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FLACSO Documento de Trabajo
CHILE FLACSO ~ Programa Chile
pibilictece Serie Educacién y Cultura N@ 30
Santiago, Noviembre de 1992.
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BIBLIOTECA
| FLAGSO
SANTIAGO
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H SERIE
: Educacién y Cultura 509
LA MIRADA SOCIOLOGICA ¥ LA SOCIE-
DAD CHILENA. Discurso Inaugura-
cién IV Congreso Chileno de
Sociologia.
| Manuel Antonio GarreténEsta serie de Documentos es editada por el Programa de la Facul-|
tad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO),
Chile. Las opiniones que en los documentos se
como los andlisis e interpretaciones que en ellos
son de la exclusividad de sus autores y no refleja
Jos puntos de vista de la Facultad.
en Santiago de|
presentan, asi
se contienen,
necesariamente|RESUMEN
Se trata del discurso inaugural del IV Congreso Chileno de
Sociologia, el 27 Agosto 1992, en que se da una visién del estado
de la reflexidn sociolégica hoy y se plantean algunas ideas sobre
el tema central del Congreso: Modernizacién, Democtacia y
Descentralizacién en 1a sociedad chilena.Inauguramos hoy el IV Congeso Chileno de Sociologia, el primero
que hacemos bajo un régimen democrdético yen una situacién de
plena libertad académica. La presencia de tres Rectores de
Universidades y un Ministro de Estado presidiendo este acto, la
presencia de otros dog Ministros de Estado en esta sala, y el
hecho que lo hagamos en un recinto universitario, no habrian sido
posible de no mediar esta realidad.
Nos juntamos en estos congresos a reflexionar sobre nostros
mismos y sobre nuestro quehacer. Pero, sobre todo, nos juntamos,
desde 1a perspectiva, el officio y la disciplina gue manejamos, a
pensar a nuestra sociedad, su pasado, sus estructuras, su gente,
sus posibilidades.
La sociologia y las Ciencias Sociales representan un punto de
vista sobre el comportamiento de los seres humanos, una mirada,
una perspectiva. No tienen e1 monopolio ni de este objeto ni
mucho menos de 1a verdad sobre £1. Pero se trata de una mirada o
una manera de ver indispensable e insustitufble respecto de la
conducta individual y colectiva, respecto de las organizaciones,
las instituciones, las estructuras y movimientos sociales, y los
procesos por los cuales 1s categor{as sociales y la gente se
convierten en actor y establecen relaciones que buscan ser
conservadas 0 transformadas. No hay conocimiento ni accién sobre
nosotros mismos ni sobre 1a sociedad en general sin el concurso
de esta mirada y perspectiva. Las Ciencias Sociales no son, unasimple opinién 0 una mirada arbitraria. Por ello, pa:
discutizla 0 contradecirla hay que partir del hecho que no es| ui
mirada cualquiera, aunque sea particular y no excluyente. £11
implica acumulacién de conocimientos a través de genéraciones
formas rigurosas y sisteméticas de obtener esos conocimientos
Constituyen disciplinas de trabajo y sistemas acumulativos
comprensién que deben ser juzgados con estos mismos criteriog.
gBn qué consisten esa mirada y esa perspectiva? En indagar sobri
el sentido no aparente de la accién social, en vincular 14
estructuras e instituciones con la historia y los actores ale We
hacen, sin caer presa del discurso de éstos ni convertirse
ee ee eee
interacciones en todos los niveles, pero en penetrar en 14
dindmicas organizacionales en que éstas se mueven y preguntarse
por las instituciones y reglas del juego que se crean y recredi
ib
para formar el marco de tales acciones organizadas. Pero sobi
todo consiste en explicar cémo tales accfones, organizaciones |
instituciones forman parte de 1a busqueda colectiva, a vecdl
cooperativa y a veces ‘conflictiva por transformar, conservar,
mejor, por reproducir y, sobre todo, produciz la propia race
y la sociedad. Indagar y revelar el sentido de la acdié:
preguntarse por interacciones, organizaciones, instituciones |
problematicas histéricas de 1a sociedad, sin caer en ningil
reduccionismo, obliga” a la comunidad de hombres y mujeres que
dedican a ello a un doble movimiento. Por un lado} deacercamiento y solidsridad con los actores sociales. Por otro, de
distancia y soledad respecto de ellos para no convertirse en sus
inventores 0 repetidores. Se trata de ayudar a todos a
comprenderse y comprender.
