GENERAL PAYOLLE

NÚMERO 7@
40 CÉNTIMOS
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ésiMi^s^Ui
 LA GUERRA
^ ^ ILUSTRADA
DIRECTOR

AUGUSTO RIERA
LA SITUACIÓN
Kl (•(iMipiís lie es|ier;i se |-ir(il(iiii!;i. Los ;ili;id(is mi emi-
s¡,t;ii(>ii ;imi;ii' de l.il iiiodii s u s esl'uei'Zits. e(iiid)iiiiii' de l;d
ni;inei;i, ini |iliin .«eiiei'al de ofensivo q u e les peíaiiila ediinl-
lie sei'ias venlajas s o b r e s n s a d v e r s a r i o s . Sucede, por In
e o n l r a r i o , q u e eiiando en mío de los frenles ataca uno de
los ejéi'cilos aliados con g r a n empuje, ¡lor falla, de b u e n a
c(iiii'(l¡iiaci('in II poi' im|)osibilidad iiialerial ii por olra
cansa, c u a l q u i e r a , los d e m á s ejércilos eoliyados iierinaiu'-
cen inactivos y p e r m i t e n así que el e n e m i g o a c u n u d e fuer-
zas allí d o n d e m á s le c o n v i e n e .
A c u n s c c u e n c i a de esa falla de uiddad de accii'm. a.
l'csiir (le ciiiinld liiiii diclii) his |K'ri(Mlic(is de lns niiciinioí
:ili;i(l;is, les es ÍJiipusil)l(! n los ejéiril(;s de |;i Cmídriiiile
i'viliii' (|iie s u s eoiilrailos se r(^|i()ii,Li;in di' lus 'jiiliies iiiie
se les ;isesl;i en un |iinilii deleiiinnield. e ¡ninedir (inc ir-
ai-i-ionen en nli'a parle. Así se priiloni;;! la hirlia v a d v i e i i e
el e s p e c l a d n r iinparcial (pie. para lerniliiar la "aieía-i de
ini modo decisivo, es decii', eojí la derruía cimqiíela e irre-
niediahle de u n o de los cnnLendientes, lia, de p a s a r niii-
rlm l i e m p o .
¿.\ qué .se debe esa falla d e u n i d a d de aceii'iii n n e re-
vela el nuido de c o m b a l i r de los aliadns. A diL-^ cairsas prin-
cipales : a. q u e los lOshados .Mayoi'es y lus n n n i s l r o s de las
diversas naciones no lian, c o n s e g u i d o todavíii p o n e r s e de

