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SSS_ha Sa Juan Pablo Serra Universidad Lranciseo de Vitoria (Madrid, Fsparia) jserra.prof@utves El asombro agradecido como conversion: una lectura de Manalive, de G. K. Chesterton* Resumen: Manalive (1912) es una novela extremadamente sencilla pero, ala vez, reveladora del carécter y el pensamiento de G. K. Chesterton, en fo que tiene de afirmacin de la gratuidad de la eexistencia y de la siempre asombrosa bondad de la realidad. En muchos sentidos, ademés, anticipa su rogia conversién religiosa. Su argumento narra el progresivo descubrimienta de la alegria de vivir por parte de distintos personajes poseidos en distinto ‘grado por el escepticismo, el materialism cientista y la apatia vital. A todos ellos, 2! protagonista ‘muestra un modo distinto de estar vivo, que pasa ~entre otras cosas— por reconecer la dimensién espiritual del ser humano y, con ello, a libertad radical del hombre para hacer el bien aunque sea de un modo poco convencional— y para construir una realidad mejor. Palabras clave: asombro agradecido, naturaleza esplritual del ser humano, fe y creencia, Manalive. Abstract: Manalive (1912) is an extremely simple novel and, at the same time, a work that shows the character and thought of its author, G. K. Chesterton, particularly his affirmation of the freely given nature of existence and the always amazing goodness of reality, In many respects, this novel also seems to anticipate his own religious conversion, Its story tells of the gradual discovery of the joy of living by different characters which live in varying degrees possessed by skepticism, scientistic materialism and vital apathy. To all of them, the main character shows 2 different way of being alive, fone that recognizes the spiritual dimension of human being and hier radical freedom to do good and build a better reality, even though in a litle unconventional way. Keywords: Grateful wonder, human spiritual nature, faith and belief, Manalive, * Viste articully es una versicin revsada aumentada de la contferencia que, bajo el inalis “Manalive, un reflgjo de la conversion de Chesterton”, fhe lefda por el aor durante la jornada Chesterton: la wlegria de li fe eon scniulo comin, organizada por el Liyro Hlispanoamericann de la Universidad Braneiseo dle Vitoria en marzo de 2010. Agradezeo a Mario Hermindex Sancher-Bartya va Salvador Annuiiane la inviracién a panicipar eh deh evento, Lina cersidin sumplificacla de la misma aparece recogiala en ws actas del congress G, IS, Chesterton fos despugs de su mmerte, onganizady pot el Club Chesterton de la Universidad San Pablo CEU en Feber dl 2412, Agrndezeo los comentarios y la eaigente lecture de dos revisores anGiaimos «ue ban ayiidadks a mejorar cesta version Final. Cualquier errr cs s6lo mio, Recibido: 28/10/2014 - Aceptado: 29/11/2014 XIN 2012), ra) pel) - 2801-1629 (e 105024 1390 pp. 101431 i 4 4 & i Este articulo pretende ofrecer una lectura filoséfica de un testo literario. La tesis que aqui s Chesterton una filosofia vital consistente y coherente que, en el texto literatio, dla sentido al empleo de ciertas figuras. No es, por tanto, una pieza de erudicién técnica sobre Chesterton ni sobre su obra, aunque pucdan hallarse algunas referencias a especialistas autorizados, Y tampoco es un intento de explicar intelectualmente el asombro mediante la obra del autor inglés, aunque haya algunas teflesiones a este respecto. Es, simplemente, una lecrura filoséfica de una novela. vaadefender es, en tealidad, minima. A saber, que hay en Lo cual, de entrada, suele suscitar una pregunta legitima por la validez de este tipo de anilisis, Al fin y al cabo, zno es la obra literaria autosuficiente ¢ intransitiva? ¢No tiene sus propios métitos? ¢Necesita realmente de la Filosofia para comprenderse? Si uno de los objetivos de la Literatura pasa por la creacién de mundos posibles, entonces pareceria entrar en colisién con la Filosofia, que no pretende crear una realidad aparte sino, mas bien, entender esta realidad que nos rodea y nuestra experiencia en ella, Ahora bien, en cierto modo, ¢no hace lo mismo la Literatura? No es también el discurso literario un esfuetzo por interpretar el mundo y plasmar las posibilidades de la experiencia humana? Mas atin, zrealmente se limita la Filosofia a explicar este mundo? Si hacemos caso a John Dewey, eno hay en el discurso filosofico un componente estético, un esfuetzo de proyeccion imaginativa de las consecuenci planteamientos, creencias y supuestos, y una discusin critica sobre su validez para la vida humana? de ciertos: Seria insensato pretender “resolver” en estas paginas un problema enjundioso como el de la relacién Literatura-Filosofia sobre el que, ademas, se han voleado autores mucho mas competentes y escritores de reconocido talento, Pero si procede, creo, explicitar dos razones que justifican la lectura filosdfica, en general, del texto literario y, en concreto, de la novela de Chesterton! La primera razon que legitimaria una lectuta filos6fica de la Literatura es su comin referencia a la expericncia humana, Quiza decir esto no sea mas que sefialar una obyiedad. Ahora bien, que dicha lectura sea valida no significa que sea necesaria © provechosa, También es vilido, por poner un ejemplo, estudiar el reflejo de la luz sobre un pastel de espinacas, pero eso no significa que haya una telacion necesaria entre la gastronomia y la fotometria Quien ner abergue dias sobre este nsunto © profiess adentratse en ol anilisis que este aetieulo propone, hard Dic en saltarse estos prelinsinares v ir ala primera secein del articule, ni ampoco que proseguir tal andlisis nos aproveche para saborear el pastel 0 percibir mejor la luz, Es decir, lo que haria que la sintesis del saber filosdfico yl literario no sélo fuera posible sino también “util” cinteresante es, adem Hay de un mismo objeto material, una aproximacién en su objeto formal algo asi en la Literatura y la Filosofia? ral, las Humanidades de algin modo “imutiles”. No son de aplicacién inmediata y no resuelven problemas técnicos o materiales. Pero si son o pueden ser