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CAPITULO 25

HISTAMINA, BRADICININA y
SUS ANTAGONISTAS

Kenneth S. Babe, Jr. y William E. Serafin

En el capítulo presente se describen la función y consecuencias fisiopatológicas de la libe­


ración de hi*mina y se hace un recuento detallado del uso terapéutico de los antagonistas
de receptores histamínicos H¡; los antagonistas de receptores H] se exponen en detalle en el

r
capítulo 37, en la información sobre prevención y tratamiento de úlceras pépticas que son

.a
los dos cuadros que se aplican principalmente en terapéutica. Se describen 6nforma some­
ra la identidad y participación de los tipos de receptores H], así como los nuevos agonistas

om
y antagonistas Hj recién sintetizados, aunque ninguno de ellos ha sido sometido a examen
por la Food and Drug Administration en Estados Unidos para aprobar su uso clínico. La
segunda parte del capítulo describe las funciones y características fisiopatológicas de las

s.c
cininas y calidinas. un subgrupo de autacoides que contribuyen a la respuesta inflamatoria.
La identificación de dos receptores diferentes (como mínimo) de cininas, llamados B¡ y B],
ico
ha permitido la obtención de antagonistas selectivos de receptores, que también se analizan.
La serotonina (5-hidroxitriptamina, 5-HT), otro autacoide que suele exponerse dtmtro del
mismo marco que la histamina y las cininas y calidinas, se describe en detalle en el capítulo
ed

11, y la utilidad de los fármacos similares a 5-HT en el tratamiento de la migraña se señala


en el capítulo 21.
s m

HISTAMINA 1927). Ante las pruebas químicas de la presencia de la histamina


te

en el organismo, casi no hubo duda para suponer que la "sustan­


Historia. La historia de la ,8-aminoetilimidazol o histamina es cia H" de Lewis era la propia histamina. Se sabe ahora que di-
paralela a la de la acetilcolina (ACh). Los dos compuestos fue­ cha sustancia producida por el organismo (endógena) interviene
un

ron sintetizados como curiosidades químicas antes de identifi­ en la respuesta alérgica inmediata y es una reguladora importan­
carse su importancia biológica; se detectaron por primera vez te de la secreción ácida por el estómago; también se ha defmido
ap

como sustancias que estimulaban al útero, en los extractos del su participación como neurotransmisora en el sistema nervioso
cornezuelo de centeno, de los cuales fueron más tarde aislados; central (SNC).
ambos resultaron ser "contaminantes" del cornezuelo por acción Desde hace algún tiempo, surgieron sospechas de que la his­
w.

bacteriana. tamina actuaba en más de un receptor y se sabe ahora que lo


Dale y Laidlaw (1910, 1911) efectuaron estudios farmacoló­ hace en tres clases de receptores diferentes llamados H. (Ash y
ww

gicos intensivos con la histamina y descubrieron que ésta esti­ Schild, 1966); H2 (Black y coL, 1972) y H3 (Arrang Y coL, 1983).
mulaba muy diversos músculos lisos y tenia intensa acción Los receptores H. los bloquean de modo selectivo los clásicos
vasodepresora. Como aspecto importante, destacaron que los "antihistamínicos" (como la pirilamina) obtenidos hacia 1940.
signos inmediatos que mostraba un animal sensibilizado cuan­ Los antagonistas de receptores H2 fueron introducidos en clíni­
do se le inyectaba con una proteína normalmente inerte, simula­ ca en los comienzos del decenio de 1970. El descubrimiento de
ban netamente los de la intoxicación por histamina. Los comen­ dichos antagonistas contribuyó en gran medida a renovar el in­
tarios de dichos investigadores se realizaron muchos años antes terés por la histamina en biología y medicina clínica (cap. 37).
de que se descubriera a la histamina en el cuerpo y su liberación En el decenio de 1980, se descubrieron los receptores H3 y su
durante las reacciones de hipersensibilidad inmediata y después inhibición retroalimentaria por acciones mediadas por recepto­
de daño celular. En 1927, Best y colaboradores aislaron la hista­ res H •.
mina de muestras frescas de hígado y pulmón, y así advirtieron La obtención reciente de agonistas del receptor H3 como (R)­
que dicha amina era un constitutivo natural del organismo. Pronto a-metilhistamina e imetit y de antagonistas con selectividad por
surgieron demostraciones de su presencia en otros tejidos y se H3, como la tioperimida, ha ampliado los conocimientos de la
acuñó el nombre de histamina, con base en la raíz griega histos, importancia del receptor H3 aunque todavía no se sintetizan fár­
que significa tejido. macos útiles en seres humanos. En los últimos 10 años, ha habi­
Mientras tanto, Lewis y colaboradores habían acumulado prue­ do renovado interés por el empleo clínico de los antagonistas de
bas de que las células de la piel después de estímulos lesivos receptores H. por la síntesis de antagonistas de segunda genera­
liberaban una sustancia con las propiedades de la histamina ("sus­ ción, que en forma global han sido conocidos como antihistamí­
tancia H "), incluida la reacción de antígeno y anticuerpo (Lewis, nicos no sedantes.
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622 Sección IV A utacoides; farmacoterapia de la inflamación

Propiedades quimicas. La histamina es una molécula hidrófila los tejidos de los mamíferos la contienen en cantidades que van
compuesta de un anillo imidazol y un grupo amino unidos por de menos de 1 Ilg/g a más de 100 Ilg/g. Las concentraciones en
dos grupos metileno. La forma farmacológicamente activa a ni­ plasma y otros líquidos corporales por 10 común son pequeñísi­
vel de todos los receptores histamínicos es el tautómero mono­ mas, pero en líquido cefalorraquídeo humano se halla en canti­
catiónico Ny-H, es decir, la forma con carga eléctrica de la es­ dades importantes (Khandelwal y col., 1982). La célula cebada
pecie que se señala en la figura 25-1, aunque pueden intervenir es el sitio predominante de almacenamiento de la histamina en
algunas propiedades químicas distintas de este monocatión en casi todos los tejidos (véase más adelante); la concentración de
interacciones con los receptores H. y H2 (Ganellin, en Ganellin esta sustancia es particularmente grande en tejidos que contie­
y Parsons, 1982). Las tres clases de receptores histamínicos pue­ nen gran número de dichas células, como piel y mucosa del ár­
den ser activados en forma diferente por análogos de la hista­ bol bronquial y de las vías intestinales. Sin embargo, algunos
mina (fig. 25-1). Por tal razón, la 2-metilhistamina activa res­ tejidos sintetizan y recambian la histamina con velocidad muy
puestas preferentemente mediadas por receptores H.. en tanto grande a pesar de que su contenido "en equilibrio" de tal amina
que la 4(5)-metilhistamina tiene un efecto preferente en los re­ puede ser pequeño.
ceptores H2 (Black y col., 1972). Un análogo quiral de la hista­
mina con libertad conformacional restringida, (R)-a-metilhis­

r
Sintesis, almacenamiento y degradación. La histamina in­

.a
tamina es el agonista preferido en los receptores H3 (Arrang y gerida o formada por bacterias de vi as gastrointestinales es
col., 1987). metabolizada rápidamente y eliminada por la orina. Todos los

om
tejidos de mamíferos que la contienen son capaces de sintetizar­
la a partir de la histidina, gracias a su contenido de L-histidina
Distribución y biosíntesis de histamina
descarboxilasa. La hormona recién mencionada puede ser blo­

s.c
Distribución. La histamina está distribuida en forma amplia queada por el inhibidor "suicida" a-fluorometil-histidina. El si­
(aunque quizá desigual) en todo el reino animal y forma parte de tio principal de depósito de la histamina en casi todos los tejidos
muchos venenos, bacterias y plantas (Reite, 1972). Casi todos es la célula cebada, y en la sangre, el basófilo. Una y otra sinte-
ico
ed

/ ,CH2CH2NH2
m

HNvN
s

HISTAMINA
te

�AGONISTA DE RECEPTOR H, AGONISTA DE RECEPTOR H,


un

,CH2CH2NH2
/
HN y N
CH3 j=\CH2CH2NH2
ap

HNvN
CH3
w.

d:
2-METILHISTAMINA 4(5)-METILHISTAMINA
ww

H,cH'NH'

2- PIRIDILETILAMINA DIMAPRIT

2-TIAZOLlLETILAMINA

AGONISTA DE RECEPTOR H,

Fig.25-1. Estructura de la histaminay algu­


nos agonistas de receptores H1, H1 Y HJo
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Capítulo 25 Histamina, bradicinina y sus antagonistas 623

tizan histamina y la depositan en sus gránulos secretores. Al pH los (Galli, 1993; Schwartz, 1994). Como parte de la respuesta
del gránulo secretor que es de -5.5, la histamina tiene carga alérgica a un antígeno, se generan anticuerpos reagínicos {IgE)
positiva y está unida por enlaces iónicos a grupos ácidos de car­ y se unen a la superficie de las dos células mencionadas por
ga negativa en ottos constituyentes del gránulo secretor, princi­ medio de receptores Fe de gran afinidad con especificidad por la
palmente proteasas y heparina, o los proteoglucanos de condroi­ IgE; dicho receptor, FeeRI, consiste en las cadenas a, {3 y dos y,
tinsulfato (Serafin y Austen, 1987). La rapidez de recambio de todas las cuales han sido definidas a nivel molecular (Ravetch y
la histamina en los g¡;�nulos secretores es pequeña, y cuando los Kinet, 199 1). Las moléculas de IgE actúan como receptores, por
tejidos en que abundan las células cebadas agotan sus reservas medio dé' FeeRI e interactúan con sistemas de transducción de
de dicho compuesto, se necesitan semanas para que se normali­ señales en la membrana de células sensibilizadas. Los sujetos
cen las concentraciones del autacoide en cuestión. Los sitios de atópicos, a diferencia de los que no lo son, sintetizan anticuer­
formación o almacenamiento de histamina fuera de las células pos IgE contra los antígenos inhalados comúnmente; ello cons­
cebadas incluyen células de epidermis, mucosa gástrica, neuro­ tituye un rasgo hereditario y, en fecha reciente, se ha identifica­
nas en el sistema nervioso central (SNC), y células de tejidos en do un "gen propicio" para mediar dichas acciones (Cookson y
regeneración o con proliferación rápida. El recambio es acelera­ col.,1992; Shirakawa y col., 1994). El gen "propicio" codifica
do en dichos sitios porque se libera continuamente histamina en la cadena {3 de Fce,RI, y por ello ha surgido interés todavía ma­

r
vez de ser almacenada. Los sitios de producción de la sustancia yor por conocer los mecanismos de envío de señales trans­

.a
fuera de las células cebadas contribuyen en grado significativo a membrana de células cebadas y basófilos. En la exposición, el

om
la excreción diaria de histamina y a sus metabolitos por la orina. antígeno "se liga" con las moléculas IgE y las une, y así activa
Dado que la L-histidina descarboxilasa es una enzima inducible, las tirosjncinasas y hay fosforilación de múltiples sustratos pro­
la capacidad histaminógena de los sitios fuera de l células ce­ teínicos en término de 5 a 15 s del contacto con el antígeno
P.
badas está sometido a regulación por factores fisiológicos y de (Scharenberg y Kinet, en Lichtenstein y col., 1994). Entre las

s.c
otra índole. cinasas que participan en dicha reacción están Iyn y syk simila�
Se conocen dos vías importantes del metabolismo de la hista­ res a src. Entre las nuevas proteínas fosforiladas, ocupan un lu­
mina en seres humanos; la más notoria de ellas incluye la meti­ gar importante las subunidades {3 y
ico a del propio receptor FeeRJ
lación del anillo, y es catalizada por la enzima histamina-N-me­ y las fosfolipasas Cyl y Cy2. M ás adelante se metabolizan los
til-transferasa, que ha sido clonada recientemente y que tiene fosfolípidos de inositol y como resultado se libera el ion calcio
amplia distribución. Gran parte del producto, N-metilhistamina, de reservas intracelulares, con lo cual aumentan los valores del
ed

es transformado por la monoaminooxidasa (MAO) a ácido N­ calcio citosólico libre (cap. 2). Los fenómenos mencionados des­
metilimidazol acético; dicha reacción puede ser bloqueada por encadenan la extrusión del contenido de gránulos secretores, por
m

los inhibidores de la MAO (cap. 19). En la otra vía, la histamina exocitosis. El comportamiento secretor de células cebadas y ba­
es sometida a desaminación oxidativa, que es catalizada más sófilos es semejante al que se observa en diversas glándulas ��­
s

bien por la diaminooxidasa (DAO), enzima inespecifica; los pro­ docrinas y exocrinas, y sigue un patrón general de acoplamiento
te

ductos son el ácido imidazol acético y, al final, su ribósido. Los estímulo-secreción, en el cual un incremento en la concentra­
metabolitos poseen poca o nula actividad y son excretados por la ción de calcio intracelular inducido por secretagogo es el ele­
un

orina. mento que desencadena la exocitosis. No se ha dilucidado en


detalle el mecanismo por el cual el incremento del ion calcio
hace que se fusione el gránulo secretor con la membrana plas­
ap

mática, pero es posible que incluya la activación de las pro­


Funciones d e la h istamina e n d ógena
teincinasas que dependen de ion calcio/calmodulina y también
w.

la proteincinasa C (cap. 2).


