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SOCIEDADES MERCANTILES Manuel Garcia Rendon COLECCION TEXTOS JURIDICOS UNIVERSITARIOS ® HARLA DALTON | — e — — Cc} = ae — (om) ra (a) ae) fn p13 (om) 84 SOCIEDADES MERCANTILES ¢) En general, cuando se trate de remediar una situucién injusta que prev leceria si no se aplicara la doctrina del desconocimiento de la persona dad juridica del ente legal, 4.7.2 La desestimacién en México. Legislacin, jurisprudencia y doctrina Expuestas las principales teorias que se han elaborado en el extranjero, en ta no a la desestimacién de Ia personalidad juridica de Ia sociedad, pasemos ahi ra.a considerar el tema a la luz del derecho positivo, de la jurisprudencia y d Ja doctrina nacionales. 4.7.2.1 LEGISLACION Y JURISPRUDENCIA Por principio de cuentas, debe advertirse que la Ley General de Sociedades Me cantiles no contempla la desestimacién de la personalidad juridica de ningun de las sociedades que reglamenta. En efecto, si bien es cierto que la LGSM e ‘tatuye en su art 30 la mulidad y La consiguiente disolucién y liquidacién de | sociedades que tengan un objeto ilicito o que realicen habitualmente actos il Citos, no por ello es menos cierto que no contempla la hipétesis de que los int« reses de terceros se vean afectados por la insolvencia de la sociedad, com tampoco contempla la hipotesis de que las sociedades se utilicen para sustrae bienes a la accion de los acroedores, Asimismo, debe notarse que nuestro legislador se ha ocupado del fenéme no del abuso de la persona moral de forma titubeante e incompleta, pues sob la ha enfocado respecto al abuso de la incomunicacion de responsabilidad d los accionistas de la andnima, por lo que hace falta desarrollar una doctrin, autoctona de la desestimacién de la personalidad juridiea, aplicable a la socie dad de responsabilidad limitada en lo que atafe « la inmunidad de responsab| lidad de los socios, y aplicable a todas las sociedades en lo que correspond al abuso de la autonomia patrimonial de ellas, cuestiones de las que habremo de ocuparnos més adelante. El dnico sustento legal explicito dela desestimacién de la personalidad ju ridica que consagra nuestro derecho positivo se encuentra en los arts 13 y 1: dela Ley que Establece Requisitos para la Venta al Piblico de Acciones di Sociedades Ancnimas, publicada en el Diario Oficial de la Federacién, 30 dit 1939, y en vigor, 11 feb 1940, cuyo descriptivo nombre nos indica que sus pre ‘ceptos no son aplicables « todas las sociedades, sino tnicamente a las anénimas Ahora bien, la aplicacion de tales preceptos plantea dos interrogantes Primera Si se encuentran vigentes; toda vez que el decreto-ley que cret Ja Comisién Nacional de Valores, publicado en el Diario Oficial de la Fede racién, 11 feb 1946, declara en su art primero transitorio que: “Se deroge DAO ON TCT WT ‘fectas extornaa cl conteato de sonioad Personalidad Juridien 8B en cuanto se oponga a esta ley 0a sus reglamentos el decreto del 30 de dic de 1989 que establece requisites para la venta al piiblico de acciones de sociedades andnimas”, ¥ Segunda Si son aplicables a todas las sociedades andnimas, inclusive las que no coticen sus acciones en bolsa. Acerca de este particular, la Suprema Corte de Justicia, aunque por lo ge- neral se ha mostrado renuente a admitir la desestimacién de la personalidad juridica, ha establecido en una ejecutoria aislada!? D Que los arts 18 y 14 de la Ley que Establece Requisitos para la Venta al Piiblico de Aeciones de Sociedades Andnimas, estén vigentes, ya que en ningun momento ha existido disposicién alguna que sea contraria a ‘su contenido 4 Que el art 13 constituye una excepcién a la regla de limitacién a la res- ponsabilidad de los accionistas contenida en el art 87, LGSM iii) Que dichos preceptos son aplicables a todas las sociedades anénimas, aun- que sus acciones no se ofrezcan a la venta al publico, v iv) Que, en consecuencia, el 0 los accionistas que controlen la sociedad son responsables de los actos ilicitos imputables a ésta. Este critcrio también ha sido sustentado en parecidos términos, aunque no en forma tan explicita, en otra Bjecutoria de la Corte en la que se declara que el ‘art 13 dela Ley que Establece Requisitos para la Venta al Publico de Acciones ‘Sociedades Andnimas contiene un “principio del cual se desprende la nota la responsabilidad de las personas que controlan o poseen la mayoria de las de una sociedad anénima’’.*° De suerte que, una vez dilucidado que los arts 18 y 14 dela Ley que Esta- Requisitos para la Vento al Ptiblico de Acciones de Sociedades Andni- ‘estén vigentes, y que son aplicables aun a aquellas sociédades cuyas ‘no cotizan en Bolsa, pasemos ahora @ analizar su contenido, BL art 13 estatuye que personas que controlan el funcionamiento de una sociedad andnima, a sea que posean o no la mayor de las acciones, tendrin obligacién soli- ‘ilimitada frente a terceros por los actos ilicitos imputables a la para ‘su parte, el art 14 preceptia, que responsabilidad que establece ol articuio anterior, se hard efectiva en términos det parr primero del art 24 de la Ley General de Sociedades tiles. Citado por Levessia Unist, Bernardo, on ol urt menciomado, iN, p 708, | ee | e — — Cc} = ae — ra (a) ae) fn p13 (om) 86 SOCIKDADES MERCANTILES ‘Della lectura de los preceptos citados se infiere #) Que la desestimacién de la personalidad juridica de la andnima y la con- secuente imputacién de responsabilidad a los accionistas solo es proce- dente cuando la sociedad realice actos ilicitos, pero no cuando se le aporten bienes en fraude de la ley 0 de los acreedores ii) Que la responsabilidad no aleanza 1 todos los socios, sino tinicamente al accionista 0 al grupo mayoritario o minoritario de accionistas que contro- lan el funcionamiento de la sociedad iti) Que, en consecuencia, debe haber una relacion de causalidad entre los ae- tos ilicitas de la sociedad y el poder de decision que tengan el socio o el ‘grupo minoritario o mayoritatio de accionistas que la controlan iv) Que la responsabilidad en que incurren los accionistas controladores de Ja sociedad ademas de solidaria ¢ ilimitada es subsidiaria, puesto que la sentencia que los condene al cumplimiento de las obligaciones provenien- tes de los ilicitas cometidos por la sociedad debe ejecutarse primero en Jos bienes de ésta y, solamente a falta o insuficiencia de ellos, en los bie- nes de los socios demandados, segiin previene el art 24, LGSM. 1) Que, por consiguiente, el dafio causado por ¢lilicito cometido por la socie- dad no pueda ser reparado por ella por encontrarse en estado de insol vencia. Por supuesto, este ailtimo requisite, o sea, ol.que se refiere al ejercicio la accion de dafios en contra de los accionistas que hayan abusado de 1a in municacién de responsabilidad esté de subordinado ala condicién de que la ‘ciedad se encuentre en estado de insolvencia, plantea a su vez, una cuestién: resuelta por la ley, y que consiste en dilucidar si los terceros defraudados ‘tém obligados a demandar la quiebra de la sociedad para probar el estado. insolvencia, o bien, si la insolvencia queda acreditada por el hecho de que el acto de ejecucién de Ia sentencia no se encuentren bienes suficientes garantizar la responsabilidad de la sociedad. Si la respuesta a esta cuesti fuera en el sentido de que debe demandarse la quiebra de la sociedad para bar su insolvencia, la institucién de la desestimacién de la personalidad ju a de la an6nima para todos los fines précticos seria nugatoria, por la ‘razén de que los terceros defraudados quedarian obligados a someterse al plicado y:no menos dilatado juicio concursal a fin de ejercitar la accion ondiente en contra de los accionistas controladores de la sociedad, tendrian tiempo y oportunidades sobradas para sustraer sus bienes ala de los acreedores. Por el cantrario, si la respuesta fuera en el sentido de ‘basta con no encontrar bienes suficientes de Ia sociedad para tener por; da su insolvencia, el ejercicio de la accién de responsabilidad se exp | ee | e — — Cc} =a ae — ra (a) ae) ae p13 (om) ctos externos del contrato de sociedad, Personalidad Juridica 87 ‘aumentando las probabilidades de obtener éxito en el resarcimiento de los da- fos y perjuicios causados por los actos ilicitos imputables a la persona moral.