de aplicacion e la vida del sujeto, como se observa, por ejemplo, en el terreno moral, donde las grandes ideas éticas ayudan a vivir bien. Por eso, parafraseando a Maria Moliner, Millin-Puelles insistia en que las Humanidades son conocimientos que enriquecen maximamente el espiritu, aunque lo eme un rodeo, La Filosofia y, en gen son hacen de un modo mediato, pues requieren de una cierta elaboracién hasta morder en la realidad efectiva de la vida humana. Sélo asi se entiende que no hay “filosofia pura”. Al igual que las Humanidades, la Filosofia debe ser iypnra, pues si no esti conectada con las insrancias artificiales y técnicas de la vida, con el deporte, la politica, la historia, la economia, las artes visuales © la literatura, degenera en algo no saludable. justamente en esa elaboracién donde la Filosofia, para justificar su pertinencia, queda “contaminada” por las instancias de la vida pero, a la ver, donde se pone en juego su validez real, pues en cierta manera la Filosofia “prueba” su verdad en la yida social, en la configuracién de la conducta y en el modo en que alumbra nuevas posibilidades para la existencia, Esa impureza, por tanto; es mas que necesaria.” Como advirtio C. S. Lewis, lo racionalmente entendido queda siempre a un nivel abstracto y general. Puede que eso entendido sea verdad, pero ninguna verdad es signiicatira para el sujeto hasta que no pasa por su imaginacién,’ De ahi la relacion privilegiada que la Literatura guarda con la Filosofia. Pues cn Filosofia necesitamas imagenes comparaciones, metaforas y todo tipo de figuras literarias (repeticién, contradiccién, ironia, interpelaciones). Su poder evocador es itreductible a | figura del silogismo, pues atraviesan la razn para apuntar directamente al corazén humano y, con ello, a nuestra conducta. La Filosofia raras veces surge CE Antonio Maiiis-PUniuist Laer Hionamiladssy le Cndersidad. Conferencia en la Universidad Adolfo Ibsinez, Santiadoy de Chile, septiembre de 1995. Hin faiae-Lagor, n 1, 1998, pp. 16-28, Dicho este sin menbseabe ile la especulacin mas pura ni de Ta necesisia abstraccion que es consustancial al (oda Vilosofia, por mas aplicada o prdctica que sea, siempre descansa en una pensar floxético. Al fin y al cabo, cient idea del mundo, esto #5, en una metatisic, Ci Clive Staples Liwiss Piva se igo ratidad. Bin: Diac oof bangla. Rialp, Madd, 1996, pp. 5 2301-1629 fen Humanidades. Revista de la Universidad de Montevideo, Xi (2012), pp. 102-131 ISSN; 15105024 4 0 sobrevive como pura especulacién y ya desde sus origenes se entendid como tuna busqueda constante de la vida feliz, de la mejor forma de vida humana 2Podria lograt su objetivo si auestra racionalidad no fuera alimentada por la imaginact6n? La Literatura, al igual que la Filosofia, quiere ser una forma de entender el mundo, solo que llevada a cabo desde la ficcidn, desde un universe propio con concebidos para involucrarnos emocionalmente en sus peripecias. no persona Ahora bien, que en Literatura la imaginacién tenga una fuerza auroral —y slo o fundamentalmente crepuscular, como en la Filosofia —no significa que las historias no estén ligadas a la realidad. Los grandes narradores, recucrda McKee, nos invitan a descubrir un mundo des entramos en ese mundo extrafio, nos encontramos a nosotros mismos”™. Con las historias, de hecho, aprendemos de un modo més existencial y menos tedrico que la Filosofia, Pero no menos verdadero, ya que, si por algo valen las historias —al igual que una buena tesis filoséfi verdad que, en principio, la narracion literaria se Focaliza en conocido, si, peto “una ver que a manejarnos en la complejidad de la vida — es por su universalidad. I sos tinicos y particulares, Pero si fuera tan peculiar circunstancial, no seria tan buena, pues exigiria demasiados conocimientos sala obra para funcionar. De hecho —o sabemos bien— la literatura pegada a lo tinico ¢ irrepetible de la realidad del momento, con el tiempo, externc no se entiende. En cambio, los clementos “filosdficos” presentes en esas mismas narraciones —las pasiones, las contradicciones de la libertad, las aspiraciones humanas— permanecen, y no como ideas, sino como actos V decisiones concretas. De esta manera, las narra humano en tanto que, partir de ellas, podemos generalizar tipos de personas 6 también acontecimientos probables que se seguirian de ciertas acciones. Scarin Aristételes, lo que mutoriza a la ficcién a hacer esta generalizaciin es jones nos hacen comprender cémo es el ser “es general a qué tipo de hombres | la experiencia cortiente, pu 25 ocurre decir 0 hacet tales 0 cual la narracion es que acompaaa ¢ implica al lector (0 al espectador, si hablamos de teatro y cine) en los acontecimientos que viven una serie de personajes, y con ello le muestra las consecuencias de un tipo de vida posible que rar temo y compasién © ante la cual puede admirarse, preferit s cosas verosimil o necesariamente™, La virtud de puede ing Dejo a un lado, eonscienteriene; fa litica no ficcional, euye poder evieador es altismmo plore queya fa pa, reapers tn eiesto grado de entrenamienta paca ser aprovechada por elector mel. Robert Meu Ezguiiu, Alla, Baecclona, 2009, p. 19, Anysirensss Pref, WABUDS-1 intelectualmente y hasta sentirse vinculado afectivamente, como bien sabemos desde la tragedia griega.