La histamina desempeña actividades fisiológicas impor­
tantes. Dado que es uno de los mediadores preformados
Liberación de otros autacoides. La descarga de histamina ex­
ww

almacenados en la célula cebada, su liberación como con­ plica, sólo en parte, los diversos efectos que surgen por las reac­
secuencia de la interacción del antígeno con los anticuer­ ciones de hipersensibilidad inmediata. Con la activación de las
pos IgE en la superficie de dicha célula interviene deci­ células cebadas, se libera toda una gama de mediadores de la
sivamente en las respuestas de hipersensibilidad inmediata inflamación (fig. 28- 1 y cuadro 28- 1).
y alérgicas. Las acciones de la histamina en músculo liso La estimulación de los receptores IgE además de activar la
de bronquios y de vasos sanguíneos explican en parte los fosfolipasa C y la hidrólisis de los fosfolipidos de inositol, tam­
síntomas de la reacción alérgica. Además, algunos fárma­ bién activa a la fosfolipasaA2, lo cual hace que surjan muy diver­
cos de utilidad clínica actúan directamente en las células sos mediadores que incluyen el factor activador de plaquetas
cebadas para liberar histamina, y así se explican algunos (PAF) y metabolitos del ácido araquidónico. El leucotrieno D4,
generado por esta vía, es un constrictor potente del músculo liso
de sus efectos adversos. La histamina interviene de mane­
del árbol bronquial (caps. 26 y 28). Las cininas también son ge­
ra importante en la regulación de la secreción de ácido
neradas durante algunas respuestas alérgicas (véase más adelan­
gástrico y en fecha reciente se ha identificado su función
te); de este modo, las células cebadas secretan muy diversos
como neurotransmisor en el sistema nervioso central. compuestos inflamatorios además de la histamina, y cada uno
contribuye en medida diversa a los síntomas principales de la
Participación en reacciones alérgicas. Las principales célu­ respuesta alérgica: constricción bronquial, hipotensión arterial,
las "precondicionadas" ("blanco") en que ocurren las reaccio­ mayor permeabilidad capilar y formación de edema (véase más
nes de hipersensibilidad inmediata son las cebadas y los basófi- adelante).
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624 Sección IV Autacoides; farmacoterapia de la inflamación

Regulación de la liberación de mediadores. La gran varie­ se enrojece y el rubor se disemina rápidamente hacia el tronco.
dad de mediadores liberados durante la reacci6n alérgica expli­ Disminuye la presi6n arterial, se acelera el latido cardiaco y la
ca la ineficacia de fármacos orientados contra un solo mediador. persona se queja de dolor de cabeza. Al cabo de minutos, se
Se ha dado gran importancia a la regulaci6n de la descarga de normaliza la presión arterial y en la piel aparecen edema y gru­
mediadores desde las células cebadas y los basófilos, y ellas pos de ronchas (pápulas) gigantes. Hay cólico, náusea, hiperse­
contienen receptores vinculados con sistemas de "envíos de se­ creci6n de ácido y broncospasmo moderado. El efecto es menos
ñales" que intensifican o bloquean la liberaciÓn de mediadores intenso con las inyecciones sucesivas dado que se agotan las
inducida por IgE. reservas de histamina en las células cebadas. Los liberadores
Los compuestos que actúan en los receptores muscarinicos o mencionados no agotan la histamina que está en tejidos diferen­
a-adrenérgicos intensifican la liberaciÓn de mediadores, si bien tes a las células cebadas.
dicho efecto tiene poca importancia en seres humanos (Beaven, Mecanismo. Todas las sustancias que liberan histamina que
1976). Puede lograrse inhibición notable de la respuesta secreto­ se han mencionado activan las respuestas secretoras de las célu­
ra con adrenalina y fármacos afines que actúan en receptores {J­ las cebadas o de tos basófilos, al hacer que aumente el ion calcio
adrenérgicos. El efecto es el resultado de la acumulaci6n de cAMPo intracelular. Algunas son ionóforas y transportan calcio al in­
Sin embargo, los efectos beneficiosos de los agonistas {J-adre­ terior de la célula, en tanto que otras, como las anafilotoxinas,

r
nérgicos en estados alérgicos como el asma dependen más bien al parecer actúan a semejanza de los antígenos específicos al

.a
de su efecto relajante en el músculo liso de bronquios (caps. 10 intensificar la permeabilidad de la membrana al calcio. Otras

om
y 28). El cromolín sódico tiene utilidad cUnica gracias a su capa­ más, como el mastoparano (péptido del veneno de avispa), pue­
cidad para inhibir la liberaci6n de mediadores de las células ce­ de "esquivar" a los receptores de la superficie celular y estimu­
badas y otras variedades celulares en el pulm6n (cap. 28). lar de manera directa a las proteínas reguladoras que se unen
con el nucle6tido de guanina (proteínas G), que después de tal

s.c
Liberación de histamina por acción de firmacol, péptidos, situaciÓn activan a la fosfolipasa C (Higashijima y col., 1988).
venenos y otros compuelitos. Innumerables sustancias, que Los liberadores de histamina básica, como el compuesto 48/80
incluyen un número grande de fármacos terapéuticos, incitan la y la polimixina B, generan efectos al movilizar al calcio desde
ico
liberaciÓn de histamina de las células cebadas en forma directa y las reservas celulares (Metcalfe y col., 1981; Lagunoff y col.,
sin sensibilización previa. Es muy probable que las respuestas de 1983).
esta índole surjan después de inyección intravenosa de algunos
ed

tipos de sustancias y, en particular, las que son basel o álcalis


Liberación de histamina por otros medios. Entre los trastor­
orgánicos. Entre ellas están amidas, amidinas, compuestos de
nos clínicos en que se descarga histamina como reacción a otros
m

amonio cuaternario y de piridinio, piperidinas, alcaloides y


estímulos están la criourticaria, urticaria colinérgica y urticaria
antibióticos básicos. La respuesta también puede ser desencade­
solar; algunas de ellas incluyen respuestas secretoras específi­
s

nada por tubocurarina, succinilcolina, morfina, medios de contras­


cas de las células cebadas y, por consecuencia, IgE fijada por las
te

te radiopacos y algunos expansores plasmáticos tipo carbohidrato.


células (Salvaggio, 1982). Sin embargo, también se libera hista­
El fenómeno tiene gran importancia cHnica pues puede explicar
mina siempre �ue surja una lesión celular inespecífica de cual­
un

reacciones anafilactoides inesperadas. El síndrome de "hombre


quier causa. f.Í eritema y la urticaria que aparecen con el rasca­
rojo", inducido por vancomicina y que afecta la mitad superior
do de la piel es un ejemplo conocido.
del cuerpo con hiperemia facial e hipotensión, quizá sea media­
ap

do por la liberaciÓn de histamina (Levy, 1987; cap. 47).


Además de las sustancias terapéuticas, algunos compuestos Acumulaciones de células cebadas y basófllos. En la urtica­
ria pigmentosa (mastocitosis), las células cebadas se agregan en
w.

de experimentación estimulan la liberaciÓn de histamina como


característica farmacológica dominante. El prototipo sería la la porción superior del corion y originan lesiones cutáneas pig­
sustancia polibásica conocida como compuesto 48/80, que es mentadas que son pruriginosas si se les percute. En la mastoci­
ww

una mezcla de polimeros de bajo peso molecular, de la p-metoxi­ tosis sistémica, se advierten agregados semejantes en otros ór­
N-metilfenetilamina, de la cual el hexámero es la forma más ganos. Las personas con los síndromes mencionados muestran
activa (Lagunoffy coL, 1983). muy diversos signos y síntomas atribuibles al exceso de hista­
Los polipéptidos básicos suelen ser liberadores eficaces de mina liberada, como son urticaria, dermografismo, prurito, ce­
histamina y su potencia suele aumentar con el número de grupos falea (cefalalgia), debilidad, hipotensión, hiperemia facial, y efec­
básicos en limites precisos. La polimixina B es muy activa; otros tos gastrointestinales como úlcera péptica. Los signos y síntomas
incluyen bradicinina y la sustancia P. Dado que los polipéptidos son desencadenados o exacerbados por diversos estímulos, como
mencionados se liberan después de lesión tisular o se hallan en la fricción de la piel con una toalla o la exposición a fármacos
venenos, constituyen estímulos fisiopatológicos a la secreción que liberan histamina de manera directa o a la que son alérgicos
de casi todas las. células cebadas y basófilos. Las anafilotoxinas los pacientes. En la leucemia mielógena se observa un número
(C3a y CSa), que son péptidos de bajo peso molecular y que son excesivo de basófilos en sangre y las cifras de histamina aumen­
desdoblados o separados del sistema de complemento, pueden tan mucho. Los tumores carcinoides gástricos secretan dicha
actuar en forma semejante. sustancia y la acción comentada contribuye a láhiperemia "geo­

En segundos, luego de la inyección intravenosa de un libera­ gráfica" regional.


dor de histamina, los seres humanos tienen una sensación ardo­
rosa y pruriginosa; dicho efecto, más intenso en las palmas de Secreción de ácido por el estómago. La histamina es un po­
las manos y en la cara, el cuero cabelludo y las orejas, es segui­ tente secretagogo gástrico y desencadena excreción abundante
do a muy breve plazo por la sensaciÓn de calor intenso. La piel de ácido por las células parietales, al actuar en los receptores H2•
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Capítulo 25 Histamina, bradicinina y sus antagonistas 625

También aumenta la producción de pepsina y factor intrínseco. Ingestión de histamina. Se ha identificado a la histamina como
Sin embargo, la secreción de ácido también es incitada por la la toxina que interviene en la intoxicación alimentaria, como en
estimulación del neumogástrico y por la gas trina, hor­ el caso de los escómbridos descompuestos (peces) (Morrow y
mona entérica. Además, hay células en la mucosa gástrica que col., 1991). La contaminación bacteriana del pescado genera
contienen somatostatina, la cual inhibe la secreción de ácido por histamina, y la ingestión de esta última ocasiona náusea, vómi­
las de tipo parietal; la acetilcolina bloquea la liberación de so­ to, cefalea, hiperemia e hiperhidrosis intensa, La toxicidad por
matostatina. No se ha definide con exactitud la interrelación de histamina, que se manifiesta por dolor de cabeza y otros sínto­
estos reguladores endógenos. Sin embargo, se sabe que la his­ mas, también surge después del consumo de vino tinto en perso­
tamina es el mediador fisiológico predominante de la secre­ nas que quizá tengan una menor capacidad de degradar al auta­
ción ácida, porque el bloqueo de los receptores H2, además de coide (Wantke y col., 1994). Por medio de los antagonistas de
erradicar dicha secreción en respuesta a la histamina, también receptores H¡ es posible evitar los síntomas de intoxicación por
inhibe casi por completo las reacciones a la gastrina o a la es­ histamina.
timulación vagal. El tema se expone con mayor detalle en el
capítulo 37. Aparato cardiovascular. De manera característica, la

r
histamina dilata los vasos sanguíneos más delgados (fi­

.a
Sistema nervioso central. Hay pruebas abundantes de que la nos), con lo cual hay hiperemia, disminución de la resis­

om
histamina es un neurotransmisor en el sistema nervioso central tencia periférica total e hipotensión arterial. Además, di­
(SNC). En dicho sistema están distribuidos de manera irregular cho autacoide tiende a intensificar la permeabilidad capilar.
la histamina, histidina descarboxilasa y las enzimas que catalizan Vasodilatación. Conocida como "dilatación capilar",

s.c
la degradación de histamina, y éstas se hallan concentradas en constituye la acción característica de la histamina en el
las fracciones sinaptosómicas de homogeneizados cerebrales. Los árbol vascular, que con mucho es el efecto más importante
receptores de H¡ están distribuidos en todo el SNC y se concen­
en seres humanos. La vasodilatación entraña la participa­
ico
tran densamente en el hipotálamo. La histamina intensifica el
ción de los receptores HI y H2 distribuidos en todos los
estado de vigilia por medio de los receptores H¡ (Monti, 1993),
lo cual explica la capacidad sedante de los antihistamínicos clá­ vasos de resistencia y en casi todos los lechos vasculares;
sin embargo, las diferencias cuantitativas se advierten en
ed
sicos. La histamina actúa en los receptores H¡ e inhibe el apetito
(Ookuma y col., 1993). Las neuronas que contienen histamina el grado de dilatación que se observa en diversos lechos.
pueden participar en la regulación de la ingestión de líq¡lidos, La activación de uno u otro tipo de receptores histamínicos
m

temperatura corporal y secreción de hormona·antidiurética, así desencadena vasodilatación máxima, pero las respuestas
como en el control de la presión arterial y percepción del dolor. difieren en la sensibilidad a la histamina, en la duración
s

En las respuestas mencionadas, al parecer, intervienen los re­ del efecto y en el mecanismo de su producción. Los recep­
te

ceptores H ¡ Y H2 (Hough, 1988). tores HI poseen la mayor afinidad por la histamina y me­
dian una respuesta dilatadora de inicio relativamente rápi­
un

do, pero breve, A diferencia de ello, la activación de los


Efectos farmacológicos: receptores "1 y "2 receptores H2 genera dilatación que aparece con mayor
ap

lentitud y es más sostenida. Como consecuencia, los anta­


La histamina, una vez liberada, ejerce sus efectos locales gonistas de receptores HI anulan eficazmente las respues­
w.