uno <le los mortero., ,le «rueso calibre de , ^ ^ disponen lo. ingleses para.batir las trincheras enemiga.
(i'ot. tcntral Neivs)
 1198 LA GUERRA ILUSTRADA
Templo francés destruido por la artillería en un pueblo de loa Vosgos
acuerdo acei'ca de las opci'aciones simultáneas que na de
emprender cada uno de los ejércitos, y a que no tienen
todavía éstos el material, el maquinismo — así le llaman
ahora—que necesitan. ¿Se duda de ello? Cuando a prime-
ros de Junio emprendió el general Brussilov su fulminan-
te y formidable ofensiva contra el ejército austríaco, al
ejército anglo-francés no le era posible empezar aún sus
arremetidas contra las huestes alemanas, y eslo permi-
tió que pudiesen marchar a Rusia varios cuerpos de ejér-
cito, cuyo número se ignora. Los refuerzos alemanes ate-
nuaron las consecuencias de la derrota de los ejércitos aus-
tríacos. Y que el ejército ruso carecía del número necesa-
rio de armas y municiones se deduce de la inmovilidad
en que permaneció detrás de sus trincheras desde Riga al
Pripet el que mandaba Kuropatkin y que ahora está a las
órdenes del general Russky. Hace, precisamente, pocos días
que un periódico italiano decía que si los rusos del sector
septentrional de la inmensa línea de Oriente no habían
atacado á las tropas de Hindenburg a mediados de Junio
se debía a que carecían del material necesario para em-
prender un avance que luviei'a probabilidades de buen
éxilo.
l'(ji' lo que hace a ponerse de acuerdo los distintos Es-
tados Mayores de las diez naciones coligadas es posible
que se llegue a conseguir una unidad relativa de acción;
pero no hay que imaginar que puedan tan diversos elc-
uicntos—como ha sucedido en todas las coaliciones—te-
ner un mismo pensamiento y realizar puntualmente lo
que dispouga un comité central, como suponen algunos
optimistas. Es evidente que los diversos organismos di-
rectores de los distintos ejércitos querrán oblcner un mis-
mo resultado : la ' derrola
' del enemigo; pero no es menos
claro que no emplearán para ello iguales medios, que no
seguirán idéntico cainiuo, que no coincidirán en apreciar
de un modo semejante todos los detalles. De ahí una causa
de inferioridad. De ahí esos largos períodos de inacción
(Fot, Max Wippcrling)
que hacen creer algunos en el triunl'o de los Imperios Cen-
trales.
Si los aliados permanecen poco menos que inactivos y
sólo en el Somme alcanzan triunfos, los alemanes no se
muestran mucho más emprendedores.
Dijérase que concentran sus fuerzas, que preparan nue-
vos contingentes de tropas para emprender una acometida
de esas que dejan en pos de sí una estela de sangre.
¿Por qué tardan tanto en embestir? Quizá dentro de
l)oco lo sepamos; por ahora hay que limitarse a señalar
la inacción de los combatientes.
ESTE GALLO QUE NO CANTA...
La empresa de los Dardauclos fué fiuicsLa para los alia-
dos. La concibieron mal, la acometieron sin provecho, re-
nunciaron a ella sin gloria. Fué un fracaso material, pues
perdieron muchos miles de soldados, no pocos cañones y
siete acorazados. Fué un fracaso moral que hizo que se
crecieran los turcos, que se alegraran los alemanes y que
deploraran los aliados el error de los que concibieron
aquel avance-que debía darles con los Estrechos la pose-
sión de Constantinopla y que sólo produjo un desengaño
tremendo. La primera expedición n Oriente no fué nada
brillante.
Los austro-alemanes atacaron a Servia al mismo tiem-
po que los búlgaros. Los aliados, y especialmente'los pe-
riódicos de Londres y París, aseguraron que Servia sería
socorrida a tiempo. Aconsejaban que así fuera razones de
orden moral y material. Era oportuno deiBostrar que ías
grandes potencias saben y pueden amparar a las naciones
satélites que giran en torno de ellas. Si Bélgica no pudo ser
protegida, lo serían Servia y Montenegro.
Pasaron días. Avanzaban lentamente los alemanes
arremetían con furia los búlgaros, animosos de vengar an-
 LA GUERRA ILUSTRADA
liguas derrotas, defendíanse con lesón los servios; pero cl
socorro pronieiido no llegaba. Servia fué vencida, ocupa-
da, repartida. Y cuando los últimos soldados del reino mo-
ribundo peleaban en los últimos jirones de la patria, des-
embarcaron en Salónica los primeros contingentes de tro-
pas anglo-rrancesas.
«Si hemos llegado tui'de para evitar la catástrofe, siem-
pre estaremos a tiempo para reparai' o\ daño recibido, para
castigar a los agresores.»
Desembarcaron los aliados en Salónica y allí ])ermane-
cieron. Fortificaron las cercanías de la ciudad y las escua-
dras de sus naciones les aseguraban una retirada segura
en caso de que los búlgaro-germanos liubiesen violado la
neutralidad de Grecia. Recibieron refuerzos, salvaron los
restos del ejército servio, y a principios del verano dijeron
los diarios de la Gran Bretaña y de Francia que el ejército
de Salónica, mandado por el general Sarrail y compuesto
de unos cuatrocientos mil hombres, estaba esperando el
momento oportuno ¡¡ara aplastar a los búlgaros, recon-
quistar Servia y coi'lar la comunicación entre Berlín y
Conslantinopla, abierta por Mackensen.
Empezó la ofensiva rusa y se volvi('> a hablar de la que
emprendería en breve el ejército de Salónica; iiero no se
pasó de los dichos a los hechos. Se continuaba ponderando
la abundancia de material de que disponía el ejército an-
glo-francés de Macedonia. Acudieron tropas rusas e ita-
lianas a reforzarlo. Formaron parte de él las divisiones ser-
vias rehechas en Corfú.
¿Quién no había de ci'eer, cuando Rumaiua inlci'vino
en la atroz pelea, que el ejército de Salónica se decidiría
por fm a emprender la decantada ofensiva? ¿Quién duda-
ra de ello después de leer la ¡¡ren.sa de Roma, de París, de
Londres ?
Ha habido un conato de ofensiva : los sei'vios, después
de rudo combate, vencieron a los búlgaros, les arrojaron
de las posiciones que defendían con empeño y llegaron
El Kronprinz inspeccionando algunas de las tropas que combaten delante de Verdún
1100
hasta las fronteras de sü triste patria. I^ero de ahí no se
ha ])asado. El centro y el ala derecha del ejército de Sa-
rrail jiei'jnam'cen inmóviles. ¿Qué ocurre?
La Tribune de Chicago, que en muchas ocasiones ha
demostrado estar bien informada, da la clave del enigma
—suponiendo que no esté equivocada.
«Los que extrañan la inacción de las Iropas aliadas do
Salónica, desconocen sin duda alguna lo quebrado del te-
rreno en que han de operar si se deciden a tomar la ofensiva.
Las dificultades con que tropezarán son tantas y tan enor-
mes que toda preparación es poca, tocia precaución insuh-
ciente. Si ese ejército no es muy numeroso es posible que
no pueda vencer la resistencia del adversario; si dispone
de grandes masas de hombres, no podrá ser municionado a
causa de la falta de caminos. ¿Resolverá el general Sarrail
el problema que parece insoluble?»
Algo de lo que dice la Tribune debe ser cierto cuando
no llega el esperado y anunciado avance. Pero si es así
¿cómo se espera a última hora para resolver las dificulta-
des que debía conocer quien ordenó la expedición?
Hace poco tiempo celebraba la ])rensa aliada la previ-
sión del señor Briand, que es quien a toda costa quiso que
permanecieran en Salónica las tropas fra,ncesas. ¿Qué van
a decir los diarios del presidente del Consejo de l^'rancia
si esos cientos de miles de hombres continúan durante
unos meses más clavados en el terreno que ocu|tan? Y so-
bre todo ¿qué van a decir los rumanos, que pusieron por
cDudición de su entrada en liza el avance del ejército de
Salónica? ¿Habrá que temer una segunda edición de los
Dardanelos?
EL l>()I)ER DE ALEMANIA
Hay golpes que derriban de momento a un luchador.
Hay otros que producen desastrosos efectos mucho tiempo
después de recibidos.
(Fot. Union)
1200 LA GUERRA ILUSTRADA

