Es sabido que las preocupaciones ambien-
tales de los paises desarrollados son, en
muchas cosas, distintas a las de los paises
en desarrollo. Mientras los primeros con-
centran su preocupacién sobre cémo con-
trolar o reducir los efectos que causa, y si-
gue causando, el desarrollo industrial, los
segundos buscan, desesperadamente, cSmo
escapar del efrculo vicioso formado por la
pobreza y el deteriaro del medio. El agot
mento de la capa de ozono, el calentamien-
to global, la luvia écida, la disminucién del
‘bosque tropical, la desaparicién de especies
en extineiGn, la desertificacién, la contami-
nacién de los océanos, el déficit de sanea-
‘miento, la ausencia de tratamiento de de-
sechos s6lidos y peligrosos, y otros proble-
mas de contaminacién, especialmente en
pafses en desarrollo, completan el panora-
ma artbienta) global vigente en el planeta.
EI debilitamiento de la capa de ozono, por
ejemplo, es causado, especialmente, por los
clorofluorocarbonos (CFO), que rompen 1a
estratosfera con radiacién ultravioleta, y
sueltan cloro, el cual reacciona agotando el
ozono estratosférico, El peligro es més alar-
mante cuando nos enteramos que una mo-
écula de cloro puede romper diez mil molé-
culas de ozono, y que cada cloroffuorocarbe-
no se disocia en 150 afios; sin embargo, las
industrias y los autom6viles, principalmen-
te, crean miles de millones de ellos end
dia, Se calcula que cada ‘i
uno por ciento de los CFC agota lé capa de
ozono en otro 2 por tiento, lo que causa un
incremento del 5 por ciento leledncer a la
piel, especialmente en la gente de raza
blasica, Estudios indican efectos adversos
en los ecosistemas y la ay caus
dos por las fluctuaciones/climéticas ori
nadas por los CFC. El dgotamiento de la
capa de ozono entre el 8 y/el 11 por ciento
podria reducir las de arroz de tres
cuartos a dos tercios, y un incremento del
20 por ciento de Ja radiacién ultravioleta
podrfa matar al 5 por ciento de los recursos
‘nidrobiolégicos del mundo, sin mencionar
el efecto sobre la Antértida.
De otro lado, el ealentamiento global, cono-
cido como el efecto invernadero, causado
especialmente por gases como el metano y
el anhidrido carbénico, podrfa expandir el
volumen de agua de los océanos, aumen-
tando el nivel del mar en 100 cm més de)
nivel actual, lo cual seria desastroso.
El ejemplo de Is luvia écida es también
dramético. Las emisiones de éxido de azu-
fre (SOx) y éxido de nitrégeno (NOx) cau-
san alteraciones en la atmésfera, forman-
do dcido sulfirico y Acido nitrico, sustan-
cias que después de ser absorbidas por la
Iuvia y la nieve, czen a la Tierra como
to del *
. + Ambiente y desarrollo
“luvia écida”, La presencia de estos mine-
rales peligrosos en el fondo de los lagos,
tiene efectos muy negativos, como en Sue-
cia, donde alrededor de 15 mil lagos ban
legado a ser dcidos, y los peces han muer-
to en alrededor de 4 iil dé ellos.
Hay de 1.5 a 1.6 millones de especies ani-
males cientificamente identificadas en la
actualidad, mas se estima que existen alre-
dedor de 10 millones de ellas. Al ritmo de
desaparicién acbual de las especies salvajes
yen extincién, se calcula que el 16 por cien-
to de ellas desaparecaré para el afio 2000,
debido a la destruccién de su habitat, la so-
brecaza o el contrabando, en el que se han
visto comprometides, muchas veces, funcio-
narios gubernamentales. Una especie desa-
parece cada 13 minutos, aproximadamen-
te, mientras el balance ecolégico se destru-
‘yey las pérdidas son irrecuperables.
El caso de Ia desertificacién también es
alarmante. Las éreas desérticas se incre-
‘smentan a una tasa de 6 millones de hecté-
reas anualmente, lo cual causa una crisis
alimenticia en todo el mundo, especialmen-
te en paises en vias de desarrollo, en los
que, como lo sefiala el urbanista Viedimir
Arana, el crecimiento explosivo de las ciu-
ades, la poblacién que ain no cuenta con
servicio de abastecimiento de agus ¥ sa-
todo la pobreza, “el problema de la Tierra’,
es més que grave. El alivio de la pobreza es
més que un imperativo moral, un requisito
previo, indispensable, para lograr el mejo-
ramiento ambiental.
Los agricultores, Avidos de tierras, recu-
ren al cultivo de zonas no adecuadas para
este propésito come tierras semiéridas en
Jas que la erosién del suelo es répida, 0 ta-
Jan bosques tropicales en los que los rendi-
mientos de los cultivos en los campos des-
brozados con frecuencia disminuyen pro-
nunciadamente tras s6lo unos poc0s afios.
Las personas pobres que viven hacinadas
‘en asentamientos ilegales, soportan, con
frecuencia, servicios inadecuados de abas-
tecimiento de agua potable y saneamiento,
asf como inundaciones y desprendimiento
de tierras, accidentes y emisiones indus-
triales, y contaminacién del aire relaciona-
da con el transporte. Asimismo, estén a
menudo expuestos a los mayores riesgos
que el deterioro dal medio ambiente repre-
senta para la salud, y suelen ser los més
vulnerables a causa de su pobreza. Las fa-
milias de escasos recursos carecen, fre-
‘cuentemente, de Jas herramientas necesa-
Tias para evitar el deterioro de su entorno,
y al borde de la subsistencia, estén ocupe-
das en la lucha diaria por sobrevivir.