o generales en músculos lisos y glándulas. El autacoide tas dilatadoras en vasos delgados, a concentraciones pe­
mencionado contrae muchos de estos músculos, como los queñas de histamina, pero sólo aplacan la fase inicial de
ww

de bronquios e intestino, pero relaja potentemente otros, respuestas de los vasos de mayor calibre, a concentracio­
como los vasos sanguíneos muy delgados. También es nes mayores de la amina. Los receptores H2 se sitúan en
un estímulo intenso para la secreción de ácido en el estó­ las células de músculo liso de vasos, y los efectos dilata­
mago. Los efectos atribuibles a dichas acciones dominan dores producidos por su estimulación son mediados por
la respuesta global a la histamina; sin embargo, hay otras cAMP; los receptores HI se encuentran en las células en­·
manifestaciones como la formación de edema y estimula­ doteliales y su estimulación hace que se formen sustancias
ción de las terminaciones de nervios sensitivos. Muchas vasodilatadoras locales (véase más adelante).
de las acciones mencionadas, como la broncoconstriccfón Hiperpermeabilidad "capilar". El efecto clásico de la
y contracción del intestino, son mediadas por receptores histamina en los vasos finos es consecuencia de la salida
HI (Ash y Schild, 1 966) y son bloqueadas en cierta forma de proteínas plasmáticas y líquido hacia los espacios ex­
por la difenhidramina (BENADRYL) y otros antihistamíni­ tracelulares, incremento del flujo de linfa y su contenido
cos clásicos (descritos hoy con mayor exactitud como anta­ proteínico y de la formación de edema. Sin duda, los re­
gonistas de receptores HI). Otros efectos, y en particular ceptores H 1 son importantes para que ocurra dicha respues­
la secreción gástrica, resultan de activación de los recepto­ ta, pero no se sabe si también participan los H2•
res H2, y sobre esa base pueden ser inhibidos por sus anta­ La mayor permeabilidad surge más bien por efectos de
gonistas (Black y col., 1 972). Los dos tipos de receptores la histamina en las venillas poscapilares, en las cuales la
mencionados median algunas respuestas como la hipoten­ amina en cuestión hace que se contraigan las células en­
sión que es consecuencia de la dilatación vascular. doteliales y así separan sus membranas limitantes para dejar
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626 Sección J V Autacoides; farmacoterapia de la inflamación

al descubierto la membrana basal, que es totalmente per­ contracción se debe a activación de los receptores H¡, y la
meable a la proteína y al 1íquido plasmático. Los espacios relajación (en su mayor parte) está dada por la activación
entre las células endoteliales dejan pasar también células de receptores H2• Las respuestas varían ampliamente, in­
circulantes que son reclutadas a los tejidos durante la res­ cluso en la propia persona (Parsons, en Ganellin y Parsons,
puesta de las células cebadas (cap. 28). El reclutamiento 1 982). El músculo bronquial de los cobayos es extraordi­
de leucocitos circulantes es estimulado por la regulación nariamente sensible y su broncoconstricción culmina en
aditiva de la adherencia de leucocitos, mediada por recep­ la muerte. Dosis minúsculas de histamina desencadenarán
tores H ¡; dicho proceso incluye la expresión histaminógena también broncoconstricción intensa en seres humanos con
de la p-selectina, molécula de adherencia, en las células asma bronquial y otras neumopatías; en sujetos normales,
endoteliales (Gaboury y col., 1 995). el efecto es mucho menos intenso. La influencia espasmó­
gena de los receptores H¡ predomina en el músculo bron­
Respuesta triple. Si se inyecta en la dermis, la histamina des­ quial del ser humano, pero también hay receptores H2, con
encadena el fenómeno característico conocido como "respuesta función dilatadora. Por todo lo comentado, el broncospas­
triple" (Lewis, 1 927), que consiste en: 1 ) una zona de rubor lo­

r
mo inducido por histamina in vitro es potenciado modera­

.a
calizado que se extiende en un radio de milímetros alrededor del
damente por el bloqueo de receptores H2• En asmáticos en
sitio de inyección, que surge en término de segundos y que al­
particular, el broncospasmo por histamina puede incluir

om
canza su máximo en un minuto, aproximadamente; 2) hiperemia
más intensa o "eritema" que se extiende en promedio 1 cm o
un componente reflejo adicional que surge por irritación
más allá de la zona de rubor original y que surge con mayor de las terminaciones vagales aferentes (Eyre y Chand en
Ganellin y Parsons, 1 982; Nadel y Barnes, 1 984).

s.c
lentitud, y 3) una roncha o pápula que se identifica luego de uno
a dos minutos y que ocupa la misma área que la pequeña zona
de eritema en el sitio de inyección. La zona de rubor es conse­ El útero de las hembras de algunas especies se contrae con la
cuencia del efecto vasodilatador directo de la histamina; el área
hiperémi.ca se debe a la estimulación de los reflejos axónicos,
ico histamina; en la mujer, embarazada o no, la respuesta es insigni­
ficante. Las reacciones de los músculos intestinales también
inducida por histamina que ocasiona de manera indirecta vaso­ varían con la especie y la región, pero el efecto clásico es la
ed
dilatación, y la pápula refleja la capacidad de la histamina de contracción. Es poca o inconstante la influencia por acción de
causar edema. histamina en preparados de vejiga, uréteres, vesícula, iris y otros
Constricción de vasos de mayor calibre. La histamina tiende que incluyen músculo liso.
m

a contraer vasos de mayor calibre en algunas especies más que


en otras. En roedores, el efecto se extiende a nivel de las arterio­ Glándulas exocrinas. Como se mencionó, la histamina es un
s

las y puede "disimular" la dilatación de vasos más finos. Se ob­ regulador fisiológico importante de la secreción de ácido por el
te

serva un incremento neto en la resistencia periférica total e hi­ estómago; dicho efecto es mediado por receptores H2 (cap. 37).
pertensión arterial.
un

Corazón. La histamina genera efectos directos en el corazón Terminaciones nerviosas: dolor, prurito y efectos indirec­
que incluyen contractilidad y fenómenos eléctricos. Esta sus­ tos. La histamina estimula terminaciones nerviosas de diverso
tancia intensifica la fuerza de contracción en los músculos de tipo; de este modo, si es liberada en la epidermis, genera prurito;
ap

aurículas y ventrículos al estimular la penetración del ion calcio en la dermis, desencadena dolor a veces acompañado de prurito.
y acelera la frecuencia cardiaca al volver más rápida la des­ En párrafos anteriores, se han descrito las acciones estimulantes
w.

polarización diastólica en el nodo sinoauricular. También actúa de uno u otro tipo en las terminaciones nerviosas que incluyen
de manera directa para tomar lenta la conducción auriculoven­ las aferentes y cáerentes de tipo autónomo, como factores que
ww

tricular, intensificar el automatismo y, a dosis altas especialmente, contribuyen al componente de "eritema" de la respuesta triple, y
desencadenar arritmias. Con excepción de la lentificación de la a efectos indirectos de histamina en los bronquios y otros órga­
conducción AV, en que participan más bien los receptores H. . nos. En la periferia, los receptores neuronales de histamina por
todos los efectos mencionados son atribuibles en gran medida a lo común son de tipo HI (Rocha y Silva, 1 978; Ganellin y Parsons,
los receptores H2• Si se aplica la histamina por vía intravenosa, 1 982).
no son sobresalientes sus efectos directos en corazón y son "re­
basados" por los reflejos barorreceptores desencadenados por la Mecanismo de acción. Se ha efectuado clonación de los
hipotensión arterial. receptores HI y H2, Y éstos pertenecen a la superfamilia de
Choque histamínico. La histamina, aplicada a dosis grandes
los receptores acoplados a proteína G. Los receptores HI
o liberada durante la anafilaxia sistémica, ocasiona una dismi­
se encuentran acoplados a fosfolipasa C y su activación
nución profunda y progresiva de la presión arterial. Conforme
hace que se forme inositol-l ,4,5-trifosfato (IP3) y diacilgli­
se dilatan los vasos finos, atrapan gran cantidad de sangre; al
aumentar su permeabilidad, sale plasma de la circulación. Los
ceroles a partir de los fosfolípidos de la membrana celu­
efectos comentados, similares al choque quirúrgico o traumáti­ lar; IP3 ocasiona liberación rápida de iones de calcio des­
co, disminuyen el volumen sanguíneo eficaz, el retomo venoso de el retículo endoplásmico. Los diacilgliceroles (y el
y también, en gran medida, el gasto cardiaco. calcio) activan la proteincinasa e, en tanto que el calcio
activa a las proteincinasas que dependen de calcio/calmo­
Músculo liso extravascular. La histamina estimula o, dulina y fosfolipasa A2 en la célula "blanco" para generar
en contadas ocasiones, relaja diversos músculos lisos. La la respuesta característica (cap. 2). Los receptores H2 guar-
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Capítulo 25 Histamina. hradicin¡na y sus antagonistas 627

dan relación con la estimulación de la adenilil ciclasa y, ANTAGONISTAS DE LOS


po r consecuencia, con la activación de la proteincinasa RECEPTORES "1
dependiente de cAMP en la célula "precondicionada" o
.•

blanco. En un mecanismo que depende de la especie, los Se han sintetizado antagonistas que actúan de modo sélec­
receptores de adenosina pueden interactuar con los de HI' tivo en los tres tipos de receptores histamínicos, pero el
En e l SNC de seres humanos, la activación de los recepto­ comentario presente se limita a las propiedades y uso clí­
res de adenosinaAI inhibe la generación del segundo men­ nicos de los antagonistas de receptores "\. Los antagonis­
sajero, por medio de receptores H\. Un mecanismo posi­ tas específicos de receptores "2' como la cimetidina y la
ble del fenómeno anterior sería la interacción (llamada ranitidina, se usan ampliamente en el tratamiento de úlce­
"cruzada") entre las proteínas G, con las cuales se aco­ ras pépticas y se exponen en el capítulo 37. En párrafos
plan funcionalmente los receptores Al e HI (Dickenson y siguientes se comentan las propiedades de agonistas y an­
Hill,1993). tagonistas de receptores "3, aunque por el momento no
están disponibles para uso en seres humanos.

r
En el músculo liso de grandes vasos sanguíneos, bronquios e

.a
intestino, la estimulación de los receptores H. y la liberación Historia. En 1937, Bovet y Staub detectaron por primera vez
resultante del calcio intracelular, mediada por IP3, culmina en la la actividad de bloqueo histamínico, en un compuesto de una

om
activación de la miosincinasa de cadena ligera que depende de serie de aminas con una función de éter fenólico. La sustancia,
ca1cio/calmodulina; la enzima mencionada fosforila la cadena 2-isopropil-5-metilfenoxietildietilamina protegía a los cobayos
ligera de la miosina de 20 kDa, con lo cual se intensifica el ciclo de varias dosis letales de histamina; antagonizaba el espasmo

s.c
"cruzado" y la contracción (Kamm y Stull, 1985; Somlyo y col., histaminógeno en diversos músculos lisos y reducía los sínto­
1988; Griendling y Alexander, 1990). Los efectos de la histami­ mas del choque anafiláctico. El producto era demasiado tóxico
na en los nervios sensitivos también son mediados por recepto­ para emplearlo en seres humanos pero, en 1944, Bovet y cola­
res H •.
ico
boradores describieron el maleato de pirilamina que sigue sien­
Como se dijo, los efectos vasodilatadores de la histamina son do uno de los antagonistas histamínicos de esta categoría más
mediados por los receptores H, e H2 que se hallan en diferentes específicos y efci aces.
ed
tipos celulares y en el lecho vascular: los receptores H .. en las tas similares sumamente eficaces como la difenhidramina y la
células endoteliales vasculares, y los H2, en células de músculo tripelenamina (Bovet, 1950; Ganellin, en Ganellin y Parsons,
liso. La activación de receptores de H. hace que aumente la con­
m

1982). En el decenio de 1980, se sintetizaron antagonistas de


centración de calcio intracelular, se active la fosfolipasa A2 y receptores histamínicos H, sin propiedades sedantes para tratar
haya producción local del factor relajante derivado de endotelio .
s

enfermedades alérgicas.
que es óxido nítrico (Palmer y col., 1987). El óxido nítrico di­
te

En los comienzos del decenio de 1950, los médicos podían


funde a la célula de músculo liso, sitio en que activa una guanidil recetar varios compuestos con actividad de bloqueo histamí­
ciclasa soluble, y hace que se acumule cGMP. Según se piensa, nico, pero estos últimos no inhibían algunas reacciones a la
un

la estimulación de la proteincinasa dependiente de cGMP y la histamina, y de éstas la más notable era la secreción de ácido
disminución del calcio intracelular intervienen en la relajación por estómago. Black y colaboradores descubrieron una nueva
ap

causada por este nucleótido cíclico. La activación de la fosfoli­ clase de fármacos que bloqueaban la secreción de ácido gastrico
pasa A2 en células endoteliales también favorece la formación inducida por histamina, y así pudo contarse con productos
de prostaglandinas, en especial prostaciclina (PGI2); este vaso­ farmacológicos nuevos que sirvieron para explorar las funcio­
w.

dilatador contribuye de manera importante a la dilatación de al­ nes de la histamina endógena. Dicho descubrimiento fue el
gunos lechos vasculares, mediada por endotelio. punto de partida de la síntesis de una clase nueva importante
ww