Grupo (le soldados escoceses volviendo de las trincheras (l'ot. Central A'cifs;

]íl coronel 'J'inan del pi'imer regimiento de espahís condecorando algunos oficiales y soldados después de un combate en el Somme
(Fot. Brangcr)
 LA GUERRA ILUSTRADA 1201

Prisioneros alemanes cogidos por los ingleses después de la victoria obtenida en Guillemoiit (l''ot. Central News)

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ingleses a los alemanes en uno de los combates del Somme (Fut. Central JS'eus}
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Fuentes
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Pudd/e^n ^reRegis Boulogn

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Ifeymoutfi Regis^ji^^^

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C A N A L DE LA. M A N C H A
Cayeuxsur-Merp S^t

MAPA DE LA EEGIÓN SUDESTE DE INGLATEBEA

Sobre esta región h a n efectuado varias incursiones los dirigibles alemanes, bombardeando diversas poblaciones, siendo los condados de Kent, Essex, Hertford, Norfolk y Lincoln los más perjudicados, perdiendo
los alemanes cuatro aeronaves.
 ~1JA UUERKHriT3üT5"rn2YDír-

AVANCE DE LAS TEOPAS BRITÁNICAS EN LA COLONIA ALEMANA UEL ÁFRICA O R I E N T A L . ESCENA EN UNA ESTACIÓN DEL F E R R O C A E E I L CENTRAL CERCA DE KILOSSA, CAPITAL DE LA COLONIA
fFot. Central News)
 LA GUERRA ILUSTRADA 1205

Lii ()í(>iisiv;i, n i
s;i (li! Iiis ('¡('irilos IIIIIMIIÍHIDS IKII' el .üviic- l;il('s coiisecnciiriiis. F.shí ()1I1¡}Í-;Í(I;I ;I ciivijir (iCiciiiIcs \- sol-
n l B'russl'lnv (le^lHiés de ciiiilcii meses de haber ejercido dadus a los luiros ci lo los rusos les aconielen en Arme-
so mávimo emniiie mnniílesla, ahora, a los njos de mi nia; no pueden dejar mdeíeiisa a Hiil.^aria, y con iiioUvo
• • I , 'I,,,,., ^,, „(i,..|,.¡.| de la iiilerveneión de Jlimiania lia de acudir a, Traiisil-
liiKMi observador, loda sii ( in a( la. ^ ,,,,;,.,.,,i., , i ,,,,„,„. „„„,.,; ,.
J>udo parecer de momeiilo (]ue aquoliüs lurniidubles vaiiia, nuídio con(|uislada ya poi- (d nuevo enemií^-o al qii(\
cómbales diarios (iiie hicieron caer primeramente las Ií Austria, desfallecida, no puede oponer resistencia alguna.
,c "d,.dPrpns'. vniehiep-ndesbaralabanbrigada.s, divisio- Y amenaza
Y amenaza enen Lobriicha,
Dobmclia, pega pega en en Transilvania,
I raí re-
; : ' e í ^ : \ r ^ ^ ^ a ios del extremo Sur contra la. sisle en los Ralkanes se defiende en Kranca. no reí rocede
oiilraal'i,(pies
•baírera de pi;;ira di- los Cárpalos y cobrando cientos de ^'-^^l^.^;^'^^^^^^^^ ''
•, 1 • • 1 ,1,,'.,,, ...dwiwiM I II O ra cosa ciue ( c i i M a la oiensiva nisa, en uani/iii.
miles de prisioneros, no bahian .ons(,-n,do qi ^^^^^ ,,Mli/ando AI.Mnania un esfuerzo s o h r e l m m a i i o .
(p.ebrantar a los austríacos. Dejaron a da pruebas de una
alaca \' seenergía
deriendeincicibie
coiilra ylodospor m, lan nía
sus enemigos
Ahora se advierte que hicieron miiclio mas. iJi jai OM a u,i | uv_ , ;. , , , ',
mos obliga a que la admiren. La (jiiieren
los eiércitos austro-húngaros lan malparados que. a no ravdloso alaca aun la temen al verla de pie. Multiplican sus
acudir en su auxilio las tropas al.mianas. Lemberg v Ko- ipie a eslos n s
vel habi'ían caldo ya en manos de los rusos, y Przemysl y caída ; pcio aun

01- los alemanes en el frente del Somme (Fot. Central A'cifs.)