Bs cierto que cuando se busca comprender una historia, un grupo,
una accién, de los que no se esté totalmente separado como se lo
esté de las cosas o de las leyes naturales, se paga un precio. En
nuestro pais hemos hecho la experiencia de un doble precio. Uno,
el del ideologismo que confunde la tarea de comprender con la
identificacién con una determinada opcién de — accion,
transformandose en mero portavoz de ella. E1 otro precio al
buscar explicer y comprender, fue ser convertido en enemigo por
aguél que no quiere ser explicado 0 comprendido, sino obedecido y
servido. Las ciencias sociales en Chile en su corta historia
vivieron ambas experiencias. Alguna vez convirtieron sus bases
Institucionales en trincheras, otras veces vieron destrufdas
estas bases institucionales por la fuerza y la represién.
Es de esas experiencias que hemos hecho un aprendizaje colectivo
y hoy buscamos devolverle a la sociedad su capacidad de auto
comprensién, reconocimiento de sv diversidad, y de imaginacién de
su futuro. Hay que reconocer sf que estamos muy lejos de haber
alcanzado estas metas y que los esfuerzos institucionales por
reconstruir las ¢iencias- sociales en Chile son todavia
inguficientes, especialmente en las universidades. No hemoslogrado ain que el pats debata qué tipo de politica destinada
desarrollo cient{fico y a la formacién.de personas dedicadas|a.
cultivo quiere tener. Ello es una tarea pendiente.
Pero no estamos aqui para llorar sobre leches derramadas ni pati
hacer reclamos o peticiones. Mas bien estamos para celebrer
posibilidad de renacimiento del trabajo intelectual y
reflexidén sobre nosostros mismos. No otra cosa es wun Congres
como éste que reine a toda 1a soctologia y a gran parte de las
clencias sociales en nuestro pais. Que ha contado con
patrocinio de todas las instituciones universitarias
universitarias que se dedican a ello, entre ellas las| sels.
escuelas 0 departamentos del pais donde 450 estudiantes preparsh
Ja licenciatura 0 1a maestria en sociologia. Que ha cohta
también por primera vez con el apoyo del Bstado a través de 1
organismos mas cercanos a esta actividad. Congreso, donde st hat
Presentado 63 ponencias agrupadas en 18 sesiones y tres sesione|
plenarias destinadas'a/la discusién del tema central y-gue,
primera vez tendré una expresién regional al realizarse a
término’ y como parte de é1,*una Jornada Regional en Temuco.
ede qué y cémo nos hablan estes ponencias?’ Es reconfortan:
comprobar que estén presentos todos los temas gue son materia d
debate y preocupacién en nuestro pais: la transformacion agrarial
Jos proyectos educacionales, los problemas de identidad, 1
modernizacion productiva, los problemas de género, 1a diversida|
socio-cultural y la cuestién étnica, la pobreza y las formas de
vida de los sectores populares, las nuevas formas laborales, 1a
descentralizacién y participacién, los tipos de exclusion y
violencia, la accién politica y 1a opinién publica, las
expresiones y conflictos religiosos, 10s cambios en el Estado y
las politicas piblicas, 1a evolucién de 1a sociologia misma. Vale
Ja pena resaltar que el 578 de las ponencias corresponden ya sea
a la presentacién de una investigacién empirica, (43%) ya a una
reflexion directa sobre un conjunto de ellas (14%); el 18 % al
desarrollo de marcos analfiticos e interpretativos, el 19% a
trabajos que pueden ser clasificados de ensayos sociolégicos y
un 6% a reflexiones sobre la situacién de la sociologia en Chile.
Cabe insistir en 1a importencia del tratamiento de temas
especificos a través de investigaciones rigurosas que aportan
datos y conocimientos, porque el discurso de las ciencias
sociales muchas veces adolecié en el pasado de generalizaciones
sobre grandes tematicas sin dar cuenta de 1a vida real de la
gente y 1a sociedad, 1o que hacia que podiamos aprender de
nuestro continente més por su literatura, su novela y su poesia,
que por su ciencias sociales.