No se ha definido con exactitud el mecanismo de la relaja­ de agentes terapéuticos, como los antagonistas de receptores
ción de músculo liso mediada por cAMP, pero se supone que H2, que incluyeron la cimetidina (T AGAMET), la famotidina
incluye una disminución del calcio intracelular (Kamm y StuB, (PEPCID), la nizatidina (AXID) y la ranitidina (ZANTAC)
1985; Taylor y col., 1989). Tampoco se conocen en detalle las (cap. 37).
acciones en corazón, células cebadas, basó filos y otros tejidos,
mediadas por cAMP, pero los efectos de la histamina que son
Relación entre estructura y actividad. Todos los antagonis­
mediados por receptores H2 obviamente surgirían en la misma
forma como los que resultan de estimulación de receptores f3- tas de los receptores H, de que se dispone son inhibidores com­
adrenérgicos u otros que están vinculados con la activación de petitivos reversibles de la interacción de la histamina con los
la adenilil ciclasa. receptores H•. A semejanza de la histamina, muchos de los anta­
gonistas de receptores HI contienen una fracción etilamina

Aplicaciones
sustituida
,
-t----t-N/. A diferencia de la histamina que po-
I I "-
Las aplicaciones prácticas de la histamina se limitan a su utili­ see un grupo amino primario y un solo anillo aromático, casi
zación como sustancia diagnóstica. El fosfato de histamina se todos los antagonistas de receptores HI tienen un grupo amino
utiliza para evaluar la hiperreactividad inespecífica de bronquios terciario unido por una cadena de dos o tres átomos a dos susti­
en asmáticos y como inyección "testigo" positiva durante cuti­ tutivos aromáticos, y éstos se rigen con la siguiente fórmula ge­
reacciones en el estudio de alergia. neral:
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628 Sección IV Autacoides; farmacoterapia de la inflamación

Ar,,,
I I / na. El antagonismo de la acción constrictora de dicha amina
X-(-(-N
" en músculo liso de vías respiratorias se demuestra fácil­
Ar2/ I I
mente in vivo o in vitro. Por ejemplo, en cobayos, dosis
muy pequeñas de histamina causan la muerte por asfixia
en la cual, Ar es el arilo y X es el átomo de nitrógeno o carbono
aunque el animal puede vivir después de aplicarle dosis
o un enlace éter -C-o- que va a la cadena lateral ¡'j-amino­
letales cientos de veces mayores de dicha sustancia, si re­
etilo. A veces, los dos anillos aromáticos están unidos por un
puente, como ocurre en los derivados tricíc\icos, o bien la cibe un antagonista de receptores H l. En la misma espe­
etilamina puede ser parte de la estructura cíclica. Otras varian­ cie, también se logra protección notable contra el bron­
tes son posibles, por ejemplo, la terfenadina y el astemízol, an­ cospasmo anafiláctico; esto no ocurre en seres humanos
tagonistas piperidínicos del receptor H), poseen estructuras anu­ porque la broncoconstricción alérgica depende más bien
lares aromáticas en uno y otro lados de la cadena de carbono de mediadores como los leucotrienos y el factor activador
(fig. 25-2) (Ganellin, en Ganellin y Parsons, 1982). de plaquetas (cap. 26).
En el árbol vascular, los antagonistas de receptores HI

r
Propiedades farmacológicas i nhiben los efectos vasoconstrictores de la histamina y, en

.a
cierta medida, los efectos vasodilatadores más rápidos
Casi todos los antagonistas de receptores HI poseen accio­ mediados por dichos receptores en las células endote­

om
nes farmacológicas y aplicaciones terapéuticas similares liales.
y por comodidad se les puede exponer en un solo aparta­ La vasodilatación residual manifiesta la participación
de los receptores H2 en músculo liso y puede suprimirse

s.c
do. Sus efectos en gran medida son predecibles con base
en el conocimiento de las respuestas a la histamina que sólo por la administración concomitante del antagonista
entrañan interacción con receptores H l. de estos últimos receptores. Los efectos de los antagonis­
icotas de histamina, en los cambios inducidos por esta amina
Músculo liso. Los antagonistas de receptores HI inhi­ en la presión arterial sistémica, guardan paralelismo con
ben casi todas las respuestas del músculo liso a la histami- dichos efectos vasculares.
ed
m

� CI
U
s

CH, - CH
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<Q>/� q�
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C-O-CH,-CH,-N/
te

C-CH,-CH,-N
- - 'CH - - "CH,
,
un

DIFENHIDRAMINA* (una etanolamina) CLORFENIRAMINAt (una alquilamina)


ap

�í\
-<OY
w.

C-N N-CH,.
\.....-l
O IH
ww

CI

P1RILAMINAt (una etilendiamina) CLORCICLlZINA§ (una piperazina)


aD -CH,CH,CH' H
OH
¿ --Q-- C¡CH.,

PROMETAZ1NA (una fenotiazina) TERFENADINA (una piperidina)

Fig. 15-1. Antagonistas de Hl representativos.

* El dimenhidrinato es una combinación de difenhidramina y 8-clorteofilina en proporciones moleculares iguales.


t La feniramina tiene igual fórmula sin cloro.
t La tripelennamina tiene la misma fórmula sin H3CO.
§ La ciclizina es la misma fórmula sin cloro.
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Capítulo 15 Histamina. bradicinina y sus antagonistas 629

Permeabilidad capilar. Los antagonistas de receptores ciable la barrera hematoencefálica (Sorkin y Heel, 1985;
H¡ bloquean potentemente la acción de la histamina, lo Krstenansky y Cluxton, 1987). Sus efectos en índices ob­
cual genera mayor permeabilidad capilar y formación de jetivos de sedación, como latencia hasta lograr el sueño,
edema y pápulá. EEG y pruebas de rendimiento estandarizadas, son seme­
jantes a las del placebo (Simons y Simons, 1994). La falta
"Eritema" y prurito. El componente "eritematoso" de la res­ de sedación difiere notablemente de los efectos sedantes
puesta triple y el prurito causado por la inyección intradérmica de la primera �eneración de antihistamínicos y pudiera te­
de histamina son dos manifestaciones diferentes de la acción de ner gran beneficio clínico.
dicha sustancia en terminaciones nerviosas; los antagonistas de Una propiedad interesante y útil de algunos antago­
receptores H¡ las suprimen. nistas de receptores H¡ es su capacidad de reducir la
cinetosis; el efecto anterior se observó por primera vez
Glándulas exocrinas. La secreción gástrica no es inhibida ab­
con dimenhidrinato y, más tarde, con la difenhidramina
solutamente por antagonistas de receptores H¡, y ellas suprimen
(la fracción activa del dimenhidrinato), con algunos deri­
las secreciones de glándulas salivales, lagrimales y otras secre­
vados piperazínicos y con la prometazina. Esta última qui­

r
ciones exocrinas inducidas por histamina. Sin embargo, las pro­

.a
piedades atropiniformes de muchos de estos compuestos contri­ zá posee la actividad más potente de bloqueo muscarínico
buyen a veces a una menor secreción en glándulas inervadas por entre estas sustancias y constituye uno de los fármacos más

om
ramas colinérgicas y aminoran la secreción constante, por ejem­ eficaces entre los antagonistas H¡ para combatir la cinetosis
plo, en el árbol respiratorio. (véase más adelante). La escopolamina es el medicamen­
to más potente para evitar el problema comentado (cap.

s.c
Reacciones de hipersensibilidad inmediata: anafilaxia 7), y por ello es posible que las propiedades anticolinérgicas
y alergia. Durante las reacciones de hipersensibilidad, de algunos antagonistas de H¡ sean las que medien este
la histamina es uno de los muchos autacoides potentes li­ efecto.
ico
berados (véase antes), y su contribución relativa a los sín­
tomas que surgen varía de manera amplia entre una y otra Efectos anticolinérgicos. Muchos de los antagonistas de H¡
especies, en diferentes tejidos. La protección que brindan de la primera generación tienden a inhibir respuestas a la acetil­
ed

los antagonistas de histamina obviamente varía también colina que son mediadas por receptores muscarínicos; estas ac­
de ese mismo modo. En seres humanos, algunos fenóme­ ciones atropiniformes son lo suficientemente sobresalientes en
m

nos que incluyen la formación de edema y la aparición de algunos de los fármacos, como para manifestarse durante su uso
en seres humanos (véase más adelante). Los antagonistas de H¡
prurito están perfectamente controlados, en tanto que otros,
s

de la segunda generación (como terfenadina, astemizol, lora­


como la hipertensión, no lo están a ese mismo grado. La
te

tadina) no generan efecto alguno en los receptores muscarínicos


broncoconstricción se reduce poco, si es que disminuye (Sorkin y Heel, 1985).
(Dahlén y col., 1983).
un

Efecto anestésico local. Algunos antagonistas de H¡ poseen


Sistema nervioso central. La primera generación de an­ actividad anestésica local y unos cuantos son más potentes que
ap

tagonistas de receptores H ¡ estimula y deprime al sistema la procaína. En este sentido, e� especialmente activa la prometa­
nervioso central. A veces con dosis habituales surge esti­ zina (PHENERGAN). Sin embargo, las concentraciones necesarias
w.

mulación en sujetos, presentando inquietud, nerviosidad e para lograr dicho efecto son muchísimo mayores que las nece­
incapacidad para conciliar el sueño. La excitación central sarias para antagonizar la histamina.
ww

también es un signo notable de intoxicación, que a veces


culmina en convulsiones, en particular en lactantes. Por Absorción, destino y disminución. Los antagonistas de
otra parte, la depresión del sistema nervioso central es el H¡ se absorben adecuadamente en vías gastrointestinales.
"acompañamiento" frecuente de las dosis terapéuticas de Después de ingerirlos, en dos horas alcanzan concentra­
los primeros antagonistas de receptores H ¡. El embotamien­ ciones plasmáticas máximas y los efectos suelen durar de
to del estado de alerta, tiempos más lentos de reacción y cuatro a seis horas; sin embargo, algunos de los fármacos
somnolencia son las manifestaciones comunes. Algunos tienen una acción más duradera (cuadro 25-1).
de los antagonistas de receptores H¡ tienen una mayor po­
sibilidad de deprimir al SNC que otros, y hay variabilidad Son pocos los estudios extensos sobre la biotransforrna­
en los pacientes en cuanto a la sensibilidad y reacciones a ción metabólica (destino) de los primeros antagonistas de
fármacos individuales. Las etanolaminas, como la difenhi­ receptores H¡. La difenhidramina, después de ingerida,
dramina (fig. 25-2), particularmente muestran facilidad alcanza su concentración máxima en la sangre en unas dos
para generar sedación. horas, permanece en ese nivel otras dos horas, y disminu­
La segunda generación de antagonistas de receptores ye de manera exponencial con una vida media desde el
H¡ (no sedantes), como terfenadina, astemizol y loratadina, plasma, de unas cuatro horas. El fármaco se distribuye
son excluidos en gran medida del encéfalo si se adminis­ ampliamente en todo el organismo, incluido el sistema
tran a dosis terapéuticas porque no cruzan en grado apre- nervioso central. Es poco el que se excreta en estado origi-
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630 Seccirín J V A utocoides: farmacoterapia de la inflamación

Cuadro 25- l . Preparados y dosis d e antagonistas d e receptor H. representativos*

Nombre comercial en Duración de acción,


Clase y nombre genérico Estados Unidos en horas Preparadost Dosis usual (adulto)

Fármacos de primera generación


Etanolaminas
Maleato de carbinoxamina CARDEC;� otros 3a6 LO 4 a 8 mg
Fumarato de clemastina TAVIST, otros 12 a 24 SO, LO 1 .34 a 2.68 mg
Clorhidrato de difenhidramina BENADRYL, otros 4a6 SO, LO, r, L 25 a 50 mg
Dimenhidrinato DRAMAMINE, otros 4a6 SO, LO, r 50 a l OO mg

Etilendiaminas
Maleato de pirilamina NISAVAL 4a6 SO 25 a 50 mg
Clorhidrato de tripelennamina Paz 4a6 SO 25 a 50 mg, l OO mg
(liberación sostenida)
Citrato de tripelennamina Paz LO 37.5 a 75 mg

r
.a
Alquilaminas
Maleato de clorfeniramina CHLOR-TRlMETON, otros 4a6 SO, LO, r 4 mg

om
8 a 1 2 mg (liberación
sostenida)
5 a 20 mg (inyección)

s.c
Maleato de bromofeniramina DIMETANE, otros 4a6 SO, LO, r 4 mg
8 a 12 mg (liberación
sostenida)
ico 5 a 20 (inyección)

Piperazinas
Clorhidrato de hidroxizina ATARAX, otros 6 a 24 SO, LO, r 25 a l OO mg
ed

Pamoato de hidroxizina VISTARlL 6 a 24 SO, LO, r 25 a 1 00 mg


Clorhidrato de ciclizina MAREZlNE 4a6 SO, r 50 mg
m

Lactato de ciclizina M AREZINE 4a6 r 50 mg


Clorhidrato de meclizina ANTIVERT, otros 12 a 24 SO 12.5 a 50 mg
s

Fenotiazinas
te

Clorhidrato de prometazina PHENERGAN, otros 4a6 SO, LO, r, S 25 mg


un

Fármacos de segunda generación


Alquilaminas
Acrivastina SEMPREX-D� 6a8 SO 8 mg
ap

Piperazinas
Clorhidrato de cetirizina� 12 a 24 SO 5 a l O mg
Piperidinas
w.