Depósito de graiiacUis de mano abandonado
aliKlues, cenliiplicaii el poder de sus aunas, concilan coii-
Cracovia cojH)eei'ian los horrores del asedio, y las llamiras
ira ella el odio de todos los jiaíses; pei'o i'esisle impiivida
húngaras estarían ocupadas ya poi' los cosacos y los ru-
Y cuando alaca a su vez relrocedeii los asallantes.
manos.
¿Duiaiii mui'lio liempo lodavia ese esfuerzo tremendo'.'
El daño causado por las Iropas de Hriissilov a los aus-
Con ser muy grande, el poder de Alemania h a de aca-
tro-húngaros es tan grande y de efectos lan duraderos qne
bar cediendo. Lucha sola conlra diez naciones. Austria y
Austria no ha reaccionado todavía. Se ha necesitado que
'•rinijiiía. esbin aniquiladas; son s('ilii un simulacro. Biilga-
llega rail las divisiones alemanas para contener la inva-
lia, es débil. .Memania combale eonlia Indos sus adversa-
sión rumana, i>ai'a, hacer que los i'iisos se eslrellai-in aiile
laos. y no llaipua. Si su prejiaraeií'm fué laiga. su acci('in
las líneas de defensa de Kovel y Lemberg.
es obsiinada. formidable, heroica.
Extrañan algunos estrategas a la violeta que Rinden-
b u r g . n o haya resjiondido con algunos de sus tremendos
aisaltos a las ofensivas cpie (d enemigo emprende y sostiene
contra los Imperios Centrales. DOCUMENTOS HISTÓRICOS
Fijándose un poco se ve que es de lodo punió imposi-
ble que se haga más de lo que se haice.
Alemania tiene que atender a la defensa del fi'cnte oc-
cidental, atacado ahora por más de cuarenta divisiones DISCURSO DEL CANCIJ.LER ALEMÁN
alio.:das en el Somme y por veinticinco divisiones cerca de
X'erdún. Se ve pi'ecisada a guarnecer la exlensa línea que .Abiertas las sesiones del Reiehstag el 28 de Sepliemlu'e.
va de Riga al l'ripel. donde un descuido piidieía lener ía- despu(''S del discurso del pi'esidenli\ lianéi la palatu'a e
 1206 LA GUERRA ILUSTRADA
canciller Bellimnnn-Holhvcg, y so
expresó así:
«Cuando después de la declaración de gue-
rra de Italia a Austria-Hungría nuestro em-
bajador dejó Roma, hicimos saber al gobier-
no italiano que sus tropas, en los combates
con los austro-húngaros, chocarían también
con los soldados alemanes. Las tropas alema-
nas combaten en el frente italiano al lado de
sus hermanos los austro-húngaros, así es que
de hecho el estado de guerra con Italia exis-
tía ya, pero la declaración formal no se ha-
bía producido.
"Indudablemente Italia retrocedía ante las
consecuencias fatales que habían de resultar
después de la guerra para sus relaciones eco-
nómicas con Alemania. Por otra parte Eoma
nos hubiera dejado de buena gana la inicia-
tiva de tal medida, pero nosotros no tenía-
mos motivos para secundar el juego de Ita-
lia. Los esfuerzos ininterrumpidos de la Cuá-
druple para decidir a Italia a declararnos la
guerra prueban que nuestra táctica estabíi
fijada.
"Durante más de un año el gobierno iialia-
no resistió las solicitaciones de la Cuádruple;
pero para hacer la guerra Italia gasta car-
bón y dinero de Inglaterra. Su decisión fué sú-
bitamente provocada por la presión que In-
glaterra ejerce con t a n t a despreocupación so-
bre sus aliados lo mismo que sobre los neu-
trales, y que entonces hizo más fuerte. Tam- Niños rusos paseando en Varsovia al cuidado de niñeras alemanas
bién las aspiraciones italianas en los Balka-
nes tuvieron una grande influencia sobre el
gobierno de Eoma. Nadie ignora que en los Ballsanes Italia quiere am-
pliar la zona de su influencia en las regiones que forman naturalmente
parte de la esfera de influencia de Grecia. P a r a no verse excluida de los
Balkanes, Italia creyó conveniente para ella tomar parte en la expedi-
ción del general Sarrail. Esto provocó un nuevo encuentro entre alema-
nes e italianos en Macedonia. Fué entonces que sobrevino la declaración
de guerra de Italia a Alemania.
«Al mismo tiempo Rumania se unía a nuestros enemigos. Nuestras re-
laciones con Rumania antes de la guerra se basaban sobre un tratado de
alianza concluido en un principio tan sólo entre Austria-Hungría y Ru-
mania y ampliado luego por la adhesión de Alemania e Italia por un
tratado en que los contratantes se comprometían a prestarse mutuamente
el apoyo de las armas en caso de ataque de un tercero sin provocación.
»A1 principio de la guerra actual el rey Carlos opinaba francamente
que Rumania era deudora desde hace treinta años a las Potencias Cen-
trales de la existencia política del país y de sus enormes progresos, debía
colocarse al lado de estas potencias, no sólo para observar el tratado
concluido, sino para salvaguardar el honor del país. Sin embargo, el di-
funto rey desautorizó el tratado apoyándose en el hecho de que si bien
Rumania fué advertida de la gestión austro-húngara cerca de Servia,
no fué consultada en el Consejo de la Corona que había de ser decisivo.
El difunto rey no pudo hacer prevalecer su opinión contra el gobierno.
Grupo de prisioneros italianos
(Fot. Intcrnationalez IlUistrations-Verlag)
cuyo jefe, sin preocuparse del tratado existente, se mostró, desde un prin-
cipio, favorable a la Cuádruple.
»Pooo después murió el rey a consecuencia de los tormentos morales
que sufrió viendo a Rumania traicionar a sus aliados. Desde entonces la
política rumana, bajo la dirección del ministro Bratiano, consistió en
buscar un arreglo en perjuicio de la parte que sucumbiría en la lucha,
mundial, sin que Rumania se impusiese grandes sacrificios. Sólo se tra-
taba para ella de escoger el momento propicio de ver a qvié lado se pon-
dría definitivamente la victoria para escoger el instante favorable. Ya
durante el primer año de guerra, probablemente después de la caída de
Lemberg, Bratiano concluyó, sin saberlo su soberano, un tratado de neu-
tralidad con Rusia. Después de la caída de Przemysl juzgó llegado el mo-
mento para entenderse con nuestros adversarios sobre el pago que se le
daría por su intervención. Las negociaciones fracasaron. Rumania de-
seaba aumentar sus inmensos territoiúos con la anexión de la Bulsovina;
Servia había puesto los ojos sobre Banat, mientras que Rumania pedía
no tan sólo la Bulíovína, sino una parte de territorio húngaro hasta Theiss.
Así no se llegó a ningún acuerdo, pero la neutralidad rumana se afirmó
más en su posición favorable a la Cuádruple, a fin de sostener el bloqueo
del hambre efectuado por Inglaterra reteniendo los cereales comprados
por nosotros. Tué necesaria una muy enérgica presión por nuestra parte
para obtener la entrega de dichos cereales.
"Después de nuestra victoriosa acometida
cerca de Gorlitz, Bratiano no supo si se ha-
bía puesto del lado de la victoria. Las nego-
ciaciones en suspenso con la Cuádruple llega-
ron visiblemente a un período de estancamien-
to. Ha sido siempre la situación militar la
que ha guiado a la política rumana.
"Cuando en primavera se produjo la ofen-