* Por otra parte, en este mismo orden de ideas, parece pertinente retomar nuestra observacién de que, conforme al derecho positivo mexicano, la desesti- macion se reduce a reputar a los accionistas de la anénima como las verdade- ras partes de interés en los actos ilicitos realizados por la sociedad; pero no aconsiderar a éstos ni a los socios de las restantes sociedades mercantiles co- mo los verdaderos duefios de los bienes que conforman el patrimonio social, Jocual es de suyo lamentable porque en el ¢aso de que se aporten bienes a una sociedad para sustraerlos a la accién de terceros, éstos, de hecho, no podrian recurrir ala accién de nulidad del acto ejecutado en fraude de acreedores, pues si se reclamara la nulidad de la aportacion seria practicamente imposible pro- bar la mala fe de In adquirente, 0 sea de la sociedad, 0 si recurre al remedio previsto en el art. 30, LGSM, de reelamar la nulidad de la sociedad no tendria, sentido pedir su disoluci6n y liquidacion, pues al no ser'acreedores de ella no ‘obtendrian ningin provecho al hacerlo, independientemente cle que es dudosa la procedencia del ejercicio de la accion. Asi pues, como se puede apreciar, es inevitable llegar a la conclusién de mientras no se incorporen en la Ley General de Sociedades Mereantiles adecuadas reformas y adiciones que instituyan una reglamentacién mas aca- bada y precisa de la desessimacidn, es imperativo elaborar una doctrina acadé- ‘mica y jurisprudencial sobre el abuso de la personalidad juridica no solo dela ‘mignima, sino también de todas las sociedades mercantiles, tanto en lo que se la incomunicacién de responsabilidad como en lo que concierne a la ia patrimonial; doctrina que, a nuestro juicio, podria sustentarse en jnormas del derecho civil que sancionan el abuso de los derechos, la eomi- de actos ilicitos y Ta responsabilidad solidaria de las personas que eausen yin un dao. DOCTRINA MEXICANA. TESIS DE CERVANTES AHUMADA. Y LEDESMA URIBE Ja ausencia de disposiciones expresas de la ley, la doctrina mexicana ha lizado un notable esfuerzo por construir una teoria de la desestimacion 0 eile sentido parece haberse pronunciado Ia Suprema Corte de Justicia que ha deetarado "que el beneficio de excusiém aproveche a los sncies se requiere (que senalen bienes de }que basten a cubrir el crédito reclamade; i que los bienes estén libces y desemabaraze wwamenes y embarizos: lj que dichos bienos so allen en al distrite judicial en que deba page, fa) que se antiipen e asoguren los gastos de excusién; t XXXVI, qunta época 'SCJ he deciarado que la nulided de las sociedades constitoye un caso de excepetén al siste- ‘stablecide por el derecho cami y que, en consecuencia, solo puede reclamarse Te vocieied tenga un objeto Akiko o reace habitualmente actos dicites (SUP, ¢ LXVIT, p 'y obtener un lero indebida” (S/F, ¢ CH, p 989, 1949) 88 SOCIEDADES MERCANTILES desconotimiento de la personalidad juridica, con base en los principios genera: les de derecho y en diversas disposiciones del Cédigo Civil. En este intenta des- tacan las tesis de Rail Cervantes Ahumada y de Bernardo Ledesma Uribe. mento que el ordenamiento ha puesto a disposicidn de los comerciantes para actualizar el principio de limitacién de su responsabilidad respecto a una cli: vidad determinada",, de modo que los comerciantes podrén utilizarlo “sin otra limitacién que la buena fe que debe presidir las transacciones comerciales”, de donde coneluye que, ‘si la personalidad juridica de las sociedades mercantiles pretende ser utilizada como instrumento de defraudacién, tal instrumento ju: ridico debera perder toda su eficacia” porque “ninguna institneién juridica pue de, en principio, ser instrumento de mala fe’ Por su parte, Ledesma Uribe, después de analizar la desestimacion de la personalidad de las sociedades a la luz de la jurispradencia extranjera y de Ja legislacion mexicana, enuncia que los elementos para desestimar la personal dad juridiea de las sociedades son los siguientes‘? 44) Que exista una sociedad dominada por un socio 0 grupo de socios 4) Que la sociedad sea oriontada a la conseeucién de un objetivo injusto ef Que el ilfcito no pueda ser reparado si no es mediante la aplicacién de la develacién, y ch) Que haya un nexo causal entre la actuacién de la sociedad y el poder de diteccidn que tenga el socio controlador. Adicionalmente, Ledesma Uribe sugiere, en forma vacilante, que para fincar responsabilidad a los socios por los actos ilicitos imputables a la sociedad, se pueden aplicar, entre otros, los siguientes arts del Cédigo Civil para el Distrito Federal; 60, 80, 16, 1796, 1797, 1880, 1910 y 1917, que se refieren a la renuncia de derechos, a la ejecucién de actos ilicitos, al abuso del derecho, a la buena. fe, al cumplimiento de los contratos, a los hechos ilieitos, a la responsabilidad que nace de los ilicitos, y a la responsabilidad derivada de la comisién en ex main de actos ilicitos 1.2.3 NUESTRA OPINION Estamos completamente de acuerdo con las tesis expuestas tanto por Cervan- tes Ahumada como por Ledesma Uribe; sin embargo, nos parece lamentable que ambos no exploraran el indiscutible potencial que ofrecen las disposici- ‘nes del derecho comin antes mencionadas para desarrollar con mayor ‘sus ideas sobre el abuso de la personalidad juridica de todas las sociedades mer. “© ConvaeTes AMUMADA, op eff p 202. © “Levesws Urine, op elt, p 489. | ee | e — — Cc} = ae — (om) ra (a) ae) ae p13 (om) 89 ecto extornos dl comtrato de sociedad, Porsonslidd Juridica ‘eatiles, no solo en lo que Se refiere ala inmunidad de los socios, sino también ‘en lo que corresponde a la autonomia patrimonial del ente legal. En efecto, como ya hemos dejado asentado, los arts 13 y 14, LVASA, son aplicables tnicamente en lo que concieme a la comunicacién de responsabili dad a los accionistas de la anénima por la comisién de los actos ilicitos imputa- ‘bles a ésta, pero no en cuanto al abuso de Ia inmunidad de los. socios comanditarios y limitados, ni en euanto al abuso de la autonomia patrimonial ée todas las sociedades, lo que nos conduce a plantear la cuestién respecto fi la desestimacién también puede hacerse extensiva a estos casos. En lo atingente a esta cuestiOn, fundados en lo dispuesto por los arts 16, 1912, 1910 y 1917, CCDE, que sancionan el abuso de los derechos, 1a responsa: bilidad derivada de los actos ilicitos y la responsabilidad solidaria de Ins perso- fnas que han causado en comin un dafo, estimamos 1 Que si es posible imputar responsabilidad a los comanditarios y a los so- ios de la limitada por los ilicitos imputables @ la sociedad, puesto que no pueden abusar de la institucién de la persona moral para cometer ac- tos ilicitos; esto a condicién de que se pruebe que hay una relacion de cau- salidad entre los actos ilicitos imputables a la sociedad y el poder de decision de los socios y de que se observe lo dispuesto por el primer parr del art 24, LGSM, es decir, que se considere que la responsabilidad en que han incurrido es ilimitada y subsidiari 2 Que, por las mismas razones, si es posible considerar a los socios de todas las sociedades mercantiles como los verdaderos duefios de los bienes apor- tados a la sociedad si se demuestra que el derecho solo se ejercié a fin de causar dato, sin utilidad jundica para su titular; esto es, si se demues- ca que la sociedad se constituyé o se utilizé para sustraer bienes a la ac- cién de terceros.