® Las buenas historias —en la pantalla, ¢n cl libro, en el escenario— ofrecen s afiadit, una concepcién del ser et en el mundo. Propuestas no structura de mc modelos de vida y, con ellos, podr humano, de su vida, su destino y su quel siempre nitidas ni tampoco explicitadas, pero que surgen de la las historias, sus puntos de gio, su conchusidn, el arco de transformacion de los personajes... A partir de todos estos elementos farmales, se “cesprende” una propuesta sobre la vida que vale la pena vivir que, desde luego, puede y debe ser claborada y discutida por el flésofo,” Es esta peculiar simbiosis de razén ¢ imaginacidn lo que conforma el objeto formal, él punto de vista mas 0 menos compartido con cl que Filosofia y Literatura se aproximan ala experiencia humana, Pocos como el inclasiticable Santa ana han aclarado este punto con respecto a la Pilosot En La filosofia misma los razonantientas y las investigaciones no son sino partes preparatorias y snbordinadas, wedios para aleanszar-un fin. Calminan en la tutuicién a en to que, en el mas noble sentido de la palabra, puede Namarse teorta, Sewota ex decin, una firme contemplaciin de todas las cosas segiin su orden y valor, Tal contemplaciin es de orden imaginative, No puede alanzarla nadie que no haya ensanchado si espiritu y amansade su corargin.10 Lis decir, la imaginacién es consustancial a la Filosofia, La Literatura desempeia un papel indispensable en la educacién de la imaginacién filosofica, entre otras cosas, por su capacidad de dar “concrecin” estética, emocional y persuasiva a las tesis que el filésofo afirma como resultado de la observacién, la discusién y el razonamiento, Pero zen qué sentido es lo racional consustancial a la Literatura? En que, en principio, el relato puede lograr esa conerecién de un modo cuasi filoséfico, en tanto presenta de un modo causal las consecuencias de un tipo de vida posible, lo que puede producir en el sujeto no solo regocijo co aumento de conocimiento, sino también un estimulo para la moditicacién CR Angel Sascriz-PALiexeis «Caesiooen Ia Potion alert, Lim; rer del Nana dS sted iti Vol. 13, 1996, pp. (38-139. CE Juan Carlos Casivisan Hibigey Herat na guaeapantnuidad dace, Fx: Ditloe Hasifcn. NE 33, 2002, 308 ta es ls pretension de este atticulo, anwnciada al prineipior expliear el sential dle eiertos elements formals dle Maule aporindome para ello et la filosofia vital dle su autor George Sanunwinae Tres peter fhine Lanner, Dans Goel Tecnos, Macdreh, 1995, p. 18. 2301-1625, Is9Ni 1510024 108 2012), z z 3 j ISSNE 15105024 (pope) - 2801-1629 (en ined & z E 5 3 i 4 i de su vida, para ser mejor. Gracias a esa presentacion causal, “las ficciones son susceptibles de una verosimilitud que se hace patente en su rendimiento cognos Sila Literatura nos aclata cémo vivir es porque nos permite ver la vida como un todo, como citivo al explorar las posibilidades humana una unidad de sentido donde tanto lo que hacemos voluntatiamente como lo que simplemente nos ocurre, conduce a la felicidad 0 a la desgracia. El nexo profundo que une Literatura y Pilosofia es precisamente ese esfuerzo por aleanzar “una vision unitaria, dotada de sentido, que alberga la objetividad implacable de los estin discursos universalés”, De ahi que, como subraya Innerarity, Ja velerancia antropoltgica de las fieciones se debe a que la vide como tal no forma wn todo. Al menos, su sentido depende de sna totalidad que es inaccesible a nuestra experiencia ordinaria 0 cientifica del tiempo. La narracién adopta un punto de vista de ide el qute lo casual aparece en conexién con un principia y un final, em inn contexto que nos lo vuelve inteligible.!? Hay una segunda azn que legitima, mas concretamente, el amvilisis filos6fico de la produccién literatia chestertoniana, Como ha demostrado con rigor Salvador Antufiano, en Chesterton hay una filosofi heterogéneos, asistematica por s . Dispersa en textos stema, ligera por la naturaleza periodistica de su estilo y alegre por la seriedad de las ideas que trata... el caso es que la hay. De hecho, aunque metitorias, sus descripciones dickensianas, su empleo de la patadoja y otros recursos de estilo no son otra cosa que herramientas al servicio de una visién del mundo, del ser humano, de la sociedad y del fundamento del mundo. Una vision de sentido comin que puede 1 obvia para muchos pero es que sultar Ja labor del fildsofo —comeo la del artista, como la del cientifico— consiste en ver ta realidad —y Ia realidad esté alli—y ayudar a los demas a verla convo si fuera da primera vex. De modo que cuando Chesterton apunta al sentido connin y nos enseita cosas tan evidentes y obvias, lo hace porgne esas casas estaban en realidad Danie} IsNeuevrey: Ta reed traria. Vunsa, Pamplona, 1995, p. 165. © Manuela Casine La filoofiyfe Mert cam fran de omneaiena, Vi Dil Blaifce. NP 60), 204, 495, Daniel Lsweteaerty: La irra litera, ps 166. tan entervadas en la rutina y lo dado-por aprechibcmos, ni las tenéanos en cuenta. suppiesta que ya ni las veiamos ni las Hablar de lo obvio es lo mis filosdtico, pues cs alumbrar lo que “esti ahi”, pero que esta oculto o no enteramente comprendido, a causa de nuestia conducta habitual, de auestras ideas 0 incluso de una autoimagen reductiva, éSe pucde volver a ver lo que esti abi Sélo con un cambio de perspectiva que permita apreciar y amar la realidad, uno de los grandes temas de la vida y de la filosofia de Chesterton. continuacion, y también de su literatura, como se vera a 1. Una novela actual Tras distintos contraticmpos, finalmente en 2012 vio la luz la primera pelicula de Moonhunt Productions, la compafia fundada en 2008 por Joey Odendahl y Dale Ahlquist, presidente de la American Chesterton Society. Se trata de la adaptacién de Manalive, un libro de Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) aparecido en 1912 y, por lo general, olvidado entre sus lectores, Publi ado en castellano a principios de los cuarenta y redescubierto entre nosotros a mitad de la década pasada'", no deja de ser Hlamativo cl silencio que se ha cetnido durante mucho ticmpo sobre Hombrevito. Un silencio insdlito, habida cuenta de que estamos ante una obra muy bien valorada ottos, por el estudioso de las réligiones rumano Mireca Eliade, que no duda en considerarla la mejor novela de Chesterton!“— y que para muchos se trata de uno de los libros mas autobiogrificos de su autor,” quiz porque resume en forma narrativa ideas y planteamientos va expresados tanto en Ortedosia (1908) © en La exfera_y da eruz. (1910) como en sus columnas periodisticas, y entre * Salvador ANWSIN G. K. Clestetane selene ffi pars a tonpo derspertagude. Bae Pabls Govvtnere J Maa Isabel Avgapines (eds). Chastitay apie. CRU, Madhid, 2013, p73. CE GAR, Cuusviros: Hoartivude, ral. de Natalia Motes, La Pspiga le Orn, Buenos Aires, 1942 track de Rafiel Santervis. Valdemae, Madi, 2005: Manabre (Hobe, trad. de Jordi Giménez. Vozdepapel, Madine, 2006. Lis citas se toman de esta tama tradueciéa, Cf, Mircea Phianis G. X Cherserion. x Le Jontade Souconal (suplemento del periddico La Jormadd), NY 456, 30 noviembre de 2005, p. 6 (publica originalmente en Tita, IN. 1” 442, 28 de junio de 1936, p. 3). Ci Joseph Phan: G. K Chesterton sabidunie mnceacta Pneweniro, Madsid, 2009, p, 228. 