Pero tampoco se agota el trabajo de estas disciplinas y dela
sociologia en particular en una vastedad de datos y andlisis que
describen bien miltiples campos separados. Si no se consigue a
través de diversos esfuerzos y aportes contribuir a 1a creaciénde imagenes globales de la sociedad, de lo que éstas es y pues
le
ser, se tiende a caer en Ia banalizacién 0 en 1a complicidad con
el inmediatismo. Tal inmediatismo rehdye cualquier debate oo He
las grandes tendencias, _—conflictos — y _—_contradiccibne:
pretendiendo que ellas ya han sido superadas definitivamente por
un consenso generalizado o por el fin de 1a historia.
Por ello hemos querido por primera vez enmarcar el Congreso
una tematica general, que sin coartar la posibilidad de abordax
otros campos, permita acercarse al diagnéstico, andlisis
Proyeccién de tres grandes procesos por los gue atraviesa nuest
sociedad y que definirén su perfil y gran parte de lajvi
colectiva en el futuro. Bs probable que la compleja interrelaci
entre democracia, descentralizacién y modernizacién segtn
sentido que demos a estos términos defina. gran parte de
conflictualidad y la problem4tica de la sociedad chilena eh 1
proximas décadas y que las opciones que se le ofrezcan en todo}
os niveles giren en torno a estos tres temas.
El tema de 1a democracia implica hoy en dia al menos|tr:
aspectos. Por un lado, més allé de 1a discusion sobre si termipp
?
0 no la transicién, hay que reconocer que la tarea propia de u
transicién cual es 1a de producir un régimen politico democréti,
completo no ha sido concluida. Estamos en democracia, sin dudq
pero coexistiendo con institucfones y problemas éticos
simbélicos heredados del régimen autoritario, Cabe entonc:
i
lypreguntarse por los efectos de mediano y largo plazo en los
Gistintos campos..de la sociedad’ \que. tiene “la ' presencia 'y
mantencién de estos enclaves autoritarios. Por otro lado, mas
allé del cambio de régimen, incluso aunque éste se completara,
perfeccionara 0 profundizara en todas sus dimensiones, hay que
recordar que el ethos democrético latinoamericano y chileno
estuvo siempre ligado a la visién igualitaria e integrativa de la
sociedad, a su cohesién como nacién, a 1a superacién, por tanto
de sus exclusiones. Que alrededor del 40% de 1a poblacién hoy
viva en la pobreza o esté marginada cuestiona la realizacién de
este ethos y convierte a la democratizacién social en su doble
aspecto de igualacién de oportunidades y de cretiente
participacién de la gente en las decisiones que le afectan, en
una condicién de establidad democrética en Io politico.
Pero democracia y democratizacién se dan hoy en medio de
transformaciones tales que paracen terminar con una época é
iniciar otra. Si-esto es asf lo que estd’en juego es 1a politica
misma y el sentido gue la gente le otorga. Bs cierto que Chile
presenta el caso excepcional de una muy baja abstencién en los
a1timos eventos electorales. Pero el gue cerca de la mitad de los
que no votaron en las elecciones pasada esté entre los 16 y 21
aflos, més de la mitad de los cuales no votaron, obliga a dar una
seflal.de alarma respecto del significado de la politica para la
Juventud, es decir para el futuro. La pregunta por la politica es
la pregunta qué tipo de relacién se establece entre el Estado, elsistema de representacién o los partidos y la sociedad civil,
relacién estuvo caracterizada en Chile durante décadas por
imbricacién entre el liderazgo de las oxganizaciones sociales|
Jos actores politico partidarios, presionando ambos hacia |
Estado, con alta vitalidad de la politica partidaria, pero T
escasa autonomia y riqueza de la sociedad civil. Si el per{olo
autoritario significé 1a desarticulacién de esta forma de
relacién, debemos preguntarnos hoy por qué tipo de sociedad
emerge, por el grado de fortaleza o debilidad de los actor,
sociales, por la validez y significacién para 1a gente d|
sistema de representacién, por a eficiencia y caracté
integrativo del kstado, y por el modo cémo la sociedad vive Ibs
vinculos entre estos elementos, que no otra cosa es 1a politica
El tema de la descentralizacién se ubicaen la snéractjabe
procesos de democratizacién y de modernizacion. Ella plantea }
cuestion del Estado. Contra los mitos y las visiones simplet gi
buscan la reduccién mecénica a todo precio del Estado y ven en
mercado a1 nuevo Dios en la tierra, hay que recordar que no
habido en este siglo ningun caso de desarrollo econémico, hese