* i consiguiente, nos parece que deberia considerarse como cuestién de lege a) Que se repute no solo a los accionistas de la anénima, sino también a los socios controladores de Ia limitada como las verdaderas partes de inte- rés en los actos ilicitos realizados por la sociedad que controlan 5) Que Ia responsabilidad solidaria que la ley imputa a los accionistas de la anénima se haga extensiva a los socios que controlen la sociedad de responsabilidad limitada, cuando abusen de la incomunicacion de respon- sabilidad que lea concede Ia ley ‘¢) Que la nota de responsabilidad subsidiaria de los socios estatuida en el art 24, LGSM, se considere aplicable sin necesidad de recurrir al juic concursal a efectos de probar la insolvencia de la sociedad, segiin parece (Of Borsa Sonrano, Manvel. Teoria general de las obligaciones, tT, Porta, 1962, pp 484 y se. DAO ON TCT WT 90 SOCTEDADES MERCANTILES ber dejado establecido la Suprema Corte de Justicia al declarar que: In excusién solo aprovecha a los socios si éstos sefialan bienes de la socie: dad que basten a cubrir el crédito reclamado, siempre y cuando dichos bienes se hallen en el distrito judicial en que deba hacorse el pago y estén libres y desembarazados de gravamenes y embargos y, ademas, 9e anti: cipen 0 aseguren los gastos de excusién'® ‘ch} Que se considere a los socios que sustraigan sus bienes a la accion de los acreedores mediante la aportacién de los mismos a cualquier sociedad mer. cantil como los verdaderos duefios de ellos, cuando ésta se constituyao se utilice para defraudar a terceros. Por tiltimo, en cuanto a la desestimacién de la personalidad juridica de las so- ciedades nos quedan por hacer las siguientes aclaraciones i/ Que en virtud de ella la responsabilidad recae sobre los socios y no sobre los administradores ¥ que, por consiguiente, no se esta ent a hipatesis le- gal prevista en el art 1918, CCDF, y ii) Que el supuesto contemplada en el segundo parr del art 24, LGSM, en rea lidad no constituye un caso de desestimacién, sino que concede a los acree- dores de la sociedad una accién oblicua para obligar a los socios @ que realicen sus aportaciones, en el caso de que aquella no les demande el cum- plimiento de la obligacién de aportar que hubieren contraido, 1 Véase pie de pagina mim 44 — a e Pa — (i) =a FJ — a= (a) ae) ae ja (om) CAPITULO 2 EFECTOS INTERNOS DEL CONTRATO DE SOCIEDAD | a e =— — (i) =a ae — (om) a (a) ae) ae p13 fom DAO ON TCT WT Efoctos internos del enntrata dewenedad 98 INTRODUCCION En virtud del contrato de sociedad se establecen multiples vinculos de los so- cios entre si y de éstos con la sociedad, los cuales generan una variedad de ‘derechos v deberes reciprocos a los que, en conjunto, por razones de economia ‘dellengruaje, se les ha dado el nombre de estatus o calidad de socio. Por consi- tiente, el estatus de socio constituye “una calidad juridica frente a la colect itributiva de derechos y obligaciones variadas’** y no un simple o frente a la sociedad. 1 DERECHOS DE LOS Socios is derechos de los socios han sido clasificados por la doctrina® yazén de su origen, en legales y convencionales razén de su contenido, en patrimoniales y de consecucién: ‘en razin de su titularidad, en comunes y privilegiados, y en razén de su carécter, en modificables ¢ inmodificables. ase en las clasificaciones de los diferentes derechos de los socios propues- Rodriguez y por Mantilla, consideramos que, por razones de metodolo- derechos pueden dividirse en dos grandes grupos, a saber: derechos jales o de contenido econdmico y derechos de consecucién, también rz Ronnlovrz, Joaquin, Tratado de soeiedades mercantites,t 1, Porta, 1965, p 16. anglosajon el concepto status generalmente ex interpretado como “La relacibn uo con ol esto dela comunidad (The legal elation of individual to teet of the Black's La Dictionary. Sa od, West Publishing. 1878. | ee | e — — Cc} = ae — (om) ra (a) ae) ae p13 (om) 94 -SOCTEDADES MERCANTILES. §.2 DERECHOS PATRIMONIALES ‘Se earacterizan por su contenido econémico ¥ porque facultan al socio, ya para cumplir con una prestacién o bien para exigir de terceros o de Ia socied: ‘una prestacion apreciable en numerario. Entre estos derechos se encuentty los de realizar aportaciones tronsmitir la calidad de socio participar en los beneficios obtener el reembolso de las aportaciones participar en el haber social, y de participar en la cuota de liquidacién. 5.2.1 Derecho de realizar aportaciones Hemos dicho en otro lugar‘ que, a diferencia de lo que ocurre en los conti de caimbio, en el Hamado “contrato de organizacion” los socios no solo la obligacién de cumplir con la prestacién pactada, sino que ademas tienen derecho de hacerlo, toda vez que, sino tuvieran el derecho a realizar las ciones convenidas, se podria producir un perjuicio a sus intereses al ver di ‘nuida su participacion en los beneficios que obtenga la sociedad o bien haber social.® El ejercicio del derecho a realizar aportaciones se produce tanto al mo de constituir la sociedad como en ocasién de aumentos del capital social ( 20 CCDF, de aplicacién supletoria a Ins sociedades colectivas y en comandit y 72y 182, LGSM, aplicables a las sociedades de responsabilidad limitada, nima y comandita por acciones). 5.2.2 Derecho de transmitir la calidad de socio En las sociedades intuitu personae (colectiva, comandita simple y com or acciones) y en la de responsabilidad limitada, el derecho de transmitir calidad de socio est subordinado a la condicién de que la transmisién sea sentida por todos los demas socios, salvo que en el contrato social se dis que basta el consentimiento de la mayoria de ellos (arts 31, 57 y 65, LGSI En las sociedades intuitu pecuniae (andnima) no existe tal restriecién, am que en el contrato social se estipule que la transmision de las acciones solo ‘haga con autorizacién del consejo de administracién (art 180, LGSM) ‘A nuestro juicio, las limitaciones legales o voluntarias al derecho de tr mitir la calidad de socio eonculcan la garantia constitucional de libre as + Supra Capitulo 1, Teoria del conteato de orgenizacién © Al tratar el vera de los aumentos de capital nos ocuperemos de estas euestiones om feetos intcenos del conteate dewixiedad — 9B t90) por cuanto esta garantia tutela no solo el derecho de asociarse, bién el derecho de no asociarse. O pars expresarlo en otras palabras, én a la garantia aludida se produce porque el derecho de asociacién ‘indefinidamente a una asociacion 0 sociedad.