Sta.Dra. Ana Vica,Sr.

Coordinador de la Extensin Alica El Caiman, Personal Docente

Y de Servicio, Alumnos , Pblico en General
El 17 de agosto se cumple un aniversario ms del paso a la inmortalidad del General
Jos Francisco de San Martn, un hroe admirado por la notable herencia que nos dej:
patriotismo, humildad, generosidad, tica y honradez, valores que lo hacen un hombre
admirado por todas las generaciones. El Estuvo siempre al servicio de la libertad
americana, su vida ejemplar lo ha transformado en smbolo de nuestra Nacin y Padre
de la Patria..
Es por ello

que es momento para el pensamiento reflexivo y la meditacin

comprometida, porque estamos recordando a un verdadero hroe y un gran patriota,

sabiendo adems que ser hroe no se logra solo con una frrea voluntad sino con
respeto y valoracin por el otro, con desprendimiento de lo material y por sobre todo
con una conviccin y esperanza alentada por el Ser Supremo.
Todos conocemos sin duda, los hitos que en nuestra historia Latinoamericana dej su
paso, que necesit luchar incansablemente contra el enemigo de aquellos tiempos de
guerra.

Que Utiliz toda su inteligencia

para elaborar un plan que les vali la

emancipacin de tres naciones. Que Super innumerables obstculos. Que Obtuvo

resultados fecundos con la menor suma de elementos posibles y sin ningn desperdicio
de fuerzas. Que Nos leg mximas y valores que trascendieron hasta nuestros das. Y
que Fue esposo, pap y abuelo.
Hoy con una realidad distinta, les propongo tomar el ejemplo de Jos de San Martn
para engrandecer cada uno de los espacios en donde transcurre nuestra vida.
Nuestras armas sern el dilogo y la paciencia.
Nuestra cordillera sern los obstculos que debemos vencer con perseverancia.
Nuestro plan ser ser felices con cada uno de los logros que consigamos.
Nuestra misin ser trabajar para superarnos da tras da.
Nuestro enemigo sern el egosmo, la apata y la soberbia.
Nuestras batallas sern los desafos que nos propongamos realizar y cumplir.
Nuestra Patria necesita de cada uno de nosotros como necesit al General Jos de San
Martn, a sus granaderos y a sus soldados. Por todo Esto los invito a poner nuestro
granito de arena as haremos realidad el sueo de San Martn: la construccin de una
Patria grande, sin divisiones libre y soberana.