2501-1629 (en linea) Ine Humanidades. Revisw dela Universidad de Montevideo, XII (2012), pp. 101 ISSN: 1510-5024 (papel - 2801-1629 (en tinea) ‘gs pp. 101-133 de la Universidad de Montevideo, XT (201 E = z que aparecerin mas tarde en Jos cuentos del padre Brown ¢ incluso en K/ hombre eterna (1925 2Qué ideas y qué planteamientos? En un sentido muy preciso, como ha analizado Moote-Jumonville, su pensamiento teolégico 0, si se quiere, su teologia espiritual dirigida a la transformacién personal a imagen de Cristo, un proceso que sdlo ocurre cuando admitimos nuestra radical finitud y fragilidad'’, En un sentido més bisico, aunque conectado con el anterior, Manalive resume la postura de Chesterton ante la vida, que Mariano Fazio ha deserito muy acertadamente como una actitud de asombro agradecido, una ira en torno a la gratuidad de la Creaci6n, gratuidad que cosmovision que ha de producir asombro y agradecimiento a todos quienes gozamos de la existencia, Este mundo proviene de la nada, podria no existir y es maravilloso elmismo hecho de que exista’””, Dicha filosofia vital, nitida en sus principales ensayos, se articula retorica y estéticamente de un modo peculiar en la obra literaria de Chesterton, Una demostracién de esta afitmacién implicaria un andlisis potmenorizado de los recursos de estilo en las novelas y poemas del autor inglés —o, al menos, de sus hitos més significativos— que requeri mas espacio. Por el momento, digamos que comenvar dicha demostracién con el caso d Chesterton relaciona el pasaje mas audaz de Manalie —aquel en que ¢l pfotagonista dispara a un profesor nihilista— con su propia juventud y con la ctisis y desesperacién que atraves6 a mitad de la década de 18902" Aunque no se conocen con total certeza los hechos concretos, que Chesterton pensé en el suicidio® y que, ante la posibilidad de no existir —o, como eseribié mas tarde, a partir de la conciencia de que todo hombre es una Gran Improbabilidad?—, surgid en él un aprecio por las cosas mis fanalive tiene macho sentido. Bn su Antobiegrafia, el propio si se sabe * Ch Robert MoomiJusowvnss Holding a Pistol tothe Feud Maver Mun’ the Raateof Gu K, Clesterien’ Sprite ‘deg: an lads Forveeo. 6, 2008 (disponible ene hiep:/ /ibrary:taylnseu/dotA sset/ i 24be36-2ael-A44F bide-bb2d525e8184 pal). Cé. Mariano Favor: Chesterton, ta floss del asoero aera Ving Ata Pldlasopeea, Vol. Vm 4, 20N)2,p. 122. CE G.I, Cursrenton: Aubiagafa, Acantitade, Barcelona, 2003, p13. Cf. Maisie Wann: Gilturt Kath Chestetow, Sheed & Word, Nueva York, 1947, pp. 43-49, Joseph Pree: G. & Chesterton: sabia ¢ oct yp. 45-51, CE Absina Stone Dats: The Outline of Sani A Lge op G. K. Chesterton, Borowans, Grand Rapids, 1982, p. 33. * CEG. B. Cunstuars: Ovidexia, Alta Fula, Barcelona, 1988, 124 sencillas de la vida cotidiana.” “Hasta que no nos damos cuenta de que las cosas pueden no ser, no podemos darnos cuenta de que son” sintetiza con brillantez Hugh Kenner esta intuicién chestertoniana, Si, ademas, hacemos caso de lan Boyd cuando interpreta el significado moral de las acciones del protagonista de Manali como un “intento de recuperar el sentido perdido de asombro y glamour de la vida cotidiana’™, no cabe mas que ver Manatire como la traduecidn literaria de una conviccién muy arta pensamiento de Chesterton, igada y nuclear en el Una certeza que habria surgido de un momento especialmente dramatico en la vida del polemista inglés, durante su paso por la Escuela de Arte Slade, en que, tras coquetear con el espiritismo y el ocultismo y al haberse topado con un subjetivismo y un pesimismo tadicales —seguramente, como dice Pearce, propios de la atmdsfera decadent de fin de siglo—, le ocurrié lo siguiente: Cuando ya levaba cierto tienpo sumido en las profisndidades del pesimismo contempordnes, senté en mi interior un gran impalso de rebeldia: desalojar aquel inesibo o librarae de aquella pesadilla. Pero como atin intentaba resofver las casas 39 soln, con paca ayuda de la filosofia y ninguna de la religién, mein mistica rudimentaria y provisional, Se podria resumir en que la mera existencia, reducida a sus limites més primarios, era lo bastante extraordinaria conto para ser emacionaite. Cualquier cosa era magnifica comparada con la nada y aunque la lux del dia fuera un siento, era una ensohaciin, no sna pesadilla?” enté wna teorka Por mas rudimentaria y provisional que pudiera parecerle a Chesterton, lo cierto es que hay en esta “teoria mistica’”” una proto-teologia 0, si se prefiere, clinicio de una teologia natural muy clara, pues, asi lo veia Chesterton, esta conciencia de lo que hay necesariamente debe producir alegria, en tanto que “nadie sabe hasta qué punto es optimista—aunque se tenga por pesimista— En ol articulo de Monire-Jumonville (nora [8) se ineluye una telacidn may ihustraiva de fos Ingares ee Ya obra de Chesterton eh que aparece el tena del suscidio y la solucidin optimisia que adopga el autor inglés ante dicho drama, a saber, ucla existencia es algo bueno y que pricticamente cualquier mative justfica coninuat esistivnile, No hacen falta grandes razonamientos ni deales purisimmos pars evitar el suicics, sina silo hoonrae ese juramento de lealeed para eon la vida con que todos vesimmios al mundo, Por eso, para Chesterton, Yel suey tio sélo es un pecado; os El Peendo” (Ontediia, p. 142), Hugh Risysnis Penna f Cheshrtan Shoes! 