1. El Otro es alteridad radical, es quien sanciona el mensaje. Es una
alteridad no personal. Es el lugar donde el decir es ledo y sancionado como dicho. Lacan dir que es un sitio para destacar que no es un lugar espacial; de aqu se desprende que es el tesoro del significante y las reglas de su empleo. Es que el Otro no es el interlocutor sino el lugar evocado en el recurso a la palabra, cuando decimos palabra aludimos al habla en el sentido saussureano. El Otro es el compaero del lenguaje, ms precisamente el hecho de que haya lenguaje implica que el habla este dirigida a un otro. Para que este otro pueda sancionar una palabra como tal es necesaria la funcin del Otro como tesoro del significante. En verdad no hay dependencia que no sea dependencia del lenguaje. La funcin de la comunicacin es un efecto del encuentro con el Otro. Es obvio que se depende de alguien, pero de alguien que diga que el sujeto dice: funcin que no podra cumplir si no estuviera soportado por el lenguaje. 2. El Otro de la primera dependencia: es la madre, que es quien primordialmente encarna al Otro. Es en la madre como funcin donde el sujeto se encuentra con el significante -de ah que se hable de lengua materna-, no con el cdigo de la madre sino con el lugar del Otro que la madre encarna. Esto demuestra que el lenguaje siempre viene del Otro. El sujeto ms que con la madre se encuentra con el significante en la madre. En tanto ella encarna al Otro el sujeto puede tener la ilusin de una relacin intersubjetiva, cuando en verdad se encuentra con la radical alteridad del significante. 3. La funcin del Otro determina la posicin del sujeto; con esto queremos decir, por ejemplo, su posicin dentro de la cadena de las generaciones, lo que evoca la funcin paterna con todo lo de orden e interdiccin que supone. No habra posibilidad de ubicarse generacionalmente si no fuese en una articulacin significante; sera impensable ser hijo de un padre fuera del campo del lenguaje. Faltara agregar que el Otro es tambin el Otro sexo, ms especficamente la mujer (en rigor deberamos tachar el la), es el Otro sexo tanto para el hombre como para una mujer.
4. El Otro es el tesoro del significante, ahora decimos que es lo
inconsciente, y agreguemos, las leyes del inconsciente son las leyes del significante o sea su articulacin. Insistamos: el significante es consustancial a la articulacin, no es otra cosa que la articulacin.