AMAPOLA trastorno, exaltacin morada, disparate. Salga lo que saliere.
Y qu estruendo de alas, y qu dulce lastre sentimental sobre la lengua, y amistad
en las manos, ofrecida sin ponderar, qu arrebatada. Comulgar en la msica aspereza, junto al estribo ya, de amanecida, con mujer desolada, y el rasgueo, y la ltima vez, y el aguardiente, y sollozar a frutas. Salto, furor de gozo, de pataleo de quien pide encontrarse, con la prisa amantsima del nima que al fin toc el fraterno ay, engaoso; ay, ay, inconvincente universal llamado. Yo ya me voy. Deslmbrame el metal decadente de la barca que habr de conducirme. Y el camino. Porque me voy maana. Yo me parto. Vengo a decirte adis para olvidarte. Lucen de adentro las canciones que me vienen de afuera. Si me dieran, al menos, no morir tan lejos. Mexicano el acento desgarrado de plumas claras y de flores y me enriquece de arrobadas turquesas. Yo s, yo ya me voy; yo reconozco, como si me doliera, la indudable armazn altanera del halo corporal que me circunda. Propenso al celo ardiente, y al hiprbaton sanguneo y los mercados, y al encabalgamiento de los ojos viriles en los pares argumentos de la media naranja; multiplcanse ternura por fervor, y el resultado quema entre sangre y piel y piel desnuda. Tartamudo, efusivo intraducible entusiasmo del habla. La recmara suntuaria y sin pesar de la memoria. Abierta y enjoyada. Tambin. Contento. Compaera. Aunque comience y me sujete por los tobillos este centro fijo de rueda de molino. Me columpio, vuelvo a subir, volteo; aspa de graves rbitas iguales recorridas de frente, con ronquidos de ventarrn en las orejas. Hlice a al mitad, desmorecida, nauseosa, mecnica, bajando al fondo del quedar durmiendo. RUBEN BONIFAZ NUO.