®:" Seria entonces con- ‘conto euestién de lege ferenda, que tales limitaciones fuetan deroga: 1 LGSM y que en su lugar se estipulara legalmente que, eel caso de cio desee transmitir su participacién en la sociedad, los restantes ten ho de preferencia para adquirirla y que, de no ejercitarse este dere- jedera ya sea a Ja reduecién del capital social o bien a la disolucion sociedad; solucién ésia que no es del todo ajena al actual sistema legal, 1 se desprende de lo establecido en los arts 81, 33, 57, 66 y 211, LGSM. iblecen el derecho “del tanto” en favor de los socios, para el caso isiones inter vivos, y para el caso no previsto estatutariamente de mortis causa, segiin se aprecia ala luz de lo previsto en el 9, cuando la separacion o muerte de un socio pueda provocar la disolu- a sociedad por imposibilidad de seguir realizando el objeto social, ‘el nimero de socios llegue a ser inferior al minimo establecido por la or la pérdida de dos tereeras partes dol capital social. ‘Derecho de participar en los beneficios los elementos esenciales del contrato de sociedad expusimos nues- enel sentido de que la estipulacién que excluzya alos socios de una regular del derecho de participar en los beneficios es ineficaz; pero que elamente valido pactar una distribucion no proporcionat de las ganan- se desprende de lo establecido en el primer parr del art 16, LGSM, no insistiremos en ese punto.’ ‘razon reputamioe inconstituciona el set bo de a Ley de Caras de Comercio y de ria, que impone alos comerciantes industrials a oligacian deincerbirse en dichas se instituciones publices. Respecto del caricter de instituciones oficiales que dife- ones sribuyen alas camaras do comercio y de industria, udase Puxzo, Gabino, al derecho comerelat, Themis, Santa Pe de Bogot4, 1966, pp 400 y ss) Facultad potestativa del hombre para esenger los medios que permitan ls consecucion ‘oéase BcnGon, Ignacio, Las garandas individuales, Perrin, 1981; pp 299 y ss. As: camente el dereco del tanto se cencede en favor del vendedor o do los copropictarios. ‘Gapitale 2. Ln ditribucign no proporcional de las utlidades y las pérdidas es acaptada o. Ba Las Siete Partido sel: Be si sobre las ganancias et las péridas no fuere pues jen qué manera se deben compartir entre alia, enconce débenias partir eguatmente, Bd «Ediciones Atlas, TIT, Madrid, 1972, p 246, | ee | e — — Cc} =a ae — ra (a) ae) ae p13 (om) 96 SOCIEDADES MERCANTILES, Los socios, en principio, tienen un derecho abstracto de participar en los beneficios que llegue a generar la sociedad: pero este derecho solo se materiali- 2a, se transforma en concreto, precisamente al paso y en la medida en que la sociedad obtiene ganancias. Ahora bien, el derecho concreto de participar en los beneficios no significa quo el socio tenga derecho a 1a distribucién de las utilidades.'° El derecho a la distribucién de los beneficios tambien se desarro- Ia en dos estadias: primero, como derecho abstracto, que nace del hecho de que Ia sociedad obtenga gananeias, y, segundo, como derecho concreto que nace una ver. que se cumplen ciertas condiciones establecidas por la ley para repar- tir las utilidades. Los arts 18, 19,20, 118, parr segundo, y 117, LGSM, establecen las siguien- tes condiciones, las que necesariamente han de cumplirse para que sea valida la distribucidn de beneficios Primera as utilidades solo podran distribuirse después de que hayan si- do debidamente aprobados por Ia asamblea de socios 0 accionistas los es: tados financieros que las arrojen (art 19).!” Segunda no podra hacerse distribucién de utilidades mientras las pérdi das sufridas en uno o vatios ejercicios anteriores no hayan sido resti: tuidas o absorbidas mediante aplicacién de otras partidas del patrimonio (art 19). Tercera si hubiere pérdida del capital social, tampoco podrd hacerse dis tribueién o asignaci6n de utilidades mientras éste no sea reintegrado 0 re dueido (art 18) 2 Como.se verk mis adelante, en Ins socedades andnimas el derecho a In distribucion de on be noficios toms ol nombre de derecho a dividendo, ol cual os definido por RonkicuEZ como "el ie eco) que tiene el titular de cada acc de paticipar en el benticio eto priéicamente dstiiida", opctt,t 1, p 396. Cfr ademts, Heures, Mario, Ei dividend, copyright del autor, 1966 y Rovul ‘Guz2 bet Casruan, José Vietor, “El dividendo en las sociedades anbnimus”, Estudios janiioos en memorta de Roberto Mantlla Molina, Pocria, 1984, pp 671 y 38. TT "Gn su redaceién original el art 19, LGSIM, estatuie que lu distlbucién de utlidadeo solo po- dria hacersa daapods de que I anambles de socioso accionistas aprobaran el balance que efeetioa- ‘mente lan srrojara. El uso de la forma adverbial eectfoamente dio lugar a que esta disposicin te interpretara en el sentido de que las tilidades repartibles deberian ser reales y no virtuale, festa es, que 20 podian repartirv los supervits. Las primeras reformas de $1 dic 1980, publi ay on ol Diario Oftcial de la Pederactén, 23 ene 1981, suprimieron dicha palabra ala vex que de {garon el principio de sinceridad dl Balance consagrado enol rt 38, C Com, lo que ha dado higar 1 digpoaitivo en cuostin gee inverpretade en el satide do que permite el reparto de uti ‘utilidades reales y virtuales estén contenidos ea le siguiente definicibn:“utilded Ta genancia reaoltante del empleo de capital en cualquier negocio. lx ganancia pecuniaria en Guler tzansaccion u operacion, el soperavit que queda del empleo del capital, despues de {os los gastos y hacer provision para cuelquierpérdida del inismo eepital; el excedente del de venta sobre el cao. (HERMANO, Octevio A., Derecho bancaro mexicano, AMTA, 1956, —! ee | e Pa — Cc} =a FJ = a= (a) ae) ae ja (om) DAO ON TCT WT Bfeotosintornoe doleantrato daseciodad — 97 ‘antes de la distribucién de utilidades debera separarse un cinco onto de ellas para formar el fondo de reserva, hasta que éste importe inta parte del capital social (art 20). sila sociedad hubiere emitido partes sociales privilegiadas 0 a e voto limitado, no podran asignarse dividendos a las partes s0- y alas acciones ordinarias sin que antes se pague aquellas un endo preferente (arts 62 y 113, parr segundo) ‘si hubicre acciones pagadoras, la distribucién de utilidades se ha- ‘proporcién al importe exhibido de ellas (art 117), n, si se hiciere distribucién de utilidades sin cumplir las dos primeras ‘a estipulacion no produciré efecto alguno y tanto la sociedad co- dores podran repetir por los anticipos o reparticion dle utilidades ‘contravencién a lo dispuesto en el art 19, contra las personas que recibido, o exigir su reembolso a los administradores que las hayan siendo unas y otros mancomunada y solidariamente responsables de ntieipos y reparticiones. ‘To que se refiere al incumplimiento de lo dispuesto por el art 18, la ley e expresamente sancién alguna. Sin embargo, estimamos que este ivo legal es imperativo y, por tanto, de arden pablico, lo que motiva dy nulided absolut del acuerdo de la asamblea de socios o accionis- decrete el reparto de las ganancias sin que previamente se reintegre ‘el capital social que se hubiere perdido (arts 80, 1880, 2225 y 2226, ‘otra parte, si se repartieran utilidades sin hacer las separaciones nece- formar 0 reconstituir el fondo de reserva, los administradores que- n solidaria ¢ ilimitadamente obligados a entregar a fa sociedad una cantidad ‘ala que hubiere debido separarse, esto sin perjuicio de que los adminis- puedan repetir contra los cocias por el valor de lo que entreguen cuan- jondo de reseva se haya repartido, segun dispone el art 21, LGSM, el cual defecto, toda ver que no concede derecho alguno a los acreedores, cuyos se trata de proteger cn esta sancion, para obligar a los administradores fen a la sociedad las cantidades ilictamente repartidas. or dltimo, si se hiciere una distribucidn de utilidades contraria a lo dis- sto por los arts 113, parr segundo, v 117, LGSM, entendemos que los titu- ide las acciones de voto limitado y liberadas, tendran accién para demandar os arts es prohibitivo y el segundo imperativo; es decir, porque ambos dis- itivos son de orden pablico. Derecho de obtener el reembolso de las aportaciones sho a obtener el reembolso de las aportaciones puede producirse como uencia de cuatro hipdtesis diferentes | a e — — Cc} = ae — ra (a) ae) ae p13 (om) 98 SOCIPDADESMERCANTILES. Primera Porque la sociedad reduzca su capital social mediante reembol- ‘90 de las aportaciones que hubieren hecho los socios. Segunda Porque la sociedad amortice las partes sociales 0 las acciones con utilidades repartibles, Tercera Porque el socio ejercite el derecho de separacion. Cuarta Porque el socio ejereite el derecho de retiro. 