8 Wardh, Nueva Yak, 1947, p36. hao B Di: The Novel of G. R, Clesterone A Sind ia Art cued Prpaganala, Barnes and ble, Nueva York, 1975, py GK, Clnsinioy: Aacabiegatie pp MB 104, ISSN: 110-5024 (papel) -2001-1829 (en 01-131 (2012). pp. 2 g porque no ha medido realmente la profundidad de su deuda con lo que le cte6 y le permitid considetarse algo"™ Este espiritu alegre y de gratitud anima la forma —y el fondo, por supuesto— de Menafive. Para advertitlo, en la siguiente seccién, doy cuenta del argumento, estructura y contenido del libro; a continuacién, explicaré en qué sentido el asombro agradecido chestertoniano aparece cn esta novela como una propuesta de cony, sobre el valor humano y social de la fe y la creencia. rsi6n; por ultimo, concluiré con unos apuntes 2. Un vendaval renovador Un dia cualquiera, un vendaval arrastra a un tal Innacent Smith, del que no sabemos nada, hasta un hosral londinense llamado Beacon House donde residen cinco hu pedes de lo mas anodinos: un célebre doctor, un apocado deportista y un arrogante periodista, junto con una adinerada solterona 9 unas vidas una amiga que la acompatia. Todos tienen en comin el Ile triviales, Por contras trapa sombreros con las piernas, salta hacia los arboles, se sube a los tejados... Stibitamente, su entusiasmo y sus imprevisibles acciones contagian al resto de resicentes, despertando en ellos la alegria de vivir que habian enrerrada hace aftos. Inclusive, el mismo Smith terminara pidiendo a una de las chicas en matrimonio, Hasta que, estadounidense con pruebas aparentemente irrefutables de que Smith es un asesino, ladrén y poligamo, dejando en pausa cl rebrote de energia que habia surgido entre los residentes. , el sehior Smith es de todo menos convencional: ‘bitamente, se presenta en la casa un crimindlogo Manative es uma novela extremadamente sencilla en su estructura, Pese-a estar divida en dos partes (“.os enigmas de Innocent Smith” y “Las expli de Innocent Smith”), en realidad Manalive es fundamentalmente una obra teatral, con tres actos bien diferenciados: aparicién de Smith, revoloteo entre los huéspedes y juicio al recién egado. Esta singular disonancia revela, a la vez, la racionalidad discursiva de un pensamiento que quiere coneluir con tun mensaje nitido y la personalidad asistemtica de un autor que ni quiere “imponer” ese razonamiento a la estructura de la obra ni diseiia la historia caciones GAR Chistian: Aumbingrafig pA para que esta refleje su mensaje, Fin Iineas generales, de hecho, la historia se sigue sin problemas y con mucha simpatia, lo que ayuda a disculpar los largos parlamentos excéntricos —muchos de difi | comprensién— que salpican la narracién, asi como los desequilibrios de un relato que se excede en larguisimas descripciones de eseasa eficacia narrativa aunque no exentas de belleza poética (los edificios en el margen del rio, los tejados v chimeneas de las as londinenses, el mar y el viento, las montaéias rocosas, las estrellas) Que Chesterton se detenga en estas descripciones tan prolongadas tiene una explicacién literaria —al fin y al cabo, Dickens era uno de sus autores favoritos — pero es mucho mis, ciertamente, pues con ello no quiere hacer otra cosa que resaltar la belleza de la Creacion, que no es algo que uno inventa sino, mas bien, que encentra hasta en lo mas insignificante cuando se da cuenta de que lo que vemos no siempre ha estado ahi o, incluso, que podrla no estar, De hecho, toda la novela es un magnifico compendio de la filosofia chestertoniana de la vida que, como ya se ha dicho, se basa en la exigencia de contemplar la existencia como un don y “aceptat las cosas con gratitud y no como algo debido”™, una idea que el propio Chesterton identificaba como la principal de su vida. Quien vive asi, viene a decir el inglés, es imposible que se aburra. UI contrario, es Hlevado a una actitud respetuosa y de continuo re-descubtimiento, re-insercién y re-inttoduccién mis libre én a realidad cotidiana, Una realidad que se nas presenta mas luminosa y despejada tras leer a Chesterton, como expresa la metifora del vendaval en la primera linea del libro, desctito como “una ola de felicidad irracional™ que borra la neblina que hay en lo rutinario, 3. Volver a ver En general, la obra literaria de Chesterton eg moral —entiende que el hombre se realiza en sus decisiones— y realista, pues teconoce que somos capaces de lo mejor y lo peor, pero libres de verdad y realmente humanos cuando decidimos lo mejor.) Ahora bien, para ser realista, Ches! erton 6. Caestnnrs: Ano 3 GK. Carseat Mena ps 11 1 Joue Any pp. 165-165, el Acrys: Parga’ Hobs unncr sap da tonal. Chesterton ¥ «P, Brovy, Vine Mar Oniaua, 0° 27,200), 101131 = 2 g 0-502 (papel) 2201-1629 Cen ISSN wore a 3 i Revi 2 a 5 S recomienda amat lo fantastico y lo asombroso que tiene el mundo... en su s “lo ordinario vale mas que lo extraordinatio, y si cabe, hasta es mas extraordinario™ incapaz de amar lo que hay porque se ha empefade en dominarlo —con el razonamiento, con la técnica— en lngar de rer y, abandonando ta contemplacién amorosa del ser y el interés por saber Io que son las ha entronizado la utilidad conquistada con el recurso a la acci6n frenética.”” cara mas cotidiana, pu . En cierta manera, e] mundo moderno es Ahora bien, que esto haya pasado no es tan insdlito. Como el propio Chesterton eseribina en [:/ bombre eterno, la realidad es un don y el hombre, si, pero necesita ser humanizada, Es més, lo propio de las personas alegres y vigorosas, libres y creativas cs creat instituciones y establecer reglas, leemos en Manalire." No obstante, en este proceso el ser humano puede llegar a estandatizar una serie de procedimientos, normas ¢ instituciones que ocultan la belleza y novedad permanente de do que es asi como el valor y riqueza de lo ordinario, esta hecha para Como volver a verlo? No, desde lego, con un discurso intelectual bien armado 0 con una teoria filosofica perspicaz. Hace falta una auténtica ‘én, un cambio que lleve a abandonar la visién de las cosas desde la estrecha lente del racionalismo y el cientifismo —o de la negacion de esa lente del irracionalismo relativista— y a adoptar la vision originaria de las mismas, la que se da desde el sentido comnin, conyers 3.1 Solo el asombro conoce Clasicamente, la antropologia y la historia del pensamiento han hablado del asombro como punto de partida para el conocimicnto de la realidad, la valoracién del mundo y el aprecio por las persona Tomas Melendo, “aun cuando no con total plenitud, el que se asombra sy