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Canción de un poeta

POR TI MUJER
Los sonidos jadeantes
que salen de mi garganta,
se elevan raudos al cielo
denotando el desconsuelo,
tan inmenso que me espanta.

Son lamentos de desdichas,


anhelos de tu presencia,
ansias de aspirar la esencia,
de tu aliento permufado,
con las flores del Edén,
de tu cuerpo cincelada
cuyo recuerdo me aqueja,
de tu cuerpo escultural
formado de terciopelo
tan frágil como el cristal
y mas suave que la brisa
que besa el agua del mar.

Te quiero niña y no puedo


besar tus lindos cabellos,
y tus ojos entornados,
tan hermosos y azulados
que solo al mirarme en ellos,
me conmueven los destellos
de tus pupilas divinas.

Te quiero con tanto amor,


que lo que mas me duele
no es el físico dolor
con que el destino me hiere.

Mis penas por ti las siento,


mis penas, mujer de ensueño
por ti solo las lamento.

Sufro porque ellos me privan


de tu adorable presencia.

Sufro porque la vida


sin gozar tu compañía,
es para mi la mayor
de las agonías.

Sufro y no puedo, mujer,

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Luis Carlos Piñana
Canción de un poeta
vivir sin verte a mi lado,
porque la vida sin ti,
es el martirio mas cruel
que padezco para mi.

ANGUSTIA
Hoy quisiera tu frente coronar
con una guirnalda de oro y de rosas,
porque sufran de envidia las hermosas
mujeres, que te quieren imitar.
Cumples años y te quiero cantar,
tiernas canciones de amor, melodiosas
y saetas de notas cadenciosas,
por el espacio te quiero mandar.

Mas no puedo, son tantas las angustias


que llevo dentro de mi alma, escondidas
en el fondo de mi empeño mágico,
esculpiendo mis ilusiones mustias
sin la luz de tus pupilas perdidas
en el mármol de mi amor nostálgico.

MI SUEÑO
He soñado esta noche en tu mañana,
he despertado sin poderte tener,
entre sueños he jurado que te quiero
que no te voy a perder.

¡Que perversa inocencia hay en tu boca!,


que a su roce me hace enmudecer,
que siento muy dentro que te anhelo,
que te quiero querer.

¡Que penetrante camino en tu mirada!


que arrastro todo mi ser,
a tu vereda de fuego y de hielo
donde siento que voy a renacer.

¿Que lujuria de vida hay en tus manos?


Por que en ellas mueven de placer,
Que se bate mi alma en eterno duelo,

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Canción de un poeta
Que te quiero y no te voy a perder.

CANCION A UNA CHIQUILLA

¡Que Hermosa eres chiquilla!


¡como brillan, cariño
tus ojos, entre las sombras!.

Mi anhelo iba creciendo


cuando te miraba y sonreías.
Y en la noche bulliciosa
despierto mi fe, dormida,
me estremecí de repente
una luz, una corriente
que me taladraba el alma.

Dándole el adiós a esa noche


de delicias saturada.
Y la fiebre desprendía
de mis manos, como llamas
al contacto de las tuyas
se crecía o se apagaba.

Y mis labios atrevidos,


se posaron en tu frente.
Y mis ansias, como ríos
alocados que se buscan.
Y se encuentran y se enlazan
en el río principal,
un vigoroso caudal
en palabras transformando,
palabras de amor que tu oías,
expectante y silenciosa,
callada y estremecida,
que con placer tus ojos reían.

EFLUVIOS DE AMOR
Olvido que te quiero por un momento
y vuelvo a recordarlo al instante,
es algo que quema por dentro,
que no se como explicarte.

Vivo un sueño que mantengo


con la respiración entrecortada,

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Canción de un poeta
que delata mil motivos que tengo
por volver a encontrar tu mirada.

¡Como explicar lo que siento!


Cuando la vida tanto clama,
Pero te veo y sigo sonriendo
Y viviéndola con ganas.

Difícil salir de este agujero negro


que me absorbe, que me llama,
pero mas difícil es vivir en el,
y no sentir nada.

UNA CANCION PARA ELLA


Como llega la tormenta,
arrasando las quimeras,
que escapan cual fieras,
que por el fuego se ahuyentan.

Silba después de muerto,


al paso de una canción
saturada, la esperanza,
que alivia mi corazón.

Una canción que del cielo


ha llegado a mi ventana,
para traerme el consuelo
de tus amores, galana.

Suspiran tus labios,


entreabiertos.
Ya se acercan y se alejan,
ya se cierran ya me abrasan,
atrayendo a los míos
que están fríos,
que están de tu amor
sedientos.