Astemizol HISMANAL >24 SO 1 0 mg


Clorhidrato de levocabastina LIVOSTIN 1 6 a 24 L Una gota
ww

Loratadina CLARlTIN 24 SO 1 0 mg
Terfenadina SELDANE 12 a 24 SO 60 mg

• Véase el capitulo 18 para un comentario más amplio de las fenotiazinas.


t Abreviaturas correspondientes a los preparados: SO, sólidos orales; LO, líquidos orales; 1, inyección; S, supositorio; L, local. En el comercio existen
preparados a base de múltiples fármacos, entre los cuales están los antagonistas de receptor H l .
t La cetirizina tiene efectos sedantes leves pero no se la obtiene comercialmente en Estados Unidos.
, El nombre comercial registrado también incluye otros medicamentos.

nal en la orina, si es que se elimina cantidad alguna; en bargo, durante 36 h o más, después de utilizar algunos de
este líquido aparece, en su mayor parte, en la forma de los antagonistas de H1 de más larga acción, puede persistir
metabolitos. Otros antagonistas de H1 de la primera gene­ una inhibición significativa de las respuestas de "roncha y
ración al parecer son eliminados en una forma muy simi­ eritema" a la inyección intradérmica de histamina o de un
lar (Witiak y Lewis, 1 978; Paton y Webster, 1 985). alergeno, incluso si las concentraciones de los antagonis­
No se cuenta con información sobre las concentracio­ tas en plasma son muy pequeñas. Los resultados anterio­
nes de estos medicamentos en piel ni en mucosas. Sin em- res destacan la necesidad de tener flexibilidad en la inter-
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Capítulo 25 Histamina. hradicinina y sus antagonistas 63 1

pretación de los planes posológicos recomendados (cua­ Taquicardia ventricular polimórfica. Casi nunca la ter­
dro 25- 1 ); a veces bastan dosis menos frecuentes. A seme­ fenadina y el astemizol prolongan el intervalo QTc y, por
janza de otros fármacos que son sometidos a metabolismo consecuencia, surge taquicardia ventricular polimórfica
extenso, los antagonistas de H. son eliminados con mayor (torsades de pointes; cap. 35). Se ha identificado el meca­
rapidez por niños que por adultos, y con mayor lentitud nismo que explica tal acción de la terfenadina y ésta pare­
por personas con hepatop\tías graves. Los antagonistas ce ser similar a la del astemizol. Las torsades de pointes
recién mencionados son algunos de los muchos fármacos en realidad surgen cuando la persona ingiere terfenadina a
que inducen la actividad de las enzimas microsómicas del dosis mayores de las recomendadas o en situaciones en
hígado y pueden facilitar su propio metabolismo (Paton y que disminuye el metabolismo hepático por enfermedad o
Webster, 1 985; Simons y Simons, 1 988). por administración concomitante de fármacos que inhiben
El astemizol, la loratadina y la terfenadina, antagonis­ a CYP3A4, familia enzimática específica del citocromo
tas de H. de la segunda generación, son absorbidos rápi­ P450, que parece ser la encargada del metabolismo del
damente de las vías gastrointestinales y metabolizados en fármaco (Woosley y col., 1 993; Honig y col., 1 993). El
hígado hasta generar metabolitos activos por el sistema resultado de la sobredosificación o la disminución del me­

r
P450 microsómico en dicha víscera (Simons y Simons, tabolismo es la conversión incompleta del fármaco origi­

.a
1 994). Por consecuencia, el metabolismo de estos medica­ nal, a.l metabolito carboxi, en el primer paso por el hígado.
mentos puede ser modificado al establecer competencia El metabolito en cuestión es el que origina las acciones

om
con otros fármacos por las enzimas P450; la alteración del clínicas antihistamínicas. El fármaco original, pero no el
metabolismo puede asumir importancia clínica (véase el metabolito, bloquea los canales de potasio "rectificadores
apartado de "Taquicardia ventricular polimórfica", más tardíos" como lo hacen el sotalol y la quinidina (cap. 35).

s.c
adelante). La cetirizina, un metabolito activo de la hidro­ Los intervalos QTc prolongados preexistentes o la disfun­
xizina, y la acrivastina también se absorben adecuadamente ción hepática significativa son factores de riesgo. Los
pero se excretan más bien por riñones en su forma no ico
medicamentos que con mayor frecuencia inhiben al meta­
metabolizada (Brogden y McTavish, 1 99 1 ; Spencer y col., bolismo de la terfenadina mediado por la enzima CYP3A4
1 993; Barnes y col. , 1 993). son los antibióticos macrólidos (en particular, el etilsucci­
ed
nato de eritromicina [E.E.S. y otras marcas], así como
Efectos adve r s o s. Sedación y otros efectos adversos claritromicina [BIAXIN]) y antimicóticos (en particular ke­
toconazol [NIZORAL] e itraconazol [SPORANOX]) . La azitro­
m

frecuentes. La sedación constituye el efecto indeseable,


que surge con mayor frecuencia con los antagonistas de micina (ZITHROMAX) y el fluconazol (DIFLUCAN), que se ex­
s

H. en la primera generación aunque no lo es en el caso de cretan más bien en estado original en la orina, no trastornan
te

la segunda generación de estos compuestos (Carruthers y el metabolismo de la terfenadina. Está en rápida evolu­
col ., 1 978). La sedación quizá sea un complemento desea­ ción el estudio de las interacciones medicamentosas con
un

ble en el tratamiento de algunos enfermos, pero interfiere la segunda generación de antagonistas de H .. y al parecer
a veces en las actividades diurnas de los pacientes. La in­ aumentará la lista de fármacos contraindicados para admi­
gestión concomitante de alcohol u otros depresores del SNC nistrar conjuntamente.
ap

ocasiona un efecto aditivo que entorpece las funciones mo­ La loratadina, antagonista de H. de la segunda genera­
toras "aprendidas" (Roehrs y col., 1 993). Otras acciones ción, a pesar de ser metabolizada por CYP3A4, quizá no
w.

indeseables atribuibles a los efectos en sistema nervioso genera toxicidad, incluso si se administra junto con inhibi­
central incluyen mareo, tinnitus, lasitud, incoordinación, dores (Woosley y Darrow, 1 994). La cetirizina y la acri­
ww

fatiga, visión borrosa, diplopía, euforia, nerviosismo, in­ vistina se excretan más bien en forma original por riñones,
somnios y temblores. y se sabe que no incrementan el intervalo QTc en seres
En orden de frecuencia, los efectos adversos afectan al humanos normales (Sanders y col., 1 992; Sale y col., 1 994).
tubo digestivo e incluyen anorexia, náusea, vómito, mo­ Mutagenicidad. Los resultados de un estudio a corto pla­
lestias epigástricas y estreñimiento o diarrea. Su inciden­ zo (Brandes y col., 1 994), con un modelo murino no habi­
cia puede disminuir si se administra el fármaco junto c·on tual, indicaron que las líneas tumorales de melanoma y
los alimentos. Los antagonistas de H. intensifican el apeti­ fibrosarcoma tenían una mayor rapidez de proliferación
to y en algunas personas ocasionan incremento ponderal. cuando se inyectaban en ratones que recibían algunos an­
Otros efectos adversos que en apariencia son causados por tagonistas de H • . Sin embargo, los estudios habituales con
las acciones antimuscarínicas de algunos de los antago­ animales y la experiencia en seres humanos no sugieren
nistas de la primera generación (receptores H.) son xeros­ carcinogenicidad con el uso de los antagonistas mencio­
tomía y sequedad de vías respiratorias, que a veces induce nados (Food and Drug Administration, 1 994).
tos, retención urinaria, poliaquiuria y disuria. Los efectos Otros efectos adversos. La alergia a fármacos puede sur­
anteriores no se observan con los antagonistas de la se­ gir si se ingieren los antagonistas de H. pero suele ser más
gunda generación como son terfenadina, astemizol y lora­ frecuente después de aplicación local. La dermatitis alér­
tadina. gica no es rara, y otras reacciones de hipersensibilidad in-
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632 Sección IV Autacoides; jarmacoterapia de la inflamación

cIuyen fiebre medicamentosa y fotosensibilización. Son futuro cercano. La ciclizina y la meclizina se han utilizado con­
muy infrecuentes las complicaciones hematológicas como tra la cinetosis, aunque en este cuadro son más eficaces la pro­
la leucopenia, agranulocitosis y anemia hemolítica. Se han metazina y la difenhidramina (dimenhidrinato) (como también
identificado efectos teratógenos de los compuestos pipe­ lo es la escopolamina; véase más adelante).
Fenotiazinas (Prototipo: prometazina). Casi todos los pro­
razínicos, pero los estudios clínicos extensos no han mos­
ductos de esta clase son antagonistas de los receptores H, y tam­
trado relación alguna entre el empleo de ellos y anomalías
bién poseen notable actividad anticolinérgica. La prometazina,
fetales en seres humanos. Dado que los antagonistas de
que genera evidentes efectos sedantes, y sus congéneres se utili­
receptores H 1 interfieren en las cutirreacciones para estu­ zan más bien por sus acciones antieméticas (cap. 38).
diar alergia, es importante no administrarlos mucho antes Piperidinas (prototipo: terfenadina). Los antagonistas de re­
de realizar tales pruebas. ceptores H , de esta categoría incluyen terfenadina, astemizol y
loratadina. Muestran gran selectividad por los receptores H, y
En la intoxicación aguda con antagonistas de receptores H " no tienen acciones anticolinérgicas significativas. Su penetra­
e l máximo peligro está constituido por sus efectos excitadores ción en el sistema nervioso central es mínima. En conjunto, las
centrales. El síndrome incluye alucinaciones, excitación, ataxia, propiedades mencionadas explican la poca frecuencia de efec­

r
incoordinación, atetosis y convulsiones. Las pupilas fijas y tos adversos de estos compuestos piperidínicos.

.a
midriáticas con hiperemia facial j unto con taquicardia sinusal,
retención de orina, xerostomía y fiebre conforman un síndrome

om
muy similar al de la intoxicación por atropina. En fase terminal, Aplicaciones terapéuticas
se advierte coma cada vez más profundo con colapso cardio­
respiratorio y muerte, por lo común, en término de 1 2 a 1 8 h. El
Los antagonistas de receptores HI tienen un sitio estable­

s.c
tratamiento casi siempre es sintomático, con colocación de caté­
teres para introducir fármacos de sostén.
cido y útil en el tratamiento sintomático de diversas reac­
ciones de hipersensibilidad inmediata. Además, las pro­
Agentes antagonistas de HI disponibles. A continuación se
ico
piedades de algunos de los fármacos de esta serie en el
resumen los efectos terapéuticos y colaterales de diversos anta­ sistema nervioso central se han aprovechado en terapéuti­
gonistas de H , con base en su estructura química. En el cuadro ca para suprimir la cinetosis o para lograr sedación.
ed

25-1 � incluyen productos representativos.


Etanolaminlls (prototipo: difenhidramina). Los compuestos Cuadros alérgicos. Los antagonistas de H , tienen su mayor
de este grupo poseen notable actividad antimuscarínica y una utilidad en tipos agudos de alergia que incluyen como manifes­
m

tendencia intensa a inducir sedación. En promedio, la mitad de taciones iniciales síntomas de rinitis, urticaria y conjuntivitis.
Sin embargo, su efecto se limita a la supresión de síntomas atri­
s

los pacientes que reciben las dosis habituales de estos fármacos


muestra somnolencia. Sin embargo, es pequeña la incidencia de buibles a la histamina liberada por la acción de antígeno-anti­
te

efectos gastrointestinales adversos al utilizar este grupo de fár­ cuerpo. En el asma bronquial, los antagonistas de histamina tie­
macos. nen poco efecto beneficioso y no son eficaces como fármacos
un

Etilendiaminas (prototipo: pirilamina). Los fármacos de esta únicos (cap. 28). En la anafilaxia sistémica, en que intervienen
categoría incluyen algunos de los antagonistas de H, más espe­ de manera importante autacoides distintos a la histamina, la te­
ap

cíficos. Sus efectos en sistema nervioso central son relativamente rapéutica se basa fundamentalmente en la adrenalina, y los anta­
débiles, pero en una proporción importante de pacientes aparece gonistas de histamina tienen sólo una participación secundaria y
somnolencia. Los efectos adversos en vías gastrointestinales son coadyuvante. Tal aseveración es válida también en caso de an­
w.

