Todos los
programas→Accesorios→Herramientas del sistema→Recuperar sistema).
Como hemos dicho, la aplicación VirtualBox es software libre, por lo que podemos utilizar
y disponer de su código fuente sin necesidad de pagar ningún tipo de licencia (cosa que
no pasa con VMWare).
Realizamos la descarga del instalador desde la página oficial (www.virtualbox.org):
Navegaremos por los menús de la página hasta el sitio de las descargas, o podemos
hacer clic en el siguiente enlace, aquí, para ir directamente.
Una vez en la zona de descargas debemos elegir la versión que queremos descargar,
normalmente estará la última que haya salido y el sistema operativo donde la vamos a
instalar.
Con esto ya tendremos nuestra aplicación de virtualización de sistemas operativos
descargada. Ahora vamos a instalarla en el ordenador.

Instalar la máquina virtual


Una vez disponemos del programa de instalación descargado,
necesitaremos instalarlo en el sistema operativo local, para ello
debemos localizar su ubicación y hacer doble clic en él, entonces
seguiremos los pasos indicados por el asistente de la misma.
Una vez hemos realizado el proceso de instalación, respondiendo a las preguntas
comunes en estos procesos, ya podemos lanzar la aplicación. Se nos habrá creado un
acceso directo en el escritorio.
Si no fuera así, podemos acceder a la aplicación desde el menú Inicio→Todos los
programas→Oracle VM VirtualBox→VitualBox.

Nada más abrir el programa nos encontramos con una ventana de bienvenida. Si no
tuviéramos el idioma en español, podríamos hacerlo desde el menú
Archivo→Preferencias→Idioma→Español
Una vez tenemos instalada y configurada la aplicación podemos pasar a crear nuestra
máquina virtual.

Creación de la máquina virtual


Una vez hemos cargado la aplicación veremos que existen tres
zonas diferenciadas en la misma. El menú de la propia aplicación,
desde donde podemos acceder a todas las funciones que nos ofrece
y bajo él un menú de accesos directos a las funciones más
importantes, como crear, borrar, configurar, etc, máquinas.
En la segunda sección, el menú de la izquierda veremos como,
inicialmente, no hay nada mostrado. Este es el menú de selección de
máquinas virtuales, puesto que es posible tener, no solo instaladas
sino funcionando varias máquinas, todo depende de la potencia física del ordenador
anfitrión.
En la tercera sección vemos que tampoco se nos muestra información relevante, esto es
porque, en esta sección se nos muestra un informe completo de las características de la
máquina seleccionada en ese momento.
Ahora vamos a crear nuestra propia máquina virtual. Como vemos en la parte del menú
superior, en los accesos directos, tenemos el botón "Nueva", tenemos que hacer clic en el
mismo.
A partir de ahí, tendremos que seguir los pasos del asistente de creación, que nos irá
preguntando en cada momento cuales son las opciones que mas se ajustan a la máquina
que queremos crear.
Creación de una máquina virtual (II)
Como hemos visto a partir de este momento se nos irán preguntando todos aquellos
detalles e información necesaria para crear la máquina.

Primero deberemos introducir el nombre que le pondremos a la máquina virtual, para


diferenciarla de otras que podamos crear. Y elegir el sistema operativo que pretendemos
instalar, para que la aplicación sepa como comunicarse con él. En nuestro caso
elegiremos UBUNTU, puesto que no disponemos de la opción con el nombre del sistema
que queremos instalar (Molinux), pero este se basa directamente en la distribución
UBUNTU, que si que está en la lista.
El primero de los recursos que tenemos que especificar es la memoria RAM que
destinaremos a esa máquina en concreto. Esto significa que como máximo, la aplicación
permitirá que se utilice esta cantidad de memoria. En nuestro caso destinaremos 512MB
de las 1500MB que dispone nuestra máquina anfitrión. Estos 512MB dejarán de estar
disponibles para la máquina anfitrión una vez que ejecutemos la máquina virtual que
estamos configurando, ya que los reserva para esta.
Una vez tenemos selecciona la cantidad de memoria, debemos especificar el espacio de
disco duro que destinaremos. En este paso se nos ofrece la posibilidad de crear un disco
nuevo o usar uno existente, seleccionaremos la opción Crear disco virtual nuevo.

