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INSTITUTO SUPERIOR DE ESTUDIOS ECLESIÁSTICOS.

Escuela de Teología

Materia: Cristología Prof.: Pbro. Julián Arturo López Amozurrutia


Presenta: Rojas Rodríguez Javier. Seminario Conciliar de México. 2º Teología
Caso pastoral.
Tlalpan, DF. a 21 de Noviembre de 2008.

En una conversación con la hermana Liz, subdirectora de la Escuela Sedes Sapientiae, me


mencionó que el otro día las clases del curso sabatino que se imparten en la sede de Acción
Católica, tuvieron que ser trasladadas a su casa que se encuentra en la colonia Roma.

La jornada transcurrió normalmente, pero comenta que olvido quitar los anuncios que
indicaban la ubicación de la casa, por lo que durante la tarde del mismo sábado, varias
personas tocaron para preguntar a cerca de la Escuela, entre ellos un hombre joven, el cual
inmediatamente revelo que era budista y que acababa de regresar de una experiencia en un
monasterio en la India, pero que por sueños había visto la casa y tenía la curiosidad de
comprobar su visión nocturna, de ese modo preguntó por la Escuela y se mostró interesado
en inscribirse de inmediato, pese a que el curso estaba ya avanzado, pues afirmaba que su
sueño no había sido casualidad y que algo le quería decir.

La hermana me dice que durante la conversación, se refirió a Cristo como hijo de Dios,
maestro espiritual, y que cuando observó la cruz que ella trae colgando, le preguntó si ella
consideraba que el dolor y sufrimiento habrían estado presentes en la pasión del Maestro.
De hecho, la respuesta que le dio a la hermana fue;

Jesús el gran Maestro, nos ha enseñado el camino de perfección, toda su vida es testimonio
de ello y de cómo intentó enseñar esto a sus discípulos. De hecho, llego a tal grado que en
el momento de la pasión, el dolor y el sufrimiento no eran parte ya de su ser, sino que a lo
largo de su vida se había preparada con oración, abstinencia y ayuno que en ese transe pudo
alcanzar su fusión con el Todo. Él nos ha enseñado como hombre, que es posible alcanzar
ese fin último para nuestra liberación interior, y es desde aquí que yo interpreto la
resurrección.

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