las cosas. Como explica GK. Chuestsnon: Ontadesta, pp. 86-87, Cf Tommy, Mian: Earner y postin: re Universidad de Navarra, Pemplona, 1997, p. 31 CEG. Ke, Cuesinren: Manas; p. 53. Fsta idea, sorprendente y parudiea, se explien con mas detalle on ef rin ola sated wer Sercices de Pulblicacionves ee Ja ccanrte eapiule de Orindecia, cuando Chesceston recuerda que la alegria en la wih Tleva a la repeticidn de nctes la fatiga a la variacion, Ortndisia, p. 115; "Tin efecto, Ja variacisn en las cosas humans mr Tes vier de la vida, sinn de ba muerte: procede siempre de su imiquilamicnto, ce by distension delanhelo © fuera que las anima", A {quion le sobra sida, establece nut den ly falta, eambia siempre conoce, real y efectivamente, y confia y espera en seguir conociendo’ Algunos modernos, no obstante, se han cmpefiado en sustituir este asombro maravillado por la duda (D. % 9 el desconcierto (Hegel) como inicio de todo conocimiento. artes Pera estas actitides Hevan cansiga une decidida repntsa inieial de tado lo dado, de lo que se oftece ante ol Yo de manera gratuita, de to creado, en definttiva: y constituyen de este modo el requisita ineludible para que ese mismo Yo, tras el montento nevativo de exclusion de toda menos de si mismo, se afirme de manera radical, al reenperav von wus solas fuerzas el conjunto de lo existente: medido y cuasi creado por la razin, en todas las casas (ractanalismos); «como praducido por ef concepto», en el de Hegel (idealisno).* A diferencia de la duda moderna, y también de la sospecha posmoderna, ombro hay un clemeato positivo de agradecimiento y apertura a lo real alli de mi_y0, No en yano asombro viene de #avmdzein, que libremente podriamos traducit como un “morit” a ti mismo —a tus prejuicios, a tus costumbres— para dejar “nacer” un nuevo y mejor conocimiento de la realidad, Chesterton no es ajeno a estos planteamientos pues, para él, el asombro es necesario “para despertarnos a ver las cosas como realmente son, para ver el mundo con un asombro apropiado y con una apropiada enel ma Toms Movin: Iatradcén a da Pisofia. EUNSA, Pamplona, 2001, p. #1 ’specialmente lamativo es el caso dle Descartes, quien habla de la admiracién como una pasiin que es itil en tanto que previens’ Ir ignorancia (hace que apecndamos y reeordenos fis cosas gue ans parccen extraias 0 Tlamativas) pera periudicial en tanimy “pueee impedir 6 pervertir conipletamente el ust le ln rad Hevndones a asombrariios ante cosas poco valinsas, René Drscantzs: Lan usin de ahve [L649], Sepunda parte, artculos 73 y 76. Tecos, Madtid, 1997, pp. 17-149: “Phe ests, aunque sen bueno haber nacid cow alguna inelinacién seta pasidn, porque nos dispone a la adguisictn de las cteneias, debemus sin embargo procurar bibrarnos de ella lo mas pronty posible, Pues es Feil suplirsu falta com una reflexidn y atenetén particulary, ala que bes yoluntad puede Siempre obligar a must entendimicars cuando juzeamos que Ia cosa que se presenta va pen”, Lo peculiar que coleen a Descartes —y, et general. Ta mentalidad maderma— en opasieidn als floseafin clisieg 0 incluso a numeemses auton: coatemporincos cs Ia nucira ile pic el somber esalge ands bien wafantil ce fiyenuo, que abre la puerta 1 una euriosidhel sin enterio que da pr buenas las cosas infrveuentes y cue debe lominarse mediante la duds y el use “completo” ce fa asin. CF kynsicivs Gel: El asovbro cn prin dele siber delser. Vin: Cowpens revit de fsa 3, 2000, pp. 138-134. EL eoutsaste ena Chesterton —auien, con espiiru evungglico, no se cansa de alabar la inteligencia de los nities sh puede sermis extrema. Tl nile chestertonia quiere, la juvenrad de espirite— ne reglas y condiciomes de un enero de hadas + queda deshumbraclo por la trzasfigaracia de les objets que ali apatecen como instrurncatis pars conocer ‘una verdad, HI nia catesiane quiza quede igualmente deslumbrado pero, si gee conocer alguna verdad, debe poner en tuda su deslumbramiento y analizviy asta Hegar a una idea clara, ao deslumbeuate Tine Miuestioe Dutra ofa Files, yp. 1-82, & t 2 ; 5 3 : i i i ISSN: 151045024 (papel 8 4 3 a 2 i gratitud’™. Serian interminables las citas que podrian avalar su conviccién de que ser plenamente humano implica ejercitar la capacidad de asombrarnos. Baste una, de Orfeduia, cuando seftala que en el asombro hay un elemento de plegaria, de oracién de agrade Igualmente, la filosofia clasica imiento por el mundo y por la existencia.” se estructura como re-conocimiento agradecida de to dado al yo con independencia de tal yo: de la realidad, em fia de crentas, y de uno misma on cuanto real Y ke admiracitn consiste, en substancia, en tegar a advertiv y a aceptar con goxo que aguello que se ha recibide todavia nos trasciende.” EL asombro es origen permanente de nuestra capacidad de conocer yy por tanto, de saborear la inagotable riqueza de lo real,"! pues slo cuando reconocemos que lo que hay podria no existit 0 que trasciende y excede huestras expectativas es que comenzamos a disftutar descubriéndolo. Es lo que, con jibilo, aprenden los personajes de Manalite y el motivo por el que Ahlquist sostiene que Manalire “es una novela sobre ver las cosas viejas de un modo nuevo, de ver las cosas comunes y esperadas de un modo sorprendente y Fantastico, y de ver las cosas del modo correct, que es boca abajo”, Una imagen, esta tiltima, con la que Chesterton juega en la novela para mostrar la naturaleza del conocimiento humano, pues “sdlo el hombre es capaz. de wer st propio pensamiento boca abajo como se ve una casa en un charco™", esto es, solo la inteligencia humana es capaz de reflexionar sobre si misma y advertir Alan Laws MavvinaseSudedion, Li SLs Mavrcves (es hy Ma Wu Wie Orta Net re Canola Wings of G. K. Clasetan, D. Dobson, Lansdon, 1963.9. 