En este momento entramos al asistente para crear el disco virtual.

Elegiremos tamaño fijo para tener controlado el tamaño exacto que usaremos.
Elegimos el tamaño del disco, con 8 Gb (8000 Mb) tendremos espacio para instalar el
sistema y otros programas si fuera necesario.

El asistente para la creación del disco virtual muestra en su última ventana un resumen
con los datos del disco.
Una vez creado el disco ya podemos terminar el asistente de la máquina virtual, que nos
ofrece un resumen de todos los datos de la máquina creada.

Ya tenemos nuestra máquina virtual lista para instalar una distribución Molinux.
Edición y configuración de una máquina existente
Una vez que tenemos creada la máquina virtual, todavía podemos realizar algunos
ajustes finos sobre la misma. Además podemos realizar modificaciones sobre la
configuración inicial.
Para ajustar y realizar las modificaciones tendremos que seleccionar la máquina a
configurar y pulsar sobre el icono Configuración.

La imagen anterior nos muestra el menú con todas las posibles opciones de
configuración, entre las que se encuentran algunas como la memoria que queremos
asignar a la tarjeta gráfica, montar la unidad lectora de CDROM/DVD, los dispositivos
USB, etc... Veremos con detalle alguna de las mismas.
En la imagen siguiente podemos ver las opciones de configuración de Almacenamiento.
Desde aquí podemos indicarle a la máquina que cuando se inicie utilice el lector como si
fuera propio, por lo que si introducimos en el lector un CD con la distribución de Molinux al
iniciar la misma, veremos como se muestra el menú de arranque e instalación al que
estamos acostumbrados cuando iniciamos nuestro ordenador con el CDROM dentro.
Una vez en este punto tan solo tenemos que seguir el procedimiento normal de
instalación del sistema, tal y como se ha explicado en la lección Instalación paso a paso
del primer módulo I del curso.
Además de esta forma también podemos elegir otra para instalar el sistema sin necesidad
de copiar el archivo imagen a un CD. Como hemos visto en la parte de descarga del
sistema operativo, en la página oficial de Molinux, este nos lo descargamos como un
archivo de imagen .ISO, nuestra aplicación de máquinas virtuales entiende este formato y
es capaz de arrancarlo directamente sin necesidad de hacer la copia a CD. Para ello, en
esta misma ventana de propiedades podemos indicar que lea ese archivo y que lo lance
como si fuera el CD, según se muestra en la imagen siguiente.
Otra de las opciones más potentes e importantes que nos ofrece esta aplicación, es la
posibilidad de compartir directorios del sistema anfitrión con el sistema instalado en la
máquina virtual. Para ello debemos configurar en las propiedades de la máquina cual será
el directorio a compartir, y después configurarlo en el sistema instalado. Dependiendo del
sistema que instalemos en la máquina virtual habrá que hacerlo de una forma u otra.
Como vemos en la imagen, en el recuadro azul se nos muestran las acciones que
debemos realizar en el sistema instalado en la máquina para poder acceder al directorio
compartido. Estas acciones las veremos con mas detalles en la sección Instalación de las
funciones adicionales.

Instalación de Molinux en la máquina virtual


Para poder instalar correctamente las herramientas adicionales de VirtualBox, debemos
tener instalado el sistema en la máquina virtual que hemos creado.
Para ello tendremos que iniciar la máquina y cuando se nos muestre el escritorio,
cerraremos la pantalla de bienvenida y haremos clic con el puntero del ratón sobre el
icono Instalar Molinux del escritorio, tal y como se explica en la lección "Instalar el
sistema operativo Molinux" de este curso.
Nota
Es posible que cuando queramos instalar el sistema operativo, la ventana que se
muestra para realizar el proceso de instalación no quepa dentro el espacio útil del que
disponemos, haciendo imposible acceder a los botones de avance del mismo. Puesto
que resolver este contratiempo supondría la aplicación de ciertos conceptos técnicos
que no tienen cabida en este curso, a continuación veremos como hacerlo una forma
muy sencilla, usando el sentido común.
Para que todo el contenido de la ventana quepa dentro del espacio marcado por la
resolución estándar con la que se arranca la máquina (800x600), lo único que
tendremos que hacer es reducir el tamaño de letra de las ventanas, para ello iremos al
menú Sistema→Preferencias→Apariencia.

