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Curso Introducción a la Neumática

El Aire comprimido

Se denomina aire a la mezcla de gases que constituye la atmósfera terrestre. El aire es


esencial para la vida en el planeta, es particularmente delicado y está compuesto en
proporciones ligeramente variables por sustancias tales como el nitrógeno (78%), oxígeno
(21%), vapor de agua (variable entre 0-7%), ozono, dióxido de carbono, hidrógeno y
algunos gases nobles como el criptón o el argón, es decir, 1% de otras sustancias.

El aire es compresible. Esto significa que, si se le


aplica la presión necesaria, se puede aumentar su
densidad, disminuyendo el volumen ocupado.

De esta manera, se puede almacenar energía, para


ser utilizada luego. Es lo mismo que pasa cuando
inflamos un globo: al soplar, comprimimos el aire en
el espacio reducido del interior del mismo. Si lo
soltamos sin cerrar, la energía acumulada por el aire Ilustración 1: Al liberarse el aire, la
lo hace revolotear rápidamente por la habitación. Se energía almacenada produce movimiento
produce una transformación de la energía
almacenada en trabajo al mover el globo.

Generación del aire comprimido

Para generar aire comprimido en los sistemas neumáticos se usa un compresor.

Un compresor es una máquina, accionada por


un motor eléctrico o de combustión interna, que
toma aire de la atmósfera, lo comprime hasta
una presión de entre 6 y 10 bar y lo almacena en
un depósito de aire comprimido. Cuando es
necesario, el aire así comprimido pasa del
depósito a la línea de distribución.

Existe una gran variedad de compresores,


siendo los mas comunes los del tipo de pistón,
en los que un mecanismo tipo biela-manivela
toma y comprime el aire en dos tiempos. Ilustración 2: Típico compresor a pistón.
Se aprecia el motor eléctrico arriba y el
depósito de aire debajo

IPEM 61 – Gral Manuel Savio – Salsipuedes Depto. Electromecánica – Prof. Ernesto Tolocka
Curso Introducción a la Neumática

Acondicionamiento del aire comprimido

La durabilidad y seguridad de funcionamiento de una Instalación neumática dependen en


buena medida del acondicionamiento del aire comprimido. Las impurezas en forma de
partículas de suciedad u óxido, residuos de aceite lubricante y humedad dan origen
muchas veces a averías en las instalaciones neumáticas y a la destrucción de los
elementos neumáticos.
El aire comprimido debe ser filtrado, lubricado, y a veces deshumificado antes de su
empleo en un sistema neumático.

Las conexiones y desconexiones del compresor y el consumo de aire comprimido por


parte del sistema generan oscilaciones en la presión, que impiden un funcionamiento
estable de la instalación, de los actuadores, etc.

Para evitar estos inconvenientes, se utilizan las denominadas “unidades de


mantenimiento”, que ofrecen una combinación de filtro (para las partículas sólidas y la
humedad), regulador de presión y lubricador.

Ilustración 3: Diagrama esquemático de una unidad de mantenimiento

Ilustración 4: Unidad de mantenimiento

IPEM 61 – Gral Manuel Savio – Salsipuedes Depto. Electromecánica – Prof. Ernesto Tolocka

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