siva rusa y comenzó la ofensiva del Soma,
Bratiano creyó ver el hundimiento de las Po-
tencias Centrales. Desde entonces se decidió a
tomar parte en la refriega. Las Potencias de
la Cuádruple en sus negociaciones con él te-
nían ahora la mano más libre que antes. Ser-
via había sido vencida. Los protectores de los
pequeños Estados débiles no habían de tomar
ahora en consideración los antiguos deseos de
anexión. Podían mostrarse más pródigos res-
pecto a Rumania. A mediados de Agosto, Bra-
tiano se hallaba de acuerdo en principio con
nuestros adversarios y sólo se reservó escoger
la hora de la inter\'ención, que hizo depender
de ciertas condiciones de orden militar.
"El rey de Rumania nos había anunciado
frecuentemente que en todos los casos perma-
necería neutral. El día 5 de Febrero el minis-
tro de Rumania en Berlín me dio por orden
del Rey la promesa de que el Rey mantendría
la neutralidad de Rumania y que el gobierno
estaba dispuesto a observarla. Bratiano de-
claraba al barón von Busche que se adhería
por completo a la declaración del Rey.
"No nos dejamos engañar. Estuvimos sin
cesar al corriente de las negociaciones de Bra-
(Fot. Lcipzigcr rrcssc-Buro) tiano; sin cesar llamamos la atención del so-
 LA GUERRA ILUSTRADA 1207
bei'iuio recordáiulüle sus promesas de neutralidad y revelándole al mismo
tiempo las gestiones secretas de su presidente del Consejo. Lo mismo hici- HECHOS CULMINANTES
mos cerca de numerosos personajes políticos rumanos que obraban conven-
cidos contra la guerra. El Eey declaró repetidas veces que no creía que Bra- 26 de Septiembre. — Los alemanes reconocen, que los
tiano estuviese ligado o se ligase con la Cuádruple. Todavía seis días an- [ranco-inijles atacan con vigor y con una abundancia de
tes de la declaración de guerra, el rey declaró a nuestro ministro que ariillería que produce efectos desastrosos; pero aseguran
sabía que la gran mayoría del pueblo rumano no quería la guerra. Llegó
el Rey a declarar a uno de sus amigos íntimos que no flrmai-ía la orden
que no vencerán la resistencia que les oponen las tropas
de movilización. El día 26 de Agosto, el de la declaración de guerra de (jermánicas.—Un dirigible y unos aviones atacan la ciudad
Rumania, declaraba el Eey al ministro de Austria-Hungría que no quería de Bacaresl y matan a 65 personas y hieren a unas 300. •
la guerra. Y hay que mencionar este hecho curioso : Bratiano aseguraba Los ingleses se apoderan de la aldea de Guedecourt ven-
aquel mismo día al representante de Austria-Hungría que estaba decidido
a mantener la neutralidad y que el resultado del Consejo de la Corona
ciendo la empeñada resistencia de los alemanes. Los búl-
fijado para el día siguiente confirmaría la veracidad de sus palabras. garos y alemanes atacan a los rnso-runiaiios y no consi-
»E1 día 23 de Agosto las mismas potencias de la Cuádrule no sabían gnen nin<iúii resultado.
aún en qué época Eumania declararía la guerra. Sabemos esto de buena 27 de Septiembre. — F u n e s os ataques alemanes contra
procedencia. En seguida los acontecimientos se precipitaron. Segiín noti-
cias absolutamente fidedignas, Eusia presentó de súbito un ultimátum pi-
la nueva línea francesa. Continúa el combate. Los ingle-
diendo el paso libre por la frontera no fortificada de Eumania en caso de ses toman una nueva línea de trincheras a los alemanes.
l ú e ésta no hubiese entrado en la refriega el día 28 de Agosto. Las tropas alemanas que al mando del general Falkenhayn
»0s dejo en libertad de juzgar si el ultimátum no era una comedia pre- fueron llevadas a Transilvania^ atacan a los rumanos y íes
parada por Bratiano a fin de hacer decidir al Eey que estaba vacilante. obligan a retroceder.—Lucha de artilletna en la región del
"Por fin la suerte estuvo echada. Briand en su último discurso hizo
muchas alabanzas de la grandeza de la actitud de Eumania. Carso entre austríacos c italianos.
«Las circunstancias políticas en las cuales
las palabras reales, las palabras de los minis-
tros no tienen ningún valor, hacen dudar del
ideal de libertad, justicia y civilización por el
cual la Cuádruple pretende combatir.
"Como lo he declarado ya, Eumania hace
depender, desde el comienzo de la guerra, su
Política egoísta únicamente de su apreciación
de la situación militar general.
«Eumania se equivoca desde el punto de
vista militar como se equivocó con sus amigos
de la Cuádruple desde el punto de vista po-
lítico. Esperábase que la entrada de Euma-
nia en la guerra provocaría la separación de
Turquía y Bulgaria de nosotros. Pero Turquía
y Bulgaria no son Eumania ni Italia. Su fide-
lidad de aliadas se mantiene firme e inque-
brantable y en los campos de batalla de Do-
brucha se han festejado sus brillantes victo-
rias. Los duros combates continúan en el este
y oeste desde los comienzos de Julio. Los ata-
ques obstinados de ingleses y franceses con-
tinúan casi sin interrupción. La grande ofen-
siva común del ejército aliado, anunciada ha-
cía mucho tiempo, se ha producido ya. Ahora
iban a triunfar; el trente de los alemanes de-
testados iba a ser roto ; Francia y Bélgica iban
a ser libertadas; la guerra iba a ser llevada
a Alemania, más allá del Rhin.
«¿Y qué ha ocurrido? Franceses e ingleses
han obtenido ventajas, nuestra primera línea
ha sido llevada algunos kilómetros más atrás,
tenemos que lamentar también grandes pér-
didas en hombres y material, esto es inevita-
ble en una ofensiva de tan vasto empuje, pero
el hundimiento, la ruptura no se han produ-
cido, como tampoco el repliegue en el frente
occidental. Podemos perder otros pueblos, pero
el enemigo no pasará.
«En el frente Taso también ha fracasado la
ofensiva del enemigo.
«I,a tentativa hecha en los Balkanes de in-
terceptarnos Bulgaria y Turquía y ae pro-
ducir una paz por separado, también ha sido
un fracaso.
«A pesar de esto, el objetivo de la guerra
continúa siendo para nuestros enemigos las
conquistas territoriales y nuestro aniquila-
miento.
«Desde el primer día la guerra ha sido tan
sólo para nosotros una defensa, un derecho a
la vida y a la libertad. Por esto hemos sido
los primeros en declararnos dispuestos a ha-
cer la paz, pero no podemos hacer proposi-
ciones en este momento ante la actitud de
nuestros adversarios.»
El orador habla luego de los motivos de
la supuesta guerra de revancha y del cerco
de la supremacía inglesa. Combate el discurso
de Briand y niega la influencia reaccionaria de
Alemania en Rusia. Dice que Inglaterra quiere
poner a Alemania a aus pies, destruir su com-
petencia y tener el mundo entero bajo su do-
tninio.
"Un hombre de Estado alemán que temiese
emplear contra tal enemigo todos loa medios
Pfopios para abreviar la guerra, debería ser
Trincheras austríacas en los Alpes Dolomitas
ahorcado.))
(Fot. Berliner Ilustrations-Uesellschaft)
 1208 LA G U E R R A ILUSTRADA