bastante comunes. gioedema intenso, en que el edema laríngeo constituye una ame­
Alquilaminas (prototipo: clorfeniramina). Los productos me­ naza para la vida.
ww

dicamentosos de esta categoría incluyen algunos de los antago­ Otras alergias de las vías respiratorias pueden ser tratadas de
nistas de H, más potentes. No tienen tanta tendencia como otros mejor manera con antagonistas de H , o Los mejores resultados se
fármacos de esta categoría a producir somnolencia y son los obtienen en la rinitis estacional y conj untivitis (fiebre de heno,
compuestos más idóneos para utilizar en horas de vigilia, es de­ polinosis), en que los fármacos de esta categoría alivian los
cir, durante el día; sin embargo, una proporción notable de pa­ estornudos, la rinorrea y el prurito de ojos, vías respiratorias y
cientes presenta sedación. Los efectos adversos, que incluyen faringe. En casi todos los pacientes se logra una reacción satis­
estimulación del SNC, son más comunes en este grupo que en factoria sobre todo al comenzar la estación de polinización, en
los demás. que el número de partículas de polen en el aire es pequeño; no
Piperazinas. El miembro más antiguo de este grupo, la c/orci­ obstante, los fármacos son menos eficaces si abundan los aler­
clizina, tiene una acción más duradera y origina una incidencia genos, si la exposición a ellos es duradera o si es muy notable la
comparativamente menor de somnolencia. La hidroxizina es un congestión nasal. Se ha demostrado que son eficaces en la con­
compuesto de larga acción que se utiliza ampliamente en aler­ j untivitis y rinitis alérgica prel'8raciones locales de antihis­
gias cutáneas; su notable actividad depresora del sistema nervioso tamínicos como la levocabastina (Janssens y Bussche, 1 99 1 ).
central puede contribuir a su extraordinaria acción antipruri­ En la actualidad, en Estados Unidos se distribuye un preparado
ginosa. La cetirizina es un metabolito activo de la hidroxizina oftálmico de dicho medicamento (cap. 65) y están en fase de
que no penetra en forma importante el sistema nervioso central prueba las soluciones para nebulización nasal.
y muestra una menor propensión a causar sedación. Se tienen Algunas de las dermatosis alérgicas mejoran de manera ade­
planes para su distribución comercial en Estados Unidos, en un cuada con los antagonistas de H" y el beneficio es más notable
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Capítulo 25 Histamina. bradicinina y sus antagonistas 633

en la urticaria aguda, si bien el prurito de este cuadro es mejor como la en fermedad de Méni ere y otros tipos de vértigo verda­
controlado que el edema y el eritema. La urticaria crónica no dero (Cohen y De Jong, 1 972). Sólo la prometazina sir ve para
reacciona tan satis factoriamente , pero se puede obtener algún tratar la náusea y el vómito que surgen después del uso de
bene ficio en uqa proporción media lla de pacientes. Aún más, la qui mioterápicos o de radioterapia contra cáncer ; sin embargo,
combinación de los antagonis tas de tI. y H2 es e ficaz en algunas se cuenta con otros antieméticos e ficaces (cap . 38).
personas si son inútiles los antagonis tas de H •. El angioedema La di fenhidramina puede utilizarse para re vertir los e fectos
también mejora con los antagonistas de H .. pero hay que desta­ ad versos e xtrapiramidales causados por las fenotiazinas. Las
car de nue vo la importancia fundamental de la adrenalina en la acciones anticolinérgicas de este compuesto también se utilizan
crisis aguda e intensa de la laringe, sobre todo si hay a fección en las primeras etapas del tratamiento de indi viduos con en fer­
que pueda ser letal (cap. 1 0). Sin embargo, en este caso quizá medad de Parkinson (cap. 22), pero es menos e ficaz que otros
sea adecuado administrar además un antagonista de H. por vía productos como el trihe xi fenidilo (A RTANE).
intra venosa. Los antagonistas mencionados son ú tiles en el tra­ La tendencia de algunos de los antagonis tas de receptores Hl
tamiento del prurito. Muchos pacien tes que su fren dermatitis a producir somnolencia ha hecho que se les use como hipnóti­
atópica o por contacto obtienen algún alivio (aunque los corti­ cos . Los antagonistas mencionados, sobre todo la difenhidramina,
costeroides locales son ú ti les ), y también en cuadros di versos suelen incluirse e n algunos productos comerciales registrados

r
como picaduras de insectos e into xicación por zuma que. Otros contra el insomnio que se venden sin receta. Si bien dichos re ­

.a
pruritos sin una base alérgica a veces mejoran con los anti­ medios casi siempre son ine ficaces a las dosis recomendadas,
histam ínicos , y en particu lar cuando se aplican localmente pero algunos sujetos sensibles pueden obtener bene ficio (Faingold,

om
también con su adminis tración oral. Sin embargo, es necesario 1 978). Las acti vidades sedante y ansiol ítica le ve de la hidro xizi­
reconocer lá posibilidad de generar de rmatitis alérgica con apli ­ na y la di fenhidramina han contribuido a su utilización como
caciones locales de antagonistas de H • . Los medicamentos en ansiol íticos débiles.

s.c
cuestión inhiben la dermatosis alérgica, y por ello es importante
dejar de utilizarlos mucho antes de realizar pruebas de reaccio­
nes cutáneas para estudio de las alergias. ico AGONISTAS Y ANTAGONISTAS
Las lesiones urticarianas y edematosas de la en fermedad del
DE RECEPTORES H3
suero se reducen con los antagonistas de H ., pero no hay reac­
ción de la fiebre ni las artralgias. Originalmente se describió al receptor H3 como un receptor
ed

Muchas respuestas medicamentosas atribuib les a fenómenos presináptico que se ha llaba en las terminaciones de nervios
alérgicos mejoran con los antagonistas de H . y en particular las histaminérgicos y en el sistema nervioso central, y que ten ía por
m

caracterizadas por p rurito, urticaria y angioedema ; las reaccio­ acción la regulación retroalimentaria de la s íntesis y la liberación
nes del tipo de enfermedad de l suero también reaccionan con el de histamina (Arrang y col., 1983). Desde esa fecha , se ha sabido
s

tratamiento intensi vo. No obstante, la liberación súbita y e xtraor­ que los receptores H3 actúan en muy di versos tejidos. A semejan­
te

di naria ("e xplosi va ") de histamina por 10 común obliga a recu­ za de los receptores H . y H 2, los H3 son receptores acoplados a
rrir a la adrenalina y, por ello, los antagonistas de H . tienen un prote ína G y al ser ocupados disminuye la penetración de calcio
un

papel secundario. Sin embargo, la pro fila xia con un antagonista en la célula . (R)-a-metilhistamina es un agonista H3 selecti vo
de H. puede bastar para reducir los s íntomas hasta un ni vel tole­ que t iene una selecti vidad I 500 veces mayor por el receptor H 3
rable cuando se administra un fármaco que es un liberador que por e l H2, y una selecti vidad 3 000 veces mayor por e l recep­
ap

histam ínico identi ficado. tor que se se ñaló antes (H3) que por el H . (Timmerman, 1 990). El
Resfriado común. A pesar de la cr eencia popular persisten te imetit es otro agonista potente de receptor H 3.
en este sentido, los antagonist as de H . carecen de utilidad para Muchos de los primeros antagonistas del receptor H3, como
w.

combatir el res friado común. Los e fectos anticolinérgicos débi ­ los de la impromidina y la burimamida, pose ían e fectos mi xtos
les de los primeros compuestos quizá aminoren la rinorrea, pero por que también son agonistas del receptor H2• La tioperamida
ww

este e fecto secante puede ser más noci vo que bene ficioso, y tam ­ fue e l primer antagonista específico de H 3 obtenido e xperimen­
bién lo es su tendencia a inducir somnolencia (West y col., 1 975). talmente (Timmerman, 1 990); aún constituye el antagonista de
Cinetosis, vértigo y sedación. La escopolamina , por vías oral, H3 más utilizado y posee potentes acciones farmacológicas (véase
parenteral o transdérmica, es el más e ficaz de todos los fárma ­ más adelante ). Otros antagonistas de esta categor ía que se han
cos para e vitar y tratar la cinetosis, pero los antagonistas de H. obtenido incluyen el inhibidor competiti vo clobenpropit y el in­
son útiles en muy di versos cuadros más le ves y tienen la ventaja hibidor irre versible N-eto xicarboni l- 2-eto xi- 1 ,2-dihidroquinolina
de que poseen menos e fectos ad verso s; entre ellos están el (E E D Q).
di menhidrinato y las piperazinas como la ciclizina y la meclizina . Se sabe que los receptores H3 ac túan como inhibidores retro­
La prometazina, una fenotiazina, es más potente y e ficaz y, por alimentarios en muy di versos sistemas y órganos . En el sistema
tener propiedades también antieméticas puede ser útil para re­ nervioso central, los agonistas del receptor H3 ocasionan seda­
ducir el vómito, pero su acción sedante pro funda por lo común ción al oponerse al estado del despertar inducido por H. (Monti ,
es des ventajosa. Siempre que sea posible, los fármacos en cues­ 1 993). En las vías gastrointestinales, los receptores H3 antagoni­
tión deben administrarse una hora (o más ) antes de cual quier zan la contracción i leal inducida por H. y también ejercen regu­
desplazamiento planeado que entra ñe mo vimientos. La admi­ lación sustracti va en los valores de histamina (y por consiguien ­
nistración después de que comienzan la náusea y el vómito rara te, de gastrina ) a causa de acciones autorreguladoras en la mucosa
vez es bene ficiosa. gástrica (Hollande y col., 1 993). La respuesta broncoconstrictora
Algunos antagonistas de H . . y en particular el dimenhidrinato de H. es antagonizada por una reacción broncodilatadora de H3
y la mec lizina, sue len ser útiles en perturbaciones vestibulares en el árbol pulmonar.
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634 Sección IV Autacoides: farmacoterapia de la inflamación

Ishikawa y Sperelakis (1987) fueron los primeros en corrobo­ polipéptido separado de una globulina plasmática que llamaron
rar la existencia de receptores H3 en el aparato cardiovascular. calidinógeno (Werle, 1970).
Dichos autores comprobaron que los agonistas de receptores H3 El interés en este campo se intensificó cuando Rocha e Silva
deprimían la neurotransmisión simpática perivascular y dilata­ y colaboradores (1949) señalaron que la tripsina y algunos ve­
ban las arterias mesentéricas del cobayo. Más tarde se identifi­ nenos de serpiente actuaban en la globulina plasmática para pro­
caron receptores H3 en terminaciones nerviosas simpáticas en la ducir una sustancia que disminuía la presión arterial y que oca­
vena safena del ser humano, en la cual los agonistas de recepto­ sionaba contracción de aparición lenta en el intestino. Ante esta
res de H3 inhibían la corriente centrífuga simpática y la libera­ respuesta lenta, llamaron a tal sustancia bradicinina, término
ción de noradrenalina (Molderings y col., 1992). Además de in­ proveniente de las raíces griegas bradys que significa "lento" y
terferir en la vasoconstricción simpática, los receptores H3 kinein, movimiento. En 1960, Elliott y colaboradores aislaron el
también poseen efectos cronotrópicos negativos en las aurícu­ nonapéptido bradicinina que fue sintetizado por Boissonnas y
las. Los receptores H3 quizá tengan acciones mínimas en situa­ colaboradores. Muy poco después, se advirtió que la calidina
ciones normales "basales", pero pueden inhibir la liberación de era un decapéptido, es decir, era la bradicinina con un residuo
noradrenalina durante situaciones de estrés como la isquemia adicional de lisina en el extremo terminal amino. Las dos sus­
(Imamura y col., 1994). tancias son miembros de un grupo de polipéptidos con estructu­

r
Se encuentra en fase de expansión rápida la acumulación de ras químicas y propiedades farmacológicas similares, de distri­

.a
conocimientos sobre las funciones del receptor H3 en órganos y bución muy amplia en la naturaleza. Se ha adoptado para todo el

om
sistemas individuales. En la actualidad, los agonistas y antago­ grupo el término genérico cininas, y la calidina y la bradicinina
nistas de dicho receptor pueden obtenerse sólo con fines experi­ han sido designadas cininas plasmáticas.
mentales. En 1980, Regoli y Barabé dividieron los receptores de cinina
en clases B I y B2. A mediados del decenio de 1980, fue posible

s.c
la síntesis de la primera generación de los antagonistas de re­
ceptores de cinina (Vavrek y Stewart, 1985). En los comienzos
BRADICININA y CALIDINA y ico
del decenio de 1990, se produjo la síntesis de la segunda genera­
SUS ANTAGONISTAS ción de antagonistas de cinina con especificidad de receptores;
dichos antagonistas han permitido ampliar el conocimiento so­
Factores diversos como lesión tisular, reacciones alérgi­ bre las acciones de la cinina. El mayor uso de los inhibidores de
ed

cas, infecciones por virus y otros trastornos inflamatorios la enzima convertidora de angioterrsina (ACE) en seres huma­
activan una serie de reacciones proteolíticas que generan. nos (cap. 3 1 ) ha estimulado el interés por las cininas debido a
m

bradicinina y calidina en los tejidos (Wachtfogel y col., que los inhibidores de ACE toman lento el metabolismo de la
cinina.
1 993). Dichos péptidos son autacoides que actúan local­
s

mente y producen dolor, vasodilatación, mayor permeabi­


te

lidad vascular y síntesis de prostaglandina. De este modo,


integran un subgrupo de un gran número de mediadores Sistema endógeno de calicrcína-cininógeno-cinina
un

que contribuyen a la respuesta inflamatoria. Síntesis y metabolismo de cininas. La bradicinina es un


En los últimos años, se han hecho descubrimientos inte­ nonapéptido (cuadro 25-2). La calidina posee un residuo de lisi­
ap

resantes sobre las cininas y sus receptores. Los metaboli­ na adicional en la terminación amino, y a veces se le conoce
tos de cininas, aceptados en épocas pasadas como inactiva­ como lisil-bradicinina. Los péptidos son separados de las a2 glo­
w.