5.24.1 PRIMERA HIPOTESIS. REDUCCION DEL CAPITAL MEDIANTE REEMBOLSO. La reduecién del capital social mediante reembolso de las aportaciones es re gulada, en lo general, por lo dispuesto en el art 90, LGSM; a cuyo tenor la dis: minucién soto seré eficaz si el correspondiente acuerdo se publica en el peridalico oficiat del domicilio de la sociedad, por tres veces con intétvalos de diez dias; bien entendido de que los acreedores de la sociedad, eonjunta o separadamen. te, podrén oponerse, # la reduccién, en Ta via sumaria,'® desde el dia en que se haya tomado la resolucién hasta cinco dias después de la ultima publica: cién. No obstante esto, tratdindose de sociedades anonimas y en comandita por acciones, la reduccién del capital ademas debe inscribirse en el Registro Publi: 0 de Comercio (art 21, frac XII, Cédigo de Comercio), sin cuyo requisito no produciran efectos frente & terceros, quienes no podrdn ser perjudicados por In reduceién de capital, conforme a lo dispuesto por el art 26 de dicho Cédigo ‘Asi pues, pars que ls disminuci6n de capital social por reembolso sea eff ‘eaz frente a los acreedores de las sociedades en nombre colectivo, comandita simaple y de responsabilidad limitada, basta la publicacién del aviso; pero para ‘que lo sea frente a los acreedates de Ia andnima y de la comandita por aeciones se requiere ademis la correspondiente inseripcién en el Registro Piblico de Co- maercio. Por consiguiente, para el primer caso, 0 sea, el de los acreedores de las sociedades en nombre colectivo, comandita simple y de responsabilidad limita. da, la caducidad opera después de transcurridos cinco dias, contados partir de la altima publicacion del aviso de reduccién y para los acreedores de las so- ciedades anénima y en comandita por acciones, después de transcurrido dicho plazo, o bien, si la inscripeién se hiciera fuera del mismo, al dia siguiente de que se practicara, 18 EL ibeo quinto del Codigo de Comerelo no rogula La via sumaria-méreantil, lo que obliga a jer ‘iter la correspondiente uesién en la via ordinaria mereantil. Cato porgti, si bien ew cierto que ol art 1051, C Com, autorise a que en defecto de los procedimientos mereantiles se aplique la ley 4o procedimientos local espectiva’, ambi lo es que el procadimiento civil sumario no conten pila las situaciones previstas en la LGSM, Bata falta de regulacion motiva que el demandado par Jo general apele del auto que acepta la demand en la viaardinaria mercantil o que interponge In ‘excopcién de error en la via, con ol consiguiente perjuici para el actor. Sobre el recurso de apela- iim de los autos. Of; Buce nea BAUTISTA, Jost, Bt proceso civil en Méxion, Portia, 1977, pp 518 ven Bfoctesinternos del contrato de sociedad — 99 Finalmente, debe tenerse en cuenta que traténdose de sociedades anéni- mas y en comandita por acciones, para que sean vilidas las disminuciones de capital social por reembolso se requiere que Ia designacién de las acciones que hayan ce nulificarse (amortizarse)'® se haga por sorteo ante notario 0 corre: dor piblico (arts 135 y 208, LGSM). A pesar de esto, consideramos que tam- bién sern valides las disminuciones y los correspondientes reembolsos que se hagan a prorrata entre los accionistas, si asi se conviene entre le totalidad de ellos, habida cuenta de que con el sorteo el legislador trato de evitar situacio- ‘nes injustas para los socios minoritarius, quienes podrian ver disminuido su estatus si las mayorias tuvieran el poder de amortizar a su voluntad las accio- nes de aquellos. 5.2.4.2 SEGUNDA HIPOTESIS. AMORTIZACION DE PARTES SOCIALES © ACCIONES: amortizacién de las partes sociales y de las acciones con utilidades reparti- ‘les esta prevista en los arts 71 y 136, LGSM, respectivamente. La primera, 20 Ia amortizacién de partes sociales, no esté permitida sino en la medida 'y forma que establezed el tontrato so- _ ial vigente en of momento en que las partes afectadas hayan sido adqui "das por los socios. La amortizacién de acciones, en cambio, puede realizarse porque esté pre- jsta en el contrato social al momento en que las acciones afectadas hayan quiridas por los socios o bien porque la asamblea general extraordinaria cionistas acuerde modificar posteriormente el contrato social para autori- ‘amortizacién (art 182, frac TX, LGSM). ambos casos, la amortizacién de las partes sociales o de las acciones eva una reduccién del capital social, sino un aumento del valor nominal las. railustrar esto, supongamos que una sociedad anonima cuyo capital so- de $ 1 000 000.00, dividido en 1000 acciones con valor nominal de 1.00, cada una, resuelve amortizar 200 acciones, a su valor nominal, con repartibles que ascienden a § 200 000.00. Fl capital contable (patri- ia), antes y después de la amortizacion, quedaria como se observa debe hablarse de amortiacin de aeciones, ya que el verbo amortizar tiene entre 008 ldo revuperar os fondos invertidos en yn negucio a sotiedad. Diccionario para Duris- pun pe Micvrt, Luis —! ee | e — — Cc} =a FJ — ra (a) ae) ae ja (om) | — e — — Cc} =a ae — (om) ra (a) ae) ae p13 (om) 100 SOcIEDADES MERCANTILES Por! err eb pie Se eo Free | Capital Social 471,000 000.00 ° "1000 acsiones cd Vor nominal Jers oe § 1000.00. en bode Urilidades repartibies: 200 000.00 jones Otras partidas 800 000.00 del! 17 700 000.00 bb) Después de la amortizacién Captal social $1,000 000.00 100 scsien@s con valor nominal de, § 1 280,00 ef uh Uilidades repartbies 0.00 w Orras paricas 500 000,00 5 1.500,000.00, ‘Una vez realizada la amortizacién, es potestativo para la sociedad emitir certh ficados o acciones de goce, a menos que en el contrato social esté prevista le ‘emision de esta clase de titulos, a los que nos referiremos con algun detalled tratar acerca de las diferentes clases de acciones. 5.2.43 TERCERA HIPOTESIS. EJERCICIO DEL DERECHO DE SEPARACION El derecho de separacién de los socios se ejercita por diferentes causas, sea la especie de sociedad de que se trate. En las sociedades en nombre c vo y comandita simple, los socios minoritarios tienen derecho a separarse #) Cuando el contrato social sea modificado sin su consentimiento (art LGSM) Ji) Cuando contra su voto el nombramiento de algiin administrador en persona extrafia a la sociedad (art 88, LGSM), y 4ii) Cuando el administrador delegue su encargo (art. 42, LGSM), Si se trata de sociedades de responsabilidad limitada, los socios tienen de a separarse cuando el nombramiento de algin administrador (gerente) ‘en persona extrafia a la sociedad o cuando algiin administrador delegue su cargo (art 86, LGSM); pero no cuando se modifique el contrato social, h cuenta de que para ello, salvo pacto en contrario, se requiere el voto de la ‘yorta de los socios y que para el cambio de objeto o de aumento de las obl ‘ciones de éstos se requiere la unanimidad de votos (art 83, LGSM). En la sociedad anénima y en la comandita por acciones, el derecho de paracién solo procede DAO ON TCT WT EEE Pfsetosinternos delcontrato de sociedad — 101. i) Por cambio del objeto social i) Por cambio de nacionalidad de la sociedad, y iii) Por transformacién de la sociedad (arts 206 y 208, LGSM).!