¥ cultural, que no haya sido con un papel fundamental y acti
del Estado como agente de desarrollo e integracién nacionales
de insercién en el mundo. Las ideologias de 1a aldea glob:
tienden a crear una imagen distorsionada, que los hechos qu
ocurren en casi todas las latitudes desmienten radicalmente.ahi que la cuestién no es ni agrandar ni achicar al Estado como
panacea, sino la reforma de éste en términos de su
modernizacion, reduccién de su dimensién coercitiva, aumento de
su eficiencia y de la dimensién participativa de la sociedad y
reforzamiento de su capacidad redistributiva. La pregunta es por
el tipo de Bstado que quiere construirse. Y¥ aqui el tema del
Estado se encuentra con el tema de la descentralizacién. Pero
ésta lo desborda, por cuanto la descentralizacién no sélo refiere
al Estado, sino a 1a naturaleza de 1a vida colectiva local y
regional y de los espacios de expresién de 1a sociedad civil, ya
la de los poderes que se constituyen en estos dmbitos. Hay que
reconocer gue el debate piblico en estas materias ha sido
estrecho y distorsionado por cdlculos inmediatistas de tipo
electoral, que por legitimos que sean, no dan cuenta de la
envergadura de 1a transformacién de una sociedad que va a empezar
@vivir una densificacién de su economia, su cultura y su
politica local y regional, con débil tradicién al respecto, y
sin perder el caracter de su Estado unitario.
El tema de la modernizacién remite a la cuestién de 1a identidad
nacional y del modo de insertarse en el mundo. En este punto no
610 ha habido banalizacién confundiendo 1a modernidad con
algunos instrumentos 0 mecanismos o identificéndola con algén
proceso histérico particular de modernizacién. Sino que ha habido
un triunfalismo Ingenuo que proclama sélo hoy accedemos a la
modernidad y que para ello no debemos confundirnos con el restode nuestro continente. Recordemos el concepto sociolégic
elemental: la modernidad no es otra cosa gue la afirmacién de 1
capacidad de los sujetos individuales y colectivos de hacer s
propia historia. Como tal, no se identifica con ningén proceso a
modernizacién especifico, sino que cada sociedad inventa si
propia modernidad. Esta afirmacién de sujetos nose hace solo
través del desarrollo cientifico-técnico como lo pretendelun
visién reductivista de la modernidad y 1a modernizacion, sino qué
implica también la dimensién comunicativa o expresiva, es detir,
aquello que esté més alld 0 més acé de la raz6n cientifica.
ninguna de estas dimensiones logra dar cuenta de la neserniael a
una determinada sociedad, si no es a@ través de 1a memori
histérica de su pueblo. La combinacién original de estos bre
elementos le da necesariamente 2 nuestra cultura un cardcte:
MMbride 0 mestizo como ha sido seflalado por algunos. Sn\ta
combinacién pueden encontrarse el aporte y el modo de. insercién|
particular de nuestras sociedades en un mundo cada vez |mé:
trasnaclonalizado, donde el papel clave hoy yen el futuro ma.
que el poder geo-polftico o militar lo juega 1a plena expansién
de las energias creadoras de toda la poblacién. Desde dst.
perspectiva, es bueno en este afio del Quinto Centenario reafirma:
que nuestra modernidad tiene una historia de varios sigios dom
bosqueda y lucha de recreacién y proyeccién de esta cultura, 51
bueno reafirmar también que somos parte indisoluble de Améric
Latina y es en ella que podemos’ encontrar nuestra forma di
insercién en el mundo.Los tres procesos, democratizecién politica y social,
descentralizacién y | modernizacién, sus —interacciones,
complejidades y significaciones que hemos mencionado, son
considerados aqui, como indic&bamos al comienzo de estas
palabras, desde una mirada y con una voz particular. La de las
ciencias sociales y, especificamente, 1a de la sociologia. ¥ no
podemos terminar sin una muy breve referencia a la situacién de
ésta hoy dia. Sin volver a repetiz lo que ha sido su historia en
nuestro pais, vale la pena meditar sobre tres desafios que
enfrenta la perspectiva sociolégica actual y su desarrollo
futuro.
Bl primero es el de 1a identidad disciplinaria. Bs cierto que el
desarrollo teérico de la sociologia 1legé a una coyuntura critica
con el fin de los grandes paradigmas monoliticos con los que se
identificd. La suma de investigaciones y 1a acumulacién de
investigaciones que nos informan sobre procesos y sociedades
concretas no halla ain una contraparte en teorlas sélidas de la
sociedad y lo social. Pero ello es sélo un aspecto del problema.