Y están ansiosos de besos


de caricias y de amores,
de gozar de embeleso,
del aroma de tus flores.

Será mi amor mas intenso,


que la misma intensidad

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Canción de un poeta
para medirlo, tan inmenso
que no hallaras cantidad.

Y será tan grande y tan bella


tanta la felicidad,
que solo pensando en ella,
¡quisiera alcanzarla ya!.

DOLO Y PASION
Siento nostalgia en mi alma,
amargura en el corazón,
y solo existes tu en el mundo,
que me arranque este dolor.

Son dolores que penetran,


como un volcán en erupción.
Son dolores que encuentran,
tus caricias y perdón.

Entrecortado esta mi aliento


faltándome la respiración.
Pero no permitiré este tormento,
y lograre mi salvación.

Hallare una nueva vida,


colmada de risas e ilusión.
Ganare esta partida,
y desbordara nuestra pasión.

FLORECIENDO
Rózame en tus alas de misterio,
Que quiero estremecer de calor.
Para sentir que tu pecho es el cielo,
Que yo soy, un flor.

Riégame con el agua de tus besos,


los pétalos marchitos son mi piel.
Y al roce de tus gotas, de tus besos,
volveré, a florecer.

Extiéndeme por mi cuerpo cual abono,

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Canción de un poeta
tus ojos, marrones de color.
Que llene mi salvia de dulzores,
Y extienda en el aire,
Perfumes de, emocion.

Y déjame que duerma en tu ausencia,


cansado de placer.
Y déjame perdido en tu viento, yo desnudo,
Vestido mi alma de, tu ser.

MADRE
Madre mía.
Tu que diste la vida,
Tu que vistes crecer,
Tu que me viste niño,
¿Cómo se puede hacer tanto,
tanto y tanto a la vez?

Ver crecer a tus hijos


y quererlos también.
Tener a un padre al lado
que tanto adorabas también.

Porque Dios a mi me dio hijas,


pero quererlas, las quiero
como tu me enseñaste a querer.

Dios te bendiga también,


por tener tantos hijos
y quererlos a todos, a la vez.

Solo una cosa mas,


te pido;
A la vez que
me cuidas a mi,
cuida a los míos también.

PERDON
Quiero gritar y muy fuerte,
Que culpable también fui,
Por creer en quien decía,
¡Por divertirse! ¡Vivir!.

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Canción de un poeta
Por la libertad que amo,
que no equivale a morir,
a morir matando hermanos,
a morir matando, ¡Oh, vil!.

Que se maten entre ellos,


narcos, traficantes, camellos y yo.
Y dejemos de engañar al mundo,
y dejemos de hacerlo sufrir.

Por defender nuestro único orden,


que equivale a destrucción,
que equivale, simplemente,
a horror, codicia y perdición.

O, por decirlo mas suave,


a eso que llamamos honor,
para transformar el mundo,
ese, que no entiendo yo,
llamado por nosotros solo
ORO, RIQUEZAS,
DINERO, ¡DOLOR!.

ASI ES ELLA
Estaba ciego, estaba enamorado,
en sus ojos me miraba.
Y al mirarla, embriagado, la besaba.
Y al besarla quedaba trastornado.

Sus ojos son estrellas y esperanzas


que alientan y dan luz a mi mirada,
me encanta ver su melena rizada,
brillando al sol, como acero de lanzas.

Su voz es de ángel, de timbres gloriosos


que me encantan y llevan dulcemente
entre espacios mágicos, nuevamente
a lugares de ensueños deliciosos.

Así es ella, de pelo rizado y fino,


rubio, suave, de curvas bien trazadas.
Sus manos tersas, suaves, alargadas,
sedosas como la flor de espino.

Pienso todas las tardes en un paseo.

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Canción de un poeta
Ansioso nuevamente de encontrarla
y cuando al fin logre divisarla,
temblando me acercare de deseo.

Me acercare y le diré: Muero por ti.


Y saltaran sus ojos sobre su presa,
brillaran sus pupilas de princesa
fieras y cautivas, al mirarme a mi.

Será de mis pupilas el recreo,


estático y dichoso al contemplarla.
Mirarla silencioso y adorarla,
escuchando de su voz un ronroneo.

Fantásticos y de amores dichosos,


yo quisiera gozar su amor ardiente
y estar de su voz celestial pendiente
de sus claros acentos armoniosos.

Su mirada: La de la Virgen María.


Su alma, sensible y enamorada.
Tan graciosa, bella y sonrosada
que sin ella, moriría.

Por fin me acariciaran sus miradas.


Por fin al mirarla, notare su calor.
Por fin sentiré en sus labios amor.
Por fin sus caricias delicadas.