La banda de música de la Guardia Eeal servia entrando en el .jardín de las Tnllerías de París para asistir a un festival
(Fot. Branuer)

28 d e Septiembre. — Los rusas ciniircndcn. inicras filii- nar terreno en torno de llanauíne.—Ijis ruínanos // los ru-
(/iics iil (irslf (le Lvlz-I; ij en Ionio de Ilalicks.—Prosigue la sos atacan en ¡tobracha; ¡tero son rechazados rcpeilda-
Incluí cnlrc iilciiiiinrs ij niiiiaitos cerca de llcriiiannskull. iiiente.
29 d e Septiembre. — Los búUjarns. cu vii rudo coiilni- 5 de Octubre. — Los rumanos repasan el Danubio, te-
(ilti(¡uc. ohliíjdii (I rclroccdcr <i los scrriiis cu la rc<i¡ón de iiiiendo ser i'opados. Pelean en Dobrucha sin, resultado de-
Kaiiiuiíccalaii.—Los iiujleses alanii) ij loinan. en ¡xirlc. el cisivo.—Los (rastriacos toman unas tiincheras en Colbri-
reduelo de Schicabeii, haciendo (id!) ¡irisioticros.—l^os ru- con.—Los serrios avanzan ij pasan el río Cerna. Se en-
Diaiios reconuccii <iuc tuvieron ¡pie relirarsc de Hermanns- cuentran a 11 kilf'imetros de MDnaslii-. Avanzan por los
tadl hacia el sur. niímtes Bahúna.—Los franceses loman ah/anas Irinchi'ras
30 d e Septiembre. — Lf>s alcuioaes dan cítenla de haber cerca de Prci/icourl.
derrolado al primer ejéreiln rumano cerca de llcrnianns-
ladl, haciéndole 3,000 prisioneros y apoderándose de iji'an
canl.idad de maicrial de (¡uerra. Los alemanes iban man- NOTAS
dados por el (jencral Falkenhajin.—Prosiijuc la lucha en
torno de Lemberfi entre rusos ij alemanes. Lí(íAS l U ' S A S
1." d e Octubre. — Los rusos, niandadus por el í/rn-ral
Tcherhalcher. atacan al enennfjü // le desalojan de carias La reconstitución de la «Liga de los Zemstvo», que tan buenos servi-
cios prestó durante la guerra del Japón como institución subsidiaria de
trin<'¡h'ras en el sector sur; también avanzan ¡lor a ni lias la Cruz Koja, ha alcanzado jiroporciones colcsales. Actualmente esa Liga
orillas del Zlola-Lii)a.—Los italianos asaltan ij loman ana cuenta en sus numerosos bospitales de campaña y de las ciudad(!s 172,000 ca-
juisición del enemigo en el Carso. mas, de las cuales 2,100 están destinadas a tuberculosos y 4,600 a los heri-
dos que necesitan curas hidroterápicas.
2 d e Octubre. — Los rusos obtienen ventajas en todos
Pero ha surgido hace poco tiempo, diez y seis meses, otra instituciói?
los seclores donde pelean.—Lo,v raim.uios pasan el Danu- benéfica QUG por un milagro de actividad ha superado a su predece::ora.
bio piir un pucule de Inirca.s cutre liustchuk ij Turtitkai.— La "Liga de los Ayuntamientos» tiene a la hora de ésta más de 300,000 (sa-
Los ini/tcscs se apuderan de Rancourl-VAbbuiic.—En los rnas a disposición de los desdichados que caen en los campos de batalla.
Ihilkancs tus linlíjaros atacan a los iiujleses, que han ¡¡asa- La "Liga de los Zemstvo», si ha sido vencida por lo que hace al número
de camas, triunfa sin rival en otra clase de servicio. Presta magníficos ser-
lto el Siriniiii. vicios a las autoridades militares para proveer de toda clase de materia-
3 de Octubre. — Los rusos obtienen ventajas a orillas les necesarios para los soldados. Hasta ahora ha entregado 4 millones de
del Zlota-Lipa i/ hacen l,S()() prisioneros. Avanzan también pellizas, 4 millcnts de tiendas de campaña, 3 millones de sacos para trin-
en los Cárpalos. — Los iileniaiics ciintini'uiii aninzando en cheras, 138 millones de prendas de lencería y enorme cantidad de medi-
Transilvania. camentos e intrumentos quirúrgicos. Posee 246 trenes sanitarios, 72 esta-
blecimientos de baño desmontables y transportables, 1,300 automóvilea
4 de Octubre. — Preparación de aiiitlcria en el írente y 420 camiones para el transporte de víveres y mercancías. Lo que en llu-
anijlo-francés /y alai/urs parciales coiiiiacenlcs a ¡xidcr i/a- sia no sabe hacer la inepta burocracia, lo realizan los particulares.