dores de productos de degradación, son considerados ahora bulinas que son sintetizadas por el hígado y circulan en el plas­
como mediadores potentes de la inflamación y el dolor; ma. Los precursores en cuestión han sido llamados cininógenos.
Se conocen dos de ellos que son el de alto peso molecular (HMW)
ww

los péptidos en cuestión interactúan con receptores especí­


y el de bajo peso molecular (LMW). Varias de las proteasas de
ficos cuya presencia es inducida por daño tisular. Con base
serina generarán cininas, pero las proteasas altamente específi­
en la información comentada, quizá se pueda contar con
cas que liberan bradicinina y calidina, a partir de los cininógenos,
métodos nuevos de intervención terapéutica en cuadros reciben el nombre de calicreína (fig. 25-3; véase más adelante).
inflamatorios crónicos.
Calicreínas. Las sustancias de esta categoría circulan en el
Historia. La observación antigua de que la orina inyectada por plasma en forma inactiva y deben ser activadas por otras protea­
vía intravenosa disminuía la presión arterial permitió identificar sas. Dos calicreínas actúan en los cininógenos: la plasmática y
las cininas. Entre 1920 y 1939, Frey y sus colaboradores, y Kraut la tisular. Son enzirrfas diferentes y se activan mediante proce­
y Werle, identificaron la sustancia que causaba la hipotensión y sos distintos (Bhoola y col., 1992). La precalicreína plasmática
demostraron que podría obtenerse un material similar en saliva, es una proteína inactiva que tiene 88 kDa aproximadamente y
plasma y diversos tejidos. El páncreas era una fuente rica de tal que está unida en un complejo a partes iguales con su sustrato,
sustancia, razón por la cual la llamaron ca/icreína, con base en el cininógeno de alto peso molecular. La cascada en cuestión es
el sinónimo griego de dicho órgano kallicréas. En 1937 Werle, "frenada" por los inhibidores de proteasa presentes en el plas­
Gotze y Keppler definieron que las calicreínas generan una ma; entre los más importantes están el inhibidordel primer com­
sustancia farmacológicamente activa, a partir de algún precur­ ponente activado del complemento (C I INH) y la a2-macroglo­
sor inactivo presente en el plasma. En 1948, Werle y Berek lla­ bulinas. Después de su síntesis por el hígado, la precalicreína
maron a la sustancia activa ca/idina y demostraron que era un plasmática es desdoblada y activada por el factor XII conocido
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Capítulo 25 Histamina. bradicinina J SIIS antagonistas 635

Cuadro 25-2. Estructura de agonistas y antagonistas de cinina, con base en la terminación carboxilo

Nombre Estructura· Funciones

Bradicinina Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser-Pro-Phe-Arg Agonista, B2 > BI


Calidina Lys-Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser-Pro-Phe-Arg Agonista, B2 == BI
.,
des-Arg9-bradicinina Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser-Pro-Phe Agonista, B I
des-ArglO-calidina Lys-Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser-Pro-Phe Agonista, BI

des-Arg9-[Leu8]-bradicinina Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser-Pro-Leu Antagonista, BI

[D-Phe7]-bradicinina Arg-Pro-Pro-Gly-Phe-Ser[o-Phe]-Phe-Arg Antagonista, B2 (también en cierta medida B1)

HOE 140 [o-Arg]-Arg-Pro-Hyp-Gly-Thi-Ser-Tic-Oic-Arg· Antagonista, B2

WIN 64338 No péptido Antagonista, B2

r
.a
• Hyp = trans-4-hidroxi-Prolina; Thi =P-(2-tienil)-Alanina; Tic [o]-I ,2,3,4-tetrahidroisoquinolin-3-il-caronilo; Oic (3as, 7as)-octahidroindol-
= =

2-il-carbonilo; Arg arginina; Pro prolina; Gly glisina; Phe fehilalanina; Ser serina; Leu leucina (Con autorización de Trifilieff et al.,

om
= = = = = =

1 993).

s.c
también como de Hageman, proteasa que actúa por igual en las peso molecular es un sustrato sólo para la calicreína tisular, y el
cascadas de coagulación intrínseca y en la cinina (cap. 54) para
activar una fracción de 36 kDa, la calicreína. El propio factor
ico
producto es la calidina (Nakanishi, 1 987).

XII es activado por el contacto con superficies con carga negati­ Metabolismo. El decapéptido calidina tiene casi la misma ac­
ed
va como las de la colágena. Como dato importante, como lo se­ tividad que el nonapéptido bradicinina y es innecesario que se
ñala la línea de guiones en la figura 25-3, la calicreína hace que transforme en este último para que genere sus efectos caracte­
actúe todavía más el factor XIIa y con ello ejerce un efecto de rísticos. Se produce conversión moderada de calidina en bradi­
m

retroalimentación positi�a en el sistema (Proud y Kaplan, 1 988). cinina conforme la aminopeptidasa plasmática separa el residuo
En comparación con la calicreína plasmática, la tisular es una de lisina en la terminación amino. Sin embargo, la reacción men­
s

proteína más pequeña (masa molecular, 29 000 Da). Es sinteti­ cionada es lenta en comparación con la velocidad de inactiva­
te

zada en diversos tejidos como glándulas salivales, sistema ner­ ción por hidrólisis en la terminación carboxilo. La mínima estruc­
vioso central y aparato cardiovascular. Actúa localmente muy tura eficaz necesaria para desencadenar las respuestas clásicas
un

cerca de su sitio de origen (Fukushima y col., 1 985; Evans y corresponde a la del nonapéptido.
col., 1 988). La síntesis de procalicreína tisular es regulada por Las cininas tienen una existencia brevísima y su vida media
diversos factores que incluyen aldosterona en riñón y glándulas en el plasma es sólo de unos 1 5 s. Aún más, en un solo paso por
ap

salivales, y andrógenos, en otras glándulas. La secreción de la el lecho vascular pulmonar pueden destruirse 80 a 90% de las
procalicreína tisular también puede ser regulada, por ejemplo; cininas (Ryan, 1 982). En la circulación se identifican únicamen­
w.

su secreción desde el páncreas aumenta por la estimulación del te concentraciones picomolares (Pellacani y col., 1 992). La prin­
'
neumogástrico (Proud y Kaplan, 1 988; Margolius, 1 989). La cipal enzima catabolizante en pulmón y otros lechos vasculares
ww

activación de la procalicreína en calicreína necesita de la degra­ es una dipeptidil carboxipeptidasa, conocida en esta situación
dación proteolítica. En seres humanos, no se ha definido con como cininasa 11 y en otros como enzima convertidora de angio­
exactitud la sucesión de estos fenómenos de activación (Bhoola tensina (cap. 3 1 ). La separación del dipéptido en la terminación
y col., 1 992). carboxilo anula la actividad cininiforme. La arginina carboxi­
peptidasa, otra enzima de acción lenta (carboxipeptidasa-N;
Cininógenos. Los dos sustratos de las calicreínas, que son los cininasa 1), separa el residuo de arginina en la terminación
cininógenos de alto y bajo peso molecular, son producto de un carboxilo y así genera des-Arg9-bradicinina y des-ArglO-calidina
solo gen, que surgen por el procesamiento alternativo de mRNA. (cuadro 25-2), que por sí mismas son potentes agonistas de re­
El cininógeno de alto peso molecular contiene 626 residuos de ceptores de cinina B . (Burch y Kyle, 1 992; Trifilieffy col., 1 993).
aminoácidos; la secuencia bradicinínica interna de nueve resi­ Se ha descrito una deficiencia de carboxipeptidasa-N de tipo
duos aminoácidos se une con la secuencia de "cadena pesada" familiar; las personas con valores bajos de la enzima presentan
de la terminación amino (362 aminoácidos), y la secuencia de angioedema o urticaria (véase más adelante) (Mathews y col.,
"cadena ligera" de la terminación carboxil (255 aminoácidos). 1 980).
El cininógeno de bajo peso molecular es idéntico a la forma de
mayor tamaño de la proteína, desde la terminación amino hasta Receptores de bradicinina. Se conocen como mínimo dos re­
la secuencia bradicinínica; su cadena ligera breve difiere de la ceptores diferentes de cininas que han sido llamados B . y B2
comentada (Takagaki y col., 1 985). El cininógeno de alto peso (Regoli y Barabé, 1 980). El receptor clásico, llamado ahora B2,
molecular es desdoblado por la calicreína plasmática y tisular liga selectivamente bradicinina y calidina (cuadro 25-2), y es un
para generar bradicinina y calidina, respectivamente. El de bajo constitutivo de casi todos los tej idos normales. Los receptores
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636 Sección IV Autacoides; farmacoterapia de la inflamación

superfi c i es con carga negativa :


membrana basal, colágena, m embranas de d i á l isis, etc.
x C1 1NH
factor XI
t
retroalimenta­
- -� ción positiva

fac to r X I I
!I�
factor X l l a
t x »t
-
_ _ _ _ _ _ _

plasminógeno
---- --• I
.- - - - -

cascada de 1
:

f: +c a l icreína
coagulación
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tisular

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s.c
� cininasa I des-AR G
LMWK • c a l i d i n a --- calidina
ico
agonista de 82-8, agonista de e ,
ed
Fig. 25-3. Esquema de l a producción y catabolismo de l a cinina.

La bradicinina y la calidina son formadas por las calicreínas. En seres humanos, se han identificado dos calicreínas que
m

son la plasmática y la tisular. Adviértase la relación entre el sistema cininógeno plasmático y la cascada de coagulación de
la sangre. Dos componentes de la cascada de cinina, la precalicreína y el cininógeno de alto peso molecular (HMWK), son
s

esenciales en la activación del factor XII (de Hageman) y su función, y por ello constituyen factores de coagulación (cap.
te

54). Obsérvese que la calicreína plasmática y el factor XII se activan de manera recíproca. Las líneas de guiones señalan
"asas" de retroalimentación positiva. La conversión de HMWK a bradicinina por acción de calicreína plasmática en
un

realidad incluye tres fases seriadas (Wachtfogel et al, 1 993).


El esquema indica los efectos "restrictivos" del inhibidor de complemento, que el inhibidor de la esterasa de e l (el
INH, "X"). En algunos de los mismos sitios, actúan otros inhibidores de proteinasas plasmáticas como plasmina, al'
macroglobulina y a,-antitripsina. Además de ser el inhibidor primario de la calicreína plasmática, el el INH inhibe al
ap

factor XlIa.
La bradicinina y la calicreína son transformadas a sus metabolitos respectivos des-Arg por la cininasa 1 . A diferencia de
w.

los compuestos originales, estas cininas son ligandos potentes de receptores cinínicos B" pero no de los B2• Los metabo­
litos des-Arg tienen mayor importancia durante la inflamación en que hay regulación aditiva de receptores B" La bradici­
ww

nina y la calicreína son inactivadas por la cininasa II conocida también como enzima convertidora de angiotensina (ACE).

B2 median la mayor parte de los efectos de la bradicinina y diacilglicol (y con ello la actividad de proteincinasa C). Se ha
calidina, en ausencia de inflamación. El receptor B , se liga de demostrado que la bradicinina activa a la proteincinasa e que
modo selectivo a los metabolitos des-Arg en la terminación depende de calcio y a la que no depende de este ion, así como a
carboxi, de la bradicinina y ca:idina (cuadro 25-2) y es menor su las isoformas atípicas (Tippmer y col., 1 994). La estimulación
número que el del receptor B2 en casi todos los tejidos. Los re­ de la fosfolipasa A2 libera ácido araquidónico de los fosfolípi­
ceptores B , están en el músculo liso normal de vasos; son regu­ dos de la membrana (Schr6r, 1 992). El ácido araquidónico libe­
lados en forma aditiva por la inflamación (Regoli y Barabé, 1 980; rado puede ser metabolizado a la forma de mediadores inflama­
Dray y Perkins, 1 993). Durante situaciones de estrés, como trau­ torios potentes (cap. 26).
matismo, presión tisular o inflamación, pueden predominar los Se ha sugerido la existencia del receptor B) CQ11 base en la
efectos en receptores B " Los mecanismos de envío de señales broncoconstricción de la tráquea de cobayos inducida por cinina
de dichas estructuras no se han definido con la precisión que se (Farmer y col., 1 989; Farmer y DeSiato, 1 994). Además, tam­
ha obtenido con los receptores B2• bién se ha propuesto la presencia de receptores B4 y Bs en las
El receptor B2 se acopla a proteínas G y activa a las fosfolipa­ células de músculo liso de esófago de la zarigüeya. Sin embar­
sas A2 y C. La activación de la fosfolipasa e inducida por cinina go, datos recientes obt�nidos con antagonistas de cinina más
hace que aumente IP) (y con ello el calcio citosólico) y el potentes no han corroborado la existencia de ninguno de los tres
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Capítulo 25 Histamina. bradicinina y sus antagonistas 637

receptores mencionados. Los estudios recientes indican que la ceptores B ) Y quizá B2, tal vez por una activación de osteoclastos
broncoconstricción en el cobayo, que al parecer sería un efecto mediada por osteoblastos (Lemer, 1994).
del receptor �3, en realidad puede representar funciones no iden­ Algunos pacientes que han recibido inhibidores deACE (cap.
tificadas del receptor B2 (Regoli y col., 1 993). 3 1 ) han mostrado angioedema y urticaria; ambos signos pueden
surgir en cualquier momento después de iniciar el tratamiento,
pero hay mayor probabilidad de que aparezcan en término de
Funciones y propiedades farmacológicas
una semana de haber recibido por primera vez el fármaco. Se
de las calicreínas y las cininas trata del clásico efecto de los inhibidores de ACE y, según se
Los antagonistas de bradicinina, más nuevos y específicos, han piensa, éste provien� de la inhibición del metabolismo de cinina
permitido obtener mayores conocimientos de las acciones de las por parte de ACE (Slater y col., 1 988). Un efecto adverso más
cininas. Ha surgido interés por la intervención de dichos com­ común de los inhibidores de ACE (en mujeres particularmente)
puestos en fenómenos como dolor, inflamación y enfermedades es la tos crónica no productiva que desaparece cuando se inte­
inflamatorias crónicas, en el aparato cardiovascular y en el de rrumpe la administración del inhibidor mencionado. Es un pun­
reproducción. Se ha originado un gran interés clínico por los to de controversia, pero la acumulación de cininas tal vez parti­

r
efectos de las cininas, porque la enzima convertidora de angio­ cipe en este efecto indeseable (Israili y Hall, 1 992).