Amor, ya he puesto en mi pecho un altar,


impulsiva mujer enamorada,
de caricias y mimos rodeada,
que siempre tendrás, para no olvidar.

RAFAGAS DE SENTIMIENTO
¿Qué siento hoy por ti?
Si el día que me dejaste,
todo el amor del mundo,
lloraba en mi corazón.

Con el alma en la mano te digo;


Si esta semilla de amor muere,
surgirá una nueva
flor de vida,

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sobre mi alma herida,
brota la mujer mejor.

La mujer que da la vida,


arroyándola todo
como el arroyo que nace
Mansamente, poco a poco,
y después en cascadas,
Cautivando, refrescando
como tu cuerpo,
tus palabras, tus miradas.

Sueños, frases,
Labios, flores.
¿Cómo miraban tus ojos,
ascuas de amor encendidas,
esencias, risas y besos,
volteando mis deseos,
mi pasión y mi esperanza.

No estarás ya nunca sola,


porque estas dentro de mi.
En el sol y en las estrellas,
en la tierra y en el mar,
será nuestra felicidad,
como el revoloteo
de una golondrina
en el cielo,
una cascada de espuma,
un replique de campanas,
Entre rayos del sol.

Sonriendo estarán tus labios,


tus ojos pardos
Y tu piel morena.
Y tu corazón,
temblando por tus pupilas,
me estarán diciendo,
¡Me estarán gritando!
que estará tu alma, nena, rebosando amor
y de gozo, llena.

FLOR DE ESPINO
Como linda flor de espino
de aroma fuerte y fragante,

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Canción de un poeta
oloroso y penetrante,
es la niña que yo adoro.

Como la flor es hermosa,


como ella delicada,
aunque viva descuidada,
y no aprecie su tesoro.

Ese tesoro que encierra


en su cuerpo delicado,
perfectamente trazado
Con maestría genial;

El tesoro de su tipo,
de ese cuerpo tan divino,
tan delicado, tan fino,
tan grandioso y colosal.

Es un cuerpo de hechura oriental


que no existió jamas en la historia,
en un cuerpo formado en la gloria
por los serafines del Arte Divino,
que trazaron con destreza singular.

Unas formas tan bonitas, tan esbeltas,


con sus líneas tan sencillas, tan perfectas
y tan bellas, como la flor del espino.

Es un cuerpo de reina o de diosa,


que no pueden pintar los artistas,
que no pueden decir los poetas.
No es posible jamas intentarlo.
Ni es posible jamas concebirlo.
Ni es posible jamas expresarlo.

Ríe, niña, flor hermosa y peligrosa.


Ríe y canta flor de espino.
Inocente de caricias y pasiones,
que alegras con tus canciones,
y te meces en los sueños
de tu joven corazón.

Eres maravillosa,
el ideal de mis sueños,
que se hacen realidad;
Eres mi mayor deseo.
Eres mi amor y mi vida.
Eres toda mi esperanza.

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Canción de un poeta
Eres mi luz y mi gloria.
Eres toda mi ilusión.

Ríe y canta mi amor.


Flor hermosa y peligrosa.
Mientras muy cerca de ti,
caminare a tu lado,
con el alma enamorada
y el corazón prisionero,
de un hombre que te venera,
y que a tus plantas se humilla;

Un Hombre que aun respira,


que aun conserva su vida
para dedicártela a ti,
con constancia y con amor,
con esperanza y con mimo,
con atención y cariño,
con la ternura de un hombre,
Que te adora de verdad.

Por tu cuerpo tan perfecto,


tan delicado y esbelto,
que a tu paso se levantan
oleadas de rumor.

En tu carita tan hermosa


y tan risueña,
que refleja tu candor,
por ser chiquilla tan buena,
¡Por eso a ti, te quiero yo!.

NECESITO DECIRTE
Necesito decirte en un verso,
¡Como siento y como quiero!
a la flor que mas prefiero,
entre todas las demás.

Quiero tenerte a mi lado,


y contarte claramente
las ideas que a mi mente,
me sugiere el corazón.

Quiero para mi, tus ojos,


mirarme por siempre en ellos.

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Y observar en sus destellos,
el fuego de una pasión.

Quiero guardarte entre rosas,


celoso de tus encantos,
que son tan bellos y tantos,
que tengo miedo a perder.

Quiero adorar tu melena


caída entre hebras finas,
que de cerca me fascina,
y que ansío poseer.

Quiero tenerte en mis brazos,


acariciar tus cabellos,
besar tus ojos bellos,
y tus manos de marfil.

Quiero mis trabas cantar,


lanzar mis ansias al viento,
y decir el sentimiento,
Que me invade, nada mas.