* Pilejercicio del derecho de separacion implica, desde luego, el derecho de reer ‘bolso de las aportaciones el cual, en las sociedades anénimas y comandita por io del objeto social, del cambio de nacionalidad o de la transformacion de la sociedad » si lo solicitan dentro de los quince dias siguientes ala clausura de Ta asambiea."* 5.2.4.4 CUARTA HIPOTESIS. EJERCICIO DEL DERECHO DE RETIRAR LAS APORTAGIONES En las sociedades de capital variable los socios tienen derecho a retirar, total o parcialmente, las aportaciones que hubieren hecho para incrementar la parte Variable del capital, a condicion de que notifiquen fehacientemente a la socie Gad su intencién de hacerlo y en el entendido de que el retiro no surtir4 efectos sino hasta el fin del ejercicio anual en.curso, si la notificacién se hace antes el iltimo trimestre de dicho ejercicio, y hasta el fin del ejercicio siguiente, si se hiciere después (art 220, LGSM). Monto del reembolso Como se ha indicado en las cuatro hipétesis planteadas, Jos socios Lienen derecho a que se les reembolse el importe de sus aportaciones, pero, sobre qué bases debe hacerse el reembolso? Por lo que toca a esta cues: idn, la LGSM solo ofrece soluciones en dos casos j) Fl de amortizacién de acciones por reembolso, ¥ {ij Blde ejercicio del derecho de separacién en las sociedades anénima y co- mandita por acciones. nel primero, ¢l art 136 prevé dos situaciones distintas: el de que In sociedad adquiera las acciones en bolsa para amortizarlas, en cuya hipotesis la amorti- acién ve resliza al valor de mercado de las misinas, y, ol de que en el contrato Enaleapitule dedicado «la fusion op cit, IT, p S14. otendumos que el inejerciio dl derecho de separacion dentro del plaza establecido por el art Rooulcues (op 418), por cusato In precluidn slo e produce en el proceso. Cie C se aaercho procesa eivit, Editora Nacional, 1964, p 172, y BaRuELos Sawcusz, Froy” Prttice ct forense, Carden, 1954, pp 484 88. Aimismo, entendemos que eercitado a} re soparacion en tempo, iz prescribe x os einen ace segtn dispone el art: 1045, frac | ee | e — — Cc} =a ae — ra (a) ae) ae p13 (om) a /oen el acuerdo de asamblea se fije un precio determinado. En cuanto por ejercicio del derecho de separacién, la ley establece que debe- aieans proporeién al activo social, expresiin ésta que ha sido interpreta- dacen el sentido de que debe realizarse al valor patrimonial (contable) de las aceiones. ‘A nuestro juicio, en los casos en que ni la ley ni el contrato social prevén cl valor del reembolso, la tinica solucion al problema de determinar su monto es In de realizarlo en proporcion al activo social, entendiendo por activo social el capital contable (patrimonio) neto de 1a sociedad, por cuanto si se hiciera al valor nominal de la aportacién se causarfa un perjuicio econémico a los socios al privarlos de su derecho de participar en el haber social, derecho. al que nos referiremos enseguida. Por iltimo, es de hacerse notar que la Comisién Nacional de Valores!® re- cientemente ha determinado que, tratandose de retiro de aportaciones de las sociedades andnimas de capital variable cuyas aéeiones se coticen en bolsa, el valor del reembolso sera el més bajo que resulte de aplicar los dos eriterios si- guientes '¥ 95% del valor promedio a que se hayan cotizado Tas acciones durante los 30 dias anteriores a la fecha en que el retiro deba surtir efectos, o ii) El valor contable de las acciones de acuerdo con el estado de situacion fi nanciera de las mismas al eforre del ejereicio. ‘A nuestro entender, ambos criterios son violatorios del art 220, LOSM y, por ende, inconstitucionales. Fn efecto, este art establece que el retiro surtird efec- tos al fin det ejercicio en curso y no 90 dias antes ni uno o mas dias después del cierre del mismo. Por consiguiente, én todo caso, el valor del reembolso de- beria sor el de cotizacién delas acciones en bolsa a la fecha de clauisura del ejer- cicio social. 5.2.5 Derecho de participar en el haber social ‘Toda sociedad mercantil venturosa en el curso de sus operaciones experimen ta incrementos en st haber social, por acumulacién en el mismo de utilidades reales de reservas legales o de ambas 0 voluntarias ylo reservas de valuacion ode ambas o revaluacién (superdvits) primas sobre acciones, o de ambas, ete, partidas patrimoniales éstas que, en el fondo, no son otra cosa que beneficios reales retenidos 0 ganancias virtuales no eapitalizadas que, por eonsiguicnte, 1 Circular 12:14, 9 wgo 1987, publicnda ex] Diana Oficial de te Federecién, 9 nov del meme lao. Por otra parte, pero en el nisino orden de ideas, es evidente que los eviterias enerales ‘mite la Comision Nacional de Valores son materialmente logslativos y por ello también ostin ve ciados de neonstitucionslidad, toda vez que son volatorion del art 89, frac T, que reserva a face tad reglemeataria ol presidente ée la Replica ‘Efectos intoraos del cunteato deaeiedad — 108 incrementan los derechos patrimoniales de los socios; de manera que, el dere- cho a participar on el haber social no es sino una consecuencia del derecho go- neral que tienen los socios: partieipar en los beneficios que obtenga la sociedad. Y precisamente porque los socios tienen el derecho a participar en el haber social en proporcion al monto de sus aportaciones, dijimos en parrafos anteriores que el valor del reembolso de éstas debe hacerse tomando en cuenta el patri- monio neto de la sociedad, para no afectarlos en sus derechos.7 5.2.6 Derecho de participar en la cuota de liquidacién Este derecho, lo mismo que el anterior, nace del derecho general de participar en los beneficios de la sociedad; pero también nace del derecho a realizar apor taciones, puesto que la liquidacién de la sociedad, en la generalidad de los ca- 60s, supone el reparto del haber sovial; es decir, del patrimonio neto de la sociedad. 5.3 DERECHOS CORPORATIVOS O DE CONSECUCION ‘Se caracterizan porque su contenido no es economico, aun cuando puedan pro- ucir efectos de tipo patrimonial, como en el caso en el que se ejercita el dere- ‘tho del voto para logtar que la sociedad decrete el pago de dividendos. Entre estos derechos se encuentran el derecho de voto y el derecho de pe- cuentas a los administradores, los cuales, a su vez, se descomponen en nu- 08 derechos a los que nos iremos Fefiriendo en particular al estudiar cada de las especies de sociedades. 