Defenestrare la idea sin cabeza, la idea de convertirme en la razón porque suspiras, no

quiero sentarme a esperar el día que no llegará, la alegría que no me poseerá, la

increíble sensación de completitud que nunca me saciara el alma, que hoy se encuentra
rogando por tu atención.

No, no seré mas victima de los sueños en que apareces, apartare la razón de mi corazón,
para que no se percate cuando el pulso se vuelva impertinente para mi objetivo, no te
buscare entre mis viajes en realidades distantes, no te incluiré en mis poemas, no será
tuyo ni un solo verso y para ningún otro canto serás inspiración.

Quiero que desaparezcas de mi conciente y de mi memoria, verte y dejar de sentir que

mi estomago revolotea y que mi alma exhorta al cuerpo para acercarse incluso solo para
sentir tu calor que me hace recordar tu abrazo, recuerdo que me perfora con un vació
que toma cuerpo en mis adentros, solo para hacer que el músculo de los sentimientos
caiga en batalla y se deje llevar por el torrente de ilusiones que se internan en la fantasía
de vernos juntos, de sentirnos juntos, inseparables, indestructibles, insoportables para el
que repudia el amor e inaccesibles para los que se conforman con el amor que sienten
los corderos, amor tan simple que no se comprende por deseos de no ver cuan simple es.

Quiero que el aire no se torne denso con tu presencia, que la vida pase y no te admire,
que mis deseos en ti no se fijen, que mis sentimientos no huyan de mi cuerpo hacia el
tuyo, quiero dejar el hechizo que me gobierna y me obliga a anhelarte guardado en un
cajón, olvidarme de él, para que el tiempo lo corroa y se alimente, y se satisfaga de las
sensaciones reprimidas mi locura creciente para no recordarte ni cuando me falte la
razón.

Quiero que me invada la desilusión, pero, no quiero serte indiferente porque no toleraría
volver al estado del que me sacaste, al letargo infinito del que me rescataste, solo para
incomodarme, no quiero seguir de línea recta sin altos ni bajos que me gobernaba, no
quiero navegar en el lago sin olas de mis sentimientos. Quiero ya no pensarte, quiero
arrebatarte la propiedad de mis anhelos, pero quiero que estés aquí presente como dolor
o decepcion, pero, presente, quiero que no me dejes de dormir, que me quites los
momentos de distracción, pero quiero que no sea por una ilusion.