E n e l p r ó x i m o n ú m e r o p u b l i c a p o m o s e l r e t r a t o d e l g e n e r a l v e n G a l l w i t z ; e l m a p a d e la r e g l ó n d e G o r i t z i a , c o n e l e s t a d o
c o m p a r a t i v o de los a v a n c e s efectuados por los Italianos a partir del día 6 de Agosto, e n colores, y retratos y grabados
de actualidad en negro
 HISTORIA DE LAS NACIONES
El constante interés con que hemos seguido siempre el movimiento literario contemporáneo nos ha puesto en
presencia de una producción única en el mundo, que con verdadero placer presentamos al público español ehisj)a-
noamericano: LA HISTORIA DE LAS NACIONES, publicada en Londres por la casa Hutchinson y Co.
El asunto tratado en esta obra realmente extraordinaria, basta ya por si solo para atraer y cautivar hasta el má.a
alto grado la atención de todos los lectores. La historia de la Civilización desde su origen en el valle del Nilo; l;i
del Arte desde sus cunas de Grecia e Italia; la de las Ciencias a partir de los primeros piísos dados i)or los pueblos
orientales; la de las Conquistas realizadas por los reyes egipcios, por los emperadores romanos, por los capitanes
de la Edad media, por los más famosos guerreros de nuestros tiempos, las proezas de AJp.javdro el (h-ande, de Julio
César, de Carlomagno, de Gonzalo de Córdoba, de Reman Cortés, de Napoleón I, de Federico de J'nifíia; el relato de los
Desciil)rim¡entos Geográficos, las atrevidas expediciones deHannón. Marco Polo, Vasco de Gama, Cristóbal Colón, Cook.
Peary. Scott; la Historia Religiosa de los pueblos asiáticos, las Cruzadas, los conflictos entre el Pontificado y el Imperio,
las luchas de la Reforma; la crónica de las grandes Conmociones Políticas, la caída del Imperio Romano; las invasiones
de los bárbaros, árabes y mongoles, la Guerra de Treinta Años, la lucha de los Pueblos Americanos por su Independencia, la
Revolución Francesa, la Guerra Europea comenzada en 1914..., he aquí algunos de los interesantísimos episodios que el
lector verá desarrollarse ante sus ojos como cuadros vivos puestos en movimiento por la magia de una pluma elocuente
y una ilustración espléndida.
El texto original de la HISTORIA DE LAS NACIONES jfué confiado a especialistas eminentes, a verdaderas ceicltri
dades que por su preparación y aptitudes particulares se encontraban en estado de unir la más rigurosa exactitud docu-
mental a un estilo conciso, claro y pintoresco. Logrado este objeto por aquellos editores, sólo nos restaba el cuidado
de elegir un colaborador que por su ilustración, criterio y perfecto conocimiento de las lenguas inglesa y castellana,
pudiese trasladar fielmente a esta última tan valioso tesoro científico y literario. Creemos haberlo conseguido plena-
mente al confiar la traducción de la HISTORIA DE LAS NACIONES al distinguido abogado y publicista don Guillermo
de Boladeres Ibern.
Nos creemos igualmente con derecho para llamar la atención del público sobre la nolal)ilisima y abiindaiilísima
ilustración que la acompaña. Nuestros grabados son en gran parte reproducciones de las obras maestras de la pintura.
La belleza de nuestra ilustración está a la misma altura que su inestimable valor documental.
Otro motivo de orden menos elevado, pero de positiva importancia práctica, nos permite recomendar al público
esta obra: .su extremada baratura. Lo mismo que en su dia lo dijo la casa Hutchinson y Co., podemos decir ahora
nosotros, que sólo la enorme tirada ejecutada nos permite ofrecer la serie completa de 130 cuadernos al precio
reducidísimo de 65 pesetas. Nunca se ha presentado en el mercado editorial una obra de tan considerable extensión y
precioso valor por un precio tan limitado.