1 Derecho de voto sin lugar a dudas el més importante de los derechos de consécticién. Con- ‘en la facultad “‘de contribuir a la formacién de la voluntad colectiva me- Ja manifestacién de 1a propia.” Del derecha det voto dimanan otros derechos, tales como los de asistenci participacion en las deliberaciones de las juntas 0 asambleas de socios; de jocatoria; de redaccién de la orden del dia; de ser representado en las jun- Uns porcién de la doctrina mercantl mexicans afiema que puede estipalarse una participa “two proporeional del haber social. Al tratar de las liaradas acciones preferentes 0 inte nos ocuparemos dio esta evestion. (cues, op ei, 1, 97. El vato Lambitn ha sido definido corso “una declaracion de vo- con I que cada declarante coopera e la formacién de la voluntad de Ia junta o asambles Ta del ente corporativa” (VAZQUEZ ARminio, Fernando y BARRERA GRaF, Jergo, en fo Jurdioo Mexicano, Instituto de Investigaciones Juridicas, UNAM, 1884), DAO ON TCT WT 104 SOCIHDADES MreRCANTILES: tas 0 asambleas; de nombramiento de administradores; de nombramient ‘rgganos de vigilancia; de aprobacién de los estados financieros y de los mes de los edministradores; de aprobacion de la gestion de éstos y los rios y, muy especialmente, de modifieacién del conteato y de los est sociales El ejercicio del derecho de voto esta subardinado a diversas formas, minis y condiciones, seguin ser In especie de sociedad de que se trate, mol por el cual nos ocuparemos del mismo al paso en que vayamos estudiando da tipo de sociedad. Sin embargo, aqui nos referiremos a algunos pri generales que lo rigen, 5.3.1.1 PRINCIPIOS GENERALES ‘@ Las decisiones se toman por mayoria simple de votos y, por excepek por unanimidad o por mayorias calificadas (arts 34, 87, 46, 57, 65, 79, 88, 189, 190, 191 y 208, LOSM) 4) Los socios deberan abstenerse de deliberar y votar en las decisiones: Jos asuntos en que, por cuenta propia o ajena, tengan un interés conte rio al dela sociedad (arts 196, 197 y 208, LGSM, para las sociedades. nimas y en comandita por acciones y 2679, en particular, y 1796, en general, para el resto de las sociedades; habida cuenta de que los, cios tienen la obligacién legal de actuar de buena fe; es decir, de act como hambres probos, honrados y conscientes)'* ¢) En las sociedades intuitu personae el voto se computa por cabezas capite) y, excepcionalmente por cantidades; en Ins sociedades intuitu pe cunige en funci6n de la participacién que tienen los socios en el capit social (arts 46, 57, 72, 113 y 208, LGSM). 5.3.1.2. LIMITACIONES AL DERECHO DE VOTO Por disposicién legal expresa, las restricciones al derecho de voto en las sovie- dades anénima y en comandita por acciones acartean la nulidad del pacto que las imponga (arts 198 y 208, LGSM), excepto cuando se emitan acciones de voto limitado (art 113). Para las demas sociedades no existe tal sancién legal expresa, en conse- abria que analizar caso por caso para determinar si la estipulacién ‘que limite el derecho de voto es contraria a leyes de orden publico o a la buena fe. agus y romdnticas las definiciones de buena fe que la caracterizan como la oblign ‘come hombre probe, honrado y eanscente,y propane la siguiente defnicin de elle: el fimo que debe ir conforme sla creencia que se profese, en wna épaca y en una colectivided ‘determinada, aeorde a laruzén,y nls ley, considerado itil ya propésito para la conveniencia kuna rma”, definiidn ésta que es tanto o mas vaga, romantica y cireunstancial que las que critica. | — e — — Cc} = ae — (om) ra (a) ae) fn p13 (om) DAO ON TCT WT 105 Efectos interncs del contrato de sociedad que la ley admite de voto plural es el de las partes sociales privi- ‘que pueden emitirse conforme a lo dispuesto por el art. 79, LGSM. ‘VOTO ACUMULATIVO ‘no admite como vilido el voto acumulativo que es aceptado por al- locales de Estados Unidos de América para el caso de eleccién de adores. El yoto acumulativo consiste en que “cada accién puede ‘para propositos del voto, por el niimero de administradores * de manera que ‘‘se puede votar por un solo candidato o dividir- oto) entre tantos candidatos como se desee”. istradores ‘el mamero de socios es elevado, o éstos carecen de habilidades comer- yor razones de indole prictica la administracién de las sociedades se con- ‘© varios socios 0 a personas extrafas a la sociedad, quienes, como sri mas adelante, tienen un deber general de buena gestion o, para decirlo ras de la ley, “la responsabilidad inherente a su mandato’ bien, de ese deber dimana el derecho de los socios de pedir cuentas ‘administradores, el cual se descompone en los derechos de informacion 41, 51, 78, frac I, 181, frac I y 208, LGSM y 2718, CCDF); de denun- AT, 67, 86, 167 y 208, LGSM), y de exgir responsahilidades @ los adminis s(arts 47, 7, 76, 161, 163 y 208 LGSM), cuyo ejercicio sufre algunas jantes en las diferentes especies de sociedades. -OBLIGACIONES DE LOS SOCIOS camente, las obligaciones que contrae todo socio son las de® ‘en, Louis, My ife in Court, Pyramid Books, Nueva York, p 505. Cfr ademas, MANTUA Uh, Roberto, op ct, p 408. “Gf Roonicune, Josquin, op cit, p98, y Manritia Moin, Roberto, op eit, p 221 | ee | e — — Cc} =a ae — (om) ra (a) ae) ae p13 (om) 106 SOCIEDADESMERCANTILES 5.4.1 Obligacién de aportar f Al tratar sobre el objeto indirecto del contrato de sociedad, ** apuntames: Jas aportaciones son un elemento esencial del mismo, toda vez que si no: Jizan el contrato no nace a la vida juridica. Por consiguiente, no se concibe contrato de sociedad en el que todos, alguuno o algunos de los socios no so: guen a hacer las aportaciones convenidas. ‘La obligacién de aportar se reduce exclusivamente’a transmitir los ‘© a prestar los servicios prometidos a la sociedad y, por tanto, no debe dirse con la responsabilidad que, en algunos casos, contraen los socios: a terceros. A este respeeto, Redriguer propone que hay que distinguir los conceptos stima de aportacién y suma de responsabilidad, puesto qt Se entiende por suma de aportacién lo que el socio debe poner en la formaciéi putrimonio social; y xe Hama suma de responsabilidad, e limite por el cua ‘Puede ser constrefiido a pagar a resultas de las deudas sociales.29 Ahora bien, tanto la forma de realizar las aportaciones como el grado de ponsabilidad de los eocios tienen diferentes particularidades para cada’ las diversas especies de sociedades mercantiles, razon por la cual serdn das individualmente al estudiar cada una de ellas. 5.4.2 Obligacién de lealtad La obligacién de lealtad, en términos generales, consiste 1) En no dedicarse, por cuenta propia o ajena, a negocios del mismo de los que constituyen el objeto de Ia sociedad y en no formar pi sociedades que los realicen, salvo con el consentimiento de los de cios (arts 35 y 37, LGSM, aplicables a las sociedades colectiva y eo ta simple y a los socios comanditados de la comandita por accionesh, ii) En abstenerse de participar en las deliberaciones que se realicen para cidir respecto de operaciones en las que los socios, por cuenta propio nna, tengan un interés eontrario al de la sociedad (arts 196 y 208, oy a los accionistas de la andnima y a los socios comanditarios de la c dita por acciones). Abundando sobre esta enestién, debe tenerse en cuenta que Rodrigue, do en lo dispuesto por los arts 85, 57 y 196, LGSM, afirma que la ol de lealtad recae sobre todos los socios, sin importar a qué especie de soci pertenezean y, por su parte, Mantilla Molina sostiene que tal obligacién gravita sobre los socios de las sociedades in¢uitu personae (en nombre ct 7 Supra Capitulo 2, Elements de existoneia y requisitos de valides del contrato de % Ronwicik2y op ct, pp 89 y ss. | a e — — Cc} =a ae — ra (a) ae) ae p13 (om) fotos indurnos del eontrats do wotiadad — 107 y,comandita simple y comandita por acciones).”* En nuestra opinién, a Ro- szle asiste la razén, por cuanto si bien es cierto que el art 196 no prohibe los socios se dediquen a negocios del mismo género que los que constitu- el objeto delas sociedades a las que pertenezean, ni les prohibe formar par- je otras que tengan el mismo objeto social, no por ello es menos cierto que ibicién contenida en dicho precepto impone a los socios un deber de leal- 'al prohibirles participar en las deliberaciones en las que tuvieren conilicto vintereses. 