4. CEG. B. Chsrunrin: Dreads, p. 1B. Tumis Miaiexnes: liane la (isi, 82 Ch JoseF Phuvat: Que signifien Rlossfu®, Kn Lica fe en inketua, Rialp, Madr’, 1962, 133. ale Atmaiisis Lawn NNU: Mamulie. Es Chestetar 10, Anaetacan Chesterton Sacer, 6 £ (lisponible en: htp://chesterton.ory/diseewee/Ioonares /22enanalive hel) G_K. Caresmieros: Manabnn,p, 153, Posterivemente, cm Ed pat come simbolo de ls sensater y humildad nes firma el poeta pinto Galaiel Gz Jos heats 11929) cmplear’ lo misma iemayen para yer las cosas rome son, a saber, dipindiates de su eeu recuerda que, al ser cenetticade boca aba, Creador, que es lo qu ‘San Pedro tuve el privilegior de “ver el paisaje eal come es, las estrellas eual flutes, las pubes como colinas. los hombres colgando a mereed de Dios” (Valdemar, Madrid, 2004, pp. 38.39), Kin In biografia de Sue faneino de Ass |L923], astmismo, recordar’ que “dependencia” no es otra chsa quie el estades de ko que pende: Quien eae fen la cuenta de Ia dependencia de todo tespecto a su Creader, “agradecstia a Din que ni hubuera ucjade exer el cosmos cntern” (Honws Legens, Madrid, 2006, p. 55) que todo pensamiento es reflejo —mis o menos borroso y limitado— de un universo real y nitido atin por descubrit Ahora bien, qué ocurre en un mundo come el nuestro, bien dotado de leyes y cddigos normativos, en el que hay informacion de sobta y donde todo funciona, la imagen embota y el ocio ya solo distrae? Pues que el hombre, como advirti6 Juliin Marias, deja de hacerse preguntas y verse como una s.!° En suma, deja esencialmente finita y limitada. La simplificacion persona responsable, con dudas, problemas, fines y deber de verse como una criatura general de la vida moderna, en fin, junto a sus indudables beneficios, aleja al hombre de una comprensién cabal de la complejidad de la vida y la pluralidad yriqueza de lo real y, por tanto, le impide descubrir esa novedad permanente de /o que es. 3.2 Una conversion en el cardcter Ahora bien, lo que se requiere para volver a ver es un cambio de actitud radical o, para ser mis preciso, una auténtica conversion 0 metanoia, que es lo nico que permite penetrar en la sustancia real de la vida, como diria Guardini," y abrirs posesién y manejo que hay en uno mismo.” Lo llamativo de Manafive es que hay en ella varias “conversiones”, pero no al final de la historia sino, mas bien, al principio, sobre todo en los personajes de Arthur Inglewood y Michael Moon, propiciadas por otra conversién —la del propio Smith— anterior a alaesencia de las cosas por encima del afin de dominio, la accion con la que arranca la novela. Esta inversién del momento de conversién —contrastese con el Quijote, donde la conversién del protagonista se da al final—es llamativa, pues apunta alaradicalidad de la experiencia humana de la conversién, que no viene al final de un proceso vital sino, al contrario, es lo que lo inicia, “La conversién —ha escrito Alejandro Llano— no es el resultado de una experiencia intelectual Sobre la imagen de ke inteligenen coma espejo, ef G. Ky. Chesriieross Fd dan sda, Cristiana, Madrid, 2009, r a P p49, Paesto que li que se regia ent fy ineligencia tiene un origen en y eotrespomlees con lo exact Scomacerla imagen es eoacer también la realidad. al como dice Salvader ASP \NO: C.K: Chester rerelalae foots porn am Hemp dese peranrgeda 89. © CE Julian Miss Regine de Pihagla. Abanza, Madrid, 1995, p. A. © Cf Romane Gearpist: Ff poders me interpreta: tnligia, Vin: Obnac de Rowayo Guard. Crisiandad, Madrid, 1981, tome}, ps 206. © CE Alejandro Lasers Lakrazmna ono comin, Pane Caltary asin, UNSA, Pamplona, 2007, p. 189. 301-16: ISSN" I5}0-s024 2 a (eniinea) 2 116 101131 0) seo, XI : : 3 4 o dy un razonamiento filoséfico™* sino, mas bien, de una curacién previa, de una suerte de reconciliacién afectiva con el mundo y con el sentido de la propia historia personal, Por eso, para volver a ver lo que se requiere es un cambio de punto de vista que afecte al nticleo intimo del sujeto y; desde ahi, a todas las facetas de su persona. s en este sentido que Manalive ofrece un sutil itinerario para volver a ver ble que Moore-Jumonville no duda en caliticar como un itinerario de Jormavién espiritual, claramente ascética. Un cambio asi, por fuerza, tiene que afectar a lo que lamariamos el ethos 0 caracter moral de una persona. ¢Por dénde empezaria esta conversion moral? Por ejemplo, en la conciencia de que fa norma es uit media, no el fin y, por tanto, no hay un solo modo de cumplitlas. De ahi la tesis de la novela, que podria resumirse como “es mejor vivir de un credo que de una cosrumbre”, Precisamente porque cree en una serie de mandatos, Smith los lleva a cabo de manera ingeniosa, creativa y desafiante. “Ha roto los convencionalismos pero ha cumplido los mandamientos”™ dirs de dl su abogado defensor. Y, ciertamente, asi lo muestra la novela, donde se observa cémo multitud de actos que —desde una mentalidad mundana setian moral y hasta legalmente reprobables, en Smith no son mas que manifestaciones de una vitalidad que no admite ataduras ni moralismos, sino que va a la raiz de las normas morales, que no son otta cosa que caminos hacia la felicidad, medios para ser mejor. Como no pretende robar, entonces codicia sus propios bicnes, cumpliendo asi el mandaro de no robar por la via del amor: ama lo que.ja tienes, para gue en tu corazén no quepa la codicia. Como no pretende cometer adulterio, entonces iny lado romantico y aventurcro del cortejo;* como no quiere huir o exilintse de su vida ordinaria, entonces se convierte en peregrine hacia su propia casa,”! pues todo viaje tiene sentido si hay un hogar al que volver. ta en su matrimonio el Chesterton tenia muy claro que la ética es consecuencia del amor, pues “es el amor el que es capaz de transformar a la persona y entusiasmarla hasta Ucyarla a realizar grandes obras y afrontar enotmes compromisos™?. Peto, en un sentido mas ontolégico, la ética es consecuencia de la humildad, de percibir cl don de la existeneia y el enigma de que “el mundo entero tiene, , una tinica cosa buena, que ¢s una deuda impagable™®, E] deber es, asi, * Mejanuri> Liaw Fdieratnne anne comes, p, LOD. GK. Chnsirwveass Manating 271 " ChG.K, Cintsimmront Manabi p, 272. CEG. Cunsernron: Manaliy, 241. Salvador ASUS 9NO: G. K. Chistertnse renter flsafin rrr am ape deveranncgedes p83, SGA. Canssrenerss Sar Pane de Aste p39, permanente, pues s¢ origina cn una deuda infinita, en “la magnanimidad dela rendicién, de la que vulgarmente s6lo se entrevé un atisbo en el primer amor, como un atisbo de nuestro Edén perdido”, En Manafive es tan potente la conviccidn de que la vida es una novedad radical que inevitable y fijado en nuestra vida —como la necesidad biologica de comer es subvertido por la creatividad de Smith y de ahi que organice un picnic... jen el tejado de la pension! ta lo mas ascntado, 3.3 Una conversion en el conocimiento Ahora bien, ademas de una conversion ética, volver a ver pide una conversién epistemoldgica, que pasa por superar cl racionalismo y el cientifismo, pues lo propio del ser humnano 20 es sélo describir hechos con mis © menos exactitud sino su asombrosa capacidad de desentrafar el sentido de los mismos.