.a
tensina contribuye a la degradación de la bradicinina (fig. 25-3).
Enfermedades de vías respiratorias. La intervención de las

om
Los inhibidores de ACE incrementan los valores de bradicinina,
lo cual puede explicar algunos de los efectos adversos de los cininas en la inflamación y permeabilidad vascular constituye
inhibidores de la enzima convertidora. un aspecto importante en la fisiopatología de neumopatías como
el asma. La inhalación o la inyección intravenosa de cininas causa

s.c
Dolor. Las cininas son potentes algésicos que ocasionan dolor broncospasmo en asmáticos, pero no en sujetos normales; dicha
ardoroso e intenso si se aplican a la base cruenta y al descubier­ broncoconstricción es bloqueada por compuestos anticolinérgi­
to de una vesícula, y un dolor ardoroso pulsátil en la mano si se cos mas no por antihistamínicos ni por inhibidores de la ciclo­
ico
inyectan en la arteria humeral. La bradicinina estimula neuronas oxigenasa. La inhalación repetida de bradicinina atenúa la res­
sensitivas primarias y hace que se liberen neuropéptidos como puesta, y aplaca la broncoconstricción en reacción a la bradicinina
la sustancia P, la neurocinina A y el pép.tido producido por el gen y también en respuesta a la adenosina 5' mono fosfato (Polosa y
ed

de calcitonina (Geppetti, 1 993). En el dolor agudo, los recepto­ col., 1 992).


res B2 median la algesia por bradicinina; dicho dolor disminuye
m

notablemente por acción de los antagonistas de B2, pero no por Propiedades far macológicas . Aparato cardiovascular.
la de los B ) . El dolor de la inflamación crónica entraña la parti­
Las cininas plasmáticas son vasodilatadores cuya poten­
s

cipación de un número mayor de receptores B ) .


cia es unas 1 0 veces mayor que la de la histamina. Inyecta­
te

Inflamación. Las cininas inyectadas semejan u n cuadro infla­ das por la vena ocasionan hiperemia en la zona con mayor
riego y una cefalalgia pulsátil. También dilatan otros le­
un

matorio. La medición de los componentes de la cascada de cini­


na y los efectos de antagonistas de bradicinina señalan que la chos viscerales, corazón y riñones. Algunos de los efectos
primera participa en diversas enfermedades inflamatorias. Las directos de la cinina pueden ser complementados por la
ap

cininas plasmáticas intensifican la permeabilidad en la micro­ capacidad de estas sustancias para estimular la liberación
circulación. El efecto, similar al observado con la histamina y la de histamina y otros metabolitos vasoactivos de las cé­
serotonina en algunas especies, ocurre en las venas finas y en­
w.

lulas cebadas. La vasodilatación sistémica inducida por


traña la separación de las uniones entre células endoteliales. Lo cinina hace que disminuyan netamente las presiones sistó­
anterior, aunado a un mayor gradiente de presión hidrostática
ww

lica y diastólica, fenómeno mediado por el óxido nítrico


genera edema, y este último acoplado a la estimulación de las
originado por células endoteliales (Palmer y col., 1 987). A
terminaciones nerviosas (véase adelante) origina una respuesta
diferencia de ello, la bradicinina puede causar vasocons­
"de roncha y eritema" a las inyecciones intradérmicas en seres
humanos. Los receptores B) en células de inflamación, como tricción directa en vasos con lesión endotelial (Gavras,
macrófagos, puede desencadenar la producción de los mediado­ 1 992).
res inflamatorios IL- l y el factor a de necrosis tumoral (TNF-a) El goteo intravenoso de cininas produce siempre efec­
(Dray y Perkins, 1 993). tos vasodepresores en seres humanos normales y en mo­
En diversos cuadros inflamatorios crónicos, se han detectado delos animales. Se han obtenido resultados antagónicos
mayores concentraciones de cininas; entre ellos están rinitis cau­ en algunos estudios, pero los antagonistas de cinina ejer­
sada por la inhalación de antígenos y la que surge con infección cen efectos mínimos en animales normales (Madeddu,
por rinovirus. Se forma bradicinina y se agotan los componentes 1 993). A diferencia de lo comentado, en presencia de com­
de la cascada de cinina durante crisis de hinchazón, edema la­
puestos presores, los antagonistas de cinina hacen que au­
ríngeo y dolor abdominal en el angioedema hereditario (Proud y
mente en grado notable la presión arterial (Waeber y col. ,
Kaplan, 1 988). Las cininas también pueden intervenir en forma
importante en cuadros como gota, coagulación intravascular di­
1 990). Por tal motivo, con base e n los datos señalados y
seminada, enteropatías inflamatorias, artritis reumatoide y asma. otras observaciones, las cininas tal vez intervengan muy
Los compuestos mencionados también contribuyen a los cam­ poco en la regulación de la presión arterial en personas
bios en huesos que se advierten en estados inflamatorios cróni­ normales, mas tienen una evidente función reguladora de
cos. Las cininas estimulan la resorción ósea a través de los re- la vasodepresión en estados hipertensivos como los cau-
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638 SeccilÍn IV A utacoide.l': {armacoterapia de la inflamacirín

sados por exceso de mineralocorticoides e hipertensión de aparición lenta, inducida por cinina, del íleon aislado del
renovascular (Madeddu, 1 993; Pellacani y co1., 1 992). cobayo fue lo que originó el nombre de bradicinina. Las cininas
Las cininas también pueden incrementar las eferencias también tienen efectos neuroquímicos en SNC, además de su
simpáticas por medio de mecanismos de los sistemas ner­ capacidad de transgredir la barrera hematoencefálica, y así pe­
vioso central y periférico (Dominiak y co1., 1 992; Schwieler netrar a mayor profundidad en el sistema nervioso central (Ina­
mura y col., 1 994).
y Hjemdahl, 1 992; Madeddu, 1 993). Los datos anteriores
sugieren que las cininas pueden mediar la hipertensión, en Aplicaciones terapéuticas p o te nciales. Se han obteni­
algunas circunstancias, a través del sistema nervioso sim­ do datos preliminares de los posibles usos de cininas en
pático aunque es sólo un planteamiento teórico. cuadros como la infecundidad del varón por astenozoos­
Los inhibidores de ACE aumentan los valores de cini­ pennia y oligospennia (Schill y Miska, 1 992). También
nas en tej idos y plasma; algunos de los efectos beneficio­ las sustancias en cuestión quizá sean eficaces para incre­
sos de dichos compuestos en el corazón tal vez se encuen­ mentar la penetración de compuestos quimioterápicos an­
tren mediados por mayores concentraciones de cininas tineoplásicos, a través de la barrera hematoencefálica

r
cardiacas producidas en fonna 10ca1. Algunas investiga­

.a
(Inamura y co1., 1 994).
ciones (Linz y SchOlkens, 1 992) han demostrado que los
antagonistas de cinina antagonizan los beneficios del inhi­ I nh ib idores de calicreina y cininas .

om
Los inhibidores en­
bidor de Schwieler-ACE, como la disminución de la hi­ dógenos de las calicreínas (proteínas plasmáticas) inclu­
pertrofia ventricular izquierda y la isquemia cardiaca, pero yen aprotinina, el inhibidor de la esterasa C I y de la az­

s.c
no se ha definido la intervención exacta de las cininas en macroglobulina. Se han obtenido inhibidores péptidos de
esta área (Gavras, 1 992). la calicreína como posibles compuestos terapéuticos, pero
se han hecho progresos más finnes en la síntesis de anta­
ico
Riñones. Las cininas regulan el volumen y la composi­ gonistas selectivos de las cininas.
ción de la orina. Intensifican la corriente sanguínea por Los inhibidores de calicreína han sido estudiados para
riñones y también el transporte electrógeno de cloruro en usarlos como fánnacos terapéuticos en cuadros como pan­
ed

el conducto colector, al estimular receptores en la superfi­ creatitis aguda, sepsis, síndrome carcinoide y edema cere­
cie basolateral del túbulo rena1. Los antagonistas de cinina bra1. Hasta la fecha, casi todas las investigaciones se han
m

Bz disminuyen los efectos diuréticos de la furosemida y efectuado en modelos animales y hay escasa o nula expe­
también los inhibidores de ACE en la excreción de agua y riencia en seres humanos.
s

sodio (Madeddu, 1 993). En estados hipertensivos, las ci­


te

ninas quizá generen una acción más notable. Además, la A ntago nistas de receptores. Los primeros antagonistas
aldosterona aumenta las concentraciones tisulares de cali­ de cinina fueron agonistas parciales y su vida media fue
un

creína rena1. breve por degradación enzimática in vivo. En los comien­


Las reacciones anafilactoides en sujetos sometidos a zos del decenio de 1 990, se sintetizaron antagonistas de
ap

hemodiálisis en que se usan las membranas AN69 de cinina más selectivos y de acción más larga al sustituir
poliacrilonitrilo pueden ser consecuencia de la vasodilata­ aminoácidos sintéticos en posiciones clave (p. ej., HOE
ción y el angioedema inducidos por cinina (Schulman y 1 40, cuadro 25-2). También se han obtenido antagonistas
w.

col., 1 993; Verresen y co1., 1 994). En tales pacientes, las de B2 no péptidos como WIN 6433 8 (Sawutz y co1., 1 994).
cininas son generadas por el factor XII activado por las Para fines experimentales, es posible contar con antago­
ww

superficies de la membrana AN69 con carga negativa (fig. nistas con selectividad por el receptor de cinina B , .
25-3). Muchos de los sujetos qjIle presentaron la respuesta N o se dispone de los antagonistas de cinina para admi­
anafilactoide también recibían inhibidores de ACE, lo cual nistrar en seres humanos, y la posible utilidad de ellos aún
disminuyó su capacidad de degradar cininas. se investiga en cuadros tan diversos como dolor, asma y
otras enfennedades inflamatorias crónicas. Los efectos
Otros efectos. El útero de rata es especialmente sensible a con­ adversos en aparato cardiovascular y en otros sitios pue­
traerse por acción de las cininas, por intervención del receptor den limitar su utilidad. Los antagonistas antiguos, de exis­
B2• Las cininas también actúan en el sistema reproductor del tencia breve y no selectivos, han generado resultados am­
varón en funciones como esperrllatogénesis y para estimular la biguos cuando han sido estudiados in vivo.
movilidad de espermatozoides, quizá por medio del receptor B2 Los estudios iniciales con antagonistas de cinina no de­
en la membrana de dicha célula (Schill y Miska, 1 992). Las cini­
tectaron efecto significativo alguno en el tratamiento del
nas estimulan la dilatación de la arteria pulmonar fetal, el cierre
choque, pero investigaciones más nuevas han descrito al­
del conducto arterioso y la constricción de los vasos umbilica­
les, fenómenos que ocurren en la fase de ajuste de la circulación gún beneficio con ellos en el choque séptico (Otterbein y
fetal a la neonatal. col., 1 993) y en. la hipotensión inducida por pancreatitis
El sistema de calicreína-cinina actúa también en muy diver­ (Griesbacher y co1., 1 993). En estudios preliminares, tam­
sas funciones corporales y sirve como mediador en la formación bién se ha señalado algún beneficio en bronconstricción,
de edema y en la contracción del músculo liso. La contracción inflamación, síntomas inducidos por rinovirus y dolor.
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Capítulo 25 Histamina, bradieinina y sus antagonistas 639

Se estudian también las acciones de los antagonistas permitido la síntesis ininterrumpida de antagonistas con
naturales de los receptores de cininógeno. Los investiga­ selectividad por H2 para tratamiento de úlceras pépticas
dores han observado que el veneno de la víbora brasileña (cap. 37). La acumulación de mayores conocimientos so­
de fosetas Bothops atrox (fer-de-lance) potencia a las ci­ bre las acciones fisiológicas y fisiopatológicas de los sub­
ninas, y que algunos extractos vegetales usados en el tra­ tipos de receptores H3 en el sistema nervioso central y otros
tamiento tradicional de las mordeduras de dichos ofidios órganos permiten la obtención de sustancias terapéuticas
inhiben los efectos de las cininas (Trifilieff y col., 1 993). nuevas y más selectivas.
De los extractos vegetales mencionados, se han obtenido Los descubrimientos recientes de la identidad de los re­
esteroides glicólicos que poseen actividad como antago­ ceptores de cinina B 1 Y B2 Y la intervención de los metabo­
nistas de cinina. litos de cinina como mediadores potentes de la inflama­
ción y del dolor han constituido información importante, y
con ella está dada la oportunidad de obtener nuevos fár­
PERSPECTIVAS macos para tratar cuadros inflamatorios crónicos. Están

r
en fase de investigación nuevos compuestos peptídicos y

.a
Los mejores conocimientos de las relaciones de estructu­ no peptídicos, algunos de los cuales se muestran en el cua­

om
ra-función en los subtipos de receptores histamínicos han dro 25-2.

s.c
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Agradecimiento

Los autores agradecen al Dr. James C. Garrison, autor de este capítulo en la octava edición de Goodman and Gilman s The
Pharmacological Basis of Therapeutics, parte de cuyo texto se ha conservado en esta edición.

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