CONDICIONES DE SUSCRIPCIÓN
La obra completa comprenderá 130 cuadernos, siendo de regalo los que excedan de dicho número, cada uno de loa
cuales constará de 16 páginas de texto, e ilustraciones en papel «couché» y una magnífica tricromía, reproducción
de un cuadro célebre o mapa histórico. Aparecerá un cuaderno cada semana, al precio único de

D a s REALES CUADERNO
A fin de que el público pueda formarse una idea aproximada del considerable desarrollo de nuestra HISTORIA DE
LAS NACIONES, incluímos a continuación la lista completa de los países que son objeto de un estudio especial, por el
orden en que están tratados:
EGIPTO.-CHINA.-ESTA DOS DE LA INDIA.-BABILONIA.-PUEBLO HITITA.-ASIRÍA.-FKNICIA.-CABTAGO. - FRIGIA. - LIDIA Y OTROS
PAÍSES DEL ASIA MENOR. - GRECIA.-PUEBLO JDDlO. - R O M A . - F R A N C I A . - P E R S I A . - J A P Ó N . - B É L H I C A . - H O I Í A X D A . - P T E B L O S ÁRABES
Y MOROS.-AUSTRIA.-HUNGRÍA.-ESPAÑA.-SUIZA.-PORTUGAL.-NORüEGA.-SUECIA.-DlNAMARCA.-ITALIA.-TURQüiA.-KIISIA.-SERVIA.
-BUMANIA.-BÜLGARIA.-MONTKNEGRO.-ALEMANIA.-POLONIA.-INDOCHINA.-PUEBLOS MALAYOS.-BIKMANIA.-SIAM.-ANNAM.-COCHIN-
CHINA.-TONQUiN.-JAVA.-SUMATRA.-TIBET.-AMÉRICA.-PUKULDS MAYAS.-COLOMBI A.-ARGE.NTINA. - PUEBLOS DE Q I I H O . - P I I E B L O S
INCAS.-BRAS1L.-GÜATEMALA.-H0NDURAS.-SAN SALVADOR.-NIOABAGUA.-PANAMÁ.-PERÚ M0I>ERN0.-B0LIVIA.-CHILE.-PARAGUAY.
- URUGUAY.-A BISINIA.-ESCOCIA.-IRLANDA.-PUEBLO INGLÉS.-PUEBLOS BRITÁNICOS.-PUEBLOS AZTECAS.-MÉJICO MODERNO.-HIS-
TORIA DE LA GUERRA EUROPEA.

Según queda indicado, el final de la obra está consagrado a la narración, llevada hasta el dia, de los episodioa
que constituyen esta lucha única en la Historia.
Pídase en todas las librerías, centros de suscripciones y kioscos para la venta de periódicos.
Centro Editorial ArtisUco de MIGUEL SEGUÍ.—Buenavista, M BARCELONA