Hay otras ciencias, como 1a biologia en ciertas vertientes o la
linguistica, que tratan de dar cuenta de este vacio y de
explicarnos 1a sociedad y el comportamiento coletivo como si
éstos fueran una anatomia, una fisiologia o un texto. Hay
disciplinas nuevas como las, referidas a procesos de gestion ¥
decisién con presupuestos muy débiles sobre 1a sociedad -y el
comportamiento social, pero que han mostrado éxito en la
a
gsresolucion de problemas técnicos y que cuentan con una vabta|
publicidad y "marketing" como para imponerse en el campol
académico y profesional. Hay reas tematicas que fueron]
interdisciplinarias que se transforman en disciplinas completass }
auténomas de investigacién y formacién, como son la educacién,| 1a|
comunicacién 0 el medio ambiente, por citar sélo tres. Hay por|
Bltimo campos ocupactonales y oficios que exigen formaciones gue
desbordan los limites tradicionales de una disciplina. Todo elllo|
tiende a cuestionar a la sociologia y las ciencias sociales|
cldsicas. No siempre éstas han sido capaces de absorber lo que|
debe ser absorbido de estas nuevas dimensiones 0 disciplinas
Fechazar las inmiscusiones indebidas, madurando y fortalecténdose|
en el didlogo con ellas. Mas bien, 0 se han dejado arrastirar|
acriticamente por las nuevas corrientes académicas
profesionales, perdiendo su especificidad, 0 se han refugiadd en|
sf mismas defensivamente, lo que les dificulta progresar
enriquecerse.
El segundo desafio que
@ enfrenta es el de 1a continuidad|
generacional. Si bien es cierto que hoy se reabren las escuekas|
de sociologia y que se cuenta con libertad de formacidn
Investigacion, no es menos cierto que pasaron muchos afios d
anormalidad que hirieron profundamente la comunidad de quienes sq
dedican al cultivo y @ 1a enseflanza de 1a disciplina y gue nd sé
ha resuelto aun ni la reinsercién universitaria de quienes fueron
afectados ni la formacién e insercién ocupacional de |las
12genetaciones intermedias. Esta es una deuda cultural y académica
qué repercute en la formacién de las nuevas generaciones de
estudiantes y que no ha sido saldada.
Bl tercer desafio se refiere al desarrollo institucional. Ya no
puede pensarse que hay una base institucional exclusiva para el
cultivo y difusion de las ciencias sociales. $i bien hay aspectos
de ellas, especialmente lo referido al desarrollo téorico-
metodolégico, a la investigacién basica y a 1a formacién de
nuevos académicos y profesionales, gue sélo pueden ser llevados a
cabo en forma fruct{fera por las universidades, hay gue reconocer
que las Ilamadas “universidades tradicionales” no han logrado aén
recomponer 1a masa critica de investigadores y profesores, y las
"universidades nuevas" tienen ain un nivel incipiente de recursos
¥ acumulacién académica, para constituirse por si solas, y pese a
los esfuerzos de unas y otras, en los tnicos pilares del cultivo
de estas disciplinas. Pero tampoco los centros académicos
Iindependientes, de tan importante papel en la Ultima década,
pueden solventar por sf mismos esta tarea, acuciados como estan
por problemas financieros y por urgencias de realizacién de
proyectos indispensables para el conocimiento concreto de nuestra
Sociedad, pero gue no permiten la profundizacién téorica ni la
formacién de nuevas generaciones. Hay que entender que sin un
esfuerzo conjunto del estado, 1as Universidades y los centros
académicos independientes, sin férmulas _innovativas de
colaboracién 2 lo largo del pais en tareas de investigacion y
13ensefianza, el trabajo particular de cade institucién est
condenado a una mera reproduccién sin mayores proyecciones park
Ja cultura y la sociedad.
Asi, nuestra tarea hoy es doble: aportar tanto a 1a construcci -
de nuestro propio trabajo como al esclareciminto y deba
fondo de los procesos sociales que estén definiendo nuestr,
identidad y nuestro futuro. Los trabajos presentados y 1}
presencia de todos Uds. aseguran que este Congreso estaré i 1
altura de esta tarea.
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