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SIN AJO Y MUCHA CEBOLLA

Luis Snchez Arroyo

Un joven risueo caminaba sin descansar, el ruido de los automviles le era indiferente,
se desplazaba sosegado y meditabundo, sus ojos daban la impresin de que su cuerpo
caminaba guiado por puro instinto mientras su cerebro se trasladaba por cualquier otro
lugar, nada ni nadie interrumpa su viaje imaginario, repentinamente comenz a correr y
a unos cincuenta metros se detuvo, alzo la mirada, levanto su mano y pareca que jugaba
con las nubes, de pronto se qued inmvil, cerr los ojos y comenz a dar vueltas y
vueltas, no encontraba lo que tanto buscaba y decidi seguir caminando. Un tipejo, un
poeta, un escribidor de imgenes puras de una locura incierta, ficcin, realidad, algo
pasaba por su mente sin saber qu es lo que en si buscaba, sin extraeza alguna
murmuraba y entre tanto balbuceo empez En cualquier lugar del mundo encontrare
una seal y aquella luz me invadir a golpes, por consguete sabr que el amor ha
llegado hasta lo ms minsculo de mi ser aquel muchacho volvi a sonrer y con el
afn de llegar temprano a la entrevista quedo fuera del tiempo lmite, as que tuvo que
regresar a la casa de su abuelo, Don Ismael, un anciano criollo y como tal deba llevar
en su sangre un poco de buen pisco y otro poquito de algo ms.

Ahora que paso carajo? Ya cambia de cara huevndijo Don Ismael al ver la
cara de nico nieto.
Papo intente llegar temprano, pero el trfico es un asco.
A m no me vengas con huevadas, pasa de una vez y cierra la puerta carajo.
Papo maana buscare otro trabajo no te molestes adems te traje unos chocolates
qu

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