3 Obligacién de subordinar la voluntad 0"Ley de las mayorias”* diversidad de criterios y formas de pensar de los homibres harian imposible en sociedad, si algun o algunos de ellos no subordinaran su voluntad ‘de tas mayorias. Por ende, él lamado principio de ta subordinacién de la tad o Ley de la mayorta es universal, aplicable a todo tipo de agrupacio- jhumanas, sin que importe el nimero de sus miembros, motivo por el cual, lado de otros como el de la buena fe, se le considera como uno de los princi- s generales de derecho.” ato de los votos deba hacerse siempre por cabezas, toda vez que debe ‘en cuenta otro factor: el del monto de Ii participactiin de los socios ‘el capital social, segin disponen los arts 46, 87, 79, 113 y 208, LGSM. “Por otra parte, aunque la Ley General de Sociedades Mercantiles solo con- gra expresamente esta obligacién de subordinaeién de la voluntad para los dela andnima al establecer qué “las resohuciones legalmente adopradas las asambléas de aecionistas son obligatorias aun pare los ausentes o disi- (art 200), debe entenderse que es extensiva a los socios de las otras es de sociedades mercantiles, por aplicactén del anteriormente mencio- principio general de derecho (arts 14, parr cuarto, de la Constitucién Polt ea tie Ios Estados Unidos Mexicanos v 19, CCDF). Por lo que corresponde a la determinacién de las mayorias, la ley las esta- como absolutas y relativas. Son absolutas cuando deben aleanzar por lo Ia mitad de los votos y relativas cuando reprosentan el mayor nimero ‘yotos, sin aleanzar la mitad de Ia totalidad de ellos. ‘Laestipulacion estatutaris de mayorias mas elevadas que las establect- or la ley, ha miotivado diferencia de criterio en la doctrina mexicana pues fay Roonicuer, respectivamente, obras y pp citudas. algunas miximas juridicas recogen varios de ls principios generates de derecho. no las con sts. Cr BOHIA SORIANO, Manuel, Teoric genera! de las obliga 1, Poreia, 1962, pp 82 y | ee | e — — Cc} = ae — (om) ra (a) ae) fn p13 (om) 108 SOCIEDADES MERCANTIL toque algunos autores niegan que puedan elevarse por encima de lo le estatuido, en tanto que otros afirman que tal elevacién no es ilicite.® Desde nuestro punto de vista, la elevacidn de los quérumes de vo solo ¢s licita en los casos permitidos y con las condiciones establecidas ley. Asi, por ejemplo, tratandose de sociedades anénimas es licito elevar! yoria de votacién en las asambleas extraordinarias, por disposicion expr art 190, LGSM. Pero, tratandose de sociedades anénimas en las que part capital extranjero, la estipulacién que eleve tal mayoria estar viciada di dad absoluta si no es autorizada por la Comisién Nacional de Invers tranjeras, segin previene el art 80, parrs tercero y cuarto de la Ley: Promover la Inversién Mexicana y Regular la Inversién Extranjera, cuenta de que qudérumes més elevados de hecho eonfieren a los extranjeros facultad de determinar la administracién de las empresas," La elevacién estatutaria ilicita de los guérumes de asistencia 0 plantea el problema de detorminar a quién corresponde declarar y sub nulidad de la estipulacién: jal Poder Judicial o a la propia sociedad? La ma Corte de Justicia ha establecido que corresponde solo al Poder Judicial cha facultad en todos los casos y previa el procedimiento formal correspond teniendo en cuenta evidentemente que, por una parte, los particulares care de facultades jurisdiccionales y, por la otra, que la declaracién de nulidad la asamblea de socios puede afectar a los intereses de algunos de ellos sis vencidos en juicio, con la consiguiente infraccién a la garantia de audiencia sagrada en el art 14 constitucional,”* Sin embargo, consideramos que la 80 dad podra declarar y sanar la nulidad si la totalidad de los socios la apra puesto que no tendria caso procurar la declaras judicial cuando no le di ra perjuicio a nadie o bien en caso extremo, la mayoria podré rescindir ele ‘trato social y poner a la sociedad en estado de disolucion y Jiquidacién | 182, frac 11, 190, 191 y 229, frac IIT, LGSM). Para concluir, debe observarse que el derecho de las mayorias para ner su voluntad no es absoluto, sino que esta subordinado al cumplimient ciertos requisitos legales, como lo son los de que sus decisiones se tomen| ® Gtime Pano, lanacoy Guvvtnnts Zach Le tveratn eran dit 1905, op 196 y "Esta iacultad es conocida en el derecho extranjero como cuntroles negativos y se: blogoet evo de deceones ant {yedores lo que, con fecuencl ical 90 uc inpotblica la conscaco del oo Ta jroprdvecinencveton ela sgnen= “Muted, no existe de plone derecho hay dipoionen express ona ees y prac tn aulrza que ve reconcec In exisoncin Se malades de plan cereco,nd deen sr delaras por lasers judas en todos os com previo procodlta torreon Jursprudecia 39, Apndice de Jurlepradenta de 1917 1985 dl util det Fedeocin, quae bpce,ceccom primera Tere Sala 162, Bocas internas del centrato de ociedad 108) ‘mente y de que no sean contrarias a las leyes de orden putblico y a las buenas ‘costumbres ni a las estipulaciones del contrato social, pues en estos casos las ‘minorias y aun un solo socio tendran derecho a oponerse o a demandar la nul- dad de las resoluciones de las asambleas de accionistas ilicitamente adopta- das, tema al que nos referiremos con mayor detenimiento al estudiar la validez ‘ invalidez de las asambleas de accionistas y la de sus resoluciones. 4.4 Obligacién de soportar las pérdidas ‘obligacion de soportar las pérdidas deviene de la naturaleza misma del con- e sociedad. En principio, la distribucién de las pérdidas entre los socios talistas se hace en proporcién a sus aportaciones; pero es licito pactar una ibueién no proporcional de ellas (art 16, parr primero). La exclusion de la obligacién de soportar las pérdidas vicia de nulidad a sotiedades irregulares (art 1696, CCDF); pero tnicamente afecta de nuli a la cléusula que las estipule en las sociedades regulares, habida cuenta ‘que éstas solo pueden ser declaradas nulas por ilicitud en el objeto o por habitualmente actos ilicitos. Una notable excepcién a estas reglas es nnida en el art 16, frac III, LGSM, que establece que el 0 Jos socios in- fales no reportardn las pérdidas. DAO ON TCT WT CAPITULO 6 CONTRATO SOCIAL, ESTATUTOS Y ESCRITURA CONSTITUTIVA Da se CON aCe vt CConteato socal statutor y eseritura sonatitutiva — 119) INTRODUCCION ‘Ademés de los elementos esenciales del negocio social que estudiamos en el capitulo 3, el art 60, LGSM, sefala otros requisitos que debe contener el contrato dle sociedad. De la lectura de dicho precepto se deduce que la constitucion de la socie- dad debe constar en eseritura ptiblica y que ésta debe contener el contrato so- tial propiamente dicho y los estatutos. ~ Khora bien, puesto que se habla de escritura constitutiva, de contrato so- ‘isl y do estatutos, nos parece que, aunque el legislador no hace una distincion a entre estos tres conceptos,' doctrinalmente, al menos, si se pueden dife uno del otro, como @ continuacién lo haremos. EL CONTRATO SOCIAL strato social se forma con las declaraciones y acuerdos entre los socios ‘alos asuntos a que se refioren las primeras siete fraes del art 60, LGSM, nacionalidad y domicilio de las personas fisicas 0 morales "que constituyen la socieded La razon ° denominacién social duracién importe del capital social, y La expresién de lo que cada socio aporte en dinero o en otros bienes, el atribuido a éstos y ol criterio seguido para su valorizacién. DAO ON TCT WT °

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