Juan Cano Forrat
INTRODUCCION ALA
HISTORIA DEL URBANISMO
ENO
UNIVERSIDAD
De VALENCIA LIMUSA
ereCAPITULO 1. INTRODUCCION
El diccionario de la Real Academia de la Lengua Espajiola define la palabra
ciudad como: “Espacio geografico, cuya poblacién, general, numerosa, se dedica
en su mayor parte a actividades no agricolas’. Esta definicién por oposicién a lo
rural, cuanto menos es muy imprecisa. La ciudad es un hecho fisico que se debe
estudiar de forma objetiva para leerla como el texto que nos permite comprender el
contexto, La ciudad es la mas comprehensiva de las obras del hombre. Como dijo
Walt Whitman “lo retine todo y nada que se refiera al hombre le es ajeno”. El
devenir de la historia de la humanidad ha acontecido, por lo general, en el entorno
de una ciudad. La literatura ha tenido casi siempre una ciudad como telon de
fondo. Las mejores descripciones de Paris se las debemos a Balzac, y las de
Madrid a Galdés.
Para Atistételes, ciudadano de una ciudad es aquel que tiene la facultad de
intervenir en las funciones deliberativas o judiciales de la misma, y ciudad en
general, el ntimero total de estos ciudadanos que bastan para la suficiencia de la
vida. Esta definicion corresponde a un concepto politico de ciudad, en el que el
propio estado es la ciudad, y la ciudad es el estado.
Para Ortega y Gasset, ‘la ciudad es un ensayo de secesion que hace el hombre
para vivir fuera y frente al cosmos, tomando de él porciones selectas y acotadas”
La diferencia radical entre ciudad y naturaleza es la base de su definicién, consi-
derando a la ciudad como una creacién abstracta y artificial del hombre:
La ciudad se ha ido formando y conformando paulatinamente al correr de la
historia, “Sucede un acontecimiento politico y el rostro de una ciudad tomara nue-
vas arrugas’ (Spengler) o bien: los gestos de una ciudad representan la historia
psiquica de una cultura. Una vez que la ciudad se ha implantado en el terreno
propicio, implantacién o fundacién que en la antiguedad tenia un caracter liturgico y
equivalia a transformar el nuevo solar en Tierra patrum (patria), la naturaleza
humana va trazando las lineas de la nueva estructura, en un proceso vital en el que
se halla implicado un circulo de costumbres, tradiciones, sentimientos, actitudes y
caracteristicas de una determinada colectividad. Pero es mas: estas estructuras
que han ido conformandose a través de este proceso, acaban por constituir ellas
una segunda naturaleza; es decir, estas estructuras reobran a su vez sobre los
habitantes, que se encuentran con una realidad exterior con la que ya tendran que
contar. Walter Benjamin, en 1935 escribe: “Habitar significa dejar huellas’. Esta
realidad fisica que produce cualquier modificacién, a su vez contribuye a reproducir
modificaciones posteriores siendo mediadora de éstas.
Al igual que Ortega y Gasset define al hombre como una realidad vital, trasla-
dado este concepto al area mas vasta de lo colectivo en la que se mueve la ciudad,
definiriamos ésta como realidad histdrica, es decir, esa Ultima instancia no es ni
puede ser otra cosa que la historia. La ciudad, en Ultima instancia, es un ser
histérico.
Segiin Carlo Aymonino, hasta el momento actual, se ha identificado histrica-
mente mediante el término “ciudad” un proceso continuo en el desarrollo de los
asentamientos urbanos socialmente organizados que parte, aproximadamente, de
determinadas experiencias de la sociedad griega y se prolonga hasta la expansion
mundial de las formas sociales anglosajonasINTRODUGGION A LA HISTORIA DEL URBANISMO -
Pero la ciudad ~segin el sociélogo americano Robert E. Park- es algo mas que
una serie de calles, edificios, plazas..... es mas un estado de la mente (a state of
mind). Es un ente construido desde el pensamiento de la colectividad.