Una vez aquí tendremos que cambiar el tamaño de las letras que afectan a las
ventanas, para ello haremos clic en la pestaña Tipografías y dentro de la misma en la
primera de las opciones "Tipografía para la aplicación", tal y como se muestra en la
siguiente imagen:

Nos aparecerá la ventana tipo de formato de caracteres, tan solo necesitamos poner
el tamaño de letra al más pequeño que se nos permite, "Tamaño 6", darle a aceptar, y
cerrar la ventana de apariencia. Veremos como la ventana que se nos había abierto
para la instalación ha reducido su tamaño y ya podemos redimensionarla
verticalmente, y desplazarla horizontalmente para acceder a los botones que nos
permitirán continuar con la instalación.
Después de completar la instalación, deberemos volver a cambiar el tamaño de la
letra a "Tamaño 10" para que no sea tan difícil de leer.

Una vez tengamos el sistema instalado y comencemos a trabajar con nuestra Molinux
instalada en una máquina virtual, podemos echar en falta opciones de configuración
gráfica (como el cambio de resolución de pantalla), integración de dispositivos de nuestro
ordenador (cómo alguna webcam), o funcionalidades tales como compartir archivos desde
nuestro sistema nativo al sistema de ficheros de nuestro Molinux virtualizado (y
viceversa). Para poder realizar todo esto debemos instalar las funciones adicionales de
VirtualBox, tarea muy sencilla como veremos a continuación:
Nota
Si inicialmente hemos configurado nuestra máquina virtual para que lea la imagen
descargada de la página de Molinux, una vez hemos realizado el proceso de
instalación deberemos volver a configurar el dispositivo CD/DVD, puesto que al tener
prioridad en la secuencia de arranque del sistema, volverá a cargarse el modo Live,
para ello, antes de iniciar, deberemos ir de nuevo a las propiedades de la máquina
virtual, como hemos visto anteriormente e indicar que ahora el dispositivo CD/DVD
queda asignado a la unidad en sí, no a la imagen del sistema, lo haremos tal y como
se ve en la siguiente imagen:

Ahora que tenemos la instalación básica realizada tendremos que prepararlo para que
cumpla los requisitos mínimos para poder instalar las herramientas adicionales de la
máquina virtual.

Instalación de las funciones adicionales


Lo primero que tenemos que hacer es iniciar la máquina virtual en concreto, esto lo
hacemos seleccionando desde el menú de la izquierda la máquina y haciendo clic en el
icono Iniciar situado la barra superior.
Una vez hemos iniciado la máquina veremos que nos ha aparecido una barra de menús
nueva en la propia ventana de la máquina, desde aquí podemos realizar una variada
cantidad de opciones, entre las que se encuentra instalar las funciones adicionales:

Cuando seleccionemos esta opción veremos como el sistema monta automáticamente un


