2 de octubre

Conservar la fe
Comprendemos la fuerza ilimitada que nos brinda la oracin y la rendicin cotidianas
, siempre y cuando no perdamos la fe y la renovemos.
Texto Bsico, p. 53
La recuperacin tiene dos partes: conseguir estar limpio y mantenerse limpio. L
a primera parte, en comparacin, es ms fcil, porque slo tenemos que hacerla una vez.
Mantenerse limpios es ms difcil, requiere una atencin todos los das de nuestra vida.
Sin embargo, ambos procesos sacan su fuerza de la fe.
Conseguimos estar limpios gracias a la fe. Admitimos que la adiccin era ms pode
rosa que nosotros, y dejamos de luchar solos con ella. Pusimos la batalla en man
os de un Poder ms grande que nosotros, y este Poder Superior logr que estuviramos l
impios.
De la misma forma nos mantenemos limpios da a da: gracias a la fe. Nos rendimos
slo por hoy. La vida por momentos puede ser algo demasiado grande para que la af
rontemos slo con nuestra fuerza. Cuando es as, buscamos un Poder ms grande que noso
tros. Rezamos pidiendo orientacin a nuestro Poder Superior y la fortaleza para se
guir sus indicaciones. Si ejercitamos y renovamos diariamente nuestra fe, aprove
chamos los recursos necesarios para vivir limpios una vida plena.
Existe una fuerza ilimitada a nuestra disposicin cada vez que nos hace falta.
Para acceder a ella, lo nico que necesitamos es mantener la fe en el Poder Superi
or que logr que estuviramos y nos mantuviramos limpios.
Slo por hoy: La fe logr que estuviera limpio y la fe me mantendr limpio. Hoy, tendr
fe en mi Poder Superior. Renovar mi rendicin y pedir sabidura y fortaleza.