En un aspecto estético, Aldo Rossi concibe la ciudad como una arquitectura, en
sentido positivo, como una creacién inseparable de la vida civil y de la sociedad en
la que se manifiesta; ella es, por su naturaleza, colectiva.
Asi como los primeros hombres se construyeron su habitat para morar en él y
en estas construcciones tendian a conseguir un ambiente mas favorable y comodo
para su vida, en ese microcosmos artificial, igualmente construian segtin una
intencionalidad estética. Inciaron la arquitectura al mismo tiempo que el primer trazo
de la ciudad; la arquitectura es, segtin Rossi, connatural a la formacién de la
civilizacién y un hecho permanente, universal y necesario.
Pero, por otra parte, la ciudad siempre ha sido, y sera, por la indole de su
esencia, artisticamente fragmentaria, tumultuosa e inacabada. No encontramos en
ellas esa forma definitiva y perfecta que ansia el sentimiento estético. Por eso toda
ciudad es, estéticamente hablando, una frustracién. Como manifestacion artistica,
esta insatisfaccion por la ciudad imperfecta se produce porque este fenomeno
artistico se halla supeditado a la pulsaci6n histérica. El constante cambio de ésta,
bien sea por evolucién o salto, no permite que se produzca el equilibrio requerido
en toda creacién estética. En sintesis, podia decirse que la ciudad participa del
espiritu artistico, sin llegar a ser, sin embargo, una obra de arte.
La ciudad no siempre ha existido, sino que ha comenzado en un determinado
momento de la evolucién social del hombre, cuando ha aparecido la necesidad de
agruparse por motivo especifico, y puede transformarse en cualquier momento
debido a una necesidad histérica, no natural, dependiendo de la misma evolucién
social que provocé la génesis de éstas.
La Unica manera de explicar el significado de las ciudades es describirlas
cronolégicamente, justificandolas en funcién de sus circunstancias fisicas, sociales,
culturales, religiosas, a las que necesariamente estan asociadas, en una relacién de
dependencia e interaccién
La historia del arte penetra con su mirada mas profundamente que la historia
general, pues las fuentes de aquellas vienen dadas por la cosa misma. Las
construcciones, el habitat urbano que atin subsiste, contribuyen al acontecer
artistico. Las vistas de antiguas ciudades amplian nuestros conocimientos en
cuanto que nos permiten ver con los ojos situaciones pretéritas. La tradicin grafica
informa con mayor precisién acerca de la génesis histrica de las construcciones,
acerca de su rango estético, ideolégico y semantico.
De entre los objetos tematicos de la historia del arte, las ciudades y grupos
monumentales individualizados ocupan un lugar destacado en cuanto que en ellos
se estratifican fases 0 momentos estilisticos. Sdlo las ciudades ideales se deberian
construir siguiendo un estilo unico. Las ciudades vivas siempre se han renovado.
Cada una de las épocas de su historia se convirtio en arquitectura. Se enriquece, se
complementa, se modifica. Es como un construir y un reconstruir constantes. Todo
6CAPITULO 1. INTRODUCCION
cuanto podemos llegar a conocer acerca de estos procesos a través de las fuentes
subordinadas tiene que ser confirmado por la contemplacién directa como transmi-
sora de una realidad mas exacta.
A lo largo del siglo XX, la ciudad occidental ha sufrido una profunda transfor-
macién, acelerada en los ultimos decenios de crecimiento econdmico y desarrollo
tecnolégico.
Estamos asistiendo, como escribe Ramon Lépez de Lucio, a la desaparicion de
la ciudad clasica: de sus paisajes, formas de vida, valores reconocibles y también a
sus inconvenientes. La ciudad densa, compacta y continua es todavia nuestra refe-
rencia cultural basica, debido a la fuerza y la dimension que tienen los cascos
histéricos construidos hasta la mitad del siglo XX.