dispositivo CDROM y nos abre una carpeta donde vemos los diferentes archivos
ejecutables que necesitamos para instalar la funciones según que sistema operativo sea.
Es posible que antes nos salga un mensaje de advertencia indicando que si estamos
seguros que queremos ejecutar el comando, indicaremos que sí pulsando en el botón
"Ejecutar" que nos aparece en esa misma ventana.
Tras esto puede ser que nos salga un mensaje de error, si es así, lo cerraremos y
reiniciaremos la máquina para que se efectúen los cambios, si no nos sale el error, nos
habrá aparecido en el escritorio un nuevo icono con aspecto de CD que tendrá el nombre
"VBOXADDITIONS_Version", si hacemos doble clic en el veremos que hay una lista de
ficheros, antes de ejecutar ninguno de ellos, debemos saber cual es el archivo que nos
interesa.
Tendremos que identificar el fichero correcto para nuestro sistema y arquitectura de
ordenador. El sistema lo tenemos fácil, deberemos elegir aquel que en su nombre indique
"VBoxLinuxAdditions-" y para la arquitectura tendremos que saber si nuestra
máquina tiene el procesador Intel o Amd, la manera de saberlo es mirar en nuestra torre o
cerca del teclado si es un portátil, ahí encontraremos una pegatina que indica la
arquitectura interna del ordenador, si es Intel elegiremos el archivo que termina por "x86"
y si es "AMD" elegiremos el que en el nombre tiene indicado "amd". En la imagen anterior
se puede ver que nosotros hemos utilizado Intel.
Como hemos dicho, para instalar estas funciones deberemos hacerlo desde un terminal y
lanzar la aplicación con derechos de administración. Para ello lanzamos el terminal, desde
Aplicaciones→Accesorios→Terminal del menú que se nos presenta en la esquina
superior izquierda de la ventana donde se está ejecutando la máquina virtual con Molinux.
Para poder ejecutar la aplicación que instala las herramientas necesitaremos que nuestro
sistema cumpla con unos requisitos de aplicaciones instaladas, como son la aplicación
make, el compilardor GCC y las cabeceras del kernel. En esta versión de Molinux estas
herramientas ya vienen instaladas, pero en caso de que durante la instalación nos de
error, se resuelve todo ejecutando estos dos comandos:
Comando
$sudo apt-get install make gcc linux-libc-dev linux-source
$ln -s /usr/src/linux-source-2.6.32.21 linux

Veremos que se ha iniciado un proceso de descarga e instalación, si en algún momento


nos pregunta sobre el paquete en concreto a instalar, deberemos elegir el que
corresponda con la versión del kernel que tenemos instalado en nuestro sistema, por lo
que a nosotros respecta, la versión es 2.6.32.21
Si todo ha salido bien, y no hemos obtenido ningún error, ya podemos ejecutar el
comando de instalación de las herramientas, tal y como se indica a continuación:

Comando
$sudo sh /media/VBOXADDITIONS_3.2.6_63112/VBoxLinuxAdditions-
x86.run

Cuando ejecutemos un comando que comience con “sudo”, seguramente se nos pida que
introduzcamos una contraseña, momento en el cuál teclearemos la contraseña que
especificamos en el proceso de instalación de Molinux y tras ello pulsaremos la tecla
“Enter” o “Intro” del teclado.
Si todo ha ido bien deberemos de ver algo similar a lo que muestra la siguiente imagen:
Una vez hemos instalado las funciones adicionales debemos reiniciar la máquina para
que estas hagan efecto, y así poder disfrutar de una mejora sustancial en el manejo de
nuestra Molinux virtualizada.
En el siguiente apartado veremos como acceder al directorio compartido que hemos
configurado anteriormente, al crear la máquina virtual.

Configurar un directorio compartido


Como hemos visto, para configurar un directorio compartido entre el sistema operativo
anfitrión y el sistema operativo instalado en la máquina, debemos inicialmente configurarlo
en las opciones de la máquina tal cual se dice en la sección de Edición y configuración de
una máquina existente.
Una vez tenemos hecho esto, y después de haber instalado las funciones adicionales,
tenemos que acceder al directorio desde el sistema operativo instalado en la máquina.
Para ello iniciaremos la máquina, tal y como haríamos normalmente para arrancarla. Una
vez la máquina está arrancada debemos montar el directorio anfitrión en un directorio
creado en el sistema virtual.
Para ello lo primero que haremos será crear un directorio dentro del sistema virtual en el
que montaremos el directorio del sistema anfitrión.
Comando
$sudo mkdir compartido
Una vez tenemos el directorio creado, debemos montar el directorio del sistema
anfitrión:

$sudo mount -t vboxsf compartir compartido


• vboxsf, es el sistema de archivo de VirtualBox.
• compartir, es el identificador que le hemos puesto al directorio cuando lo
hemos configurado en las propiedades de la máquina.
• compartido, es el directorio del sistema operativo virtual que utilizaremos
para llegar el directorio del sistema operativo anfitrión.

Ya tenemos, nuestra máquina funcionando, configurada y con todas las funciones


necesarias para sacarle todo el partido.

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