* LE hombre vuelve a ser él mismo cuando acepra que la realidad no se puede conocer sélo con descripciones externas y fenoménicas, sino que hay que conocer la intencidn, el sentido de los hechos, Quedarse en el dato empirico no ayuda a entender el por qué, el sentido. En esta certera intuicion radicaba el interés de Chesterton —y también el de Dorothy Sayers, escritora y amiga suya— por las historias detectivescas. “Los detectives —esctibe Agejas— siempre han buscado pruebas, datos. Pero que la ciencia empirica tuviera la ultima palabra para entender y dar razones de las acciones era, cuando menos, para el agudo observador que era Chesterton, pretencioso”™, Por eso, como alternativa a Sherlock Holmes, concibié al padre Brown, un simpatico y bonachén cura de pueblo cuyas historias sc desartollan y conchuyen de un modo desconcertante, pero no porgite juegue con el lector haciendo aparecer pistas desconacidas, sino porqute ef agudo crite logra componer con los mismos datos que estan al alcance del vesto de tos inwestieadares hasta tres explicaciones diferentes, perfectamente coberenies, pero no ciertas, claro. La clave para la resoluciin de sus casos no estd en tener los datos, sino eat ef conocimiento que del corazin humana tiene un pr 060 que pasa haras sentado GoKS, Chustunn st San Frio de aia p39, CE Faluardo Temkisy: Reoitons omerwe sue cps slain. Vin Nese Tog, Pamplona, n" 64, noviembne de 2007, p. 50, Jost Angel AGII%: Por Holme nn spo la rd Chatto eb Brown, pe V6 29 1510-8024 (pape - 2301 8 ISSN; 1510-5024 ( 8 pp. 1012381 USS AOHLLASPRKA th, ASGNIIRC NSRNDRG DUA COCA COSVTRSECINCLNA LLEHUIRA IML AEASG HAD en el confesionario. Las datos empiricas no exxplican toda ta realidad del bambre y sus actos, putes no son meds que la parte externa y menos relerante de la historia.” Como en las historias del padre Brown —cuyo primer relato aparecié solo dos afios antes que Manalire—, del comportamiento de Innocent Smith se puede ofrecer una deseripeidn externa y una conclusién logicamente infetida: por ejemplo, respecto al cargo de abandono, se puede comprobar que, en efecto, Smith es casado y con hijos, que deja a su mujer y que ha estado viajando; lo mismo con el ca "yo de poligamia, pues, en efecto, se ha casado muchas veces sin divorciarse. Y todas estas deseripeiones, en cierto sentido, son verdaderas, s6lo que parcialnente verdader: cho entero, , pues no reflejan el h sino hechos desprovistos de significado. Los acusadores de Smith, cientifistas y racionalistas, s6lo s¢ fian del puro dato y del razonamiento, olvidando que los hechos humanos requieren mas que el microscopio. Smith comparte con los asesinos el hecho de disparat a personas, pero no su Jnfendién, pues su objetivo no es asesinar sino incitar a la vida.** Por eso la defensa de Smith intentard desvelar la intencién, el espirita y-no la letra que guia a hechos aparentemente violentos. Con gran clatidad lo sintetiza al final del libro: Al sivir aprisionadas entre las redes de la civilizaciin hemos Hegado a considera malas algunas cosas que no lo son, |...) No bay nada perverso en disparar una pistola, aungite sea aun antigo, con tal que ino no tenga intencion de darle y se esté ademas segura de no hacerlo, No es peor que arrojar una piedra al mar incluso, al fin.y al cabo al mar se te acaba dando, No hay nada malo en derribar ef caitén de wna chimenca_y entrar por la fuerza en una casa por el fefado, siemmpre que uo se atente contra la vida 0 ta propiedad prinada de jos demas. No es pear optar por entrar en una casa desde arriba de to que es abrir un paguete por abajo.” menos Para Smith, la pistola es sdlo un medio (radical) para “dar un susto salutifero” y despertar a sus mejores amigos a la vida que tienen delante, un propésito “excéntrico pero inocente” que es la “tnica explicacidn posible” Jost Angel Acrasse Porgia Hones wnica sip te erlat? Chestortan yl P. Bran, p66, Pata ua estudies sirilar, ccf Vrederick J. Cnosson: Fuller Brow, Sharock Holaes wae the Mistery of Man. Ft Rufus William Raceat (edhe Chesterton Celebration athe University of Naive Dame. University of Notre Dame Press, Indiana, 1983, pp. 21-33, GK, Cnsmernos Manatiny, py. 168. GK. Cauisriron: Mawalie, p. 270. de los distintos tirotcos de Smith." Del mismo modo, Smith da la vuelta al mundo pero no abandona el hogar, sino que viaja y se pone en camino para . Y se ha casado muchas vee poder encontrar de nuevo su cas i, pero 4 siempre con Ja misma mujer para poder vivir con ella cien lunas de micl. Una verdad, para Chesterton y el pensamiento clisico, es “un hecho con un significado” y no consiste slo en dar cuenta de sucesos sino también de aportar tazones."* eY sino se conoce insiste en que él sentido es algo que nosotros ponemos ahi inrelectualmente 6 algo que construimos técnicamente. 2Cémo superar, entonces, este racionalismo y cientifismo ubicuos? Mediante el sentido comin, visto en la novela como recuperacién de una cierta inocencia original. . ANTUNANO, Salvador: G. K. Chesterton: rerdadera filosefia para wu tiempo desespe ranzado, En Pablo Gutwirriz. / Maria Isabel Amr \pnio (eds): Chesterton de pie, CEU, Madrid, 2013, pp. 67-102. Arisrort Poética, edicién trilgiie por Valentin Garcia Yebra. Gredos, Madrid, 1974. Bovp, lan: The Norels of G. K. Chesterton: A Study in Art and Propaganda. Bat- nes and Noble, Nueva York, 1975. 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