Quiero y te quiero a ti sola,


la flor bonita y graciosa,
la mas bella y primorosa,
de las que yo conocí.

CUANDO REINA EL CORAZON


Dolor , amargura, desengaño.
Que pequeñas las palabras
y que grandes por el daño
que causaron en mi alma.

Es mi vida un tormento,
si puede llamarse vida
al continuo sufrimiento
que da la dicha perdida.

Quedan mis esperanzas lejanas.


Mueren mis ilusiones
y todos los sueños
que me dieron mis pasiones.

Mezclada con el dolor

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Canción de un poeta
solo queda en mi alma,
un ansia de amor mejor.
Con mas fuerza, con mas calma.

Y estas ansias rebosantes,


a veces se convierten
en deseos torturantes,
de alegrías que padecen.

Es la sed ardiente y pura,


fantasmas de mi tortura,
espejismo en el desierto,
que produce el desconcierto.

Desconcierto de encontradas emociones


que me invaden suavemente
mil extrañas sensaciones
que se graban en mi mente.

Temores que no entiendo.


Inquietudes que me amargan.
Tristezas que lamento.
Y algo mas, que no comprendo.

Pero un día,
en mis espesas tinieblas,
en mis abismos mas profundos,
en mi tenebroso mundo,
en mi horizonte de nieblas...

Surgira un rayo de esperanza,


como una estrella de fuego,
Como una noche sin luna,
como estela luminosa,
policromada de luces
en las aguas inquietantes,
de los gigantescos mares.

MI MUSA
Tu eres la musa de mis sueños,
de esperanzas y tristezas,
de alegrías y pasiones,
Y de miles de ilusiones.

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Canción de un poeta
Quiero para mi tus ojos.
Mirarme por siempre en ellos,
y sentir en tu mirada,
el fuego de una pasión.

Eres la musa de mis sueños,


que amansa en mis desvelos,
Y apacigua los desdeños
de amarguras y de anhelos.

Eres la musa de mis sueños,


de mi dicha, ¡tan divina!.
Por eso te quiero tanto,
y por tu por tu forma de ser,
por eso a ti: Te he de querer.

RIMAS EN MI MENTE
Tu sabes como yo,
Amada mujer mía,
porque quiero que reine en casa,
la paz de nuestro amor.

Lo que tu fuiste y lo que eres,


lo que serás para mi, tu lo ignoras.
Y yo se, chiquilla, que tu me adoras.

Los dos hemos cedido el centro, al corazón.


Estuve buscando, ciego,
con afán torpe vehemente,
rimas en mi mente.

He buscado entre flores


Y en los confines del cielo,
la expresión de mis amores.

Solución a mis desvelos.


La luz de la inspiración.
Y de improviso salieron
disparadas como flechas
de mis entrañas,
Las poesías hechas,
que encerraba, el corazón.

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¿PERDONARA?
¡Ten compasión de mi angustia, “Señor”!
Perdóname por haberla querido
con tal amor, que el suyo he ofendido.

¡Envíame los rayos de su amor!


Alivia esta cruz que he merecido.
Atiende mis plegarias, ¡”Señor”!.

Mis lagrimas vertidas te ofrezco.


Mi lucha, mis tristezas y alegrías.
Mi afán, mis esperanzas, mi pasión.
Mi constancia por ser mejor.

Grande es tu bondad,
mas nada merezco.
Faltas fueron mis locas fantasías,
Y poca, “Señor”, mi devoción.

¿Perdonara?, si tu quieres.
¿Perdonara el martirio padecido?
Mas olvidarla seria desvarío.

Imposible será olvidar el frío


que deja mi corazón herido,
arrastrando de el un sueño querido,
como las hojas, en su marcha, el río.

INQUIETUDES
Quedaron mis esperanzas lejanas.
Murieron mis ilusiones
y todos los sueños,
que me dieron mis pasiones.

Mezclada con el dolor,


solo quedo en mi alma,
un ansia de amor mejor.
Con mas fuera, con mas calma.

Y estas ansias rebosantes,


a veces se convertían,
en deseos torturantes.

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Canción de un poeta
Y otras veces parecían,
deseos que son amores,
amores que son ensueños,
Ensueños de mil colores.

Pesadillas en mis sueños.


Fantasmas de mi tortura.
Espejismo en el desierto,
por la sed ardiente y pura,
que produce el desconcierto.

Encontradas emociones,
que me invaden suavemente.
Mil extrañas sensaciones,
que se graban en mi mente,
De temores que no entiendo,
Inquietudes que me amargan.
Tristezas que lamento.
Y algo, que no comprendo.

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